Capítulo 8
»Nuevo compañero de viaje«
Narra la escritora
La tarde había caído y la princesa con el monje seguían sentados en silencio, la peli-roja decidió romper el silencio
- ¿Que me quiere pedir?- preguntó la chica sorprendiendo al monje- ¿Por que duda tanto?
-¿Como..?- susurró- me gustaría que llevara a Yoon en su viaje- habló mas alto permitiendo que la chica lo oyera
-ya veo, veré que puedo hacer- sonreí
(...)
-princesa, princesa- escuchaba a lo lejos- le hará mal seguir durmiendo aquí en la humedad
-solo 5 minutos más- pedí girándome en mi lugar
-princesa despierte por favor, recuerde que hoy debemos prepararnos para emprender el viaje- abrí levemente mis ojos
-buenos días Kotaro- tallé mis ojos- gracias por despertarme- me levanté- ¿Dormiste bien?- pregunté
-claro princesa ¿Y usted? ¿Tiene hambre?- preguntó ayudándome a levantarme- ¿Le traigo algo para comer?
-igualmente, tengo hambre pero quiero ir a ver a Yona, Hak, Yoon y Ik-Soo-sama- me limpié la tierra que había en mi ropa- me pregunto si ya comieron algo- susurré empezando a caminar
-princesa...- me habló Kotaro
-shh- lo callé mientras oía la conversación de Yona y Yoon- *realmente aprecia mucho a Ik-Soo-sama, no puedo pedirle que venga conmigo si se que el no quiere, estaría separando a una linda familia, no soy capaz de tal cosa*- pensé al ver como Yoon salía de la casa- iré a arreglar unas cosas y luego vuelvo Kotaro ¿Podrías ir por algo de comida?
-princesa... claro, lo que usted ordene- susurró y se fue, sonreí y fui en busca de Ik-Soo
-Ik-Soo-sama- lo llamé al entrar al almacén y verlo
-princesa, ¿Ya vio a la princesa Yona? A que se ve encantadora- sonrió dulcemente, le devolví el gesto
-Yoon hizo la ropa, era de esperarse, es un chico realmente increíble e inteligente- mencioné aun sonriendo
-si ¿Y que fue lo que dijo?- preguntó curioso
-yo... no fui capaz de preguntarle aquello, ¿Sabes Ik-Soo-sama? Te pareces mucho a mi padre
-¿Eh? ¿Como el rey II?- asentí sonriendo- no puede ser
-no es de confianza, algo llorón y tiene la cabeza en las nubes- reí levemente- pero aún así tiene un gran corazón lleno de bondad, una buena persona- le sonreí- Ik-Soo-sama...-lo llamé
-si- respondió de inmediato
-puede que Yoon sea algo grosero pero le tiene un gran cariño y aprecio, lo lamento mucho pero no quiero separar una familia, por mas que quiera no puedo llevar a Yoon con nosotros, perdón Ik-Soo-sama pero no puedo cumplir con su petición- hice una pausa- se que me pidió que llevara a Yoon con nosotros pero... a menos que Yoon diga que quiere ir, no puedo llevarlo
-es cierto- dijo comprensivamente- lo siento, no debí decirlo- se disculpó haciendo una reverencia
-no, debo ser yo la que se disculpe- hice una reverencia igualmente, el se levantó y pasó por mi lado luego de asentir- *perdón Ik-Soo-sama pero no puedo hacer nada al respecto, no quiero y no puedo separar esta familia por mi egoísmo*- decidí salir, abrí mis ojos sorprendida, Yoon sostenía a Ik-Soo contra la pared de su ropa de forma brusca
-tu no deberías estar aquí, ve a ver el mundo- le dijo, Yoon abrió los ojos con sorpresa
-Ik-Soo...- lo soltó sorprendido
-estaré bien sin ti- dijo despreocupadamente
-*metió la pata*- pensé sonriendo nerviosa, Yoon se fue furioso, suspiré y me fui- *¿Estaré haciendo lo correcto? ¿Que dices padre? Tal vez estoy haciendo mal*
-¡Princesa! ¿Me estas escuchando?
-¿Eh...?
-¡princesa!- reaccioné
-Kotaro...¿Ocurre algo?- pregunté confundida
-¡¿Que si ocurre algo?! ¡Te he estado hablando hace mucho y no reaccionaba!- me sostuvo de mis hombros y me empujó hacía el, quedé pegada a su pecho- me preocupó- admitió aún sin despegarme de él
-lo lamento... yo solo...- empecé pero luego quedé en blanco
-no se preocupe, para eso estoy yo, usted no se preocupe por nada mientras yo esté- su abrazó se hizo mas firme- sin importar que sea, yo haré todo por usted, si usted es quien me lo pide yo...yo desafiaria a los mismos dioses, toda mi vida...desde que el día que me salvó, desde el día que usted y su Majestad el Rey II me dieron la bienvenida a su familia...desde ese día solo usted se convirtió en mi razón de vida- abrí los ojos sorprendida- usted fue quién me dio una razón para vivir, usted es mi razón para vivir, no importa que pase, yo la serviré hasta el día de mi muerte y aunque muera la seguiré protegiendo- habló decidido- su felicidad es la mía
-Kotaro...-susurré sorprendida por sus palabras- yo..gracias- le sonreí- mi deseo, mi único deseo en estos momentos es que ningún otro de mis seres queridos mueran, tu estas incluido ahí así que Kotaro...por favor no hagas absolutamente nada que pueda matarte- pedí sintiendo como lágrimas resbalaban por mis mejillas
-como quiera mi princesa- susurró arrodillandose frente a mi, sonreí mientras el se levantaba y secaba mis lágrimas, nos quedamos en silencio por un tiempo indefinido mientras estábamos cada quien en sus pensamientos
-vamos, volvamos con los demás, se está haciendo tarde y no hemos preparado nada- sonreí mientras tomaba su mano y la jalaba
Al llegar a la cascada pude ver a Ik-Soo llorando y a Yoon consolarlo mientras Hak y Yona observaban a una distancia prudente con una sonrisa dándome a entender algo...desde ahora tendríamos un nuevo compañero de viaje
(...)
-ya se decidió ¿Verdad?- preguntó Hak mientras veíamos a Yona probarse una capa
-así es, no te molesta ¿Verdad?- pregunté sonriendo
-no, probablemente sea menos molesto que alguien que conozco- comentó mirando a Yona de forma burlona
-¿De quién estas hablando?- respondió esta mirándolo molesta
-¿De quién será?- preguntó nuevamente con burla
-dejen de jugar- reí al ver que Yoon llegaba- vayan a dormir lo antes posible, nos iremos mañana temprano, con su permiso me retiro- le hice una reverencia a Yoon y me dispuse a salir
-espera- me sostuvo de la manga de mi ropa, me detuve y me giré, lo miré curiosa- ahora vamos a viajar juntos creo...que sería bueno que...ya sabes nos acostumbremos a dormir y convivir todos juntos
-Yoon... ¿Entonces...?- dejé la frase en el aire
-quiere que se quede a dormir- habló Ik-Soo llegando, miré sorprendida a Yoon, el desvió la mirada
-lo haré, gracias por la invitación- sonreí
(...)
-Yoon-kun ¿Estas bien?- preguntó Ik-Soo al momento en el que estábamos por despedirnos
Narra la escritora
-podría preguntarte lo mismo- respondió colocando su mano en la cintura
-Yoon ¿Que es lo que llevas?- preguntó Yona curiosa al ver su bolsa
-deja tus libros, es mucho equipaje- dijo Hak
-no son libros- comentó inmediatamente
-¿Entonces qué? Muestrame- exigió, el guardaespaldas restante suspiró
-*esto es una pérdida de tiempo*- pensó el peli-negro fastidiado
El joven hizo caso y abrió su bolsa de donde saco un saco enorme
-es una bolsa para meter a la princesa cuando entremos a ciudades en alerta- habló extendiendo el saco
-¿Iré en una bolsa?- preguntó curiosa y a la vez confundida la princesa menor, la mayor sin poder evitarlo sonrió divertida al imaginar a su hermanita dentro de aquel saco
-tengo otras cosas ¿Quieren ver?-preguntó luego de hacer sacado bastantes cosas más mientras revisaba todas las cosas que tenía
-es suficiente, vamos- habló el oji-negro al ver que el azabache sonreía divertido y con una pizca de maldad- se nos pasará el día
-¿Eh?- emitió confundido el menor
-gracias por todo- agradeció resignado el ex-general
-nos vemos Ik-Soo- se despidió la peli-roja menor
-perdón por las molestias- dijo Kotaro mientras hacía una reverencia mirando con seriedad al monje
- muchas gracias por todo Ik-Soo-sama, lamento las molestias, espere nuestra regreso, intentaremos no tardar- le sonrió dulcemente la oji-morada mayor
-espero que tengan un buen viaje- respondió el monje con una sonrisa, el grupo de dio vuelta y empezó a avanzar
-pero si pidieron ver...- se quejó el oji-celeste mientras guardaba apuradamente sus cosas, se levantó quedando de frente al monje, aquel con el que estuvo la mayor parte de su vida
-nos vemos- le dijo dulcemente el peli-rubio
-si- asintió en respuesta con una sonrisa, se dio vuelta y comenzó a seguir el grupo que iba algo mas adelantado, dejando atrás a una mirada violeta que lo miraba con dulzura
-*sin duda son una hermosa familia*- pensó la chica mayor mientras miraba la escena de reojo
-rápido, tenemos que cruzar tres montañas antes de que se ponga el sol- dijo el menor adelantándose a todo el grupo rápidamente
-si- respondieron las princesas tranquilamente
-¿Das ordenes tan pronto?- preguntó el guardaespaldas de la menor
-soy un apuesto genio, claro que lo haré- aseguró- callense y síganme- ordenó
-no me agrada este mocoso, mucho menos luego de como la trató- le comentó en un susurró el oji-negro a su princesa
-intenta disimularlo al menos- rió suavemente la chica en respuesta- desde ahora el va con nosotros así que tendrás que acostumbrarte te guste o no desafortunadamente- le susurró con una leve sonrisa al ver como el niño intentaba contener sus lágrimas y miraba al cielo nostálgicamente
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¿Adivinen quien abrazó la escalera del liceo?
¡Pues yo! Me pusieron una ferula y tengo una semana para perder el tiempo así que actualizaré un maratón de 8 partes en este libro dos veces por día
Maratón 1/8
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