La joven y castaña mujer corría por los largos pasillos del edificio.

Su vertido estaba completamente arruinado, tanto por la tierra y una soda como con cortes y rasguños que se había provocado ella misma al tratar de escapar.

Corría sin detenerse, pero cada cierto tiempo miraba hacia atrás, tratando de comprobar que el horrible hombre del que huía no iba tras ella, pero estaba muy equivocada.

Unas pisadas mucho más fuertes y lentas que las que ella daba se hicieron presentes en el recinto. Comenzó a correr asustada, implorando por ayuda.

-No, por favor-. Susurró para ella misma mientras buscaba donde esconderse.

-¿Por qué vemos esto?

-Cállate, ya viene mi parte favorita

La joven mujer logró ocultarse en una de las habitaciones con puerta del lugar.

Mientras lloraba en silencio y rogaba a Dios no ser descubierta, los pasos sonaban cada vez más y más cerca de ella.

-Odio esta trama

-Calla

Un hombre de al menos dos metros, cabello negro y largo cual melena, una barba del mismo tono y una barriga no tan grande, entró a la habitación.

-Oh pequeña, ven conmigo-. Canturreo sin obtener respuesta alguna. -Sal de dónde quiera que estés~-. Nuevente sin obtener respuesta.

Soltó un fuerte golpe contra uno de los muros haciendo sangrar su puño derecho, pero sin importarle y sin sentir ni una pizca de dolor.

-Me aburro

-Ya casi viene

El enorme hombre comenzó a parecer bastante desesperado, incluso al grado de comenzar a gritar.

-¡No!-. Había encontrado a la joven en su pequeño escondite.

-Te voy a--. Pero el hombre malo no pudo terminar su frase.

La sangre se hizo presente en la escena, dejando ver varias heridas de bala en el cuerpo del gran señor. El cuerpo corpulento del hombre cayó al suelo inerte, soltando con su acción a la mujer.

-Tal parece... -. La chica levantó su vista para ver al hombre que fue su salvación. -... Que te salve de un gran apuro-. El joven sonrió de lado de manera coqueta mientras guardaba una pistola pequeña en su chaqueta.

-¡De eso estaba hablando!

-Por favor Mile

La joven se levantó rápidamente del suelo para cortar directamente a los brazos de su salvador.

-¡Mi héroe!- Lo besó sin pensar en nada, pero absolutamente nada más, dándole fin a la película.

-Soy una estrella-. El castaño muchacho se adulo a sí mismo levantándose de la enorme cama para alabarce en la enorme pantalla.

-Lo eres-. Afirmó el pelirrosa que aún yacía en la cama con un bote grande de palomitas. -Pero ese ha sido tu peor papel-. Le aventó un puño de palomitas haciendo reír al mayor.

-Yo digo que me veía genial-. Se lanzó a de un salto a la cama, regresando a su posición inicial junto al menor.

-Payaso

-Yah, sólo cállate y busquemos otra película-. Mile tomó el mando en sus manos dispuesto a poner otra película donde él mismo fuera el protagonista, pero el control le fue arrebatado rápidamente y con demasiada brusquedad.

-Veremos El Gran Showman-. Afirmó el omega pelirrosa colocando la película y acurrucandose junto al alfa.

-Musicales noooo-. El castaño protestaba abrazándose al torso del omega. -Tenme piedad Apo-. Pidió con un puchero en sus labios.

-Cállate-. Ambos, ahora abrazados comenzaron a ver la película tranquilamente.

Los lloriqueo de Mile no habían durado ni un minuto entero, pues Apo sabía que el alfa amaba los musicales, solamente le gustaba ser dramático de vez en cuando, más bien, casi diario.

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-Eres un alfa tonto-. Habló Apo una vez ambos bajaron de la enorme camioneta blindada color negro.

-Y tú un omega irrespetuoso-. Nadie sabía con exactitud porque Mile había adquirido tal cosa si sólo la conducía él y en ocasiones Apo. Pero bueno, bien dicen que cuando alguien tiene dinero puede darse ciertos lujos, y los de aquel alfa castaño son... Extraños- ¿Cuándo dejaste el Phi?

-Hace cómo tres años dejé de llamarte phi, así que cállate-. El pelirrosa realmente parecía furioso, aunque eso no sucede muy a menudo pues Mile odiaba lidiar con un Apo enojado, según sus propias palabras.

-No tienes razón para molestarte asi-. Abrió las puertas del lujoso edificio de al menos veinte pisos.

-Claro que la tengo-. Pasó frente a Mile siguiendo su camino hacia el elevador mientras se quejaba sobre la idiotez del personal del actor, en específico de uno. -Es que fue muy estúpido de parte de P'Build rechazar esa oferta para ti, ese papel era perfecto

-A él si le dices Phi, me dueles Apo-. El omega lo miró de forma amenazante, cosa que hizo que Mile retrocediera con las manos alzadas.

-Alfa tonto-. Y siguió caminando hasta por fin llegar al elevador.

-Yo solamente decía

-Pues no digas-. Las puertas del elevador comenzaron a cerrarse lentamente; fue justo ese momento en el que Apo se pudo dar cuenta de todas las miradas que los seguían de cerca. No pudo evitar sonrojarse fuertemente.

A pesar de estar hace años junto al codiciado actor, Apo nunca ha dejado de lado su timidez ante la atención pública, y todo indicaba a que nunca lo haría.

Mile observó con una sonrisa como el rosado de las lindas mejillas del menor se convertía en rojo. Sin dudar ni un sólo segundo, lo abrazó tiernamente como siempre solía hacerlo.

Levantó su delgada y pálida mano a la altura de las mejillas del menor, y sin poder evitarlo, apretó una de ellas con bastante fuerza.

-Tierno-. Sabía lo mucho que Apo odiaba eso, así que lo hacía cada vez que se le daba la grandiosa oportunidad.

-Quítate-. Le quitó la mano de un manotazo, pero se apego mucho más al mayor. Pesé a que odiara que tocarán así sus mejillas, amaba los abrazos, y más cuando había pasado uno de sus "lapsos de timidez" -como solía decirle Mile

Ambos amigos llegaron abrazándose al noveno piso, donde se encontraba la oficina de Build Jakapan, el manager de Mile

-Hola-. Saludo tiernamente el menor a la secretaria del alfa.

-No, no te sale-. El castaño recibió un codazo en las costillas por parte del otro ante su comentario. Aunque fue un golpe débil que solamente llegó a incomodarlo un poco.

Pasaron sin si quiera tocar la puerta de la oficina del mayor haciendo que éste se sobresaltara desde su cómoda silla.

-Buenos días-. Sonrió mostrando sus hoyuelos.

- Jakapan, que rabia contigo-. El omega se cruzó de brazos frente al escritorio del alfa.

-¿Qué pasó ahora?-. Miró a Mile buscando alguna señal, pero él simplemente levantó sus brazos y se alejó hasta llegar al sillón de la oficina.

-No me mires a mi, está enojado contigo-. Se sentó prestando atención al espectáculo.

-¿Por qué rechazaste ese papel?

-¿Cuál papel?-.

-El de Manhattan-. El mayor asintió comprendiendo el enojo del omega.

-No era la oportunidad para Mile

-¡Era el protagonista perfecto para esa serie!-. Alzó la voz para demostrar aún más su molestia.

-No, no lo era-. Se giró en su silla para llegar a unos cajones detrás de él. -Esta lo es-. Sacó un recopilado enorme que estaba completamente lleno de lo que parecía ser un guión.

-¿Qué es esto?-. Mile se levantó para acercarse a Apo y ambos comenzar a analizar esto.

-Esto es el nuevo papel para Mile

-¿Una comedia romántica?- Apo era el que mantenía en sus manos el gran guión, dejando ver sólo un poco al alfa.

-Exacto-. Sonrió orgulloso mientras se recargaba en su silla.

Tenia tiempo que no hacía nada referente al MileApo )':
Solo tenemos una historia de ellos en el perfil, creo que es justo una más. ✨💗

Nueva adaptación, supeeer cute con un poco de drama!
Espero les guste mucho. >.<