🌊•Capítulo 14•🔥


Katie Chan Jary

Estella cerró la puerta apenas que el doctor salió del camerino y, al suspirar de indignación, se giró hacia mí. Según lo que entendía de la expresión de su rostro, estaba estresada.

-¿Qué vamos a hacer ahora? -me atreví a preguntar.

-Pase lo que pase el show no puede parar. Todos los que están allí en las gradas han pagado por verte a tí y a ese chico cantar juntos, no sería lo mismo que cantara solo él a que cantaran los dos.

Tenía cierta razón. De todos modos... no me dolía demasiado la garganta, así que no era nada grave, al menos por ahora. Creo que podría aguantar al menos esta noche.

-Está bien -le dije a mi mánager y ambas tomamos rumbo a la puerta para salir de la habitación.

Nos dirigimos al Backstage, donde estaban organizando las cámaras, ajustando los efectos de fondo, las luces, etc. Me senté a esperar a que llegara mi el chico que cantaría conmigo tranquilamente. Estella estaba a mi lado, hablando con el personal sobre mi incidente. Para mi sorpresa, tan sólo cinco minutos después ya estaban más de diez personas cotilleando acerca del nuevo chisme: "Katie Chan está enferma". La noticia se siguió esparciendo hasta que todo el equipo se enteró.

A medida que transcurrían los minutos me empeoraba el dolor de garganta, y poco a poco mi voz se volvió muy ronca. Pasé mi mano con vagancia por mi frente, estaba ardiendo. Mi vista se nublaba y se me hacía difícil mantener la mirada en un punto fijo.

Se escucharon gritos alocados provenientes del pasillo, levanté la cabeza para ver qué sucedía y era que había llegado el idol que cantaría conmigo. Me levanté de mi silla para ir a saludarlo, aguantando mi malestar. Él estaba hablando con varios de los que trabajaban aquí cuando sus ojos se fijaron en mí. En ese instante, apartó al montón de personas que lo rodeaban y caminó hacia mi dirección. Su figura era atractiva pero al mismo tiempo profesional.

-¿La mismísima Katie Chan Jary?

Sus palabras en tono coqueto hicieron que una sonrisa se dibujara en mis labios antes de asentir con la cabeza.

-Es un gusto conocerte, preciosa.

-Igual -respondí, luchando para que no estado no se reflejara en mi tono de voz.

Jon Gil

(Es un paparazzi que entró a Backstage sin permiso junto con su compañera)

Aprovechamos la distracción del personal de seguridad para adentrarnos en la sala silenciosamente. Asomé mi cabeza por las paredes, comprobando si había alguien; todo despejado. Llevaba en mis manos mi cámara, la cual estaba conectada en directo. Mi compañera se encargaría de sujetar el micrófono haciéndole preguntas a Katie Chan. Esto nos traerá muchos beneficios.

La vimos al mismo tiempo, estaba hablando muy entretenida con un muchacho que por la distancia no alcanzaba a ver con exactitud su rostro, este era el momento, no había nadie más cerca.

-¡Señorita Katie Chan! -gritó mi compañera, corriendo con el micrófono en las manos mientras que yo grababa en directo. Cuando estuvo a su lado empezó la rueda de prensa -Díganos, ¿qué se siente estar obligada a cantar estando enferma?

La chica se quedó atónita con su pregunta, solo tartamudeaba una respuesta.

-E-eh yo...

Kaito Kim

Estábamos mis amigos y yo en la casa de Jon bebiendo un poco de vino y hablando de trabajo cuando Moon-Bin -otro de mis amigos, el cual es bajito, muy delgado, de cabello y ojos negros y rostro afeminado- se sentó de un salto en el sofá que quedaba frente al televisor y lo encendió. Abrió la aplicación YouTube y apareció en la pantalla el canal "Jon Gil". Le dediqué una mísera mirada por pura casualidad, pero me sorprendió ver a Jary siendo entrevistada por una periodista. Ese tema me llamó la atención, ya que la cara de la pelirroja no lucía muy bien.

-Díganos, ¿qué se siente estar obligada a cantar estando enferma? -le dijo la periodista, alzando el brazo para que ahora se escuchara la voz de Jary en el micrófono.

-Eh-e yo... -habló la chica. Sus mejillas estaban rojas, su voz era débil y no se notaba del todo bien. Me empecé a preocupar mucho.

-¿Se siente tan mal que será capaz de detener el show a causa de su malestar? -la pregunta de la paparazzi no ayudó mucho. Cada vez este canal me interesaba más. Mis ojos se encontraban enfocados en lo que pasaba en la pantalla, ni siquiera pestañeaba.

-¡Hey, fuera de aquí! -gritó una mujer de cabellos marrones, alejando a la periodista a empujones- ¡Váyanse o llamaré a seguridad! -amenazó la muchacha y en ese momento se veía como el camarógrafo daba pasos hacia atrás, aunque sin alejar la cámara de las vistas de Jary.

Para mi sorpresa, la cantante se desmayó ahí mismo, consiguiendo que todos los presentes se preocuparan, incluido yo. La que la había defendido anteriormente era Estella, la cual se lanzó a ayudar a mi chica para que su cabeza no se golpeara con el suelo y lo consiguió. Gracias a Dios, la pobre volvió a despertar en pocos segundos, pero algo mareada según pude ver a través de la tele.

-Katie, despierta. El show debe continuar -le recordó Estella.

Ella no respondió.

Ya entendía lo que estaba pasando. Jary se sentía mal, y la estaban obligando a cantar a pesar de sus síntomas. Algo en mi interior me dice que su mal estado es por mi culpa. Sin pensarlo más, me paré del sofá, dirigiéndome al perchero de la Sala que sujetaba mi chaqueta.

-¿A dónde vas? -me preguntó Jon impidiendo que cogiera mi chaqueta con su brazo. Le dediqué una mirada fría.

-Tengo que irme.

-Te pregunté "a dónde".

-Sí Kim, ¿a dónde? -continúa con el interrogatorio Moon-Bin, acercándose a mí

-No les importa.

Con esa respuesta cortante logré callarlos, pero también conseguí que mi mejor amigo me mirara con mala cara.
Una vez que tuve la chaqueta en mis manos, me la puse y me dirigí a la puerta para irme lo más rápido posible. Escuché como Jon me llamaba desde el interior del apartamento, pero no le hice caso y continué mi camino hacia las escaleras para luego bajarlas lo más rápido que me permitieran mis pies.

No hubieron problemas con el tráfico, hecho que me ayudó muchísimo a llegar pronto al concierto. Con un gran esfuerzo, llegué en quince minutos que parecieron segundos. Abrí la puerta de mi auto una vez que este se detuvo en el estacionamiento, cerré la puerta al salir con llave y proseguí a adentrarme en la zona. No había gente por los pasillos, todos debían estar en las gradas esperando a que los cantantes salieran.

Por poco me pierdo pero me ubiqué en el lugar gracias a un mapa que mostraba el interior de todo el auditorio. Seguí recto por un largo pasillo, giré a la izquierda, di un par de vueltas más y llegué a Backstage. Examiné el área con la mirada en busca de mi pelirroja, pero no la vi por ningún lado. Escuché el sonido de una melodía que provenía del escenario, debía ser que ya estaba empezando todo.

Llegué demasiado tarde.

Katie Chan Jary

Me vi obligada a salir al escenario apenas que desperté. Mi cabeza dolía y el sonido tan alto de las bocinas no ayudaba en nada. Cuando puse un pie en la plataforma, mi cabeza se aturdió al escuchar los gritos del público. Respiré hondo y, con muy pocos ánimos, continué caminando hasta que terminé en el centro. Las luces se apagaron de un momento a otro, sin ninguna razón. Miré hacia atrás para encontrarme a Estella en una esquina del escenario -donde el público no alcanzaba a ver- con la misma confusión que yo. ¿Esto había sido a propósito?

El público rompió el silencio. Escuché una voz decir mi nombre casi en susurros desde otra de las esquinas del escenario.




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