¿Qué diablos me sucedía? Incluso me llevé la mano al pecho —como si al hacerlo pudiera calmar el ritmo de mi corazón— cuando él me miró.

—¿No sabes? —insistió.

—Bueno, creo que no he tenido tiempo para pensarlo detenidamente, siempre he estado muy ocupado y... ¿Por qué estamos hablando de esto? Creo que deberíamos prestar atención a la película.

Idiota, no hemos prestado atención a la ridícula película en cuarenta minutos. ¿Por qué él, querría hacerlo ahora?

Se acercó a mí, y me lamió el lóbulo de la oreja. Nunca, había sentido, lo que estaba sintiendo en ese momento, sin que yo pudiera contenerlo, un pequeño gemido escapó de mi boca y al parecer eso lo excitó, y para qué negarlo, a mí también, lo supe cuando dentro de mis pantalones, mi erección creció sin permiso.

—Tienes tiempo, ahora —Susurró cerquita de mi oído. Traté de apartarme, me iba a levantar y salir rápidamente del lugar, pero él me tomó de la mano y volvió a sentarme. Quizá debí volverme y empujarlo, o incluso tirarle un puñete, pero no lo hice, me gustó que lo hiciera—. No quiero hacerte daño —dijo aun en susurros— sólo creo que podemos pasar un buen rato. Yo lo deseo ¿tú quieres?

Lo miré directamente a los ojos, pensando realmente en la posibilidad de pasar un buen rato con ese extraño, después de todo en treinta minutos, cuando la película terminara, cada uno iría por su lado y no volveríamos a vernos nunca más. Quizá podría probar eso de la dominación. No todos los días suceden este tipo de cosas, a no ser que fuera en películas o en uno de los tantos fanfics que solía leer en mis tiempos de ocio —que eran escasos— ¿Qué daño podría causar?

La sensación de su cuerpo junto al mío y su aliento golpeando mi cuello, lo hacían real, no era una película, estaba sucediéndome.

Era increíble, pero cierto.

Asentí, y él sonrió.

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ