Capítulo 18

Naruto tenía ganas de salir y divertirse, no habían tenido misión y ya había entrenado, tenía demasiado energía de sobra, extrañaba esa sensación, en su otro mundo se la pasaba cansado y con poca energía, ocupado, demasiado ocupado, sonrió quedito sintiéndose fuerte; se levantó de estudiar fuinjutsu, sabía muy poco, pensó que era un experto al haber terminado diez niveles como kage, pero su madre lo sentó en su realidad, era la ama de los sellos y él era un huevo en el tema.

Su mamá estaba en la mesa eligiendo invitaciones para su boda -Naru-chan, ven aquí, ¿cuál te parece más bonita?- el rubio levantó un puchero viendo con atención, era verdad, era su boda y no había hecho nada, observó con cuidado, la primera se parecía a su invitación de boda con Hinata, la quitó de inmediato. Kushina lo vio con sorpresa, era hermosa. De las otras opciones Naruto observó una negra mate con detalles y letras doradas, unas flores rojas y naranjas al pie de hoja bastante delicadas, sonrió quedito imaginando una combinación perfecta de ambos -esta se ve elegante ma, incluye algo de la personalidad del bastardo y la mía ¿ves? ttebayo -

Kushina sonrió divertida -tienes razón Naru-chan, esta será ttebane, mañana iremos a buscar tela para tu ajuar, no planees nada -Naruto sonrió -perfecto ma- avanzó hacia el teléfono y lo tomó, levantó un puchero tratando de recordar -ma ¿aún guardas el número en la oficina del amargado de mi suegro? ttebayo- Kushina lo vio con sorpresa, asintió -la agenda junto al teléfono ¿para qué lo quieres? ttebane -Naruto sonrió divertido apuntando su oído para que escuchara, localizó el teléfono y comenzó a marcar enredando su dedito en el cable del auricular -buenos días ¿podría comunicarme a Itachi Uchiha?- la pelirroja sonrió divertida negando, ahora veía bastante de su personalidad en su hijo, estaba bastante feliz con su cambio.

-“Itachi-kun”- Kushina lo vio con duda por como lo llamó -¿Qué quieres Naruto? estoy trabajando, deja de imitar a Izumi, me causa pesadillas -el rubio rio divertido -no seas pesado bastardo, estoy aburrido, llévame a dar una vuelta ttebayo -el Uchiha suspiró audible -¿Qué sugieres? ¿que deje mi trabajo para salir contigo?- Naruto sonrió divertido -así es, tienes suficiente chakra para dejar un clon en tu lugar genio, vayamos -Kushina veía a su hijo con curiosidad ¿ya se tuteaban y bromeaban? parpadeó desconcertada. Itachi se dejó caer en su silla considerando su opción -¿y si digo que no?- Naruto levantó un puchero, apretó el ceño- ¡mamá! comienzo a sentir tristeza ttebayo-

Itachi se enderezó al escuchar la risa de la señora -tch ya voy por ti pequeño manipulador -el rubio colgó el teléfono con diversión. Kushina negó con una risa ligera -¿tratas de conquistarlo con chantajes Naru-chan?- Naruto sonrió coqueto -¿ya lo viste? está como quiere, necesito mantener su atención ttebayo -Kushina volteó los ojos con fastidio, levantó telas en sus manos -¿Qué mantel te gusta para las mesas?- el rubio se sentó, comenzó a ver todas las telas con dedicación, se estaba dando cuenta que en la boda con Hinata no tuvo injerencia alguna, simplemente decidieron todo su padre y ella por él, apretó el ceño ¿tanto lo amaba que su opinión no era importante? tal vez sus gustos la avergonzaban, levantó su mirada recordando “Naruto-kun, esa ropa se te vería mejor, deberías cambiar un poco, eres un shinobi importante ¿qué dices?”

Apretó el ceño, sí la avergonzaba su apariencia, lo fue manipulando poco a poco, ella siempre elegía su ropa, su corte de cabello, sus cosas, los detalles, no recuerda haber escogido nada para la casa ¿estaba dormido? ¿en qué momento se había dejado mangonear? sacudió su mente con coraje, ya ni siquiera valía la pena recordar, esta vez él lo haría bien con ayuda del gruñón, así debía ser, giró su mirada -mamá, la casa donde viviré ¿ya se eligió?- la Namikaze negó con curiosidad -no cariño, pensaba ir con Mikoto la siguiente semana ¿quieres hacerlo tú?- Naruto sonrió, asintió con emoción -hoy lo haremos, llevaré a don gruñón conmigo- Kushina sonrió, comenzaba a ver interés en su hijo por el Uchiha, aunque sea porque era guapo, todo tenía un inicio, mordió sus labios reprimiendo su emoción.

El timbre sonó, Naruto veía las telas aún con un puchero -ya llegó cariño ttebane- el rubio levantó un dedo, el timbre sonó nuevamente, el pequeño levantó otro dedo, levantó una tela -este combina con las invitaciones ma, me agrada- Kushina lo vio con curiosidad -se enojará Itachi si no sales ttebane- el Namikaze levantó sus azules con seriedad -está muy acostumbrado a que todo se haga a su ritmo, sólo le estoy enseñando a ser un caballero ma, estoy quitándole lo bastardo ttebayo -Kushina apretó el ceño- Naru-chan, eso también es ser caprichoso, no seas grosero ttebane-

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