Muy buenas noches gente, mil gracias a todos por sus comentarios y apoyo. Se que tarde mucho en hacer la publicación de este capítulo, pero estoy orgulloso de decir que estoy empezando a trabajar en algunas escuelas, eso me mantiene ocupado y bueno.

¿Así de sientes estar del otro lado? No se, es raro verme así, por un lado como un profesor serio y responsable, pero por otro aún haciendo historias como estas, que aceptamoslos, la comunidad está muriendo, ya hay poquísimas historias.

Incluso a mí me está costando el terminarlas.

Al menos Mirio está teniendo éxito en sus historias y no tengo problemas en a veces escribir algunas hojas en caso de ser necesario.

En fin, me llevo mucho hacer este capítulo, ¿Estoy satisfecho con el resultado? Pues me gustaría decir que sí, pero siento que pudo ser mejor. No le doy más vueltas, mejor les dejo a su criterio.

Disfruten del capitulo.

Disculpen los errores ortográficos.

"hablar" personaje hablando.

"Hablar" personaje pensando.

"Hablar" nombres de las técnicas.

(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.

############ Cambio de escenario o lugar.

Capítulo 74:

La casa a la que llegaron estaba en las afueras de un pequeño pueblo, Azula miró el pequeño y humilde edificio de madera con una cálida luz que salía por las ventanas. Un bonito lugar, pequeño y acogedor.

Con una gran sonrisa, la mujer abrió la puerta. "¡Volvi!" Grito al entrar y de inmediato su llamado fue respondido.

"¡MAAAAAMIIIIIII!" el grito sonó se escuchó en toda la casa, esta pertenecía a una niña pequeña, que vino corriendo y se lanzó a los brazos de Noriko, abrazándola con todas sus fuerzas.

Esa fue una escena que hizo que el corazón de Azula se sacudiera al ver el abrazo entre madre e hija.

"¡¿Por qué te fuiste de la casa así?!" chillo la niña hinchando sus mejillas.

"Tuve un presentimiento" respondió con calma la señora que devolvió el abrazo a su hija, "Salí a caminar y justo me encontré a una bella joven que necesitaba ayuda" Noriko se giró para mirar a Azula y la niña también la miró.

Azula se quedó de pie torpemente un rato, sin saber cómo saludar a tratar a una niña tan pequeña, nunca fue buena con los niños.

"WOW" la pequeña la miro fijamente, curiosa como toda niña camino alrededor de ella, "Estás muy sucia" ella comentó.

Una vena se marco en la frente la princesa, que si, estaba sucia y cansada, pero que la niña se lo dijera en la cara hizo que se molestará.

"¡Kiyi!" Grito Noriko que la regaño, "¡Sé amable! ¡Esta pobre chica debe haberse perdido, y en el valle del olvido de todos los lugares! Necesita ayuda, así que sé amable"

"Lo siento mami, seré buena" disculpándose la niña volvió a mirar a la princesa, "¿Quieres que triada un balde y esponja de acero para que puedas sacarte lo sucio?"

(Yosef: Joder, ya estoy adorando a esta niña XD)

Uno de los ojos de Azula se contrajo con irritación.

Para suerte de la niña, justo en ese momento la puerta fue abierta de golpe, un hombre interrumpió y Azula miró hacia arriba para ver a un hombre de mediana edad y complexión delgada.

"¿Noriko?" el sujeto dejo de su bolsa en un perchero y miro confundido a una chica sucia y herida en su sala, "¿Está bien?"

"Ah, Noren" Noriko sonó al acercarse a él y recibirlo con un breve beso en los labios, "Señorita, este es mi esposo Noren y Kiyi mi hija" ella presentó a su familia con orgullo, "¿Tienes hambre? Puedo prepararte algo si quieres"

Ante eso, Azula se llevó las manos al estómago, había pasado un largo rato de la última vez que había comido.

"¿Ella no es…?" el hombre de la casa no tuvo que mirar demasiado a la chica para saber quién era.

"La pobrecita se perdió en el valle del olvido" Noriko susurró para evitar que ella lo escuchara, ella también sabía quién era, pero no quería decir que no necesitara ayuda, "Necesita ayuda"

"Siempre ame esa bondad que tienes" sonriendo Noren no tuvo problema con que la chica se quedará, "Yo haré la cena, tú podrías darle algo de ropa limpia y dejarle usar el baño"

Feliz de tener el apoyo de su esposo, la señora volteó a mirar a Azula, "Bien, traeré algo de ropa limpia para ella. Por favor, perdóname querida, no tendré nada de tu tamaño. Me temo que tendrás que usar algo de mi ropa aunque sea un poco grande"

Azula solo caminando con la cabeza de forma distraída, la ropa usada demasiado grande realmente no era algo que le importara, pero había algo extraño en esta casa.

Sobre esta familia.

Parecían tan normales y humildes, como si fueran sacados de un cuento de hadas.

Sacando esos pensamientos de su mente, dejó que la mujer la guiara a un dormitorio donde encontró agua y toallas para limpiarse, había también una muda de ropa, un vestido largo y suave de color rojo con negro.

Azula no dijo una palabra mientras se quitaba la ropa y alcanzaba el paño húmedo para empezar a limpiarse, sin notar que Noriko aún estaba en la habitación, y la mirada en estado de shock.

La mujer se espanto al ver cicatrices y marcas en el cuerpo de la adolescente, ninguna chica de esa edad tendría que tener eso, pero desgraciadamente estaban en una guerra, sabía que esto era parte de la vida de ser soldado.

"Eso debió doler mucho" Noriko susurró mirando con dolor las marcas y cicatrices, "¿Estás bien?"

Azula se encogió de hombros. "Sobreviví… es todo lo que importa"

Insegura la mujer tomo una cesta con algunas cosas, "Aquí tienes jabón, para lavarte el pelo si quieres... iré a prepararte una cama" dijo mientras retrocedía y finalmente salió corriendo.

Los ojos de Azula se suavizaron, "Gracias..." murmuró algo tarde mientras en silencio seguía limpiándose.

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"¿Ahora qué?"

Naruto y Zuko aún estaba en la playa, dónde en la orilla estaba el lobo espiritual inconsciente, al parecer la razón de su estado se podría relacionar con el gran cráter que había cerca.

Nada como un buen golpe en la cabeza con un escudo para calmar a un animal furioso.

"Se fue" El shinobi se arrodilló y miro las marcas de pisadas que Azula dejó, "Pero la encontrare"

Zuko levanto una ceja al ver al chico revisa la bolsa de su hermana, de dónde saco uno de sus pantalones, que ante si mirada incrédula empezó a oler, "¡¿Qué mierda haces?!"

(Yosef: Oler culos es una, así saben si es amigo o enemigo :v)

"Un truco Inuzuka" Naruto dejó la ropa de lado y empezó a olfatear en el aire, "Un amigo de su clan se jactaba de como funcionaba su olfato, explicó cómo enfocar chakra en la nariz, puedo hacer que sea igual que el de los Perros, no puedo hacerlo tan bien como el, pero lo suficiente para seguir el rastro de Azula, no está lejos"

"¿En serio? ¿Solo ese chakra a tu nariz y ya eres un sabueso?"

"Trucos ninjas mi amigo"

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De vuelta en el pequeño pueblo, Afuera de la habitación, Noriko estaba caminando de un lado a otro con una expresión de preocupación, llamando la atención de su esposo que se acercó a ella extrañado.

"¿Noriko?" preguntó. "¿Estás bien?"

Noriko negó con la cabeza, llevando su mano a su rostro se dio cuenta de que las lágrimas caían por su rostro, rápidamente se las secó con su manga. "Sí-i, no sé qué me pasó, yo solo... esa pobre niña... me pregunto qué le habrá sucedido a ella"

"La guerra no ha sido fácil para ellos, nosotros tenemos una isla que paso desapercibido, por eso disfrutamos de una paz que la gente allá afuera solo podría desear" explico con una mirada sombría Noren, "Escuche cosas de por lo que los jóvenes reclutas de la nación del fuego tienen que pasar, y desgraciadamente esa chica estuvo en el centro de todo eso, en verdad duele saber la vida que tiene"

"¿Y qué crees que por eso estaba en el valle del olvido?" preguntó Noriko. "Las personas que van a hay, no salen... temo pensar que pudo haber hecho sino la encontraba"

"..."

"Decía que estaba buscando a Ursa"

Ante eso, los ojos de Noren se abrieron como platos, ese nombre, fue suficiente para hacerlo quedarse callado.

"Tú sabrías más sobre ella que yo, ¿verdad?" preguntó la señora mirando esperanzada a su amado, "Has vivido aquí toda tu vida. Tal vez tú..."

El tragó saliva tenso y negoció con la cabeza, "Todo el pueblo sabe lo que paso con ella, el señor del fuego Azulon se llevó a Ursa para que se casara con el príncipe Ozai. Dicen que regresó para buscar a Ikem. Pero ninguno de Los dos han sido vistos en años"

"Ursa..." Noriko repitió ese nombre, que por alguna razón hacia que sintiera un ligero dolor de cabeza, sin notar que los ojos de su esposo parecían llenos de arrepentimiento.

"¿Noriko?"

"¿Nunca lo has sentido?" pregunto de golpe la ama de casa, "El ver a alguien y sentir que lo conoces sin haberla visto antes... lo siento con esa chica, no solo eso, la veo y yo... siento algo. Es como... la conozco y es mi trabajo protegerla. Lo siento en mi pecho. ¡Se supone que debo cuidarla!"

"Noriko"

"Tenemos que dejar que se quede, por favor, el tiempo necesario"

Los ojos del hombre reflejaron su incertidumbre, pero una vez más se quedó callado y inclinado con la cabeza, "Claro… está bien"

Ambos padres tuvieron que cortar su charla, cuando escucharon la risa de su hija, los dos se acercaron a la puerta, para ver a una alegre Kiyi sentar a varías de sus muñecas en la mesa, mientras tomaba de la mano a Azula para hacer que se siente también cerca.

"¡Tienes un cabello bonito!" dijo alegre la niña que tomo un peine para peinar el cabello de la chica, que se veía mucho más bonita ahora bañada y con ropa limpia, "Aunque un poco seco"

"No tengo tiempo para cremas y todo eso" murmuró entre dientes Azula, que dejo que la niña hiciera lo que quisiera, estaba muy cansada para hacer algo.

"¡Nop! Una chica siempre tiene que verse bien, así vas a atraer un chico que sea igual de limpio y que guste verse bien presentable" explicó muy seria la niña que estaba peinando decidida a dejarle un buen peinado.

"Es discutible", resopló Azula.

"¡Nop y nop! Si un chico es sucio y apestoso, no tiene que quejarse si está solo, a nosotras no nos gusta que sean peludos y sucios"

"Eso es cierto"

"¡Ajá! ¡Mira! ¡Mira!" la niña tomo un espejo y casi lo empujó al rostro de Azula que tuvo que tomar el espejo y verso, su cabello largo y alisado caía como cascada por sus hombros y espalda, "¡Soy increíble! ¿No?"

"Creo"

"¡Ahora tú a mí!" la pequeña empujó la silla donde estaba sentada la maestra fuego, y alegre se sentó en su regazo para dejarle tener acceso a su cabeza.

Azula parpadeó confundida, la niña tenía demasiada confianza, como si ya la conocía de antes, aún así lo dejo pasar y empezó a tratar de peinarla.

En la puerta, los dos padres sintieron su corazón ser tocado por lo bien que se llevaban las dos, su hija normalmente era un poco más reservada con los desconocidos, pero con esta chica le tomo un cariño rápido.

Los dos miraron de nuevo, como su hija chillo espantada al ver su cabello peinado de mala manera y trenzas de diferentes tamaños.

Azula se rasco la mejilla apenada, "No soy buena con el cabello"

"¡Mi cabello!" chillo en pánico la pequeña.

Noriko tuvo que reírse,

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" Esto es vergonzoso"

Zuko jamás admitiría en su vida que alguna vez tuvo que subirse a la espalda de Naruto, que lo llevo como un niño de caballito para poder avanzar más rápido y buscar a su hermana menor.

Lo que uno tenía que hacer por la familia.

Y que el shinobi saltará entre los árboles y fuera más rápido que cualquier vehículo que se haya inventado hasta la fecha, solo hacía de las cosas aún peores.

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Con la mesa puesta y la comida servida, Azula no pudo evitar comer con gusto, por alguna razón la comida casera de esta señora era mil veces mejor que cualquier cosa que hubiera comida antes en la mansión de la nación del fuego.

"¡Vaya que glotona eres!" señalo riendo la niña al ver a la chica comer su tazón de arroz con curri en menos de un minuto.

Su comentario hizo que Azula dejara de comer y le diera una mirada de muerte, no era una glotona, solo… la comida estaba buena.

"¡Kiyi!" Su madre obviamente la regaño por sus palabras, haciendo que de inmediato la niña volviera a su plato a comer en silencio, "Lo siento, es que ella suele decir las cosas sin pensar, es un poco directo"

" Me recuerda a alguien" pensó Azula que miro de reojo a la niña, que ahora tenía una muñeca en su regazo y finía darle de comer como si fuera su madre.

"¿Y como te fue en el teatro hoy?" Buscando empezar una conversación, Noriko miro a su marido.

"Oh excelente, ya esto todo preparado para la función del 'Amor de dos dragones'"

"¡Si!" la niña chillo feliz ante la noticia, "¡Mami y papi van a ser de nuevas las estrellas!"

"¿...?" Azula miro confundida con la madre de la casa.

"Oh lo siento, nosotros somos quien maneja el teatro local, también somos los maestros de actuación y quién también actuamos en varias de las obras"

"..." Eso sonaba demasiado familiar para Azula.

Mientras los dos padres hablaban y su hija jugaba mientras comía, todo esto fue visto por la princesa que se sentía tan fuera de lugar, pero a la vez también tan cómoda, como sintiéndose parte de la química familiar que había en la casa.

Ella tuvo que salir de sus pensamientos cuando la cena había terminado, y como ya era tarde, tenían que dormir, y como en la casa no había una habitación para invitados en el que pudiera dormir.

Le tocó dormir en la sala de estar, en un sillón que estaba frente a la chimenea de la casa.

"Aquí" Noriko le dio varias mantas y una almohada, haciendo que la chica se acueste la arropó y la puso cómoda, "Buenas noches Zu"

La chica se quedó rígida cuando la mujer acaricio su cabello y le dio un beso en la frente.

Y ella se había dado cuenta de lo que hizo, "¡Lo siento-o! Yo soy solo una desconocida, no tenía que hacer hecho eso, solo… lo hice" trato de excusarse la mujer que no sabía porque sentía tanta familiaridad con la princesa desterrada, si nunca en su vida la había visto antes.

"Está bien… no hay problema"

"Bueno, hasta mañana, ¡Si necesitas algo! No dudes en pedirmelo"

"Si…gracias"

Aunque apenas escucho ese agradecimiento por su voz tan baja, fue suficiente para Noriko que se acercó con la cabeza y se fue a dormir con su esposo.

De vuelta con Azula, ella se quedó recostada mirando fijamente el fuego de la chimenea, varios pensamientos pasaban por su mente, pero lo que más ahora resonaba era la sensación del cálido beso en su frente.

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Al día siguiente, todos estaban en la mesa desayunando tranquilos, hasta que el momento fue arruinado por un golpe en la ventana, curiosa la ama de casa abrió la ventana y se encontró con un adolescente cargando en la espalda a otro adolescente.

"Buenos días señora, de por casualidad, ¿No habrá visto una linda adolescente de cabello negro y mal carácter? Y tiene una mirada de te voy a matar la mayor parte del tiempo, y…"

Naruto se quedó callado cuando vio a Azula asomarse detrás de la mujer, y bueno, tenía la mirada que acababa de describir.

"Así que mal carácter y mirada asesina ¿Eh?" repitió la princesa con una mirada que ardía como sus llamas.

"Bueno, también dije linda"

Azula le cerró en la cara la ventana.

"Que chico más simpático" Noriko sonriendo divertida al ir hacia la puerta y abrirle a los chicos, donde tuvo que mirar dos veces al ver que uno de ellos era el pilar naranja y el otro el príncipe desterrado, "Hola"

"Buenos días" Zuko saludo y su mirada quedo fija en esa mujer, sus ojos hicieron que de inmediato la imagen de su madre viniera a su mente, pero su apariencia no era nada a lo que fue su madre, "Venimos por mi hermana, se perdió en el bosque, soy eh… ¿Kozu?"

"Amigo solo le diste la vuelta a tu nombre" señalo el shinobi.

"No quiero escuchar eso de la persona que puso el nombre de su contraparte femenina Naruko, solo cambiaste una maldita letra"

"Oye tranquilo viejo"

"Calma chicos, se quiénes son" La mujer les suena de forma amable a los dos adolescentes, "Sabemos por la causa de su pelea, y deseamos que ganen, todo esto que rodea la guerra solo trajo dolor y pena al mundo, deseo que pronto termine, pero bueno, ¡Pasen! ¡Pasen! Pueden desayunar con nosotros"

"No quisiéramos ser una moles-" Zuko no pudo terminar cuando ya fue tomada por la mujer, que lo arrastró dentro de casa, seguido de un sonriente Naruto, que al entrar a la casa, parpadeó al ver una niña pequeña que lo miraba fijamente .

"Hola pequeña"

"¿Eres el pilar naranja?"

"Sorbo"

"Eres pequeño de lo que pensé"

"..." Naruto tuvo que forzar una sonrisa, "Es gracioso viniendo de una niña que apenas me pasa la rodilla"

"¡Yo soy grande!"

"Claro que si, oye habla fuerte para que no te pise, eres tan pequeña después de todo"

"¡Mami! ¡Mami! ¡El es malo!" chillo la niña que corrió hacia su madre y abrazó su pierna.

"¿Enserio estás peleando con una niña de seis años?" Me pregunto con pena ajena Zuko, se supone que eran invitados en esta casa.

"Oye ella empezó"

"¡No! ¡Fuiste tú!"

"¡Tú!"

"¡Tú!"

"¡Tú!"

"¡Tú!"

"¡Tú-" Naruto no pudo seguir discutiendo cuando fue tomado de su oreja por Azula, "¡Oye ese duele!"

"No seas infantil" gruño la chica haciendo qué se callara.

Kiyi no pudo reírse de eso, cuando vio una sombra detrás de ella, volteando trago saliva al ver la dura mirada de su madre, "Eso no fue amable Kiyi"

"Lo siento-o mami"

"Discúlpate con el señor Uzumaki"

"Pero mami"

"Kiyi"

"Awwws... bien... lo siento señor"

"Disculpa aceptada" Naruto no tuvo que mirar sobre su hombro para saber que Azula la estaba penetrando la cabeza con su mirada, así que tuvo que agregar algo, "Yo-o también lo siento"

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"Muchas gracias por la comida"

Ya fuera de la casa, los adolescentes agradecieron el gesto de la familia de ofrecerles su humilde hogar para descansar e incluso desayunar.

"No hay problema" La ama de casa suena de forma amorosa y amable, como si su aura materna hacia que todo fuera más cálido y tranquilo, "Espero que encuentres lo que deseas mi niña"

Azula por instinto quiso dar un paso atrás, cuando Noriko se acercó a ella y la abrazo, una muestra de apoyo y comprensión que hizo que la chica se sintiera tan tensa, pero de inmediato ese mal estar quedó en el olvido por el abrazo.

Y sólo el dejo.

"Siempre que me necesites, yo te ayudaré en lo que pueda ¿Oíste?"

La princesa avanzando con la cabeza lentamente, "Gracias… por todo"

"¡De nada!" Tomando la mano de su esposa e hija pequeña, Noriko se despidió de los adolescentes, era fin de semana y había mucho que hacer en el teatro local.

El grupo se quedó viendo como la pequeña familia se alejaba, ellos también empezaron a ir por su propio camino, sin notar la mirada de culpa que tenía Noren, que tuvo que regresarse y mirar a los dos hermanos de fuego irse.

No podía seguir así.

El se detuvo y miro a su esposa que la miro confundida.

"¿Noren?"

"Tengo… que hablar de algo importante"

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Luego del desayuno y despedirse de la familia, el grupo de dos hermanos y shinobi fueron al bosque del olvido, donde Azula empezó a contar todo lo que se enteró.

"Así que mamá huyó el bosque..." Zuko hizo una mueca, el pensar como su madre en su desesperación de huir de su padre, lo llevo a perderse en este oscuro bosque.

Solá.

"Tu... ¿Crees que murió?" Pregunto temerosa Azula.

"No lo sé" respondió de forma sombría Zuko

"Tal vez siga en este bosque" Naruto miro a ambos hermanos y les suena, "Dudo que la madre de ustedes dos, par de locos, arrogantes y fuertes hermanos como ustedes solo se rinda así nada más"

Los dos adolescentes tuvieron que sonreír también, no perdían nada con aventurarse al bosque, dónde curiosamente se encontraron con un pequeño estanque.

"Oh oh" Naruto hizo una mueca al ver el lobo de antes en la orilla del estanque, "Vamos muchacho, que conste que tú me atacaste primero"

El lobo empezó a gruñir de forma amenazante, pero se mantuvo sentado, porque del estanque, una luz iluminada el oscuro bosque, ante la mirada incrédula del grupo, una figura humanoide hecha de raíces salió del agua, está tomo forma femenina y varios rostros se formaron en su cabeza.

" ¿Qué pasa con los espíritus de este mundo?" Naruto se empezó a arrepentir de no haber traído a Aang con ellos, dando un paso al frente una idea paso por su cabeza, "¡Hola señorita! Soy..."

" Uzumaki Naruto" el espíritu la miro fijamente, con su rostro impasible miro fijamente al adolescente, "El nuevo guerrero definitivo, el legado del guerrero original, Yen"

"Okey..." el adolescente se rasco la cabeza confundida, "Así que sabes de mi"

" Se de todos ustedes, Azula y Zuko, hijos de Ozai y Ursa, se de todas las personas que moldee y di su rostro, aunque a de otros lo conocí por palabras de mis semejantes"

"¿Y eso es bueno o malo?" pregunto con desconfianza Naruto que tomo su escudo, y se paró frente a los dos hermanos fuego de forma protector.

" Baja tus armas guerrero de otro mundo, los espíritus de la luna y el mar hablan bien de ti, y otros hemos observado tus acciones, eres interesante"

Naruto no haría comentarios sobre como al parecer su vida era el entretenimiento de estos espíritus que lo estaban espiando, "¿Puedes ayudarnos?"

La madre de los rostros volteó a mirar a los dos hermanos, "Se porque están aquí… su madre llegó hasta aquí" lentamente puso sus manos al frente, abriendo cada mano, por un lado mostró la imagen de Ursa, "Vino a mi en busca de una nueva oportunidad, y yo se la daré a quienes la merecen, y yo te di la oportunidad a ti"

Azula sintió que ese espíritu estaba viendo a través de su propia alma, "Tu hiciste que entrara al bosque"

" Eso es correcto, tenía que hacerlo, pero no esperé que mi viejo amigo saldría lastimado por eso" comento al ahora darle una mirada de advertencia al Uzumaki que se puso tenso cuando los dos espíritus, tanto el lobo como la madre de los rostros se le quedaron mirando.

"Pues su amigo hubiera sido más suave, casi me ven"

" Lamento escuchar eso…" volviendo al tema central, el espíritu hizo que una segunda imagen se empezara a formar en su otra mano, "Por eso brindaré mi ayuda como una compensación y un favor más, úsenlo con sabiduría"

"¿Qué sabes de nuestra madre?" pregunto Zuko sintiéndose ya ansioso.

" Ella vino a mi, pidiendo ayuda, queriendo huir de su pasado tomó una decisión, el olvidar su pasado y tener una nueva vida"

Ante los ojos de todos ellos, la nueva imagen que se mostró fue otra mujer, una que todos ellos reconocieron al instante.

Noriko.

Los dos hermanos estaban en shock, sin creer que habían conocido a su madre, que no solo estaba viva, también estaba casada… tenía una nueva familia.

"Ella... ¿nos queremos olvidar?"

Esa pregunta se sintió como una cucharada de ácido para Azula.

" Para vivir su nueva vida, tenía que olvidar todo lo pasado, todo lo que le trajo dolor y sufrimiento, que comenzó cuando abandonó estás islas..."

Zuko trago saliva, tratando de hacer bajar el nudo de su garganta por las fuertes emociones que martillaban su cabeza, "Nuestra madre… ¿Estuvo de acuerdo con esto?"

" Fue la condición que puse y ella la ayudó"

Azula se dio media vuelta y cuando estaba por dar un paso, su muñeca fue sujetada con fuerza por un serio Naruto, "¿Qué estás por hacer?"

"Suéltame"

"Mantén la cabeza fría Azula, piensa en lo que vas hacer" advirtió Naruto que podía ver lo afligida y más que nada lo enojada que estaba.

Zuko por su lado mantuvo la cabeza abajo, también sintió sus emociones volverse erráticas cómo su hermana, la sola idea de que su madre decidió voluntariamente el olvidar todo.

Darles las espaldas a ellos, sus hijos.

No culpaba a Azula por su reacción.

Que fue mucho más extrema que la de el.

"¡Dije que me duele!" Está vez la mano de Azula brillo con electricidad, una descarga con la potencia de un rayo paso a través del cuerpo de Naruto, que gruño ante el ataque, pero lo soporto.

"No"

"¡Ella tiene que pagar!"

"No es lo que en verdad quieres" Naruto se negó a soltar su mano, en cambio la sostuvo con más fuerza y ​​su mirada se volvió más suave.

"No sabes lo que quiero"

"No… no lo sé" soltando su mano, el no tuvo más opción que sacar algo de su chaqueta, un pequeño libro que se lo dio a ella, "Es el diario de tu madre, estaba bajo llave en un lugar escondido de su closet... no quería que lo leyeran, pero... supongo que no importa"

Frunciendo el ceño la princesa tomo el libro, su hermano se acercó para también empezar a leer.

No quería venir, pero no tuve opción… amenazaron con matar a mi familia, con matar a mi amado… ¿Por qué duele tanto el saber que no tienes elección? El saber que sin importar que haga, nada será útil, que solo tengo que obedecer, como mi única opción.

Ambos hermanos estaban leyendo las notas que su madre escribió apenas salió de la isla donde creció, dónde nació y se crió, dónde tuvo la vida perfecta que cualquiera solo podría soñar.

Todo eso se lo arrebataron de las manos, sin que pudiera hacer nada.

Ozai… tenía tanto miedo.

A diferencia de mi hermana menor, nunca tuve talento para el control del fuego, ni siquiera me interesó el aprenderlo para defenderme, porque mi vida era el teatro. Nunca se me pasó por al cabeza el dañar a otra persona.

Que inocente fui.

Que tonta.

Que patético.

El… me dijo, no me haría nada, que incluso dejaría en paz a Ikem que se arriesgo a querer salvarme.

' ¿Eres actriz no? Entonces actúa como una buena esposa, y no tendrás nada que temer… mientras no me hagas enojar'

El tiempo pasó, los días se volvieron semanas, apenas veía a Ozai, y cuando lo hacía era solo para presentarme como su esposa trofeo, el como la hija mayor del gran Avatar Roku era su esposa, y que le daría la descendencia que haría de su nación grande.

Descendencia.

Recuerda la primera noche, la primera de muchas.

Fue doloroso, siempre dolía, ya el no le importaba. Cada vez que me poseía, que me forzaba, era rudo y brusco, como si solo fuera un trabajo para el, una muestra de su poder sobre mi.

Al terminar… siempre me quedó en la cama llorando, hasta quedarme dormida.

Ambos adolescentes vieron varias páginas arrancadas, que tenían manchas de lágrimas y sangre, en verdad no querían saber que pasó por la mente de su madre en peor momento, tenían lo peor.

Pero en la última hoja, al final del diario, había una última nota.

Tantas veces deseé el solo tomar un cuchillo y acabar con mi miseria, lo odiaba tanto, lo odiaba… pero entre todo lo malo, surgió mi luz.

Zuko...

Azul…

Mis hijos, aún cuando eran el producto del odio, de la ambición, del odio de un hombre que me uso, también eran mis hijos. Los amo tanto… tanto… que no había nada que no haría por ellos, por eso… tuve que hacerlo, darle a Ozai lo último que quería de mi, para asegurarme de que los dejara en paz…

Me duele tanto el saber que ahora, tengo que irme, y no puedo llevarlos conmigo…

Lo siento…

Lo siento…

Lo siento tanto…

Toda la rabia que pudo sentir que ambos hermanos desaparecieron, como lágrimas en la lluvia al saber por todo lo que su madre tuvo que pasar.

Azula presionó con fuerza el diario y bajo la cabeza, antes que pudiera pensar en cualquier cosa, todos voltearon al escuchar algo salir del bosque.

Noriko salió del bosque agitada, sudorosa y sucia, denotando que había corrido todo el camino por bosque para llegar hasta ellos.

"Ustedes..." su mirada aún reflejaba incredulidad e incertidumbre por la gran revelación que le dio su esposo, "Ustedes... ¿Son mis hijos?"

Ninguno de los hermanos supo cómo responder a eso.

Aún tratando de procesar la información, Noriko miro a la madre de los rostros que aún estaba ahí, y los puntos empezaron a conectarse, no recordaba mucho de su vida antes de salir del valle del olvido. Todo era confuso.

Hasta que llegó a una conclusión.

"Yo… ¿Soy Ursa?" lentamente Noriko avanza, con pasos lentos como si sus pies estuvieran cubiertos de plomo, con su corazón subiendo hasta su garganta y ojos que se nublaban de lágrimas, abrió sus brazos y abrazo a los dos hermanos con todas sus fuerzas, "Zuko… Azula… "

Los dos hermanos estaban congelados, sin saber cómo reaccionar, después de tanto tiempo que tuvieron que esperar, que soñar para vivir este momento, que simplemente cuando llega, uno no sabe que hacer.

Zuko fue el primero en romperse, devolvió el abrazo a su madre y lloro en su hombro.

Azula aún estaba en shock, sin saber cómo sobrellevar este momento, hasta que escucho como entre lamentos y lágrimas decía una cosa.

" Lo siento…"

Lo repetía una y otra vez, hasta dio una última frase que golpeó fuerte a la chica.

" Lamento no haberlos amado lo suficiente…"

Azula dejo caer el diario y al igual que su hermano mayor, abrazo con todas sus fuerzas a su madre, llorando desconsoladamente por lo que parecieron ser horas para la pequeña familia reunida.

Naruto solo pudo sonreír ante lo que veía, sin embargo había algo que le estaba preocupando.

¿Ahora qué?

" Noriko " la madre de los rostros tenía la misma pregunta que hacerse, aunque sentía que el corazón era tocado por la reunión familiar, después de todo ella también era madre, tenía que preguntar, "¿Quieres recuperar tu rostro... tu antigua vida?"

La pequeña familia se separó y miro con sorpresa al espíritu, y su propuesta.

"Acepto" pero Noriko ni siquiera lo dudo, tenía que recuperar lo perdido, quería saberlo todo.

"¡Espera!" Zuko el tomo de su mano y la alejó del espíritu, temeroso de lo que podría desatar esto, no solo llamaría demasiado la atención, sino que peor aún.

El dolor que vivió por años su madre, volvería.

"..." Azula también lo sabía, y se tuvo que morder los labios hasta el punto de hacerlo sangrar por la frustración que sentía, mirando hacia el espíritu hizo una pregunta, "Si vuelve a ser Ursa… ¿Todo sus recuerdos volverán? ¿Incluso? ¿Lo que involucra a Ozai?"

" Temo que si, porque eso fue parte de su identidad, de lo que vivió, yo no tomo o quito recuerdos, tomo identidades y todo lo que acarrean con ellas, si le devuelvo su antiguo rostro, no solo volverán el recuerdo de ustedes jóvenes hermanos, sino también los de su padre"

"No importa" Noriko les suena a los dos, "Les di la espalda una vez al olvidarlos, no lo haré de nuevo, ustedes son mis hijos, necesitan de su madre"

"Y tu mereces ser feliz…" Azula dio un paso atrás y negó con la cabeza, "No puedo… no podemos hacer que vuelvas a recordar esa vida, no tu…"

"Ella tiene razón" Zuko también dio un paso atrás, y aunque tampoco le gustaba la idea, el ver a su madre con su nueva familia, simplemente fue… lo que ella necesitaba.

"Pero…" Noriko apretó sus manos contra su pecho y miro confundida a sus hijos, "Yo… no podría vivir sabiendo lo que les hice"

"Señora..." Naruto tuvo que poner su grano de arena, podía ver el dolor en el rostro de Azula y Zuko, esta decisión no era nada fácil para ellos tampoco, "Sus hijos pasaron por mucho, y el solo saber que usted es feliz". …creo que es el mejor regalo que usted puede hacerles, se que no será fácil, y aunque usted crea que usted les está dando la espalda de nuevo, tenga en cuánto esto… toda madre está dispuesta a hacer lo que sea por la felicidad y bienestar de sus hijos… también los hijos pueden hacer lo mismo por sus madres"

La mujer la miro fijamente un rato y luego a sus hijos.

" Puedo darles algo…" el espíritu de los rostros, con su mano derecha tocó la cabeza de la madre, y por un segundo su rostro brillo, haciendo que de formó momentánea su rostro volviera a ser el de antes, "… una última despedida "Ese será mi regalo".

Tanto Zuko como Azula podían sentir como sus corazones se alteraban al verla, era como la recordaban, su madre había vuelto a como era, al menos por ahora.

Noriko o mejor dicho Ursa, se toco incrédula su rostro y luego miró hacia sus hijos, con una sonrisa triste se acercó a ellos.

"Mis bebes..." con el cuidado y cariño que solo una madre podría tener, ella acaricio los rostros de sus hijos, que por reflejó apoyaron sus rostros en las suaves manos de su madre, "...cuanto han crecido"

"..." Zuko trato de ser fuerte, pero ningún hombre podría tener el suficiente corazón duro para no llorar cuando su madre beso su frente y acaricio con cuidado la marca de quemaduras en su rostro, "Mamá… tu me pediste que sea quien soy… aunque intenté y cometí errores… espero ser el hombre que quisieras que fuera"

"Zuko… no quiero que seas el hombre que yo quiero… recuerda lo que te de dije, se quien eres, y se que lo eres, eres un gran hombre Zuko, una que me llena de orgullo el saber que es mi hijo"

"..." Zuko asintió con la cabeza y lloro en silencio, pero con una sonrisa, dando un paso de lado, dejo que su madre solo se enfocara en una persona.

Azula no sabía cómo mirar a su madre, tenía tanto que decir, pero no sabía por dónde empezar, hasta que sintió unas manos tomar las suyas.

"Azula" la mirada de Ursa era de puro arrepentimiento y dolor, "Lo siento tanto… por acerté creer que te odiaba"

"Pero tenías razón… me parezco a el… yo soy como pa-"

"No" Ursa la interrumpió con una mirada dura, negándose a dejar que terminara era frase, "Tu no eres como tu padre"

"Mamá… hice cosas malas, y aún… aún cuando quiero hacer el bien, se que después lo voy a arruinar… traicione amigos… mis decisiones lastimaron personas… yo tengo algo mal en mí… mamá… mamá-a"

La voz de Azula de rompía a cada segundo, por lo sabía, los recordaba, a todas las personas que último en su camino.

A cada una que conoció desde niña, cuando participó en la guerra, al ser desterrada, Ba sing se.

Rina y las chicas.

Yoko y su clan.

Su tío iroh.

"Escúchame Azula" Tomándola de su rostro con sus manos, Ursa la obligó a levantar la mirada para que la viera a los ojos, "Que tu llores.. lo lamentes… que lo quieras enmendar… es más que lo que padre jamás haría, tu no eres como el, no eres un monstruo… eres mi hija…”

"Mamá…"

"Te amó Azula... nunca lo olvides... te amo hija"

Una vez más, Ursa hizo que sus hijos se acercarán para abrazarlos con fuerza, mientras que detrás de ellos, el espíritu, la madre de los rostros levantó su mano derecha y volvió a tocar a Ursa.

" Está hecho... me despido" sin más, ella volvió a cien en el agua para volver al mundo de los espíritus.

Ursa sonorizada aún cuando sentía que su visión se ponía borrosa y sabía muy bien, que está sería la última vez que vería a sus hijos, al menos siendo ella misma, estaba feliz.

Mirando sobre su hombro, noto al chico que parecía muy cercano a Azula, sonriéndole le susurró un último deseo.

"Por favor… cuida de ella"

Naruto sonoro con tristeza mientras veía como el brillo desaparecía del cuerpo de la mujer, haciendo que poco a poco volviera a la normalidad, "Lo haré"

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Noriko abrió sus ojos de golpe, confundida noto que estaba en su cama, en su hogar, con su mente un poco confundida trato de recordar que fue lo último que hizo, se despidió de la princesa Azula.

Mirando a su alrededor, noto que había una nota en su mesita de noche.

Tomándola la leyó.

" Gracias… por todo… por favor se feliz"

La mujer se quedó sentada en su cama, por alguna razón esa nota la hizo muy feliz, que sin notarlo hizo que algunas pequeñas lágrimas bajaran de sus ojos. Sonriendo presionó la nota contra su corazón.

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En el cielo, volando en Nya, Azula miro como se estaba alejando de la isla, con una pequeña sonrisa levantó la mirada hacia el cielo nocturno y las estrellas del firmamento.

Sacando de su bolsillo el viejo diario de su madre, lo arrojo y el disparo de una bola se fuego, lo hizo arder en llamas y caer al océano.

Dando un suspiro volteo a mirar a su hermano mayor que le escuchó.

Si, habían tomado la decisión correcta.

"Oye…" Naruto llamo su atención e hizo que la mirara, "Sabes, esto no quiere decir que jamás puedas volver a verla, después de todo, me interesa las obras de teatro, ¿Quieres venir algún día de nuevo para verlas y de paso visitarla?"

Azula tuvo que reírse un poco, acercándose se sentó junto al shinobi, "Suena… una buena idea"

Todos ellos miraron hacia el frente y sonrieron.

Fue un día maravilloso.

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chan

Channnnnn

Channnnnnnnnn

Channnnnnnnnnnnnn

¿Qué les parece?

Vamos a ir punto por punto, me leí el cómic a la inspirada está breve saga, y no mentiré al decir que me decepcionó un poco, sino mucho, había mucho potencial para dar un gran desarrollo y simplemente no estaba a la altura de lo que Avatar nos había acostumbrado, no se, tal vez a ustedes le haya gustado mucho más que a mí, cada uno dirá.

Se me hace que la resolución con la madre de Azula y Zuko quedó en los medios, obviamente no iban a mostrar lo que acabo de plantear en este capítulo de la serie original, que son señales de violación y humillación que sufrió Ursa en su matrimonio, y aca solo se lo menciona tampoco quise ir muy lejos.

Otra cosa, la resolución final, para mí, ojo solo para mí, este hubiera sido el mejor escenario. Yo como quedé medio loco al saber que Zuko permitió que su madre recuperara todos sus recuerdos de Ursa, osea todo lo malo que le paso en su vida lo devolvió de una cachetada.

Igual, siento que este es un mejor final, o al menos la que mas gusto a mi.

¿Qué me dicen ustedes?

Déjenme en los comentarios que les pareció, su opinión siempre será importante. Cómo siempre les deseo la mejor de la suerte y salud a ustedes y sus familias.

Sin más CHAAAAAAUUUUUUUUU y que les vaya bien.

Yosef: Cállate wey, hazte pa' ya puto, que me voy a hacer la llorición - C va a un rincón a llorar.

JODER, QUE GRAN HISTORIA!!!