Capítulo XVII: Enfrentamiento.
Declaimer: Los personajes de Naruto NO son míos, pertenecen a Kshimoto, yo solo los uso para crear esta historia, sin fines de lucro, con el único objetivo de hacer pasar un buen momento
al lector.
18 de Noviembre, el día de su enfrentamiento había llegado, su alarma se escucho por toda la habitación, la apagó y se incorporó hasta quedar sentada en la orilla de la cama. Se levantó y busco entre sus cosas el atuendo que Hanabi y su padre habían escogido para ella. Miró su reflejo en el espejo y sonrió con cansancio, entro al cuarto de baño, colgó su ropa en un gancho puesto en la pared, se desvistió por completo y camino despacio hacia la regadera, dejo que el agua tibia se llevará todas sus preocupaciones, le daba miedo lastimar a su hermana.
Termino su ducha, uso la toalla para secarse por completo y comenzó a colocarse su nuevo traje, pieza por pieza, se fue al lavabo y cepillo sus dientes con cuidado, seco sus labios y manos, y después fue a peinar su largo cabello. Se miró de nuevo al espejo, debía ser fuerte, hoy después de su pelea ella se encargaría de cambiar las cosas en el Clan.
Salió de su habitación al mismo tiempo que Hanabi, ella traía puesta una ropa parecida a la suya, pero con colores más brillantes, como el amarillo.
—Te vez muy linda hoy, Hanabi— dijo Hinata para romper aquel silencio.
—No quiero pelear contigo Oneesan, ¿Por qué permites esto?— grito la castaña con algunas lágrimas queriendo salir de sus ojos.
Hinata la miró con dulzura y limpio sus ojos— Quiero que les demuestres a todos que serás una gran líder.
—¿Vas a hacer lo mismo?— Hanabi apretó sus manos con fuerza.
—Esta vez lucharé por cambiar el destino de ambas— Hinata acarició la mejilla de su hermana menor— Quiero que te esfuerces y les enseñes que tú destino siempre fue ser líder, y que él mío es ser la hermana que siempre te apoyará.
—Vas a dejarme ganar, ¿Verdad?
—Las esperan en el dojo— interrumpió Ko llegando hasta ellas, Hinata asintió y beso la frente de Hanabi.
—Haré lo que tengo que hacer.
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Hiashi estaba sentado a lado del consejo, los tres ancianos se pusieron de pie cuando vieron llegar al Hokage y a una pequeña escolta.
Obito, Kakashi, Tsunade, Shizune y Sakura entraron al salón y saludaron.
—Que gusto tenerlo aquí Hokage— saludo uno de los ancianos indicándole donde estaba su lugar.
—No es nada, gracias a ustedes por la invitación— dijo Obito sentándose en su lugar al igual que Kakashi, Tsunade, Shizune y Sakura.
—No pensé que traería a tanta gente— hablo otro anciano, el que los estaba guiando al principio lo fulminó con la mirada por la falta de respeto.
—Tsunade, Shizune y Sakura solo están aquí por si alguna de las hermanas sale herida, tengo entendido que en el momento en que haya una ganadora inmediatamente será nombrada como la nueva líder, ya que Hiashi tiene pensado retirarse, ¿O me equivoco?— Hiashi escucho con atención a Obito y asintió— Y también pretenden sellar a quien pierda, solo quiero asegurarme de la salud de ambas, como lo haría por cualquiera de la aldea, todos son como mi familia.
—Entendemos Hokage— dijo el anciano de cabello café— Solo esperamos a que lleguen los que faltan y comenzaremos con esto.
Los ancianos se retiraron a recibir a los que iban llegando, Hiashi se quedó un poco más para agradecer y fue a acomodar a Fugaku, Mikoto e Itachi, los Uchiha que acababan de llegar.
Neji y Ko estaban en un lugar más apartado, pero donde podrían ver la pelea con atención.
Ino y Shikamaru llegaron como los nuevos representantes de su Clan, Chōji llegó con su padre y se sentó cerca de sus amigos.
Shino y su padre llegaron con la madre y hermana de Kiba. Todos los invitados habían aparecido, así que Hiashi dió la orden para que sus hijas aparecieran.
Amabas hermanas aparecieron en los extremos opuestos de la habitación, caminaron con la cabeza en alto hasta llegar con su padre y el consejo, hicieron una reverencia para saludar y dieron un paso atrás.
—El día de hoy tendrán un combate, en el momento en que una de ustedes gane será reconocida como la nueva líder del Clan Hyūga y yo pasaré a formar parte del consejo— explicó Hiashi, no entendía porque Obito, Kakashi y Shikamaru le habían pedido que pusiera esas condiciones, pero se atrevería a confiar en ellos.
—Y la otra será sellada y mandada a la rama secundaria— Hanabi tembló ligeramente al escuchar a uno de los ancianos, Hiashi permaneció sin ninguna expresión, fue algo que no pudo evitar, si él quería dar una condición, el consejo también pondría las suyas.
Hinata y Hanabi asintieron.
—¿Listas?— las hermanas Hyūga se fueron a sus lugares y volvieron a asentir— Comiencen.
Hanabi activo su Byakugan y se lanzó al ataque, Hinata también activo su línea sucesora y se encargó de bloquear los golpes de su hermana.
Hanabi intentaba con sus mejores técnicas, pero Hinata no dejaba ningún espacio en su defensa, se movía con una agilidad sorprendente.
—Ambas son increíbles— menciono un Hyūga.
Hanabi sentía que se quedaba sin opciones, era difícil bloquear los puntos de chakra de su hermana mayor, una distracción la llevo a quedar dentro del campo de adivinación de Hinata.
—Ocho Trigramas, Sesenta y cuatro palmas— Hanabi creyó haber escuchado mal— Dos palmas.
La castaña retrocedió lo más rápido que pudo y para impedir que Hinata avanzará uso su rotación, sabía que aún no podía realizarla adecuadamente, pero lo logro.
Los ancianos miraron a Hanabi sorprendidos, Hinata sonrió con orgullo.
—Perdona por hacerte daño— eso descolocó a Hanabi, esa distracción le costó la pelea— Cuatro palmas, ocho palmas, dieciséis palmas, treinta y dos palmas, sesenta y cuatro palmas.
Hanabi se tambaleó antes de caer de rodillas y toser sangre, pensó que Hinata iría a ayudarla, pero su hermana solo estaba parada frente a ella sin hacer nada. Cómo pudo se levantó e intento dar un paso, su equilibrio fallo y cayó de nuevo al suelo.
Sus ojos querían cerrase pero aún no quería darse por vencido, uso su manos y rodillas para apoyarse una vez más, pero temblaba tanto que no podía ponerse de pie, sus ojos regresaron a la normalidad y eso le impidió desbloquear sus puntos de chakra. Su respiración se agitó al darse cuenta de que había perdido.
—Hanabi ya no puede continuar, Hinata es la nueva líder— anuncio el castaño del consejo, Hinata hizo una reverencia y fue a ver a su hermana.
—Lo siento mucho Hanabi-chan— Hinata comenzó a desbloquear los puntos de chakra de su hermana.
—No te haz olvidado de mi— murmuró Hanabi viendo a su hermana feliz.
—¿Qué crees que haces?— pregunto uno de los ancianos poniéndose de pie— Hanabi perdió contra ti, no vale la pena que intentes curarla, para eso están los médicos que trajo el Hokage.
Hinata lo miro con firmeza— Le debe tener más respeto a su nueva líder.
—Pero que falta de respeto— el anciano camino hasta ella, alzó la mano dispuesto a golpearla, pero una voz hizo que se detuviera por completo.
—Yo no haría eso si fuera usted— lo amenazó Obito activando su Sharingan.
—Usted es solo un invitado, no puede venir a mi casa a darme ordenes y mucho menos a amenazarme— Fugaku e Itachi se prepararon por si los Hyūga intentaban hacer algo en contra de Obito.
—Lo diré solo una vez, ni ustedes ni nadie puede atreverse a poner una mano encima de mi prometida— todos en el dojo mostraron total sorpresa, con excepción de Hinata, Kakashi y Shikamaru, todo estaba saliendo según el plan.
Hasta ese momento Hanabi fue conciente del anillo que llevaba su hermana.
—¿De qué esta hablando?— pregunto Hiashi cuando salió de su asombro.
Hinata se puso de pie, Tsunade, Shizune y Sakura fueron de inmediato a ver a Hanabi— Obito me propuso matrimonio y yo acepté— dijo Hinata con seguridad— Cuando nuestro compromiso se haga oficial en un mes yo dejaré de ser la líder y le pasaré mi lugar a Hanabi.
—Ella perdió, además aún es muy chica para
—No estará sola— interrumpió Hinata— Neji-nissan también será el líder, y yo estaré con ellos.
—Retirense— ordenó Hiashi— Las cosas del Clan se resuelven entre los Hyūga.
—Pues nosotros no nos iremos— aseguro Itachi.
—Los Uchiha están involucrados en esto desde el momento en que tú hija dijo que se casaría con uno de los nuestros— hablo Fugaku con calma— No pensamos dejar solo a Obito.
—Entonces pueden quedarse, pero los demás no— ordenó un miembro del consejo Hyūga.
Los invitados y algunos de los Hyūga que estaban en el dojo fueron saliendo con discreción, Tsunade se quedó para atender a Hanabi, Kakashi para acompañar a Obito, Neji y Ko permanecieron en su lugar para ayudar a Hinata en lo que necesitará.
—Ahora si me puedes explicar que estás planeando Hinata— la voz de Hiashi resonó por toda la habitación.
—No planeo nada otôsan, participe en este combate porque ustedes me lo pidieron, pero desde un principio yo ya tenía mis planes— comenzó a explicar Hinata— Llevo una relación con Obito desde hace tiempo, hemos decidido que es tiempo de dar el siguiente paso en nuestra relación, así que cuando sean mediados de diciembre, haremos nuestro compromiso oficial, tal vez en enero se lleve a cabo nuestra boda, dejaré de ser una Hyūga para ser una Uchiha, por eso dejaré mi cargo a Hanabi y a Neji.
—Les recuerdo que desde el momento en que Hinata ganó el combate se convirtió en la nueva líder, y ella tiene el derecho a escoger a sus sucesores en caso de no tener descendencia— les dijo Ko, los ancianos del consejo apretaron las manos frustrados, Hiashi tenía una sonrisa amarga, no pensaba que su hija llegará hasta ese punto para salvar a su hermana.
—Y como Hanabi será la nueva líder, no pueden sellarla— advirtió Hinata.
—Pero un miembro de la rama secundaria no puede ser líder— hablo un miembro del consejo que hasta el momento había permanecido callado.
—Neji-nissan lo será hasta que él considere que Hanabi está preparada, además yo estaré con ellos en todo momento— contesto la azabache segura de sus palabras, pero nerviosa por la intensa mirada que recibía de todos.
—Esta bien, estoy de acuerdo con eso— hablo por fin Hiashi, los dos ancianos a su lado y él que estaba frente a Hinata asintieron disgustados.
—Perfecto, entonces daré mi primera orden como líder— los ancianos la miraron con los ojos entrecerrados— El sello del pájaro enjaulado va a desaparecer, no permitiré que sigan dividiendo al Clan Hyūga.
—Pero que tonterías estás diciendo— grito el anciano castaño— El sello existe para proteger el Byakugan.
—Si en verdad quieren proteger el Byakugan entonces todos los Hyūga deben ser sellados, les recuerdo que se dió el caso de un ninja de Kirigakure que logro obtener nuestro dōjutsu, de seguro lo tomo de alguien de la rama principal— comenzó a decir Hinata.
—No puedes sellar a la rama principal, si alguien se enterará de los sellos podrían usar eso en nuestra contra— interrumpió el consejo.
—Pues entonces crearé un sello que sirva para destruir el Byakugan en caso de que el usuario llegue a fallecer, pero no para poder controlarlos, es momento de que cambiemos nuestras reglas, les doy la opción de escoger, entre sellar a todos o a ninguno— Hanabi escuchaba a su hermana y no podía hacer otra cosa más que sentirse orgullosa.
—No sabes cómo funcionan las cosas aquí, las decisiones que se toman deben ser propuestas y aprobadas mediante una votación— explicó el Hyūga que estaba frente a ella— Tú voto vale el cincuenta por ciento, y el consejo es el otro cincuenta, si alguien del consejo no aprueba tu absurda propuesta, no podrás hacer nada.
—¿Alguien del consejo acepta mi propuesta?— pregunto Hinata viéndolos fijamente, el anciano que momentos antes había querido darle una bofetada se cruzó de brazos con una sonrisa, el castaño apartó la vista con indecisión, el que hablaba muy poco suspiro fastidiado y miró a su costado.
Hinata comenzaba a sentirse nerviosa, ni las miradas comprensivas de Obito lograban tranquilizarla. Pero alguien levantó la mano.
—Yo acepto la propuesta— dijo Hiashi sorprendiendo a todos.
—Entonces ya es mayoría, mi propuesta queda aprobada— hablo Hinata con una sonrisa— Ahora pasaré a retirarme, llevaré a Hanabi al hospital— Tsunade ya estaba saliendo con Hanabi en sus brazos, Neji y Ko se pusieron de pie para acompañar a Hinata, Obito llegó hasta ella y la rodeó con uno de sus brazos, Kakashi se adelanto a la salida y los Uchiha que aún no se retiraban fueron hasta llegar a lado de Obito.
—Oh por si les interesa, están invitados a mi fiesta de compromiso, será el 20 de diciembre— dijo Obito con una sonrisa burlona en el rostro, los Hyūga lo miraron con furia y Kakashi suspiro de cansancio, Hinata solo miraba al suelo completamente sonrojada.
—Y será dentro del Clan Uchiha— informo Fugaku para molestar más al consejo, Itachi y Mikoto negaron silenciosamente.
—Entonces la boda será dentro del Clan Hyūga— dijo Hiashi con su tono neutral de siempre.
—Por mí no hay problema— respondió Obito antes de abandonar el dojo.
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Hinata estaba sentada en la sala de espera del hospital, a su lado estaban Neji y Ko. Según Tsunade Hanabi no tenía nada grave, pero aún así estaba preocupada, quería saber cuál era su estado actual.
—Estará bien Hinata-sama— le dijo Neji para tranquilizarla, Hinata asintió en silencio.
—Hinata— grito el Hokage corriendo a toda prisa hacia la Hyūga— Perdóname por no estar aquí, pero en verdad tenía que ir a atender unos asuntos, pero ya dejé a Kakashi y a mi clon encargándose de eso.
—No te preocupes Obito, me alegra que estés aquí— Hinata tomo sus manos y Obito se sentó en el lado que estaba desocupado.
—Tranquila, Hanabi estará bien— Obito la abrazo y acarició con dulzura su espalda— No estás sola.
Los susurros de la gente y las enfermeras no se hicieron esperar, Neji miraba a todos con molestia por decir cosas de su prima y su futuro esposo, aunque eso no significa que él aprobaba la relación de Hinata, solo pensaba apoyarla.
—Parece que el Hokage ya tiene a alguien.
—Que mal, yo pensaba que estaba soltero.
—Dicen que le vieron un anillo, es probable que vaya a casarse.
—Pero si apenas y le vemos con alguien.
—De seguro ya la...
—Cállate, está a unos metros.
Neji y Ko estaban molestos por las insinuaciones de todos, Hinata estaba tan concentrada en los cálidos brazos de Obito que no se daba cuenta de su alrededor, en cambio el pelinegro pensaba en como se tomarían la noticia de que Hinata era su prometida, los compromisos que suceden rápidamente solían tener malas interpretaciones.
—Familiares de Hyūga Hanabi— Hinata se puso de pie de inmediato, Neji entro para acompañarla. Ko y Obito se quedaron a esperar.
—Desde la invasión de Pain sabía que tenías algo con Hinata-sama— comenzó Ko— No pensé que fuera algo tan serio.
—Pues ya vez— murmuró Obito sin saber muy que debía responder.
—¿Por qué el compromiso tan rápido?— pregunto el Hyūga.
—Bueno verás— dijo el Uchiha nervioso.
—¿Acaso embarazo a Hinata-sama?— lo interrumpió con los ojos entrecerrados.
Obito se atragantó con su propia saliva y comenzó a golpear su pecho con fuerza, Ko se asustó y le dió golpes más suaves en la espalda— ¿Por qué rayos preguntas algo como eso?— grito alterado— Yo no he llegado a ese punto con Hinata— susurro sonrojado.
—Lo siento, no quise ser inoportuno— se disculpó.
—Hokage-sama— lo saludo una de las enfermeras que estaba hablando de él, por su cara se podía deducir que tenía algunos veinticinco o veintiocho, sus ojos eran de un peculiar color ámbar y su cabello era café oscuro que iba atado en un moño perfectamente acomodado, a excepción de unos pequeños mechones que caían sobre su cara— ¿Se encuentra bien?
—Si, estoy bien, nada de que preocuparse— respondió Obito aún con las mejillas rojas, la simple idea de llegar al siguiente nivel en su relación con Hinata lo tenía nervioso, negó mentalmente y se repitió que él iba a esperar para después de su boda, o cuando Hinata estuviera lista, sintió un estremecimiento y se quitó el gorro para ponerlo sobre su regazo, parecía que alguien tendría problemas para dormir por la noche.
—Me alegra saber que está bien— confesó la mujer de los ojos ámbar— Nosotras— dijo señalando a las mujeres detrás de ella y después a si misma— Queríamos saber que tan cierto es eso de que va casarse.
—Pensamos que estaba soltero Hokage-sama— comento una pelinegra uniéndose a la plática.
—Voy a casarme en enero— dijo recobrando su compostura.
—Eso es muy triste, siempre me ganan a los Uchiha lindos— resopló la pelinegra entre molesta y triste.
—¿Es con la chica que estaba hace esto?— Obito asintió con una sonrisa.
—¿Qué esa no era Hinata Hyūga?— pregunto la castaña.
—Si.
—Oh ella es una buena persona, a veces suele ayudar en el hospital— dijo amablemente otra enfermera llegando a lado de sus compañeras.
—¿Pero por qué tan pronto?, Apenas la miramos hoy a su lado— todas las enfermeras se pusieron atentas a su respuesta, querían comprobar cuál de todas tenía las razón.
—Bueno llevo mucho tiempo saliendo con Hinata, solo que por mi puesto no me ven muy seguido con ella— mintió parcialmente— Y la boda es porque queremos estar juntos— bueno, en lo de estar juntos no mentía.
—¿No fue por qué la embarazo?— la pelinegra se tapó la boca cuando se dió cuenta de que lo había dicho en vez de pensarlo, sus amigas le dedicaron una mirada furiosa.
—No, porque todos piensan eso— murmuró cabizbajo— Yo la respeto mucho.
—Claro, sabemos que usted es un hombre confiable— la castaña tapó la boca se su compañera y se rió nerviosa— Disculpe las molestias, nos vamos— las enfermeras salieron prácticamente corriendo para perderse de vista.
—Entonces, ¿Por qué se quiere casar tan rápido?— pregunto Ko, Obito lo miro inexpresivo.
—Fue el plan de Kakashi y Shikamaru, querían una forma de que Hinata pudiera dejar después el Clan a su hermana para evitar que la sellaran— explicó en voz baja, para que solo el Hyūga pudiera escucharlo— Hinata y yo aceptamos el plan, sé que puede ser pronto, solo espero que funcione.
—Hinata-sama tiene sentimientos muy fuertes por usted, se atrevió a enfrentar a Hiashi-sama cuando pensó que le había hecho daño, Neji dijo que nunca la había visto así— Obito abrió los ojos sorprendido— Le aseguró que por parte de ella, las cosas no pueden fallar.
—Ni por mi parte, me encargaré de hacerla feliz— aseguró el Uchiha con una gran sonrisa.
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El día de las fiesta para anunciar de manera oficial su compromiso había llegado, todo el Clan Uchiha estaba presente en la casa de Fugaku, algunos Hyūga también habían asistido, los amigos de Hinata y Obito seguían presentes, todos estaban felices por los futuros novios. Hinata Lucía un lindo Kimono color lavanda, escogido por su hermana Hanabi, y Obito llevaba puesta una Yukata azul, a Hinata le entristecía ver que aún no usaba su regalo, pero pensó que tal vez aún no era tiempo.
Hinata estaba sirviendo un poco de agua para su maestra Kurenai, cuando sintió que Obito la rodeaba con sus brazos— ¿Te he dicho lo linda que te vez hoy?
—No— le respondió Hinata riendo ligeramente.
—Pues te vez hermosa, debo de darle las gracias a mi pequeña cuñada— Obito beso su mejilla y se separó para ayudarla con los vasos— Le compraré de esos dulces que le gustan.
—Y yo debo agradecer a Kakashi-sensei por ayudarte a escoger tu ropa— dijo Hinata entre risas.
—Mmm creo que esa idea no me agrada tanto— murmuró Obito.
Llegaron hasta Kurenai y su pequeña y les entregaron los vasos con agua, siguieron repartiendo entre sus conocidos y después fueron a centrarse a su mesa.
—Hasta que decides sentar cabeza Obito— hablo Shisui sentándose en la mesa junto con Itachi— Ya te nos estabas tardando.
—Esta es la mesa de Hinata y mía, no hay espacio para ti Shisui— respondió Obito con el ceño fruncido.
—¿Y por qué a Itachi no lo corres?
—Porque él no intentaba coquetear con Hinata frente a mi— Itachi suspiro con cansancio, ahí iban de nuevo.
—Por favor eso fue hace mucho, como eres celoso, yo ahora estoy con Tenten y tú no lo olvidas— Shisui se cruzó de brazos molesto.
—Como si me importara con quién sales— le dijo Obito mirando hacia otro lado con molestia.
—Parecen unos niños, Shisui tú deberías estar con Tenten, en vez de estar peleando con Obito— comenzó Itachi.
—En tu cara— se burló Obito.
—Y tú Obito, te casas en un mes, ya debes de madurar— interrumpió Itachi.
—Ja— se burló esta vez Shisui, Obito gruñó molesto.
Hinata puso su mano sobre la de su prometido y le sonrió— Sabes que yo solo tengo ojos para ti, ¿Verdad?
Obito fingió no haber escuchado y volteó a verla con un ojo cerrado.
Hinata se rió de su actitud infantil y le dió un corto beso en los labios. El Uchiha sonrió y acercó más su silla a él.
—Sin demostraciones en público por favor— dijo Kakashi sentándose a lado de Itachi.
—Oigan esta es mi mesa, ¿Qué no pueden conseguirse otra?— pregunto Obito con los ojos entrecerrados.
—No se— respondió Kakashi alzando los hombros —Siempre es bueno venir a molestarte.
—Por mí no hay problema, pueden quedarse— dijo Hinata alegre.
Obito los miró molesto.
—Celoso— dijeron Shisui, Itachi y Kakashi al mismo tiempo.
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Nos vemos en la próxima actualización.
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