El ambiente rápido va subiendo de nivel. Llegan muchas más personas la música está demasiado alta, la fogata está desprendiendo su fuego en medio de la arena.

Me topé ya con mi madre la cual me dió una charla muy extensa en la que tuve que salir huyendo para no morir de aburrimiento y entonces los vi.

Estaban muy cogidos de la mano en la cola para el algodón de azúcar. Le mando un mensaje a Sebastián indicando donde nos encontrábamos, esperé hasta verlo cerca de la zona para empezar a ir hacia su dirección y activar el plan.

-Crespitos necesito tu ayuda. -le suelto sin ni siquiera mirarla a ella.

-¿Es urgente?-me pregunta.

-¿Te pasa algo?-habla la metiche.

Si, me pasa que me estorbas.

La ignoro y vuelvo mi vista hacia Andreu.

-Enserio necesito tu ayuda. -lo miro con carita de perrito enfermo y terminó por asentir.

-Bien vamos.-mira a la rubia y se dirige a ella.-Esperame aquí en la cola regresaré rápido.

Salimos juntos alejándonos de ella y todo iba saliendo perfectamente miro por encima de mi hombro y veo a Sebastián entrando en acción.

-Bien, ahora puedes decirme que te pasa.-habla ya estando un poco alejados.

-Lo que me pasa es...

No había pensado en que le diría cuándo llegará este momento. Rápido Ame piensa en algo.

-¿Lo que pasa es?...

-Que me gusta un chico.-suelto de golpe.

-¿Y cuál es el problema?-dice poniendo una cara algo rara.

-Que no sé cómo decirle.-bajo la cabeza.

-No lo pienses tanto, solo dilo si te corresponde bien y sino es un tonto, un completo idiota porque se estaría perdiendo una gran chica.

Mis ojos se pasean por su boca mientras me habla y les juro que muero por besarlo.

-Muchas gracias.-sonrío.-Ya podemos regresar.

Señaló y el asiente, pasa su mano por mi hombro y vamos así hasta llegar al lugar de los hechos.

Justo como lo habías hablado cuando Sebastián nos vio acercarnos la besó.

Andreu y yo estamos mirándolos fijamente, al parecer la muy hipócrita también le tenía ganas al Sebastián porque se están dando menudo beso.

Andreu sonríe pero es más como una mueca, da la espalda caminando en la dirección opuesta.

Ella se percata rápidamente y sale corriendo detrás de él.

Sebastián me guiña el ojo.

-Muy bien.-le sonrío.

-¿Crees que será suficiente como para que se dejen?-asiento.

-Conozco demasiado a Andreu como para saber qué no la perdonará. -este sonríe.

-Eres muy malvada ¿Lo sabías?

-No soy mala. -reclamo.

-¿Hacer esto?

-Esto que hice se llama amor.

-¿Pero no te has parado a pensar si le hará daño a él?

La verdad no me había detenido a pensar en eso.

Y ¿Si realmente él la quería? O ¿Le dolerá mucho verse traicionado? ¿Qué conciencias traerá esto para el?

A veces suelo ser egoísta pero de todos modos le hice un favor ella no era sincera. Ya sabía yo que esa cara de mosquita muerta no me la creía.

-Eso no es asunto tuyo. -salgo de mis pensamientos al verlo que se me ha quedado mirando.

-Y además eres muy pesada.-lo miro mal.

-Fue un placer hacer negocios contigo Sebastián. -digo seria.-A partir de este momento no me conoces, nunca en mi vida he hablado media palabra contigo. ¿Ok?

-Entiendo.

Le doy una última mirada y me voy en busca de Andreu debe estar mal.

Camino a la fogata me crusé con Karen.

-Oye tu.-me mira. -¿Dónde está?

-No quiere hablar con nadie.-dice limpiándose las lágrimas.

-Yo no soy nadie.-insisto.

-No te creas que no me di cuenta como lo miras y ese odio que tú misma te has creado hacia mi.-dice la muy estúpida.

-No sabes nada.

-Si es más que obvio que estás colada por él.-niego.-No, no lo niegues porque yo sé que si y al parecer él es el único que no se da cuenta de eso. -sonríe la muy hija de puta.

¿Dónde quedaron sus lágrimas?

-¡Y si fuera así que!-me paso la mano por mi cabello.-¿Si estuviera por él qué?

-Solo te diría que lo cuidaras porque ...

-No tienes que decirme eso.-la freno.-Y con tu permiso debo irme.

Me grita que se ha ido a la casa y sonrío.

La dejé ahí con la palabra en la boca y seguí mi camino.

Siento su mirada en mi espalda pero no me importa ¡Qué se joda!

-¡Hey Ame!-me grita Dan.

-Hey.-recuerdo como lo traté horita.-Perdona por lo de horita, me sentía mal.

-No pasa nada, ya lo había olvidado. -sonríe.-Te estaba buscando pero no te había visto.

-Estaba ocupada.

-¿A dónde ibas?

-A la casa, me duele un poco la cabeza.

-¿Te acompaño?

-No, tranquilo voy sola quédate y disfruta un poco más de la fogata, además ahorita a las doce lanzarán los fuegos artificiales.

-Vale.-dice no muy convencido.

-Nos vemos mañana y trata de buscarte una chica.-le aprieto los cachetes y dejo un beso en su mejilla.

Él no responde solo me mira como me voy.

Andreu voy por ti.

Ha llegado mi momento, debo consolarlo.

El camino a la casa fue rápido. La verdad fui prácticamente corriendo, no me culpen.

Al entrar siento música en la terraza y voy directo hacia ahí.

Estaba Andreu en bóxer dejando todo su pecho y abdomen al descubierto con una botella de alcohol en la mano.

-¡Amee!-grita al verme.

-¿Qué estás haciendo?-apago el equipo de música.

-¡Noo! ¿Por qué eres tan aguafiestas?

-Te has emborrachado.-confirmo al oler el misto a alcohol que sale de su boca que por cierto está muy cerca de la mía.

-Si estoy borracho y así es mejor.-habla gesticulando las manos.

-Ven suelta eso.-trato de quitar la botella de su mano.

-Noo.-alza la botella y trato de agarrarla pero se me hace imposible.

-Estas demasiado enana.-se burla de mi.

-Nuestros padres van a llegar y te van a ver si. ¿Eso quieres?-alza los hombros me da igual.

-¿Y Karen, no vendrá?

-No la menciones, ya no estamos juntos. -se vuelve a empinar de la botella. -Dijo que pasaría a recoger sus cosas mañanas.

-Para de beber.-le ordeno, cruzándome de los brazos.

-Te ves muy linda enojada. -susurra para luego dar un pequeño beso en la punta de mi nariz.

-Andreu.-menciono su nombre.

-Esta bien.-alza las manos y luego deja la botella en el suelo.

Río por lograr que me hiciera caso pero canto victoria muy rápido.

-¡Andreu! -esta vez grito su nombre con un poco de miedo. El muy loco me ha cargado en sus brazos y ha salido corriendo para luego caer los dos en la piscina.

-Ahhh.-suelta un grito divertido.

-Eres un tonto.-le tiro agua a su cara.

El agarra mi mano y me jala hacia él.

-¿Qué estás haciendo?-le pregunto al ver que se me ha quedado mirando fijamente.

-Algo que hace tiempo quería hacer.

¡Me va a besar! ¡Me va a besar! ¡No lo creo!

Se acerca un poco más a mi hasta que nuestros cuerpos quedan totalmente pegados. Respiro profundo y dejo que todo fluya.

El contacto de nuestros labios es suave, tierno. Muchas veces soñé con estar así, besándolo y ninguna se sintió tan bien como ahora. Es cálido, el calor que su cuerpo me proporciona es magnífico, estoy sintiendo ese cosquilleo que muchas otras veces me ha provocado con solo una mirada pero, ahora es diferente. Me estaba besando.

Andreu Masker, el chico de mis sueños me estaba besando y sin yo hacer nada. Nunca imaginé que esto pasaría de esta forma. Tal vez debería culpar a los grados de alcohol que tiene en su cabeza pero yo no me quejo.

El beso se intensificó y lo disfruto, besa realmente bien. Aunque ya lo había besado a los seis años no es nada comparado con ahora, la experiencia influye mucho.

No pensé en que pasaría mañana solo estaba ahí, en medio de la piscina disfrutando cada segundo de aquel beso.

Holaaa por aquí Milena ☺️

Espero que disfruten este capítulo y aguanten una semanita 😁

Por motivos de que está semana tengo varios exámenes no volveré a actualizar hasta la semana que viene❤️

Miles de gracias por el apoyo y espero sigan conmigo hasta el final.....