La relación entre Viktor y yo, no podía estar mejor. Viktor era muy cariñoso conmigo y eso me hacía muy feliz. Nuestras citas eran muy divertidas, mi amado alfa siempre me llevaba a lugares diversos, podían ser desde un fino restaurante hasta el local de comida más humilde, él no hacía distinción y tampoco escatimaba en lo que gastaba, en una noche podía pagar en un platillo lo que me pagaba por un mes.

Por las noches, llegábamos hacer el amor hasta que nuestros cuerpos exigían por un descanso. Nuestra casi inexistente vida sexual se había convertido en una vida sexual muy activa, lo hacíamos de tres a dos veces por semana y podíamos durar horas dándonos placer, incluso teníamos rutinas y juegos para experimentar, mi favorito era hacer que Viktor adivinara lo que le metía a la boca, normalmente eran frutas o chocolate. Además, descubrimos que ambos tenemos una resistencia titánica y siempre le sacábamos el mayor provecho.

El único problema que tenía por ahora, era una molestia en mis ojos. Sabía que era por el uso exclusivo de los lentes de contacto, sin esperarme, fui con un especialista. yo ya tenia problemas con mi vista y no quería que empeorará. Los lentes de contacto no tenían la capacidad que necesitaba por lo que me recetó otros de mejor calidad.

Le pregunté si podían usar con color y me respondió que sí, por lo que no tuve que preocuparme más por ese problema. Una vez que los compre y me los puse, inmediatamente sentí la diferencia a los anteriores, incluso podía dormir con ellos porque estaban diseñados para eso también.

Otro problema que tuve, fue con los supresores, tenía que usar más porque cada vez el efecto duraba menos y en varias ocasiones, Viktor estuvo apunto de descubrirme cuando me lo ponía encima. Hable con Yurio y me dijo que conocía un lugar donde vendían unas cápsulas llamadas inhibidores con olor, pero que eran más riesgosas de usar porque las hormonas de las que estaban hechas, podían alterar mis celos.

Al final termine comparándolos, el efecto duraba doce horas, ya no tendría que ponerme el supresor, ni quitármelo con el jabón especial. El problema era que los inhibidores eran tres veces más caros porque tenía que tomar dos al día, pero las ventajas eran demasiadas, no me preocuparía por ser descubierto poniéndomelo el supresor encima y no tendría que buscar una buena explicación, porque me había librado de todo eso.

Ya era abril y había pedido unas vacaciones en mi trabajo porque las clases se habían suspendido por dos semanas, le comenté a Viktor que me tendría para el solo por dos semanas, ese mismo día nos fuimos a Sarakiniko es una playa en Isla de Milo en el país europeo de Grecia.
Está situada en la costa norte de la isla y es conocida por sus hermosas y tranquilas aguas. El viaje duró un día y cinco horas, donde cruzamos la mitad de Francia y toda Italia, incluso cruzamos el mar mediterráneo.

Viktor rento una departamento en la costa, cuando le preguntaba cuánto gastaba, nunca me lo decía. Viktor y yo no salíamos mucho ya que había personas que lo podían reconocer y hacer notas amarillistas ensuciando la reputación de Viktor, pero eso no nos impidió disfrutar esas dos semanas, fue la mejor experiencia que viví a su lado y makkachin también lo disfruto, ya fuera Viktor o ambos, sacábamos al caniche a dar una caminata por la orilla de la playa, me reía mucho cuando Viktor me acompañaba, este llevaba unos lentes de sol y una gorra para cubrir su llamativo color de cabello.

Cuando lo molestaba, siempre me tomaba desprevenido y me besaba o me golpeaba descaradamente el trasero para vengarse pero lo que no sabía era que me encantaba que hiciera ese tipo de cosas.
Un día antes de regresar, Viktor me invito a la feria que había en la ciudad, el evento estaba todo el año pero nos habíamos negado a ir por temor a ser descubiertos, pero esa noche no fue así, Viktor tuvo que disfrazarse para no ser reconocido, incluso se puso una peluca negra, se veía tan apuesto a pesar de que la peluca estaba en pésimas condiciones por lo que tuvo que ponerse un gorro y anteojos.

Salimos tomados de las manos junto con makkachin, nos tomó media hora llegar a la feria, la cual tenía de todo, juegos mecánicos, pequeños puestos con juegos de entrenamiento y muchos locales de comida. Nos subimos a la rueda de la fortuna con makkachin, Viktor tuvo que pagar el precio de tres boletos para nos dejaran subir al caniche. La vista era muy hermosa, el momento que estábamos compartiendo lo guardaría en mi corazón, la sensación de nuestras manos entrelazadas hacían que mi corazón latiera como loco y sentir los labios de Viktor sobre los míos, solo lograban que este momento fuera más perfecto.

Seguimos viendo los enormes caminos llenos de locales con diviesos juegos de azar, en un local de tiro al blanco con flechas, había un enorme peluche blanco con forma de lobo, inmediatamente me hizo pensar en Viktor. Me detuve viendo como un hombre lanzaba una flecha, dando al pequeño círculo de colores, el cual estaba lleno de flechas.

-me da un juego -respondió Viktor mientras le daba un par de billetes al dueño del local.

-oh un alfa, espero gane algo para su pareja -respondió el beta pasándole un arco y cinco flechas-tienes cinco oportunidades de darle en el centro.

Viktor camino unos pasos para atrás mientras tomaba la flecha y le apuntaba al centro, la cual dio justo en el blanco, después camino hacia la siguiente figura la cual se movía y también dio en el centro y así fue con todas las demás; demostrando la gran habilidad que tiene mi alfa.

El dueño lo miro con asombro para después decirle que tomará el peluche que quisiera, mis ojos brillaron con amor al ver que había tomado el peluche en forma de lobo, se acerco a mi para darme un tierno beso en la mejilla y darme el peluche. Seguimos caminando hasta toparnos con otro local de juegos pero la diferencia era que este eran con dardos, Viktor no despegó la vista de un peluche en forma de cerdito.

Pague por un juego para intentar ganar el cerdito pero la suerte parecía no estar de mi lado porque los dos primeros dardos cayeron en el valor más bajo.

-sólo mira el color blanco y relajante -susurro Viktor logrando erizar mi piel por completo.

Hice lo que me dijo, mire el pequeño círculo en el centro de la figura y tire el dardo, dando en el lugar que quería y así fueron las siguientes ocasiones, dándole en el blanco. Tome el cerdito de peluche y se lo di a Viktor, sus mejillas se sonrojaron tanto que parecía un lindo tomate al decirle que el peluche era para él.

Seguimos viendo los locales hasta que se hizo tarde por lo que tuvimos que regresar temprano para tomar el barco que nos llevaría a Italia para seguir nuestro camino de vuelta a casa. En la habitación del barco nos tocó estar los dos solos, Lo que aprovechamos para hacer el amor, no lo habíamos hecho decentemente desde que tomamos el barco.

Una vez que llegamos a Italia, el resto del camino fue en auto, duramos casi tres días viajando porque nos entreteníamos con cada cosa que nos encontrábamos en el camino, tomamos demasiadas fotografías de todo paisaje hermoso o de estructuras impresionantes.

Al regresar a la ciudad, nuestras vidas tomaron el mismo rumbo de siempre, largos días de trabajo y estudio, noches calientes llenas de pasión, mañanas divertidas conversando sobre cosas sin importancia y despedidas con la promesa de volvernos a ver a siguiente día, terminando con un beso que nos diera la fuerza que necesitamos para seguir.

La actitud de Viktor después del corto viaje estaba muy rara, en ocasiones cuando terminábamos de hacer el amor, se quedaba en silencio como si buscará las palabras correctas para decirme algo y cuando le preguntaba que le pasaba se podía nervioso para después decirme que lo olvidé todo cuando no decía ni una palabra. No quería pensar que estuviera en problemas y la mejor manera de hablar con él era después de hacer el amor, siempre se quedaba tranquilo y acariciaba mi cuerpo con delicadeza.

-Viktor ¿Qué... es lo que te pasa? -pregunté mientras me hacía el amor, no pude esperar a que terminará.

-¿de... que hablas? -pregunto mientras aumentaba la profundidad de sus embestidas, tuve que llevar mi mano para cubrir mis labios e impedir que mis gemidos salieran.

-¡aaahh Vi-Viktor¡ ¿hay algo....que quieras decirme?-le pedí sin poder contener el placer en mi cuerpo, Viktor se aferró de mis caderas para dar la última estocada, entrando en lo más profundo de mi interior, su nudo se formó dejándonos unidos.

Viktor escondió su rostro en mi cuello, sabía que algo ocultaba porque siempre hacía eso cuando algo le pasaba. Comencé acariciar su cabello mientras sentía sus húmedos besos en mi cuello, acompañado de leves mordidas que hacían temblar por completo mi ser.

-yo... quisiera pedirte algo -respondió una vez que recupero el aliento, sacando su rostro de mi cuello-mi celo esta cerca y quiero pasarlo a tu lado-respondió nervioso mientras lamia mi mejilla como si se disculpara.

-yo... yo no lo se, déjame pensarlo -susurre mientras lo abrazaba, su propuesta me había tomado totalmente desprevenido, ambos somos inexpertos en ese aspecto. si queríamos pasarlo juntos teníamos que prepararnos, comprar lo necesario para asegurar que no pasen dos cosas, una marca y un cachorro.

Después de limpiar nuestros cuerpos y nos quedamos dormidos. Me sentía tan contento, el pasar un celo juntos era un gran paso para nuestra relación y me emocionaba saber que seré la primera persona en compartir su celo. Sin duda soy la persona más afortunada del mundo, al no compartir con nadie más sus experiencias.

Al día siguiente compré todo lo necesario, una almohada anti-marcas, como la que use en mi primer celo. Sabía que sería totalmente diferente a nuestra primera vez y en cierta parte eso también me atemorizaba, las únicas experiencias que tengo en la cama son con Viktor y temo que nuevamente sea brusco o no pueda contratarse y me lastime.

Había visto casos de omega que habían pasado el celo de un alfa y muchos terminaban ultrajados y agredidos, los alfas en celo no miden su fuerza y no piensan coherentemente por su necesidad, pero mi Viktor no era así, se que el no haría nada para dañarme.

Me sentía muy nervioso, y la única solución que encontré fue preguntarle a Yurio, que es lo que se hace cuando un alfa está en celo, el era un omega marcado y ya habían pasado celos con su alfa, por lo que era el más indicado para preguntarle, pero la forma en la que actuó me tomó totalmente desprevenido.

-¿acaso quieres pasar un celo con el? -pregunto molesto, no pensé que reaccionara de esa manera.

-no va a pasar nada malo, el no me ha lastimado y se que no me va a morder-respondí mientras Intentaba calmarlo, pero el estaba muy furioso y no entendía porque.

-un celo es muy importante, no es algo que se tome a la ligera y debes pasarlo con esa persona que es la indicada para ti-respondió.

-¿Por qué no quieres que pase un celo con el? -pregunté irritado.

-porque creas un lazo con ese alfa-respondió enojado mientras se acercaba a mi y me arrebataba el celular, me quedé estático mirando como buscaba algo en el aparato para después escribirlo en el suyo -quiero que le llames y le digas que no vas a pasar el celo a su lado o sino le diré a Jean que le de tu contrato a otra chica-respondió regresandome el celular.

-¡no puedes hacer eso! -respondí mientras mis ojos se cristalizaban del coraje que sentía.

-claro que puedo, soy tu mentor y quiero que le llames en este momento y le digas frente a mi que no pasarán el celo juntos -me grito mientras me obligaba a marcarle-ponlo en altavoz -me ordenó cuando el tono de espera dejó de sonar.

<eros ¿Qué sucede? >habló Viktor y por primera vez deseaba que no hubiera contestado mi llamada.

-Viktor yo no... podre pasar el celo contigo, lo siento -respondí cuando escuché su voz.

<oh esta bien, no te preocupes... supongo que estaré bien. Bueno tengo que colgar nos vemos después> respondió colgando la llamada.

-¿vez? Se lo tomo de buena manera, Yuuri yo lo hago para protegerte-respondió mientras tomaba asiento en la cama.

-sal de mi habitación-susurre mientras Intentaba contener mis lágrimas, Yurio no era nadie para meterse en mi vida.

-Yuuri habla claro, sabes que no puedo entender lo que dices cuando balbuceas-respondió dándome un ligero empujón.

-¡¡sal de mi habitación ahora!! -le grite mientras me levantaba de la cama para sacarlo a empujones, una vez afuera, cerré la puerta poniéndole cerrojo. Corrí de nuevo a la cama, ignorando los gritos de Yurio exigiendo entrar.

Tal vez no había actuado de la mejor manera pero lo que me había hecho no tenia justificación, el obligarme a decirle eso a Viktor, había cruzado el límite. Volví a tomar mi celular para marcarle a Viktor y tratar de retirar lo que le había dicho pero no me contestó.

Lo único que me llegó fue un mensaje diciéndome que nos veríamos por la noche, el resto del día me la pase haciendo mis actividades cotidianas, esperando a que la noche llegara para hablar con el. Al llegar la hora acordada sentí una extraña presión en mis entrañas, supuse que había sido toda la carga de emociones a la que me había sometido.

Al llegar al departamento no encontré a Viktor por lo que fui y me senté en el sofá. De pronto escucha unos sonidos extraños, al girar mi rostro a un lado me encontré con el teléfono, sin pensar lo que hacían, simplemente lo tomé en mis manos y me puse a escuchar.

<si Chris, lo sé, pero ¿que puedo hacer si el no acepto pasar el celo conmigo?>pregunto Viktor con la voz desanimada.

<simplemente acuéstate con otro omega, el se negó a estar contigo, además ni siquiera son pareja> susurro su estúpido amigo, ahora me arrepiento de haber dicho que me caía de maravilla.

<yo no quiero hacerlo con un desconocido, yo deseo hacerlo solamente con eros>mis mejillas se sonrojaron al escuchar que Viktor solo quería pasar su celo a mi lado.

<si Viktor, pero sabes lo que te dijo el doctor, dime ¿vas arriesgar tu futuro por el capricho de un omega?>

<no, no quiero tener que sedarme como las otras veces, pero no quiero tener sexo con un desconocido >

<si ese es el caso entonces acepta la propuesta de Mila y hazlo con ella > respondió el alfa, sentí como mi estomago se revolvía al pensar en que le propuso semejante barbaridad.

<yo no lo se, Mila es... Mila, ella es como mi hermana, no podría tener sexo con ella y menos sabiendo que ustedes durmieron juntos >respondió Viktor.

<solo acepta su propuesta, estas arriesgando muchas cosas, solo será una vez>respondió presionando a Viktor y en ese momento quería golpear su rostro.

<¿crees que sea lo indicado? >le pregunto y mi furia se elevó por los cielos.

<solo llámale y dile que si vas a pasar el celo con ella y listo, asunto arreglado>

<supongo que le llamaré más tarde para ponernos de acuerdo, no se como lograste convencerme al final>susurro cortando la llamada y rompiendo mi corazón en mil pedazos.

Deje el teléfono en su lugar mientras tomaba el mío y le llamaba a Otabek para que viniera por mi lo más rápido posible, no quería estar en el mismo techo que el idiota de Viktor y tampoco quería ver su estúpido rostro pero mis planes salieron fallidos porque Viktor salió de una habitación antes de que pudiera salir del departamento.

-eros ¿Cuánto tiempo llevas aquí? -preguntó mientras se acercaba, rápidamente limpie mis lágrimas pero aún así se dio cuenta de que estaba llorando porque intentó limpiar mi rostro pero me aleje de él.

-yo tengo que irme, tengo otro contrato -respondí al recibir el mensaje de Otabek, el cual me decía que estaba en la puerta, camine hacia la salida y en cuanto mire la moto, me subí dejando a Viktor solo.

Al alejarnos de departamento no pude contener mi llanto y llore como un niño sin importarme si Otabek me veía , me dolía demasiado la decisión que había tomado Viktor y había roto por completo mis ilusiones, al grado de que si en realidad pasaban el celo juntos no quería volverlo a ver en mi vida, ni tampoco tener algo que nos uniera.

Sentí como nos detuvimos pero me negaba a soltar a Otabek, su chamarra de cuero había terminado con una enorme mancha de humedad proveniente de mis lágrimas y por un momento me olvidé del dolor que sentía mi corazón.

-lo siento mucho, no era mi intención arruinar tu chaqueta... soy un tonto -susurre mientras sollozaba y limpiaba mi nariz.

-¿quieres hablar de lo que pasó? -preguntó Otabek mientras me pasaba un pañuelo.

-no, sólo quiero estar en mi habitación-susurre mientras me aferraba a él, al llegar al departamento detuve a Otabek-por favor no le digas a Yurio lo que paso-le pedí, Otabek me miro con el seño fruncido pero acepto no hablar.

Una vez en mi cama llore y llore por horas hasta que sentí que no podía más, las lágrimas no dejaban de fluir y el dolor junto con al decepción no dejaba de crecer, apague mi celular para no recibir llamadas del estúpido alfa, en estos momentos no quería verlo, ni escuchar su estúpida voz, ni pensar en el, solo quería llorar y olvidar todos los momentos que había pasado juntos.

Mi celo repentinamente llegó y me sentí traicionado por mi propio cuerpo, me odiaba por sentir la urgente necesidad de estar en sus brazos, besando sus labios, sintiendo sus caricias sobre mi cuerpo y sintiendo el infinito placer de como se enterraba en lo más profundo de mi interior, en como me embestía con fuerza hasta hacerme delirar de placer pero al pensar que esa omega disfrutaría de cada una se esas cosas, solo hirió a mi omega, provocando un dolor tan intenso en mis entrañas que en varias ocasiones perdí el conocimiento.

Extrañamente solo dos días duró mi celo, algo sumamente raro en mi cuerpo, mis celos siempre duraban de cuatro a cinco días, además que se me había adelantado demasiado. el resto del día me quede acostado en mi cama, mis ánimos estaban por los suelos y por más más increíble que sonaba, cada vez que pensaba en Viktor mis ánimos caían en picada.

Yurio entró en mi habitación con algo de comida y al mirarlo solo me sentí estúpido por la manera en la que me había comportado, cuando el solo buscaba mi bienestar. Ambos nos quedamos en un incómodo silencio ya que ninguno de los dos se animaba a romper el hielo.

-lamento haberte obligado a decirle eso a ese alfa -susurro Yurio, tomándome por sorpresa.

-yo lamento haberme comportado como un idiota -susurre sin mirarlo, la vergüenza es sentía era más grande.

-Yuuri ¿amas a ese alfa? -preguntó Yurio de pronto, mi cuerpo se tenso al escuchar su repentina pregunta.

-no, no lo amo-respondí con saña, hiriendo a mi omega con mi respuesta.

-¿sabes como se crean los lazos? -pregunto cambiando de tema.

-cuando un alfa te muerde -respondí escuchando una risa burlona proveniente de Yurio.

-no puedo creer que pienses que así se crean los lazos, eso me dice que realmente no sabes absolutamente nada-respondió.

-nunca me hablaron de eso, en Japón no se inculcaba la enseñanza sobre nuestra naturaleza-respondí ya harto, mi cabeza dolía y mi cuerpo aún se sentía extraño.

-el lazo es todo un proceso y la mejor manera de hacerse es cuando estas en celo-susurro tranquilamente -la primera fase se conoce como el llamado , ¿sabes que significa? -pregunto.

-no-respondí mientras cubriría mi cuerpo con la sábanas.

-es cuando tu subgénero llama a su pareja, es la primera parte y una de las más importantes. es cuando tu omega reconoce y acepta a tu alfa, te puedes dar cuenta porque los olores de ambos se intensifican para llamarse constantemente y cuando se aceptan, sus olores se mezclan en una nueva fragancia.

-después viene el anudamiento, esta sin duda es la más importante, aquí se crea el lazo entre los dos, ya sabes, uno busca protección y el otro busca a quien proteger, "alfa y omega se funden en uno solo para esperar el acto final"-respondió con una sonrisa.

-y ¿cuál es la parte final? -pregunté imaginando cuál sería la respuesta.

-la marca, con ella se fortalece el lazo ya creado y se traspasan lo sentimientos, recuerdos y pensamientos, conoces todo de esa persona así como el conoce todo de ti, sin duda es una de las sensaciones más bonitas, sentir que tienes alguien quien te ama y te entiende.

Nos quedamos en silencio, yo desconocía totalmente esa información, siempre creí que solo bastaba con una mordida, que equivocado estaba.

-lograr formar un lazo es sumamente difícil, mi madre es la prueba de eso-respondió mientras se hacía bolita.

-¿Qué paso con ella? -pregunté mientras salía de las sábanas y me sentaba a su lado.

-ella pasó un celo con su pareja y él la marcó, yo fui producto de esa ocasión -susurro-ellos terminaron y ella no sabia que yo venía en camino ya que la marca solo había sido superficial y el vínculo entre él y yo ni siquiera se formó, mi padre jamás supo de mi-terminó de hablar.

-lo lamento mucho Yuri, yo no lo sabía -respondí dándole pequeños golpecitos en su espalda.

-por suerte ella encontró a su destinado y la aceptó con un hijo de otro, después de mi nacimiento, ellos contrajeron matrimonio y vivimos felices hasta el momento del accidente -respondió mientras me miraba-yo no quiero que pases eso, él es un alfa plus del cual no se sabe casi nada de como son sus celos.

Ambos nos volvimos a quedar en silencio hasta que Yurio se levantó de la cama, caminando hasta la puerta pero se detuvo antes de salir.

-la verdad, pasar el celo con un alfa es sumamente peligroso, ellos están cegados por su necesidad y no distinguen, ni respetan lo que tu quieres hacer -respondió sin siquiera mirarme -pero un alfa plus es algo que casi medio planeta desconoce.

Yurio salió de mi habitación, dejándome sólo. Al estar en mi cama recordé la primera vez que hicimos el amor y me pregunte si acaso nosotros ya habíamos hecho un lazo, eso explicaría muchas cosa, como el hecho de porque mi cuerpo reconoció a Viktor como su alfa y también porque en mis celos siempre llamaba a su cuerpo. Si eso era así, entonces podría pasar su celo a su lado, después de todo ya tendríamos un lazo.

Con mucha cautela saque las cosas que había comprado para pasar el celo juntos, no permitiría que esa mujer se llevara la primera experiencia de pasar un celo con Viktor, salí del departamento con una sonrisa triunfante al no ser descubierto por Yurio. Todo iba perfecto hasta que lamentablemente me tope a Otabek en el camino y por desgracia no pude evadirlo.

-wow Yuuri que bien te vez-susurro mientras detenía la moto enfrente de mi -¿quieres que te lleve algún lugar? -pregunto mientras me pasa uno de los cascos que traía consigo.

-esta bien-respondí mientras tomaba el casco y me subía en la moto.

Una vez que le indique el camino, nos mantuvimos en un cómodo silencio hasta que llegamos al departamento de Viktor, quería darle la sorpresa de que pasaríamos su celo juntos, mi corazón latía tan rápido que mi pecho dolía por los nervios.

Otabek se quedo parado esperando a que tocará la puerta pero algo no cuadraba, la puerta ya estaba abierta, algo sumamente raro viniendo de Viktor, después de lo que le pasó a makkachin, Viktor nunca dejaba la puerta abierta, por lo que decidí entrar para investigar.

Cruce la puerta y lo primero que me tope fue los ladridos de makkachin, los cuales provenían de una habitación que no era la de Viktor, las cosas estaba completamente desordenadas, como si hubieran tirado todo, comencé a sentirme inquieto cuando escuche unos sonidos extraños que provenían de la habitación de al fondo y por lo que tenía entendido le pertenecía a Viktor.

Al estar parado frente a la puerta, mi omega despertó inquieto e iracundo al percibir el desagradable olor a omega en celo, un profundo terror me invadió al escuchar la voz de esa omega que tanto odiaba. Lleve desesperadamente mi mano el picaporte al sentir como el olor a sexo se intensificaba provocándome arqueadas pero cuando intente abrir la puerta me encontré con el cerrojo.

-ahhh alfa más -grito la omega logrando petrificar por completo mi ser, mis lágrimas rodaron por mis mejillas mientras sentía un inmenso dolor en mi pecho al escuchar los gritos de placer de la omega.

Sin esperar más tiempo, cubrí mis oídos y corrí con todas mis fuerzas hasta la puerta para encontrarme a Otabek.

-¡¿Yuuri que sucede?!, ¡¿Qué te pasa?! -pregunto Otabek al mirar el estado en el que había salido del departamento, prácticamente salí corriendo con el rostro lleno de lágrimas, podía apostar que me veía fatal.

-sólo sácame de aquí por favor -respondí entre lágrimas y lamentos, el dolor en mi pecho era demasiado grande que no me dejaba respirar correctamente.

-¿te llevo de nuevo al departamento? -pregunto una vez que los dos nos subimos a la moto.

-no quiero que Yurio me vea así, por favor llévame al otro departamento -respondí sin dejar de llorar mientras abrazaba a Otabek de la cintura para sostenerme.

Me sentía muerto por dentro y mis lágrimas no paraban, ni mucho menos el dolor de mi corazón destrozado. Ni siquiera podía respirar bien de todo lo que lloraba. Viktor me había destrozado cruelmente.

Primero que nada, quiero darle las gracias a @Banana_Cat04 por los hermosos separados y la nueva portada.
En otras noticias... El corazón de la puerca se rompió 💔.
¿A que se refería Chris?
Si muchas no entendieron lo que le pasa a viktor, no importa se los voy a explicar.
En el anuncio explique como se forma el lazo entre dos los vers (si, entre alfa también se puede pero tienen a rechazar la marca mutuamente, es por ese motivo que es más complicado en alfas y no es recomendado)
Cuando Viktor y yuuri perdieron su virginidad. Ambos llegaron a la segunda Fase del lazo, solo les faltó la marca pero si crearon su vínculo.
Cuando yuuri descubrió que tenía una relación, sin darse cuenta se rompió su vínculo .
El cuerpo de Viktor está en purificación de las hormonas de yuuri pero al tener su vínculo roto, fue lo que le causo su problema.
Su cuerpo busca volver a formar el lazo y la otra busca hacer uno nuevo con otra persona.
Por esa razón se le dio el desorden, su cuerpo está en conflicto.
Bueno espero que les haya quedado claro.

Un pequeño spoiler del siguiente cap.
-¡déjame! ¡No me toques! -gritaba mientras forcejeaba con mi estúpido agresor , me negaba acostarme con Viktor cuando él había pasado su celo con ella-¡no quiero!, ¡Me da asco que me toques!, ¡suéltame idiota!, ¡Te odio! -grite soltando un olor agrio y áspero pero ni eso lo detuvo.

Jajajaj la cerdito 🐽 se enojo.
PD. No todo es lo que parece.
Ahora si me voy
🚶🚶🚶🏃🏃🏃🏃🏃