*** Días después ...

— Philip dijo que habían dado con el cómplice y fue cuándo oí un sonido agudo. La llamada se cortó y volví a marcarle pero no responde.

— Eso es preocupante tío, debió de haber pasado algo malo— nos encontrábamos en el despacho de John con Alessandro porque nos habían dicho que tenían pistas sobre el sujeto que dejó salir a Sergi. Pero al final nos habíamos quedado con la duda y preocupación porque Philip no se había vuelto a comunicar con nosotros.

— Creo que iré con unos de los guardias a buscarlo. Puede estar en problemas y necesitar nuestra ayuda.

— Puede ser peligroso Cedric, por favor ten cuidado.

— Lo sé papá, así lo haré.

— Iré contigo por si - —interrumpí a Alessandro porque lo mejor sería que él se quedara por cualquier cosa que llegara a suceder.

— No, será mejor que acompañes a John. Por si llegara a suceder algo malo... Así podrán cuidar a las mujeres de la casa.

— De acuerdo, tienes razón. Mamá y la señora Gladys están con las chicas y será mejor que no se enteren de esto. Nos encargaremos de estar al pendiente de ellas.

— Alessandro tiene razón hijo. Ve junto a Philip y avísanos en cuánto puedas.

— De acuerdo— salí de la casa lo más rápido posible. Algo no andaba bien, pedí a los guardias que Philip me asignó que me acompañaran a buscarlo. Cada uno iba armado al igual que yo. Gracias a los artefactos electrónicos que manejan en el sistema de seguridad, uno de los guardias con conocimientos tecnológicos pudo dar con su ubicación. Pues se manejan con chip de rastreo, lo cuál debíamos de agradecer a Philip por ello porque él es el responsable de que todos nosotros estemos a salvo.

*** Minutos después ***

— Señor, a su señal. Estamos en posición— habíamos llegado al lugar que nos indicaba el aparato. Todos estábamos en posición de ingresar a mi señal. Se trataba de un depósito totalmente distanciado de la ciudad. Pero aún así concurrente por algunas personas de la zona.

— Ahora — había dado la orden de ingresar de una vez por todas. Un guardia iba delante de mí y otros dos detrás. Una vez dentro del lugar pudimos ver que uno de los hombres que acompañaba a Philip estaba herido. Le habían disparado— que alguien lo ayude. Llamen una ambulancia.

Uno de los guardias que me acompañaba quedó con el hombre herido y los demás seguimos adentrándonos para dar con Philip. Tuvimos que separarnos para ir en cada rincón del lugar. No era un depósito muy grande pero si tenía unas cuantas habitaciones que debíamos de revisar una por una. Fui un poco más hacia el fondo dando con una puerta que al parecer conducía a la azotea. Subí las escaleras que visualicé apenas abrí esa puerta, hasta llegar arriba y efectivamente situarme en la solana.

— ¡Philip! ¡Encontré a Philip! Posición azotea— informé por el radio a los hombres mientras corrí hasta dónde se encontraba Philip. Estaba en una esquina apoyado por la ventilación y presionando su pierna izquierda— ¡¿Philip estás bien!?

—¡Tenemos que salir de aquí! — prácticamente se estaba desangrando por un disparo en la pierna. Lo ayudé a levantarse para poder salir de allí como había dicho.

— ¿Podrás?

— Si, vamos... — a duras penas pudo pararse y apoyarse en mí. Inmediatamente los guardias llegaron y me ayudaron a llevarlo a abajo y salir de este maldito lugar. Pero no pudimos llegar a nuestros vehículos, de pronto escuchamos disparos hacia nuestra dirección— ¡Rápido! ¡Rápido! Son ellos, esos infelices siguen aquí. Pero solo son tres, no dejen que se escapen— Philip aún con esa herida, daba órdenes a sus hombres y supo guiarnos para resguardarnos y poder llegar al vehículo.

— ¡Será mejor que se vayan jefe! Derribamos a uno. Ya solo son dos— uno de los hombres de Philip se comunicó por el radio.

— Tiene razón, debemos de llevarte al hospital— tenía que llevarlo antes de que siguiera desangrándose.

— De acuerdo, que Rodríguez se quede al mando— a Philip ya le costaba hablar. Repetí su orden y luego salimos de allí dirigiéndonos al hospital. Pedí de urgencias al doctor que se encontraba de turno porque no encontrábamos a Erwin ni a su padre. Sin embargo de igual manera en la recepción dijeron que se comunicarían con ellos para informarles de la situación.

Ni bien llevaron a Philip a la sala de emergencias, llamé a papá para avisarle sobre lo sucedido. Antes de cortar la llamada dijo que le pediría a Alessandro que quedara al cuidado de las chicas y vería la forma de salir de la casa sin que alguien más se enterara de esto.

Los hombres de seguridad me informaron que lograron capturar a los otros dos hombres. Uno herido y otro ileso. Con el tercero ya no se pudo hacer nada, falleció al instante. Los hombres capturados ahora ya serían jurisdicción de la policía y deberán de decir quién les contrató para que realizaran esto. Porque también me informaron que eran los mismos que me había golpeado y robado los otros días. Está más que claro que fueron contratado por Sergi y cuándo vieron que no tenían escapatoria dispararon a matar para que pudiera darse a la fuga. Sin embargo les salió mal la jugada porque no contaban con la capacidad de Philip.

***

— ¿Aún no te han dicho nada?

— No, el padre de Erwin llegó hace unos instantes y fue directo a la sala donde llevaron a Philip— papá llegó al hospital hace un par de minutos y aún no sabíamos nada.

— Tuve qué decir que se trataba de algo urgente en la compañía para que Alanís no se enterara de esto. Alessandro las está cuidando, dijo que esperaría a qué le avisáramos cualquier urgencia.

— Le envíe un mensaje a su celular antes de que llegaras, papá— el padre de Erwin salió en ese instante informándonos sobre el estado de Philip.

— Todo está bajo control. No hay de que preocuparse, la hemorragia pudo pararse y extrajeron la bala con éxito. Por la zona en la que la bala se incrustó es normal la pérdida de sangre a ese ritmo, sin embargo, si no lo traían a tiempo pudo haber ingresado a zona riesgo. Y la historia sería otra. Ni bien lo trasládenos a una habitación privada, podrán pasar a verlo.

— Gracias Beneth, gracias por todo.

— No tienes por qué. Bien, en unos momentos más les estaré habilitando el acceso para verlo. Y si en 48 horas no presenta ningún signo de complicación, podrá irse a la casa a reposar y seguir al pie de la letra las recomendaciones que le proporcionaré junto con los medicamentos que deberá administrarse— el doctor se retiró y nosotros permanecimos en la sala de espera . Papá se encargó de darle instrucciones a los guardias para que siguieran en sus funciones laborales mientras que yo informaba a Alessandro sobre el informe médico de Philip.

*** Horas más tarde***

— Todo fue absolutamente rápido, cuando quise ir por el cómplice de Sergi uno de ellos me disparó y logró darme en la pierna. Pero alcancé a protegerme yendo a la azotea. Luego los disparan cesaron y fue cuando ustedes llegaron— Philip ya se encontraba en una habitación privada, nos comentaba sobre lo que había ocurrido y cómo fue que uno de ellos les disparó— Es obvio que ya sabían que habíamos logrado dar con su paradero, por eso cuando ni bien marqué a John, ellos ya nos emboscaron.

— Cuándo volví a marcarte y no respondías fue raro. Les dije a los chicos y fue Cedric quién inmediatamente salió a buscarte. Reunió a los guardias que le asignaste y luego dieron marcha hasta dar contigo.

—Te lo agradezco mucho Cedric. Debí prever e imaginarme que algo así podía suceder. Sin embargo fui poco inteligente en esta ocasión— Philip se lamentaba ante lo ocurrido pero la verdad era que estábamos agradecidos de que no haya ocurrido algo peor.

— No sé que diré en la casa, no creo que sea conveniente decírselo a Alanís. Pero estoy seguro de que Danila querrá saber de ti— lo que papá decía era verdad, tía Danila no se quedara tranquila sin saber de él.

— Pues opino lo mismo que papá, creo que deberíamos decirle a ella. Más deberíamos de esperar en cuánto Alanís. Tal vez sea mejor que no lo sepa.

— Estoy de acuerdo no le digan nada, la preocuparan en vano. Además, ya estoy bien. Todo salió bien, en pocas horas estaré de regreso en la casa y en uno días más ya ni siquiera recordaré que tengo una herida. En cuánto a Danila, les agradecería que me facilitaran mi teléfono celular. Prefiero hablar personalmente con ella.

— Está bien. Te traeré tus cosas.

Traje las pertenencias de Philip junto a él, ni bien tuvo su celular en la mano, llamó a Danila y le dijo todo lo que ocurrió. Unos minutos después ella ya se encontraba junto a nosotros acompañándolo. Tanto papá como yo teníamos que regresar a la casa para que las chicas no sospecharan. Como tía Danila se ofreció a quedarse para cuidarlo, papá asignó a los guardaespaldas que quedarían con ellos. Luego fuimos a la casa y como ya habíamos llegado en la noche, la excusa fue que la reunión de trabajo se había extendido más de lo debido.

— ¿Seguro que estás bien?

— Si, ¿por qué lo dices?

— Es que siento que estás un poco pensativo. ¿Sucedió algo malo en la empresa?— me encontraba recostado junto a Alanís en su habitación pero la verdad era que había estado pensando casi todo el tiempo en lo que ocurrió el día de hoy.

— No pasó nada preciosa, es solo que estoy un poco cansado. Desearía poder ir nuevamente a esa isla ¿lo recuerdas? — observé a Alanís y ella me regaló esa sonrisa que tanto adoro.

— No lo olvidare jamás, osito. Ojalá algún día podamos ir nuevamente.

— Estoy seguro que así será— escuché de pronto la notificación del celular de Alanís. Había estado escribiéndole a Philip y por suerte no se enteró de nada. Ella tomó su teléfono, tecleó un breve mensaje y luego regresó junto a mi.

— Listo, le estaba deseando buenas noches a tío Philip. No lo había visto en todo el día y me quedé mal porque no había tenido la oportunidad de volver a hablar con él. Pero me dijo que unos días estará por aquí y hablaremos.

— Me alegra que nos hayas perdonado, mi amor. Tu tío en verdad estaba mal porque no nos querías ver ni hablar. Pero también entendíamos tu postura.

— Lo siento, estaba dolida por cómo se dieron las cosas. No fue mi intención lastimarlos.

— Sé que no mi ángel. Ahora eso ya pasó, no te preocupes. Lo importante es que ya estamos juntos, las cosas están bien y nuestra familia está unida— gracias a Dios a pesar de lo qué pasó con Philip hoy, podíamos estar bien porque estamos a salvo y juntos.

— Tienes razón, nuestra familia. Es bonito poder decirlo, siempre soñé con tener una familia así y me siento muy feliz de que ustedes sean parte de este sueño— abracé a Alanís y l dejé un pequeño beso sobre sus labios. Ella se merecía toda la felicidad del mundo.

— Y nosotros de tenerte a ti mi amor.

No sé como haremos a partir de ahora pero estoy seguro de que daremos con Sergi y su cómplice. Tiene que pagar con la condena por haber lastimado a Alanís y ahora por ser prófugo de la justicia.
Acurrucados en la cama, con algunas caricias suaves, la noche estaba siendo un regalo para nosotros y minutos después el sueño ya nos había vencido.

Hola soñadores! Como ya saben habrá un par de capítulos nuevos por aquí, como este pr ejemplo. Deseo lo disfruten y no se olviden que siempre los espero en los comentarios.
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