Epilogo 3

Antes que nada, quiero disculparme por la tardanza, pero finalmente estoy feliz de decir esta frase.

Chicos, eh aquí el último capítulo de "Una historia llena de celos"

Gracias por leer, sin ustedes jamás hubiera llegado al millón de lecturas.

P.d. Miyery, si ves esto, gracias por hacer el fandub de este fic, cuando me entere me sorprendió mucho, pero en verdad me sentí muy feliz.

Mándame saludos :p

Bien, comencemos el ultimo capitulo!

Durante el baile lo vi, ese joven el cual me robo con su trabajo. Lo había conocido hace muchos años, cuando vivió aquí, en Italia, logre hablar algunas ocasiones con él, pero jamás fue nada profundo, siempre lo observe desde lejos.
Desde hace tiempo, pensé que todos su trabajos eran para mí, sentía que tenían un mensaje oculto.

Pero ahora todo tenía lógica. Era para mi hermana.

Al verlo en el baile, no podía esperar por terminar de tocar e irlo a saludar. Ignoraba el hecho de que en todo momento observaba a la estúpida de Velia.

Al terminar corrí hacia él, para llevarme la sorpresa de que estaba a su lado. No debí, pero los seguí, y logre ver algo que desearía borrar.

¿Porque siempre tienes todo lo que deseo Velia?

Beata caminaba rápidamente por las calles de Italia. Su ira y frustración no tenían fin, el chico que siempre observo y se fue, regreso, pero no para estar con ella, sino con su hermana.

-Maldita seas Velia, -No tenía destino, siempre que la desesperación o el estrés la inundaban, su único escape era caminar sin dirección, eso despejaba su mente siempre, sin embargo, eso también la hacía pensar, se paró en seco, su rostro mostraba seriedad, para después fruncir el ceño molesta, -Es su hijo, maldita Velia, ¡Ethan es el hijo de Nathanael!, -Grito furiosa, mientras jalaba su cabello desesperada, -Juro que me las pagaras, lo juro!

-Mama!, -El pequeño rojizo corrió hacia la morena, la cual abrió sus brazos para recibirlo

-Ethan, me alegro que estés bien, tuve tanto miedo, -Sus ojos se volvieron cristalinos, mientras abrazaba protectoramente al pequeño, -Gracias Marinette, Gracias Adrien, Gracias Nath, -La chica sonrió dulcemente.

-Bien, creo que ustedes tienen algunas cosas que hablar.

-Así que nosotros nos vamos a pasear por Italia, -Complemento Marinette.

La pareja se tomó de la mano, y salió de ese cuarto de Hotel.

-¿Se casaron eh? Que hermoso, -La sonrisa nostálgica de Velia, embobo al pelirrojo mayor, el cual tan solo pudo sonrojarse.

-Velia, quiero que me digas algo, necesito escucharlo, -La voz de Nathaniel se volvió seria, así como su mirada, -El es...

-Tu hijo, -Dijo Velia sonriente.

El rostro de Nathaniel mostro sorpresa, no esperaba escuchar eso tan fácilmente. Voltio hacia el pequeño niño, el cual dormía inocente en los brazos de su madre. Una sonrisa se dibujó en sus labios, para después acercarse a la chica y besarla.

-Prometo hacerte feliz, a ti y a Ethan, -Esas palabras de hicieron ruborizar a Velia, la cual sonrió dulcemente ante sus palabras.

-Te amo Nathaniel.

Beata llego a su hogar, sin embargo, algo era diferente, la chica tenía un plan, un plan que forzosamente haría que ambos se separaran.

-¿Beata? ¿Dónde has estado? Bueno, eso no importa, arréglate, le presentaremos a la familia el prometido de Velia. –la mayor al terminar de hablar, le dio la espalda a su hija y se fue

Beata estaba desesperada, cuando de pronto, una sonrisa se dibujó en sus labios.

-Todo se está acomodando para mi beneficio.

Nathanael se encontraba cambiándose de ropa, en una de las habitaciones de la mansión de Velia.

Esa noche, sería presentado ante la familia de Velia como su prometido. El chico suspiro algo nervioso, se paró frente a un espejo grande y se observó. Su cabello peinado hacia atrás, un pantalón de vestir, y una camisa blanca con botones.

El chico abrocho los botones faltantes, levanto el cuello de la camina y posiciono su corbata, para después abrocharla y acomodarla. Acto seguido, el chico tomo su saco y se lo puso.

Lo único que faltaba era esperar por Velia, la cual iría por el para entrar juntos al comedor, donde toda su familia esperaba.

Mientras tanto, Velia se encontraba arreglándose rápidamente, al terminar, se observó en el espejo asegurándose que todo estaba en orden. Una vez lista, la chica abrió la puerta de su habitación, encontrándose con su hermana.

-Velia, dijo mama que bajes inmediatamente, ya mandaron a hablar Nathaniel.

La chica dudo momentáneamente, pero al final acepto, tomando su bolso y bajando al lugar señalado.

Beata sonrió, para después dirigirse a la habitación de Nath. Una vez fuera de la puerta, tomo una peluca, la cual hizo que su cabellera pareciera larga.

-En algún momento tenía que servirme nuestro parecido, querida Velia.

La chica estaba por tocar la puerta, cuando la voz de Nath llamo su atención.

-Bien, ahora mismo le informare a Velia donde está el niño, gracias Adrien, adiós.

La chica rápidamente toco la puerta, dejando ver a un chico bien arreglado. Beata bajo la mirada ocultando su sonrojo, para su sorpresa, el pelirrojo paso su mano por su barbilla, levanto su rostro y le dio un rápido beso en los labios.

-Todo estará bien, y estaremos juntos por siempre, Ethan está en el hotel "Stand" en la habitación 1096. Marinette y Adrien tuvieron que salir a atender unas cosas, pro no estará más de 2 horas solo. –EL pelirrojo tomo de la mano a Beata, la cual estaba más que sorprendida ante la acción del pelirrojo.

Finalmente esta la jalo, y comenzaron a caminar hacia el salón. En ningún momento hablaron, y la chica tampoco levanto su rostro por temor de que la atrapara.

¿Pero a que le temía? Eran exactamente iguales.

Una puerta los separaba de su origen, la chica suspiro intentando tranquilizarse, a lo que Nath entendió como nervios. El chico sonrió, para envolverla dulcemente entre sus brazos.

Beata sonrió victoriosa, sabía que al final no sería suyo, pero haría lo necesario para que Velia y él tampoco lo estuvieran.

Finalmente se separaron, la chica tenía que actuar rápido. Nath empujo la puerta para abrirla, y esa fue su oportunidad. La chica jalo la peluca antes de que alguien la notara, y la aventó disimuladamente tras un adorno que se encontraba en el pasillo.

Al abrirse la puerta, todos quedaron con sorpresa, al ver a Nathaniel y Beata tomados de la mano.

-¿Qué significa esto? –Interrogo alarmada la mujer mayor

-Justo lo que ves madre.

Un escalofrió recorrió la espalda de Nath, al ver hacia el frente, pudo ver a Velia con una sonrisa algo extraña, y al voltear a su lado, donde se supone que estaba Velia, encontró a Beata. El pelirrojo frunció el ceño enojado, y soltó su mano.

-¿Qué pasa cariño?

-No me digas así, -susurro el chico

La chica rápidamente se aferró al brazo del pelirrojo, dirigiendo su mirada hacia su hermana.

Velia se levantó de su asiento y camino hacia ellos.

-Velia, no es lo que parece, yo-

La morena puso su mano sobre la boca del pelirrojo, haciéndolo guardar silencio

-Conozco muy bien a mi querida hermana, sé de qué es capaz, y de que no es capaz. Y cariño, -Decía observando directamente a su hermana- Esto es algo que claramente harías tú.

La sonrisa confiada de Velia, causo el profundo enojo de su Beata, soltó a Nathaniel y lo empujo con todas sus fuerzas.

-Te arrepentirás Velia!, -La chica se dio la vuelta y se fue, no sin antes gritar nuevamente, -Y se justamente como hacerlo!

Ninguno de los dos tomó importancia lo que dijo.

Todos los presentes tomaron su lugar, como si nada de esto hubiera pasado, y así finalmente la presentación termino.

Nathanael y Velia caminaban hacia el hotel, donde Ethan se encontraba, cuando Nath recibió una llamada.

-Hola, Adrien, ¿Qué pasa?

-Nath!, ¿Ethan está contigo?

El chico se puso pálido, para dirigir su mirada hacia Velia.

-No, apenas nos dirigimos hacia el hotel.

Esas palabras causaron terror en la morena, haciendo que ambos caminaran más rápido.

-¿Buscaste debajo de la cama? o ¿Si está escondido por ahí?

-Si Nath, Marinette y yo llevamos buscándolo una hora

-Bien, Gracias Adrien. –colgó

Ambos jóvenes caminaban rápidamente, cuando Nathaniel finalmente hablo.

-Ethan...

-No lo encuentran, lose, lo supuse al verte, -la voz de Velia se notaba normal, pero su expresión mostraba terror.

Finalmente llegaron, Marinette y Adrien se encontraban angustiados.

-Marinette, Adrien, -Nombro Velia acercándose rápidamente

-Velia –Los ojos de Marinette se volvieron cristalinos, y entonces, las lágrimas comenzaron a asomarse.

-No ganamos nada llorando –Velia abrazo a Marinette, intentando calmarla

-Sera mejor que llamemos a la policía. –Adrien tomo su teléfono, para marcar su número, cuando Nathaniel lo detuvo.

-Beata dijo que nos arrepentiríamos

La morena volteo hacia Nathaniel, frunció el ceño y apretó sus puños.

-Esto no quedara así.

Nuevamente, Volpina regreso, pero algo era diferente, esta vez se encontraba en los tejados de Italia, buscando desesperadamente por todos lados. La chica se detuvo tomo su flautín, y comenzó a tocarlo. Permaneció en silencio, intentando acoplar sus sentidos a toda la zona. Y entonces, fue ahí donde la escucho. Un susurro inaudible para el ser humano, fue perfectamente claro para ella.

-Ahí estas.

La chica se aproximó a un gran parque, el cual estaba casi deshabitado, y era lógico, ¿A esa hora quien saldría?

-Bingo, -La chica rápidamente corrió, hasta estar tras a una mujer, la cual tenía de la mano a un pequeño niño

-Mama! –Grito el pequeño intentando correr hacia ella, sin embargo, el chico no pudo.

-Suéltalo, -exigió Volpina

-¿Sabes que si sigues caminando el niño muere no? –la mujer saco un pequeño cuchillo, pasándolo por la espalda del niño.

Volpina gruño enojada, observando como la chica tenia al niño abrazado, amenazándolo sin que el lo notara.

-Toda una zorra, quien diría que te quedaría tan bien ese traje –bufo la chica.

-Solo deja al niño, y todo estará bien, me iré para siempre Beata.

-¿No entiendes cierto? Eso no es suficiente Velia, ¡Yo lo quería a él!

Mientras tanto, Marinette Adrien y Nathaniel, corrían hacia el lugar señalado por Velia. Al ver a Ethan, pudieron tranquilizarse un poco, pero todo empeoro cuando pudieron notar la amenaza en la que estaban.

-Beata, detente –El pelirrojo comenzó a caminar hacia ella tranquilamente

-¡Aléjate! –grito desesperada

-Por favor Beata, solo déjalo ir, -comento el pelirrojo

Velia Pov.

Beata volteaba de un lado al otro claramente desesperada, eso podía ser tanto bueno como malo.

¿Se rendiría? No lo sé, espero que sí.

Un grito me alarmo, levanto la cuchilla en alto, un escalofrió recorrió mi espalda, tenía miedo de perder a mi pequeño.

¿Cómo puede exist.ir alguien así?

No lo se

La maldad siempre está presente

Pero es nuestro deber luchar.

Corrí lo más rápido que pude, mis piernas reaccionaron por si solas, entonces, Beata abrazo al niño y corrió con el, mi corazón se detuvo cuando vi que se dirigía al puente Vecchio, ese puente el cual marco nuestra infancia, cuando ella estuvo a punto de morir ahí.

Flashback.

Una pequeña niña de cabellera café lloraba desesperada, al no poder ayudar a su hermana la cual había caído del puente. Para su suerte, alguien se lanzó ayudándole, sin embargo, esa pequeña niña nunca fue la misma. Cambio, y ese cambio hizo sufrir a Velia, la rechazaba, dejaron de ser amigas, cada una tomo su camino, y tan solo tenían 8 años.

Fin del flashback

Unos cuantos metros separaban a Beata y a Velia. La chica con niño en brazos volteaba repetidas veces hacia el agua, causándole terror a Velia.

-Beata, por favor, te lo suplico, déjalo ir.

Ella sonrió, sonrió de una manera espeluznante, Velia le observo con terror, lagrimas comenzaron a correr por sus mejillas, y entonces, para su mala suerte, un sonido nombro el final de su transformación.

-Lo siento Velia, -Dijo Rui cayendo inconsciente.

-Por favor, él no tiene la culpa de nada, si quieres algo yo te lo daré, pero por favor!, déjalo! –La desesperación de Velia era notoria, temblaba de terror, no tenía idea de que hacer

La respiración de Beata era agitada, volteo a ver al niño el cual claramente era ignorante de lo que ocurría. La tristeza la inundo, ¿Que iba a hacer?

-Velia!, -La voz del pelirrojo retumbo en los oídos de Beata, haciendo que esta enfureciera nuevamente.

-Lo siento Velia. –dijo la mujer tirándose del puente junto con el niño.

Un grito por parte de Velia, hizo que Beata se arrepintiera, sin embargo, era demasiado tarde, sujeto al niño con fuerza, cayendo a las profundidades del agua.

Velia quedo petrificada ante lo sucedido, la chica tenía un enorme temor por ese puente, desde el día en que su hermana casi muere.

Observo como Marinette corría hacia ella, y como Nathaniel y Adrien se tiraban hacia el agua.

No podía quedarse atrás. Pudo ver a Nath salía del agua con Ethan en brazos, volteo a toda dirección, y entonces vio a Adrien saliendo en busca de aire, pero ¿Y beata?

La chica no dudo, y se lanzó al agua.

-Velia!, -Gritaron al par los 3 jóvenes.

La chica comenzó a nadar lo más hondo posible, volteando a todos lados en busca de su hermana. Poco a poco el aire faltaba, entonces ahí fue cuando la vio.

La chica se encontraba aparentemente inconsciente.

Con las fuerzas que le quedaban, Velia intento tomar su mano, pero al hacerlo, la chica reacciono rechazándola.

¿Qué era eso? Velia sintió temor, tristeza, ¿Tanto la odiaba? La chica se quedó inmóvil, sintiendo culpa ante la mirada de su hermana.

Finalmente algo la jalo, llevándola hacia el exterior. Lo único que pudo ver de su hermana, fue la sonrisa que tenía al cerrar sus ojos.

Nathaniel saco a Velia del agua, la mujer tocio fuertemente mientras intentaba acoplar su respiración.

Marinette tenía a Ethan en sus brazos mientras lo abrigaba con su saco.

El niño al ver a su madre se zafo de Marinette, corriendo hacia ella para abrazarla.

-Todo estará bien –Susurro Velia abrazándolo fuertemente

-Sí, ahora todo está bien, -Complemente Nathanael abrazando al par.

2 meses después.

-Te maldigo Rui!, como puedes hacerme esto!

Un chico peli naranja se burlaba de manera alegre de Velia, metiendo toda clase de presión sobre ella

-Ah! No, mejor no lo are, escapare!

-¿Otra ves? No, no lo creo –Decía Marinette entrando a la habitación

Velia suspiro, intentando tranquilizarse. Finalmente el trio salió del lugar, esperando tras unas grandes puertas.

-Lo aras bien, tu igual mereces ser feliz, -Rui le sonrió a Velia, haciendo que esta soltara una leve sonrisa.

-Gracias Rui, -susurro para comenzar a caminar.

No podía imaginar que estaba ocurriendo, su primer amor, su amor a primera vista estaba frente a ella, estaban por casarse, y formar una familia junto con su hijo.

La felicidad en su rostro no era algo que quisiera ocultar. Nath al verla sonrió, haciendo que una lagrima se deslizara por su mejilla, al estar frente a ella le ofreció su mano, ayudándole a pararse a su lado.

Ambos se miraron fijamente durante unos segundos, para después unirse en un beso.

-Disculpen pero, el beso es al final!, -Exclamo gracioso Adrien haciendo que todos rieran en el lugar.

-Finalmente el gatito dijo algo gracioso, -Susurro Marinette

Velia y Nathaniel se tomaron fuertemente de la mano, este era el inicio de una nueva historia, una historia que vivirían juntos, y aunque la maldad vuelva, nuevos héroes estarán listos para luchar por el bien.

Esto no es un simple final, es el inicio de mil historias en sus mentes acerca de su futuro.

¿Felicidad? ¿Tristeza? Que le desean a esta hermosa pareja?

Bueno, eh aquí el final :'D, la verdad no se que decir, hoy me entere que este fic llego al millón de lecturas, y esto es gracias a ustedes, mil gracias!

Como se darán cuenta, el ultimo cap era acerca de la vida de Marinette y Adrien, y los epílogos de Nathaniel y Velia, y sip, son mi ship casi favorito <3 hahahahah

Muchas gracias por todo, la verdad no se ni como agradecerles :')

Los amo tanto enserio!

Mil gracias por todo y nos leeremos en otro fic <3

P.D., Se elaborara un último "cap" donde responderé dudas acerca del fic, si veo que no hay muchas obviamente no se ara.

Gracias! Y hasta pronto!


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