Brandon

Nos sentamos en una de las mesas del café, Evelyn se ha acercado a nosotros para saludarnos y preguntar que vamos a tomar exactamente, ya que además de café, en este lugar sirven otras bebidas como jugos de frutas y esas cosas.

Yo he pedido como siempre una taza de café y Laura también, normal como el mío.

Evelyn se acerca nuevamente hasta nuestra mesa para dejarnos las tazas de café. Ahora estoy frente a frente con la chica que ha causado un desorden en mi cabeza, un lindo desorden.

Ella observa todo el lugar detenidamente, como si estuviera captando cada detalle de este hermoso sitio en una fotografía. Yo tan solo la observo, aún sigo sin creer que ella este aquí, sentada en la misma mesa conmigo, esto es algo que solo pasa en mis sueños.

O al menos en mis últimos tres sueños.

-Este lugar es muy bello-dice observando el café-El ambiente es bastante relajante.

-Sí, es bastante acogedor.

-Ahora entiendo porque vienes tanto a este lugar-comenta.

Sonrió ante su comentario.

-Bueno, me recuerda mucho a mi casa-digo recordando que mañana iré a casa.

-¿Vivías en una cafetería?-pregunta de repente.

-No, no-respondo de inmediato-Mi abuelo tenía una cafetería en Sheffield y siempre lo ayudaba allí, y cuando vine a este lugar por primera vez a este lugar por primera vez-digo explicando un poco porque vengo mucho a este lugar.

-Me imagino que cuando vas a tu casa, lo primero que haces es ir a la cafetería ¿no?

Bajo la mirada observando la taza llena de café, lo tomo en mis manos, suelto un pequeño suspiro y digo:

-De hecho no-levanto de nuevo la mirada-El falleció hace tres años y el café dejo de funcionar.

-Oh cuanto lo siento-se disculpa.

-Tranquila.

-Yo no debí haber mencionado algo que traiga recuerdos tristes.

-No tienes por qué disculparte, de todos modos tu no sabías nada, así que no te preocupes.

Ella tan solo asiente y bebe su primer trago de café. Yo imito su acción y bebo de mi café, sentir este tibio liquido deslizarse por mi garganta es maravilloso, al menos yo lo siento de esa manera. No se en que momento nació de mi parte tanto a amor por el café, siempre pienso en eso, pero al final le restó importancia porque es algo que viene desde hace años, prácticamente desde que era un niño.

Aunque no lo admita ante ella, por un momento la mención de mi abuelo, despertó pequeños fragmentos de tristeza en mi memoria.

-Y bien-dice poniendo su café en la mesa- ¿De qué quieres hablar?-pregunta entonces.

Pienso por unos instantes.

-Pueees-sigo pensando alargando la E-No se

Tanto pensar para decir No sé, bien hecho Brandon eres un genio.

Ahora ella es la que piensa-Empecemos por presentarnos.

-¿Presentarnos?

-Si, tú te presentas, contando de dónde vienes, que estudias, tu plato favorito, tu animal favorito, etc.

Pues claro idiota, cuando ella decía presentarnos, se refería a contarle un poco de mi vida y asi darle algo de dinámica a la conversación antes de que la tarde llegue a su fin.

Si hubiera un premio que destaque al idiota del mes, yo me llevo los doce premios por años.

-Ahhh, si que tonto soy.

Ella sonríe levemente.

-Bien, pues comienzo yo-bebo un poco de mi café antes de comenzar-bueno, mi nombre es Aron Brandon Rogers Gutiérrez, tengo veintiún años mi padre es inglés y mi madre española, pero yo nací en este país asi, específicamente en la ciudad de Sheffield en un pueblo lejano al casco urbano; creci toda mi vida allí hasta terminar el colegio, después aplique para una de las becas de la universidad de Manchester y lo conseguí debido a mis buenas calificaciones, y por ello estoy en tercero de Psicología-me detengo por un momento para beber mi café el cual estoy por terminar en el próximo trago, ella me observa atentamente, como si estuviera grabando todo lo que digo-asi que prácticamente estas frente a todo un Nerd.

Ella ríe ahora en una pequeña carcajada-Eso no es malo, hoy en día se ha normalizado mas eso y los chicos que son considerados raros al ser un "NERD" ya no sufren tanto de Bullying, o mejor dicho ya nadie se percata de eso-explica tomando su café-hasta se podría decir que molestar a los chicos muy dedicados al estudio o Nerds haya pasado de moda.

Su explicación es simplemente perfecta. O sea, tiene razón en todo, si nos remontamos diez años atrás en el pasado nos encontraremos con ese típico brabucón, el más grande de todos, el que siempre se metía en peleas, y siempre estaba allí para darle su dosis de maltrato diario al chico Nerd que nisiquiera articulaba una palabra, pero el hecho de mantener silencio y tener buenas calificaciones era mas que suficiente para que sea golpeado maltratado y humillado en frente de todos por el brabucón y los demás chicos que lo seguían.

Todo para mostrar una superioridad de fuerza física y mostrarle a todos que y por supuesto que el brabucón tenia a todas las chicas tras él, porque era el fuerte, el guapo, el musculoso, en fin.

-Pero bueno no hablemos de eso-digo para volver al tema en el que estábamos anteriormente.

-Está bien, sigamos.

Ahora no sé que decir, o sea ya le he dicho prácticamente mis datos personales.

Me quedo en blanco por unos momentos hasta que una idea se enciende en mi cabeza, algo un poco ridículo tal vez para otros pero creo que estaría bien.

-Bueno como ya te he dicho, mi nombre, mi edad, de donde vengo, que carrera estoy estudiando actualmente, entonces se me ocurre-me detengo pensando si no seria demasiado ridículo, pero al final digo que ya no me importa y lo digo-que te parece si me haces preguntas.

-¿Preguntas?-pregunta algo confundida.

-Si, tu me haces preguntas y yo las respondo-comienzo explicando-lo que sea, todo lo que quieras saber de mi. Después yo hare las preguntas y te toca a ti contestar, es una idea que tengo para que haya una agradable dinámica en la conversación. Pero si no te gusta podem..

-Ya-me interrumpe-me parece una buena idea.

Sonrió ante su respuesta-Pues tira las preguntas chica-digo en un tono divertido y ella se ríe.

Oh, esperen un momento le saque una sonrisa a la señorita Laura Stones. Creo que me está yendo muy bien en esta cita. Se me olvido que esto no es una cita, bueno para mi si es lo mas parecido a una cita, pero no creo que ella piense igual.

-Aquí voy-dice bebiendo lo que creo fue su último trago de café-¿Cuál es tu comida favorita?

-Es el espagueti-contesto-me encanta, al menos el que lo prepara mi mama ¿Y la tuya?

-Las preguntas las hago yo por ahora y las contestas.

-Ah si cierto , me olvide
Estúpido cerebro, digo mentalmente, se me había olvidado ese punto.

-Segunda pregunta-dice y se detiene a pensar un rato-¿Tu animal favorito?

Como esperaba me está preguntando por mis cosas favoritas.

-Tengo varios, pero si tengo que elegir, elijo a los perros.

-¿Qué haces en tu tiempo libre?-pregunta ahora.

-Pues suelo venir aquí a beber un poco de café, también suelo caminar por el parque antes de que el sol se oculte por completo.

-¿Por qué prefieres venir a una cafetería para estudiar en vez de ir a una biblioteca donde estas rodeado de miles de libros, además de que es un lugar más tranquilo y silencioso en donde te podrás concentrar mejor?-pregunta de forma inesperada haciendo que me quede en blanco por al menos treinta segundos.

-Prefiero este lugar porque puedo mantener mi mente concentrada por más tiempo, aunque parezca increíble es así, porque tú me dirás wey la biblioteca es un lugar silencioso no vas a perder la concentración, y es justamente eso lo que me desconcentra, necesito el ruido para estudiar, necesito escuchar a la gente a mi alrededor, necesito percibir el olor a café. Aunque claro a veces también necesito silencio para estudiar, es por eso que a veces me quedo a estudiar en mi habitación, pero no sucede a menudo.

Ambos nos quedamos en silencio por un buen rato.

-Oye lo siento, si te respondi de una forma un poco grosera-digo rompiendo el silencio, porque creo que fui algo duro al responder.

-No te preocupes, mi pregunta también fue algo grosera-dice soltando un leve suspiro-Asi que lo siento también

Me alivia mucho saber que no está enojada, creo que casi todo se va a la mierda.

-Ahora es tu turno.

-Mi turno?-pregunta confundida
-Si, es tu turno de presentarte y responder mis preguntas.

-Pero aún no hemos terminado contigo-protesta.

-Si, pero nos hemos pasado casi una hora hablando de mi y nada de ti
Ella asiente lentamente-Esta bien, pero te aseguro que no hay nada interesante que te pueda contar.

-No me importa, yo quiero conocerte...