Se estiro de manera perezosa soltando un bostezo. Rodeo el cuerpo femenino que se encontraba a su lado pegándola a él, sonrió de manera vaga cuando la escucho protestar débilmente pero a pensar de aquello ella no se aparto

Oculto su rostro en su cabellera violetas e inhalo profundamente, y no se sorprendió al recibir un codazo lo que ocasionó que soltara una risa ronca

Había sentido como se había estremecido levemente, y él solo pudo presionarla con mas fuerza contra él.

No quería soltarla, no esa vez.

Había esperado por mucho para poder tenerla nuevamente a su lado y en esa ocasión solo lo había conseguido por solo un dia.

Sus sentimientos por Anko no había cambiado, muchas veces había intentado olvidarla para nada había funcionado.
¿Ahora como lo haría después de haber pasado uno de los mejores momentos de su vida?

No solo se había acostado con ella, él no era tan degenerado para aprovechar aquello sin mas.

Cuando llegaron a su departamento, pudo encontrar la voluntad de controlarse para invitar a Anko a un pequeño almuerzo.  De una manera pudo convencerla, y ambos terminaron haciendo juntos el almuerzo mientras intercambiaba alguna u otra indirecta. En ocasiones solían provocarse, claro que él fue uno de los primeros que perdió su cordura y cayo ante ella.

El almuerzo había quedado para casi dos horas mas tarde

El silencio nunca estaba presente cuando ellos dos estaban. Siempre terminaban intercambiando unas cuantos comentarios, no importaba si uno de estos terminaba enfurecer al otro. O si Anko terminara diciendo unas cuantas palabrotas, o el burlándose de ella.

Inevitablemente no pudo evitar recordar el tiempo que ellos dos andaban.

Asi había sido su relación, no necesitaban fingir al estar a lado del otro. Por que ellos solían ser ellos mismo, no había ningún genjutsu ocultando su verdadera apariencia por que se aceptaban como eran.

¿Entonces por que Anko termino con él?
Había querido preguntárselo, pero aquello hubiera arruinado aquel momento.

¿Quizas había hecho algo mal?

Nunca había obligado a Anko a nada, y ni la había forzado a algo que no quisiera.

¿O era por que termino cambiando sus Dangos por algo mas saludable aquella vez?

Aunque eso fuera algo tonto, con Anko nunca se sabia. Pero al final de cuenta en esa ocasión si consiguió sus apreciados dulces, y él termino con lo otro en un lugar que no quería recordar

-¿Que hora es? -Su voz ronca lo trajo a la realidad. Alzo su cabeza para poder observar el reloj que se hallaba en la mesa de noche que se encontraba a lado de su cama, soltó un suspiro, aquello estaba pronto por terminarse.

-Las 9 a.m -No pudo evitar decir con desgana.

Anko intento separarse pero él no la dejo, siguió aferrándose a ella de manera infantil mientras ocultaba su rostro entre el hueco de su cuello. Nuevamente ella se estremeció cuando soltó un suspiro contra su piel

-Genma... -Hubo advertencia en su voz, pero hubo un leve temblor en ella. él no se movió, y quiso creer que ella tampoco.

-¿Por que, An? -No pudo aguantarlo mas, quiso tener respuestas. Y tenia que conseguirla antes que todo volvieran a la normalidad. La mujer que se hallaba bajo su brazo se tenso, no supo si fue por que la llamo por aquel apodo que había usado unas cuantas veces en su relación, o por que había intuido lo que quería saber

-¿Por que qué,Genma?

-¿Por que todo acabo?

Ni siquiera había terminado cuando Anko se había separado bruscamente, casi le sorprendió que no hubiera caído al suelo. Él solo se quedo quieto observándola en silencio en como se levantaba cubriéndose la sabana

-No tengo por que hablar de eso, contigo. -Frunció el ceño al verla salir por la puerta de su habitación, y bufo cuando su sabana se encontraba siendo arrastrada por el piso.

Incorporándose decidió buscar uno de sus calzoncillos para poder ir tras de ella, y al estar en la sala se encontró con su figura agachada tomando sus vestimenta, solo poseyendo su ropa interior.

-(O al menos la parte baja) -Pensó echándole una mirada rápidamente para después soltar un nuevamente un suspiro

-Anko.. -lo ignoró- Anko -La volvió a llamar pero esta hacia caso omiso mientras se comenzaba a ponerse su conjunto de rejillas.

Con su paciencia agotándose, fue hacia ella para tomarla de la muñeca, lo cual consiguió que lo mirara con molestia, pero él pudo ver algo mas.

Inquietud

-Escucha Genma, que tu y yo hayamos tenido... -el castaño rodó los ojos y la miro con firmeza. Cuando Anko comenzaba actuar a la defensiva y enviar comentarios hirientes, era por que ocultaba algo. La conocía muy bien

-Anko, solo necesito saberlo. -Dijo con calma, pero ella actuó de manera brusca soltándose de él.

-No. Aquello ya no tiene importancia

-Quizas no para ti, pero aun no entiendo por que me terminaste.crei que todo..

-¿...que todo estaba bien? -él miro a la mas baja quien sonreía burlonamente

-¿Y no era asi?-Emitió un breve gruñido, intentado mantener la calma, él nunca había sido la clase de persona que se alteraba. Pero se encontraba tenso sin poder entender que era lo que había hecho mal

Pero nuevamente Anko no le respondió. Tuvo tentado meterla en un genjutsu, pero sabia que eso empeoraría las cosas.

-Realmente eres obstinada -Torció una mueca. Aunque tenia que admitir que le causaba gracia como Anko se encontraba buscando sus sandalias bajo la mesa del comedor, y de reojo pudo ver su abrigo enganchado en la alacena

¿Como acabaría eso allí?

Tomando una actitud un poco mas seria, se fue hacia Anko quien se levantaba en ese momento. Pero termino acorralándola contra la mesa

-No saldrás de aquí, hasta que hables Mitarashi -extrañamente ella no comento nada, solo sonrio arqueando una ceja, y después volvió agacharse para huir por abajo de la mesa.

Bien eso no habia sido muy inteligente de su parte.

La ventaja de tener un pequeño departamento;era que no tenia mucho por recorrer. Pero la Mitarashi era escurridiza como una serpiente

Antes que Anko pudiera abrir la puerta para irse, la tomo por la cintura e impacto su cuerpo contra madera de la puerta, a pensar de ser pequeña, ella tenia una gran fuerza lo que le era difícil sostenerla.

-¿Enserio pensabas irte sin tu abrigo? -Arqueo una ceja

-No es como si me importara que vieran estas preciosidades -Evitó bajar la mirada, sabia que era eso lo que quería.

Miro aquellos ojos castaños claros quien le miraba desafiantes

-Esto ya es ridículo. Eres demasiado inmadura -Sacudió levemente su cabeza ya resignado. Entonces noto como Anko se había puesto rígida, asi que le vio como otra oportunidad;-An, solo respóndeme esto; ¿Hice algo mal?

Los dos habían quedaron en silencio, la de pelos violetas soltó un suspiro mientras desviaba su mirada.

-No.

-Entonces ¿por que? -Insistió, ella frunció sus labios:-An...

-Por que todo estaba yendo demasiado bien. -Quedo desconcertado ante lo dicho. La soltó separándose de ella, no lograba entenderlo.

-¿Que?

-por que todo estaba yendo demasiado bien. -Repitió esta vez casi en un gruñido.

-¿Me terminaste por que todo estaba yendo demasiado bien? -Parecía no captarlo, parpadeo varias veces para después fruncir el ceño. Anko bufo

-No lo entenderias -él quiso reír, claro que no lo hacia

-¿Por que voy a entender eso? ¡Es lo mas ridículo que he escuchado! -Anko lo empujó molesta hacia tras, y se alejó de él. Pero la siguió nuevamente, eso aun no terminaba

-Explícame, Anko. -Exigió, ella se giro molesta hacia él, y pudo ver lo tensa que se encontraba.

-Ya respondi lo que querías, no tengo por que explicarte mas nada.

-¡Tienes que hacerlo para que logre entenderlo! ¡¿Pero que haces?! -Tuvo que esquivar un sartén que se había encontrado en la cocina, ¡Esa mujer definitivamente se encontraba loca!

-Eres insoportable, cometi un error -tenso la mandíbula sabiendo a lo que se refería, pero tomó una respiración profunda para después sonreír de manera burlesca.

-cometiste seis errores -Al terminar decir esto, tuvo que esquivar un cuchillo, agradecía ser ninja por que si no ya estaría muerto con el cuchillo clavado en el corazón.

Continuara...