Izuku lanzó su especialización en un punto contra Jiro, quien apoyo su mano en el suelo y se impulsó hacia arriba, esquivándola.

Y no solo eso. Tomó el látigo y aun en el aire se impulsó con el contra Izuku, golpeándole directamente en el rostro.

Sin embargo, Izuku rápidamente de recupero y lanzó un golpe contra ella que fue esquivado.

«¡Debe superarme por el doble de peso! ¡No podré derrotarlo con mis manos desnudas a menos que de un golpe certero!»

«¡Ella es demasiado ágil! ¡No podre golpearla con mis toscos golpes!»

La chica lanzo una patada lateral a la cabeza de Izuku, quien logró cubrirse pero de mala manera, recibiendo algo de impacto en su cabeza y mareándose levemente.

Aprovechando esto, Kyoka extendió sus jacks hacia la espada a la vez contraatacaba con un gancho en el mentón del peliverde.

Pero este le había tomado de la muñeca, apretando su agarre con todas sus fuerzas y lanzándola contra el árbol que tenia detrás.

Ella soltó un quejido, para luego desvainar uno de sus cuchillos y clavarlo en la muñeca de Izuku, provocando que este grite y se aleje por instinto.

Izuku estaba envenenado. Ella ahora tenia la ventaja.

Y sujetando finalmente su espada con los jacks, la trajo velozmente a sus manos y se lanzó.

Enorme fue su sorpresa al encontrar su espada con la daga que había perdido. Ya que su espada era una ligera, no podía ganar este choque.

Y se vio impactada al observar aquel látigo negro sujetarla del cuello, haciéndola apretar los dientes al sentir falta de aire.

Izuku apretaba sus dientes con enorme fuerza. «Esa daga estaba envenenada con esa cosa que durmió a Kaminari. Si no gano ahora... ¡Yo moriré!»

Sin embargo, aquella asesina no se quedo atrás, rodeando sus jacks alrededor del cuello de Izuku y ahorcándole tambien.

«¡Esto no debería de estar pasando...!»

Ambos soltaban queridos e intentaban tomar aire. A la vez que se notaba cada vez mas el tono rojo subir por sus rostros, las marcas de sus venas en diferentes partes del cuerpo mostraban su enorme esfuerzo por ganar este encuentro.

Ambos duraron bastante así, sin retroceder un solo paso mientras continuaban cambiando de color.

Y finalmente las tornas se decidieron por un lado ganador...

El Don de Izuku se deshizo, y los jacks de Jiro se aflojaron.

Ambos perdieron levemente la conciencia, cayendo hacia delante y chocando sus cabezas con fuerza, cayendo junto al otro.

Jadearon y lograron respirar, intentando ponerse de rodillas y continuar la batalla.

Sin embargo, mientras Izuku se tomaría unos pocos segundos mas, la chica demostró aquella fortaleza que blandió contra el demonio, golpeando al chico a su lado con su rodilla.

Y cayendo este boca arriba, Jiro se volteó junto a su espada, apuntando directamente al corazón.

Y sin que pase mucho tiempo mas... el sonido de la carne siendo atravesada penetró el bosque.

[...]

Antes de que aquella batalla se decidiera por un lado ganador... el príncipe continuaba su camino en busca de su madre. Había conseguido algo para ponerse encima y dejar de llamar la atención, algo que le iría muy bien en las próximas regiones que tocaba buscar. La frontera estaba lleno de caballeros, despues de todo.

Sus escoltas notaron que él estaba extraño. Mas hablador de lo usual... y no soltaba su espada desde que cortó su vaina.

Y no solo notaban esto. Tambien estaban alertas, determinados a no fallar de nuevo en su trabajo. Si el príncipe fue atacado, incluso si le perdieron de vista... esa fue culpa de ellos, y aunque no podían compensarlo de ninguna manera, debían de asegurarse de que ello no se repita.

Y así, mientras se alejaban de aquella ciudad y se adentraban en el bosque con aquellos suministros que fueron a buscar...

El silbido de los pájaros rebotaba entre los arboles. Las hojas eran densas, lo que hacia entrar poca luz a este lugar.

Uraraka notó que era como un bosque mágico. No habían tales cosas en este mundo, pero ese ambiente podía sentirse. Daban hasta ganas de recostarse entre uno de estos abedules y escribir un libro.

Poco sabían que...

Nuevamente el silbido rebotó entre los arboles... producto de una boca.

Pero no una boca cualquiera. Esta estaba en la mano grotesca de un hombre, continuando produciendo los sonidos.

En respuesta, otro de ellos con la misma condición respondió a esos sonidos mientras mantenía contacto visual con los tres viajeros.

―El encapuchado es mío.

El de ojos purpuras le observó de reojo. ―Eso no lo deberías de decidir tu. Podrías dañar la espada.

Bufó, algo divertido. ―Dime, ¿Cómo puedo dañar a One For All? Si llega a ser el portador, ninguno de ustedes podrá contra él.

―... ―aquel chico suspiró―. No queda de otra. Lavaré el cerebro de los otros dos y lo reduciremos entre todos. No dejes que nuestro jefe se ensucie las manos.

―Lo se. Matar no es una opcion. All Might no lo querría así.

El de ojos purpuras afilo la mirada, comenzando a emitir sonidos de pájaro con su mano ensamblada. ―Iremos a la señal.

Y cuando el jefe respondió a silbar como pájaro...

―Uraraka... Los pájaros estaban muy habladores, ¿No crees?

Este llevó su mano izquierda al mango de su espada. ―Así es. Debemos de estar en temporada...

Al escuchar ello con sus múltiples oídos, el jefe oscureció la mirada. ―Nos detectaron.

3...

2...

Todoroki movió su brazo derecho del suelo a cielo. ―¡¡Muro de hielo perforador de los cielos!!

Aquel creciente muro gigante de hielo se encontró con unas potentes llamas, atravesando la defensa del príncipe con algo de dificultad.

Sin embargo, el príncipe hizo esto para ganar tiempo, logrando hacer que su equipo pueda alejarse rápidamente.

Sus escoltas blandieron sus espadas y se prepararon, rodeando al príncipe para protegerle.

Sin embargo, el príncipe les empujó y rápidamente se alejó. ―¡No me sigan!

Esto desorientó a Uraraka e Iida. ―¡Príncipe! ¡Espe-!

Unas vendas atraparon la espada de Iida, desarmándole en un instante, haciendo a este afilar su mirada y observar detenidamente a su enemigo.

El chico de cabello índigo le observó desde un árbol. ―Parece que dejan que desear como escoltas...

Iida observó de reojo a Uraraka. ―¡Uraraka! ¡¿Tambien-?!

Al sentir su gravedad ser inhabilitada, rápidamente entendió y dio un saltó, flotando a gran altura junto a su compañera, quien observaba abajo con los dientes apretados. ―¡Si!

―Interesante ―aquel hombre observó las púas de roca que se suponía debían asesinar a estos dos escoltas―. Fuiste capaz de predecir la naturaleza de mi Don. Podrías ser útil.

«Cuerpo monstruoso y nada natural, capacidad para destruir y ensamblar... ―Uraraka chasqueó la lengua al darse cuenta de la identidad de su enemigo―. ¡Ese tipo es de los Protectores de la Luz!»

Iida tambien cayó en esto. «¡Estamos siendo atacados por los cazadores de One For All! ¡¿Por qué?!»

El de cabello índigo bajó la mascara que tenia cubriendo la parte inferior de su rostro. ―¡Oye! ¡¿Tu no eres de la familia Iida?!

Tenya observó el rostro de aquel tipo con sorpresa. ¿Por que mostraba su identidad? ―¡¿Quien-?! ―su cabeza se quedó en blanco de repente, nublando sus pensamientos.

Ante esto, aquel chico solo sonrió. ―Uno menos. ¡Jefe!

Este apoyó sus manos en el suelo. ―Apoyemos a ese traidor rápido.

Uraraka se dio cuenta de la condición de su compañero, tomándole del hombro y preparándose para luchar contra estos enemigos.

Por otro lado...

«Si ese tipo usa su Quirk cerca de ellos no se si podría defenderlos ―pensó Todoroki mientras continuaba corriendo―. ¡Tengo que apartarlo! ¡Se que me esta siguiendo!»

¿Cómo lo sabia? Eso era sencillo.

Desde que One For All se presentó a él hace unas horas... no paraba de escuchar voces en su cabeza. Incluso su cuerpo se sentía un poco extraño.

Todoroki afiló su mirada. ―Confió en ustedes ―exclamó para luego detenerse, encarando el fuego que se dirigió a él con fuerza. «Esas llamas azules... ¡No pueden contra este poder sagrado!»

Y bajo la sorpresa de su atacante, Todoroki blandió su espada y dio un tajó hacia las llamas, desviándolas por ambos lados del príncipe y quemándolo los arboles a su paso.

El atacante solo sonrió de lado. «A si que si se trata del portador, ¿Quién es? Parece un noble.»

Todoroki centró mas su mirada. «El poder sagrado de One For All, capaz de oponerse a All For One. El poder de oponerse a otros Dones, incluso el de ese rey de los demonios. Realmente tengo entre mis manos este poder...»

Eso significaba que "él" vendría tarde o temprano... La Elite de los Protectores de la Luz.

Y sabiendo lo que tenia entre ambas manos... no dejaría que nadie mas la tome hasta encontrar al verdadero portador.

Hasta entonces...

―One For All... ―Todoroki blandió a su derecha la espada―. ¡Libera tu vapor!

Ante aquella orden, la espada comenzó a emanar aquel vapor poco a poco. Todoroki con ello se preparó. En el momento que sea suficientemente densa, huiría y tomaría a sus amigos para marcharse. Llamarían mucho la atención si libran una batalla demasiado grande y larga aquí.

Aquel chico de cabellos blancos solo sonrió ampliamente. ―¿Planeas escapar, pequeño noble? ―y encendió su puño con fuerza, quemándose―. Puño Incandescente...

Aun centrado, Todoroki blandió su espada en defensivamente. ―Ese movimiento...

Y con una sonrisa amplia, él desató una poderosa ráfaga de fuego contra su enemigo. ―¡¡Jet Burn!!

Aquel enorme ataque superó por mucho al príncipe, quien apretó los dientes. «¡¡Aunque desvíe el ataque, el calor me afectará!! ―preparó su pierna izquierda, blandiendo su hielo con fuerza―. ¡Tengo que contrarrestarlo a como de lugar!»

Y mientras la escarcha se espacia por su cuerpo, encaró el ataque y nuevamente lanzó un tajo sobre el ataque, desviándolo.

Para la sorpresa de aquel protector de la luz, el hielo se espació por el suelo en forma de escarcha directamente hacia él, haciéndole blandir sus llamar y deshacer ese ataque.

Tras pasar ambos ataques, la cosa se tranquilizó un poco.

El del fuego observó sus brazos humeantes. ―Parece que me dejé llevar un poco...

Por otro lado... el príncipe jadeaba mientras nuevamente blandía One For All. El inmenso calor de esas llamas hicieron sofocante el aire por esos momentos...

Además, su piel se había protegido gracias a la escarcha, pero el resto de su ropa...

Todoroki apretó los dientes con fuerza. «¡¡Si dejo que haga otro ataque como ese saldré peor parado!! ¡¡Tengo que tomar... ―y encendió su lado izquierdo con inmensa fuerza― la iniciativa!!»

Aquello dejó impactado a su atacante.

No solo podía ver que tenia "2 Quirks", si no que tambien quemó aquella capucha fea que tenia.

Esto no podía ser cierto... ―¿Shoto...?

―¡¡Puño Incandescente... ―Todoroki se lanzó sobre su atacante a una velocidad vertiginosa, usando las llamas para potenciar su velocidad―: Jet Kindling!!

Él solo sonrió enormemente. ―¡¡Shoto...!! ¡¡No puedo creerlo!!

«No importa que... ¡¡No puedo permitir que Toya tome este poder!! ―se gritó en su mente con determinación, apretando el mango de su espada.»

―Prominence...

Shoto abrió sus ojos cuanto pudo cuando, casi frente a frente de su hermano, escuchó aquellas palabras, y solo tuvo tiempo de cancelar su ataque y centrarse 100% en la defensa, sin oportunidad de esquivar el ataque a quemarropa.

Pese a su fuerza y determinación...

Liberó su hielo con todas sus fuerzas, y se protegió con la espada. ¡¡Fue un completo imbécil!!

―¡¡Burn!! ―y tras aquel grito, un rayo de fuego masivo y concentrado desde todo su cuerpo fue emitido contra el príncipe. La sombra de ambos simplemente se fundió bajo aquellas llamas azules, dando el combate por terminado.

Las llamas del Prominence Burn continuaron delante durante decenas de metros, consumiendo no solo los abedules si no incluso la propia tierra.

El resto de arboles que no se carbonizaron se incendiaron con fuerza, alzando una columna de humo negro que fácilmente podría verse desde cualquier parte.

―... ―Toya suspiró con cierto grado de dolor―. Me queme bastante...

Ambos hermanos estaban cara a cara, observándose con cierto grado de tranquilidad. Y eso era por que la batalla había terminado.

Mientras Todoroki estaba de pie, sumamente quemado en varias áreas del cuerpo e incluso al borde de la inconciencia, Toya se alzaba con la victoria. ―Si fui con todo fue por que se que no morirías... Shoto. Tu...

Shoto respiraba agitado, aun apretando el mango de su espada.

Espada la cual fluía poder en forma de marcas oscuras, las cuales incluso se espacian en el cuerpo del príncipe.

―Liberaste la verdadera fuerza del One For All, su poder oculto ―sonrió por encima del hombro―. Eso potencio tu magia hasta tal punto de sobrevivir. Nada mal.

Mientras las marcas negras de contraían a la espada nuevamente, Todoroki perdió la estabilidad, cayendo delante.

Toya lo recibió en una especie de abrazo con su brazo izquierdo, deteniendo su caída.

―Toya...

―El deber de nuestra familia por generaciones fue proteger al portador y servir como su sombra.

Todoroki abrió sus ojos cuanto pudo al escuchar ese tono.

Toya estaba serio. Mucho mas serio que nunca. ―Y yo continuo siendo un Todoroki aunque te duela, hermano.

Todoroki ya no pudo mantener el agarre sobre One For All, cayendo esta al suelo y perdiendo el conocimiento a la vez.

Aquel protector de la luz solo alzó la mirada a las columnas de humo que ascendían al cielo. 

¿Que tenían detrás estos dos hermanos, herederos de una vieja voluntad que nació en los tiempos del primer portador?

Eso era historia para cuando se pongan a salvo.

Por que...

Toya bajó la mirada. ―¿Y ahora que haré contigo?

Se pondrían a salvo... ¿No?