Ryoma y Sakuno se encontraban frente a la oficina de su profesor de inglés. Sakuno toco la puerta y ambos esperaron la señal para poder entrar.

-Pasen- les indico el profesor.

Ryoma abrió la puerta y espero a que Sakuno pasara, para luego entrar él y cerrar la puerta.

-Buenas tardes jóvenes- les dijo con una pequeña sonrisa.

-Buenas tarde profesor- contestaron al unísono.

-Bien, como les explique en la mañana lo que deben hacer es ordenar estos expedientes en sus respectivos archivadores. Deben colocarlos según el nivel académico, ¿de acuerdo?- dijo con calma.

Ryoma y Sakuno asintieron.

-Muy bien, yo debo ir a hablar con Sumire, así que los dejo trabajando, cuando terminen pueden retirarse, solamente dejen la puerta cerrada- les dijo acercándose a la salida. –Ah y se me olvidaba confió en ustedes- les dijo con una leve sonrisa y salió de la oficina.

Sakuno se acercó al archivador y leyó que uno decía "Secundaria" y el otro "Preparatoria", extrañada se dirigió a la primera caja de expedientes, tomo el primero y leyó la ficha de información: Mihashi Nanami, segundo año de preparatoria.

Ryoma estaba acercando una de las cajas al archivador para que les quedara más cómodo el poder ordenarlos, cuando tomo el primero se encontró con: Arai Masashi, tercer año de secundaria.

-Ryoma- lo llamo Sakuno.

-Mhp- le contesto el chico con indiferencia.

-¿Ya viste que aquí están los expedientes de alumnos de preparatoria?- le pregunto tranquila.

-¿De preparatoria?- pregunto confundido. -¿Por qué van a ver alumnos de preparatoria en la oficina del profesor Kai?- le dijo el ambarino con seriedad.

-No lo sé- le contesto Sakuno con tranquilidad. -¿Podrías ayudarme con esta caja?- le pidió con ternura.

Ryoma se aproximó a ella, para tomar la caja y ponerla cerca del archivador. Los dos comenzaron a ordenar los expedientes.

-Saku, los del club de tenis no los guardes- le dijo el ambarino colocando el de Horio a un lado junto con el de Arai.

Sakuno asintió.

Después de un rato Ryoma se entretuvo leyendo un expediente, Sakuno lo observo curiosa y con una sonrisa juguetona –Ah profesor ya regreso- dijo con seriedad. Ryoma cerró el expediente con rapidez y se dio vuelta hacia la puerta para ver a su profesor. Al notar que no había nadie más que Sakuno dirigió su mirada a ella y la miro molesto. Sakuno reía a carcajadas.

-Aun te falta mucho Ryuzaki- le dijo enfadado regresando a la lectura.

-No te enojes, solo fue una broma- le dijo la cobriza aun riendo.

Ryoma no le contesto.

-¿Qué lees con tanto interés?- le pregunto curiosa.

Ryoma la volvió a ignorar.

-Vamos Ryoma, fue solo una broma- le dijo Sakuno acercándose a él, para abrazarlo con ternura.

-Es tu expediente- le dijo con seriedad. –Dice cosas muy interesantes- le dijo con maldad.

Sakuno se sobresaltó. –No lo leas- le dijo alarmada tratando de quitárselo.

Ryoma comenzó a reír- Nerviosa bonita- le dijo con ironía. –Este es el de Momo, pero cuando encuentre el tuyo de seguro lo voy a leer, ya me dio curiosidad por saber que escondes- le dijo con voz perversa.

-Yo no te escondo nada- le dijo sonrojada.

Ryoma sonrió y le beso una mejilla. –Volvamos al trabajo, tal vez si nos apresuramos logramos llegar al final del entrenamiento- le dijo con normalidad.

-De acuerdo- acepto –Pero si vas a leer todos los expedientes del club de tenis no terminaremos ni para el entrenamiento de mañana- le dijo con voz burlona.

-Solo leo los que me interesa- le dijo sin importancia.

"Eso quiere decir que lee los de sus amigos" pensó Sakuno.

Continuaron con el trabajo. Después de una hora les faltaban 30 expedientes por guardar. Sakuno tomo uno de color verde al abrirlo se sorprendió con el nombre: "Tezuka Kuminitsu".

-Ryoma, este expediente es de Tezuka- le dijo sorprendida, mostrándole el folder a su príncipe.

El ambarino lo miro con detenimiento. –Mmm, yo acaba de sacar el de Inui- le dijo con lentitud.

-Sigo sin entender, ¿Por qué están los alumnos de preparatoria aquí?- le dijo Sakuno con voz sospechosa.

-No lo sé, pero los alumnos que están son los que llevan el curso de inglés avanzado- le dijo Ryoma analizando el de Tezuka y el de Inui.

-¿Crees que el profesor Kai va a ser profesor en la preparatoria Seigaku y por eso tiene los expedientes?- supuso Sakuno poniendo un dedo en su labio.

-Podría ser- dijo Ryoma con tranquilidad.

Pasados 20 minutos más ya habían terminado de ordenar los expedientes, pero a su lado tenían los de los titulares y ex titulares del club de tenis. Ryoma los tomo y se los mostro a Sakuno.

Ella los observo y leyó los nombres en vos alta –Tienes a Eiji, Oishi, Momo, Kaido, Tezuka, Kawamura, Inui, Fuji, Arai, Kachiro, Daisuke, Hibiki, el tuyo y el mío-, termino de leer y lo miro curiosa. -¿Qué harás con ellos?- le pregunto con calma.

-Estos ya los vi, puedes guardarlos- le dijo entregándole los de los titulares y extitulares del club. –Ahora leeré el tuyo y luego el mío- le dijo indiferente.

-Mmm, ¿me dejaras ver el mío?- le pregunto con delicadeza.

-Claro después de que yo lo vea- le contesto abriendo el folder rojo.

-¿Y el tuyo?- le dijo con voz interesada.

Ryoma se quedó en silencio, no estaba seguro si era buena idea.

-¿Tienes miedo de que lo vea?- le dijo acercándose a él con lentitud para abrazarlo por la espalda. -¿Tantos problemas has dado que no quieres que yo me entere?- le dijo en un susurro en el oído tratando de ser coqueta.

-Eh, yo no doy problemas y porque tendría miedo- le dijo nervioso por las carisias de la cobriza. –Y con tus carisias no lo lo logra ras con con ven cerme- le dijo con dificultad al sentir los labios de Sakuno en su cuello.

-¿Estás seguro?- le dijo de forma juguetona, pasando una de sus manos por el cabello de Ryoma y volver a besarle con suavidad el cuello.

Ryoma cerró sus ojos y movió su cabeza con lentitud para asentirle.

Sakuno se separó de el para colocarse frente al ambarino y besarle la frente, al hacerlo noto que las mejillas de Ryoma tenían un leve rubor. El abrió los ojos al sentir sus labios y la miro fijamente, ocasionando que ella también se sonrojara.

-Saku, estas intentando que me vuelva loco, hoy has estado muy provocativa- le dijo sin dejarla de mirarla.

-¿Eh?, yo no estoy intentando nada- se defendió apena, sintiendo sus mejillas como fuego.

-Mmm, solo espero que no dejes de hacerlo- le dijo tapando su rostro con el expediente de la cobriza, para seguir leyéndolo.

-¿Dice algo interesante?- le pregunto Sakuno insegura cambiando de tema.

-Más de lo que piensas- dijo con tranquilidad. –Sabías que aquí se encuentra toda tu vida escolar, desde la primaria. Dice que a finales de primer año de secundaria golpeaste a una chica y te castigaron por una semana- le dijo el ambarino sorprendido. -¿Me contaras porque le pegaste?- le pregunto con serenidad.

Sakuno suspiro. –No debías enterante de eso- le dijo apenada.

-¿Por qué no?- insistió.

-Mmm resulta que le pegue a Itami porque- hizo una pausa y agacho su cabeza. –Porque se burló de ti. Después de los nacionales y volviste al Open US, tuve que trabajar con Itami y sus amigas en un trabajo de ciencias, nos debíamos quedar en la tarde para completar unas fichas. Pero una tarde Itami estaba recordándoles a las demás chicas el partido que tuviste contra el capitán de Rikkaidai Yukimura y dijo que fue patético, que primero habías perdido la memoria, que para ella eso era una simple excusa para que tú llamaras la atención. Yo le dije que no hablara sin saber, que lo que te había pasado era grave. Pero ella me ignoro y continúo con sus burlas diciendo que te veías estúpido jugando, que ganaste por pura suerte. Eso me molesto, comencé a gritarle y al ver que seguía diciendo cosas malas de ti la abofetee. -le conto sonrojándose levemente y mirando al suelo.

Ryoma tomo una de las manos de la cobriza y la beso con suavidad.

-Gracias- le dijo en un susurro el ambarino.

Sakuno levanto su mirada, no entendía porque le agradecía. Iba a preguntar pero Ryoma la interrumpió.

-Saku, espero que no te vuelvas a pelear por mí, no quiero saber qué harías con celos, de seguro le arrancas la cabeza - le dijo divertido.

-Yo no soy tan celosa como tú- le dijo enojada pero a la vez avergonzada.

-Eso hay que verlo, no creo que sea cierto- le dijo con arrogancia.

-Mmm, bueno dejemos de perder el tiempo y deja ver tu expediente- le dijo un poco molesta.

Ryoma le sonrió y se lo paso.

-No dice nada interesante, te lo aseguro- le dijo el ambarino con indiferencia sin revisarlo.

Sakuno tomo el folder y comenzó a hojearlo, deteniéndose en una nota que le llamo la atención. "Ataque de pánico por separación a los 8 años..." leyó.

-¿Viste algo interesante?- le pregunto Ryoma con indiferencia.

-¿Tuviste un ataque de pánico a los 8?- le pregunto asombrada, mirándolo fijamente.

Ryoma se quedó helado, no recordaba ese momento de su vida. Sakuno espero una respuesta.

"Diablos" dijo para sus adentros el ambarino.

-Ryoma- lo llamo la cobriza impaciente.

-No esperaba que eso estuviera ahí- le dijo con frialdad.

-¿Me dirás por separación a que o a quién?- le pregunto preocupada.

-Rayos, de verdad no debes saberlo- le dijo molesto.

-No es justo que me tengas secretos, ¿acaso no confías en mí?- le dijo desilusionada bajando su mirada con tristeza.

-Yo si confió en ti, pero no me gusta hablar de ese asunto- le dijo tratando de estar calmado.

-Por favor me gustaría saber que paso- le dijo con dulzura.

Ryoma lo pensó por un momento y accedió a contarle.

-Sucedió después que mis padres me dieron la noticia de que volveríamos a Japón- le dijo con indiferencia.

-Pero no entiendo por qué- le dijo Sakuno confundida.

Ryoma suspiro cansado y decidió contarle toda la historia, ella no lo dejaría pasar.

-Te contare- le dijo tranquilo. –Yo tenía un mes de no comunicarme con Ryoga, como yo te había dicho antes, la última vez que lo vi fue en un torneo. En ese torneo Ryoga me prometió que nos volveríamos a ver después de que regresara de un viaje que tenía que hacer con su tía por su trabajo. Yo estaba feliz porque nos veríamos de nuevo. Pero todo se esfumo cuando mis padres me dijeron que viviríamos en Japón. Yo me sentía muy solo cuando Ryoga fue a vivir con su tía pero él estaba pendiente de comunicarse conmigo.- hizo una pausa le era difícil hablar de sus sentimientos, no le gustaba hacerlo.

Sakuno sintió la dificultad que tenía Ryoma para expresarse por lo que lo abrazo con suavidad para darle ánimos.

Ryoma respiro profundo y continuo. –Yo al principio estaba molesto, por lo que me fui a mi habitación. Al otro día tenía que asistir a la escuela; por primera vez quería ir, me levante temprano y llegue de primero. Todo iba bien hasta ahí- respiro profundo. -El profesor llego al salón y me pidió que pasara al frente, yo obedecí con pereza. Cuando llegue al lado del profesor dijo algo que me impacto- Volvió a detenerse al recordar lo que seguía.

Sakuno espero con paciencia.

-El profesor anuncio que en una semana me iría a Japón, yo no tenía idea que era tan pronto. Cuando lo escuche lo empuje molesto y salí corriendo del salón, en un momento llegue a las canchas de tenis y...- oculto su rostro en el hombro de Sakuno se sentía apenado.

-Continua- le pidió con delicadeza.

Ryoma asintió y siguió. –Y me desplome en el suelo, comencé a sentir un gran dolor en mi pecho, todo se puso oscuro, supongo que me desmaye, la verdad no lo sé, cuando desperté estaba gritando como un loco, varios profesores estaban a mi alrededor, tratando de calmarme, pero yo empecé a golpearlos y a insultarlos. El director llamo a mis padres. Mi madre logro tranquilizarse. Después de eso no pudimos viajar, el viaje se retrasó un mes. Ryoga regresaría en 3 meses yo pensé que lograría verlo antes de marcharme, pero no fue así- concluyo Ryoma con voz afligida.

Sakuno lo abrazo con fuerza, Ryoma se lo regreso gustoso, sin mostrar su rostro, por su orgullo, se sentía apenado.

-Ay Ryoma, no pensé que tuvieras una niñez tan difícil- le dijo con voz dolida.

-Mmm, por eso no quería contarte, no me gusta que me tengan lastima- le dijo con frialdad soltando el abrazo.

-Yo no te tengo lastima, solo creo que pasaste por momentos muy difíciles- le dijo con voz dulce. -¿Y cómo lo superaste?-le preguntó con calma.

Ryoma se quedó en silencio por un momento.

-Lo siento, creo que eso ya no es de mi incumbencia- se disculpó.

-Mi madre me obligo a ir donde un psicólogo todo el mes antes de viajar, fue caótico, siempre he sido de carácter fuerte, tenían que llamar a tres ayudantes para lograr que yo entrara en el lugar, y después quedarse en la puerta para que yo no me escapara- le dijo con voz monótona. -Por supuesto el psicólogo no logro mucho, ya que yo no hablaba en las secciones, hasta que un día me pregunto si me gustaba el tenis, yo simplemente asentí, entonces me dijo que fuéramos a una cancha y que tuviéramos un partido, que cada punto que me anotara yo debía contestar a una de sus preguntas- la miro y continuo, Sakuno prestaba atención. -Como ya sabes acepte el reto- le dijo con una sonrisa arrogante. -Yo no pensé que fuera bueno, pero que crees me anoto varios puntos y me toco contestar a sus preguntas. Obviamente no lo iba a dejar ganar después de haberme hecho hablar, por lo tanto jugué con todas mis fuerzas y le gane- le dijo triunfante. -Claro el haber respondido a sus preguntas me ayudo a liberar lo que sentía y él me dijo que sacara todas mis frustraciones y sentimientos por medio del tenis, por eso es que amo jugarlo, el tenis siempre me ha ayudado a superar las dificultades, pero también soy consciente de que me ha cegado en muchas cosas, por eso me costó aceptar que te necesitaba, y por eso tarde tanto en saber lo que sentía por ti- le dijo con lentitud agachando su cabeza para esconder el rubor de sus mejillas.

Sakuno se sonrojo con las últimas palabras de su príncipe.

-¿Y supongo que estas feliz de vivir con Ryoga de nuevo?- le pregunto Sakuno con paciencia.

-Para nada, es un fastidioso, es como mi padre entre los dos se ponen de acuerdo para hacerme la vida imposible- le dijo un poco molesto.

-De igual forma creo que te alegra el tenerlo cerca- le dijo con cariño.

Ryoma se levantó de su lugar y guardo los expedientes, mientras asentía despacio. -Pero no quiero que se entere- le dijo cortante.

Sakuno sonrió y se acercó a él despacio. -No lo sabrá nunca- le aseguro con una sonrisa.

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Ryoma y Sakuno se cambiaron con rapidez para llegar al final del entrenamiento, faltaban 20 minutos para que finalizara, pero Ryoma insistió para que asistieran.

Al llegar a la cancha estaban practicando contraataques, Ryoma y Sakuno entraron a la cancha y se acercaron a Sumire con nerviosismo.

Sumire los miro con molestia, diciendo -Los espero en mi oficina mañana en el primer descanso. Kaido les dirá el castigo por faltar al entrenamiento- les dijo la entrenadora con furia, llamando al capitán del equipo. -Elige el castigo para estos dos irresponsables- le dijo cuándo Kaido llego a su lado.

El asintió. -Le darán 30 vueltas a la cancha por una semana, cada vez que comience el entrenamiento y tendrán que ayudar a los novatos por 3 días- sentencio.

-Si capitán- dijeron los dos comenzando a correr.

-Por cierto, Echizen corre en dirección contraria a Ryuzaki- grito Kaido.

Ryoma con enfado le dio la espalada a Sakuno.

Después de 15 minutos terminaron con la carrera, cuando escucharon a Sumire que los llamaba para darles información importante.

-Les tengo una gran noticia, las cosas en el club cambiaran drásticamente-...