12. Alguien como tú
Mientras hacía el trabajo, me percaté de como Melanie me miraba con una expresión de una completa enamorada.
Ante sus miradas acusantes, fruncí el ceño y la miré con detenimiento. No me digas...
-Melanie, siempre que me miras, veo en tí esa misma expresión que sueles poner cuando ves a Alex -hablé yo sin apartar la mirada.
-¿Y cuál es esa... esa expresión? -preguntó tímidamente.
Ahí pude reafirmar mi teoría.
-Cómo la de una enamorada. -respondí con el semblante serio.
-¿C-Cómo la de... la de una enamorada? -repitió con nerviosismo.
Otro punto más para mi teoría de si le gustó a Melanie.
-Así es y ahora me preguntó si yo en realidad a ti te...
-¿A mí...? -me ánimo Melanie a continuar mis palabras.
-Te parezco Alex -completé.
-Así que era eso -dijo aliviada. -Pues tú no me pareces Alex.
-La otra vez hablamos de Alex, ¿lo recuerdas? -pregunté y asintió. -Para ponerte en contexto, yo te pregunté si te gustaba Alex, pero tú dijiste que no. ¿Entonces es verdad que no te gusta Alex o sólo lo dijiste para despistar?
-No me gusta Alex -respondió nerviosa. -Es una simple casualidad, en serio. No me gustan los chicos.
-¿No te gustan los chicos? -pregunté con sorpresa. -¡Guau! Eso sí que jamás me lo imaginé, te creí hetero.
-Soy lesbiana desde nacimiento -dijo.
-¡No puedo creerlo! En verdad creí que eras hetero. -dije y ambas nos reímos.
-Las personas que menos crees que lo son, lo son y las personas que crees que son, no lo son -comentó.
-Touché -respondí yo.
Bueno, ahora que ya sabía la verdad y ya estaba cien por ciento segura sobre los sentimientos de Melanie, decidí decir:
-Viendo las cosas así, entonces te volveré a hacer la pregunta correctamente, ¿te has enamorado de alguna chica de la prepa?
-No precisamente, bueno sí... es decir, yo... sí... ¡No, no es cierto! No me ha gustado ningúna yo...
Ya sabía que a Dashton le había gustado Samantha Hoffman, pero aún así, quería ver su reacción.
-¿Si o no? -cuestioné con una ceja levantada.
Antes de que pudiera Melanie responder, aparecieron tres chicas de nuestro grupo frente a nuestra mesa.
-¿No nos íbamos a poner juntas Allison? -dijo Tiffany celosa.
-¿Disculpen? ¿No me fallan los oídos? -ay, Ivonne-. Allison y yo nos íbamos a poner juntas, no sé en qué momento Allison les dijo a ustedes que lo iba a hacer con ustedes. La única que se va a poner con ella, soy yo. ¿Captan?
-Cálmense, yo ya escogí a mi pareja y es Melanie -señale a Melanie-. Pero no tienen que enojarse preciosas, todas podemos hacer el trabajo juntas.
-¿Por qué escogiste a Melanie, Allison? -preguntó Ivonne-. Yo soy mejor que ella, ¿no lo ves?
-Es cierto Allison, responde -exige Tiffany sumándose a la conversación. -Yo te lo había pedido con anticipación y me dijiste que sí. Eres solo m-i-a.
-¿Disculpen? -habla Melanie logrando sorprenderme-. ¿Están diciendo que Allison es suya? ¿Y en qué sentido? Que yo sepa, nadie es de nadie, todos somos libres y Allison es libre de ponerse con quién quiera. Así como ustedes deciden, ella también es capaz de escoger, Allison tampoco les debe nada a ustedes tres. Sólo porque crean eso en su cabeza, no quiere decir que tenga que hacerse realidad.
Ante sus palabras que me ayudaron a sentirme agradecida, la miré esbozando una sonrisa de agradecimiento y ella en respuesta, me sonrió tímidamente.
Melanie... Es realmente increíble.
-¿Por qué no me haces un favor Melanie? -habló Ivonne con enfado. -Házme el favor de callarte, nadie pidió tu opinión.
-Esto es entre Allison y nosotras. -dijo Carla.
-Sé que les he dicho que sólo tengo tiempo para ustedes -decidí finalmente hablar. -Pero no soy suya, ¿cuándo lo van a entender? Entiendo que pase tiempo con ustedes, pero ya les he dejado en claro que los coqueteos, no van a ir a más. Yo no soy de nadie.
-¿Eso quiere decir que nos estás mandando al carajo? -dijo Ivonne.
-Se supone que estamos haciendo el trabajo -indiqué-. Y ustedes también deberían hacer lo mismo.
Muy a su pesar, se fueron y una vez que se fueron, suspiré y mire al suelo afligida.
-Yo no soy de nadie. Ni siquiera soy mía. ¿Por qué no pueden entenderlo?
-Allison... -pronunció mi nombre Melanie, y yo volteé a verla sin ninguna expresión en mi rostro. -¿Por qué dices que ni siquiera te perteneces a tí misma?
-Cuando llevas un tiempo sin saber que hacer contigo misma para olvidar el dolor, te olvidas de que tú misma eres esa llave para olvidar ese sufrimiento. Pero llega un punto, en el que dejas de pertenecerte a ti misma, tus sueños ya no te pertenecen y nada de lo que es tuyo te pertenece... ni siquiera tu vida. Pues desde que ella se fue, se llevo todas tus ilusiones y sueños...
Tristemente era la verdad. Desde que ella vino a mi vida, todo había cambiado para mí. Pero me temo que para mal. Yo ya no era la misma chica risueña, ahora solo era una vil rompecorazones que salía con las chicas para curar el vacío que implantaron en mi corazón...
-Siempre he tenido una duda desde que te conocí -dijo Melanie repentinamente-. Espero que no te incomode... ¿Pero por qué decidiste convertirte en una rompecorazones?
-No estoy lista para revelar esa parte mía -contesté y un instante después Melanie tomó mi mano-. Mejor avancemos con el trabajo.
[...]
Y eso hicimos.
Avanzamos en el trabajo.
Hasta que finalmente llegó el viernes y Melanie, acariciando mi mano me dijo:
-Me gustan tus ojos.
-Gracias -dije yo.
-Te amo, eres una gran amiga -dijo ella. Yo esbocé una amplia sonrisa.
Vaya, ver a Dashton coquetear es divertido.
-Gracias, yo también me amo -contesté.
Melanie siguió acariciando mi mano hasta que yo agregué:
-¿Espera, Dashton me estás coqueteando? -le pregunté sin poder aguantar la carcajada. Un instante después, las mejillas de Melanie se pusieron rojas y eso terminó por responderme.
-No, of course -respondió hecha un tomate.
-¿Y por qué estas acariciando mi cabello y tomando mi mano de esa manera tan comprometedora? -indagé.
-Vale, si, te estoy ligando -me dijo con una amplia sonrisa.
-Ligas terrible -le respondí con otra sonrisa.
-Ey, ¿qué pretendes? -no tardó en aparecer la jodida de Ivonne. -¡Dilo estúpida! ¿Para esto querías estar con Allison? ¡¿Para coquetearle en nuestra cara?! Eres de lo peor.
-Qué sueño me das -pronunció Melanie.
-Ahora te quieres hacer la digna -repuso Ivonne molesta-. Si bien que planeaste esto desde el principio. Tus únicas intenciones son coquetear con Allison, Melanie, no creas que me engañas maldita.
-Ivonne -hablé cansada. -¿Cuál es la necesidad por tenerme a tu lado? ¿Tanto necesitas que esté a tu lado?
-Sólo te estoy protegiendo de Melanie -respondió Ivonne y yo la miré frunciendo el ceño. -¿No lo entiendes Allison? ¿No ves sus intenciones?
-¿Cuáles intenciones? -pregunté apunto de perder la paciencia. -Me parece que la única persona que no está entendiendo las cosas eres tú Ivonne. Melanie no estaba coqueteando conmigo porque para empezar es heterosexual. Piénsalo, ¿cómo podría coquetearme?
Posteriormente le guiñe el ojo a Melanie.
Y ella se volvió un tomate.
-Esa es la verdad, soy heterosexual -dijo Melanie.
-¿En serio? ¿Estás segura de lo que dices? -dijo Ivonne no muy convencida. -Mi radar gay nunca me falla, yo estoy muy segura que Melanie no es hetero. ¿En verdad eres hetero? -se dirige conmigo Ivonne.
-Sí Ivonne -contestó Melanie. -Te falló el radar, pero no necesitas preocuparte de nada, porque SOY hetero.
-Esa ni tú te la crees -se rió la maldita de Ivonne-. Eres de todo, menos heterosexual.
-A veces las personas que crees que son, no lo son, y las personas que menos crees, lo son. Y en este caso, te has equivocado completamente Ivonne -hablé yo esperando a que Ivonne decidiera guardar silencio.
-Pero eso no puede ser cierto... Yo creía que Melanie era gay.
-¡Mira la hora! -exclamó Melanie y le enseñó la hora a través de su celular para que viera la hora. -Ya es hora de que regreses a hacer tu trabajo Ivonne.
-Tú... -Ivonne parece querer decir algo más, pero al final opta por irse y dejarnos por fin solas.
Finalmente Ivonne se fue y las dos seguimos continuando con el proyecto. Mientras que sentía las miradas de Melanie puestas sobre mi. No puedo creer que en verdad le guste... ¿Por qué?
-Allison, tengo una pregunta... -dijo de pronto Melanie y yo dejé de hacer lo que estaba haciendo, para prestarle atención. -¿Por qué mentiste diciendo que era hetero?
-Porque a Ivonne se le ha subido a la cabeza que tú y yo tenemos algo -empecé a relatar-. El otro día, ella me espero afuera de mis clases de piano por más de una hora. Ese día estaba muy ocupada, pero decidí saber por qué Ivonne me había esperado por tanto tiempo. Y lo que me dijo, es que sospechaba sobre que tú y yo teníamos algo. Sus celos fueron innecesarios, ¡pero deberías haberla visto! Me reprochó y reclamo algo que a ella ni siquiera debería importarle. Actuó como si fuera mi novia y yo le debiera respeto y fidelidad. ¡Por Dios! Desde el inicio le dejé en claro, que esto no iba a ir a más y que por esa misma razón no se hiciera ilusiones. Pero ella está encaprichada conmigo, ¡quiere que sea suya a toda costa! Y la verdad es que ya me tiene harta esa actitud suya. Yo no soy de nadie y ese comentario que hice, era una indirecta precisamente para ella, pero al parecer no la ha captado. ¡Qué coraje! Y entonces aproveche la oportunidad para decir que eras heterosexual para que se fuera y dejará de molestar. Pero deberías saber, que lamento mucho haber mentido acerca de tu sexualidad. No debí meterte en esto.
La verdad es que me sabía mal meter a Melanie en esto. Sé que no tiene justificación, pero se lo recompensaré.
Posteriormente se terminó la clase y me fui al salón de música.
-Never mind, i'll find someone like you -comencé a cantar con nostalgia-. I wish nothing but the beast... For you to...
Las heridas que me dejó el pasado y el amor eran irrompibles.
Justo ahora estoy a la deriva. No creo que pueda ser curada...
Ella... Fue mi mayor error.
¿Algún día saldré de esto?
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