Escapé lo más rápido que podía de él, no tenia ganas de verlo.

Estaba segura de que Toy Bonnie iría tras de mi, así que pasé por medio de la pista de baile para perderlo entre la multitud. Mi cabeza daba muchas vueltas y no necesito que él me esté alterando emocionalmente.

No estaba prestando atención por dónde caminaba y choqué contra alguien, tuve suerte de que era conocida

-¿Shia, que tienes? ¿Estás bien? -Mangle me pregunta preocupa.

-¡Si! Perfectamente bien... Solo... Necesito otro trago -Tambaleaba de un lado a otro con muchos mareos, ella me sujeta de un brazo y de la espalda.

-No lo estás, vamos a sentarnos -Me lleva a unos asientos que estaban del otro lado de la pista de baila y hace que me siente con mucho cuidado y me echa aire con su mano -¿Qué te pasó?

-Nada... Solo que por poco me agarraba a golpes con una tipa.

-¡¿Qué?! ¿Por qué?

-Se puso hablar mal de mi y de lo que pasó con Bon y la pizzería.

-Pero Shia... Necesitas dejar eso atrás, que no te importe lo que la gente piense de ti.

-¡Es que no puedo, Mangle! Ese tema me atormenta como no tienes ni idea, y ahora ese chica seguirá contando todo a más personas y no voy a tener amigos más nunca.

-Por favor mantén la calma, te buscaré algo de agua.

-No, tráeme de esa bebida... Esa que es muy sabrosa... la que se coge a la gente cada vez que la bebe...

-¿Perdón? ¿Estabas bebiendo...?

-Si, es muy buena. ¡Ya tráeme una!

-No, no, no. Tu tienes que quedarte aquí y dejar que se te baje todo ese alcohol de encima.

-¡No quiero! -Me levanté de mi asiento -¡Nunca me he sentido tan viva! ¡Necesito más!

-¡Shia, espera!

Fui nuevamente al bar con la esperanza de que esa estúpida no estuviese ahí.

Me fijé primero si no había señales de ella, y aproveché para acercarme a la barra.

Le pedí a la bartender que me diera más de esa bebida y mientras esperaba un sujeto alto y bien vestido se me coloca a un lado pidiendo un vaso de Ron. Se veía muy guapo y con pinta de que tenía mucho dinero.

Volteé a ver a otra parte por si no veía a Toy Bonnie cerca, sabía que el aún me estaría buscando.

-Nunca te había visto por aquí -El hombre que estaba a mi lado me dirige la palabra.

-Es mi primera vez aquí -Dije mientras la chica nos daba nuestras bebidas.

-¿Viniste sola?

-Vine con unos amigos, pero cada quien está en lo suyo.

-¿Y por qué no hablas y conoces a gente nueva?

-Estoy hablando contigo.

El hombre se echó a reír por mi comentario.

-Eres graciosa, eso me gusta -De inmediato vi el propósito de esta conversación. Me daba un poco de miedo por las intenciones de este sujeto pero sería algo ventajoso si Toy Bonnie me ve coqueteando con él y se ponga celoso, solo tengo que ser cuidadosa.

-Me lo dicen seguido -Dije tomándome un largo sorbo de mi bebida.

-Apuesto a que sí, y muy hermosa también -Me dice tratando de ser coqueto.

-Gracias... -Respondí apenada por el cumplido.

-¿Te gustaría venir conmigo a un lugar mas privado? Con la música casi no puedo escucharte -Mi corazón aceleraba, no sabía lo que quería de mí pero me daba mucha curiosidad, así que acepté irme con él.

-Claro... Sólo espera un segundo -Me tomé la bebida de un trago, quiero quedar lo más ebria posible, lo necesito.

Fui con él y me guío a la parte de atrás del club donde hay una zona de habitaciones privadas, no estaba segura si quedarme con este tipo o irme a pasar mis penas sola. Claramente escogí quedarme.

Mientras caminábamos no veía a Toy Bonnie por ningún lado, de nuevo, este chico si se sabe esconder muy bien, hasta en la pizzería se desaparece a veces.

-Aqui estamos bien. O si te parece podemos entrar a una de estas habitaciones, tengo pase VIP que nos ayudaría.

-Me parece que aqui es un buen lugar -Dije con confianza, quién sabe que querrá hacer ahí adentro.

-Uh... Bueno -Me mira muy sospechoso, pero traté de actuar como si no me diera cuenta -¿Y tienes familia?

-Mi hermana, mis padres murieron hace un par de años... En un accidente de avión...

-Oh... Lamento escuchar eso.

-No te preocupes, son cosas que pasan... -Volví a sentirme mareada y la vista se me nublaba, jamás había estado así.

-¿Segura que no quieres entrar? Deberías acostarte y dejar que se te pase -El sujeto me tomó de los brazos sosteniéndome para no caerme, me sentía muy mal y hasta no podía hablar.

De imprevisto me lleva adentro de la habitación, estaba oscuro, y por mi condición apenas podía ver con las luces de neón que había decorando alrededor de las paredes y la cama. Me deja caer sobre ella con cuidado.

Me acomodé con la poca fuerza que tenía pero de pronto sentí unas manos sosteniendo las mías inmovilizándolas y él colocándose encima de mí.

-¿Pero qué...?

-Eres muy sexy, ¿Sabías? -El hombre me sujeta las manos con fuerza con una de las suyas y con la otra libre me comienza a tocar mi cintura y baja hasta mis caderas.

-¡No! ¡Suéltame! -Apenas podía gritar, mi garganta ardía y pataleaba con todo lo que podía pero él me doblaba la fuerza.

Ahora me arrepiento de haber aceptado ir con un extraño.

-No irás a ningún lado, preciosa. Vas a disfrutar mucho de esto tanto como yo -Él intentando besarme yo volteaba a la cabeza para evitar que lo hiciera.

No importaba lo que hiciera, no lograba salir de sus brazos. Me comienza a subir el vestido pero cuando vi la oportunidad le di una patada en su entrepierna.

-¡Ah! ¡Ni se te ocurra, perra! -Me da una dolorosa bofetada dejándome más inconsciente de lo que estaba.

No podía pensar en las cosas que este idiota quiere hacerme, sólo esperaba lo peor...

...

Sentí una pequeña brisa en mi rostro, lo que hizo que me despertara. Abrí mis ojos lentamente y logré ver con dificultad a mi amiga albina echándome aire con su mano y diciendo mi nombre.

-¿Shia? ¿Shia, me escuchas?

No lograba recordar nada, sólo que me dolía mucho un lado de mi cara y mi cabeza estaba que estallaba, me moví un poco para enderezar mi cuerpo en el sillón.

-Tranquila, ve despacio. Recibiste un muy mal golpe.

-¿Qué...? ¿Qué me pasó?

-Eso ya no importa, lo importante es que ese hombre ya no se meterá contigo. Gracias al cielo no te hizo nada horrible, además del moretón que te dejó.

-¿Disculpa? ¿Qué hombre?

Luego vi a Foxy trayendo una bolsa de hielo pequeña en sus manos -¿Ya despertó?

-Esta algo desorientada pero se pondrá bien -Ella toma la bolsa de hielo y me la coloca en el rostro para aliviar la hinchazón.

-No debiste dejarla sola en primer lugar, Mangle.

-Yo nunca pensé que alguien quisiera hacerle algo, no es mi culpa -Ellos discutían pero sus voces y la música del lugar me atormentaba y los mareos volvían aparecer.

-Por favor... No discutan...

-Toy Bonnie está con los de seguridad, voy a buscarlo para que nos vayamos -Foxy fue a buscar a nuestro amigo mientras que dejaba Mangle cuidándome.

-Lo siento mucho, Shia. Te juro que la próxima vez que salgamos no te dejaré sola ni por un segundo.

-¿Qué hora es? No quiero irme aún...

-¿Qué? ¿Acaso no ves lo mal que estás? Necesitas descansar.

-Mangle, se supone que vinimos a divertirnos. Quiero divertirme... Vivir la vida... -Me quito la bolsa de hielo dejándola a un lado.

-No estás en condiciones, Shia... Ya debemos irnos -Ella me ayuda a levantarme.

-Si quieres ser buena amiga, por favor quedémonos.

-Perdón, no será posible -Toma nuestras carteras y me lleva hasta donde estaban los chicos en la salida.

No había terminado de pasar por la puerta de salida y me solté de ella para ir directamente a un contenedor de basura más cercano y sacar todo el líquido de mi estómago. Creo que es normal que personas salgan así de un bar...

-Hey... -Alguien me sostiene el cabello por detrás. Mi cabeza daba tantas vuelta que no podía reconocer las voces a mí alrededor.

Tomé mi tiempo para recuperarme del vómito y volteé a ver a la persona que me estaba ayudando.

-Toy Chica, me tenías preocupado. No sabría que haría si ese horroroso pervertido te hacía algo -Toy Bonnie me abraza con fuerza desesperado, yo correspondí con los ojos llenos de lágrimas.

-Perdóname tú a mí... No se que me pasó pero lo siento mucho...

-Oye, no es tu culpa, ¿Ok? Ya no volverá a pasar...

Los chicos se acercan a nosotros hablando entre ellos con voz baja, no sabía de que hablaban pero no era necesario, solo quería estar abrazada con mi chico el resto de mi vida.

-Llamé un Uber para que viniera por nosotros -Mangle nos dice guardando su celular.

-Ay no... No quiero irme... Quiero seguir en la pista bailando.

-Shia, aún estás ebria.

-¡Ustedes no me van a decir que hacer! -Exaltada volví a ir a la entrada del club pero los tres me detuvieron y me sujetaron para que me calmara mientras esperábamos el Uber.

...

Llegando al edificio Toy Bonnie y yo nos bajamos del auto, él ayudándome a estar de pie ya que casi me caía.

-¿Seguro que no quieres que nos quedemos a ayudarte? -Es la primera vez en la que Foxy se preocupa tanto por mí.

-Si... Tendré todo bajo control, ustedes cuídense.

-Ustedes también, nos vemos -La albina cerró la puerta del auto para irse.

El peliazúl me lleva cargando hasta adentro del edificio tomando el ascensor para llegar al piso correspondiente de su apartamento, entramos y me lleva directo a mi habitación. Me sienta en mi cama ayudándome a quitarme las zapatillas.

Con sueño y el alcohol en mi cabeza me quedé mirándolo muy embobada, hasta se me olvida que debo comportarme normal frente a él.

-No sé si estás consciente o no pero lamento la discusión que tuvimos... -Se disculpa haciendo que recuerde lo que pasó con su "amiguita".

-Pues, esa chica no debió decir tal cosa cuando no sabe lo que pasó realmente...

-Uh... Pensé que también me pedirías disculpas -Coloca los tacones a un lado.

-Yo no tengo por qué disculparme, ella empezó provocándome.

-Si, bueno... Pero si quieres ser la buena del conflicto deberías hacerlo.

-Yo no le debo nada a nadie, fin del asunto -Me levanté de la cama y me acerqué al tocador para tomar un cepillo y pasarlo por mi cabello.

-Me sorprende que pienses así -Lo miré desde el reflejo del espejo y se sienta en la orilla de la cama.

-Hay cosas de mi que aún no sabes.

El hace una mueca aguantándose la risa.

-¿Cómo qué?

Lo miré por encima de mi hombro y dejé el cepillo en el tocador.

-¿Qué quieres saber?

-Dime algo que no sepa de ti, lo que sea. Al menos una.

-Jum... -Me puse frente a él apoyando mis manos encima de sus piernas y lo miraba a los ojos.

-¿Uh? -Me mira extrañado levantando una ceja -¿Qué haces?

-Tu conoces mi lado tierno y gentil... Pero no haz visto mi lado coqueto y sensual -Subi mis manos lentamente colocándolas en sus hombros y sentándome encima de su regazo. Me sentía muy agitada por mi pulso acelerando cada vez más cuando estaba tan cerca de él.

-¿Toy Chica? -Vi sus mejillas enrojecer y sus nervios aparecer.

-¿No me crees? -Toqué con delicadeza su pecho y procedi a desabrochar algunos botones de su camisa -Puedo ser capaz de hacer muchas cosas... -Despacio comencé a mover mis caderas por arriba de su entrepierna.

-Ah... Shia, para... -Su voz ronca me volvía loca. El chico resistía a mis movimientos y trataba de apartarme de él.

-¿Acaso no te gusta? -Seguí aumentando la velocidad y dejaba unos cuantos besos en su cuello.

Su perfume olía tan rico... Me atraen mucho los hombres bien perfumados, era una de mis debilidades.

-¡Ah! ¡Toy Chica, detente! -Toy Bonnie se quejaba y me decía que me detuviera, pero ese era el punto, no quería.

Continué hasta sentir un bulto debajo de mí. Era mucha la adrenalina que tenía y quería seguir mi pequeño baila y tocar por completo ese paquetote.

La gloria se terminó cuando él me levanta y me deja acostada bocarriba en la cama. Estuvo unos segundos encima de mi impidiendo que hiciera cualquier otro movimiento seductor.

Lo veía a los ojos y no estaba para nada contento, su rostro mostraba una frialdad y repugnancia nada normal.

-¿Qué pasa? ¿No quieres jugar? -Inconscientemente solté una pequeña risa, lo cuál a él le molestó aún más.

-Seguramente por esto mismo casi te violan en aquella habitación. Tú no puedes tener este tipo de comportamientos con nadie, Shia, tú no sabes de qué son capaces -Sonaba muy alterado.

-¿Cómo sabías que estaba con alguien a solas?

Se quedó un rato pensando lo que iba a decir.

-Ese no es el punto aquí... Debes controlar el consumo de alcohol si no quieres acabar traumada y en un hospital.

-Ah... Tú no me mandas a mí... Puedo cuidarme sola... -De repente empecé a ver borroso, me atrapó el sueño de un tirón.

-Estas muy equivocada, sólo quiero que estés sana y salva... -Se da cuenta de mi repentino fallo visual y me ayuda a subir hasta las almohadas acomodándome en ellas.

-Se-seguro a tu noviecita si la dejas que te haga de todo...

-Ella no es... Ah, estás borracha. Debes dormir para que se te pase.

-No lo necesito... Es-estoy bien... -Doy un leve bostezo y cierro mis ojos llenos de cansancio.

-...Descansa, nena -Fue lo último que escuché de él antes de quedarme dormida y sentí un tierno beso en mi frente antes de que se fuera. Los pequeños detalles siempre son los más lindos en una relación, sea amorosa o de amistad.

...

Mi cabeza dolía a millón, mi cuerpo lo sentía pesado y tenía un calor insoportable. No sabía que hora era o que me había pasado anoche... Bebí tanto que no recuerdo casi nada, y eso me preocupa.

Se me dificultaba levantarme pero pude hacerlo. Me miré al espejo y me di cuenta que aún cargaba puesto el vestido de anoche, mi mente intentaba recordar si no hice nada malo estando ebria y que haya pasado vergüenza en frente del chico que amo, sería el fin del mundo para mí.

Hice mi rutina como de costumbre tardandome mucho más de lo que debía, mi cabeza no la soportaba, mi estómago dolía y mis pies tambien y tenía una resaca horrible. No me gusta levantarme tarde pero ésta es la excepción...

Aseada y con ropa limpia me quitaba un peso de encima, pero no me quitaba lo mal que me estaba sintiendo.

Abrí la puerta para salir a la cocina pero antes de ir me llevé una gran sorpresa.

-Hola... No quería asustarte -Me saluda cargando una bandeja de desayuno, algunas pastillas en un frasco y una bebida energética.

-Tranquilo, supuse que estabas despierto...

-¿Cómo te sientes?

-Eh... Supieras que bastante mal...

-Ya veo... Espero que te recuperes de anoche, estuviste muy...

-¿Qué pasó? Dime por favor que no hice nada que me avergonzara...

-...No, no hiciste nada... -El voltea la mirada con incomodidad. Creo que sí hice algo pero tal vez no me quiera decir.

-Ay, es un alivio...

-Si... En fin. Necesitas recuperar fuerzas -Me da la bandeja de comida.

-Te agradezco mucho -Ambos mostramos una leve sonrisa, verlo sonreír es una de sus facetas favoritas para mí.

Sentí una calidez en mis mejillas, no imagino lo roja que debo estar...

-Bueno, voy a salir. Voy a comprar algunos refrigerios y si quieres podemos ver una película después.

-M-me parece bien.

-Te veo luego -Se despide antes de salir del departamento. Cuando salió di un largo respiro, me mostraba muy nerviosa frente a él y creo que se dió cuenta.

Me senté a comer y pude recordar fragmentos pequeños de anoche, me siento como una tonta.

En serio, me arrepiento mucho de haber tomado tanto ayer. Además de que casi me meto con un extraño, no recuerdo que paso después... Y supongo que tiene que ver algo con Toy Bonnie porque cuando le pregunté se vio muy tenso. Ay... Espero no haberle dicho nada de mis sentimientos hacia él, no estaba preparada para eso y con tanto alcohol seguro se me habrá escapado. Soy tan tonta...

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✅ Capítulo Concluido.

Hola mis amores, perdón enserio, se que ya no tengo excusas para mí inactividad pero es que no he estado bien emocionalmente y la universidad me tiene al borde del colapso.

Hice este capítulo apurada, y se nota... Pero no quería dejarlos esperando tanto por las actualizaciones, ojalá y entiendan mi situación.

LQM 💖💖💖