---Bajame Denki.--- dijo sin ganas, colgando de la boca del chico, el cual lo mantenía ahí sin hacerle ningún tipo de daño.
---Denki, haz lo que te digo.--- se cruzó de brazos, pues para quien no lo vea bien, Bakugou está castigado.

---¿Estás mejor, Katsuki? --- llegó la chica de tez rosada, burlándose del lugar en donde estaba.
---Cállate, y dile a este idiota que me baje en este puto instante.--- gruñó inflando inconscientemente sus mejillas.

--- Lo haré cuando prometas que no te moverás del campamento.--- Ashido dejo los conejos que había cazado, levantando su mirada para ver a su amigo.

--- No. ---

--- Entonces disfruta tu estadía.---

--- ¡Mina, bajame de este lugar en este instante! --- grito comenzando a moverse, pero se detuvo cuando sintió un punzante dolor en su abdomen.

Pues bien, Bakugou había sido herido de gravedad cuando unos guardias hijos de puta que intentaron entrar a su bosque después de la advertencia que les dió lo atacaron sin piedad.

Todos acabaron muertos.

Y él, bueno...

Él terminó en esta situación por no querer descansar de sus heridas.

--- ¿Dónde mierda está Eijirou?--- pregunto después de un rato, aquel dragón amarillo lo bajo hasta el suelo y con una de sus patas lo detuvo para que no huyera.

Grnooo.

Bakugou rodó sus ojos, haciendo un mohín con sus labios por lo frustración que sentía.
--- ¿A dónde fue para que se tarde tanto? Joder, más le vale que no haya ido al puro reino de Todoroki. --- se rindió, por lo menos podría descansar un poco.

Se sentó en el suelo y la cabeza del reptil quedó en sus piernas, así que con cuidado y algo de pereza, acarició sus escamas mientras sonreía levemente.

--- Sero tampoco parece estar a la redonda. --- dijo mirando al bosque donde los chicos habían desaparecido para cazar algo.
---<Están cerca, no te preocupes, en cuanto a Eijirou, creo que fue a robar algo en el reino Hān.> --- como detestaba al príncipe Monoma que pronto sería ascendido como rey.

Agh, quería incinerar su reino hasta las jodidas cenizas.

Pero tenía cosas más importantes que hacer.

---<¿Que pasa Kats?>--- el reptil levantó su cabeza mirando a su compañero.
--- Cada vez hay más ataques de caballeros... --- admitió mirando a otro lado.
--- No quiero ni siquiera pensar en lo que están tramando. --- tallo su rostro, este era su hogar, habían vivido aquí por casi toda su vida.

Bakugou no iba a dejar que los últimos ejemplares de dragón murieran a manos de estos ineptos llamados humanos.

---<Pero no nos han buscado, solo son idiotas que no escucharon tus amenazas.>--- intento hacerlo sentir mejor.
--- Si, tienes razón. --- soltó una pequeña risita, para después sentir la lengua del chico pasar por todo su cuerpo.

--- ¡Idiota! ¡No hagas eso! --- dijo histérico tratando de quitarse la saliva que tenía encima.
--- ¡Te voy a matar maldita sea! ---

--- ¡Katsukiiiii! --- escucharon a lo lejos, esa carismática voz solo pe pertenecía a una sola persona.

El eléctrico levantó su cabeza y el pelirrojo literalmente tacleo al cenizo, abrazándolo con cariño.

--- ¡Traje dulces! ---

--- ¡Idiota, te tardaste toda la puta tarde! ¿¡Que te pasa!? --- grito estirando sus mejillas, pero el de dientes puntiagudos sonrió con carisma.
--- Es que también robe esto. --- mostró una espada.

--- ¿Que esa no es la espada del príncipe Todoroki? ---

--- ... ---

--- Jodido imbécil. ---