Confieso que no soy ese tipo de mujeres que se ha creído especial en su vida, confieso que con el pasar de los años amar se ha vuelto un conflicto interno entre mi cerebro, corazón y vagina.

Confieso que en este punto he amado tres veces, me he enamorado incontables veces, y he disfrutado miles de veces. Pero esos amores que me han marcado me ha llevado a comprender que es mejor una soledad tranquila y feliz, que vivir con zozobra e infelicidad.
Pero aquí estamos, relatando un sentir e intentando encontrar la razón principal de mi vida; tratando de entender el porque de mis agonías, el porque de aquellos amores fugaces, ¿o seré el experimento social para hallar su propio ser?.

Pero siendo sinceros, uno no puede encontrar las cosas que no esta buscando. Siendo egoísta,  y poniendo mi bienestar en primer lugar, pensando en primero yo, segundo yo, tercero yo. Dejando marchar aunque sean "buenos" , en mi libertad emocional y furor de los veinte me aleje de sin fin de oportunidades mientas solo pesaba en mi bienestar.

Y ahora en mis pensamientos hacia el pasado, me pregunto sobre la falta de aquel amor, cuando eso ha sido lo que menos he buscado, y pensar en esas posibilidades me hace sentir mas egoísta. Pues en este punto que considero mi madurez tiendo a ser dramática, pero en mi lógica mental no deseo engañarme con falsas ilusiones de amores o sueños de una niña que vive en mi y llora a cada instante.