— Dijiste Nefelim — hablo sorprendida Ruth —. No se supone que no se permitían, eso es lo que leí en los libros.

— Si, se supone que esas cosas no deberían existir. Por algo están prohibidos — Gabriel tomo asiento.

Después de la cacería de la manada de lobos Gabriel escuchó a radio angel y no eran buenas noticias, pues le anunciaron que se había procreado un nefelim. Que era el resultado de la unión entre un humano y un Ángel; pero este bebé no era cualquier nefelim pues era hijo del mismo Lucifer; todos en el cielo estaban alterados y preocupados sobre todo Enias, el más que nadie.

Luego de la nueva e inesperada noticia, fueron a refugiarse al sencillo motel, para eso se hicieron pasar como una feliz pareja que pasaría algunos días. Ese Motel se había convertido en su centro de operaciones por el momento; lo que no entendía Ruth como una humana pudo haberse metido con el maldito de Lucifer y no solo eso ser capaz de quedar en estado; ahora no solo tenía que salvar la tierra de los monstruos sino de un nefelim que según la historia son seres con grandes poderes capaz de destruir y crear mundos, poderes así en manos del angel caído sería la destrucción de toda la humanidad; si que tenían las cosas jodidas ahora debían buscar a esa mujer que tenía el fruto prohibido y asesinarla con su engendro.

— Lo que pude averiguar de este libro es que solo necesitamos nuestras espada angelical para acabar con ellos. También dice que en los primeros años de la creación de la humanidad muchos de nuestros hermanos tuvieron hijos, pero yo no recuerdo eso — miro confundida Ruth a su hermano Gabriel.

— Eso es porque nuestro querido padre, les borró la memoria a ustedes — quien estaba de brazos cruzados apoyado en la pared.

— Eso explicaría algunas lagunas mentales que tengo — cerro el libro y apoyo sus manos sobre el respaldo de la silla —. ¿En qué piensas?

— En que no va ser sencillo encontrar a Lucifer y la humana que tiene como pareja — el arcángel se sentó y dirigió su mirada en su hermana —. Pero podemos rastrear su energía, seres como ellos dejan rastros. Por otro lado me preocupas, sin tu gracia va ser más sencillo que Lucifer que mate.

— Tener mi gracia no quiere decir que estoy a salvo de ese monstruo, solo que me da una posibilidad.

— Entonces debemos comenzar la caza de brujas si así lo queremos llamar — Gabriel se puso de pie sentándose a lado de su hermana .

— Pero no tenemos un equipo de rastreo.

— Tenemos uno — el rubio puso su gesto como si estuviera pensando —. No hay de otra debemos ir al famoso búnker.

— El hogar de esos cazadores, no me gusta esa idea. — había enfado en su voz.

— No te enojes preciosa, es lo mejor. Además es un lugar seguro, no creo que nos digan nada o se molesten ya que no están. — Se volvió a poner de pie.

La cazadora puso sus ojos en blanco —. No queda de otra... iremos al famoso bunker.

******

Dos horas en carretera, en la camioneta se escuchaba por la radio la desaparición de una mujer de nombre Kelly Kline ya tenía varios días de desaparecida, se daba recompensa por cualquier dato de la mujer no sabe porque pero guardo en su mente aquel nombre. Después de unos minutos llegaron al garaje del bunker, estacionó su camioneta y ambos hermanos bajaron; el arcángel que conocía muy bien el lugar fue la guía para la cazadora.

Llegaron a la sala de guerra, pudo observar la gran mesa redonda frente a ella un pizarrón blanco que tenía anotaciones, que lo más seguro era de sus anteriores casos al acercarse más pudo ver escrito con plumón rojo "puerta dimensional", no se sabe cuanto tiempo se quedo mirando el pizarrón lo único que vio fue la mano frente a su vista de Gabriel.

— ¡¡Ey!! ¿Qué te pasa? — Gabriel le trueno los dedos pudiendo así captar su atención —.Tengo minutos que te llamo. Debo enseñarte el lugar.

— Lo siento.. — Se disculpó —. Solo me distraje — dio una vuelta en su mismo lugar mirando alrededor —. Se ve muy acogedor este lugar.

— Si, lo sé. No parece un bunker.

— Tienes razón, no se parece nada a un bunker, solo el nombre nada más. Bueno dejando eso a un lado ¿dónde voy a dormir?

— Por eso te estaba hablando, pero estabas en el mundo de Alicia — Gabriel se ganó una mala mirada de su hermana.

La llevo por el estrecho pasillo que llevaba a las habitaciones, le enseño cual era de Dean, Sam y Castiel hasta que pararon frente a una puerta justo a lado de la habitación de Cas.

Ruth ingresó a la habitación tenía todo lo necesario un clóset, un baño propio, algunos muebles y la cama; lo primero que hizo fue tomar una ducha después de unos quince minutos de baño salió con su toalla envuelta se dispuso a sacar ropa de su maleta cuando escucho esa voz...

— Hola — Ella volteó y con su arma apunto a la cabeza del sujeto que estaba frente suyo.

— ¿Miguel? ¿Pero qué haces aquí? — Ruth bajo su arma —. Se supone que estás muerto.

— El de nuestro mundo si — La voz de Gabriel se hizo presente.

— ¿Qué quieres decir? — pregunto con desconcierto la mujer.

— Pues que este Miguel no es de nuestro mundo si no de otro, pero la pregunta sería ¿qué es lo que busca?.

— Vengo en son de paz — dijo el arcángel con sus brazos en alto —. Solo vine hablar, no quiero causar problemas.

— De ti no se puede creer tu palabra — Chasqueó lo dedos y Miguel se encontraba encerrado en un círculo de fuego sagrado.

— Vaya, ¿como así son las cosas?. No deberían tratar así a los invitados — Miguel cruzó ambos brazos a su pecho — Ya les dije que vengo en son de paz.

—  Y ya te dijimos que no te creemos — le dijo Gabriel —. Además que no nos has dicho que te trae por aquí.

— Una energía muy poderosa.

— El nefelim...

— Vaya así que de eso se trataba, un nefelim esta por nacer. Pero para que sea así de poderoso, debe ser hijo de un angel también muy poderoso.

— Si, es de Lu...

— ¡¡Cállate!! — Le grito Gabriel.

— Quién lo diría, a si que nuestro hermano tendrá un hijo. — Miguel pudo ver como Gabe  miraba de mala manera a la chica — . Pero no seas así con la linda señorita.

— Tu no te metas, que este no es tu mundo.

— Si, ya lo sé. En mi mundo tu me sirves como un perro fiel las 24 horas del día a cambio de tus preciados dulces — Gabriel ante ese comentario le miro muy molesto.

— Deja de joderme la paciencia, es mejor que regreses por donde llegaste.

— Lo haría pero me tienes atrapado en esta trampa, querido Gabriel o estas pensando matarme con tu espada.

— El tiene razón — comento Ruth —. Si quieres que se vaa, debes dejarlo libre. Pero si lo quieres matar puedes hacerlo ahora.

— Bien.. — Dijo renegando — . Te voy a liberar, pero debes prometer que te irás sin hacer nada. Ya que si metes tus manos en este caso te juro que mi espada entrará a tu maldito recipiente.

— He ir al vacío, no lo creo. Valoró mi vida hermano, no soy tan tonto para dejarme eliminar — Gabriel quito la trampa.

— Ahora si te puedes ir — demando el truquero, pero su hermano solo comenzó a reír —.¿Cuál es el chiste?

— Que no me puedo ir, recuerda que me trajo un portal pero ese ya no esta.

— Mierda... — Gabriel se quedó mirando al arcángel.

— No se supone que tu tienes ese don — dijo Ruth —. Debes poder abrir tu portal e irte de aquí.

— No es tan sencillo niña — Miguel se echó en la cama con sus piernas cruzadas mirando al techo —. Para eso debo tener mucha de mi gracia acumulada, pero aquí en tu mundo no se porque siento bloqueados mis poderes más fuertes.

—Puede que Enias o Lucifer hayan hecho algo que afecte tus poderes — Miguel miro con desconcierto a la mujer que le hablaba.

— Me estas queriendo decir ¿que Enias esta trabajando con el maldito de Lucifer?.

— Eso mismo. Ese maldito de Enias hizo caer a Ruth del cielo y esta perdió sus recuerdos, pero le pude ayudar— le explico a su hermano.

—Vaya si que este mundo es muy interesante, quisiera saber que más pasa aquí, tal vez podría ayudar.

Gabriel que no quería que Miguel se involucre en los asuntos no le quedo de otra que contar toda la historia.

— Bien, esto fue lo que pasó...

****

No tenía idea de cuántos días llevaba ahí, pero si que era un tortura estar en esas condiciones,  pues eso hacía que este mal y a la vez su bebé que poco le importaba a su padre. Kelly se odiaba a ella misma por haber caído en las garras de ese demonio sin corazón, como podía ser que le tuviera atada de pies y manos al menos no le dejaba morir de hambre, eso era lo único bueno.

Pero lo único que si se dio cuenta que su embarazo no era normal, pues si sacaba sus conclusiones no podría pasar los dos meses pero aún así ella sentía algunas pataditas del bebé; la futura mamá tuvo que salir de su mundo de pensamientos e ilusiones ya que Lucifer se hizo presente, era hora de sus revisiones cosa que no le gustaba nada a ella, ya que no aguantaba que esas manos que una vez le tocaron y que ahora le daba repulsión le tocará; no había otra cosa que hacer, debía estar informada de como iba su embarazo. Ella amaba a su bebé solo que sentía lastima que tuviera a un miserable como padre; menos mal que la revisión terminó rápido.

— El nefelim está bien — Lucifer sonreía — Lo malo es que rechaza mi gracia y eso se debe a ti — Kelly le miro a los ojos.

— ¿Yo? No entiendo — La mujer no dejaba de mirar al arcángel.

— Pues eso, tu tienes la culpa. El bebé siente tu miedo hacia mí y me ve como una amenaza — Kelly bajo la mirada —. No me gusta eso, se supone que soy su padre no me debe temer.

— Si tan solo me trataras como una pisca de humanidad — alza sus brazos y muestra las cadenas —. Tal vez así dejaría de tenerte miedo.

— Esa es la parte de ustedes los humanos que no me agrada — se puso de cuclillas y con su mano sujeto el rostro de la futura madre —. Nunca están conformes con nada de lo que tienen, esa parte suya me da náuseas. No me mires así querida, solo digo la verdad.

— Eres un enfermo, el que me da asco eres tú — Se zafó del agarre —. Ahora se lo que debo hacer.

— Se puede saber ¿que harás? — pregunto con burla.

— Alejar a mi hijo de ti — Lucifer sintió poder emanar de la mujer al ver sus ojos vio como estos brillaban de un color dorado.

— Fascinante, mi hijo si que es brillante — tenía una gran sonrisa en su rostro —. Pero pobre de el que tiene una madre tan débil como tú, eso se va solucionar cuando mueras y eso eso va pasar muy pronto — los ojos de la mujer regresaron a la normalidad y el arcángel abandonó la habitación.

Kelly relajó su cuerpo y llevó sus manos a su vientre mientras sonreía.

— Gracias, no eres como tu padre y eso me alegra. Te amo mi niño, te amo mucho — alejo sus manos de su vientre y se dio cuenta que Lucifer se había olvidado de cerrar mis las cadenas.

Como pudo se puso de pie y comenzó a mirar alrededor, buscando alguna salida de aquella habitación por nada del mundo dejaría que su bebé naciera en estas condiciones menos en manos de su padre. Así que se fue a la ventana pero esta tenía barrotes, así que era imposible salir por ahí; debía seguir buscando alguna salida pero un miedo le invadió cuando sintió pasos que se acercaban, así que rápidamente volvió al lugar donde le habían dejado; Lucifer entró y miro que todo estaba en orden, dio algunas vueltas a la habitación, rutina que hacía diariamente, no quería tener que lamentarse después, al terminar de hacer su inspección se pasó a retirar pero antes de salir le hablo a Kelly.

— Saldré por unos días, pero no te preocupes estoy dejando alguien a cargo — De la puerta aparece una mujer de cabello rojizo de mirada algo fría.

— Hola, soy la hermana Jo. Seré tu guardiana en estos días.

Kelly pudo sentir la incomodidad de su bebé ante la presencia de la mujer, eso quería decir que aquella tipa era de cuidado, ella no dijo solo bajo la mirada, no quería alertar a ese par de la única ventaja que tenía hasta ese momento de escapar. Después de unos minutos ambos seres dejaron nuevamente sola a Kelly, cuando escuchó la puerta principal cerrarse nuevamente se puso de pie ya no quería permanecer ni un minuto más en las garras de Lucifer.

Deseaba tanto poder salir de aquí, pero no había como, la única manera era atravesar las paredes para ser libre lejos de aquel lugar tal vez en un parque donde haya un árbol y que se pueda sentar bajo las ramas mientras ella miraba el cielo azul. Cerro sus ojos imaginando aquella escena, respirando el aire puro, a su olfato llegó un olor conocido y a su oído risas de niños jugando, pensó seguro que estaba teniendo una alucinación pero no quería despertar, hasta que un viento soplo e hizo volar su cabello, tuvo la necesidad de abrir sus ojos y así lo hizo para darse cuenta que estaba justo sentada en medio de un pasto verde podía ver también niños correr por los alrededores, miro atrás de ella y un gran árbol le daba sombra por instinto toco su vientre fue en ese instante que pudo escuchar la voz de su bebé...

— Ahora estas a salvo, mamá. No tengas miedo yo te cuidaré, nadie podrá tocarte.

La futura madre no pudo evitar soltar unas lágrimas, su bebé, el pequeño ser que llevaba  dentro la rescató de ese cruel encierro; supo ahí que su hijo estaba destinado hacer grandes cosas y que ella le iba a guiar para hacer las cosas correctas. Lo que ella desconocía era que ese sueño posiblemente no se volvería realidad.

Después del algunas horas en el bello parque decidió buscar un lugar donde pasar la noche  busco en sus bolsillos y encontró sus tarjetas sabia que no podía ir a un cajero automático ya que Lucifer seguro la estaría rastreando así que fue directo a un banco para sacar todos sus ahorros, desde ahora iba andar con efectivo en mano no quería volver a correr riesgo. Llego a un motel económico; era un motel barato pero tenia lo necesario para ella, lo primero que hizo fue tomar una ducha y alistarse para dormir, ya mañana buscaría algún trabajo y algo se ropa para que pueda cambiarse, se puso lo más cómoda que podía  se acostó quedando así profundamente en los brazos de morfeo.

*****

Dean Winchester caminaba por el mercado de sombras, este tenía puesto una capucha el cazador que utilizaba glamour para ocultar su verdadera identidad, detuvo su andar al mirar un cartel con su rostro donde decía se busca pero no solo podía ver su rostro si no que también estaba su hermano y el resto del equipo. Esta modalidad de ocultación de identidad llevaba ya una semana desde el rescate de Magnus Bane; Dean sujeto el cártel con su rostro y lo destruyó a su costado Sam hacia lo mismo, por dentro el rubio de ojos verdes se maldecia a el mismo por unir fuerzas con los cazadores de sombras ahora eran buscados por todos aquellos sujetos con runas.

Proseguío a seguir caminando aún le faltaba cosas que comprar, cuando vieron a los vendedores casi huir al observar mejor el panorama supieron el porque de tanta conmoción pues un grupo de 5 cazadores se encontraba caminando hacia su dirección rápidamente ambos hermanos sacaron un frasco y se lo bebieron, tal como le dijo el gran brujo se volvieron invisibles pero al parecer eso activo un sensor de actividad en los cazadores que comenzaron a mirar a todos lados.

— ¿Sentiste eso? — pregunto un cazador a su compañera.

— Si — respondió sin dejar de mirar a todos lados con su arma —. Eso a sido magia.

— Entonces lo hemos perdido — del enfado que tenía pateo una lata que cayó en la pierna de Sam que tuvo que aguantar el dolor —. Llevamos una maldita semana buscando a esos tipos junto con los traidores de la clave — se referían a Alec y compañía.

— ¡Ey! Sabes que debes estar tranquilo, lo más seguro es que nos hayan informado mal tu sabes como son esos brujos — bajo su arma y se acercó a su compañero — Debemos actuar rápido, Hana, Leo, James hagan un patrullaje por el perímetro nos avisan si ven alguna anomalía y por favor sean precavidos.

Los tres cazadores asintieron y tal como se los había ordenado su líder se marcharon, en la escena solo estaba los que debían ser los líderes del escuadrón, eso es lo que suponía Dean pero sus sospechas fueron confirmadas justo en ese momento.

— Esto es realmente molesto no crees Anahi tener que buscar a los Lightwood junto con esos intrusos — se sentó en un barril de basura.

— No creo que deberíamos hablar de ese tema aquí, sabes que no estoy de acuerdo con eso Matthew  — La cazadora se sentó junto a él —. Pero entiendo tu manera de pensar, se que tienes rencor por la muerte de tus padres en la gran guerra.

Sam y Dean se miraban entre tanto a la vez que escuchaban la conversación.

— No menciones esa etapa, mis padres fueron unos héroes... Si los extraño, pero ellos viven en cada vez que empuñó un arma.

— Mi querido parabatai, recuerda que no estás solo — paso su brazo por el hombre del chico.

— Si, eres la mitad de mi alma — ambos rieron. Fue cuando los Winchester decidieron irse pero el celular de la cazadora sonó —. Si, con quien hablo... Disculpe señora... Un angel, no hemos sabido nada de ese supuesto ángel... ¿Ordenes?... Si, como usted diga — guardo su celular y miro a su amigo.

— ¿Quién era?

— La consul, tenemos nuevas órdenes. Hay un ángel suelto, su nombre es Castriel...

— Castiel — corrigió Dean. Su hermano le tapó la boca.

Los cazadores comenzaron a mirar a todos lados, pero al no ver nada continuaron con lo suyo.

— Bueno, como se llame ese angel debemos capturarlo.

— Vaya un angel, primero los traidores ahora un ser celestial te juro que a cualquiera que encuentre lo mató — dijo Matthew.

La conversación terminó ahí, ambos cazadores se fueron a buscar al resto de sus compañeros; Dean al ver que se fueron explotó de furia pateando lo que encontraba a la vista su hermano trataba de controlarlo pero el también estaba angustiado por su amigo pero se quedó pensando un rato el mayor se dio cuenta de ello.

— ¿En que tanto piensas?.

— No escuchaste lo que dijeron esos cazadores — Dean le miró levantando una ceja.

— Si, no soy sordo Sammy — su tono de voz era de enojo — Buscan a Castiel y nosotros aqui sin hacer nada... — Dean miró a su hermano —. Ellos dijeron que debían buscar a Cas, pero si él estaba atrapado, eso quiere decir que...

— Escapo — completo Sam —. Ya no hay necesidad de ir a ese lugar como se llame, solo debemos rastrear a nuestro amigo.

— Eso nos facilita más las cosas — Era una buena noticia, Castiel estaba bien ya no corría peligro, bueno no tanto eso le daba esperanza a Dean de encontrarlo con bien.

Al ver que ya no podían seguir con las compras decidieron regresar al escondite donde debían dar la buenas noticias .

Hola se que me perdido mucho tiempo pero caí enferma, pero estoy bien.

Así que les dejo este capítulo para que lo disfruten, muchas gracias por sus votos y comentarios 🥰😊🤗