Jungkook

Misuk se paseaba por la casa con un plumero sacudiendo todas las figuras de porcelana que estaban llenas de polvo. No recordaba la última vez que habían limpiado todo, yo al menos no tenía tiempo, además de que no me gustaba tener personas en casa que me estorbaran, sin embargo, Misuk no me estorbaba en lo absoluto, en realidad con ella tenía todo el tiempo del mundo.

No podía negar que sus arapos largos y sin nada de clase y que no dejaban nada a la imaginación me ponían un poco nervioso, porque por alguna razón sentía que debajo de toda esa ropa larga y calurosa había un cuerpo virgen y demasiado jugoso. El simple hecho de imaginarmelo me hacía el agua la boca.

Su inocencia era atractiva, era dulce, me atraía.

Había conocido a tantas chicas que solo fingían ser inocentes para que yo las follara duro, sin embargo cuando las quería domesticar como era debido lloraban y rogaban que parara, y su dolor solo hacía excitarme más, pero Misuk era inocente y pura de verdad, la perfecta presa que podía ser cazada por un león hambriento.

Me podría pasar el día viéndola limpiar mientras tarareaba cualquier canción de Dios con su melodiosa voz, solo haciéndome la fantasía excitante de tenerla en mi Habitación Prohibida. Sin duda ella sería una perfecta perrita a la cual domesticar.

—Señor Jeon —levanté mi vista de la laptop, en la cual fingía estar escribiendo y trabajando, porque en realidad sólo estaba mirándola a ella.

Cogí aire profundo e intenté no fantasear demasiado con su timbre de voz diciendo dos palabras tan excitantes como lo eran: Señor Jeon.

Me prometí a mí mismo escucharlo una y otra vez mientras la follaba. Ese era mi objetivo a partir de ese momento.

—¿Sí? —traté de sonar indiferente.

Ella se sonrojó, no podía ni siquiera mirarla porque ella se sonrojaba con facilidad, y solo empeoraba las cosas, solo inyectaba más rabia en mis venas por no tenerla bajo mi posesión.

—¿Porqué no contrató antes una sirvienta? —preguntó.

Me quedé callado durante un tiempo determinado en el que Misuk pensó tal vez que me había molestado la pregunta, porque se hizo pequeña, se sonrojó una vez más e intentó darme la espalda para seguir limpiando.

—No me gusta tener personas a mi alrededor —contesté llamando su atención, sus ojos de gatos de abrieron un poco al oírme y pude ver un rastro de sonrisa pequeña formarse en sus labios carnosos.

Joder, todo lo de ella gritaba: fóllala.

—Oh, pero tener personas a su alrededor no es tan malo a veces, puede hablar con ellas, socializar para que el trabajo se me haga más ameno —dijo educadamente, sus ojos le brillaron al hablar que se sintió raro, era raro ver a una mujer feliz mientras daba un consejo.

—Ya tengo una manera que me hace el trabajo menos pesado, creeme —sonreí de lado.

Ella enarcó una ceja y supe que preguntaría.

—¿Cuál? —me quedé mirando sus ojos con profundidad y me relamí los labios. Ella se sonrojó al instante, dándose cuenta de que tal vez había sido un error preguntar.

—El sexo duro, Misuk —respondí.

Vi en su cara como se alteró por dentro, se puso tan roja que parecía que iba a explotar, se sintió incómoda e intentó volver a su trabajo, para minimizar cualquier cosa que estuviera pensando.

¿Qué se imaginaría ella que es monja al oír la palabra sexo? Tal vez al tonto cuento de Adán y Eva copulando para crear la especie humana. Pero sin duda alguna se había imaginado algo.

No, Jungkook, así no la vas a llevar a tu cama, no es igual que las demás.

Mi subconsciente sabía que me gustaba jugar con la psicólogía de las personas, y con Misuk la psicología de mostrarme cómo un enfermo del sexo sadomasoquista, no iba a convencerla de enseñarle lo más oscuro del sexo, claro que no, a ella había que enamorarla primero, y luego tomar ese hermoso cuerpo en mi posesión.

Enamorar a Misuk iba a hacer el trabajo más fácil del mundo.

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Holaaa! ¿Como están? Yo bien, supongo.

Capítulo corto de Unholy, lo sé, pero lo tuve que cortar en dos porque me estaba quedando kilométrico y la otra parte aún no la he terminado, y si no lo cortaba no actualizaba nunca.

Bueno, no hay gran cosa, solo pensamientos sucios del Jungkook.

Tal vez los primeros capítulos sean súper aburridos, pero vendrá lo bueno a su momento 😈. Ya están advertidas.

Bueno, me despido y sigo con lo otro para que haya actualización rápido.

Las sarangheo ❤️