—¿Estas segura?—. Baekhyun servía jugo para ella.

—Hum... Me preguntara y no quiero decirle mucho—.

—Entiendo. Toma bebe un poco—. Le entrego el vaso con una servilleta de soporte. 

—Gracias. Más tarde llamare a mi jefe, siento pena porque me ayudo mucho y no pude agradecerle correctamente—. 

—Harías bien si lo llamas, creo que se marcho al sentir molesto a Kai—. Sacaba de la mochila los medicamentos y los dejaba sobre la mesa al lado de la cama. —No hay que pensar más en eso, voy a cuidarte hasta que estés bien así que nada de ser remilgoza—.

—No hay necesidad de que te quedes—. 

—¿K-Kai? Pensé que te habías ido a descansar—. Fue tomada por sorpresa cuando lo vio parado en la puerta. 

—Solo acompañe a tu jefe hasta la puerta. Ya lo dije puedes irte a casa Baekhyun ya dos personas aquí es mucho—.

—Deja de ser así Kai tienes que descansar...—. Ella insistía casi pidiéndolo de favor. 

—No lo haré—. Se sentó en la cama. — Me quedo y punto—. 

—Ella misma lo esta diciendo, acaso no dices que te molesta que te persiga, entonces vete—. Baekhyun le señalaba con la mirada la salida.

—Es verdad, aún así voy a quedarme—. Se recostó en la cama. —Pueden decir lo que quieran—.

—Tsk en serio eres...—.

—Baekhyun-Ah, mejor ve a casa, yo me quedare con él—. MinHa lo tomo de la mano y le hablaba gentilmente. 

—MinHa...—. No se sentía seguro por ella, pero al verle en los ojos que quería quedarse con él no insistió. —Como quieras. Si pasa algo no dudes en llamarme—.

—Tsk que tontería ¿que podría pasar? —. Dijo Kai.

—Que la dejes sola, que te molestes y salgas corriendo. A ese tipo de cosas me refiero—. Despidiéndose con una sonrisa de ella se marcho sin nada más. 

Ya solos por un rato de silencio, Kai mirando al techo recostado en la cama y ella mirando a la nada con la mente divagando en su jefe y en lo mal que se sintió al verlo marcharse sin poder decirle mucho. La alarma de su móvil sonó con la nota de que era la hora de un medicamento, como no estaban diciéndose nada ella se estiro hasta la mesa y miraba los nombres de los frascos y seguir las ordenes del medico para reponerse completamente.

—¿Como se llama?—. Kai le quito la mano de los frascos.

—Diclo...fenalco—. Se acomodo otra vez en la cama.

—Mmmm... Aquí esta ¿cuantas son?—. Destapo el frasco y saco un par de capsulas.

—Dos...—.   

—Toma el agua y las dos capsulas—. Se las entrego en la mano. 

—Gracias...—. Al tiempo las puso en su boca y las bajo con agua.  —Debe ser molesto estarme cuidando—. Bajo el vaso y la mirada.

—¿Hace cuanto tiempo nos conocemos?—. Se sentó en la cama junto a ella. 

—Tres... años... ¿Porque?—.

—Durante esos tres años ¿cuantas veces te separaste de mi?—.

—Creo que siempre estuve contigo...—.

—Entonces dime Kim MinHa ¿porque me estas apartando?—. Se acerco tanto que estaban a escasos centímetros uno del otro. 

MinHa pasaba saliva y parpadeaba era la primera vez que lo tenía tan cerca al punto de sentir su respiración, lo que la ponía más nerviosa era la seriedad y lo fijo que la estaba mirando, así que de modo acción-reacción ella giro el rostro porque estaba muy agitada. 

—¿Que dices?...¿A-Apartándote?  N-no como se te ocurre—. Estaba tan nerviosa que la voz le temblaba y para calmarse junto sus manos.

Kai la tomo del mentón y le giro el rostro hacía él esta vez más cerca y con todas las intenciones de hacer que se agitara aún más, aunque lo estaba haciendo de impulso porque jamás se había comportado de ese modo con ella y ambos lo sabían.

—Ahora que lo pienso, es la primera vez que te tengo tan cerca... Debería...—. Se mordía el labio mientras miraba la boca de ella, era definitivamente un acto de provocación.

Aún sin entender porque estaba actuando de ese modo ella solo se estaba dejando llevar por el momento, era una de las cosas que más había anhelado  finalmente tendría su primer beso con Kai así que no se pondría de renegada y simplemente accedería a la incitación. Cerro sus ojos y relajo sus labios con eso le decía que estaba lista para lo que seguía y que lo esperaba segura de ello. Al ver que aceptaban su provocación él también se fue acercando lentamente hasta sentir el aliento mezclándose.

—¿Que estoy haciendo?—. Kai se detuvo por un pensamiento que llego a su cabeza. —Debo estar loco...—. Se aparto de ella levantándose de la cama y tosiendo con fuerza.

—¿Aún no?—. Habían pasado unos segundos y al no sentir nada extraño abrió los ojos y lo vio de pie junto a la cama. —¿Estás bien?—.

—S-Si ¿porque lo preguntas?—. Nervioso hacía gestos con la cara. 

—Umm nada, creo que estamos algo cansados ¿no lo crees?—. 

—Debe ser eso... ¿Debí ir a la casa? Esa era una buena idea—. Decía en voz alta.

—Te dije que fueras a descansar. Ve, estoy bien ya te diste cuenta—. Se levantó de la cama.

—No...—. La sentó rápido. —Para que el babotas ese hable de más, no señora, me quedo—. 

Para borrar el mal rato que se había pasado Kai le propuso que prepararán el almuerzo, así que ambos se metieron en la cocina y estaba vez sin replicar él solo la obedecía era probablemente su manera de pedir disculpas.  Picaban, lavaban, cocinaban, limpiaban como si fueran una bella pareja que recién estaba empezando el camino del amor, las flores y los pajaritos de la felicidad. No se complicaron con la comida y prepararon algo que  le gustara a ambos, un poco de carne, arroz, ensalada, un jugo cargado y adornos para el centro de la mesa. Mientras ella servia el acomodaba la mesa para que estuviera lista para cuando llegara la comida, a pesar de que estaban los dos y habían cocinado habían veces en las que no se decían nada y de reojo se miraban disimuladamente por la pena que sentían al estar juntos por tanto tiempo.

Al fin llegaba el almuerzo MinHa llevo los platos que se habían preparado y pidió que Kai se sentara y esperara porque ya había hecho mucho y él era como un invitado al tenerlo en la casa. Ella misma sirvió ambos platos, lleno los vasos de jugo y tomando el papel de una mujer casada se sentó a su lado derecho aún con pena pero el agradaba hacerlo.

—Buen provecho—. Dijo Kai mirando todo lo servido.

—Buen provecho—. Dio el primer bocado. 

—Quedo rico, debería dedicarme a cocinar—.  Se alago a si mismo.

—Entonces después de graduarnos podríamos poner un negocio de comidas—.

—Me niego, seré medico no cocinero—. 

—Como dijiste hace poco... No importa...—. Ella no quería entrar en un debate. 

A la mitad del almuerzo, con poca comida en cada plato, con más silencio que platica, no era lo que MinHa imagino una vez al pensar que sería un almuerzo en familia con Kai.

—Por cierto, hay algo que no entiendo—. Mojo su garganta con un poco de jugo. 

—¿Que es?—. 

—Tal vez Baekhyun si pueda entenderlo... pero ¿tu jefe? eso es lo que no entiendo—.

—Hablas de ¿porque estaba en mi casa?—.

—No solo eso, te trajo hasta acá en su auto ¿porque? —.

—Estaba en el trabajo y Baekhyun estaba de visita no me sentí bien y decidieron traerme...—. Aunque no le gustaba mentirle pudo hacerlo muy natural. 

—Por eso el medicamento...—.

—Si, detesto tener que tomarlo—.

—Para ser la primera vez que lo veo no me agrada... ¿Porque tenía que hablarme así?—. Miraba a lo lejos y hablaba como si estuviera solo. —¿No es la persona adecuada para decirme? ¿Que? Al menos debería hablar claro—. Hacía gestos como si lo tuviera en frente. —¿Siempre es así?  Debe ser un engreído, antipático, todo un tonto—.

—No es así... Tal vez sea un poco frió  pero se parece un poco a ti...—.

—¿Que dices?¿En que nos podemos parecer?—.

—Se hacen los fuertes y crueles, pero son tan nobles y dulces como el algodón—. 

—Te equivocas yo no pretendo serlo, yo soy así—. 

—Si, si por eso te quedaste conmigo. Entiendo perfectamente—.

—Oye es verdad, no miento...—. La vio levantarse y  que se burlaba con una  pequeña risita.

—Dije que entendía. Trae los platos—.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

—¿Viste a quien?—. SeHun almorzaba con su hermano cerca del edificio.

—El dichoso Kai lo tuve de frente, al parecer MinHa no quería que se quedara y pues salimos al tiempo—.

—Ella dijo eso, pero es porque no quiere preocuparle—. 

—Es un petulante y saca el pecho cuando dice que es el novio. Por poco y le digo la verdad de lo que paso—. Hacía gestos con su boca muy cómicos a pesar de estar molesto. 

—Cualquiera diría que estas celoso—. 

—!Puaj!...—. La comida se  fue por mal camino haciendolo poner  colorado. 

—¿Estás bien? Bebe agua, cálmate—. Le daba golpes suaves en la espalda para ayudarlo a tomar aire.

—¡Es tu culpa! Por decir tonterías como esas—. 

—Lo siento, es que sonabas a hombre celoso y pues pensé... Tal vez...—.

—Ahora veo que tienes mucho tiempo libre, que incluso te alcanza para pensar en cosas como esas—. Bebía mucha agua mientras recuperaba el aire que se le había escapado.

—Ya dije que lo sentía hermano. Ahora que estamos hablando tengo algo que decirte... Aunque no se como lo vayas a tomar—. Tomaba el sobre que había llevado consigo. 

—Dime y yo veré como lo tomo—. Limpiaba su boca con la servilleta y miraba el sobre que SeHun tenía en la mano. 

—Llego esta mañana no te había dicho porque habían cosas más urgentes y tampoco sabía que momento era el adecuado—. Deslizo el sobre hacía él y lo dejo hay.

—Hablas con mucho misterio por un sobre—. Lo abrió y saco una gran carta de comunicado, a medida que leía se ponía más serio y llego a arrugar la frente.  —Tsk, la otra semana... Entonces era verdad...—.

—La recibí junto con el señor Kang al igual que tú nosotros no podíamos creer lo que decía. Mi tío no decía mentiras, pero no dice quien la solicito y se que no tenemos que indagar mucho para saber quien fue—. 

—Hay muchas cosas que nunca entendí de la relación entre papá y él. Lo ultimo que encontré es que el abuelo no le entrego la titulación de heredero y se la dio a nuestro padre posiblemente sea por eso que siempre estuvo en contra de las decisiones en las reuniones—. Guardo el comunicado porque le revolvió la comida.

—¿Que vamos hacer?—. 

—Por ahora seguir como estamos y recibir a los ancianos con buena cara. Si llevamos pruebas solidas podemos demostrar quien esta realmente listo para tomar el control de la empresa—. Sonaba muy confiado pero no lo mostraba en su rostro.

Chanyeol no podía dejar ver a su hermano lo acorralado que se sentía, desde que su padre enfermo y el asistente Kang le entrego una constancia donde se le daba el poder y el titulo en la empresa como gerente y dueño, sintió que no era el momento para hacer todo eso, su falta de experiencia, la edad, el poco conocimiento y el hecho de que nunca pensó en hacerse cargo hacía más complicada la situación. Si se veía de otra manera casi obligado y por mantener la dignidad de su familia y el buen trabajo de su padre se nombro como el gerente y llevo la responsabilidad en sus hombros. Era normal que al inicio no supiera que hacer, no obstante contaba con su pequeño hermano y Kang el hombre que lo vio desde niño; estas dos personas que fueron clave para que llegara a ser lo que hoy en día decían los periódicos y las revistas de economía y gente importante. Por ese motivo sabía que tenía que poner frente a lo que venía así no decepcionaría a su familia ni a él mismo.

Para la muestra de que solo era una parte de su dura lucha para mantenerse a la cabeza, al regresar a la oficina se encontró con su tío vicepresidente y coordinador de ventas, había llegado para retomar sus actividades en la empresa puesto que trajo la firma del contrato a un año con una de las principales empresas de productos electrónicos en Singapur y se jactaba de decir que el capital había subido un tres por ciento más de lo que Chanyeol había logrado con los nuevos inversionistas.  Con su llegada la antigua división entre los empleados volvió a surgir, los que estaban con el antiguo coordinador y los que estaban con el fresco y nuevo gerente; de parte y parte tenían sus razones para seguir al bando que los favorecía y que mejor los cubría porque todos pensaban en un futuro. 

—¿Alguien sabe algo de MinHa?—. SuHo interrumpía el almuerzo. 

—Yo le pregunte al jefe y dijo que estaba de permiso, no pude preguntarle la razón porque iba muy apurado—. Lay que estaba a su lado bajo la cuchara. —Me hace falta—.

—¿Se dieron cuenta del ambiente que hay desde esta mañana?—. Uno de los mensajeros se acerco a los que estaban en la mesa.  

—Ni que lo digas, ya los más antiguos están hablando y escuche a la reina de oro con el coordinador de bodega, algo huele mal si esos dos se juntan—. Dijo SuHo.

—¿Tenemos que ver a que bando apoyar?—. Dijo otro de los de la mesa. 

—No se ustedes pero yo tengo claro con quien estar. Nuestro jefe se a esforzado mucho así que no dudo para nada—. Lay hablaba como político en finales de campaña.

—Baja el pie de la mesa estamos comiendo—. Amy le dio un golpe en la pierna.

—Hablando de todo, nuestra linda Amy no te has sentido bien ¿verdad?—. Le dijo al sentarse nuevamente.  

—¿Yo? ¿Porque?...—.

—MinHa no ha venido estos días y ustedes estaban muy unidas. Es más te envidio no puedo hablar también con ella como tu lo haces—. 

—Ah... Si, es algo así. Pero no somos tan cercanas—.

—¿De que hablas? La misma MinHa es quien te ha regalado de su comida e incluso ayudo con unas diligencias para ti. ¿No es eso ser cercanos?—.

—Ya termine  iré  a la cafetería, los veo abajo—. Cerro sin terminar su comida y se marcho.

—Últimamente la he notada extraña ¿no es cierto?—.

—Debe ser por MinHa... o eso creo...—. Lay siguió llenando su estomago. 

En su afán por alejarse de los torpes de sus compañeros al llegar a la cafetería tropezó con SeHun que estaba bebiendo un jugo de caja muy a gusto en su descanso. Ella se disculpo y siguió hasta el fregadero donde lavaría su caja del almuerzo. Una pequeña tensión sin motivo comenzaba entre los dos, SeHun solo la miraba de reojo parecía que buscaba algo y que no se atrevía a decir que era exactamente.

—Disculpe señor pero ¿pasa algo?—. Ella dio el primer paso. 

—Ess... hay algo que quiero preguntarte pero no se si deba...—. 

—Es que me siento un poco incomoda, es mejor que pregunte y si puedo ayudarlo con gusto—.

—Ya que insistes voy hacerlo... ¿Sabes, has visto o escuchado algo raro por los pasillos sobre MinHa?—. Se puso muy serio al finalizar la pregunta. 

—Nada... Nada en absoluto ¿porque?—. Se giro y siguió fregando la caja. 

—Solo es una pregunta, creo que hay muchos inquietos por que ella no esta—.

—Si un poco... También quiero hacerle una pregunta—. dejando la caja para que se secara, sacudió sus manos y se giro a él. —¿Porque no ha venido?—.

—Es extraño solo nos llego la notificación certificada y eso es todo, habrá que esperar a que regrese—.

—Ustedes tampoco saben. Entiendo...—. Camino hacía él y al quedar hombro con hombro solo lo miro de reojo y siguió.

—Señorita Amy lamento si la moleste, al parecer me equivoque—.

—¿A que se refiere?—.

—Usted no es la amiga de MinHa solo una compañera y pensé que sabía algo al respecto. En serio lo siento—. Con una sonrisa se despidió y entro a la oficina.

 Al pasar por la oficina de Chanyeol, Amy detuvo su paso y se quedo viéndole en el computador muy concentrado es sus cosas, revisando papeles y viendo a la pantalla. Desde entró a trabajar un sentimiento de aprecio que luego se transformo en afecto y cariño nació en su interior, por mucho tiempo fue atenta y muy colaboradora con cada cosa que su jefe necesitaba. Sin embargo nunca se atrevió a decir o hacer nada que la delatara le gustaba que era como una sombra que podía ayudarlo y verlo sin ningún problema, se sentía bien cuando  le sonreía, cuando se le acercaba para pedirle algo o cuando la felicitaba por su excelente trabajo, esas pequeñas cosas hacían que cada vez le gustara. Aunque solo una persona sabía de sus sentimientos, esa persona le pedía que tuviera cuidado de no mal interpretar los gestos y acciones de él posiblemente saldría lastimada, también le habla del enfermizo amor que estaba naciendo en su interior y que debía controlarse, pero ella siempre se negaba y se repetía que algún día podrían estar juntos siempre y cuando nadie interviniera en el camino.

—¿Amy necesitas algo?—. él levanto la cabeza y la vio parada afuera.

—Señor... Yo... Quería saber si necesitaba algo, ahora que MinHa no esta posiblemente este atareado—. Se decidió y entró a la oficina.

—Nada de eso, no se como lo hizo pero MinHa adelanto casi todo en realidad no tengo mucho por hacer, solo reviso y envío lo necesario. Gracias por preguntar pero no te afanes por mi—.

—Ya... veo... Me retiro que siga trabajando—.  Antes de irse lo miro una vez mas. —Espero que no regreses —. Se dijo.

—No pienses asi —. Dijo Chanyeol.

—¿Disculpe? —. Se freno espaldas a el.

—Entiendo como te sientes. Todos estamos esperando que ella regrese —.

—Era eso... —. Lo volteo a ver con una risa forzada. ㅡMe leyo la mente... Pero si es dificil la situacion ¿No es mejor que no regrese? —.

—Si se lo pidiera no lo haria. A decir verdad ya todos estan acostumbrados a ella y trabajan muy bien —. Hablaba con el corazon.

—Esta nuy agradecido con ella ¿no es asi? —.

—Podria decirse que muchas cambiaron con su llegada. Ademas ella para mi... —. Detuvo sus palabras y nervioso giro a ver la pantalla. —Es mejor que sigamos trabajando —.

—Si jefe... trabaje tranquilo... —. Dijo y se retiro con mas desprecio hacia MinHa al presentir que era lo que iba a decir Chanyeol en ese momento.

ㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡㅡ

Nota: queridos lectores aqui esta la actualizacion. Ufff creo que va por buen camino. Recuerden darle amor con su voto, su comentario y recomendandonos. Mil gracias!!!!

Pdst: en el proximo capitulo de Una Vez Mas... un acercamiento al climax de la historia. XD