Capítulo 29: Australia III.

Narrado por Ryoma:

El tiempo pasaba demasiado rápido y la competencia también, desde la maravillosa cita que había tenido con Sakuno las cosas entre los dos habían mejorado bastante. No puedo mentir que en una ocasión tuve una recaída dado que Cambell había reducido un día más la toma del medicamento, ocasionado que ese día no quisiera ni levantarme de la cama, por lo que Ryoga cuido de Sora y Natsumi mientras Sakuno entrenaba con Will.

Me había sentido muy mal al preocupar a Sakuno por la recaída, pero Cambell le había explicado que no era nada grave en realidad lo único que había hecho fue dormir, me sentía extremadamente cansado por lo que no lograba despertarme.

Después de eso todo había marchado de lo mejor, Sakuno había pasado a los octavos de final sin ningún problema y ahora se encontraba entrenado para jugar los cuartos de final, me sentía muy orgulloso de que ella lograra avanzar en el torneo.

Me encontraba sentado en la banca observando a Sakuno realizando la practica de saque y volea con las gemelas en su carriola cuando comencé a escuchar a dos chicas hablando.

—Viste que a la mosquita muerta de Ryuzaki la cambiaron de camerino— comento una de las chicas.

—Era lógico, ahora deberías tener cuidado su entrenador esta investigando quienes la lastimaron— le informo la otra chica.

Me levante de mi sitio con calma dándome la vuelta para reconocer de dónde venían las voces, al detectar que no podía verlas por los arbustos, le hice señas a Will que estaba al otro lado de la cancha grabando el entrenamiento para que se aproximara.

—¿Las puedes cuidar por un momento? — le pedí con calma cuando estuvo a mi lado.

—¿A dónde vas? — me preguntó curioso.

—Iré a comprar unos jugos para las niñas está haciendo mucho calor— le dije relajado, él asintió con la cabeza, noté como Sakuno me siguió con la mirada, yo simplemente le sonreí para calmarla.

Camine hacia los arbustos en busca de las dos chicas que acababa de escuchar hablando, solo necesitaba verlas una vez para saber quienes fueron las atacantes de Sakuno. Al dar la vuelta observe a dos chicas alejándose del lugar intente alcanzarlas, pero sin querer choque con una de las jugadoras que entrenaban en la cancha continua a la de Sakuno, ella venia distraída con su teléfono, por lo que al chocar conmigo perdió el equilibrio la sostuve del brazo para que no cayera.

—Lo siento— me disculpe en inglés soltándola.

—No pasa nada— dijo levantando su rostro para mirarme —pero si eres Echizen— comentó sorprendida —es una pena que no estés en el torneo, espero que para el próximo puedas unirte a nosotros— expresó con sinceridad.

—Gracias yo también lo espero— le respondí con sinceridad —¿disculpa no viste a dos chicas que estaban cerca de aquí? — le pregunté esperanzado que supiera algo.

—Mmm a las únicas que vi cerca de aquí fue a Britanny Turner y Danna Thomas ¿te paso algo con ellas o estaban molestando a Ryuzaki? — me consulto curiosa.

—¿Y esa pregunta a que se debe? — le indique sin entender su acierto.

—Es que ambas siempre vienen a ver los entrenamientos de las demás para decirnos una que otra frase despectiva, yo estaba justamente escribiéndole a mi manager sobre una que otra amenaza que estuvieron haciéndome durante mi calentamiento— me explicó un poco molesta.

Perfecto ya sabia que Sakuno no era a la única que agredían —¿las has denunciado? — le consulté.

—Si, aunque no es tan fácil que la federación te crea sin pruebas ¿Ryuzaki está bien? Porque supongo que si estas detrás de ellas es porque afectaron a Ryuzaki de alguna manera— afirmó mirándome con fijeza.

—Algo así— respondí sin darle detalles.

—Yo que tu no las busco solo además debes cuidar tus lesiones y ellas podrían lastimarte, todos queremos que vuelvas a los torneos— comentó con una sonrisa.

—¿Todos? no lo creo— le devolví la sonrisa.

—Ryoma— fui llamado por Sakuno que se acercó a mí.

—Saku ¿terminaste la practica? — le pregunté en japones.

—No aun no, pero Will me envió a buscarte— note su todo un poco cortante. —Hola Tara— saludo a la chica frente a mí en inglés.

—Hola Sakuno, felicidades por pasar a los cuartos de final— le respondió el saludo y felicito.

—Gracias, felicidades para ti, Australia debe estar muy orgulloso por tus logros— le contestó Sakuno relajada.

—Si, es la primera vez que avanzo a cuartos de final en mi país, espero que nos vemos en la semifinal— le dijo con tono competitivo.

—Yo también lo espero— le respondió Sakuno con voz retadora la observe por un segundo. —Debo volver a la cancha ¿me acompañas? —me preguntó Sakuno.

Yo asentí.

—Un gusto saludarlos, espero verte en la cancha pronto Echizen— se despidió Tara con una sonrisa.

—Adiós y gracias por la información— me despedí tomando la mano de Sakuno caminando hacia la tienda para ir por los jugos para las gemelas.

Sakuno estaba sumamente callada, luego de comprar los jugos y antes de llegar a la cancha la detuve para preguntarle que le sucedía.

—Saku ¿te pasa algo? — le pregunté sereno.

—Mmm no nada, solo me preocupe si estabas bien— contestó sin mirarme jalándome a la cancha —vamos Ryoga me regañara si no vuelvo al entrenamiento— me dijo con seriedad.

Llegamos a la cancha Sakuno tomo su raqueta y camino al otro lado de la cancha esperando a que Ryoga lanzara el saque tendrían un partido de práctica. Ryoga lanzó el saque y Sakuno lo devolvió con fuerza justo en la esquina donde Ryoga no pudo llegarle. Después de 20 minutos Ryoga detuvo el entrenamiento dándolo por finalizado. Sakuno tomo su bulto deportivo aproximándose a la salida.

—Vuelvo pronto— nos indico saliendo de la cancha, su expresión era seria.

—¿Qué le hiciste? — me acusó Ryoga.

—¿Yo? — le expresé confundido.

—Si, tú— me miro amenazante —explícame como justo después de que fue a buscarte Sakuno regresa a la cancha molesta, casi me mata en el partido de práctica, no viste ese smash por un momento pensé que me golpearía en la cara con una pelota— me dijo irritado.

—No se lo que le pasa— le conteste sin entender —Iré a esperarla fuera del camerino ¿puedes cuidar a las gemelas? Sakuno y yo llegaremos al hotel— le indique entregándole el bolso con las cosas de Sora y Natsumi.

—Andrew y Paul los estarán esperando en la salida— indicó Will dándome permiso.

Asentí.

—Ryoma, no se te ocurra pelear con ella el partido es mañana— me recordó Ryoga con tono amenazante.

—No tengo intenciones de pelear con ella— le respondí tajante.

Me acerque a las gemelas dándoles un ultimo vistazo mientras dormían, camine hacia el camerino sentándome en una banca fuera esperando a Sakuno que saliera. Al hacerlo ella me miro sorprendida, pero con seriedad.

—¿Sora y Natsumi? — me consultó.

—Con Ryoga y Will— le indique calmado.

—No deberías dejarlas con ellos, son nuestra responsabilidad— me reprendió.

—Lo sé, pero quiero que me cuentes que te pasa— le solicite tomándola de la mano mirándola con fijeza jalándola para que caminara junto a mí.

Ella me ignoro dirigiéndose a la salida del campus deportivo, subimos al auto y no me dirigió la palabra en todo el trayecto. Sabia que estaba enojada conmigo, pero no tenia ni la menor idea de que la había molestado tanto.

Subimos a la habitación y al cerrar la puerta se volvió hacia mí con seriedad —¿Qué hablabas con Webster? — me exigió.

—Solo me tropecé con ella y me dijo que esperaba que volviera pronto a los torneos— le respondí con rapidez.

—No sabia que mis entrenamientos te aburrían como para ir a darte una vuelta— me acuso.

—¿De dónde sacas que me aburro mirándote entrenar? — pregunté sin entenderla.

—Pues te veías muy contento hablando con Tara Webster y no te culpo es bastante bonita, solo que es mayor que tú por 3 años— me acusó.

Yo no lo pude evitar me reí por lo bajo Sakuno estaba con un ataque de celos era divertido verla.

—¿De qué te ríes? Acaso te parece divertido que andes coqueteando con las chicas del torneo— me riñó amenazante —eres libre de escoger a cualquiera de ellas cuando quieras, no sabía que querías estar con una chica mayor— me indicó dándome la espalda.

Jale a Sakuno del brazo colocándola frente a mi para pegarla a mi pecho, rodeándola por la cintura.

—Suéltame— me intento apartar enojada —no quiero que me abraces— me intento empujar.

—El ser más alto que tú me conviene— me le expresé con calma— Escucha ¿Cuándo vas a entender que eres la única chica que llama mi atención? — le dije con un poco de seriedad levantando su rostro para que me mirara a los ojos. —Prácticamente di mi vida por ti y aun piensas que te cambiaría por alguien más— bromeé haciéndome el dolido.

Sakuno guardo silencio agachando la mirada entristecida escondiéndose en mi pecho—¡Uy! Se me paso la mano— pensé.

—Lo siento— se disculpó con tristeza.

—No tienes que disculparte, no debí decir eso, lo lamento— tome su rostro entre mis manos besándola con ternura.

Al separarme de ella me observo con fijeza —sabes tienes razón en lo que dices me has demostrado que me amas de muchas formas y aun así yo sigo siendo insegura, pero es que tú puedes a escoger a cualquier chica— susurro.

—Pero solo tu eres la que quiero en mi vida— la interrumpí volviéndola a besar.

—Ryoma lamento haberte acusado, pero te veías muy cómodo hablando con Tara y ella es sumamente bonita, además de simpática— me dijo decaída.

—Saku, solo hable con ella porque se tropezó conmigo, de hecho, si no hubieras llegado ni siquiera hubiera sabido su nombre— me reí —estoy tan pendiente de ti que ni me moleste en saber quien era, además ella me dio información de las chicas que te lastimaron y descubrir quienes fueron es lo que más me importa en este momento— le explique con delicadeza.

—¿Cómo sabias que Tara podía saber algo? — me preguntó Sakuno curiosa jalándome al sillón.

Le conté a Sakuno con detalle todo lo que había pasado desde que escuché a las dos chicas hablar cerca de la cancha.

—Así que Tara también a sido molestada por ellas ¿será que las dos nos podemos unir para terminar con esto? — me indico Sakuno pensativa.

—Creo que, si es posible, lo bueno es que ahora tenemos los nombres es más fácil de dar con ellas— la anime.

—Sabes se me esta ocurriendo una idea, que te parece si mañana me dejas sola un momento en el camerino, ya sabes que partir de mañana tendré un camerino para mi sola y es probable que Danna y Brithanny vayan a buscarme de esa manera las grabare cuando me amenacen o intenten hacerme algo, con eso ya tendríamos pruebas— me explico Sakuno su plan, mi piel se erizó con solo imaginarlo.

—Por supuesto que no te pondré en riesgo, sabes que si te pasa algo yo no puedo soportarlo, Sakuno es una mala idea, Tara me advirtió que no me metiera con ellas así que tu no las busques y no te pongas en riesgo, prométemelo— me levante del sofá mirándola a los ojos sintiéndome ansioso y preocupado.

Sakuno noto mi cambio de estado de animo por lo que se levanto de su sitio abrazándome con fuerza —Lo siento es una mala idea, no te preocupes dejaremos que Ryoga logre solucionar todo— me tranquilizo.

—Prométeme que no harás nada Saku, por favor— le rogué.

—Te lo prometo cariño, no te preocupes— me dijo acariciando mi cabeza logrando que me calmara.

Al día siguiente Sakuno y yo nos encontrábamos en el complejo esperando que Sakuno fuera dirigida al camerino asignado, me sentía feliz que me permitieran estar con ella antes del partido, eso me hacia sentir seguro de que no le pasaría nada.

Uno de los miembros del staff nos llevo al camerino, Will y Ryoga nos dejaron solos mientras afinaban algunos detalles con la prensa. Sakuno entro al cuarto de baño cambiándose a su conjunto deportivo, al salir la observe deslumbrante se veía demasiado hermosa con su falda rosada y su camiseta sin mangas blanca con detalles en rosado me recordaba mucho el conjunto de primer año del club de tenis femenino.

—Te vez hermosa— le expresé con cariño.

—Gracias— me susurro sonrojada quitando a Sora de mis brazos cargándola, Natsumi se encontraba dormida en la carriola.

Permanecimos en silencio por unos instantes escuchando voces en el pasillo.

—No creo que Ryuzaki este sola— comentó una de las voces.

—Tendríamos mucha suerte si fuera así— expresó la otra.

Sakuno me observo suplicante por unos momentos. Yo ya sabía lo que tenía en mente.

—Ni se te ocurra— le susurre.

—Ryoma estaré bien, tu estarás cerca para defenderme en cualquier momento, pero es la única forma de tener pruebas— me suplicó colocando a Sora en la carriola.

Negue con la cabeza.

—Por favor— insistió — deja a las niñas conmigo— me pidió —entra en el cuarto de baño, no cierres del todo la puerta— me indicó colocando su celular en una repisa.

—No lo hare— le dije tajante y en vos baja.

Sakuno con obstinación me jalo del brazo indicándome que no estaba a discusión, sin ganas le hice caso.

—Hey Ryuzaki ¿puedes salir un momento? — la llamaron las chicas.

—¿Quiénes son? — preguntó Sakuno con seguridad.

—Somos tus amigas— respondieron, que chistosas pensé enfadado para mis adentros.

Narrado por Sakuno:

Moví la carriola al fondo cerca de la posición de Ryoma y sin impedirle el paso para aproximarme a la puerta abriéndola con suavidad. Observe con atención a las dos chicas frente a mí reconociéndolas de inmediato.

—Vaya no esperábamos encontrarte sola ¿acaso ya espantaste a Echizen? — me dijo una de ellas con una sonrisa victoriosa.

—Seguramente está buscando algo más entretenido que ver, lástima que esa entretención no somos nosotras— expresó la otra chica con malicia.

Le sonreí levemente —es probable— le contesté sin interés —aunque sé que no encontrara nada interesante por lo que pronto volverá a mí— les dije con arrogancia provocándolas.

Narrado por Ryoma:

Me sentí un poco nervioso con la conversación no sabía que tramaba Sakuno haciéndolas enojar. Estaba listo para salir ayudarla en cualquier momento, no dejaría que la lastimaran.

Narrado por Sakuno:

—Te crees tan bonita como para estar con Echizen por siempre, que infantil eres, él se puede aburrir en cualquier momento y hay muchas chicas en el mercado mejor que tu— me dijo con arrogancia.

—Pueden pensar lo que quieran, al final la que esta con Ryoma soy yo y como se los dije la última vez ustedes son bastante mayores para que estén tras de un adolescente— expresé tranquila.

—Deberías callarte o quieres que te recordemos como te hiciste esa cortada en el hombro— me señalo la pequeña cicatriz en mi hombro.

—Aunque sabes que sería más divertido ves que harías si le ponemos un dedo a una de tus hijas— me amenazó una de las chicas.

—Fuera de mi camerino, si no vinieron a decir nada productivo les sugiero que se vayan— les señale la puerta tajante, me sentía bastante nerviosa.

Una de las chicas se acercó a mi empujándome con fuerza por lo que caí al suelo chocando contra la banca y torciendo levemente mi tobillo, el mismo que había sido lastimado por querer sostener a Ryoma. La otra se acercó a las gemelas tomando a Sora en brazos con un poco de rudeza me levante de un salto, pero al comenzar el llanto desesperado de Sora Ryoma salió del cuarto de baño furioso.

—Dame a mi hija en este momento— dijo con rudeza mirando a ambas chicas con enfado.

—Echizen hola, solo queríamos ver a tus pequeñas— se defendió una de las chicas.

—Me creen idiota o que, dame a mi hija ahora— indicó Ryoma con fuerza y enojo.

La chica le entrego a Sora, Ryoma me la paso con calma acercándose de nuevo a las chicas.

—No las quiero volver a ver molestando a Sakuno o a cualquier otra tenista, si lo hacen me encargare de que no vuelvan a jugar profesionalmente, además no quiero escucharlas decir que Sakuno es poca cosa para mí, porque eso no es cierto y ustedes dos no le llegan ni a los talanes además que no son de mi tipo ni de mi interés, nunca saldría con ustedes— les dijo con frialdad —largo de aquí no quiero volver a verlas— las guio a la puerta.

Ambas chicas no dijeron nada solo lo miraron molestas saliendo del camerino. Ryoma se volvió hacia mí mirándome molesto, se sentó en la banca con lentitud intentado controlar sus respiraciones, note el leve temblor en sus manos.

—¿Estas bien? — me pregunto agitado sin mirarme.

—Sí— le dije sin mencionarle el leve dolor en mi tobillo.

—Sora ¿está bien? — consultó colocando su cabeza entre sus manos, eso me alerto que él no estaba bien.

—Está bien— le respondí colocándola en carriola.

Me senté junto a Ryoma tomando una de sus manos, pero él la aparto.

—Ryoma ¿Qué sucede? — le pregunté preocupada.

Narrado por Ryoma:

—En este momento estoy molesto contigo— le indique con suavidad —sabes que estas situaciones me generan mucho estrés y sabes que no puedo controlar la ansiedad cuando están en peligro, porque soy débil ni siquiera sé cómo logro defenderlas cuando mi mente se bloquea, te pusiste en peligro, las pusiste en peligro a ellas, me pones vulnerable— expresé sintiéndome frágil. —Lo lamento Sakuno por ser débil y frag...—

Sakuno no me dejo continuar se lanzó contra mi quedando a horcajadas besándome con pasión y abrazándome con fuerza, provocándome un choque entre lo que sentía y lo que quería sentir, por supuesto le correspondí el beso apegándola más a mi cuerpo, Sakuno provoco que la ansiedad se fuera de golpe y el enojo también, pero necesitaba separarla de mí.

—Saku detente— le pedí con sutileza, separándome con suavidad de ella.

Sakuno se separó de mi observándome con tristeza —lamento hacerte sentir mal, de verdad lo siento, pero era necesario para tener las pruebas— me expreso realmente dolida —Se que estas molesto conmigo, pero no quiero que me evites eso realmente duele— me dijo con un hilo de voz.

La abrace con fuerza ocultando mi rostro en su hombro oliendo su delicado perfume a vainilla.

—Solo déjame recuperarme y tú tienes que concentrarte en el partido— le susurré al oído sentándola junto a mí antes de que Ryoga, Will o Amber entraran al camerino y mal interpretaran la situación.

Sakuno se levantó de la banca para tomar su bulto deportivo pude notar el pequeño hematoma que comenzaba a formarse en su pierna. Me levante junto a ella para guiarla de nuevo a la banca y poder revisarla con atención.

—Estas golpeada ¿te duele? — le pregunté preocupado.

—Mmm no en realidad, solo es una pequeña molestia, con un poco de spray antinflamatorio estaré bien— me respondió con una sonrisa sacando el spray del bulto colocándolo en mi mano para volverse a sentar.

Le coloque el spray no muy convencido y preocupado de que Sakuno se lesionara en el partido a causa de la caída.

—Estoy lista para jugar, ganare este he iré a la semifinal— me indico con seguridad.

—Se que lo harás— la anime besando su mejilla.

El partido de cuartos de final de Sakuno tenía una hora de haber iniciado, Sakuno estaba jugando asombroso había logrado anotar 6 Ases en su primer set el cual fue ganado por ella, ahora en el segundo set la estaba pasando mal dado que su competidora la estaba haciendo correr por toda la cancha por lo que los errores en las jugadas de Sakuno incrementaban dado al cansancio. Llegaron al descanso por lo que Sakuno se sentó en la banca tomando de una bebida hidratante, luego volteo hacia mi mirándome por un momento, ella sonrió tomando su raqueta colocándose en la línea de saque, era su turno para servir.

Sakuno lanzó la pelota al aire anotando un As, sus saques estaban siendo bastante potentes si lo pensaba con detenimiento de jugar contra ella como me lo había pedio ese servicio sería bastante peligroso, debía entrenar bastante para poder alcanzarla. Por un momento sentí un poco de nostalgia por no estar en el torneo.

—Pronto estarás ahí— me dijo Will como si hubiera leído mis pensamientos.

Lo observe sorprendido.

—Se nota lo que piensas Ryoma, estas ansioso por el partido y sé que te gustaría estar en la cancha, si todo está bien al regresar comenzaremos a entrenar, aunque sabes que será gradual— me expresó con calma.

—Ya quiero volver a la cancha— le respondí un poco emocionado.

Sakuno realizó una jugada sorprendente de saque y volea anotando el punto justo en la esquina contraria, logrando darle vuelta al marcador. Sakuno estaba a dos juegos de ganar el set y el partido, estaba muy emocionado de que ella pasara a las semifinales estaba muy cerca de ganar el Open de Australia y eso sería asombroso.

La pelota paso de un lado al otro, Alexandra Meyer había puesto a correr a Sakuno por toda la cancha de nuevo. Sakuno no se daba por vencida regresándole todos los tiros difíciles y mal intencionados, si Sakuno anotaba el punto seria la ganadora del partido. Alexandra envió la pelota a la esquina izquierda, Sakuno la devolvió a duras penas con un globo por lo que Alexandra lanzó un smash Sakuno corrió hacia la pelota lanzándola al lado contrario de la cancha anotando el punto justo en la línea, pero al anotar el punto y el movimiento brusco que hizo para alcanzar la pelota hizo que ella se resbalara doblando su tobillo, me puse de pie de inmediato al escucharla quejarse y ver a Amber entrar con rapidez en la cancha.

—No puede ser— dije preocupado acercándome a la valla para entrar a la cancha.

—No puedes entrar— me recordó tomándome del brazo.

Me sentí un poco desesperado de no poder entrar a la cancha porque sabía que Sakuno no estaba bien y lo que más me molestaba era que ella había pasado a la semifinal, pero no era seguro que pudiera jugar y de hacerlo no era muy probable que ganara con una lesión.

Narrado por Sakuno:

Me dolía demasiado el tobillo tanto que las lágrimas me invadieron además de la frustración que sentía por haberme lesionado a pesar de haber ganado el partido. La caída en realidad no había sido grave, pero por el golpe que había tenido antes del partido y por todo el agotamiento p correr tanto tiempo tras la pelota me habían debilitado las piernas por lo que no pude detener la carrera como era debido. Ahora me encontraba en el suelo con un raspón en la rodilla y llorando con desesperación. Amber estuvo junto a mí de inmediato con los asistentes del torneo.

—Sakuno tranquila— me intento calmar comenzando a quitarme el tenis y el calcetín sabía que Amber se molestaría al ver mi tobillo.

—Lo siento— le susurre.

Ella me miro sin entender, pero al quitar el calcetín quedo al descubierto el vendaje —¿te has estado vendando desde el inicio del torneo? ¿estas mal desde la caída con Ryoma? — me preguntó con apuro.

Yo negué.

—¿Desde cuándo? — consultó esta vez con tono autoritario.

—Antes del partido— solloce, por lo que Amber me paso una toalla para secarme el rostro.

—Amber dejemos las preguntas para después— le pidió Ryoga no me había dado cuenta que estaba junto a mí —Saku debes calmarte— me dijo entregándome una botella de agua por lo que tome un sorbo sin poder detener las lágrimas.

Amber se olvidó de las preguntas quitando el vendaje observando la inflamación del tobillo.

—Por favor podrian pedir transporte para llevarla a la clínica, es indispensable hacer placas— pidió Amber con amabilidad al staff—Saku, estarás bien— me dijo con tono maternal al ver que yo no paraba de llorar.

Narrado por Ryoma:

—Will— lo llame —necesito salir de aquí y estar con Sakuno— le pedí con suplica, comenzaba a desesperarme al ver a Sakuno llorar derrotada.

Will asintió empujando la carriola, guiándome al pasillo para caminar a la salida de la cancha, en ese momento el celular de Will comenzó a sonar.

Narrado por Willam:

—Hola— respondí.

—¿Dónde están? Debemos ir a la clínica— me contestó Ryoga con seriedad y preocupación.

—Me lo imagine, nosotros estamos saliendo creo que los veremos allá— le dije con calma.

—No estoy muy seguro de que hacer y es mi culpa que ella este mal— susurro Ryoga decaído.

—Sabes que estas cosas pueden pasar, ahora solo debes calmar a Sakuno y pensar en su bienestar, no te preocupes por la prensa al llegar a la clínica yo te ayudare— lo anime, sabia que Ryoga estaba nervioso porque, aunque es excelente en su trabajo aun le faltaba experiencia por eso estaba yo ahí para guiarlo, además que Ryoma no puede viajar sin su representante en cualquier momento puede hacer una estupidez con la prensa.

—Gracias Will por tu apoyo— me dijo con seguridad —¿Cómo esta Ryoma? — me preguntó.

—Ya sabes que estas situaciones no se le dan bien, quiere estar con Sakuno, pero debemos cumplir las reglas— le explique con tranquilidad.

—Dale el teléfono, pídele que hable con Sakuno se que es la manera más sencilla de calmarla— me pidió.

—Muy buena idea— le respondí orgulloso —Ryoma— lo llame entregándole el teléfono —No podemos estar aun con Sakuno, pero puedes hablar con ella— le explique al ver su cara de desconcierto y al escucharme note levemente el alivio en su cara.

Narrado por Sakuno:

Ryoga toco mi hombro entregándome su celular, lo observe sin entender sollozando.

—Es Ryoma esta preocupado por ti— me dijo con una leve sonrisa.

Coloque el teléfono en mi oído —hola— hable con la voz quebrada.

—Hola pequeña, no deberías llorar cuando acabas de ganar un partido— me comentó con cariño.

—Pero no... no creo p...poder jugar el o...otro— le conteste sollozando.

—¿Y eso que? Si he aprendido algo ahora que estoy fuera de la cancha es que hay más torneos pequeña y podemos ganar todos los títulos que queramos, este año vamos a ganar están juntos en la cancha— me animo con dulzura logrando que me sintiera mejor.

—Gracias por animarme— le agradecí —esto duele mucho— le exprese con angustia.

—Lo sé bonita, pero no te preocupes por la lesión pronto estarás bien, además si sigues llorando no te verás linda en los periódicos— se río con suavidad.

Me ríe con él. —¿Dónde estás? — le pregunté mas tranquila y limpiando mi rostro.

—Entrando al auto, pronto estaré a tu lado ¿y tú? ¿ya llegaste a la clínica? — me contestó.

—Estamos apunto de llegar, me prometes que estarás tranquilo— le pedí preocupada por su ansiedad.

—Lo estoy y lo estaré solo concéntrate en ti— me respondí seguro.

—Nos vemos en un rato cariño— me despedí.

—Nos vemos bonita— se despidió.

Narrado por Ryoma:

Le entregue el celular a Will respirando profundo subiendo al auto recibiendo a las gemelas para sentarlas en su silla del auto. Cuando el auto entro en marcha Will me miro con atención.

—Me alegra verte tranquilo— me felicitó.

—No lo estoy— le respondí dándole el biberón a Natsumi y arropando a Sora.

—Es...— indagó.

—No no lo es, si estoy ansioso, pero lo que me esta matando es la preocupación, Sakuno no solo estaba llorando por el dolor, si no que ella se siente mal porque sabe que es muy probable que no pueda jugar en la semifinal, ella estaba brillando y ahora quedara fuera del torneo, pero tu y Ryoga mostraran la verdad sobre lo que Sakuno a estado viviendo en el torneo— le dije pasándole el video tomado antes del partido a su celular —Mira lo que te envié, espero que las alejes lo más que puedas Sakuno— le pedí tajante.

—Ryoma, esto es excelente, aunque fue muy arriesgado— me regaño.

—No fue mi idea, fue de Sakuno y gracias a eso esta lesionada— le expresé con sequedad.

Teníamos rato de haber llegado a la clínica y aun no nos daban noticias de Sakuno, hasta 10 minutos después Amber se acerco a nosotros en la sala de espera, me levante de un salto aproximándome hacia ella desesperado porque me dijera algo.

—Vamos Sakuno te esta esperando, Will te encargas de los periodistas Ryoga está hablando con los directivos del torneo— nos dijo con seriedad.

—Eso quiere decir que la lesión es grave— expresé desanimado.

—Sakuno tiene un esguince es grado 1 lo que no es tan grave dado que con la terapia adecuada y el descanso suficiente podría jugar, el problema en sí seria que el tobillo se comprometa de nuevo a un impacto o torcedura donde se pueda generar un esguince mucho mayor sacándola de la cancha por más tiempo— explicó Amber con seriedad.

—¿De cuánto tiempo hablamos? — le pregunté sabiendo que era probable que Sakuno quisiera continuar con el torneo.

—De incrementarse la lesión podría estar fuera de 1 mes hasta los 6 meses dependiendo la gravedad y la afectación— me respondió mirándome con atención.

—En ese caso no vale la pena continuar— expresé.

—Ese es tu pensar, pero ella quiere continuar— me indico Amber con sutileza —además si fueras tú sé que también estarías pensando en jugar— comento mirándome con fijeza.

—Tal vez, pero Sakuno no tiene que ser como yo— le conteste sintiéndome un poco molesto de que estuvieran considerando la posibilidad de jugar.

Camine a la habitación de Sakuno empujando el carrito de las gemelas, al llegar entre dejando a las gemelas cerca de la cama de Sakuno, note como ella me observaba con atención.

—Me alegra verte— me dijo con voz alegre.

—Me alegra que estés tranquila, me preocupe mucho— me acerque a ella tomando su mano —Sakuno no jugaras más en este torneo — manifesté con seriedad.

—Si lo haré la lesión no me lo impide— me contradijo.

La observe molesto manteniéndome en silencio al ver a Ryoga entrar a la habitación.

—Saku ¿Cómo te sientes? — preguntó Ryoga relajado.

—Mucho mejor— le respondió Sakuno con delicadeza. —Saku, como tu entrenador creo que debes retirarte, la semifinal será un partido muy intenso y estas en desventaja, además que podrías lastimarte mucho más y pronto será la final de tenis de preparatoria— le aconsejó.

—Ryoga he entrenado mucho para estar aquí y se que puedo ganar— alegó Sakuno con seguridad.

Me sentía tan enojado con Sakuno —Ryoga sal de la habitación — le ordene guiándolo a la salida con la carriola de las gemelas.

—Alto Ryoma ¿qué harás? — me exigió saber.

Cerré la puerta para que no me interrumpiera note como Sakuno me miraba retadora, yo estaba demasiado enfadado con ella y su terquedad.

—Sakuno deberías obedecer a Ryoga y no jugar, no puedes exponerte de esa manera— intente de hablar tranquilo.

—Ryoma no te estoy pidiendo permiso para seguir, yo estoy en el torneo y se lo que debo hacer— me respondí tajante.

Ya no pude contener mi enojo —Te he apoyado en cada una de tus decisiones durante el torneo, pero el que juegues es una locura puedes recuperarte de la lesión y regresar con todo en el próximo torneo, te lo digo yo estar lesionado por mucho tiempo no es divertido y se vuelve mas complicado el poder retomar— le pedí siendo un poco rudo con ella por lo que Sakuno cambio su rostro a uno enojado.

—Estoy cansada Ryoma de que me creas débil, yo se lo que hago y se que puedo jugar sin problema— me gritó irritada.

—Solo lo hago por tu bien, no haría algo que te lastime, pero a ti no te importa tu bienestar la lesión te la causaste por no escucharme, te dije que no enfrentaras a esas chicas, pero no tenias que ponerte en peligro— declaré enfurecido.

—Tu tampoco escuchas cuando te pido que no te pongas en peligro y vienes a exigirme que yo no lo haga— me recordó sin dejar de gritarme —Ryoma voy a jugar, aunque tu no quieras— pronunció tajante.

—Solo te estoy pidiendo que por esta vez no lo hagas— intente hablar sereno.

—Yo quiero ganar el torneo— susurró.

—Lo puedes hacer luego, puedes ganar el Roland Garros, de verdad ya disté lo mejor de ti en este torneo, por favor no juegues— le pedí tomando su mano con suavidad.

—Ryoma lo lamento voy a jugar— me dijo con delicadeza.

Me enfurecí tanto con su decisión que actúe por impulso hablando sin pensar —en ese caso Sora, Natsumi y yo no veremos como te terminas de lesionar— expresé con frialdad acercándome a la salida.

—Ryoma no es justo— balbuceo con tristeza.

—Pues deberías pensar mejor las cosas— zanjé saliendo de la habitación enfurecido.

—Ryoma ¿a dónde vas? — me preguntó Ryoga con apuro.

—Necesito un momento a solas— le indique caminado a la salida de la clínica.

—10 minutos Natsumi y Sora están a tu cuidado— me recordó con autoridad.

—Lo sé— le respondí.

Narrado por Sakuno:

Me sentí muy triste por la amenaza de Ryoma, yo sentía que el pensaba que yo no era capaz para ganar la semifinal solo por una pequeña lesión, me sentía tan mal de que él se fuera que las lagrimas me invadieron.

Amber entro en la habitación observándome con atención —supongo que esas lágrimas son porque Ryoma y tu discutieron, los gritos se escuchaban desde mi consultorio— me dijo con calma.

—Lo siento— susurré.

—Sakuno creo que esta vez deberías escuchar a Ryoma, además deberías entenderlo él se preocupa mucho por ti y él sabe que no es prudente que juegues, aunque eso no quita que fuera muy grosero de su parte que te amenazara con irse, pero tu conoces a Ryoma mejor que yo y sabes que él actúa por impulso— me animo Amber.

—Pero yo quiero jugar y se que puedo hacerlo— le respondí a Amber limpiando mi rostro.

—Mira como te explique hace un rato, yo podría darte algo para el dolor, podría hacerte terapia durante estos dos días de descanso, pero eso no quita que tu lesión no es tan leve como piensas, un esguince tarda de 5 a 7 días en sanar y el partido es en 2 por lo que no estarás recuperada y el impacto repetitivo al correr lesionara más el tobillo, Sakuno podrías hasta fracturarte— me explicó serena —por otro lado, no es justo para el publico que decidas jugar y te retires a la mitad o minutos después de haber comenzado— me hablo con seriedad.

—Pero esta es mi oportunidad de llegar más alto— insistí pensando que era una lástima el tener que retírame.

—Saku, yo no lo recomiendo, te quedan dos contratos de modelaje, uno de ellos es con Ryoma no seria bueno que se presenten enojados sabes que a Ryoma no se le pasara rápido lo que siente, además esta situación no lo ayuda y a ti tampoco te ayuda ¿Cómo pretendes jugar desanimada si él realmente se va sin ti? — me hizo analizar.

—Si Ryoma se va quiere decir que no le importo tanto como creo porque él debería apoyar mi decisión— expresé decaída.

—Crees que esta bien que él se quede a ver como te haces daño ¿estás segura? — me preguntó mirándome expectante.

—Yo he tenido que hacerlo más de una vez ¿Por qué no puede hacerlo por mí? — respondí irritada.

—En eso tienes razón, deberías hablar con él y ponerle tu punto de vista, aunque eso no quiere decir que estés bien para jugar, sabes deberías llamar a Cambell y preguntarle si estará bien comprometer a Ryoma de esa forma, no creo que tu quieras hacerle daño y es muy probable que Ryoma no quiera ver él partido porque se siente vulnerable al verte lastimada— expresó tranquila.

Asentí con su respuesta.

—Descansa un rato, por hoy te quedaras en la clínica, yo debo ir a buscar a Ryoma, Will y Ryoga están preocupados que ande solo con los periodistas tan cerca— me informó colocando un medicamento en el suero.

—¿Se fue con las niñas? — pregunté preocupada sabia que le estaba generando mucho estrés a Ryoma y lo estaba colocando en una situación difícil.

Narrado por Ryoma:

Al llegar a la salida observé que la entrada estaba invadida de periodistas por lo que di la vuelta para regresar dentro, necesitaba respirar aire puro me sentía demasiado abrumado y molesto no quería volver junto a Sakuno, no podía comprender su necedad en querer jugar para lastimarse más.

Camine por uno de los pasillos encontrándome con un enfermero de la sala de emergencias.

—Hola ¿necesitas ayuda? — me preguntó con amabilidad —Eres Ryoma Echizen, tu tenis es sorprendente— expresó con emoción de verme —disculpa que te moleste ¿podrías darme un autógrafo? — me solicitó esperanzado mostrándome una libreta y un bolígrafo.

—De acuerdo, pero deberás ayudarme a ir a un lugar tranquilo o salir de la clínica— le pedí a cambio tomando la libreta y el bolígrafo.

Le devolví la libreta con el autógrafo esperando que me ayudara a desaparecerme por un rato.

—No puedo dejar que salgas del hospital, la señorita Amber dio la orden de mantenerte dentro de las instalaciones, pero te puedo llevar a la azotea, nadie podrá molestarte ahí porque solo el personal tenemos autorizado subir, supongo que la señorita Amber tardara en encontrarte por lo que tendrás un poco de tiempo— me informo con calma y sinceridad.

—Llévame— le pedí sintiéndome molesto con que Amber fuera tan astuta como para no dejarme salir del hospital, ella me conocía bastante bien.

Después de subir en el ascensor y llegar al piso 17 el enfermero abrió la puerta con su tarjeta dejándome pasar, puedes salir si oprimes este botón me mostro un botón verde en la puerta.

—Gracias— le agradecí al observar el amplió lugar donde comenzaba a verse el atardecer.

—¿Estarás bien? — me preguntó.

—Sí no te preocupes solo quiero respirar aire fresco— le dije con calma, él sonrió dejándome solo.

Me acerqué a la maya de seguridad observando la vista de la ciudad, era realmente increíble, comencé a sentirme mejor con el pasar de los minutos, me senté en la banca cerca de mí respirando profundo, de pronto mi teléfono comenzó a sonar en mi bolsillo lo saqué molesto pensando en apagarlo, pero al ver que era Cambell sabia que era mala idea si no le respondía.

—Hola— respondí sin ganas.

—¿Dónde estás? — me preguntó alterado.

—No te lo diré, quiero estar solo un momento y si te digo la paz se acabará— le contesté con sequedad.

—Ryoma, no debes estar solo ¿Por qué no estas con Sakuno? Supuse que estarías con ella después de que se lastimo— consultó preocupado.

—Estoy molesto con ella y por ahora no quiero hablarle— respondí tajante.

—¿Puedes decirme que paso? Estaban muy bien después del paseo ¿Por qué te enojarías con ella como para no querer verla o hablarle? — cuestiono.

—Ella no comprende lo que siento y sigue buscando la forma de lastimarse sin enterarse que cada vez que a ella le pasa algo yo me siento mal, me canse de sentirme así y de estar diciéndole que por favor se detenga de hacer cosas impulsivas— explique enfado.

—¿Explícate mejor? — me pidió confundido.

Le conté lo que había pasado en la tarde y lo que había sentido, luego le conté la discusión con Sakuno por querer jugar lesionada.

—Ahora todo tiene sentido, Ryoma estas siendo muy duro con Sakuno debes ponerte en su lugar, piensa ¿qué harías tu si tuvieras la pequeña posibilidad de jugar, aunque estés lesionado? lo abandonarías por petición de Sakuno— me preguntó con seriedad.

—Probablemente jugaría, pero si yo supiera que mi decisión la afectaría no lo haría, nunca haría algo que la lastimara— le contesté con frialdad.

—¿Seguro? ¿Cómo crees que se siente Sakuno cuando te ha visto jugar lesionado? — me preguntó poniéndome a pensar mejor la situación.

Me quede en silencio por un rato al darme cuenta que yo muy pocas veces la escuchaba o hacia lo que ella me pedía, normalmente podía el tenis antes que sus sentimientos.

—Ok tienes razón— acepte —pero como pretendes que la vea jugar si me voy a sentir ansioso o mal al verla sufrir en el partido, esa lesión de Sakuno no es leve— le exprese no sintiéndome capaz de verla jugar con dolor.

—¿Qué crees que es mejor ver el partido y estar cerca para apoyarla o estar en el hotel y verlo en televisión? ¿Dónde te sentirías más seguro? — me preguntó analítico.

Suspire sintiéndome acorralado —no lo sé, en este momento lo sé— respondí abatido y nervioso.

—Ryoma, respira profundo, aún tienes dos días para pensarlo, por hoy creo que no es prudente que hables con Sakuno, se que estas molesto y no es bueno que hables con ella si no estas tranquilo podrías lastimarla, ve al hotel encárgate de las gemelas, toma el medicamento lo vas a necesitar y si no te sientes bien durante la noche llámame, mañana a primera hora podrás estar en la clínica junto a Sakuno y hablar con ella— me pidió con autoridad.

—No quiero tomar el medicamento, busca otra manera— le sugerí al pensar que no me haría bien tomarlo.

—De acuerdo no tomaras el medicamento por hoy, debes seguir el rol de medicamentos que llevamos hasta el momento, no cambies nada— aceptó no muy convencido —lo que haremos será lo siguiente vas a llegar al hotel cenaras bien, juega con las gemelas atiéndelas cuando ellas estén dormidas te tomaras un rato para estar solo, tomaras una ducha y si tienes algún video juego puedes jugar por una hora luego iras a la cama debes dormir 8 horas no menos de eso, tienes prohibido infórmate sobre la lesión de Sakuno no busques posibles complicaciones porque no te ayuda, mañana podrás hablar con ella sin discutir eso te afecta a ti y la afectas a ella, te llamare por la tarde para ver como estas— me ordenó con sequedad.

—De acuerdo— acepté.

—Vuelve con los demás informales que debes volver al hotel, yo hablare con Will— me indicó.

—Déjame estar un poco más aquí— le pedí con suplica.

—10 minutos— expresó serio —estaremos en contacto, cualquier situación me llamas— recordó con autoridad.

—Adiós— respondí terminando la llamada, observando por un momento mas la vista al sentirme tranquilo decidí bajar con los demás obedecería a Cambell para intentar estar bien para apoyar la locura de Sakuno. 

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Hola a todos!!! 

Lamento mucho la tardanza les deseo un feliz año nuevo, espero que disfruten el capitulo.