[Segundo Verso: Patrick Stump]
Estoy a punto de hacer que el sudor vuelva a tu interior
Que tu corazón lata en reversa
Nuestros intestinos no se pueden volver a hacer
Tan solo como una pequeña iglesia en medio del desierto, Quemándose
Pero yo tomare los dos pedazos de tu corazón
Y los uniré en una amarga canción
Soy una versión de ti más solitaria
Solo que no sé donde fue que me equivoque

                                                      (Rat a tat-Fall Out Boy)

Narra Abby

Respiré hondo y entre de nuevo en la habitación. La garganta me quemaba de una manera realmente dolorosa pero me trague las lágrimas que luchaban por salir de mis ojos. Siempre había creido que mi padre se preocupaba por nosotras más que mi madre y que a él realmente le preocupaba nuestra felicidad pero después de lo que me ha hecho solo puedo llegar a la conclusión de que a él igual que a mi madre no le importa otra cosa que no sea el dinero. Nuestra felicidad es algo totalmente secundario en esta inecuación sin sentido.

Mis hermanas dejaron de hablar cuando entre en mi habitación y dirijieron sus miradas hacía mi. Intenté apartar la vista, ver sus ojos interrogativos clavados en los mios solo lograba hacer que las ganas de llorar aumentasen casi sin retorno. Y así fue, las lágrimas saliieron casi al instante en que Alby me abrazo.

-¿Qué paso?-pregunto Alby preocupada mientras hacía que me sentase en la cama. Andie y Jen me miraban preocupadas.

-No vol...volveré a la Universidad-dije entre sollozos intentando vocalizar lo maximo dentro de lo posible.

-¿Esto es por mi culpa?-pregunto Jen.

-No.Es porque papá es un villano al igual que mamá, él no es el bueno de esta historia-dije sonriendole con tristeza y intentando no llorar. Cuando eramos pequeñas y pasabamos mucho tiempo sin nuestros padres soliamos inventarnos historias, recuerdo un día en el que nuestra madre nos grito y Andie tubo que consolarnos ya que es la mayor. Ella se invento una historia en la que nuestra madre era la malvada villana y nuestro padre era el heroe que vendría a salvarnos pero que no podía encontrarnos porque estaba hechizado por el embrujo de mama. Eramos un poco crueles sin embargo esas historias sin sentido nos ayudaban a poner una escusa para el rencor que nuestra madre siempre nos ha tenido y el extraño modo de querer de nuestro padre. Durante un tiempo dividiamos a la gente en villanos y heroes...papá siempre había sido el bueno en esta historia...hasta ahora.

-Seguro que se ha enfadado porque me has ayudado a renovar mi armario pero puedo hablar con él. Yo quería hacer esto, no me he dejado engañar por ti. Sabía lo que hacía, no tengo tres años para ser tan influenciada-negue con la cabeza mirando a Jen.

-Dejalo Jen, tú no tienes la culpa de nada y no hemos hecho nada malo. Sigue siendo tú  misma...hace mucho que no te veia tan feliz y eso es lo que importa...puedo sacrificarme y tomar esas malditas clases que papá quiere-mis hermanas fruncieron el ceño casi a la vez.

-¿Qué clases?-preguntó Andie colocandose delante de mi con los brazos cruzados.

-Una especie de clases donde se supone que me enseñaran modales, nuestro padre quiere convertirme en una de esas chicas de sociedad sin expresión alguna en la cara y que siempre hacen todo lo que sus padres, novios o maridos le ordenan. Me moriría de tristeza si tuviese que vivir de esa manera...sería peor que una tortura-Andie maldicio en bajo y me miro.

-Vayamos, somos mayores de edad-Jen y Alby miraron a Andie con tristeza-Podemos llevaros con nosotras, es probable que ni siquiera se enteren de que nos fuimos.

-No podemos-dije en un susurro-Papá amenazo con hacer que nadie nos diese refugio,vendiese o alquilase una casa y menos aun nos permitiese estudiar o trabajar. Sabes que tiene influencias y que hacer eso no le costaría más que hacer una llamada. Me portaré bien durante unos días y con suerte cuando él se vaya por motivos de trabajo me volveré a apuntar en la Universidad.

-Odio todo esto, no deberíamos tener que engañar a nuestros padres para poder estuudiar o salir con nuestros amigos-la cara de Andie mostraba un gran enfado-Ya no tenemos seis años y es normal que nos revelemos ante sus normas sin sentido.

-Cierto y hoy intentaré que lo  comprendan por las malas, me quiere obligar a ir a esa maldita fiesta de sociedad...bien yo iré pero lo dejaré en verguenza-dije escondiendo mi dolorida mano tras mi espalda.

-¿Qué te paso en la mano?-pregunto de repente Jen.

-Le di un golpe a la puerta, estaba tan enfadada que ni siquiera me pare a pensar en que eso me dolería pero no es nada grave...se me pasará en un para de horas. Ahora me voy a duchar y a vestir para esa jodida fiesta.

-¿Nos contaras que es lo que pretendes hacer?-sonrei con maldad.

-Sabeis que siempre cuento con vosotras-les guiñe un ojo-Quedamos quince minutos antes de la fiesta en mi habitación y os informo.

Entre a la ducha y mientras el agua caliente se filtraba por cada poro de mi piel una sonrisa se formo en mi boca, si mi padre quería convertirme en un robot no lo conseguiría, mi corazón sigue latiendo y ahora lo hace con mucha fuerza.

La fiesta se celebrara en una finca que esta situada a las afueras de Nueva York,solo se me ocurre algo que pueda parar la fiesta al instante. Soltaremos a todos los animales. La idea de ver a los caballos, vacas y demás gando introduciendose en el gran salón de baile y ver las caras de la gente horrorizada solo me hace reir.

(***)

Al principio me costo convencer a mis hermanas acerca de la broma. Surgieron dudas sobre como soltar los animales o si le podriamos causar problemas a los trabajadores pero finalmente lo decidimos...la broma se iba a realizar sí o sí.

La limusina blanca se paro frente a una gran mansion, sinceramente era espectacular y mis ojos no dejaban de observar las grandes muestras de arte estendidas por cada inmenso pasillo, deberían pertenecer a un museo pero a veces la vanidosidad del ser humano supera todas mis espectativas.

Notaba a Jen más nerviosa de lo normal asi que me limite a acercarme a ella para agarrar su mano con delicadeza, ella me miro y me dirijio una sonrisa agradecida.

-¿Crees que saldra bien?-preguntó señalando los establos que se veian a traves de las ventanas.

-Será inolvidable-le conteste.

Seguimos a mis  padres hasta un gran salón de baile. Las lamparas del techo brillaban gracias a los cristales que las formaban, me pregunté por unos segundos como sería una de esas gigantescas lamparas se callera en mitad del baile pero rapidamente sacudi mi cabeza quitandome esa idea, si hiciera eso mucha gente podría salir herida lo que sin duda no entraba en mis planes.

Los invitados se movían de un lado a otro mientras acogían en sus manos canapes y copas de champan. Los hombres trajeados sujetaban a sus mujeres por la cintura manteniendo siempre una postura posesiva mientras hablaban tranquilamente con otros hombres de negocios...las hijas de dichos hombres se mantenían dentro de unos de unos vestidos que estaba segura les impidian respirar además de fluir las ideas,su cabello estaba recogido en perfectos moños a diferencia del mio que caia suelto en hondas hasta encima de mi cadera y para finalizar las enormes joyas brillaban en su cuello,manos y dedos mientras que yo lucía una simple cadena de oro blanco con el símbolo de la paz acompañada por un sobrío anillo en mi mano izquierda en forma de infinito. Suelo burlarme de chicas como ellas por su forma de ser sumisa pero realmente ahora tengo miedo a que alguna vez yo pueda convertirme en eso. Si alguna de mis hermanas acabase así creo que me dolería incluso más.

Al final del salón de baile se estendía una gran mesa con distintos platos de comida y dulces.

Maldije cuando observe con más detenimiento la mesa y mis ojos se posaron en él. Luke Hemmings estaba aquí y algo me decía que eso no era para nada bueno...cuando lo tengo cerca mis sentidos dejan de funcionar bien e incluso dejo de pensar con claridad, de hecho cada vez que pienso en sus manos acorranlandome contra mi coche empiezo a hiperventilar.

-Iré a hablar con Hemmings-dijo mi padre-Disfrutaz de la fiesta, aquí hay mucha gente que conocemos-mi padre camino hacía Luke, me pregunté para que querría hablar con él pero mi hermana interrumpio cualquier idea que podría haber formado mi mente.

-Es hora de empezar con nuestra broma-una sonrisa se estendio por el rostro de Andie miestras hablaba-Inolvidable, la gente recordara esto durante mucho tiempo.

Sonreimos y caminamos hacía uno de los baños de la casa. Las mochilas estaban exactamente donde las dejamos cuando entramos asi que nos limitamos a cojerlas, entrar al baño y sacar la ropa negra.

-No entiendo el porque de la ropa-dijo Alby.

-Para que no nos reconozcan-dije Jen con obviedad.

-Ya pero pensé que esta broma era precisamente para que nos reconocieran idiota-dijo Alby.

-Borde-le respondio Jen.

-Así soy yo, venga vistamonos rápido...ya quiero ver las caras de los invitados cuando su baile se vea interrumpido por los animales-sonreimos y comenzamos a vestirnos. La ropa negra ayudaría a que la seguridad de la casa no nos reconociera pero seguramente a nuestros padres no les costase demasiado saber que las responsables eramos nosotras.

Cuando las cuatro acabamos de vestirnos salimos por la ventana del baño hacía los establos. La idea era abrir todas las puertas y hacer mucho ruido para que los animales se asustasen y saliesen corriendo, no les hariamos ningún daño a los animales ya que eso era algo que jamas se nos pasaría por la cabeza, a veces pienso que los animales son mejores amigos o compañeros que las personas.

Después de correr cuesta arriba durante unos minutos llegamos al establo. Jen se quedaría vigilando en la puerta mientras Andie y Alby abrían las puertas y yo conectaba unos altavoces para hacer el ruido que espantase a los animales.

-Puertas abiertas-me gritó Andie, sonrei con maldad y encendi los altavoces. Los animales se removieron inquietos y cuando subi el volumen comenzaron a salir del establo.

-Tenemos que salir de aquí o acabaremos aplastadas-dije a la vez que miraba a mis hermanas.

La salida quedaba cerca pero algo nos interrumpio, parecía un guardía de seguridad.

-¡Rapido!-dijo Andie. Comenzamos una corta carrera hasta la salida pero sin poder evitarlo Alby tropezo y rodo por el suelo, nos paramos en seco cuando el guardía la levanto del suelo y se quedo mirandola.

Narra Alby

¡Mierda! ¡Soy una maldita patosa! ¡Siempre igual!

Había tanta oscuridad que ni siquiera me fije en el rastrillo que estaba tirado en el suelo y cai de cabeza. El guardía tiro de mi brazo con fuerza y me coloco contra una columna de madera. Hasta que levanté la mirada con pereza no descubrí la identidad del guardía que ahora me sujetaba con una delicadeza estraña y que al principio no había utilizado. Michael Cliffort se encontraba ante mis ojos. Mi miraba sorprendido, como si nunca hubiese esperado que precisamente yo estuviese asaltando el establo de una de las familias más importantes de la ciudad y por mucho que mis piernas querían salir corriendo mis ojos se negaban a dejar de mirarlo. 

-¿Qué haces aquí?-susurre intentando no tartamudear.

-Eso debería preguntartelo yo, este es mi trabajo...algunos necesitamos ganarnos la vida para poder comer-cerre los ojos con fuerza, Michael siempre había mostrado esa rabia hacía las personas con tanto dinero como yo o mis hermanas, me preguntaba como reaccionaría si supiese que estoy enamorada de él, de su misteriosa forma de ser y comportarse desde hace años, o como reaccionaría si supiera que me escapo de casa para verlo tocar cada sabado en un local de un barrio pobre de Nueva York.

-Yo...-Michael no me dejo acabar la frase. Le hizo una seña a mis hermanas para que se marchasen y me tapo la boca con su mano mientras su cuerpo se pegaba totalmente al mio.

-Marcharos-les dijo-Yo os cubriré, mis compañeros vienen hacía aquí.

Hubiese preguntado porque me ayudaba si no fuese por que su mano seguí en mi boca impidiendome hablar y su cuerpo se pegaba completamente al mio.

-¿Como sabemos que podemos confiar en ti?-dijo Andie.

-Es vuestra única opción-miré a mis hermanas en las oscuridad, solo me iluminaba la luz de la linterna que Abby dirijia hacía mi. Asenti para que se marcharan.

-Alby dentro de media hora en el baño, si no vienes volveremos-volvi a asentir. Las luces de las linternas de mis hermanas desaparecieron y de nuevo la oscuridad lo invadio todo. Solo sentía las manos de Michael, la derecha sobre mi boca y la izquiera sujetando mi vientre contra la columna de madera.

-Haz todo lo que te diga-dijo antés de soltarme-Te sacaré de aquí pero no hagas preguntas.

-Es..esta bien-dije rapidamente. Michael agarro de nuevo mi mano y tiro de mi en señal de que lo siguiese.

Narra Luke

Después de que el señor Collins se acercase a mi para decirme que requería mi ayuda para lograr reformar a su hija me dedique a disfrutar de la comida, después de todo solo estaba invitado a esta fiesta por ser el que se follaba a la organizadora de vez en cuando.

Cuando me cansé de ver a mujeres sumisas sin expresión me levante y empece a caminar. Las vistas que me ofrecían las demas chicas en la fiesta eran exquisitas asi que me limite a coquetear con varias buscando algo que llevarme a la cama esta noche. Las chicas respondian a mi coqueteo sin ninguna duda y eso me gustaba, podría convencerlas de todo lo que quisiese con solo sonreirles, me bastaba un guiño de ojos para que cayeran a mis pies.

Finalmente me decidi por una chica rubia de ojos marrones que llevaba un apretado vestido verde hasta encima de las rodillas. Le di la mano y la diriji por el pasillo. Quería llegar a mi casa cuanto antés para pasar un divertida noche pero varias chicas chocaron contra mi. Ni yo iba atento a mi camino por culpa del escote de la chica que llevaba al lado cuyo nombre ya no me acordaba ni ellas iban atentas a su camino porque parecían llevar prisa. Sin embargo solte al instante la mano de mi acompañante cuando me fije en una de las chicas.

-¡Tú!-dije enfadado.

-Yo-dijo la chica con la que me había encontrado esta mañana. La chica del Maserati.

-Casi logras que me caiga, si estos tacones se hubiesen roto tendría una increible depresión por tu culpa. ¿Es qué no ves lo importantes que son para mi?-dijo con voz chillona la chica que hace solo hace unos segundos me llevaba a casa, por primera vez en mi vida me avergonzaba llevar a mi lado a una chica como esta, es decir con un cuerpo increible pero sin cerebro ni personalidad.

-¡No me digas! ¡Que gran drama! Tus tacones se rompen y entras en depresión pero gastarte miles en ellos sabiendo que los niños que lo hacen trabajan durante con suerte quince horas, sin derechos a descanso, sin comida ni agua...eso no hace que te deprimas ¿verdad? Tampoco te importa que gracias a que tu compras esa mierda de zapatos cada vez explotan a más niños.

-Hippie-volvio a decir la chica que estaba a mi lado con voz chillona-Se nota que no podrías permitirtelo.

-Siendo hijas de los Collins creo que si podríamos comprarlos si quisieramos-dijo Andie con el ceño fruncido. En ese momento recorde que el señor Collins me contrato para reformar a una de sus hijas y no me extrañaría nada que fuese la chica del Maserati. En estos momentos me gustaría demasiado saber su nombre, el señor Collins me había dicho que se llamaba Abby ¿sería ella?

-Me debes una disculpa-le dije intentando que me mirase, hasta el momento la chica del Maserati había evitado mi mirada y ni por algo que ni siquiera yo entiendo eso me molestaba. Quería mirarla a los ojos pero no podía, algo que no me gustaba en absoluto.

-No te debo nada-su mirada se levanto y porfin pude ver de nuevo el azul de sus ojos, mucho más escuro que el de los mios.

-Abby vamonos no vale la pena-dijo Andie.

Sonrei. Entonces estaba en lo cierto, ella era Abby y yo sería en breve su nuevo profesor lo cual me gustaba más de lo que debería.

-Nos veremos pronto-le dije a Abby.

-Ni lo sueñes-fueron las últimas palabras que me dirijio.Mientras ella se daba la vuelta para irse no pude evitar fijarme en su vestido color turquesa poco apretado, su pelo ondulado negro azabache hasta encima de la cintura y los tatujes que adornaban la piel de su brazo. ¿Qué tenía Abby Collins que las demás chicas no? ¿Porqué ella me provocaba pensamientos que nadie más me había provocado antes?

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Holius!!!

Sé que con relación a otros capis este ha sido corto pero aun así espero que os guste.

Como veis ya he incluido a Michael en la historia ¿os ha gustado esa parte? Espero que sí, en proximos capis entrara Ashton Irwin.

Bueno espero que os haya gustado el capi y gracias por leer.

Besos <3<3<3