Marinette no tenía nada más que hacer que simplemente dejarse caer sobre su cama y relajarse.

Aunque no quería admitirlo, ser madre cambió todo en ella.

Ser madre era un trabajo de tiempo completo. Sus días se dividían en  estar despierta toda la noche y estaba durmiendo todo el día . Aunque sus padres la ayudaron con su pequeño,hizo una prioridad que ella y Adrien fueran los únicos responsables de su hijo.

Estaba agradecida por su ayuda de vez en cuando, y le encantaban los pocos minutos adicionales de sueño que le permitian cuando Louis aún era un pequeño bebé .

Aunque de todos modos, no funcionaba de mucho, ya que se levantaba en cuestión de minutos, preocupada por la barriga , el pañal , la leche o cualquier otra preocupación  que le causará el pequeño Louis .

Claro, estas cosas eran cosas tontas de las que preocuparse, pero ¿alguien podría culparla? Era una madre primeriza

Ella era nueva en esto, y aunque nadie es profesional en ser madre por primera vez, Marinette confiaba en que ella y Adrien eran muy buenos en eso.

Medio dormida, o completamente despierta, no había nadie más en su mente más que Louis.

Por supuesto que es una mentira, Marinette a menudo se encontraba pensando en Adrien justo después de recordar a su pequeño.

Aparte de Adrien, Louis fue otra luz de su vida.

Ella lo amaba, y haría cualquier cosa por él.

Frotó sus ojos y simplemente se sentó en el escritorio de su computadora.

Fue un día tan largo. No esperaba que el fin de curso fuera tan agotador.

Durante todo el día, Marinette no pudo evitar escuchar a su irritante compañera rubia, incluso cuando ella puso una cara de "Estoy harta de escuchar tu parloteo", pero todo fue en vano.

No sorprendió a Marinette en lo más mínimo que Chloe estubiera alardeando que sería la mejor de la fiesta de bienvenida .

Toda la clase fue invitada y tal vez toda la universidad. Marinette no estaba segura de querer ir, pero después de enterarse de la posible llegada de Nathanaël , su mente cambió rápidamente.

Quería terminar las cosas bien con él. Ella escuchó que él había tomado terapia después de lo sucedido y era una mejor persona. Marinette no quería seguir adelante y comenzar su futuro con Adrien sin hablar primero con Nathanaël.

Marinette era consciente de que Chloe ,la encargada de organizar la fiesta de bienvenida probablemente solo la invitó por Adrien.

Parecía que era difícil para Chloe aceptar que su preciado crush se había enamorado de alguien a quien odiaba e incluso había creado un hijo con ella.

A pesar de que Louis fue un accidente, la pareja no podría haber estado más feliz de haber tenido un bebé.

Marinette por lo general no era alguien que presumiera sus logros. Pero de alguna manera se sentía empoderada, tenía muchas cosas que Chloe no tenía, pero tener a Adrien era la cereza del pastel.

Ella sonrió de solo pensar en eso

Adrien  la amaba demasiado en todos los sentidos , no solo por ser la madre se su hijo .

Una sonrisa descarada se adhirió a su cara y tal vez un vapor pervertido pudo haber exhalado por su nariz.

—¡Mamá!— exclamó el pequeño rubio, sacando a Marinette de sus indecorosos pensamientos. Casi la hizo sentir avergonzada.-

Casi...

Marinette se giró para encontrar a la pequeño abrazándole las piernas.

Ella le sonrió. Él realmente era su orgullo y su alegría. Ella se inclinó y lo levantó. Ella lo apretujo en un abrazo, pero cómodo y adorable mientras le acariciaba la cara con la nariz.

—Supongo que tendremos que esperar a que llegue papá—dijo Marinette arrullando a su bebé
Los grandes ojos azules de Louis se abrieron por completo.

—No mi papi ... sino el tuyo—

Louis sonrió hacia la azabache, con un rubor aún más fuerte que el natural en sus mejillas al tener tanta emoción . El pequeño dió unos cuantos saltos  en sus brazos , riendo y envolviendose alrededor de ella. Marinette sonrió, abrazando más fuerte a su hijo.

Realmente lo amaba.

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A marinette nunca le agrado utilizar tacones.

Cualquiera podría preguntarle a su alter ego,  una heroína que saltaría  en cualquier momento a través del horizonte parisino en busca de salvar a la cuidad .

Los tacones altos no estaban nunca en la agenda.

Quizás solo por ese día. No era como si no lo hubiera pensado, simplemente nunca encontraba el momento.

La azabache miró hacia arriba, sus orbes azules se encontraron con un par de verdes, y un pequeño rubor cubrió las pecas en sus mejillas.

Su corazón comenzó a latir sin piedad contra su caja torácica, ya que no importa cuántas veces lo haya visto, nunca podría acostumbrarse a la forma en que él la hacía sentir.

—¿Estás bien, my lady?— Preguntó Adrien, una pequeña sonrisa formándose en sus labios mientras se acercaba a ella.

Llevaba un chaleco negro casual ,con los primeros botones desabrochados en la parte superior y  las mangas ligeramente enrolladas

Lo remató con pantalones oscuros que mostraban su trasero perfectamente tonificado (para el placer de Marinette).

Casi hizo que Marinette se sintiera humilde con su vestido y tacones simplemente rosas.

—¿Tú ... crees que debería irme a cambiar?— Preguntó la chica, apartando sus ojos de él.

Su inseguridad se hizo demasiado obvia .

Adrien negó con la cabeza, entrelazando sus brazos alrededor de su cintura.

—No princesa... te ves increíble ...— él levantó una mano para cubrir su cara.

Ella jadeó cuando él le tocó la cara, rozando su pulgar sobre su suave piel.

Marinette tragó saliva, separando sus labios  casi anticipando un beso.

Adrien se rió entre dientes, sus ojos verdes miraron sus labios antes de que él cerrara el espacio entre ellos.

Marinette cerró los ojos, el rubor corría hacia su cuello en el momento en que sintió que sus suaves labios presionando los de ella.

Su mundo se desvaneció.

Siempre pasaba lo mismo cada vez que la besaba.

Ella lentamente envolvió sus brazos alrededor de su cuello, acercándose a él mientras sus labios se movían delicadamente sobre los suyos.

Adrien le pasó la mano por el cuello, abriendo la boca y profundizando el beso.

La ojiazul frunció el ceño, más que feliz de seguir el beso, pero retrocedió en el momento en que un fuerte sonido de claxon interrumpió su tierno encuentro.

Adrien gimió, separándose para mirarla apenado.

—Supongo que ya llegó nuestro trasporte para llevarnos a la fiesta— hablo Adrien riéndose de cuánto le molestaba a su guardaespaldas que se estuvieran tomando su tiempo.

—Eso creo jeje ...— Marinette respiró, desviando la vista hacia el auto que estaba justo en la puerta .

—¿Nos vamos?— Ella preguntó, mirándolo de nuevo.

Adrien se mordió el labio y luego presionó un último beso en sus labios.

—Te veré en el auto. Hay alguien que quiero ver antes de irme—Admitió tímidamente.

Marinette apretó los labios, tratando de reconstruir lo que quería decir antes de que finalmente hiciera clic.

—Adrien, lo veremos cuando volvamos. Tus guardaespaldas lleva mucho tiempo esperando ...se enojara más —

Adrien hizo un puchero.

—Lo sé ... pero extraño a Louis. Lo haré rápido, lo prometo—. Adrien rogó, frotando su nariz sobre la de ella.

Adrien siempre se emocionaba cuando veía a su hijo. Estaba creciendo, y Adrien no podía pensar en nada más de lo que estuviera más orgulloso.

Claro, su nuevo estilo de vida de ser padre fue inesperado, pero tenía a la mejor compañera. Eligió bien con quién quería comenzar una vida, así como criar a un niño maravilloso.

Marinette se rió y ella lo miró.

Ella se alejó brevemente, dándole espacio para que se fuera si él quería.

—Sólo has estado ausente durante una hora— Ella se burló. —Pero te entiendo , yo también muero por verlo cada segundo —suspiro enamorada

Adrien sonrió, besando sus labios brevemente.

—Vuelvo enseguida—

Marinette lo vio entrar corriendo a su casa, casi asustando a sus padres que accedieron a cuidar al pequeño por la noche.

Se giró, mordiéndose el labio cuando dio un paso adelante y casi tropezó.

Tal vez usar tacones no fue la mejor idea ...

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A Marinette parecía no importarle la música  y sus amigos divirtiéndose en la pista de baile.

Ella simplemente se la había pasado la mayor parte de su tiempo comiendo y besando a Adrien.

Para su consternación, había tratado de evitar las miradas de muerte de Chloe toda la noche.

Marinette sumergió su dedo en su bebida.

Ella tenía algunas cosas en mente.

Lo primero y más importante era su hijo, y luego se preguntaba qué quería hacer después de la escuela. Necesitaba pensar en conseguir un empleo.

Y luego estaba la boda.

Ella tenía mucho que hacer ...

Sus ojos azules se movieron gentilmente hacia la pista de baile donde miró a Adrien y Chloe bailando lentamente.

Marinette frunció el ceño cuando su mirada se posó en  Nathanaël que estaba sentado solo.

Marinette suspiró y luego volvió a mirar su bebida. Ella se sintió muy mal, le oculto la verdad y comenzó todo este lío. Si ella hubiera sido honesta y sincera con él, no habría pasado por todo ese lío.

Levantó la vista de nuevo. Respiró y se levantó. Se dirigió con cuidado a la pista de baile.

Sus ojos se conectaron brevemente con los de Adrien antes de caminar hacia Nathanaël

—Hey ...— Marinette lo llamó a través de la música lenta.

Nathanaël la miró.

Ni siquiera podía saber cómo se sentía.

Con un asentimiento vacilante, el pelirrojo cambió su peso.

—Hola...—

Marinette podría haber jurado que sintió que su corazón saltaba de alivio. Le preocupaba que él ni siquiera le dirijiria dos palabras.

La ojiazul comenzó a mecerse hacia adelante y hacia atrás sobre sus pies. Miró hacia atrás, ahora mirando a Alya quien le dio una sonrisa alentadora.

—Yo ... quería disculparme ... por todo lo que te hice pasar. Debería haber sido sincera contigo. Debí haberte contado desde el principio sobre Adrien y sobre mí ... sobre Louis ...— hablaba nerviosa
—No fue correcto haberte ocultado eso, aunque eras lo suficientemente valiente como para decirme cómo te sentías. Ahora me di cuenta de que solo te estaba ilusionando ... y era lo último que quería hacer. . —

Marinette sintió que su corazón se aceleraba dentro de su pecho.

—Si pudiéras disculparme ... Me encantaría ser tu amiga—

Nathanaël simplemente la miró.

Se sentían tan nerviosa , sentía como horas ... cuando probablemente eran minutos. Marinette escuchó el latido de su corazón en sus oídos más fuerte que la música que se escuchaba a su alrededor.

El chico le sonrió, levantándose lentamente para encontrarse cara a cara.

—Me encantaría ser tu amigo de nuevo, Marinette.Yo también lo siento ... cuando tenga la oportunidad, quiero disculparme con Adrien, sobre toda esta confusión. Estoy seguro de que no fue fácil para él también ... —La voz de Nathanaël se apagó cuando miró a Adrien.

Marinette casi sintió lágrimas en sus ojos y antes de que el lo notara, envolvió sus brazos alrededor de él con fuerza.

—Nathanaël ... no tienes que disculparte por nada. Gracias ... gracias por ser tan gentil y perdonarme — Ella se echó hacia atrás para mirarlo.

—Significa mucho para mí ...—ella se rió entre dientes, tratando de contener las lágrimas que querían correr por sus mejillas.

Nathanaël se rió entre dientes, envolviendo sus brazos alrededor de ella. Estaba agradecido de tenerla en su vida. Tenían sus altibajos, y por supuesto ella era de Adrien, pero él sabía que al final el solo la necesitaba como amiga .

—¿Te gustaría bailar? Si a tu novio no le importa claro...—, sugirió, echándose hacia atrás para mirarla.

Marinette sollozó y lo miró.

—Eh ... ahora es mi prometido ... pero estoy seguro de que no le importará— Ella se rió en respuesta.

Ella vio que los ojos de Nathanaël se ensanchaban, pero él mantuvo la sonrisa en sus labios.

—¿Prometido?— Él reflexionó, sosteniendo sus caderas y guiándola hacia la pista de baile. —¡Felicidades, Marinette! Estoy seguro de que será una hermosa ceremonia de boda ... si es que gustan invitarme con gusto ire— Él comenzó a balancearse de lado a lado.

Marinette estaba más que feliz de seguir su ejemplo y ella le puso las manos en los hombros.

Estaba encantada de que ella y Nathanaël fueran amigos otra vez.

—¿Estás bromeando? Por supuesto que estás invitado
—. Ella sonrió. —Me encantaría tenerte allí ...—

Nathanaël asintió con un pequeño rubor en sus mejillas mientras los dos bailaban entre sí en perfecta sincronización.

Cuando la música se detuvo lentamente, la pareja se alejó cuidadosamente de la otra.

Marinette sintió que no podía agradecerle lo suficiente.

—¿Importa si me meto?—Preguntó Adrien, apareciendo detrás de Marinette con una cálida sonrisa.

Marinette se giró a mirar a Adrien, inmediatamente se derritió cuando sus brazos la rodearon.

Nathanaël dio un paso atrás, asintiendo.

—Por supuesto ...— miró al rubio, deteniéndose mientras se alejaba de Marinette.

—Escucha ...— comenzó Nathanaël, cambiando su peso. —Yo ... quiero disculparme por todo. No debí haber presionado a Marinette con mis sentimientos confundidos. Si hubiera sabido que ella tenía algo contigo eso jamás habría pasando , en verdad estoy muy apenado ...—

Marinette frunció el ceño. Ella lo miro para intervenir.

Nada de eso fue su culpa. Ella había empezado todo este lío, y le iba a recordar que no era así.

—Está bien, Nathanaël ... lamento que todo este lío haya comenzado ...— respondió Adrien, cortando a Marinette antes de que ella pudiera hablar.

—Me alegro de que podamos dejar todos esos problemas en el pasado—

Nathanaël sonrió a Adrien, asintiendo con la cabeza, ya que no podría estar más de acuerdo.

Adrien le devolvió el gesto. Sabía que no era su culpa. Al menos no del todo.

—Nos vemos pronto, ¿de acuerdo?— Adrien le hizo un gesto al pelirojo mientras llevaba a Marinette de vuelta a la pista de baile.

Marinette se despidió con la mano, sonriéndole mientras él le devolvía el saludo, antes de girarse para hablar con un chico que se le acercó.

—Bueno ... eso resultó mejor de lo que esperaba ...— Marinette suspiró mientras comenzaba una nueva canción.

Adrien envolvió sus brazos alrededor de ella y comenzó a bailar con ella.

—Estoy realmente contento de que haya terminado bien. Recuperamos a Louis ... tenemos a nuestra familia y la boda que esperamos por tanto tiempo ...—reflexionó Adrien, colocando su mejilla en la parte superior de su cabeza.

Marinette asintió, cerrando los ojos y apoyando la cara contra su pecho.

—Sí ... estoy feliz de que finalmente todo esto acabará — Marinette murmuró suavemente, casi acariciando su rostro con él.

Era tan cálido y acogedor. Fue agradable...

—Hablando de disculpas ... creo que te debo una. Sé que estaba enojado ... pero no justifica la forma en que te traté. Especialmente cuando más nos necesitábamos ...—Adrien murmuró en voz baja.

Marinette abrió los ojos lentamente, casi llorando ante la sensación de cuánto le martilleaba el corazón.

—Cariño ...— Marinette susurró suavemente, echándose hacia atrás para sostener su rostro.

—No tienes por que disculparte. Ya sé que lo que hice estuvo mal ... y lamento haberles puesto a todos en esos problemas—

Un pequeño rubor sacudió sus mejillas cuando sus labios se unieron a los de ella sin dejarla hablar .

Cerró los ojos, sus manos jugaban suavemente con su cabello mientras se besaban en su baile lento.

Sus labios se movieron perfectamente uno contra el otro, ambos deslizándose lentamente hacia su propio mundo.

Ella se apartó con cuidado y le puso la mano en la mejilla, con el pulgar rozando su piel.

—Bueno, gatito ... parece que todo lo que nos queda por descubrir es nuestro futuro y nuestra boda ...— sonrió, la emoción burbujeaba en su pecho.

Adrien se rió y la atrajo hacia sí.

—Cualquier cosa por usted, futura señora Agreste ...—

EL FIN

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Hola chic@s ! Quiero pedirles una disculpa por el súper atraso de la traducción :( , tuve unos problemas técnicos y personales ...pero aquí estoy de nuevo ! Ya tengo lista la traducción del TERCER LIBRO " CORAZONES HERIDOS "❤️❤️❤️ ya pueden pasar a leerlo en mi tablero.

Cómo saben estos increíbles fanfics le pertenecen a una única autora cuyo nombre es KandyKate , y es a ella a quien le pertenecen todos los créditos y éxito de esta linda historia :3 , pueden pasar a su tablero a escribirle un lindo mensajito de nuestra comunidad hispanohablante ❤️

Les quiero agradecer todo su apoyo y recuerden ;) nos seguimos leyendo