...

Un silencio llenó rapidamente la fosa, el riolu veia la debil luz del exterior mientras sentia el frio piso de aquil lugar, trataba de contener el llanto mientras se abrazaba a el mismo para mantener el calor. Pero era inutil.

Los minutos pasaban y la esperaanza del pequeño se cortaba, a medida que el tiempo corria, el lugar iba perdiendo temperatura cada ves mas rapido. Algunas gotas de agua (?) caian por la rendija que habia quedado.

Llegar de un salto era imposible mientras que las paredes no tenian suficiente tracción como para trepar, era totalmente un dilema...

A su mente llegaron algunos recuerdos, eran algo confusos para entenderlos.

Varias voces que decian algo incomprensible...

Una voz que lloraba a lo lejos...

Alguien pidiendo piedad...

Una voz consolando a alguen mas...

En fin...

Esas voces resonaban en su cabeza mientras _____ golpeaba debilmente la pared que tenia a lado, sabia que no llegaria a nada pero por lo menos no tendra problema de hacerlo.

De pronto, la pared se derumba, dejando una pequeña entrada con el tamaño suficiente como para albergar a un riolu de tamaño promedio por ahi.

Sin ganas de totalmente nada, se aventuró a los fríos pasillos que esperaban en la oscuridad. Varios metros de caminata a tientas por la profunda oscuridad, llegaron a su fin cuando ______ llegó a una salida: unas rejas que daban con el exterior, ¿El lado bueno? Tenían la separación suficiente como para pasar.

A pesar de todo esto, aún se sentía desganado y con una expresión vacía en su rostro. Todo aún le recordaba a su pasado....algo de lo cual no era grato recordar.

Ya en el exterior se dió cuenta de la falta que le hacía la luz del sol, horas sin verla hicieron que esta esté a punto de terminar, pero aún le producían incomodidad en los ojos.

Viendo la noche cerca de llegar, se dirigió sin rumbo al bosque. Vagando entre los árboles y cuidandose de cualquier peligro, observando si era perseguido de ves en cuando.

Chocando por la distracción contra un árbol, se detuvo frente a este, cuando de pronto una cuerda cayó dejando un escondite en el árbol a descubierto, trepando a este, se dio cuenta de que era una casa encima del árbol.

Estaba algo desordenada, pero había una pequeña cama en un extremo, lo malo era que ese extremo tenía el techo descubierto, la mayoría del techo estaba caído.

Con ciertas dificultades, se acostó en la pequeña cama, la cual a penas le permita caber en ella. Aún con frío empezó a dormir con algunas lágrimas en el rostro...

Las horas pasaban y la noche se hacía cada ves más fría, nada más que con su pelaje se cubría mientras se abrazaba a el mismo para mantener el calor de manera inconsciente.

Varias fueron las horas en ese estado hasta que finalmente quedó dormido. Ya en este estado, empezó a tener un extraño sueño...

En este, dos humanos estaban abrazados, solo eso. Durante las horas que permaneció dormido, era lo único que veía. Lentamente uno de ellos desaparecía mientras que el otro cambiaba de forma...

Al día siguente, _____ despertó extrañamente cálido y con el rostro limpio, los rayos del sol tocaban su rostro por una de las ventanas, lo más raro es que el pequeño parecía fresco como un leafeon (alguien entendió? No? Ay! ;_;)

Levantándose lentamente se dió cuenta que estaba afuera de la casa, y habían varios Pokémon al rededor. En eso vio un rostro que se le hacía familiar...

La manada de pokemon zorros se fueron dejando a un pequeño zorua en el suelo, justo en frente de él, asustado, se acercó a _____ quien estaba adormilado como para caminar.

-_____, ¿eres tú?- dijo aquel zoro-tipo alcanzandolo con su pata delantera.

El riolu, quien aún estaba viendo borroso producto del sueño, solo atinó a afirmar con la cabeza.

Aquel zorua se le fue acercando lentamente mientras _____ iba abriendo los ojos y se daba cuenta que: el zorua que lo habia encontrado, no era nada mas ni nada menos que el mismo que encontró en el santuario aquella ves.

Empezó a dar vueltas al rededor de _____ quien confundido intentaba calmarlo de alguna manera, a pesar de eso, era inútil.

-Te lo dije si o si! Te encontraría otra ves pero.... ¿Por qué estás aquí solo?-

Sin palabras, no habían palabras para explicar tan atroz experiencia.

-¿Uh? No importa jeje, salgamos de este lugar que ya me dió miedo- dijo el zorua temblando levemente mientras trataba de mantener una sonrisa en su rostro.

Dirigiéndose fuera de ese lugar...

...

...tendrán que esperar más.

Continuará...

Créditos a los respectivos artistas por sus imágenes.