Preguntas II.

Capitulo19: Preguntas II.

Narrado por Sakuno:

Eran alrededor de las 8:30 de la mañana, Ryoma había dormido toda la noche con tranquilidad, al parecer el interrogatorio lo había desgastado más de lo que se esperaba, pero eso no quería decir que estuviera mal, la Dra. Minamoto me había informado que los medicamentos que le estaban administrando eran un poco pesados para su cuerpo y eso incrementaba el agotamiento. Ryoma de la infección se encontraba un poco mejor, a pesar que a veces por la noche tocia sin interrumpir su sueño.

Me sentía contenta de verlo tan calmado y relajado, eso había hecho que yo también tuviera un buen descanso, a pesar de que había dormido en un sofá de la habitación.

-Buenos días Sakuno- me saludó la Dra. Minamoto.

-Buenos días- le respondí con una pequeña sonrisa.

-Ryoma aún está durmiendo- indicó sorprendida.

-Si y no parece querer despertar aún- comenté tranquila -él en casa antes de Sora y Natsumi era de dormir muchas horas, por eso no me sorprende, creo que está aprovechando el dormir lo que las niñas no nos han dejado- comenté riéndome levemente.

-Por supuesto, cuidar de dos pequeñas no debe ser fácil- expreso relejada riendo conmigo -Sakuno, no quisiera despertarlo, pero debe comer, tiene varios días sin comer nada sólido y es bueno que comience hacerlo, además la Sra. Rinko me llamo hace poco para decirme que la trabajadora social pidió cita a las 10:30 am, también me dijo que te encarga a Ryoma que ella debía ir a la corte por lo que vendrá apenas termine- me comunicó la doctora.

-De acuerdo- acepté.

-Vendré en un rato- me informó saliendo de la habitación.

Me levanté de mi sitió, me acerqué a Ryoma acariciando su mejilla para luego besarla, él abrió los ojos con lentitud.

-Buenos días- me saludo con una sonrisa.

-Buenos días dormilón ¿descansaste? - le pregunté serena devolviéndole la sonrisa.

-Si, en realidad dormí muy bien, solo me desperté en la madrugada y no me gusto verte dormir en el sillón, deberías ir a casa para que descanses bien bonita- expresó con calma y preocupación.

-No te preocupes por mí, cariño, tu me necesitas- le contesté relajada.

-Natsumi y Sora también te necesitan- me recordó.

-Lo sé, pero no quiero dejarte solo y a ti también te necesitan por eso debes reponerte para que vuelvas a la casa con nosotras- le dije con delicadeza.

-Si pudiera me iría hoy mismo, hoy me siento mucho mejor- comentó relajado.

-Eso me pone muy contenta, quiere decir que te estas recuperando rápido- hablé serena.

-Espero que así sea, sabes Saku, me estoy muriendo del hambre ¿sabes si hoy me dejaran comer algo? - me preguntó esperanzado.

Sonreí con su pregunta -si hoy podrás comer, pronto te traerán el desayuno- le respondí.

En ese momento entro una de las enfermeras con una bandeja de comida la colocó en la mesa y ayudo a Ryoma a incorporarse.

-La Srta. Sakuno le ayudara a comer, provechó joven- le dijo con delicadeza saliendo de la habitación.

Narrado por Ryoma:

Paso una hora, Sakuno había ido alimentar a las gemelas por lo que aproveche para poder ducharme y cambiarme de ropa, la doctora había autorizado que dejara de usar la bata de hospital, eso me animaba un poco, además que me había dicho que me estaba recuperando muy rápido.

Me encontraba solo en la habitación cuando de pronto entro mi madre mirándome con detenimiento.

-¿Cómo te sientes? - me preguntó con calma.

-Bien- le respondí con simpleza.

-Me alegra hijo, de hecho, te vez mucho mejor- expresó con una sonrisa -Sakuno vendrá pronto, pero la trabajadora social también esta por llegar para tu entrevista y no creo que permita que Sakuno este- me informó serena.

-Está bien ¿tu estarás? - le pregunté un poco nervioso.

-Por supuesto, Cambell y Mikiya también estarán- me contestó.

-De acuerdo- dije sin más, observando a Sakuno que estaba por entrar a la habitación.

-Hola ¿te vez mucho mejor? - habló con calidez.

-Sí, me siento mucho mejor ¿Cómo están Sora y Natsumi? - le pregunté relajado.

-Están muy bien, te llaman mucho- me dijo acercándose a mí para tomar mi mano -ya veras que pronto las podrás ver- me animó.

-Espero que así sea, pronto vendrá la trabajadora social y podremos dar fin a esta espera- comenté con esperanza.

Pasados 10 minutos la trabajadora social toco la puerta, Cambell y la Dra. Mikiya se encontraban con nosotros.

-Buenos días ¿esta es la habitación del joven Ryoma Echizen? - preguntó una mujer de unos 29 años.

-Si es aquí- respondió mi madre con amabilidad.

-Mucho gusto mi nombre es Shika Manami y seré la trabajadora social encargada de la entrevista del joven Ryoma- se presentó con delicadeza.

-Es un gusto conocerla, yo soy la madre de Ryoma, Rinko Echizen, él es el Dr. Cambell, ella la Dra. Mikiya, ella es Sakuno Ryuzaki y él es mi hijo Ryoma- nos presentó mi madre.

Luego de los saludos la Srta. Manami tomo asiento en una de las sillas, además de pedirle a Sakuno que por favor esperara afuera de la habitación un momento, situación que hizo que me pusiera más nervioso.

-Según los reportes dados por la Sra. Bale, ella consideró que el joven Ryoma y la Srta. Sakuno no son aptos para hacerse cargo de la crianza de Natsumi y Sora Echizen- comenzó hablar la Srta. Manami -pero el juez encargado alego según reportes de la Dra. Minamoto, la Dra. Mikiya, el Dr. Cambell, el Sr. Itomi y la Srta. Hinamori Osaka profesora titular de su preparatoria, que ambos menores eran responsables por el bienestar de las niñas, por lo que se decidió que la Srta. Sakuno se hiciera cargo de la custodia total de las niñas hasta poder entrevistar al joven Ryoma- explicó con calma -¿Está listo joven Ryoma? ¿comprende el motivo de esta entrevista? - me preguntó con formalidad.

-Si estoy listo y comprendo el motivo- le respondí sereno.

-De acuerdo, primero te hare algunas preguntas básicas sobre las gemelas- indicó la Srta. Manami -¿Cuál es la fecha de nacimiento de las gemelas? - preguntó.

-5 de febrero- contesté sin dudar.

-¿Al nacer las niñas cuantos minutos después nació Sora? - me preguntó.

-7 minutos y 3 segundos- dije con exactitud todos me miraron sorprendido.

-¿Que? - los cuestione sin entender su sorpresa.

-Creo que ninguno esperaba tu respuesta tan exacta- respondió la Srta. Manami con una sonrisa.

-Mmm- suspiré sin darle mucha importancia.

-¿Podrías contarme como tomaste la noticia del embarazo? - interrogó serena.

-Cuando Sakuno me dio la noticia yo me asuste mucho porque sabia que seria mucha responsabilidad y me preocupaba mucho la reacción de nuestros padres, además que en ese momento pensé que no iba poder con todo, pero eso no quiere decir que tome las cosas de forma negativa, al contrario, no se podía deshacer lo que pasaba, por lo que Sakuno y yo comenzamos a disfrutar del proceso preparándonos para recibir a las gemelas- le contesté con sinceridad.

-¿Entonces desde el embarazo has estado presente en el desarrollo de las niñas? - se asombró con mi respuesta.

-Por supuesto, siempre he estado presente en el crecimiento de Natsumi y Sora- afirmé.

-Según la Sra. Bale, Sakuno y tu viven juntos ¿Cómo es la convivencia entre ambos? - preguntó con seriedad.

-Yo diría que muy buena- respondí con seguridad.

-¿Sakuno y tu discuten mucho? - cuestionó tranquila.

-Es muy raro que discutamos por algo y nunca lo hacemos en presencia de las gemelas- le indiqué relajado.

-Las veces que discuten ¿porque lo hacen? - interrogó.

-Por algún trabajo de la preparatoria o alguna falla en alguno de los entrenamientos- dije relajado, notando que Cambell sonreía un poco.

-¿Sucede algo Sr. Cambell? - le preguntó la Srta. Manami con serenidad.

-Lo que sucede es que es muy difícil ver a Ryoma y a Sakuno discutir por asuntos en su relación, ambos se entienden muy bien, supongo que deben tener de vez en cuando sus diferencias, pero se sorprendería de ver con la madurez que resuelven las situaciones- explicó Cambell con sinceridad.

-Entiendo, Sra. Echizen según la entrevista de Sakuno ella vive en su casa ¿Puede usted afirmar lo que dice el Sr. Cambell? - le preguntó a mi madre.

-Claro, Ryoma y Sakuno son dos jóvenes muy tranquilos, y es prácticamente imposible verlos enojados entre ellos, además como dice Cambell los problemas lo solucionan con mucha madurez- indicó mi madre.

-¿Ryoma y Sakuno pasan mucho tiempo solos en la casa? - inquirió la Srta. Manami.

-No- respondí sin pensar.

-¿Sra. Echizen? - indicó con una sonrisa, yo miré a otro lado avergonzado al darme cuenta que la pregunta no era para mí.

-No, normalmente están conmigo, mi sobrina o mi hijo mayor, es muy extraño que no haya nadie en la casa- contestó mi madre.

-Sra. Echizen ¿Usted puede asegurar que Ryoma y Sakuno tienen supervisión sobre el cuidado de las gemelas? - cuestionó a mi madre con seguridad.

-Si la tienen, pero tanto la madre de Sakuno como yo hemos querido que tanto Ryoma como Sakuno sean los que tomen las decisiones sobre la crianza de las pequeñas, nosotras solamente los guiamos- respondió mi madre.

-¿Quiere decir que usted considera que su hijo es apto para cuidar de las gemelas por si solo? - preguntó observando a mi madre con atención.

-Si lo creo, además de que lo he visto encargarse de Sora y Natsumi sin problemas, y no es que sea mi hijo, pero hace un excelente trabajo como padre- indicó mi madre con tranquilidad.

-Es excelente, según el informe de la Sra. Bale dice que Ryoma y Sakuno no tienen supervisión en casa por lo que los dos hay tenido varios encuentros sexuales, indicando que un embarazo podría repetirse, además que según este informe el joven Ryoma también mantuvo relaciones con Lily White ¿es eso correcto Ryoma? - interrogó con calma, yo me quede en shock por lo que había dicho.

-Ryoma, te hicieron una pregunta- me habló mi madre al ver que no decía nada.

-Lo siento, es que me tomo por sorpresa- acepté atónito -en referencia a Sakuno y yo, hemos sido responsables en protegernos la única vez que hemos estado juntos después de nacidas las gemelas- respondí un poco avergonzado -respecto a Lily White yo nunca tuve relaciones con ella, de hecho, el Sr. Itomi está investigando el asunto- contesté tajante.

-En ese caso ¿solo has estado con Sakuno? - preguntó para aclarar.

-Si, solo con ella- afirme.

-Sra. Echizen ¿Usted podría decirme si realmente supervisa en ese aspecto a la Srta. Sakuno y a su hijo? - cuestionó a mi madre.

-Si, de hecho, ambos saben que no deben hacerlo y tanto Yukki Ryuzaki como yo hemos estado al pendiente de que ambos no se aprovechen del que viven juntos, además que tenemos a Sakuno en estricto control médico- le declaró mi madre segura.

-¿Por qué ocurrió el encuentro? - preguntó extrañada - lamento hacer este tipo de preguntas, sé que son incomodas para ti Ryoma, pero realmente no me parece que la entrevista hecha por la Sra. Bale sea imparcial- explicó la Srta. Manami.

-No hay problema, mientras se aclare la situación- le expresé tranquilo.

-De acuerdo Sra. Echizen ¿Por qué cree que ocurrió el encuentro? ¿Dónde estaba usted? - interrogó.

-Ese día había discutido con Ryoma por no llegar a la casa a la hora asignada. Ese día Ryoma había estado con Lily White, y yo creí que él se había acostado con ella, porque esas eran la señales que Ryoma dio, luego de eso me sentía muy decepcionada de Ryoma por haber dejado a Sakuno y me encerré en mi habitación para hablar con mi esposo la situación, para tomar una decisión referente a las aptitudes que estaba teniendo Ryoma...-

-¿Con aptitudes se refiere a la toma de alcohol desmedida que tuvo en la fiesta de la Srta. Megumi? - la interrumpió la Srta. Manami.

-Lamento decir que sí. El día que Ryoma y Sakuno estuvieron juntos estaba muy enfadada y en ese momento me descuide de cuidar a ambos porque estaba muy preocupada con el cambio tan repentino en la conduta de Ryoma, además que yo no me esperaba que ese día tuvieran relaciones cuando estaban enfadados- sentenció mi madre mirándome con seriedad.

-Sra. Echizen ¿Ryoma en alguna otra ocasión había bebió alcohol? - indagó.

-No, Ryoma nunca a sido de ir a fiestas, ni de salir mucho de la casa, por eso me sorprendió mucho que pasara- comunicó mi madre.

-¿Usted cómo se enteró de que Ryoma y Sakuno habían estado juntos? - preguntó la Srta. Manami.

-Al llegar mi esposo a casa, fuimos en busca de Ryoma y nos percatamos que su habitación estaba cerrada, al llamar a la puerta Ryoma tardo demasiado en abrir y al hacerlo encontramos a Sakuno con él no tuvimos que pensar mucho lo que había pasado a demás que ambos admitieron el haber estado juntos- explicó mi madre, yo me sonroje un poco con su respuesta.

-Entiendo, Ryoma ¿Qué puedes decir al respecto sobre ese encuentro? - me pregunto la Srta. Manami.

-No lo sé- dije apenado.

-¿Por qué decidiste hacerlo? - insistió.

Mantuve el silencio por un momento, como esperaban que Sakuno y yo no volviéramos hacer nada era estúpido, si ya sabían que teníamos relaciones porque se empeñaban en detenerlo, la historia no se repetiría, pensé frustrado con las preguntas -porque me sentía cansado de estar fingiendo que todo estaba normal y que yo estaba actuando de esa forma porque quería, cuando en realidad era porque Lily White me manipulaba y ese día ella había intentado obligarme acostarme con ella, pero yo no pude porque sabía que la única que podía sentir algo es con Sakuno, así que al llegar a casa tuve que hacer creer a mi madre y a la misma Sakuno que en realidad lo había hecho con Lily, pero no pude con la decepción de Sakuno por lo que le envié un mensaje y le pedí que subiera a mi habitación, cuando ella llego le mostré los audios donde comprobaban que Lily me había querido manipular, Sakuno me creyó, y yo me sentía muy frustrado por todo además que... - hice una pausa al sentirme abrumado y enterarme que estaba hablando un poco rápido, cuando comencé a toser.

-Ryoma, vamos a detenernos un momento- pidió Cambell poniéndose de pie junto a mi cama, mi madre me entrego un vaso con agua.

-Tomaremos un receso de 10 minutos- sugirió la Srta. Manami.

-Un momento déjeme terminar- le pedí tomando el vaso de agua bebiendo un poco dándome cuenta de que estaba temblando -ese día le pedí a Sakuno que me hiciera olvidar cada caricia en la cual me había obligado Lily a darle para lastimarla a ella, además de que quería demostrarle a Sakuno mis sentimientos por ella- concluí respirando profundo.

-Gracias Ryoma, descansa un poco tomaremos un receso de 10 minutos, hablaré un poco con Sakuno, Sra. Echizen ¿puede supervisarme? - se levantó la Srta. Manami saliendo de la habitación.

-¿Estas bien? - indagó mi madre preocupada.

-Lo estaré en un rato, ve con Sakuno, ya oíste a la Srta. Manami la entrevista de Sakuno no fue imparcial- le respondí con seriedad.

-De acuerdo- aceptó mi madre besando mi frente saliendo de la habitación.

Suspiré un poco cansado recostándome un momento en las almohadas cerrando los ojos.

-Ryoma- me llamó Cambell.

-Hmmp- dije sin abrir los ojos.

-Lo que dijiste nos ayuda mucho a Naomi y a mi en nuestro informe, eso comprueba que tú eres consciente de todo lo que has hecho hasta ahora y que no es por factores de la ansiedad- me comunicó Cambell.

-Que bueno- contesté sin mucho ánimo.

-Ryoma ¿puedo hacerte una pregunta? - consulto sereno.

Asentí.

-¿Ese día también decidiste estar con Sakuno porque pensaste que podía ser la última vez? ¿debido a que habías decidido lastimarte? - preguntó con cautela.

Asentí -Tenia miedo de no sobrevivir- expresé decaído.

-¿Sientes que vas a tener una crisis en este momento? - examinó mi actuar.

-No, solo quiero terminar con esto y recuperar a Sora y a Natsumi- le respondí abriendo los ojos -y recuperar un poco la normalidad de mi vida- comenté.

Los diez minutos pasaron, mi madre y la Srta. Manami ingresaron en la habitación.

-¿Crees poder continuar, Ryoma? - me preguntó la Srta. Manami.

Yo asentí.

-Excelente, primero que todo quiero agradecer a la Sra. Echizen por sus respuestas, me parece que usted está muy involucrada en la supervisión de Ryoma y Sakuno con respecto al cuidado de las niñas, pero me gustaría poder observarlo por mí misma, por supuesto cuando Ryoma se recupere- comentó la Srta. Manami.

-Yo creo que seria una muy buena dinámica, a mí también me gustaría realizar un ejercicio de observación cuando Ryoma sea dado de alta- expresó la Dra. Mikiya, la Srta. Manami afirmó con la cabeza sonriéndole levemente.

-Hablé con Sakuno y ella habla muy bien de ti, además de que la pude ver atender a las niñas y se nota que es una madre muy preocupada y amorosa, además que por lo que ella me dijo tú también lo eres- comentó con amabilidad.

-Ellas tres son lo más importante para mí- contesté con suavidad.

-Puedo notar que es así- sonrió -Ryoma continuaré con las preguntas-indicó con seriedad -con relación a las crisis de ansiedad ¿has presentado alguna crisis estando solo con las niñas? - me preguntó mirándome con fijeza.

-No- negué de inmediato.

-¿Y en presencia de ellas? - indagó con seriedad.

-Que yo recuerde...- me que en silencio por un momento pensándolo -creo que solo una vez- respondí a pesar de saber que en dos ocasiones había sucedido.

-¿Puedes decirme porque sucedió? - preguntó con interés.

Asentí -Fue cuando comenzaron las amenazas de Lily White, uno de sus guardaespaldas apuntaban a Sakuno y las gemelas con un francotirador...- me detuve al sentir una pequeña punzada en el pecho -Lily White amenazo con dispararles si yo no hacia lo que ella me pedía, así que cuando ella se fue regrese junto a Sakuno y no logré controlar lo que sentía teniendo una crisis, así que Sakuno llamo a mi hermano para que la ayudara- le expliqué tranquilo.

Noté que mi madre me miro sorprendida, no recordaba que ella no estaba enterada de ese día.

-Ryoma ¿Eso cuando sucedió? - preguntó mi madre sin dejar continuar a la Srta. Manami.

-El día del almuerzo con los directivos de papá- le respondí sereno.

-¿Desde ese día esa muchachita te estaba amenazando? - indagó sorprendida.

Yo asentí.

-Sra. Echizen me parece que usted no esta enterada de toda la situación que vivió su hijo- alegó la Srta. Manami.

-Lo lamento, desde que Ryoma despertó lo han tenido en contantes entrevistas y en algunas de ellas he tenido que autorizar que las haga sin mi presencia, por lo que no he podido hablar con calma con él- expresó mi madre un tanto dolida.

-No se preocupe Sra. Echizen es comprensible y tampoco debemos agotar demasiado a Ryoma- dijo con amabilidad y comprensión.

-Gracias- contestó mi madre con gratitud.

-Ryoma ¿te visualizas en un futuro con Sakuno y las pequeñas? - preguntó relajada.

-Por supuesto, de hecho, no me imagino sin ellas- respondí con sinceridad un poco apenado.

-¿Me puedes asegurar que no tienes problemas con el alcohol y que solo ocurrió en una ocasión? - me preguntó con severidad la Srta. Manami.

-Yo no quería beber ese día, eso también fue obra de Lily, así que puede estar segura que no volveré a tomar y que no tengo problemas con el alcohol, además mi entrenador constantemente hace pruebas de dopaje- le comuniqué relajado.

-De acuerdo, entonces creo que por el momento no tengo más preguntas, Sr. Cambell ¿podría pedirle a Sakuno que pase, por favor? - le pidió la Srta. Manami con delicadeza.

-Con gusto- le indicó Cambell levantándose de su lugar pidiéndole a Sakuno que tomara asiento.

-Ahora que esta Sakuno con nosotros quiero darles algunas indicaciones a seguir- comentó la Srta. Manami -lo primero es que estaré observándolos para ver su comportamiento entre ustedes y sus familias, cuando Ryoma sea dado de alta la Srta. Mikiya y yo estaremos realizando visitas sorpresas a su casa, además que debo ver el entorno en que viven Natsumi y Sora. Lo otro que le voy a pedir a Ryoma es que por favor le cuentes todo lo sucedido con Lily White a tu madre, ella necesita que le expliques con detalle toda la situación- nos explicó con amabilidad -Sr. Cambell quiero un reporte psicológico del estado de Ryoma semanal, además que debe continuar en terapia con usted por lo menos tres veces a la semana- le indicó a Cambell -cuando Ryoma salga del hospital quiero que se realice pruebas de dopaje sorpresa yo comunicare cuando debes hacértelas, eso para comprobarle al juez que estas sobrio y que fue algo de una vez- explicó tranquila.

-Me parece excelente- aceptó Cambell, mi madre asintió con la cabeza.

-Sakuno, queda pendiente la prueba de embarazo que solicito la Sra. Bale- le recordó la Srta. Manami.

-Ryoma a partir de hoy puedes ver a Sora y a Natsumi, llamare al juez para informarle, ambos son aptos para la crianza de las gemelas con supervisión de un adulto hasta que cumplan la mayoría de edad y ambas pruebas tanto las de dopaje como la de embarazo salgan limpias- nos informó con calma.

-Ya puedo verlas- dije sintiendo un gran alivio y alegría, Sakuno se levantó de su sitio abrazándome son fuerza.

-Eso es todo, que tengan un lindo día Dra. Mikiya, Dr. Cambell podemos hablar un momento- se despidió la Srta. Manami, Sakuno soltó el abrazo.

-Gracias- le hable agradecido.

-Hasta pronto- se despidieron mi madre y Sakuno.

-Traigan a Sora y Natsumi, ya no soporto un minuto más sin verlas- le pedí un poco desesperado.

Ambas sonrieron con mi petición.

-Ryoga y Nanako no deben estar lejos les pediré que regresen- me dijo Sakuno sacando su celular para llamarlos.

La Dra. Minamoto entro en la habitación revisándome con detenimiento, cambiando las vendas de mis muñecas y tomando una muestra de sangre estaba harto de tantas punzadas.

-Te vez alegre ¿te dieron buenas noticias? - preguntó curiosa.

Asentí sonriendo un poco.

-Adivino te autorizaron ver a tus pequeñas- indagó con felicidad.

Volví asentir.

-Es estupendo, pero antes de que las veas debes almorzar, luego de eso puedes estar con ellas sin que yo te moleste, solo para revisarte y te voy a pedir que no fuerces mucho las manos o las muñecas podrías lastimar las suturas- me pidió con calma.

-De acuerdo- acepté.

-Perfecto, le pediré a una de las enfermeras que traigan el almuerzo- me indicó tranquila.

Luego de unos treinta minutos y haberme terminado todo el almuerzo me levante para lavarme los dientes y mi cara, para volver a la cama. Al regresar recostarme vi a Sakuno y a Ryoga en la puerta con una de las niñas cada uno en sus brazos. Las gemelas al verme me llamaron desesperadas estirando sus bracitos hacia mí, no pude evitar sentir un vacío en mi estómago. Sakuno se acercó para entregarme a una de las niñas sonriéndome.

-¿Sora? - le pregunté no muy seguro tomándola con cuidado, ella asintió confirmándomelo, tomando a Natsumi para entregármela.

Al tener ambas niñas en mis brazos sonreí, las abracé con suavidad sintiendo como ambas se acurrucaban en mi pecho, no pude evitarlo mi felicidad fue tanta que unas cuantas lagrimas resbalaron por mis mejillas.

-Las extrañé tanto- susurré acariciando sus cabecitas.

Note como mi madre, Sakuno y Nanako que acababa de llegar también derraman lagrimas silenciosas. Ryoga sonrió al verme contento.

-Me alegra mucho verte bien- expresó sincero Ryoga.

-Papá- dijeron Sora y Natsumi llenando mi interior de felicidad -Papá-

-Papá las extraño mucho- las volví abrazar con cariño.

Natsumi y Sora se comenzaron a remover entre mis brazos, Sakuno se acerco para ayudarme tomando a Natsumi en sus brazos, Natsumi miro a Sakuno molesta tratando de volver conmigo, reí al verla. Sora se sentó sobre mi estomago para alcanzar mi cabello y jalarlo con fuerza intentando levantarse.

-Auch, ayuda - dije al sentir que no podía sostenerla con firmeza, Ryoga la tomó en brazos riendo.

Natsumi y Sora peleaban en los brazos de Sakuno y Ryoga para volver conmigo.

-Calma pequeñas, tienen que esperar a que su papá se recupere- les hablo Sakuno con cariño.

Me levante de la cama despacio acercándome a Sakuno para poder estar más cerca de las gemelas sin tener yo que sostenerlas.

-Ryoma ¿Qué haces? - interrogó mi madre alarmada.

-Solo quiero estar cerca de ellas- le respondí relajado.

-Regresa a la cama, aun no estas en condiciones para estar de pie- me reprendió mi madre.

-Estaré bien- le hable sereno tomando la manita de Natsumi con la mía.

Ryoga acerco a Sora a mi por lo que acaricié su carita con mi mano libre, ambas me miraban con fijeza, comencé a sentirme mareado por lo que me sostuve de la cama, Sakuno lo notó en un movimiento rápido le entrego a Natsumi a Ryoga y ella me ayudo a subir de nuevo a la cama.

-Deja de hacer estupideces- me regaño molesta.

-Lo siento- me disculpe cerrando los ojos por un momento para disipar el mareo.

Me sentía cansado, pero quería estar con Sora y Natsumi más tiempo, me desesperaba el no poder tenerlas en mis brazos por más rato. Natsumi y Sora bostezaron así que pensé que tal vez podíamos tomar una siesta los tres.

-Me parece que Natsumi y Sora tienen sueño- dije tranquilo - ¿pueden recostarlas conmigo? - pedí expectante con la respuesta.

-Mmm no lo sé, creo que tú también debes descansar- me sugirió mi madre.

-Por favor- insistí.

Sakuno se acercó con Natsumi en brazos y la colocó junto a mí, yo la rodee con mi brazo derecho con cuidado de no forzar la muñeca, Ryoga hizo lo mismo con Sora. Sakuno preparo los biberones entregándole uno a cada una, ambas niñas lo tomaron con sus manitas poniéndolo en su boca al mismo tiempo. Al terminar, Sakuno les colocó un chupete a cada una y ambas niñas se durmieron de inmediato yo me uní a ellas sin pensarlo.

24 de diciembre:

Eran alrededor de las 4 am, había despertado con brusquedad por una pesadilla, observe hacia el sillón donde dormía Sakuno sintiéndome culpable que estuviera ahí, la temperatura estaba baja y ella tenia días de estar durmiendo en el sillón, quería volver a casa pronto.

Me levante de la cama con cuidado tomando la bolsa con el suero intravenoso para colocarlo en el transportador, camine hacia Sakuno con lentitud, al llegar junto a ella acaricie su cabeza con suavidad, no sabía cuánto tiempo soportaría estar de pie, aún estaba débil para hacer esfuerzos físicos.

-Saku- la llamé, ella al escucharme abrió los ojos con rapidez.

-¿Qué haces aquí? Deberías estar durmiendo- expresó preocupada levantándose del sillón para devolverme a la cama.

-No puedo dormir- le conteste tranquilo -y esta haciendo frio, así que pensé que podrías darme un poquito de tu calor- le sugerí con delicadeza.

-¿Te sientes mal? - interrogó alarmada.

-No, no es eso- le respondí con rapidez sentándome en la cama mirándola con fijeza. -Solo quiero que te recuestes conmigo- le indiqué relajado.

-¿Tuviste una pesadilla? - preguntó colocando el suero en su lugar.

-Sí- susurré -pero no es por eso que quiero que te recuestes conmigo, no me parece justo que duermas en el sillón y en la cama cabemos los dos- me acomode para que ella se recostará junto a mí.

-Voy a quedarme aquí contigo en la cama solo porque es tu cumpleaños- me dijo acomodándose junto a mí -feliz cumpleaños cariño- me susurró al oído, mi cuerpo se estremeció con su cercanía.

-Gracias bonita- me acurruqué a su lado para sentir el calor de su cuerpo bajo las mantas, pasado un rato ambos nos consumimos en las profundidades del sueño.

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Abrí mis ojos con lentitud notando que Sakuno me tenia completamente abrazado y con su cabeza sobre mi pecho, además de observar a Cambell y mi madre sentados en el sillón observándonos con atención.

-Buenos días- saludo mi madre mirándome con suspicacia.

-Buenos días- le contesté con suavidad para no despertar a Sakuno.

-Me parece que dormiste muy bien- comentó Cambell divertido.

-En realidad solo dormí bien las pocas horas que Sakuno se recostó conmigo- le indiqué sereno -pero hablaremos eso luego- le dije sin ponerle mucha importancia.

-Deberíamos hablarlo ahora- expresó Cambell preocupado.

-Mejor me dejan solo con Sakuno un rato y regresan todos en 10 minutos- le pedí haciéndoles señas para que se fueran y no molestaran.

Cambell y mi madre me miraron sorprendidos sin creerme lo que yo decía.

-¿Que? Es enserio quiero que se vayan y me den 10 minutos con mi novia, mamá deja de verme así no hare nada de lo que estés pensando, no puedo hacerlo te apuesto que me desmayaría- les dije intentando no reír me por la mirada asombrada y desconfiada de mi madre, Cambell no se pudo contener riéndose de lo que había dicho, jalando a mi madre para poder sacarla de la habitación.

-Vamos Rinko no pasara nada- habló Cambell divertido.

-Pero...- iba a refutar mi madre, pero Cambell la sacó de la habitación cerrando la puerta.

Acaricie con suavidad el cabello cobrizo de Sakuno para luego dirigir mis dedos con delicadeza por su mejilla, ella solamente suspiró al sentir mi caricia, realmente estaba durmiendo muy cómodamente. Me alegraba verla descansar plácidamente sabia que tenia muchos días de no dormir tan profundamente.

-Saku- la llamé con suavidad, ella se acurruco más abrazándome con más fuerza -Saku, debes despertar- le pedí con cariño moviéndola con suavidad.

-Mmm, 5 minutos más- suplicó con ternura.

-Por mi podrías permanecer así todo el día si quieres, pero solo me darán 10 minutos para estar contigo, así que me gustaría poder besar a mi novia antes de que venga la doctora y me clave otra maldita aguja en el brazo- le demande rozando su mejilla con afecto.

-Mmm, esta bien- aceptó abriendo los ojos con lentitud parpadeando varias veces -¿Dónde estamos? - preguntó somnolienta.

-Bonita, me parece que aun estás dormida- le exprese divertido -ven te voy a despertar debes mirarme a los ojos- le indiqué con una sonrisa.

Sakuno hizo lo que le pedí bostezando levemente mirándome con fijeza a los ojos, tome su rostro entre mis manos sin dejar de mirarla ella de inmediato se sonrojo.

-Eres demasiado hermosa- le susurré.

-R-Ryoma- me llamo con nerviosismo intentando bajar la mirada.

Me acerque a ella con lentitud sintiendo mi corazón que comenzaba a palpitar con fuerza, sintiendo la adrenalina recorrer mi cuerpo, realmente deseaba tenerla así de cerca, no espere más acorte la poca distancia que nos separaba juntando mis labios con los de ella para besarla con pasión. Sakuno cerró sus ojos colocando sus manos sobre mi pecho, siguiendo el ritmo del beso. Pasados unos pocos minutos comencé a marearme por la falta de aire, me separé con suavidad de ella recostando mi cabeza en la almohada respirando agitado, Saku me miró sonrojada y con inquietud.

-¿Estás bien? - me preguntó insegura.

-Más que bien, me hubiera gustado continuar, pero veo que aun no puedo hacer mucho esfuerzo, no me gustaría desmayarme mientras te beso- le respondí tranquilo.

-No digas eso, me matarías del susto- me regaño.

-Ven- le dije volviendo a juntar mis labios con los de ella, pero con más calma -eres adictiva- le susurré al separarme.

-Me parece que estas mucho mejor- acarició mi rostro con suavidad sonriéndome.

Asentí devolviéndole la sonrisa, de pronto tocaron la puerta.

-Genial, no podían darme un poco más de tiempo- expresé con fastidio.

Saku, se levantó de la cama peinándose un poco para sentarse en la silla junto a la cama.

-¿Por qué te fuiste de la cama? - le pregunté haciéndole señas para que volviera junto a mí, mientras volvían a tocar la puerta -Ven- le insistí.

-Eres un cumpleañero muy caprichoso- expreso como si fuera un niño consentido.

-Mmm un poco sí, pero solo contigo- acepté besando su mejilla.

La puerta fue abierta por mi madre que me miraba con detenimiento, analizándome.

-Mamá, no se que tanto intentas de adivinar mirándome así, pero te aseguro que no soy tan rápido ni me encuentro en condiciones de sobrepasarme- le dije ofendido ocultando mi diversión con su cara y al sentir el golpe suave que me dio Sakuno, Cambell que estaba atrás de ella se río con ganas.

-Me parece que Ryoma hoy esta genial- indicó Cambell mirándome con diversión.

Mi madre se acercó a mi besando mi frente -muy divertido- rodo los ojos mi madre -feliz cumpleaños, cariño- me felicitó con una sonrisa.

-Gracias mamá- le sonreí.

La doctora Minamoto entro en la habitación -hoy te vez muy alegre Ryoma, te traigo buenas noticias- anuncio con una sonrisa, la escuche con atención -te realizaré varios exámenes si sales bien en el conteo completo de sangre, te dejaré que vayas a casa, para que disfrutes de tu cumpleaños y de la navidad con tu familia, ese será mi regalo de cumpleaños- expresó con entusiasmo.

-Es enserio me dejara irme- hable sin poder ocultar mi emoción.

-Si, pero como te dije solo si sales bien en los exámenes, además Cambell y Mikiya deben darte también permiso para irte y debes cumplir con todos los cuidados que te voy a dar ¿entendiste? - me explicó con seriedad.

-Sí, le prometo cumplir con todo lo que me pida mientras pueda irme- le dije con aceptación.

Ella sonrió.

La Dra. Minamoto tomo las muestras necesarias, al terminar salió de la habitación, para que entrara una de las enfermeras con mi desayudo, espera poder volver a casa hoy seria el mejor regalo que me podrían dar.

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Hola!!!! Me alegra haber terminado el capitulo, espero que lo disfruten mucho, les agradezco mucho sus comentarios y el gran apoyo que me dan...

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