28 {Maratón Final 2/2}

{Capítulo Final: Parte 2.}

Celebración, confetti, música y muchos jóvenes.
Eso era lo que se encontraba en esa parte de la universidad.

Todos vestidos de gala, gozando el segundo año universitario que terminaban.

Aún era temprano, por lo cual nadie se cansaba, todos bailaban, exceptuando aquella pelinegra.

-No sé por qué te hice caso en venir. -Murmuró Rebecca.

-Oh vamos, es divertido. Además, no deberías sentirte mal, casi te conviertes en una ama de casa y señora... No es lindo. -Le animó la rubia.

-Claro que no, Lottie. ¿Por qué todo es tan fácil para tí?

-¿Qué quieres decir Becky? -Encaró una ceja.

-Siempre has tenido todo, y yo fracaso. Harás que te tenga envidia... -Rió negando.

-Deberías dejar de querer ser como otra persona. Piénsalo... Ni si quiera querías a Dipper.

-Charlotte Flair, eres sabia. Ya te tengo envidia. -Bebió un poco. -Es broma. Supongo que sólo necesitaba a alguien que supiera por lo que estoy pasando... Eso debe ser.

El peliazul giró a la castaña por la pista, mientras ambos reían.

-Te dije que sería divertido organizar una gala con las demás universitarias. -Sonrió Mabel.

-Tenías razón, no es tan malo. -Sonrió.

La castaña miró de reojo a la entrada y dejó de bailar.

-Espera, llegué yo en versión chico. -Will se rió. -Voy a verlo, espérame.

Dicho ésto, fue a encontrarse con su hermano, el recién llegado.

-Te perdiste de la mitad de las cosas Dipper, debiste haber venido junto a nosotros.

-Ustedes son novios Mabel, no quiero que se sientan incómodos.

-No nos incomodaba, Will dijo que estaba bien.

-Mabel, ambos sabemos que tres son multitud; Una pareja y un solte... -Desvío su vista hacia donde previamente había entrado. -Wow.

La expresión del castaño cambió totalmente. Mabel volteó y luego sonrió.

-Mejor me voy Dipper, suerte con ese ángel que se te cayó del cielo...

-Espera, ¡Mabel! -Se quejó mientras ésta desaparecía, dejándolo sólo frente a...

-Pino. -Le sonrió.

-Hola Bill... Estás... Vaya.

El castaño no tenía palabras.

El rubio estaba vestido completamente de blanco.
Le quedaba lindo, y como si no fuese poco, traía una pequeña coronilla de flores, de igual color.

En otra situación Dipper se hubiese reído hasta el cansancio, pero ésto era diferente.

No habían palabras en la boca del castaño que pudieran salir, sólo tenía un destello en sus ojos y un leve sonrojo que acababa por hacerlo ver tierno.

-¿Por qué elegiste blanco?... -Finalmente habló.

-No hagas preguntas si ya tienes la respuesta.

-Entonces sería mejor que hubieses venido de vestido... -Rió.

-Sigue soñando. -Se cruzó de brazos y sonrió.

-Vamos a ponernos lentos chicos, una petición de alguien muy especial, ¡Mabel Pines! -Habló el encargado de la música.

La castaña tomó el micrófono y habló.

-Para todos aquellos que necesitan decirle algo importante a otro alguien, ¡El amor es amor y no importa las circunstancias!

La música del ambiente fue cambiando poco a poco.

"Mabel..." -Pensó Dipper.

-Ésto es raro...

-¿No quieres ir afuera? -Preguntó el rubio.

-Bien.

La castaña vió como ambos salían.

-¡Oh vamos! ¡Les coloco una canción especial y se van!

-Todo a su paso Mabel, sólo observa. No olvides que si los dejamos sólos ellos hacen la magia. -Le calmó el ojiazul.

El rubio y el castaño habían salido un momento, pero había un silencio algo incómodo.

Por primera vez, no tenían tema de conversación, sólo hasta que el rubio habló.

-Quería hablar contigo.

-Yo también. Y hay demasiado que debo decirte, y debo hacerlo ya porque no aguanto más.

-Pino...

-Sólo escuchame...

El rubio le escuchó atentamente.

-Cuando empecé a salir con Rebecca yo sólo pensaba en lo que diría la gente. Si lo aprobaban o no...
Estaba preocupado por lo que los demás querían y no en mí.

Luego pensé que había sido un gran error, nunca había pensado en mí, en lo que en realidad quería. Fuí un total cobarde al ocultarme.

-¿Y qué es lo que querías, Dipper? No entiendo si hablas como ahora...

-No tienes que entender nada para saber que... Realmente te amo. -Habló sin rodeos.

Al rubio se le detuvo el corazón al oír eso.

-¿D-Dipper?...

¿En serio? ¿Dipper estaba enamorado de él? No podia creerlo.

Años para que él al fin le dijera...

-Estaba muy asustado del qué dirán, de la imposibilidad, de todo y de todos; Fue así como empecé a salir con alguien que no amaba para incubrir lo que realmente pasaba conmigo.
Estoy demasiado enojado conmigo mismo por haber hecho esa maldita estupidez...

-Todo lo que dices... ¿Es verdad?... -Miró directo a sus ojos, sin poder creerlo.

-No quiero mentir nuevamente Bill, no a mi familia, no a mi hermana, no a tí. Me enamoré de tí . ¿Qué más debo hacer para que me creas?

El rubio tomó las mejillas del menor y lo miró directo a los ojos.

-Dímelo. -Tocó los labios del menor con la yema de su dedo mientras le miraba profundamente.

-Te amo Bill. Te amo. Y te he amado desde aquella vez que en noveno grado me hablaste y luego no deje de pensar en tí.

Dicho ésto, el castaño besó al mayor por sorpresa, haciendo que el rubio le mirara perplejo y luego le correspondiera.

Siendo ambos finalmente correspondidos.

Bill abrazó fuertemente a Dipper, sin romper aquel beso sincero que tanto había querido junto a él.

El menor había enredado sus brazos al rededor del cuello del mayor, intensificando el beso, y sonriendo en medio de él.

Al separarse por busca de aire el rubio sonrió.

-No puedo creer que te gusto desde el primer día como yo a tí...

-¿¡Tú también? -Bill asintió.

Ambos se abrazaron.

-Te amo Dipper.

-Te amo Bill.

-¡¡Ya era hora, maldición!! -Gritó Mabel desde adentro del lugar, haciendo sonrojar a los dos chicos por haber sido vistos.

-¡Así se hace hermano! -Gritó el peliazul de igual manera.

-¡Quiero ser la madrina!

-¡Vuelvan adentro si no quieren que los golpee! -Gritó el rubio mientras reía y abrazaba a Dipper.

-¡Por favor besense más, es para una tarea! -Gritó la castaña.

Al castaño se le subieron los colores y le sonrió al rubio, quien le había dado un pequeño beso en la mejilla.

-¿Entonces?... -Preguntó el castaño.

-¡¡Oh por Dios!! -Gritó Mabel.

-Yo debería ser quien te preguntara eso Pino... -Dijo y le robó un beso, evitando que vieran sus rostros, disfrutando del otro al máximo.

Amándose.

Después de todo, no era tan malo finalmente decir aquello que ambos pensaban.

Habían dejado el tiempo pasar.

Pero eso no detuvo el amor que los dos sentían por el otro.

Y aunque fuera de miedo tener que hablar...

Había valido la pena totalmente.

Porque ambos sabían que se amaban.

Y su amor ya no era sin corresponder.

***************

¡Feliz final!

¡Éste fue el final de Unrequited!

Dioss... No puedo creer que haya terminado.

Ya me llegó el vacío al corazón...

{El personaje de Charlotte Flair le pertenece a una de mis waifus; -madxfangirl en su historia "¿Fathers?" Si no la han leído ¿Qué están esperando? }

Vivan los crossovers.♡

WEY. ME VA A DAR ALGO.

En serio no sé como agradecerles todo el apoyo que he recibido durante el transcurso de ésta historia.

Me hizo tan feliz saber que a la gente le gustaba que casi muero de la emoción♡♡

En serio, muchas gracias. Estoy agradecida con cada persona que amó leer la historia tanto como yo amé escribirla .

Sin duda éste capítulo va dedicado a todos los lectores y lectoras.

Realmente los amo ,y quiero darles las gracias infintas por todo♡

Les tengo noticias, pero se las mostraré en el epílogo, mañana.

Yazzy Agradecida♡

¡¡En serio, gracias!!♡









Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top