Aquel manto nocturno testigo de incontables sucesos en aquella misteriosa y sombría noche, lamentablemente hay secretos que deben estar ocultos.

Correr era lo único que podía hacer, como si pedendiera de eso, bueno eso hace su vida depende de sus piernas, pero ya no tenía fuerzas.. Ya no podía correr más..

Diro a la derecha una mala pisada lo hizo perder el equilibrio dándose un fuerte golpe con el concretó, lo que faltaba, se doblo el tobillo.

A lo lejos escucho como un eco, como si alguien o algo, golpeara un barra de metal contra todo lo que toca, aquel ruido lo alarmó demasiado, se paro no le importo su tobillo, tenía que salir de ahí y llegar al lugar donde había más gente o por lo menos encontrar a alguien quien lo ayude.

-Te encontré~ - escucho mientras el sonido del eco también se detenía - por que quieres irte? Apenas comenzamos -

Recibió un disparo en la pierna, el arma no había emitido sonido alguno debido al silenciador, ese maldito estaba preparado para todo, trató de escapar mientras se arrastraba dejando un camino de sangre.

-por que huyes? Acaso es por mi? Jejeje pero te vas divertir! Te lo aseguro~ podría decir que casi cae por ese toque de inocencia falsa, pero en la forma de como lo miraba... Prefería ir al infierno que tenerlo al frente suyo...

Aquellos gritos de dolor tragos por aquella mocosidad Rojiza, sollozos con ganas de ser escuchados fueron sellados por aquel material, ojos con muestra de vitalidad fueron arrancados ante la vista del mismo demonio.

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El sol se empezaba a notar, el cielo rojizo combinado con el celeste de la mañana, mientras alguien dormía plácidamente, unas voces se escuchaban al otro lado.

-Esta despierto? - pregunto en voz baja pero emocionado el menor de todos quien daba pequeños saltitos para ver atravez de la puerta.

-No aún no, es nuestra oportunidad de sorprenderlo - habló el oji azul viendo atravez de la puerta como su hermano dormía.

-Quieres apresurar te? Fusion no cargarse esto para siempre sabias? - se quejo en voz baja el mayor era el quien trai el pastel, su madre tuvo que salir recientemente a su trabajo debido a una emergencia, ser enfermera no es fácil.

-Que no me digas fusion! estúpida col - se quejo el oji azul en voz baja, el oji carmín ladeo la cabeza, esto suele ser cansado algunas veces.

-a mi no me digas así recuerda que soy mayor que tu y me debes respetar - frunció el ceño, esto no es bueno...

-Lo haré cuando tu dejes de fastidiarme con mi nombre! Ya deberías saberte lo! - se quejo alzando ya un poco la voz, ah caray..

-chicos.. -

-Pues con gusto la haría.. O tal vez no? Te vez adorable cuando es tallas fusion, hasta diría que eres igual a un dulce monito - se rio levemente, por un momento se le vio las mejillas rosadas al oji azul, pero desaparecio cuando oyó el apodo, de nuevo.

-chicos...

-Hasta cuando me seguirás comparando con un mono! Y deja en paz mi nombre! - ahora si alzó la voz, un poco más y todo el vecindario se entera de la pelea.

-No creen que es muy temprano para pelear? -aquella voz los congeló por completo, lo habían despertado.

Inmediatamente escondieron el pastel entre todos, y miraron al mayor quien estaba en la puerta de su habitación con una playera negra y unos shorts azul oscuro, se sonrojaron levemente al ver a su hermano con una postura autoritarismo pero a la vez lo hacía verse más guapo de lo que ya es.

-Y bien? Por qué los tres están despiertos tan temprano? - pregunto haciendo que los tres vuelvan en si.

-Nii-san como que de por que? Hoy es tu cumpleaños!! - exclamó el oji carmín siendo el primero en abalanzarse para abrazarlo - y te queríamos sorprender pero nos ganaste -

-jeje Uno ya estaba despierto desde hace rato y dos con esos gritos todos se pudieron haber despertado - miro a los dos culpables quienes desviaron la mirara pero el oji azul fue el y lo abrazo también.

-Lo siento... Pero aun así feliz cumpleaños Nii-san - El oji gris acaricio los cabellos de ambos menores pero alzó la vista a mirar al faltan te le dio una cálida sonrisa que lo hizo sonrojar, dejó el pastel aún lado y se acerco para abrazarlo también.

-Ustedes tres son la muerte, sabían? - se río el mayor acariciando sus cabellos suavemente, se quedaron así durante varios minutos, era reconfortante, un ambiente agradable para los cuatro.

Cuando los dos de los menores se soltaron para buscar algunas cosas, se quedó abrazando al bicolor morado unos momentos más, noto que había apretado su agarre, vio a través de la pijama que traia puesto que tenía a lo que parecía moretones en el cuello y también en los brazos... Estrecho su mirada al ver eso, y lo pero es que parecía recientes.

-Nii-san! No te olvides pedir tu deseo!! - exclamó el oji azul volviendo hacia ellos.

Ambos se separaron llendo hacia la cocina donde estaban los demás, vio a su hermanito como se juntaba con los otros dos que estaban prendiendo las velas del pastel, en eso vio levemente unos vendajes intentando no ser vistos con las mangas de la pijama.

Que me estas ocultando Sakaki yuri?

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-Bueno al parecer solo fue una pequeña fiebre, le recetare algunas cosas para que duermas tranquilo, pequeño - anoto unos medicamentos, para luego darle la hoja a la señora.

-Gracias por su tiempo, vamos da las gracias a la doctora - le dijo al menor quien hizo una reverencia en forma de agradecimiento antes de ocultarse detrás de su madre, y salir de la habitación.

Sonrió ante aquella actitud del pequeño le recordaba mucho a sus hijos, salió de la habitación llendo hacia la recepción donde estaban sus compañeras.

- Día agotador verdad? - le habló su compañera y 'complice' de pelo rubio y mechones anaranjados.

-Como no tienes idea Yoko - habló algo cansada debido a que le llamaron en plena madrugada ya que debían realizar una operación de emergencia y hubo escasez de empleados.

-Oye, no pongas esa cara ya veras como un buen energizante te levantará los ánimos! - habló su otra compañera de cabellos anaranjados.

-ya entiendo de quien sacó Yuma lo optimista - se rio un poco, al recordar la imperatividad de ese niño, bueno aun que el esposo de Mira no se queda atrás la familia Tsukumo es todo un lio.

-Hablando de hijos, que no hoy uno de ellos cumplía años? - le pregunto Mira, algo pensativa.

- Si, hoy es el cumpleaños de Yuto - comentó la bicolor azul con una pequeña sonrisa.

Tan solo pensar que unos de sus bebés estan creciendo y saber que en algún momento se irán de su lado, la entristece mucho, aunque yuto la ayuda en cuidar a sus hermanos pero el también va tener una familia, hijos quizá, aunque eso pase siempre serán sus pequeños, pero hay veces que quiere que ya no crezcan más para que estén con ella, suena algo egoísta verdad?, en cualquier momento sus hijos se iran de su lado y formarán su vida, solo esperaba que no se olvidarán de ella cuando eso suceda...

El bicolor amarillo la miro por unos momentos antes se sonreír levemente - y por que no te escapas del trabajo por unos momentos? - salio de sus pensamientos para mirarla - Tal vez no tenga hijos pero se nota que te preocupas por ellos, ve nosotras te cubrimos -

-Gracias yoko! - le dio un pequeño abrazo antes de ir a cambiarse, antes de que noten su ausencia.

-Eres muy amable Yoko-San - habló su compañera con una sonrisa en su rostro.

-He convivido con esa familia un buen tiempo, sabes que he cometido muchos errores en mi adolescencia y sino fuera por ellos no estaría donde estoy ahora - de las tres Yoko era la más joven la Sr. Sakaki la considera como otra hija suya.

- Disculpe pero necesito saber como esta el paciente de la habitación 245? - ambas voltearon a ver hacia un joven de ojos morados - FBI, resulta que ese paciente pueda darnos información importante sobre un caso que estamos realizando -

-Lo lamento pero el paciente de aquella habitación no hace mucho acaba de salir de una cirugía, así que la anestesia que le pusimos recién desaparecera en unas horas - explico la bicolor naranja con total calma - le recomiendo que venga más tarde -

- Está bien - acepto el Detective, le dio lo que era su tarjeta, para después retirarse.

-Yoko quien esta en la habitación 245?- pregunto la doctora Tsukumo, a cierto ella no estuvo en ese momento.

-Pues fue el que sufrió un accidente doble por la carretera central, su nombre es sino mal recuerdo.. Es Edo phoenix - comentó leyendo la información que estaba en la base de datos, un extraño sonido parecido a una sirena se empezó a sonar.

Las alarmas contra incendios se han encendido, todos los médicos dejaron de estar lo que estaban haciendo y fueron a evacuar a los pacientes.

- Mira tu ayuda a evacuar a los pacientes incapacitados, yo ayudare a los pacientes que están en el lado sur - una vez dicho ambas se separaron.

Todos salían alarmados ayudando a algunos pacientes, el fuego se inició en el cuarto piso y está bajando rápidamente.

-por que no funciona las regaderas contra incendios!?! -

-No se puede, no funciona! Alguien corto los cables!! Saquen los a todos los que puedan! Ya! -

-El fuego está invadiendo la zona sur! Aun hay pacientes y doctores ahí!

-cierren las puertas! O el fuego se esparcir a más rápido!! -

Al escuchar eso la peli naranja se tenso fue rápidamente hacia donde el doctor que decía aquellas palabras - Esta loco o que!? No oye que hay personas todavía evacuando! -

-Dr. Tsukumo tenemos que cierran las puertas o sino el fuego nos alcanzará a nosotros más rápido, las alarmas se encendieron tarde, ya perdimos la zona este y la zona norte!

- Tenemos que esperar que salgan todos los de la zona sur! -

-Si esperamos perderemos más vid- la oración no fue completada cuando se empezó escuchar una explosión pero venía del área sur.... La gente sin más salió despavorida - cierren las puertas! -

Se quedo paralizada no no puede ser.. Vio como cerraban las puertas de emergencia escuchando como algunas personas pedían a gritos salir, pero sus gritos fuero callados cuando las llamas los alcanzaron en una explosión.

-yoko.. - Escucho como algo caía al suelo, y lo vio... Era una Granada - Cuidado todos!!!! -

La gente grito alarmada al escuchar la tremenda explosión, algunos oficiales del área llegaron para calmar la situación y los bomberos llegaron para apagar el incendio.

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-Nii-san ven por aquí - el oji carmín jalo a su hermano hacia una tienda, el oji gris arqeuo la ceja confundido ya que naturalmente no le agrada mucho ir de compras, no es uno de sus hobbys favoritos - Te va a gustar! -

-un cambio no te hará mal, Nii-san - apoyo el oji rosa empujando lo también pero era imposible moverlo, de los cuatro era quien más fuerza tenía, les sorprendía que no tuviera tan marcados sus músculos.

-esta bien esta bien, solo por ustedes - se dejo guiar por esos tres revoltosos.

En todo el día no han dejado de ir de un lugar a otro, y le seguía sorprendiendo esas energías que tenían.

-Nii-san...? - el oji azul vio a su hermano un poco pensativo, no estará recordando otra vez o si?

Aunque hayan pasado ya 10 años sabía que su hermano seguía recordando como si tan solo hubiera pasado ayer, se entero cuando una vez sin querer escucho una conversación.

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Era un poco tarde se supone que debería estar durmiendo con sus hermanos, pero quería dormir esta noche con su Nii-san.

Cuando llegó a la habitación vio la puerta semi abierta, se asomo por curioso y vio a su hermano de 13 años dando vueltas de un lado para el otro en su lugar, parecia hablar en voz baja pero con quien?

-ya no lo aguanto! Ya no lo soporto... No lo soporto más - se agarro la cabeza derramando algunas lágrimas - Si muero ahora ¿alguien se preocupara por mi? - se pregunto así mismo mientras jugaba con lo que parecía un cuchillo pero pequeño, mamá dijo que es peligroso jugar con esas cosas.

-No, no lo harán ya desaparecí dos años ¿que tal si esta vez es para siempre? - se volvió a preguntar, posicionando aquel cuchillo en sus muñecas, chilló de temor pero al parecer no fue escuchado, vio como la sangre empezó a salir de su cuerpo, no.. Eso le va a doler a su Nii-san, tiene que hacer algo.

-Nii-san! Eso es peligroso! - abrió la puerta acercándose al mayor abrazandolo tan fuerte como sus bracitos pudiesen - no te hagas daño...-

Su cuerpecito fue rodeado por los brazos de su Nii-san, sintió su hombro mojando se luego escucho un pequeño sollozo del mayor.

-Lo siento, lo siento, lo siento... - no paraba de repetirlo, solo pudo quedarse así un rato más escucho varios balbuceos, y le decían a el hablaba demasiado rápido, lo único que pudo escuchar del mayor fue - Es mi prisión... -

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-yugo reacciona! - salió de su mar de recuerdos ante la llamaba del menor de todos - yugo te estoy preguntando azul normal o azul noche? -

-eh?... pues... Azul noche - habló algo perdido, pero recuperó la compostura estaban buscando una camisa para el mayor.

-Lo sabía, gracias! - agradeció el oji carmín llendo hacia el oji gris enseñándole aquella camisa, tan solo ver esas sonrisas le hicieron sentir algo cálido dentro suyo.

-Que pasa Fusión? - y otra vez con ese apodo, relajate no te molestes que es lo que busca - por tan distraído -

-No pasa nada, lirio, estoy perfectamente bien - habló cruzando se los brazos, tratando de no gritarle a su hermano mayor, por que tenía que ser el mayor!? Le daba una gran desventaja a él.

-eh~ Al parecer fusion tiene su mente en otro lado, que pasa monito es que acaso comiste demasiadas bananas hoy? - sonrió poniendo su mentón en el hombro del bicolor azul abrazando le por la cintura.

-Y después soy yo quien invade el espacio personal - comentó con un pequeño tic en la ceja por querer gritar que dejara de llamarle con esos apodos, pero debería controlarse, parte de que su hermano estaba demasiado cerca de él, y estaba un poco sonrojado.

-Listo terminamos! - exclamó yuya alegre con las bolsas en las manos junto a yuto, yuri se separo de él con una sonrisa en la cara, ese maldito.

Salieron de la tienda caminaron un poco, yuya era quien elegía los mejores sitios para ir pero lo curioso es que ya hemos visitado casi todo.

Así decidimos ir al parque un rato, dejamos las cosas en el carro del mayor para luego ir distraerse un poco de todo aunque sea por unos momentos.

-Nii-san y como te va en tus casos? - pregunto el oji carmín curioso.

-Bien, podría decirse aunque ser forense no es nada fácil sobre todo soportar el olor a muerto - comentó haciéndonos reír un poco aunque sea - y por cierto como les van en la escuela no me han dicho nada al respecto -

-Pues.. No me han dejado tarea, eso es algo bueno Jejej.... - se rasco la cabeza el peli tomate a lo que todos lo miramos - esta bien, me quede dormido en la clase de matemáticas -

-Otra vez!? No entiendo como puedes aburrirte, si las matemáticas son sencillas! - exclamó casi ofendido el oji azul.

-bueno, en eso no te lo niego - acepto el oji gris, a lo que el peli tomate hizo un puchero que lo hacía ver adorable más de lo que ya era.

-¡hay, por favor! Para ustedes es sencillo decirlo! Me sorprende que pase de año... - se quejo colgando la cabeza pidiendo algo de ayuda al oji rosa.

-Los maestros me ofrecieron pasar a grados superiores, ya que mi intelecto es muy alto para donde estoy, según ellos no necesito aprender me casi nada - contó como si fuera poca cosa.

-Y cuál fue tu respuesta? - preguntaron los dos menores al mismo tiempo.

-Que lo pensaría -

-Wow yuri, eso es un gran logro! - exclamó el oji carmín sorprendido, simplemente alzó los hombros restándole importancia.

Siguieron hablando de algunas cosas pero no tan importantes solo estaban disfrutando su compañia, antes de volver a casa decidieron dar un último paseo por la plaza.

Estaban hablando entre chistes y sonrisas, le agrada que sus hermanitos estén así, le gusta que se diviertan y sonrian, o diaria a cualquiera que quiera arrebatarle esa felicidad.

Pero que pasa si el que esta feliz, no eres tu.

Mi felicidad nunca me importo solo tengo una opción de seguir en este mundo, y es por ellos tres.

-Nii-san! Mira! Ahí están Oka-san y Serena - aviso el oji carmín a llamando la atención de todos.

-Serena! Hace tiempo que no la vemos, regresa después de tiempo y no nos visita que cruel de su parte - se quejo yugo haciendose el ofendido.

Vio como esos dos trataban de llamar la atención de las dos mujeres, miro a yuri y noto que estaba como paralizado, también noto que trataba de ocultar algo con sus mangas.

Iba hablar con el cuando lo llamaron - parecen que no nos escuchan voy por ellas ya vuelvo - aviso el oji azul mirando a ambos lados de la carretera antes de cruzar.

Logró cruzar con éxito la carretera, la oji verde y el tuvieron una pequeña discusión, yugo fue el primero en cruzar.

-Yugo cuidado!! - el oji azul se detuvo en seco retrocediendo unos cuantos pasos, soltando el aire contenido e hizo una señal de que estaba bien - este idiota.. -

Se empezó a escuchar como algo a lo lejos, y de la nada se vio como un carro venia a máxima velocidad, no tenía control del volante.

-Sal del Camino ahora!!! - se quedo paralizado aquel auto iba demasiado rápido arrollando todo lo que estaba al frente suyo - Yugo con un demonio reacciona!! -

En un parpadeo ya no estaba en la carretera sino en la acera, estaba en los brazos de Nii-san mientras que Yuya lloraba a su lado y yuri contenía las ganas de darle una paliza, pero no terminó... Aquel conductor se estrecho en una de las tiendas por haber perdido el control del vehículo, había un camino de sangre y cadáveres.

Contando con el de mamá...

...