Capítulo 7.-Una decepción total

Una disculpa por no publicar la semana pasada, andaba algo ocupado. Sin más, aquí les dejo el séptimo capítulo

—¿Cómo me notaste? —cuestiona visiblemente sorprendido.

“¿Es enserio? Eras visible a simple vista”

Suelto un suspiro, después de todo se trata de un niño.

—Eso no importa, sólo dime lo qué quieres de mí —pregunto antes de apartar la mirada de él.

“Y deja de mirarme tanto, maldito mocoso precoz”

Es enserio ¿Qué no existen más mujeres? Parece que todos a mí alrededor se fijen en mí ¡Tan desagradable!

Espera, ¿No suena a algo que Eloah haría? No, no creo que se meta en algo tan trivial ¿O sí?

—Es sobre mi hermano —musita—. ¿Por qué estás tan apegada a ese perdedor?

“Vamos a ver, este mocoso tiene unos diez años, entonces cuándo conocí a Adrienne, éste mocos tendría unos dos”

—Oye, ¿Cuántas veces han hablado? —pregunto.

—U-Una —musita.

“Ya entiendo, ¿Fue cosa de sus padres?”

Me pongo de pie y palmeo su cabeza.

—Escucha, no está bien confiar sólo en lo que te digan sobre un persona, guíate de lo que tus ojos vean ¿Bien? —declaro.

Sonrojado, aparta mi mano y sale corriendo, alejándose de mí rápidamente.

—¡Maldita sucubo!

“¿Eh?”

El gran yo está tan confundido ahora mismo, ¿Hice algo mal? No lo entiendo, definitivamente no lo hago, creo que estoy perdida.

Me recuesto en el pasto.

—Si tan sólo fuera un chico —musito—. ¿Por qué tenía que ser una niña? No me molesta ser de otra raza, pero al menos en un niño.

Por cierto, ¿No son estás medias demasiado ajustadas? No lo siento, pero remarcan demasiado la zona de mis muslos.

Si me viera desde fuera, o si fuera otra persona y conociera a Kazue ¿Intentaría mover ficha con ella?

Esto es malo, me estoy volviendo narcisista.

¡Estoy tan aburrida! No quiero salvar a este mundo, sólo quiero estar tranquila en algún castillo o lugar alejado junto a Daries y el resto.

Encima, ni siquiera tendría que estar aquí ¿No? Quiero decir, los zorros metamorfos vienen de fuera.

Un momento, era ciudad Infinity ¿No?

Lo había olvidado, ¡¿Cómo puedo ser tan estúpida?!

Me gustaría contar con ayuda para reorganizar mis pensamientos, pero, Eloah definitivamente no querría esto, tengo que arreglarmelas por mi cuenta.

Pero, ¿Dónde puedo encontrar más información al respecto? Tengo lo que me dijo la jueza al respecto, y también lo poco que me dijo padre.

También, está ese asunto con la emperatriz vampira, ¿Qué es lo que quería de mí?

—Ah, aquí estabas.

Miro hacia atrás, encontrándome con Daries y Reina, quiénes se aproximan a mí.

—Oh, sólo eres tú —musito.

—¡¿Por qué lo dices cómo si fuera malo?!

Me pongo de pie y sacudo la tierra de mí.

—¡Qué linda! —Exclama Daries abrazándome.

—Sí, sí, gracias —declaro ligeramente sonrojada.

Tras ello pongo a Reina en mi campo de visión.

—¿Y que querías? —pregunto a  Daries.

Honestamente prefiero estar acompañada, así evito pensar en lo que me dijo Eloah.

—Solamente me preocupé porque no te ví —musita Daries.

—¿Sólo eso? —No puedo evitar comenzar a reírme.

—¡No te burles! —Me recrimina Daries sonrojada.

Tras un rato, dejó de reír y abrazo a Daries.

—Tranquila, no volveré a irme a ningún lado de nuevo ¿Bien? —pregunto.

Ella asiente algo aturdida por mi repentino gesto afectuoso.

—¿Quién eres tú? K-Kazy jamás haría eso —declara Daries separándose con un rubor en sus mejillas.

—No creo que te encuentres a otra persona idéntica a tí y que sea tu gemela —musito.

Golpeo suavemente su frente a lo que ella hace un puchero, sonrío ante su reacción.

“Debo seguir haciéndome fuerte, o no podré protegerla”

—¡Te odio! —declara sonrojada y alejándose de mí rápidamente, aunque el rojo en toda su cara denota su vergüenza.

Vuelvo a recostarme en el pasto.

“Este mundo, no tiene dioses ¿Cierto?”

Y también creo recordar que ni siquiera Eloah es todo poderoso, por lo que es posible enfrentarle y sobrevivir.

O cuándo menos quiero creer en esa minúscula posibilidad, aunque no sé si me sea posible.

Permanecí recostada hasta medio día, que fue cuándo mi estómago comenzó a gruñir.

Cuándo llegué de vuelto a mi habitación, me topé con Reina y Daries cocinando algún tipo de caldo fuera de nuestro edificio, sobre una fogata.

—¿Ya volviste? Creí que tardarías más—comenta Daries al darse cuenta de mi presencia.

—Me aburrí —respondo rápidamente.

Aunque tengo la extraña sensación de que estoy olvidando algo, aparte de mí vida en el otro mundo.

¿Tendría que ver con Eloah? No creo, no olvidaría algo así aunque quisiera, ese ser me causa muchos escalofríos.

—¿Todavía no regresa el patriarca? —pregunto esperanzada.

Aunque lo único que obtengo es una respuesta negativa, sin nada que hacer decido esperar afuera, sentada mientras ellas terminan de cocinar.

Obviamente ofrecí mi ayuda, pero nuevamente fue rechazada, tal parece que Daries no cree que sepa cocinar correctamente.

Tampoco es que me importe particularmente, no es qué disfrute cocinar de cualquier manera.

—¡Volvieron! —Grita una anciana.

Al mirar hacia la entrada a la aldea, encuentro que todos arrastran por grupos una o varias presas.

El grupo de Adrienne únicamente arrastra un pescado gigante.

Aunque se ven seriamente lastimados, y no quisiera desconfiar de la gente, pero el padre de Adrienne no parece disfrutar que estemos aquí.

Pero si ese es el caso ¿Por qué nos dejaría pasar?

No tengo idea.

—¿Estuviste esperando por mí, querida? —declara August entregandome una rosa.

Suelto un suspiro y la tomo para simplemente evitar escucharle hablar más tiempo.

—Regresamos —declara Adrienne.

—Kazue, quisiera hablar contigo a solas —declara repentinamente el héroe.

Por su manera seria de hablar, recordé que todo esté tiempo se ha mantenido más bien callado.

“Me dió una primera impresión más bien diferente”

—De acuerdo —respondo.

Tras ello me pide que le siga, miro hacia los chicos, quiénes simplemente se encojen de hombros.

Unos minutos después, nos encontramos en el mismo lugar dónde he estado una considerable parte del día.

—Escuché que conociste a la emperatriz vampira —musita el héroe—. ¿Había alguien con ella?

“¿Alguien?”

—Sí, un mayordomo —respondo.

—Así que sigue con vida —musita.

“¿Lo conoce?”

Hubo un silencio incómodo que duró varios minutos en los que no supe que decir, ya que sentí por momentos que mi pureza corre peligro.

—Fue la persona que me crió en un orfanato —musita—. Aunque un día, simplemente desapareció, incendiando el orfanato junto con los niños que estábamos dentro pero afortunadamente fui invocado antes de morir.

No entiendo lo que me trata de decir ¿Por qué contarme todo esto?

—"La más grande traidora de la humanidad" —comenta—. Yo, viví en ciudad Infinity.

“¡¿Eh?!”

Espera, espera, no entiendo del todo.

—Creí que habría beso y algo más —Comenta August.

—Por favor, cállate —declaro—. Supongo que de ahí el Infinity, pero espero y sepas que eso sólo me hace desconfiar más de ti.

Tras escucharme parece algo incómodo.

—Era sobre eso, y también sobre esa época del año de lo que quería hablarte.

“¿Qué época?”

Quizás notó mi confusión ya que suspiró antes de finalmente hablar y dejarme helada.

—La temporada de celo de los zorros metamorfos está cerca —musita.

—¿Eh?

Quedé en shock tras darme cuenta de ello, ya que técnicamente contamos cómo "fauna" hasta antes de ser adultos.

¿Por qué? Entramos en celo cada invierno luego de cumplir quince años.

Y pensar que me enteraría por este sujeto.

Esto es malo, si es cómo a los animes ¿No cambiará mi personalidad por completo? Quiero decir, seguramente querré hacerlo, aunque no sé que tan fuerte sea el celo de los zorros metamorfos.

—Ten —declara lanzandome un pequeño frasco con dos tabletas—. Con eso al menos podrán pensar un tiempo, pero deberías "satisfacerte" si lo que quieres es que pare.

“¿Eh?”

Tras notar mi falta de reacción, tuvieron que llevarme a rastras de regreso a nuestra vivienda.

Aparentemente, el celo de un zorro metamorfo es lo suficientemente fuerte cómo para hacernos pensar únicamente en ello, además de que nuestro cuerpo arderá en deseo sexual.

“Esto será un problema”

Al llegar la noche tras no poder dormir decido dar una breve caminata, y llegué nuevamente a aquél lugar.

“Invierno no queda muy lejos, probablemente esté en celo para cuándo estemos viajando, y no sólo yo”.

Por ahora tomamos la pastilla, lo que debería retrasar el celo un par de meses, pero ¿Y luego? El héroe dijo que por nuestro bien no tomemos más de una al año.

Aunque a todo esto ¿De dónde las obtuvo? Dudo que en este mundo haya tecnología para ese tipo de pastilla.

También me dijo que evite acercarme a hombres demasiado por al menos un par de meses, ya que eso podría activar mis instintos.

“¡Maldita especie degenerada!”

Pero ese no es el motivo principal, aparentemente nuestra especie es... Masoquista, sí, probablemente si alguien me domina y fuerza, terminaré convertida en una zorra literalmente.

¿Realmente es el momento de eso? Con todo lo que está pasando, que ocurra justo ahora.

Y lo peor es que ya he estado sujeta a mis instintos antes, quiero decir, cuando acepté sin rechistar el disfrazarme para August.

“De todas las razas posibles ¿Por qué en una tan problemática?”

—¿Kazue?

—¿A-Adrienne?

Digo tras sobresatarme.

—Es sólo que pareces algo decaída —delcara sentándose a mi lado y tomando mi mano.

Una extraña corriente eléctrica recorre todo mi cuerpo.

—¡E-Espera!

Le empujo levemente, siento mi cuerpo arder.

“¿Sólo por eso?”

—¿Estás bien? —pregunta Adrienne—. Ah, ¡¿Justo ahora?!

Quizás se percató de que extrañamente entré en celo sólo por su toque, ya que Adrienne tiene un ataque de pánico.

—E-Está bien —digo jadeando—. N-No es nada.

“Realmente malo, no puedo pensar con claridad”.

—¿Q-Qué hago?

—B-Bueno.

Me dejó recostarme en su regazo, mis mejillas arden, siento una intensa fiebre y sobre todo el problema son las feromonas que estoy emanando y parecen empezar a hacer efecto en Adrienne.

—Lo odio —musito—. ¿Por qué tenía que renacer en esto? Yo....

No pude continuar, ya que fui "atacada" por Adrienne.

¿El lado bueno? Nadie nos vió y mi celo se calmó, aunque el malo es que no pude reincorporarme por un rato.

Eso y que ni Adrienne ni yo hemos podido mirarnos a la cara en todo este rato, ya ha amanecido.

“Yo, cómo mujer...”

Terminamos de vestirnos y nos quedamos admirando el paisaje en silencio.

—¡Lo siento! —exclama Adrienne haciendo una reverencia—. Y-Yo, no estaba pensando con claridad, fue como por instinto.

—Definitivamente odio este mundo.

—¿Eh?

Mientras maldigo a viva voz todo lo relacionado a este mundo, Adrienne confundido no sabe muy bien que hacer.

—¡Definitivamente mataré a Eloah!

Al regresar, nos mantuvimos actuando dentro de lo normal, aunque Adrienne quizás arrepentido, no paró de voltearme a ver durante la mañana.

Curiosamente nadie le pareció curioso que no regresaramos en toda la noche.

Sus maneras de actuar sólo cambiaron al verme murmurar maldiciones durante una parte importante del día.

Por ese motivo, todos se mantuvieron al margen de mí, ya que mi nivel de irritación alcanzó límites mayores.

—Kazy —susurra Daries a mi oído—. ¿Porqué tú y Adry huelen igual? Bueno, puedo hacerme una idea.

—Dices algo y te mato —declaro con mis ojos inyectados en sangre

Al verse amenazada, Daries solamente asiente rápidamente con la cabeza antes de alejarse de mí.

Aunque, dejando de lado la amargura, finalmente apareció a quién estuvimos buscando todo este tiempo.

La leyenda viviente, el rey de las bestias, el hombre más fuerte del mundo.

Siendo un gigantesco tigre humanoide, excesivamente musculoso y que únicamente viste con una especie de shorts de licra negros.

Sí, este hombre es ¡Una decepción total!

—¿Ustedes son las hijas de Regiel? —declara inmediatamente al verme junto a Daries.

—Sí —respondo cortante.

—¡Bien, vengan conmigo!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top