Capítulo 47
—¿Has alquilado un duplex? —pregunta Martín sorprendido, no más entrar en el apartamento.
No es el único, todos miramos el espacio como si nos hubiéramos equivocado de sitio. Entre otras cosas porque el Bizum que le hicimos a Irantzu cada uno de nosotros fue por una cantidad irrisoria.
—Chico, hay que saber buscar —se regodea Irantzu—. Estoy apuntada a un montón de páginas de ofertas y descuentos, por eso ha salido tan bien de precio.
—Este sitio está genial —alaba Vanesa mientras se acerca a la zona del salón.
Junto a él, hay una cocina abierta y lo que parece una terraza. Un par de puertas completan el espacio y unas escaleras que dan al piso superior.
—Vale —Irantzu nos señala a cada uno con el dedo—. A ver... vamos a organizarnos. Arriba hay dos habitaciones, cada una con un baño. Una con tres camas y otra con dos. He pensado que las chicas ocupemos la de tres y... Hugo y Martín la de dos. Y aquí abajo hay una habitación individual, otro baño y un sofá cama. Vosotros dos tenéis que decidir quién duerme en cada lugar.
Mikael y Luca intercambian una mirada, pero el segundo se apresura a hablar.
—He sido el último en apuntarme a este viaje, lo justo es que yo duerma en el sofá.
El vampiro le da una palmada en la espalda.
—Muy bien chaval. Así tú y yo nos llevaremos bien.
Tomo de nuevo mi bolsa y me encamino hacia las escaleras.
—¿Qué tal si dejamos nuestras cosas en las habitaciones y después vamos a comer algo? —sugiero.
—Yo he quedado con mi amiga en una hora —se apresura a decir Mikael—. No podré ir con vosotros. Olivia, ¿me acompañas?
—Claro.
—En media hora nos vamos ¿de acuerdo?
Noto la mirada de Luca sobre mí, pero no tengo intención de invitarle. No conozco a esa chica y por nada del mundo le quiero poner en peligro. Si podemos ir solo Mikael y yo, lo prefiero. Asiento y sigo mi camino hacia la habitación. Acierto a la primera y en cuanto entro, veo que las chicas me han seguido.
—Vaya, sí que habéis tardado mucho en dejarnos al margen —protesta Irantzu mientras elige una de las camas.
—No sé en qué ambientes se mueve su amiga, puede que vosotras no seáis más que un aperitivo. ¿Queréis venir y comprobarlo? ¿O mejor vamos solos?
He sido dura sin embargo, creo que tienen que entender cuál es la situación real.
—Ya, vale, tienes razón. Tú eres tan... normal que al final pienso que todos los vampiros son así —se excusa.
—Pues yo prefiero no ir —suelta Vanesa sin ni siquiera mirarnos, concentrada en vaciar su equipaje—. No necesito más adrenalina en mi vida, gracias.
Una chica sensata, quién lo diría.
—Eso es. Id a comer con los chicos y encargaos de comprar algo de comida y bebida. No creo que nos lleve mucho tiempo hablar con ella. Y luego a la noche podríamos salir por ahí.
Ambas me miran con una gran sonrisa. Está claro que ese plan les encanta.
—Sí, de fiesta, ¡a quemar las calles! —exclama mi amiga con entusiasmo.
No tardo en bajar de nuevo al salón, pero descubro que todos siguen en sus habitaciones. Todos menos Luca que está en la pequeña terraza.
—¿Disfrutando de las vistas? —pregunto acercándome a él.
—No están mal, para encontrarnos en la ciudad se agradece tener cerca un parque tan grande.
Tiene razón. Gran parte de lo que abarca nuestra vista es una enorme extensión verde plagada de árboles de distintas especies.
—¿Has encontrado dónde guardar tus cosas? Si necesitas, hay espacio en el armario de nuestra habitación... —ofrezco. Al bajar y ver el salón me he dado cuenta de ello.
—Gracias pero Mikael me ha hecho hueco en el suyo —me informa y su tono de voz me confirma que le resulta divertido.
—Vaya, no te quejarás. Ese vampiro no es muy dado a hacer concesiones. Debes caerle bien después de todo.
Luca esboza una media sonrisa mientras niega con rotundidad.
—De eso nada. Le caigo como el culo, pero es muy consciente de que en estos momentos le conviene tenerme cerca.
Le observo con detenimiento. Sé que ha venido por mí, su mensaje lo dejó muy claro, sin embargo no entiendo por qué se empeña en permanecer a mi lado si entre nosotros no puede haber nada. A mí cada vez se me hace más difícil.
—No creo que pase nada mientras estemos en la ciudad.
—Y aun así, él está preocupado por ti —dice con la mirada perdida y casi parece que ha dejado escapar un pensamiento en voz alta.
—Ha resultado ser un buen amigo.
Se gira de nuevo hacia mí y recorta la distancia que nos separa.
—¿Estás segura de que no es más que eso?
No tengo que justificar mi relación con el vampiro ante él así que prefiero contraatacar.
—¿Eso a ti no te debería dar igual?
Baja la mirada, como si le hubiera pillado en una falta pero cuando sus ojos se encuentran de nuevo con los míos, su contundencia me intimida.
—Sabes que no.
Algo revolotea en mi interior al escuchar esa respuesta y me recuerda que apenas hace unos días, confesó que estaba enamorado de mí. Sin embargo, también me enfada. Y me duele. Tanto como para que recule y suelte sin pensar:
—Ya me he cansado Luca. Contigo es dar un paso adelante y dos atrás. No puedo seguir así. Decídete de una vez o me voy a volver loca.
No le doy opción a contestar. Le dejo ahí plantado y voy directa a la puerta de la habitación de Mikael. Golpeo con más mala leche de la que debería y el vampiro abre casi al instante.
—Ey, tranquila. Que la puerta no te ha hecho nada... —Mira hacia fuera y ve a Luca que nos observa con gesto contrariado—. ¿Qué pasa? ¿La parejita ha discutido?
Lo que me faltaba. Que encima se burle de mi situación con él. Por primera vez en mi vida, me está apeteciendo arrancarle la cabeza a alguien.
—No me toques las narices que ya es lo que me faltaba —bufo cada vez más cabreada—. ¡Qué! ¿Nos vamos?
¡Hola, hola! ¡Feliz 2025 gente de Wattpad! ¿Qué tal habéis comenzado el año? Espero que muy bien y que este año se presente con grandes expectativas y consigáis todo lo que queréis (o al menos gran parte).
Yo ya tuve un gran momento ayer, ya que durante unas horas, esta historia estuvo en el puesto #3 de Fantasía y #2 de Acción. Y no sabéis lo difícil que resulta alcanzar ahora esos puestos en el ranking... Así que estoy la mar de contenta. ¡Mil gracias porque vuestras lecturas, votos y comentarios son los que hacen que la historia crezca!
Y ahora al tema. He de decir que me encanta esta "alianza" que ahora tienen Mikael y Luca y adoro a este grupito de amigos tan diferentes pero que a la vez encajan tan bien (ni yo misma lo hubiera dicho al principio de la historia).
Y en cuanto a Olivia y Luca... mirad, como lectora pienso "Luca tío, decídete ya. ¡Lánzate!". Pero he de reconocer que me encanta el slow burn y la tensión sexual no resuelta y por eso suelo alargar tanto estos "sí pero no" entre los protagonistas. ¡No puedo evitarlo! Culpa de las series coreanas también, que me tienen mal acostumbrada, jajaja
No me enrollo más. ¿Tenéis ganas de conocer a la amiga de Mikael? ¿Qué pensáis que pasará?
Dejadme comentarios estaré encantada de charlar. Pronto más. Besitossssss
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