»No puede estar muerta«
(Flash back desde el punto de vista de Soo-Woon)
Narra ___

- su Majestad tenga mas cuidado- lo reprendió el hombre de aspecto serio- ¿Está bien señorita?- me ayudó a levantarme

-si, lamento muchísimo las molestias- hice una reverencia- ¡Lord Satoru!- exclamé fingiendo recien haberlo visto- no creí encontrarlo tan rápidamente

-me alegro de que haya llegado rápido y a salvo señorita...- vi como empezaba a dudar en como llamarme

-*levantará sospechas*- pensé preocupada- ¿Otra vez olvidó mi nombre Lord Satoru? Nyoko No Haru, Lord Satoru fue usted quien propuso mi nombre- me quejé

-lo lamento Nyoko-chan- rió con nerviosismo- por cierto señorita Nyoko, ellos son los Generales del cielo y la tierra y con quien chocó no es menos que el Rey Soo-Woon

-mucho gusto, soy Nyoko No Haru- hice una reverencia con una sonrisa- soy hija de un viejo amigo de Lord Satoru, por un tiempo fui su alumna- sonreí

-encantado señorita Nyoko, soy el general del cielo Han Joo-Doh - se acercó a mi lado y tomó mi mano besandola, reí suavemente

-es muy educado- sonreí sinceramente

-es una forma de decir que es un estirado- habló groseramente el otro, reí

-*sin duda se parece a Hak*- pensé- usted es el general de la tierra ¿Verdad?- sonreí

-así es, soy el general Lee Geun-Tae- sonrió con arrogancia

- es un placer conocerlos, espero que nos llevemos bien- le sonreí a ambos- *son muy agradables*

-yo soy Soo-Woon- se presentó con aquella sonrisa dulce y faceta despistada con la que me engañó

-un placer su Majestad- hablé cortante pero con una sonrisa, falsa para variar- Lord Satoru, le traje algunas frutas y un poco de medicina- le avisé mientras abría la mochila

-¡P'kyuu!- Ao salió de un salto de mi mochila y se sentó en el hombro de maestro

-¡A-Ao!- me acerqué para tomar a la ardillita pero esta saltó al hombre del general Lee Geun-Tae- ¡Lo lamento!- corrí hacia el pero la ardillita nuevamente saltó pero esta vez hacía el general Han Joo-Doh, volví a correr

Esta vez el general también intentó atrapar a la ardilla conmigo, me acerqué rápidamente, cuando esta volvió a saltar me acerqué para atraparla pero no fui la única con la idea

Con el General Han Joo-Doh nos dimos un cabezazo, caí de espaldas adolorida y el cayó sobre mí

Mientras tanto Ao se tiró hacía Soo-Woon y comenzó a arañarlo

-I-itte- lloriqueaba bajo el general, vi como el también se sobaba la zona afectada- ¿Está bien general?- pregunté aún con un par de lagrimitas

-y-yo le pregunto lo mismo- preguntó este

-le agradecería mucho que se levantara de encima de la señorita Nyoko, general- habló serio mi maestro

-¿Intentas aprovecharte de la señorita, Joo-Doh?- preguntó burlón Lee Geun-Tae-sama

-¿Eh?- pregunté confundida, vi como los colores se le subieron a la cara al general del cielo y se paró en cuestión de segundos, se acercó al otro general presente e intentó golpearlo pero terminaron en una pelea de fuerza

Mi maestro me ayudó a levantarme y les dio un golpe en la cabeza a cada uno

-P'Kyuu- Ao volvió a mi hombro, la miré confundida y luego miré a Soo-Woon el cual estaba lleno de rasguños en su cara

-ve con mi maestro Ao, no quiero que lo vuelvas a atacarlo- reí divertida, de mi mochila saqué una pomada, un paño y una cantimplora- lo lamento Soo-Woon-sama, Ao no suele actuar así- fingí estar avergonzada

-n-no se preocupe Nyoko-chan, llámeme solo Soo-Woon, no es necesario tanta formalidad- me sonrió

-no, no puedo hacer eso- me negué inmediatamente- usted es el rey, sería muy mal visto que yo tuteara al rey- comencé a limpiar sus heridas y luego untar la pomada

(...)

-¿Desde cuando tiene una ardilla señorita Nyoko?- preguntó mi maestro subiendo su ceja mirándome interrogante

-no es mía- dije mientras tomaba asiento donde me ofreció Lord Joo-Doh, acaricié la cabecita de Ao mientras me aseguraba de que no se volviera a escapar para atacar a Soo-Woon- es de un amigo, me pidió que trajera a Ao conmigo para que me cuidara, no creí que causara tanto escandalo- suspiré y toqué el lugar de mi cabeza con el cual choqué con el general de cielo

-me gustaría conocer a ese amigo suyo- habló mi maestro en tono de advertencia

-algún día se lo presentaré- le sonreí juguetona- también a mis otros amigos, estoy seguro que le agradaran- sonreí recordando a mi grupo- cada uno tiene su forma de ser pero son todos muy agradables cuando te das el tiempo de conocerlos- le sonreí alegre mientras tomaba mi mochila, saqué unas bellotas para la pequeña ardilla en mis piernas

-¿Cuantos son?- preguntó curioso

-pues..- comencé a contarlos en mi mente y con mis dedos llevaba la cuenta numéricamente- *Yona, Yoon, Hak, Kotaro, Kija, Shin-ah*- somos 7 contándome- sonreí

-ya veo- suspiró mi maestro

-parece que le agrada estar con ustedes- reí divertida al ver como Ao se soltaba de mi agarre para irse al hombro de Lord Joo-Doh y luego de un rato al de Lord Geun-Tae- tengan cuidado que esta pequeña se come todo lo que encuentra- reí

-¿Eh?- todos me miraron confundidos

-pues.. veamos, una vez quedamos encerrados en una cueva con algunos de los chicos por un derrumbe y cuando comenzamos a romper la pared con otras personas que quedaron encerradas con nosotros un pedazo de roca cayó de la pared, Ao intentó comersela- sonreí nerviosa- también a intentado comerse mi pelo y el de mi amiga, ¡Ah! Intentó comerse los aros de ella, también cuando Shin-ah intentó comer lo que Yoon le sirvió Ao empezó a comerse todo lo que había en el estofado de miso

-¿Las ardillas hacen eso?- preguntó el general Lee Geun-Tae, me escogí de hombros con la misma duda

-al menos esta pequeña si- sonreí al ver que Ao volvió a mi lado- bueno, debo retirarme- avisé levantándome- gracias y perdón por los problemas que causamos yo y Ao

-¿A donde crees que vas mocosa?- preguntó el general Lee Geun-Tae

-debo ir a buscar donde dormir- expliqué mientras Ao empezaba a escabullirse entre mi cabello

-te quedarás, ahora eres invitada- abrí mis ojos con sorpresa

-n-no podría- comencé a negar- *además será mas difícil para ir a ver a Shin-ah sin que se note mi ausencia*

-no te lo estoy preguntando- dijo restandole importancia, miré a mi maestro buscando su ayuda pero el solo se puso a silbar mirando en otra dirección

-*traidor*- pensé mirándolo mal, suspiré- no tengo de otra ¿Verdad?- vi como todos en la sala negaban- pues ya qué- volví a suspirar

- yo y este estirado iremos a dejar a la señorita Nyoko mientras ustedes hablan sus asuntos- dijo el general Geun-Tae, vi como el General Joo-Doh también se levantó y se acercó, le hice una leve seña a mi maestro para que no le dijera a Soo-Woon que soy yo

-¿Que fue eso?- preguntó el general Lee Geun-Tae sorprendiendome

-le estaba recordando que nosotros igual tenemos que hablar de unos temas- respondí mirando hacia donde había dejado a Shin-ah

-entiendo, digame señorita ¿Cuantos años tiene?- preguntó el general Joo-Doh

-18, los cumplí hace poco- suspiré bajando la mirada, malos recuerdos

-P'Kyuu- Ao salió de mi cabello y se puso en mi hombro donde comenzó a restregar su mejilla con la mía

-gracias Ao- suspiré sonriendo levemente- me pregunto que estarán haciendo los demás- sonreí divertida imaginando la escena

- aquí es mocosa, si necesitas algo estaré en la habitación del lado y este estirado lo mas probable es que con el rey- reí por la mala mirada que le dio el general Joo-Doh

- muchas gracias por todo- les sonreí

-ajá, vendremos a buscarte cuando la cena esté lista- respondió despreocupado- los baños están por allá, adiós

- hasta luego- me despedí, cerraron las puertas y se fueron- bueno Ao ¿Vamos a tomar un baño?- tomé una de las toallas que habían en una silla

Me saqué mi ropa y la dejé en la silla mientras me ponía una bata que había ahí, tomé mi mochila y fui a las aguas luego de tomar mi mochila

Narra la escritora
En otro lugar

-¿Para que me llamó con tanta urgencia Soo-Woon-sama?- preguntó el mayor viendo la seña que le hizo su alumna

-Usted.. ¿Ah sabido algo de la princesa ___?- preguntó con cierto nerviosismo

-si, hace unos días...- suspiró y sacó el cabello que la princesa se había cortado y le había enviado con su moño- el caballo de ella apareció ante mi con esto en su boca

-eso significa que ella- abrió sus ojos sorprendido y estos brillaban con alegría

-murió- mintió serio, antes de que preguntara siguió- ella de pequeña nunca se cortó el pelo porque quería parecerse a su madre en ese aspecto- contó- ella siempre en los entrenamientos hizo de todo lo posible para proteger su cabello, para ella su vida era menos importante que su cabello

-¡Eso es una locura!- gritó desesperado el joven

-lo es, pero para ella era un sueño ser al menos físicamente como aquella mujer que tanto amaba y admiraba- habló serio mientras dejaba en cabello de la mesa- si me disculpa, lo dejaré en paz- dijo y luego salió de la habitación

-ella no pudo...no puede haber muerto- susurró el actual rey mientras se sostenía la cabeza

Flash back

-Soo-Woon, tu cabello es muy lindo ¿Sabes?- preguntó haciendo que me sonrojase completamente, vi que tomó un mechón del suyo- el mío es de color rojo, es hermoso pero está muy descuidado, me pregunto si yo me hubiese quedado en el castillo ¿Sería como ustedes?

-¿Como nosotros?- pregunté confundido mientras le prestaba atención

-llegamos...- susurró bajando del caballo- a lo que me refiero es que, ustedes están acostumbrados a esto- señaló el castillo- yo estoy acostumbrada a lugares pequeños, tu pelo, el de Yona y el de mi padre se nota que han sido bien cuidados- dijo mientras dejaba a los caballos en sus establos con agua y comida

-*ella...* tu.. ¿te incomoda estar acá?- pregunté

-algo Soo-Woon- me sonrió con tristeza- cuando estoy con ustedes me siento fuera de lugar, no conozco los temas que suelen hablar, se conocen super bien y yo...solo parezco una intrusa en este lugar, ustedes acostumbran a vestir las mejores ropas y ocupar los mejores perfumes, su educación fue diferente a la mía- siguió- yo no estoy acostumbrada a vestidos ni perfumes, no estoy acostumbrada a este tipo de vida ¿Y si no logro acostumbrarme y los decepciono a todos? Mi maestro, mi padre, todo el reino

-___....- me acerqué a ella

-Soo-Woon... tengo miedo de decepcionar a todos- la vi abrazarse a si misma

-no lo harás- dije decidido- se que todos ellos están muy orgullosos de ti, no te preocupes por adaptarte, eres perfecta como eres, una chica sencilla, amable, linda, fuerte y sobre todo inteligente- me senté junto a ella- si ellos no reconocen a la maravillosa chica que lo va a gobernar, es el problema de ellos- asintió aún con la cabeza baja- y si aún tienes miedo yo te ayudaré a que te acostumbres a la vida en el palacio, pero no cambies ¿Entendido?

-Soo-Woon ¡Muchas gracias!- se lanzó a abrazarme con sus bellos ojos cristalinos por las lágrimas

-y-yo, esto... n-no es nada- respondí sonrojado- *la hice feliz*- pensé sonriendo, correspondí al abrazo feliz

Fin del flash back

El chico bajó la cabeza y de sus ojos salieron lágrimas, se cubrió su rostro y se permitió llorar

-esto no debió suceder- sollozó- ella debería estar a mi lado en este momento

Flash back

- fui una tonta al creer en sus lindas palabras ¿Amarme?- me miró fríamente- que tontería mas grande

-señorita, no se culpe- pidió Kotaro seriamente

-es que es mi culpa, no puedo creer que llegué a considerar lo que me dijo, fui una completa tonta, por mi culpa mi hermana menor está en esta situación, ustedes no merecen esto- apretó sus puños- pensé que conocía a este desgraciado, confíe en este maldito asesino para contarles mis penas, prometió ayudarme, secó mis lágrimas, ya veo que lo que conocí fue una simple ilusión- sentí mi corazón contraerse, aún así tuve que mantenerme serio

-usted guarde silencio princesa, así podrá conservar la vida, Soo-Woon no la quieres lastimar- ordenó Keishuk

Tuve la esperanza que se detuviera, que se detuviera y se quedará a mi lado, la posibilidad desapareció al momento en que ella se puso a reír

-¿Que no me quiere lastimar? ¿Acaso crees que soy estúpida? Mató a mi padre, y quiere hacer lo mismo con mi hermana, también con mis amigos ¿Y dices que no me quiere lastimar? -mi corazón dolía cada vez más- Prefiero morir antes de ver el rostro de este traidor que tengo frente a mi cada día de mi miserable vida

-Pero quiere lo mejor para su reino ¿No es así?- preguntó

-*dentente*- pensé dolido- *no quiero seguir escuchando esto*

-¿Crees que lo mejor para mi reino es tener a un traidor de monarca?- dijo con tono frío y serio- No soporto la simple idea de que mi pueblo viva sirviéndo al asesino que mató a mi padre, si esta cosa que tengo delante es lo que le espera a mi reino, creo que es mejor morir a tener que verlo, un traidor como él solo debería estar en el infierno pudriéndose, no me lamento tanto por mi

-calma princesa- le dijeron Kotaro y Hak a la vez

-no- se negó- este maldito traidor nos traicionó, sobretodo a Hak y a mi pequeña hermanita, está intentando acabar con nosotros, tirando a la basura todos los años de amistad- suspiró con tristeza y decepción- de verdad me arrepiento de haber confiado en el... y sobre todo haber llegado a considerarlo mi amigo- guardó silencio- Soo-Woon, eres peor que escoria

-¡mujer inso...!- gritó Keishuk enojado

-silencio Keishuk- ordené girándome hacia el, no podía seguir mirándola a los ojos, lo siguiente fue sentir una cortada en mi mejilla

Fin del flash back

-¿Majestad?- el chico levantó su mirada ante el llamado

-general Han Joo-Doh...- susurró con voz quebrada mientras miraba al hombre frente a él

-¿Y esto?- preguntó mientras tomaba el cabello de su amada princesa

-Lord Satoru...me acaba de informar que la princesa___....murió- susurró mientras lágrimas traicioneras salían de sus ojos

-su majestad, será mejor que vaya a descansar- respondió con mirada seria- yo le informaré cuando la cena esté lista- ordenó, el joven monarca no se sentía bien así que decidió obedecer

Con la protagonista
(...)

-eso fue relajante- le comentó a la pequeña ardillita que se secaba con una parte de la toalla que anteriormente estaba en su pelo- creo que no es tan malo tener mi cabello corto, fue más fácil secarlo- tomó uno de sus mechones y suspiró

Cuando su cabello estuvo lo suficientemente secó se untó aquella mezcla para dejar su rojo cabello con un color café

-¿Disculpe? ¿Señorita No Haru?- abrió la puerta aún con la bata puesta

-adelante, y por favor digame Nyoko- pidió mientras se hacía a un lado, la señora detrás de la puerta entró a la habitación

-gracias señorita-sonrió- Lee Geun-Tae-sama me pidió que trajera esta ropa para usted, perdón si no es seda pero a nosotros no nos gusta mucho ese tipo de ropa- se disculpó con una sonrisa avergonzada

-¿Donde estuvieron toda mi vida?- sonrió la peli-roja emocionada mientras le recibía la ropa que trajo la mayor- gracias por todo- sonrió

-no es nada, si gusta puede dar una vuelta por ahí, la tribu de la tierra es sumamente hermosa- la menor asintió con una sonrisa

-gracias por ser tan hospitalarios conmigo- agradeció con una reverencia, la mujer copió aquella acción sonriendo y luego se fue- me iré a dar una vuelta Ao, no causes problemas por favor- pidió dándole unas semillas con bellotas a la pequeña ardilla

La oji-morada tomó un puñal y la escondió entre su ropa, acarició la cabeza de la ardillita y se fue de la habitación

Comenzó a caminar con tranquilidad y alerta a lo que sucedía, miró la luna en lo alto y sonrió recordando el como nombró a su amigo

-perdón- escuchó una voz quebrada

-lo lamento majestad ¿Majestad?- preguntó confundida al ver que el hombre se levantó con lágrimas surcando su rostro- ¿M-Majestad?- preguntó tensa, el chico la había levantado y al instante la aprisionó en su pecho

-por favor- sollozó en su cuello causando una escalofrío en la princesa- no te vayas ___- susurró, la chica abrió sus ojos con terror ¿La había descubierto?

-¿M-Majestad? ¿D-de que habla?- preguntó nerviosa

-perdón, yo no quería que murieras- la apretó mas contra su pecho- ¡te amo, te amo! ¡Quédate conmigo, no te vayas!- gritó

-¡M-Majestad suelteme!- gritó intentando apartarse de él, no volvería a caer en los trucos de él- ¡No soy quién usted cree!

-¡No volveré a dejar que te vayas se mi lado!- gritó mientras sostenía sus muñecas con fuerza- ¡No quiero que te vayas, te dije que te ayudaría a acostumbrarte a esta vida y eso haré!- la chica sintió como lágrimas se acumularon en sus ojos y amenazaban con salir

Narra ___

-¡Majestad suelteme, me lástima!- grité en un sollozo ahogado, no iba a llorar, no quería llorar, mucho menos por él y sus falsas promesas, me comencé a mover bruscamente hasta que me solté, caí doblandome el tobillo

-¡No te puedes ir de mi lado!- gritó haciendo que me levantara, al apoyar mi pié este empezó a doler de una forma horrible, me mordí el labio mientras las lágrimas acumuladas salían, mis lágrimas empezaron a mojar las vestimentas de Soo-Woon

-¿Lord Soo-Woon? ¡Suelte a la señorita Nyoko!- oí la voz del general Han Joo-Doh

-Joo-Doh, llevate a la señorita Nyoko de aquí, yo calmaré al rey- ordenó el general Lee Geun-Tae mientras lograba que Soo-Woon me soltara

-¡No, no se la lleven!- empezó a gritar

-vamos señorita- asentí mientras intentaba detener mis lágrimas- ¿Se encuentra bien?- preguntó al ver que cojeaba levemente al caminar