Yoori.

El corazón se me quiere salir de el pecho. Un sentimiento que jamás había sentido en mi vida surca mi pecho y hace que me agite. Jamás había sentido algo semejante o parecido. No quiero que se separe, eso no.

Aprieto la tela blanca entre mis manos mientras con la mirada le suplico que no se vaya. Jeon jadea mientras sus ojos se tornan tan negros como la noche.

Me siento en una burbuja dónde solo estamos ambos, el tiempo no parece seguir pasando. Solo nosotros es lo único que pido aunque sea por éste solo momento.

Jeon traga duro y puedo ver su manzana bajar en el proceso y volver a subir. Sus manos arrastran por mi cintura hasta tenerme tan pegada a él que siento su excitación y solo eso hace que me sonroje, no es la primera vez que veo su erección marcada, pero igual como aquel día en el club, logra hacerme jadear.

Nuestros rostros están a solo centímetros de rozarse y eso hace que aguante la respiración, ninguno dice nada, más nuestras acciones son suficientes.

Me siento desesperada por probar sus labios pero todo parece querer pasar en cámara lenta. Jungkook se acerca tan lentamente que hace que apriete aún más la tela de la camisa y tiré de esta hasta estampar mis labios con los suyos.

El pasillo desavitado dónde cualquiera puede aparecer hace que todo se torne más caliente.

Jadeo en su boca cuando su lengua empuja adentro y lo rodeo de el cuello perdida en la calidéz y sabor de su boca.

Sus manos me toman por las caderas mientras me aprieta contra él. Nuestras lenguas rozándose hace que suba la intensidad y gimo cuando muerde mi labio inferior y todo se sale de control. La pared más cercana es quien sufre el doloroso impacto de mi cuerpo cuando me acorrala posesivamente.

Ladeamos la cabeza mientras tiro de los mechones de su cabello.

Todo ésto se siente como tocar el cielo y repito, jamás me había sentido así en mi vida. Con nadie, jamás.

El aire escasea en mis pulmones y me obligo a separarme de Jungkook recibiendo un gruñido de su parte.

Nos miramos a los ojos y el calor se va de mi cuerpo al darme cuenta de lo que hemos hecho.

La vergüenza recorre mi cuerpo mientras lo miro sin saber que decir o como actuar. Tengo la respiración agitada y el corazón me late rápido, pero la imagen de Jungkook es tan caliente que hace que me pierda en su perfil.

Tiene los labios tan rojos e hinchados que me dan deseos de volver a besarlo. Sus mejillas sonrojadas y los ojos tan penetrantes que siento que ve mi alma, los mechones de su cabello están alborotados y lo miro embobada.

Retrecedo un paso de él y el se acerca advietiéndome con la mirada que si salgo corriendo estaré jodida.

La pared donde estaba acorralada se aleja de mí mientras retrocedo buscando la forma de escapar.

De seguro pensaran que estoy arrepentida pero la verdad es todo lo contrario. Quiero probar sus labios de nuevo pero luego el remordimiento me mata. Cómo ahora. El pecho se me aprieta al pensar que estoy jugando con él y un sabor amargo inunda mi boca ante la sensación.

No quiero herirlo. No quiero, porque sé que yo también saldré con el corazón roto.

-Yo... creo que lo mejor s-será olvidar esto- mis propias palabras duelen pero se que es lo mejor para ambos.

-No puedo- admite mientras me acorrala de nuevo contra la pared- No digas eso, no después de haber probado tus labios.

Suspiro cuando su mano tatuada acuna mi mejilla y su dedo pulgar se desliza lentamente hasta mi labio inferior. Arrastra el dedo hasta sumergirlo a mi boca y su respiración se vuelve errática.

Trato de detenerlo pero me es imposible. Su fuerza al lado de la mía es prácticamente nula.

Cierro los ojos cuando besa la comisura de mis labios.

-Jungkook- murmuro cuando se separa, sometiéndome a mi propio dolor.- No podemos...

- Shhh- dice bajito mientras me mira- No me importa.

-¿Y que pasa con la chica de el club?- mis palabras parecen conmoverlo porque se separa un poco. Pero mantenemos la mirada fija.

-Ella- hace una pausa- Ella me gusta, pero contigo me siento confundido.

-Ya lo dices, ella te gusta. Yo no. A mí no me quieres y es lo mejor- Lo siento Kook, murmura mi subconsciente tan dolido que siento mi corazón ser apretado por una mano.

-¿Me estás diciendo entonces que solo somos Doctor y enfermera?- Sus palabras duelen así que agacho la mirada asintiendo.

-Es lo mejor- susurro con el pecho encogido mientras las ganas de llorar me inundan.

-¿Lo mejor?- pregunta incrédulo. Su aire caliente choca contra mi cara y se que está molesto.

-Lo es.

Se separa de mí mientras me mira no sé cómo, es una mirada perdida, como si realmente me hubiera entregado su corazón y se lo hubiera molido en mil pedazos.

Un nudo se me forma en la garganta.

-Tienes razón. Tu solo eres un pasatiempo, ella es más importante- jadeo ante sus palabras sin poder creerlo. Se que está molesto y habla por hablar, pero me han dolido esas palabras.-Tranquila enfermera Choi, no la volveré a molestar.

Es lo último que dice antes de marcharse.

Las lágrimas acumuladas descienden por mis mejillas mientras me toco el corazón.

Me duele y de una forma horrible, ¿Por qué estoy llorando? Ni siquiera lo sé. Pero la opresión que siento es tan grande que aunque seque mis mejillas las lágrimas siguen cayendo.

Me siento enojada conmigo misma por haberme permitido darme el lujo de besarlo.

Es tan malditamemte agobiante que solo quiero encerrarme en un cuarto y llorar.

-¿Yoori?- la voz de Taehyung me hace reaccionar y rápidamente seco mis mejillas- ¿Estás bien?¿Porque lloras?

-Solo pensaba, a veces lloro al recordar momentos tristes- miro el suelo abatida.

-Yo también lloro de vez en cuando, Jungkook dice que soy un llorón. No sé lo cuentes a nadie- Jungkook, todo gira entorno a él.

-Supongo- mi voz salió un poco reacia.

Taehyung me sonríe mientras se acerca a mí y recuesta su espalda en la pared. Imito su acción mientras le miro.

-¿Qué te trae por esta área?- Me atrevo a preguntar mientras me cruzo de brazos.

-Solo caminaba, caminar me relaja. Me hace olvidar mi horrible vida- murmura y luego suspira angustiado.

-¿Horrible vida?- cuestiono y suelta una risita.

-Son solo problemas familiares,- le resta importancia pero el bichito de la curiosidad ya me picó.

-Puedes contarme, te escucho. No me molesta escuchar, hasta soy buena dando consejos.

Me muerdo la lengua al decir lo último. Ni siquiera se lo que es mejor para mí y ya ando tipo socióloga con otros.

En estos momentos la imagen de Jeon vuelve a cruzar por mi cabeza y la sacudo para borrarla. No quiero terminar llorando frente a Taehyung.

-Bueno, espero no aburrirte- dice y suelto una risita mientras niego-. Lo que pasa es que me gusta alguien muy cercano a mí. Pero mis padres no quieren que esté con ella, solo por el hecho de que somos familia pero no tenemos la misma sangre. Ellos consideran eso como una deshonra y por ello la mandaron a los Estados Unidos, para alejarla de mí.

Tomo sus manos al ver que tiene los ojos acuosos.

-¿Puedo saber quién es?

-Es mi hermana.

Sus palabras logran sacarme de contexto.

Entonces la única con problemas no soy yo.

Creo que Taehyung y yo nos volveremos buenos amigos.

[•••]

Me siento conmovida por Tae, debe ser dura su situación. Pero por otro lado me siento enojada con Yoori, por rechazar a mi Jungkookie.

Pobrecito mi niño.

En el próximo capítulo sabremos cómo se sintió Jungkook y las cosas que hará para vengarse.

En el club se armará lo bueno.🔥

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