Declaimer: Los personajes de Naruto NO son míos, pertenecen a Kshimoto, yo solo los uso para crear esta historia, sin fines de lucro, con el único objetivo de hacer pasar un buen momento
al lector.

Sakura, Ino, Tenten, Temari y Karui terminaban de arreglarse, Hanabi ayudaba en lo que podía pero aún hacia falta que llegara su hermana.

-Lo siento llegó tarde- se disculpó Hinata entrando al cuarto donde estaban sus amigas.

-¿Dónde está Minato?- pregunto Hanabi.

-Se quedó con Obito- Hanabi se cruzó de brazos, ella quería ver a su sobrino- Tranquila Hanabi-chan, cuando lleguemos a la fiesta podrás verlo.

Hinata se acercó a sus amigas para ayudarlas con sus peinados, la emoción se sentía en el aire.

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La boda continuó con una gran fiesta, los novios iban atendiendo a los invitados.

Karin estaba sentada junto con Mikoto, Itachi estaba cargando a su primer hijo mientras hablaba animadamente con Shisui y Tenten.

Naruto platicaba con su mamá y luego miraba a sus amigos, tenía que decirle a alguien su secreto, ya no lo aguantaba más, pero debía ser alguien de quién su mamá nunca sospechara, se despidió un momento de Kushina y fue a hablar con cierta persona.

-¿Cómo estás Hinata?- la azabache giro a verlo mientras seguía esperando a que Minato llegará a ella, el pequeño Uchiha ya tenía tiempo dando sus primeros pasos.

-Muy bien- respondió recibiendo a su hijo y poniéndose de pie- ¿Y tu cómo estás?

-Bien, supongo- Naruto se rasco el cuello nervioso y busco a Obito con la mirada, él seguía discutiendo con Kakashi y Guy, aprovecho su momento de distracción y le indico a Hinata que lo siguiera hasta alejarse de los demás.

-Creo que no estás muy agusto aquí- menciono Hinata viendo su incomodidad.

-Creo que cometí una tontería, no sé a quién decirle, si Okachan se entera.

-¿Qué hiciste?- pregunto confundida.

-Tuve una misión hace unos días y yo- Naruto dudo- Yo conocí a alguien y cometí un error, me deje llevar y

-Tranquilo Naruto-kun, todos cometemos errores- Naruto suspiro y Minato alzó los brazos para que lo cargara, el rubio tomo a su sobrino, y le susurro al oído a Hinata lo que había hecho- Ya veo, piensas que ella- Naruto asintió para evitar que terminara la frase- Pero ese no sería un error Naruto-kun, te aseguro que te haría muy feliz.

-¿De verdad lo piensas?- Naruto se quejó cuando Minato le estiró el cabello.

-Claro, si eso llegará a suceder, Kushina-san te apoyará- le dijo con una sonrisa, Naruto sonrió más aliviado.

-Promete que no le dirás nada a nadie- pidió Naruto- Te lo digo a ti porque creo que Okachan sospecha que hice algo, y ella jamás pensaría que te lo diría a ti.

-Esta bien, cuenta con mi silencio- Minato comenzó a balbucear cosas sin sentido y a dar golpecitos en el pecho de Naruto.

-T-tío- al rubio se le iluminaron los ojos al escucharlo.

-Ya habla.

-Hace un mes empezó a decir sus primeras palabras, pero aún así es rara la vez que habla- explico Hinata tomando con suavidad las mejillas de su hijo.

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Algunos meses después, las Kunoichi de la generación de Naruto estaban a punto de tener a sus hijos, incluso Karin, Kakashi bromeaba diciendo que se habían puesto de acuerdo para que sus hijos fueran juntos a la academia.

Pero lo que más había sorprendido a todos fue cuando el hijo de Kushina llegó hace un mes a la aldea con un pequeño rubio, era la réplica exacta de Naruto, solo que el niño tenía dos marcas en sus mejillas, Kushina casi había querido golpearlo por ocultar la verdad, pero Naruto explicó que nunca supo que había dejado embarazada a una chica, pero que cuando se enteró decidió hacerse cargo de su hijo, lamentablemente la madre del niño no había logrado sobrevivir al parto, al parecer tenía una enfermedad en el corazón antes de conocer a Naruto, al rubio no le gustaba hablar de eso, sobretodo porque casi no conocía a la madre de su hijo, Kushina le puso el nombre de Boruto.

Las mujeres con el vientre más grande eran Sakura y Hinata, ambas iban a tener gemelos, o al menos es lo que podía ver Hinata con el Byakugan.

-Okasan- llamo el pequeño Minato, el niño acababa de cumplir dos años- ¿Cuándo van a na-nacer m-mis hermanitas o hermanitos?

-En un mes, serás hermano mayor- Hinata revolvió el cabello negro de su hijo.

Minato tocaba el vientre de su madre para sentir a sus hermanos- Quiero que me en-entrenes pa-para proteger a mis hermanos- a Minato aún le costaba hablar bien- El a-abuelo Hiashi di-dijo que el Clan Hyūga era ex-experto en Taijutsu.

Hinata se sorprendió- Cuanto tengas tres años, prometo entrenarte, aún eres muy pequeño- Minato asintió feliz.

-¿Y cuándo vo-voy a des-despertar el Sharingan?, Co-como Otôsan, el tío Fugaku dice que te-tengo los ojos de Otôsan- Minato señaló sus oscuros ojos.

Hinata sonrió forzadamente al no saber que decir- Eso solo lo sabremos cuando seas más grande.

-¿Y tus ojos Okasan?, El abuelo Hi-hiashi dijo que tal vez po-podría tenerlos- comento el niño feliz.

Hinata le mostró los sellos que se necesitaban y cómo debía hacer para activar el Byakugan- Pero eso solo lo usaremos cuando comience tu entrenamiento, ¿Entendiste?

-Si, quiero ir co-con la tía Hanabi, ¿Pu-puedo?- Hinata le dió permiso y llamo a Hanabi para que pasará por él.

Cuándo terminó de darle un baño a Minato, su hermana paso por él y dijo que si tardaban mucho lo iba a traer hasta mañana, Hinata accedió y se despidió de ambos, le fue a dar comida a Akamaru y después a recostarse un rato, el embarazo la agotaba.

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Hanabi jugaba con Minato hasta que Hiashi la llamo para su entrenamiento, el niño prometió esperar en el cuarto de su tía, pero logró escabullirse para observar la pelea de la castaña, era sorprendente la destreza que tenía, y Hanabi le había dicho que su mamá era más fuerte, solo que no le gustaba pelear.

Miró que su abuelo lo miraba fijamente y salió corriendo a esconderse, entre todo lo que recorrió termino por perderse en la gran casa, salió al patio y siguió caminando hasta encontrar un cuarto cerrado al que solo se le permitía el paso a ciertas personas, quiso abrirlo pero estaba cerrado con llave, había una ventana por dónde se podía entrar, pero estaba muy alta para él.

Miró un árbol y se le ocurrió una gran idea, tomo la cuerda que estaba tirada en el suelo y que los Hyūga usaban para hacer tendederos y colgar la ropa, le amarro una roca pesada y lanzó el extremo libre de la cuerda sobre una rama, se fue colgando hasta que la piedra subió y se encargó de estirarla bien para hacer un nudo, utilizo la cuerda para escalar a la rama y se asustó al ver lo alto que había llegado, la ventana aún estaba a unos metros, tomo algunas rocas que se había guardado en el bolsillo, respiro profundamente e intento ver el centro de la ventana, donde probablemente tenía puesto el seguro, hizo los mismos movimientos de mano que hacía su papá antes de lanzar un arma, porque Obito siempre lanzaba una manzana y luego la atravesaba con algún kunai para sorprenderlo, lanzó la primera piedra pero estuvo demasiado lejos de su objetivo, la segunda piedra casi rompía el vidrio, la tercera logro dar cerca pero no en el centro, y la cuarta dió justo en el objetivo, abriendo la ventana de par en par, lo que su pequeña mente dedujo fue que no tenía puesto seguro y que era su día de suerte, saco el kunai que le había regalado su tío Kakashi en su segundo cumpleaños y que no soltaba aunque su mamá se lo quitará todo el tiempo, le hizo otro nudo a la cuerda que estaba en la rama y amarro uno de los extremos al kunai, lo lanzó con todas sus fuerzas y logro clavarlo justo por arriba de la ventana, lo jalo muchas veces para comprobar que no se saliera de su lugar y después se colgó en la cuerda, tenía mucho miedo pero quería saber que se escondía en aquella habitación, con sus manos puestas en la cuerda se sujeto hasta llegar a la ventana, tomo aire antes de dar un salto y caer dentro de la habitación, hizo un fuerte ruido al caer pero los libros habían amortiguado el golpe, era una biblioteca, una inmensa.

Tomo los libros y comenzó a hojear, él no sabía leer, solo sabía las letras porque sus mamá le estaba enseñando, así que busco hasta encontrar libros que tuvieran dibujos, no fue fácil encontrarlos, pero lo hizo- Los ojos de Okasan- murmuró sorprendido, en uno de los libros encontró los sellos que su mamá le había explicado para activar el Byakugan, siguió buscando e incluso encontró libros donde las personas de los dibujos hacían trucos increíbles.

Hizo los sellos que venían en los libros y que su mamá le había enseñado- Byakugan- pero nada pasó, miró de nuevo los libros tratando de ver que hizo mal.

-No deberías estar aquí- Minato salto del susto y retrocedió.

-Yo- el pelinegro se llenó de miedo- Yo solo.

-Si querías entrar solo debías pedirme la llave- hablo seriamente el hombre que Minato no lograba ver con claridad- Admito que tu plan fue muy bien elaborado, demasiado para un niño de dos años, no eres como los demás.

-A-abuelo- Hiashi se acercó y su nieto por fin pudo reconocerlo.

-No te-tengo los ojos de Okasan, y ella no va a en-entrenarme hasta que cu-cumpla tres años- los ojos de Minato se llenaron de lágrimas- ¿Te decepcioné?

Hiashi negó con la cabeza- Aún eres muy pequeño, por eso Hinata no quiere entrenarte, la edad ideal sería a los tres años o más grandes aún, y sobre el Byakugan, tal vez pueda ayudarte- Hiashi se acercó a él y tomo sus brazos- Voy a presionar algunos de tus puntos de chakra, para que puedas liberar más, con eso y con el potencial que veo en ti, seguro descubriremos si tienes estos ojos- Hiashi activo su Byakugan y tocó los brazos de Minato, el niño se quejó de un pequeño dolor pero lo soporto- Ahora haz lo mismo que yo.

Minato imitó a su abuelo e hizo todo lo que él le indico- Byakugan- el primer intento fallo, Minato tomo un largo suspiro- Byakugan- las venas resaltaron a los costados de su rostro, el color negro cambio y se convirtió en el mismo color que los ojos de Hinata.

-¿Qué es lo que miras?

-Es co-como si mirara a través de los objetos y ca-cada ser vi-vivo tiene color azul de-dentro y va-varios cables conectados- Minato sentía que se mareaba, pero Hiashi lo sostuvo.

-¿Hasta donde puedes ver?

-Un po-poco más afuera de es-esta biblioteca- Hiashi abrió los ojos sorprendido, calculaba que Minato podía ver por lo menos seis metros a su alrededor, él no era un niño normal, el Uchiha cerró los ojos y estos volvieron a ser negros.

Hiashi regreso sus puntos de chakra a la normalidad- Minato, no eres como los niños de tu edad, me atrevería a decir que seras el nuevo genio de los Hyūga, yo mismo te voy a entrenar, pero necesito que no le digas nada a Hinata.

-Pe-pero, Otôsan di-dice que no debo mentir ni o-ocultar nada- Hiashi tomo su barbilla y lo obligó a verlo.

-Tienes todo el potencial para ser un prodigio, no dejaré que Hinata y su amabilidad sean un obstáculo para ti.

-La t-tía Hanabi dice que Okasan es fuerte aunque no le gu-guste pelear y Otôsan se e-enamoró de ella por ser amable, ¿Qué tiene de ma-malo ser como ella?

-No es malo, pero Hinata y tus futuros hermanos necesitarán alguien que los vaya a proteger- Minato abrió sus ojos con sorpresa.

-Pero Otôsan si-siempre nos va a proteger, él se lo pro-promete a Okasan todos los días- confesó Minato, Hiashi suspiro.

-Pero Obito es el Hokage y no tiene tiempo, ni siquiera está con ustedes en casa, ¿O sí?- Minato agachó su cabeza con tristeza.

-Él está to-todos los días de-desde las siete y en sus días libres- respondió tratando de defender a su papá.

-Minato, necesitan que seas fuerte, incluso Obito se sentiría orgulloso de ti- el niño miró a su abuelo con ilusión.

-¿Y si Okasan se en-entera?

-Yo me haré responsable de eso.

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-A partir de hoy Minato entrenará con los niños del Clan, nadie debe decirle esto a Hinata- los Hyūga asintieron al igual que los niños que miraban con una sonrisa al nuevo integrante, era el hijo de Hinata, la Hyūga que había evitado que siguieran sellando personas como contaban sus papás- Tu tampoco tienes permitido hablar Hanabi.

La castaña asintió- Perdóname Oneesan- pensó apretando sus manos.

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Ese año hubo muchos nacimientos.

Shikamaru y Temari tuvieron un niño parecido a su papá al que decidieron nombrar Shikadai.

Sasuke le puso a su hija Sarada, una niña muy linda.

Ino y Sai le dieron el nombre de Inojin a su hijo, un rubio con los mismos ojos que su madre, pero con la piel tan blanca como su padre.

Shisui y Tenten tuvieron un niño de cabello oscuro y ojos del mismo color, sus pestañas eran iguales a las de Shisui y sus finas facciones eran como las de Tenten, su nombre era Ishida.

Chōji y Karui nombraron a su hermosa niña Chōchō, ella era la combinación de las mejores características de sus padres.

Los gemelos de Sakura y Neji nacieron con el cabello castaño y los ojos característicos de los Hyūga, pero en el color de piel y en la cara eran idénticos a Sakura, el mayor tenía el nombre de Kizashi como el padre de Sakura y el menor se llamaba Hizashi.

Obito y Hinata tuvieron un niño y una niña, el mayor era Kiba, en honor al mejor amigo de Shino y Hinata, su cabello era como el de su madre y sus ojos eran oscuros como los de Obito, su piel era idéntica a la de su padre pero en la cara se parecía mucho a Hinata, la niña se llamaba Himawari, su cabello era idéntico al de Hinata y al de Kiba, sus ojos también eran oscuros, ella era la que más parecido tenía con Hinata.

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Tres años después.

Hinata golpeaba un tronco repetidamente para mostrarles a Minato, Kiba y a Himawari, como debían emplear su Taijutsu. Minato tenía cinco años y ya había logrado activar el Byakugan, algo que sorprendió a Hinata y a Obito, Kiba y Himawari tenían solo tres años, por eso a ellos les enseñaba cosas más fáciles, Kiba siempre intentaba competir contra Minato y Himawari era quien intentaba calmarlos.

Al principio no había querido entrenar a sus hijos, hubiera preferido que llevarán una infancia tranquila, pero ya habían intentado secuestrar a Minato en dos ocasiones, Hinata les quería enseñar por lo menos a defenderse en caso de necesitarlo, aunque esperaba que nunca tuvieran que llegar a ese extremo.

-Minato-niisan- grito Kiba cuando el descanso que habían tomado termino- Te desafío a un duelo.

-No otra vez- dijo Himawari con pesar.

El clon de Obito y Akamaru miraban desde cierta distancia.

Minato vio de reojo a su madre- Soy mayor, no tienes oportunidad contra mi, espera a que seas más grande y tal vez nos enfrentemos- explicó calmadamente, Minato tenía una forma de decir las cosas, no parecía querer lucirse, lo hacía por el bien de su hermano menor, pero Kiba siempre tomaba eso como si intentará hacerlo menos.

-Dos años no son mucha diferencia, lo que pasa es que tienes miedo.

-Kiba-niisan, sabes que Minato-niisan es más fuerte, deja de retarlo- pidió Himawari amablemente.

-Tú de qué parte estás- le dijo Kiba con un puchero.

Hinata se rió ligeramente- Tal vez quieras tener un combate de práctica Minato- opino la ojiperla, Minato asintió.

-Solo porque Okasan lo dice- Minato se puso en la posición clásica de los Hyūga, Kiba se levantó animado e imitó la posición de su hermano.

-Usa el Byakugan, quiero ver cómo usas los ojos de mamá- Minato iba a negarse pero Kiba puso una cara suplicante y su hermano suspiro.

-Byakugan- las venas resaltaron en el rostro de Minato, Himawari miraba que era idéntico a su madre, Kiba comenzó a dar golpes, precisos pero demasiado lentos, Minato los esquivaba con facilidad, tomo un brazo de su hermano y por instinto casi cierra uno de sus puntos de chakra, pero solo sujeto más su agarre y lo hizo caer lo más delicadamente que pudo.

Kiba se sentó en el suelo y frotó su espalda- Algún día voy a estar a tu altura- murmuró adolorido.

-Pero si no duraste ni cinco minutos Kiba-niisan- dijo Himawari, Kiba entrecerró los ojos.

-Por eso dije algún día.

-Okasan, voy al entrenamiento con los niños del Clan- dijo Minato guardando sus cosas.

-¿Seguro que no quieres solo entrenar con nosotros?- pregunto Hinata, ella no estaba tan convencida cuando Minato les pidió hace un mes permiso para entrenar dentro del Clan Hyūga, pero Obito había accedido contento y prometiendo ayudar en lo que necesitará.

-Quiero seguir siendo más fuerte- dijo Minato- Con mis hermanos no puedo tener verdaderas peleas de entrenamiento, con los niños del Clan si.

-Ya veo- Minato se acercó y le dió un abrazo a su mamá y a sus hermanos- Nos vemos luego- Minato se fue corriendo y despidiéndose con la mano.

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-Este día, Minato se enfrentará en un duelo amistoso con el niño que hasta ahora a demostrado ser el más fuerte de la rama secundaria, Hideki- informo Hiashi a todos los que estaban presentes, esos combates se hacían para demostrar los avances de los niños.

-¿Creen que eso es justo?, Hideki le dobla la edad a Minato- murmuró uno de los Hyūga que estaba viendo el encuentro.

-Minato es el hijo de Hinata-sama y Hokage-sama, Hiashi-sama dice que es un prodigio- contesto otro.

Hiashi tomo a Minato de los hombros- Mucha suerte- fue con el otro niño e hizo lo mismo- Comiencen.

Minato activo su Byakugan y se puso en guardia, el chico de diez años hizo lo mismo, Hideki fue el primero en atacar, Minato esquivaba los golpes y daba fuertes palmadas en todos los lugares que el chico castaño dejaba desprotegidos.

El pelinegro daba saltos para alcanzar mejor a su contrincante y logro tapar los puntos de chakra de sus hombros, el chico más grande retrocedió y Minato aprovecho para dar un golpe con dos de sus dedos y dejarlo inconsciente, una técnica que sus mamá le había mostrado y que el dedujo por cuenta propia.

Los Hyūga se sorprendieron al ver el nivel del niño, Minato hizo una reverencia a los adultos y fue a ayudar al chico que estaba en el suelo- Él estará bien, pero creo que no despertara en un día.

-¿Crees?- pregunto Hanabi con una ceja arqueada.

-Copie la técnica de Okasan, pero no sé si lo hice bien, tal vez despierte antes- explicó un poco nervioso.

-Lleven a Hideki con uno de los médicos- ordenó Hiashi, el encargado de los encuentros de los niños, los Hyūga obedecieron.

-Su nieto es muy impresionante Hiashi-sama- dijo un Hyūga.

-Minato sería el próximo genio del Clan- comento Hanabi- Si fuera un Hyūga en vez de un Uchiha.

-No importa que sea un Uchiha, el tiene sangre Hyūga- comento un anciano del consejo.

Minato se sentía extraño, todos a su alrededor le decían que era un genio, un niño diferente a los demás, los únicos que lo trataban como siempre eran su familia.

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-Obito, Akamaru, lleven a los niños lejos, ahora- ordenó Hinata con voz seria, frente a ella habían cuatro ninjas con intención de secuestrar a sus hijos, el clon de Obito y Akamaru se llevaron a los niños que lloraban y gritaban pidiendo ir con su mamá.

-Que lastima será tener que matarte para ir por los niños- dijo un ninja de cabello negro- Sigues teniendo un buen cuerpo a pesar de haber tenido tres hijos, me sorprendes.

Hinata hizo caso omiso a los comentarios y se puso en la posición de los Hyūga- Recuerden no ser muy rudos con la esposa del Hokage, después de todo está embarazada de nuevo, ¿Cierto cariño?

Hinata siguió sin contestar, pero esta vez sintió un poco de miedo, era verdad que llevaba tres semanas de embarazo, no tenía idea de porque esos sujetos lo sabían, ni siquiera se lo había dicho a Obito.

Los ninjas se fueron a atacarla y Hinata uso la rotación para esquivarlos, el primero que se levantó fue el que recibió las sesenta y cuatro palmas de Hinata, cayó al suelo escupiendo sangre mientras la azabache se ponía de pie.

Hinata estaba luchando contra los tres que quedaban, no dejaba espacios en su defensa, pero tampoco lograba hacer tantos ataques a sus enemigos.

Minato entro a su casa, llamo pero nadie respondía, uso el Byakugan y se dió cuenta que en el patio estaba su madre luchando contra tres hombres, corrió de inmediato y la miró derribar a otro de ellos- Okasan- grito para alertar, pero se produjo todo lo contrario.

Hinata se distrajo al ver a Minato y el ninja que había dejado tirado en el suelo le clavó un kunai en el muslo, uno de los ninjas que seguía de pie le golpeó el hombro haciéndola tambalear y el otro le dió una patada en el brazo que la hizo caer y rodar unos metros.

-A ese niño también no lo llevamos- dijo uno de los que seguían de pie.

Minato sintió una gran molestia, los miró con rencor y en un instante sus ojos se volvieron rojos, una aspa negra giro dentro de ellos, el deseo de proteger a su madre había logrado que despertará su nuevo poder- Esos ojos- dijo el ninja de cabello negro.

-El Sharingan- murmuró otro impresionado.

Hinata se puso de pie como pudo, el dolor de su muslo era una molestia, pero se atrevió a darle un golpe al de cabello negro, aprovechando su momento de distracción.

El que le había clavado el Kunai y el último que seguía de pie estaban paralizados- Estoy seguro de que los atrapé en un Genjutsu mamá- dijo Minato- Estos son los poderes de Otôsan, él me explico cómo se usaban.

Hinata dejo inconscientes a los últimos dos y se fue a recargar en un árbol, Minato corrió con ella- Tranquilo estoy bien- Hinata acarició sus mejillas- Eres un niño muy valiente, no lo habría conseguido sin tu ayuda- Minato se sonrojo y abrazo a su mamá.

-Hinata- grito Obito desde dentro de la casa, salió corriendo por la puerta trasera y miró a Hinata y a Minato- ¿Están bien?, Vine en cuanto llegó mi clon a la oficina.

-Estamos bien, Minato me salvó- dijo Hinata sonriendo.

El pequeño pelinegro se separó de su madre para ver a su padre, Obito se sorprendió al ver sus ojos- ¿El Sharingan?, Pensé que Minato tenía el Byakugan.

-Parece que despertó los dos- comento Hinata.

-Muchas felicidades Minato, ahora también entrenaras con papá, hoy fuiste muy fuerte- Obito despeinó a su hijo como lo hacía con Hinata- Ahora deja que te cure- le dijo a su esposa- Ven Minato- Obito envío a un cuervo para que le avisarán a los Uchiha y vinieran a arrestar a los que habían atacado su hogar, cargo a Hinata hasta llevarla a la cama y fue por el botiquín, Minato no se separaba de sus padres.

Obito le explicaba de manera breve a Minato como debían desinfectar la herida para después llevarla al hospital.

Dejaron salir a Hinata en unas horas debido a que no había sido un corte tan profundo- Felicidades de nuevo Hinata-san- dijo la enfermera desde la puerta del consultorio, Hinata le agradeció con una sonrisa.

-¿Por qué felicidades?- pregunto Minato.

-Eso mismo iba a preguntar- dijo Obito.

-Bueno- Hinata jugó con sus dedos- Lo que sucede es que les tengo una buena noticia- los tres salieron del hospital con rumbo a la torre Hokage por sus dos hijos- E-estoy e-embarazada.

Obito abrió los ojos más de lo normal- ¿De verdad?- Hinata asintió- Que feliz me haces- Obito cargo a Minato y los abrazo a ambos.

-Seré hermano mayor de nuevo- dijo Minato feliz.

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Un día después de lo sucedido Minato, Kiba y Himawari pidieron permiso para quedarse con Kushina, Naruto y Boruto. Se irían a quedar unos días con ellos dentro de una semana, al pequeño rubio le hacía falta convivir con más niños de su edad. Hinata dejo a los niños con su hermana Hanabi para ir a almorzar con Obito en la torre Hokage, pero sus planes no salieron como pensaba.

-Obito en tu oficina no- pidió cuando sintió que desabrochaba su sujetador y lo lanzaba al suelo.

-Pero en la casa no puedo, están los niños- le dijo para después quitarse el chaleco que lo identificaba como Jōnin junto con la polera.

-Pero alguien podría

-Cerré la puerta con seguro- Hinata ya no soporto más y se dejó llevar por las caricias de Obito.

El pelinegro hizo aún lado los papeles del escritorio y la subió en el para quitarle el resto de la ropa, la giro de modo que su abdomen quedará pegado al escritorio y desabrocho su pantalón para entrar en ella, las embestidas fueron suaves al principio, pero iban aumentado de velocidad conforme pasaba los minutos.

-¿No creen que el Hokage este muy ocupado?- pregunto Sakura caminando a lado de Naruto y Kakashi.

-Es la hora del almuerzo, Obito-niisan debe darse un tiempo para comer- comento Naruto sonriendo.

-Cuando me fui estaba terminando el papeleo, de seguro tiene un tiempo libre para nosotros- explicó Kakashi.

-Oye Sakura-chan, ¿Ya sabes que será?- pregunto Naruto.

-Solo llevo un mes Naruto- Sakura acarició con una sonrisa su aún vientre plano.

-¿Y Tenten cuánto tiempo tiene?- hablo de nuevo el rubio.

-Creo que solo una semana- respondió recordando haber hablado con la castaña.

-¿Enserio no se ponen de acuerdo?- Kakashi se rió junto con Naruto.

-¿Por qué piensan eso?- pregunto avergonzada.

-Hinata también está embarazada, Obito me lo contó ayer- dijo el peliplata.

-Estoy lleno de sobrinos- dijo Naruto contento- Boruto tiene más amigos con que jugar.

-Estas llevando muy bien eso de ser padre Naruto- lo felicito Sakura.

-Si bueno, Okachan me ayuda mucho- confesó rascando su cuello nervioso.

Kakashi intento abrir la puerta pero estaba cerrada por dentro-O-obito- el peliplata se sonrojo por debajo de la máscara al escuchar el susurro dentro de la oficina- Creo que mejor venimos por Obito después.

-¿Por qué?- Naruto lo miro confundido.

Sakura tapó los oídos de Naruto para que no escuchará los ruidos detrás de la puerta- Hay que obedecer a Kakashi-sensei, vamos Naruto- el rubio intento protestar pero Sakura lo llevo en contra de su voluntad.

-En un momento los alcanzó- Sakura asintió y siguió caminando con Naruto- Obito- Kakashi tocó la puerta.

Obito subió una de las piernas de Hinata al escritorio para entrar más en ella, la ojiperla se apoyó en sus codos - Obito- la voz de Kakashi lo hizo estremecer.

-Y-ya voy- contesto Obito comenzando a vestirse y pasándole la ropa a Hinata- Un momento.

Hinata se vistió de nuevo y se bajó del escritorio para acomodar los papeles y ayudar a Obito a arreglarse.

-Listo- Obito fue a abrir la puerta y sonrió nervioso- ¿Qué pasa Kakashi?

-¿Enserio?, ¿En tu oficina?- Kakashi arqueo una ceja.

-Lo siento- se disculpó Hinata mirando al suelo.

-No estábamos haciendo nada malo, solo íbamos a almorzar- dijo Obito mostrando las bolsas donde Hinata había llevado la comida.

-Si claro- hablo Kakashi con sarcasmo- Los ruidos se escuchaban hasta afuera, debes ser más cuidadoso- por su tono de voz, Obito sabía que le estaba llamando la atención.

-Esta bien, prometo comportarme- Kakashi lo miro cruzado de brazos- Lo digo enserio.

Kakashi suspiro- Mejor toma un descanso, vengan a almorzar con Naruto, Sakura y conmigo- los invito.

Hinata y Obito sonrieron, se tomaron de las manos y salieron detrás de Kakashi.

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Neji y Sakura tuvieron a su tercer hijo, una niña de cabello rosa y ojos idénticos a los de Neji, la pequeña tenía el nombre de Harumi.

Shisui y Tenten también tuvieron una niña, su segunda hija tenía el cabello ondulado y negro al igual que sus ojos, en la cara era muy parecida a Tenten, sus pestañas eran rizadas, la niña recibía el nombre de Kazumi.

El cuarto hijo de Obito y Hinata nació en el mes de abril, el niño era idéntico a su padre, era como ver nacer de nuevo al Uchiha, por eso Hinata decidió llamarlo Obito, en honor a su padre.

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No sé olviden de votar y comentar 🤗

Ya estamos muy cerca del final :c

Por si alguien tiene duda sobre las edades:
Obito: 32
Hinata: 24
Minato: 6
Kiba: 4
Himawari: 4
Y el pequeño Obito apenas es un recién nacido.
Los primeros hijos que tuvieron los demás de la generación de Naruto tienen cuatro años.
Harumi y Kazumi también son recién nacidas.
Cualquier duda o sugerencia pueden decirme ^^