Capítulo 11.

Hoy fuimos a la pizzería temprano, había llegado el día de paga y es lo que más me gusta de trabajar, la recompensa.

Casi siempre hay conflictos con los demás porque Freddy le paga más a uno que a otro, eso depende del puesto y las horas que haga tal persona pero para algunos parece que eso no es razón, son unos envidiosos.

Mientras íbamos camino al trabajo Toy Bonnie no había dicho ni una palabra desde que salimos del edificio, en la mañana estaba más sociable.

—¿Te pasa algo? —Le pregunté.

—No... ¿Por qué lo dices?

—Estas muy callado.

—Ah... Es que me quedé pensando...

—¿En qué?

—Eh... Verás... Esta mañana recibí una llamada de un número desconocido, yo no suelo contestar a esos números pero esta vez mi intuición decía que lo hiciera... Y al responder no podía creer quién era.

—¿Quién?

—Bonbon... —Al escuchar su nombre se me erizó la piel, ella tiene mucho tiempo que no habla con sus hermanos, prácticamente los apartó de su vida, y que llame así de repente se me hace extraño.

—Oh... ¿Y que te dijo?

—No duró mucho la llamada, solo me preguntó si Bonnie y yo podíamos reunirnos con ella para hablar con nosotros... Pero le dije que lo pensaría.

—¿...No quieres verla?

—Yo... La verdad no lo sé, si la extrañaba pero siento que si voy a verla va a causar un problema entre nosotros —Me siento tan culpable de que dude de su propia familia, ya se qué ella fue la causa de que pelearan... Yo también, pero siempre hay que darle otra oportunidad a las personas.

—...Opino que vayas, habla con Bonnie y se reúnen. No creo que sea tan malo.

—Mm... Tienes razón, sólo estoy paranoico.

—Al final, la familia es familia, con defectos y todo pero siempre cuando uno necesita ayuda los demás deben tratar de ayudar.

—Gracias, Shia —Dice con una leve sonrisa en su rostro, es tan lindo.

—No es nada.

Ya faltaba poco para llegar a la pizzería, a medida que se va conversando en el trayecto de la caminata, el tiempo pasa volando.

Antes de cruzar la calle esperábamos que el semáforo de peatones se colocara en verde, había mucho tránsito. Miraba constantemente a Toy Bonnie y el solo estaba con el teléfono muy distraído, después vi su mano libre cerca de la mía, quería tomarla pero tenía un presentimiento que sería una mala idea entonces moví la mía pero sin querer rocé con la de él y lo notó.

Mi pulso aceleraba de la pena, odio estar en este tipo de situaciones con él y ahora que sabe de mis sentimientos no quiero sufrir.

Me mira con una sonrisa de lado y toma mi mano entrelazando los dedos, por Dios... Me hará enloquecer.

—Solo tenías que tomarla si era lo que querías.

Me sonrojé al escucharlo, quedé petrificada, no podía decir nada, estaba totalmente muda... Lo único que pude hacer fue apretar su mano y calmarme, ¿Qué estoy diciendo? ¡No puedo calmarme!

El semáforo se puso en verde y cruzamos normalmente. Parecíamos una linda pareja caminando de la mano, o es lo que me gustaría pensar...

Casi llegando a la pizzería oímos un grito que venía detrás de nosotros, volteamos a ver quién era y Toy Bonnie me soltó la mano de inmediato. No se por qué razón lo hizo, tal vez no quiere que nadie sepa que podríamos tener algo, lo cual me entristece...

—¡Hola! ¿Van camino a la pizzería? —Toy Freddy venía algo cansado, quizás nos vió y corrió para llegar hasta nosotros.

—Si, ¿Tú de dónde vienes? —El peliazul pregunta.

—Venía del doctor, mi garganta ha mejorado mucho y me dijo que ya podía volver a cantar, pero sin forzarme.

—Eso es una buena noticia, ya volverás al escenario con nosotros —Dije muy contenta por él.

—Si bueno, ustedes parecían tener todo bajo control, quizás deba descansar un tiempo más para que ustedes tengan más tiempo en el escenario juntos —El castaño suponiendo me miraba con picardía y después guiñando un ojo, no quería que toy Bonnie se diera cuenta que él sabe que me gusta.

—¡No! —Ambos me miran extrañados —Digo, si ya te sientes bien es mejor que vuelvas a tu puesto... Sería lo justo.

—Tranquila, no me molesta para nada. Además no me hace falta, solo trabajo por cumplir y por ayudar a mi hermano.

—Si, pues, eso es lo que pienso —Me alejé de ellos y fui caminando a la pizzería, me sentía como una tonta en frente de Toy Bonnie y que me quitara la mano cuando llegó Toy Freddy me devastó.

Sé que no tengo razón para molestarme ya que no somos nada, pero eso me dolió.

Llegando entré al local y fui directo a dejar mi bolso en uno de los estantes del cuarto de descanso, cuando salí vi a mi hermana con Mangle sentadas en una de las mesas conversado.

—¡Shia! Ven con nosotras —Ellas me llaman para que me integre a la charla.

—Hola... ¿Freddy aún no ha llegado? —Pregunté tomando asiento con ellas.

—Si, está en la oficina pero no quiere que lo molesten hasta que salga.

—Uh, ¿Tan estresado está?

—No es el estrés, es que está ordenando los sobres con nuestros pagos y no quiere que entre un chismoso o alguien que tenga otras intenciones —Chica me aclara —Eso siempre lo hace antes de que lleguemos pero está vez se levantó tarde.

—Ah, ok...

—¿Shia, tú viniste sola? —La albina me pregunta con curiosidad.

—Dejé a los chicos atrás, Toy Freddy me estaba avergonzando frente a Toy Bonnie y no lo soporté, así que me adelanté.

—¿Avergonzaba en que sentido? —Uy, olvide que Mangle no sabe nada que me gusta.

—Pues... Decía cosas fuera de contexto... —Veía a Chica de reojo y ella solo se quedaba en silencio —No era nada importante...

Ella me miró sospechosa, pero traté de actuar lo más calmada posible. Después ellos entraron saludando a las chicas y sentándose con nosotras a esperar, Freddy se ha tardado mucho en salir de la oficina, no es normal que lo haga.

Pareciera que lo hubiera invocado porque justo salió y nos llamó a todos para colocarnos en fila.

—Buenos días, chicos, espero que estén bien. Como saben hoy es la entrega de sus respectivos sueldos y cabe destacar que he reajustado el de algunas personas, por ciertas razones.

—¿Eso es malo? —Mangle dice abrumada por lo que nuestro jefe dijo.

—No, solo que esta vez unos recibirán más que otros porque, si no mal recuerdo, hicieron turno extra. Así que debo ser justo —¿Turnos extras? Yo cumplí con turnos extras, entonces yo debería ser una de esas personas.

—Ok pero, ¿Dónde están Foxy y Bonnie? Deberían estar aquí —La menor pregunta preocupada.

—A ellos les pedí que buscaran mercancía en el despacho, los ingredientes para la comida se nos acabaron. No deben tardar.

En ese momento ellos entran demostrando cansancio.

—Listo, ya está todo en la parte de atrás de la cocina —Bonnie dice colocándose al lado de su novia.

—Perfecto —Freddy comienza a repartir los sobres, cana uno tenía el nombre de cada quien.

Al recibir el mío noté que mi sobre era mucho más grueso que el de los demás, eso se me hizo muy raro, no he hecho mucho que digamos y hay algunos que si le echan ganas a su trabajo.

Los demás abrieron sus sobres y contaban cada billete, que desesperados... Yo también hice lo mismo pero no pude creer lo que tenía.

—Tengo 1500$, ¿Y ustedes? —Dice la albina.

—Igual —Foxy miraba a su novia muy feliz porque ambos tenían la misma cantidad. Toy Freddy y Chica también tenían lo mismo.

—Yo tengo 1800$, el trabajo extra valió la pena —Bonnie decía entusiasmado por su pago.

—Yo también, ¿Tú cuánto tienes, Shia? —Toy Bonnie me pregunta y todos me miraron esperando a que respondiera —¿Shia?

—...3000$ —Después de que dije cuanto tenía todos me miraron asombrados, nunca nadie había recibido tanto dinero como yo.

—¡¿Qué carajos?! ¿Cómo es que tienes el doble que nosotros si tú no haz hecho nada? —Foxy se enfureció rápidamente, supuse que él sería el primero en hacerlo.

Miré a Freddy a ver si él decía el motivo de ésto pero sólo desvío la mirada y no dijo nada, ¿Qué trata de hacer con darme más que los demás? No entiendo.

—Tú no puedes enojarte porque yo hice turno extra —Aclaré.

—¿Tú que pudiste haber hecho para recibir tanto dinero? ¡Eso es injusto!

—¡Foxy! ¿Quieres callarte? —Chica me defiende —Todo el tiempo estás en contra de ella sin razón, deja de opinar. Ya cada quien tiene su dinero así que por favor, ¡Cállate! —Vaya... Nunca la había visto tan enojada como ahora.

El contrario sólo se enfureció aún más pero antes de decir alguna otra cosa Mangle se lo llevó lejos de nosotros evitando que la discusión siga.

—¿...Alguien más está inconforme con su pago? —Freddy pregunta con mucha seriedad, quizás lo que hizo fue intencional... Odio pensar que soy la causante de esa decisión.

Todos los que quedaron se miraron incómodos y no dijeron ninguna palabra al respecto... Que horrible sensación tengo...

—Bien. Vuelvan a sus puestos, tenemos una fiesta que organizar —Nuestro jefe se va a su oficina como si nada. Los demás fijaron la vista en mí como si yo tuviera algo que explicarles, pero en realidad no tengo idea de por qué está pasando esto...

—¿Shia, estás bien? —Mi hermana me pregunta colocando su mano en mi hombro.

—Si... Al menos eso me gustaría pensar —Yo no sabía cómo reaccionar, y ver las caras de los chicos me recordaba a la pésima pelea de hace un año. Solo quiero evitar los problemas pero cada que intento siempre sale peor.

—¿Cómo va a ser posible que tú hayas ganado más que yo? Qué también dueño de esta pizzería, ¿y porque tú solo hayas hecho unas horas extras vas a ganar el doble? Esto me parece sospechoso —Toy Freddy justifica a su favor.

—Yo... No lo sé... No entiendo por qué Freddy hizo esto —Mi voz cada vez se cortaba más por la presión que estaba sintiendo.

—A mi también me parece sospechoso —Bonnie concuerda con lo que dice el castaño.

—¿Qué quieren decir? ¿Creen que yo sería capaz de hacer un trato con él para que me pague más? —Todos se miraron después de mi suposición, están locos, yo no soy así.

—Nosotros no sabemos de que eres capaz.

—Basta, chicos, por favor. Ya cada quien tiene su dinero, tienen que conformarse y dejar de discutir —Chica tratando de terminar la conversación.

—Claro, como es tu familia la defiendes, pero sabes que tenemos razón —¿Bonnie? Pensé que ya nos habíamos entendido, pero ahora veo que solo me toleras para no tener conflictos con Chica, eso es muy falso de tu parte.

—¡¿Qué?! ¿Cómo se te ocurre? —Ella le reclama pero este se fue junto con el castaño dejándola con la palabra en la boca —¡No seas un imbécil y ven aquí! —Va tras él y yo me quedé sola con Toy Bonnie en el salón, no pude levantar la vista a él por lo muy avergonzada que me estaba sintiendo.

—Te quedaste callado todo el rato... ¿Por qué no me ayudaste?

—¿No crees que si yo hablaba se complicaría más?

—Al menos podías defenderme...

—Lo iba hacer, pero ellos tienen razón.

—¿Qué? —No puedo creer lo que acababa de escuchar.

—Es que si se vio mal, Shia, por algo Freddy te dió esa cantidad de dinero.

—¿También te molesta que cobré más que tú?

—No, tu no entiendes, yo...

—Cállate —El se sorprende por mi actitud —Se lo devolveré para no tener que soportar más conflictos.

—Estas malentendiendo todo...

—Por favor no sigas, sólo déjame —Me fui directo a la oficina para hablar con Freddy. De verdad, no importa si hago algo o no, siempre van a estar en contra mía y ya no puedo tolerarlo más.

Toqué y esperé a que me aprobara la entrada y poder hablarle, al entrar vi que él estaba sentado en su escritorio con los pies en la mesa, la tableta de las cámaras en una mano y con la otra una taza de café. Me preocupa que vea cada movimiento que hacemos en la pizzería pero por suerte no puede escucharnos.

—¿Qué necesitas? —Me pregunta, yo aún estaba dudosa en decirle porque no se como vaya a reaccionar pero traté de mantener la calma.

—Vine aquí para hablarte sobre lo de hace rato, todos sabemos que eso fue algo muy inesperado y sin saber por qué razón... Pero ya no quiero tener más problemas, así que voy a devolverte el dinero —Coloqué el sobre en el escritorio —Y por favor, no me digas que no.

Freddy fruncía el ceño tratando de comprender el por qué de mi decisión, pero yo no esperaba que lo hiciera.Volteé para salir de ahí pero me llamó antes que saliera.

—Yo no te di este dinero por nada malo.

—Los demás piensan cosas fuera de contexto sobre por qué me dió esa cantidad exagerada, y no pienso tolerarlo.

—Shia, ¿De verdad te importa lo que piensen los demás de ti?

—Yo... Sólo quiero agradarles... Y ya cuando parecía haber progresado con ellos, ésto lo que hizo fue empeorar la situación.

Él se queda en silencio por un rato, se levanta dejando la tableta en la mesa y acercándose hacia mí.

—¿Alguna vez has escuchado el dicho de "Es mejor ser odiado que amado"?

—Uh... Quizás... ¿Por qué?

—Crees que la amistad se consigue haciendo lo que los demás quieran que hagas y que cambies tu forma de ser para complacerlos a ellos, pero estás equivocada —Vuelve a tomar el sobre con el dinero —Esto... Te lo di como una especie de prueba hacia ellos, que, no importa lo que hagas o intentes hacer, siempre recibirás odio, incluso de la persona más confiable para ti. Todos son hipócritas, ven que consigues algo que siempre has querido, algo material, un logro o una buena noticia, te envidian por la mínima cosa... Sólo porque ellos no tienen la oportunidad o la suerte de obtenerlo.

Se me hizo un nudo en la garganta, de verdad tiene toda la razón. No importa cuántas veces intente llevarme bien con los demás, fracasaría y saldría lastimada.

Mientras juntaba mis manos temblorosas y con mucha vergüenza de mi comportamiento, sólo esperaba lo peor...

—No tienes que decir nada si no quieres, pero te digo y te aconsejo, no te des mala vida si no te llevas bien con tus compañeros, créeme, los conozco a todos perfectamente, así que no te pierdes de nada. Si reaccionan así por dinero, no querrás imaginar si es por algo aún más grande.

—Enserio... Te agradezco mucho, soy tan ingenua...

—No digas eso, a muchos nos pasa. Las personas quieren vivir de las apariencias y prefieren perder lo real que dejar de engañarse ellos mismos.

—Dijiste "nos"?

—Si... Prefiero que no hablemos de mí en este momento... Ahora te pregunto, ¿Aún quieres tú pago? Te puedo dar lo que te corresponde si eso quieres.

—Am... Lo recibiré, pero por fa, no vuelvas hacerme eso, ya con mi sueldo habitual es suficiente.

—Tranquila, comprendo perfectamente —Muestra una ligera sonrisa dándome el sobre.

—G-gracias.

—No es nada, estamos a la orden.

—Eh... ¿Te molesta si te doy un abrazo? —Pregunté dudosa.

—N-no veo por qué no... —Nos juntamos para darnos un pequeño pero cálido abrazo, sus palabras eran lo que necesitaba escuchar y viniendo de él, me sorprendió mucho.

Nos alejamos y pude ver un ligero cambio de color en sus mejillas.

—¿Estás bien?

—S-si, lo estoy —De repente se puso nervioso, quizás no está acostumbrado a recibir afecto.

—Bueno... Será mejor que me vaya a trabajar.

—Claro... Si me necesitas ya sabes dónde encontrarme.

—Ok, nos vemos —Salí de la oficina yendo al salón principal para ir preparando todo lo de la fiesta.

Llegué y Toy Bonnie estaba ahí afinando su guitarra, después de lo de hace rato no quería hablarle a nadie, pero a él... Es muy difícil no hablarle.

—Volviste, ¿Cómo te fue? —Pregunta al verme.

—Nada... Conservé el dinero —Es mejor no contarle nada de lo que me dijo Freddy, no vaya a ser que se le escape que nuestro jefe hablé mal de ellos.

—¿Y eso? Estabas decidida a devolverlo.

—Cambié de opinión, por lo menos me puede servir para algo.

—Salir en la noche, por ejemplo.

—Mm, mejor algo más tranquilo.

—No seas aburrida, sólo di que no querías salir conmigo.

—¿Me estabas preguntando? —El chico voltea la mirada y no dice nada —Pues, si es así... No rechazaría.

—Olvidalo, fue una mala idea.

—¿Por qué? —De nuevo no responde —Toy Bonnie...

—Deberias de ayudar con la decoración —Cambia el tema, ¿Qué le pasa? ¿Se arrepentiría? ¿No quiere que nos vean juntos? ¿Por qué pienso tanto esto cuando claramente no somos nada?

—Bueno, pero no he dicho que no por si no te queda claro —Fui a dónde estaba la caja con las cosas de la decoración mientras que esperaba que él me dijera algo pero nunca sucedió.

Tengo muchas ganas de hablarle de lo que pasó con nosotros ese día con el beso, los besos que, me dejaron petrificada. No estaba segura si él también siente algo por mí, quiero saberlo, pero no quiero que me dé falsas ilusiones y salir lastimada... No se que hacer.

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✅ Capítulo Concluido.

De nuevo yo, aquí, disculpándome por mi ausencia. Y lo cierto es que estoy tan consumida por la universidad que se me olvida entrar aquí cuando tengo tiempo libre, NO TENGO TIEMPO LIBRE 😢 Que horrorosa es la vida universitaria.

Y porfa si quieren puede comentar abajito lo que quieren que pase en la historia, así todos ganamos, yo actualizó y ustedes leen lo que más les gusta y esperan.

Yo tengo algunas ideas pero quiero saber las de ustedes y así poder llegar a plasmarlo, y descuiden, viene mucho salseo 👀

LQM 💖💖💖

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