Declaimer: Los personajes de Naruto NO son míos, pertenecen a Kshimoto, yo solo los uso para crear esta historia, sin fines de lucro, con el único objetivo de hacer pasar un buen momento al lector.

Dos palmas, cuatro palmas, ocho palmas, dieciséis palmas, treinta y dos palmas, sesenta y cuatro palmas. Su prima no dejaba de golpear el tronco frente a ella, hace unos meses le había enseñado esa técnica, propia de la rama principal del clan, pero a la cual pudo acceder por cuenta propia. No por nada era llamado un genio. Al principio le era difícil enseñarle, ya que nunca en su vida había entrenado a alguien, pero Hinata aprendía rápido, eso facilitaba las cosas.

—Katon Gōkakyū no Jutsu— de la pequeña boca de la Hyūga salió una bola de fuego que la obligo a retroceder para no salir dañada.

Neji observo con cuidado sus acciones, ese jutsu era la razón por la que estaba espiando a su prima. Él nunca se metía en los asuntos de los demás, pero su tío le encargo seguir a Hinata y averiguar quién se encargaba de entrenarla. Fue difícil seguirla sin que se diera cuenta, más porque estaba seguro de que ella sabía que la seguía, lo extraño es que no hacía nada para evitarlo. No tenía nada que esconder, era lo más lógico que podía pensar. Hinata llevaba entrenando en solitario por media hora, tal vez su tío estaba actuando demasiado paranoico, no creía que alguien hiciera esperar tanto a la persona que está entrenando. Ya no tenía por qué quedarse a perder el tiempo.

—No me gustaría estar en el lugar de ese tronco— bromeo. Hinata se estremeció al escuchar la voz de su maestro, ¿Por qué justo hoy tenía que llegar temprano? El día de ayer Hanabi le había comentado lo que escuchó de su padre. Según su pequeña hermana, a Neji se le encargo seguirla por la mañana. Entonces lo planeo todo, era obvio el motivo por el que le pusieron esa misión a su primo, por eso se levantó más temprano de lo normal. Iba a llegar media hora antes de su hora habitual, eso sumado a la media hora que siempre tardaba en llegar su maestro, le darían un total de una hora entrenando completamente sola. Conocía lo suficiente a Neji, sabía que lo máximo que se podía quedar a espiarla era una hora. Neji se iría al pasar un tiempo y ella podría entrenar con Obito sin levantar sospechas. Pero todo se vino abajo cuando el Uchiha llego temprano por primera vez.

Hinata volteo a verlo nerviosa—O-obito-sensei— dijo casi en un susurro.

Obito revolvió el cabello de la menor, cosa que ya se le estaba haciendo costumbre— Tranquila, yo también lo note— le guiño con su único ojo visible— Me encargaré de eso al terminar— le dijo al oído, la Hyūga solo asintió.

Neji abrió los ojos con sorpresa. Después de todo Hinata si tenía de maestro a un Uchiha, y el que tanto defendía que su prima era incapaz de hacer algo así. Lo mejor era no decirle a su tío y cubrirla. Prefirió quedarse a ver y tomar una decisión al final.

—Hoy estrenaremos con algo nuevo— dijo emocionado— Toma— le entrego una especie de katana hecha de madera.

Hinata la tomo en sus manos— ¿Para qué es esto Obito-sensei?— preguntó curiosa.

—Te enseñaré a usar un arma— Hinata se sorprendió al oír eso— Los Uchiha somos buenos en el uso de katanas, yo voy incluido en eso— río un poco, la ojiperla también río cubriendo sus manos— así que hoy vas a aprender a usar una, claro que hay que empezar por el principio— señalo las katanas de madera— estas son para que aprendas a usarlas, cuando ya estés preparada, tu y yo iremos a conseguir una Katana de verdad— finalizo.

—No creo s-ser buena en e-eso— confeso la azabache tristemente.

—Debes tener más confianza en ti— Obito la observo fijamente.

—Y-yo

El ojinegro tomo la barbilla de Hinata y la obligo a verlo— Quiero que creas en ti misma tanto como creo yo— le dijo sonriendo.

Hinata se sonrojo ante sus palabras— E-entonces n-no lo voy a d-defraudar— dijo con seguridad.

—Así me gusta— Obito le dio una de las armas de práctica, mientras él se quedaba con la otra— Comencemos.

Hinata espero a que Obito comenzara a atacarla, trataba de defenderse como podía, pensaba que era como pelear con un kunai, solo que esta arma era más grande. Se le estaba complicando el esquivar a su maestro, Obito era demasiado rápido y ella apenas estaba aprendiendo. Como pudo se defendió y en algunas veces ataco.

—Creo que tengo que ir más despacio— dijo viendo la dificultad que tenía Hinata para seguirlo.

—Está bien así Obito-sensei— Hinata respiraba entrecortadamente— No quiero ser débil— dijo con una mezcla de emociones en su voz.

—No lo eres— la miro a los ojos, Hinata se sonrojo ligeramente y aparto la vista—Tengo una idea, haré un clon y tu pelearas con él, así podré corregir tus posturas— no espero por respuestas e hizo los sellos correspondientes para crear un clon— Kage Bunshin no Jutsu— su clon apareció e inmediatamente se puso en guardia. Cuando el verdadero Obito dio la señal, ambos comenzaron con el combate.

Pasaron toda la mañana entrenando, corrigiendo posturas, tomando consejos para mejorar y sobre todo esforzándose, pero al final habían llegado a su momento favorito del día. Cuando se sentaban bajo un árbol y comenzaban a comer lo que había llevado Hinata, siempre que eso sucedía todo alrededor dejaba de importar.

—Te quedo delicioso— dijo Obito terminando de comer en tiempo récord— Como siempre.

—Arigatou— agradeció y comenzó a guardar los recipientes en su mochila.

— ¿Que tienes ahí?— pregunto viendo como en la mochila de la Hyūga había un recipiente más— ¿Es más comida para mí?—Bromeo.

Hinata se sonrojo al ser descubierta— S-son Dangos para Shisui-kun— confeso jugando con sus dedos.

La sonrisa en el rostro de Obito se desvaneció al escuchar el nombre de su amigo— No deberías perder el tiempo con Shisui— dijo mientras fruncía el ceño— A él solo le gusta coquetear, nunca busca algo serio— explico ya fastidiado con la situación, quería a Shisui como a un primo, quizá un hermano, pero no por eso iba a dejar que Hinata fuera una más de sus conquistas, no soportaría verla triste por culpa de un corazón roto, después de todo, le tenía un cariño muy especial. Tal vez se debía a que últimamente convivían mucho juntos.

Hinata se río ligeramente— Shisui-kun s-solo es mi a-amigo— dijo con pena pero segura de sus palabras.

—Te lo advertí— dijo fingiendo estar triste— después te hará algo y dirás, ¿por qué no le hice caso a Obito-sensei?— intento imitar su voz para después reír junto a ella. Hinata no dejaba de reír por la recién imitación, a veces se la pasaba tan bien a su lado, que no tenía ganas de separarse de él.

—Le p-prometo que me cuidare— dijo sonriendo y despidiéndose con la mano— N-nos vemos mañana Obito-sensei— se despidió.

—Hasta mañana— Obito dejo que Hinata desapareciera de su rango de visión y volteo al árbol donde aún se escondía Neji.

El genio de los Hyūga espero a que su prima se fuera y bajo la mirada a donde se suponía, debía estar el Uchiha, pero cuando vio hacia esa dirección no había rastro de nadie, al principio le extraño, pero al final decidió que era mejor retirarse, ya se había quedado más del tiempo necesario. Estaba dispuesto a irse cuando una especie de remolino comenzó a formarse frente a él.

—Es de mala educación espiar a las personas— Obito apareció frente a Neji, quien retrocedió un poco por la impresión, el pelinegro activo su línea sucesora, las aspas giraron en sus ahora ojos rojos.

Neji abrió los ojos un poco desubicado, no sabía porque estaba recostando en un árbol. Después de unos minutos recordó que había llegado ahí porque seguía a su prima, pero no lograba recordar que más paso. Cansado y aturdido, prefirió regresar a casa.

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Kiba, Shino y Hinata comían en un pequeño restaurante, en él se podía ver gran variedad de comida. Los tres habían pedido algunos mariscos y verduras, ahora esperaban pacientemente su pedido.

—Escuche que habrá otra prueba para acceder a Chūnin— comento Kiba sin perder de vista las reacciones de sus compañeros— Deberíamos intentarlo otra vez.

— ¿Cuándo y dónde será el examen esta vez?— pregunto Shino interesado.

—En unos meses— Kiba pareció pensarlo un momento antes de responder— Tal vez en tres meses, serán en Kirigakure— el castaño dio un suspiro antes de continuar— Ya paso tiempo desde que perdimos en el examen anterior, esta vez lo haremos mejor— dijo animado— Todos mejoramos mucho.

—Kiba-kun tiene razón— dijo Hinata contagiada del entusiasmo de su amigo— E-estoy segura de que esta vez podemos lo-lograrlo.

—Está bien— Shino ajusto sus lentes— Solo hay que consultarlo con Kurenai-sensei— finalizó. Sus compañeros asintieron con aprobación.

— ¿Seguiremos entrenando juntos hasta el examen?— pregunto Kiba nervioso— Es que— dudo— Mi hermana me ayudará a especializarme en técnicas de mi clan— confesó feliz por la idea— No creo seguir entrenando con ustedes, quiero enfocarme en las prácticas con mi hermana.

—Está bien Kiba— dijo Shino tranquilo— Yo también iba a comenzar un entrenamiento aparte— miró a su compañera jugar con sus dedos— Solo hay que entrenar juntos los primeros meses, el último mes será para que practiquemos por separado— propuso.

Kiba y Shino se miraron entre ellos y después fijaron su vista en la chica que estaba a su lado— Me imagino que tú también entrenaras aparte— Kiba observo a la Hyūga un tanto molesto— Con eso de que tienes nuevo maestro— murmuró.

—Kiba-kun— dijo la azabache frustrada— T-te dije que el único co-con el que he entrenado es Neji-niisan— dio un largo suspiro.

—Hinata, haz usado técnicas que Neji no podría enseñarte— Shino ajusto por segunda vez en el día sus lentes y miró a su compañera— Somos camaradas, no deberías tener secretos con nosotros.

—A veces, es bu-bueno te-tener secretos— dijo viendo el suelo.

—No con tus amigos— argumento Kiba disgustado.

—Lo siento— en la cara de la ojiperla se reflejaba la tristeza— Será me-mejor que me va-vaya, se me hace ta-tarde para ir con Shisui-kun— se excusó, pago la parte que le tocaba y se fue sin despedirse.

—No debiste tocar ese tema— dijo Shino para reprender a su impulsivo amigo. Kiba solo rodó los ojos, cansado de esa situación.

Hinata camino hasta la plaza de Konoha, su cara reflejaba tristeza, que después fue cambiada por una sonrisa al ver a su amigo sentado en una banca.

—Hola Hinata-chan— saludo extendiendo su mano y ayudándola a sentarse— Hoy estás más linda que otros días, ¿Te estás dejando crecer el cabello?— dijo intentando coquetear con ella.

Hinata solo asintió sonrojada— Arigatou, Shisui-kun— sonrió alegre.

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Neji entro a la residencia Hyūga e inmediatamente fue llamado por su tío. Se empezó a preguntar qué es lo que le diría. Obviamente su tío le llamo para saber los resultados de su misión. Ahora lo interesante era saber, si Hiashi Hyūga iba a creer en sus palabras. Toco dos veces la puerta del despacho del líder del clan, después de que se escuchará un adelante, Neji entro con paso tranquilo, firme y seguro. Tomo asiento frente a Hiashi y este hablo sin ningún tipo de sentimiento en su voz.

— ¿Cumpliste tu misión Neji?— pregunto.

—No, lo siento, he fracasado— contesto sin dejar de ver los ojos de su tío.

— ¿Hinata te descubrió?— dijo pensando en cómo era eso posible, Neji era un genio, era poco probable que alguien lo descubriera.

—No, seguí a Hinata-sama hasta su lugar de entrenamiento— dijo tranquilo— Me pareció que ella sabía que la estaba siguiendo, o al menos tenía sospechas de que alguien venía tras ella, aunque no hizo nada por detenerme— el castaño paro un momento y observo las reacciones de su tío, como siempre el no parecía inmutarse— cuando llegue la mire entrenar en solitario, aproximadamente una hora— Neji respiro profundamente, esperando que su tío creyera en lo que iba a decir— Después de eso, no recuerdo nada, desperté en el mismo lugar, un poco confundido, no sé qué pasó.

— ¿No recuerdas nada?— Hiashi frunció el ceño, creía saber lo que le pasó a su sobrino, ahora todas sus dudas estaban confirmadas— Esta bien Neji, creo saber lo que hicieron contigo, puedes retirarte.

Neji asintió— ¿Qué fue lo que me hicieron?— pregunto confundido.

—Es probable que usarán el Sharingan para borrar tus recuerdos— dijo ya que esa era la mejor respuesta en la que su mente había trabajado— Eso quiere decir que Hinata si está siendo entrenada, por uno de esos....

—No creo que Hinata-sama este entrenando con un Uchiha— interrumpió Neji al líder del clan— Después de todo, se la paso entrenando sola por un buen rato— defendió a su prima.

—Puedes retirarte— Neji se levantó y se fue a su habitación. Hiashi se quedó pensando por un tiempo, lo mejor era que dejara que su hija hiciera lo que le convenga más. Aunque era difícil aceptar, que ella busco ayuda en otra parte. Pero él era el principal culpable de eso, siempre la trato mal y la hizo sentir inferior a los demás. Por eso prefirió ser entrenada por Neji antes que su propio padre. Por eso ahora prefería buscar a un Uchiha para seguir aprendiendo. Eso sin duda era un golpe a su orgullo.

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Obito se encontraba frente a su mejor amigo, ambos estaban sentados en uno de los tantos locales de la aldea, este sin duda era famoso por la increíble forma en la que sus platillos eran preparados, uno de los mejores establecimientos, cuando de vender carne se trataba.

— ¿Algo te preocupa?— pregunto Kakashi, conocía lo suficiente al Uchiha como para saber cuándo algo andaba mal con él.

—Me preocupa Hinata-chan, hoy iba a salir con Shisui— Obito rodó los ojos al mencionar su nombre— a él solo le gusta pasar el rato, no quiero que la vaya a lastimar— suspiro.

—Ya veo— comento volviendo a leer su libro favorito— Estás siendo un celoso.

— ¿Te refieres a que soy como un padre celoso?— dijo el pelinegro rascando su cuello y riendo nervioso.

—No me refería a eso exactamente— Kakashi clavo su vista en Obito, quien rápidamente miró hacia el suelo.

—Ya hablamos de esto Kakashi— dijo encogiéndose de hombros— Solo son ideas tuyas.

—Supongo— comento sonriendo— ¿En que la entrenaste hoy?— pregunto para cambiar un poco el tema.

Obito se contagió de sus sonrisa— Le estoy enseñando a usar una Katana— hablo feliz.

—Deberías llevarla al País del Hierro— sugirió Kakashi— Ahí podrán encontrar una katana perfecta para Hinata-chan, además ver a los Samuráis de ese país, le servirá para aprender nuevas técnicas— explicó comenzando a comer lo que recién le habían servido.

—Esa es buena idea— el pelinegro puso su mano en su barbilla— ¿Cuánto tiempo crees que sea suficiente?— pregunto curioso.

—Tal vez un mes— contesto llevando un pedazo de carne a su boca, cuidando que nadie viera su rostro.

—Entonces se lo voy a proponer— Obito golpeó con sus manos la mesa y se levantó dispuesto a irse.

—Ahorita debe estar en su cita— Obito se sentó de mal modo por las palabras de Kakashi, quien solo río al ver cumplido su objetivo.

—No es una cita— dijo algo molesto.

—Claro— respondió con sarcasmo— Tal vez, justo en este momento, están compartiendo su primer beso— bromeó para hacer enojar a su amigo.

—Ya basta— Obito se volvió a levantar molesto y puso el dinero de su comida en la mesa— Nos vemos luego— grito y salió corriendo sin dirección aparente.

—Me pregunto qué pasará cuando Hinata-chan sea más grande— dijo en un susurro que se perdió en el aire— ¿Tal vez puedas superar a Rin?— pregunto para sus adentros— La vida de Obito se podría convertir en mi nuevo libro favorito— el ninja copia se rio de su propia broma y termino de comer su platillo.

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Hinata caminaba tranquila de regreso a su casa, recordaba lo agradable que fue su tarde junto a Shisui. Realmente no hicieron mucho, comieron los dangos y otros dulces que Hinata había preparado y conversaron por un gran rato. El Uchiha le había confesado uno de sus secretos, al parecer Shisui estaba interesado en una de sus amigas, eso le provocaba cierta emoción. Formar una pareja, es algo que nunca había pensado, pero era algo que le gustaría realizar.

— ¡Hinata-chan!, Por fin te encuentro— fue sacada de sus pensamientos por los gritos de su maestro— ¿Cómo te fue?, ¿Shisui no te pervirtió?, ¿Verdad?— Obito abrazo a Hinata elevándola del suelo y moviendo la de un lado a otro.

—E-estoy b-bien— dijo sonrojada— No de-debió preocuparse— Obito la soltó y la deposito con cuidado en el suelo.

—Después hablaremos de tus amistades— el ojinegro frunció el ceño— Hay algo que tengo que decirte— la miró tan profundamente que Hinata no pudo evitar el rubor en sus mejillas.

— ¿Qué pa-pasa?— pregunto tímidamente.

—Nos iremos a entrenar por un mes al País del Hierro— los ojos de Hinata brillaron por la emoción— Ya hablé con la Hokage, ella hará parecer que estamos en una misión secreta, así que nadie sospechara nada, ella guardara nuestro secreto— le guiño.

— ¿Cuándo no-nos iríamos?— jugó con sus dedos— Es que v-voy a participar en el e-examen Chūnin que habrá de-dentro de tres meses en Kirigakure— confesó alegre.

—¿Participaras con tu equipo?—ella asintió y Obito colocó uno de sus dedos en su barbilla, tratando de pensar— nos iremos dentro de dos meses, entrenarás conmigo el último mes que queda antes del examen y así podrás usar tu nueva Katana— propuso— Cuando terminemos de entrenar, te llevaré a Kirigakure y ahí te reunirás con tu equipo— finalizó.

—Hai— afirmó con total entusiasmo.

—Vamos, te acompaño a tu casa— la azabache asintió y juntos comenzaron a dirigirse hacia el distrito Hyūga.

—Cada vez falta menos para que llegue Naruto— Hinata se tensó al escuchar el nombre del rubio, Obito solo sonrió— Prométeme, que se lo vas a confesar.

—Yo— la Hyūga dudo en contestar y fue por eso que Obito tomo sus mano, para darle mayor seguridad— Lo prometo— dijo perdiendo su vista en el bello atardecer. El pelinegro la observo en silencio, esperaba que a Hinata le fuera bien, no quería que ella sufriera por culpa del amor, también deseaba hacer de su alumna una mujer más valiente y segura. Para que ella si pudiera confesar sus sentimientos, no como él, que no tuvo el valor para decírselo a Rin.

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Notas de la autora:

Creo que me tarde en actualizar :t una disculpa uvu

*Obito comienza a sentir algo por Hinata, es más como un cariño especial, aún falta para que pueda decir que está enamorado. Aunque Kakashi se está dando cuenta de eso.

*Ya saben por qué Hiashi es tan insistente en saber quién entrena a su hija, es un golpe para su orgullo.

*Shisui está interesado en alguien, y no es Hinata xD

*Obito borro los recuerdos de Neji con su Sharingan, por eso es que no recordaba nada.

*Si Kiba también trato el tema del maestro secreto de Hinata, es porque siente que Hinata los está dejando o podría dejarlos por irse a entrenar con alguien más, como lo hizo Naruto.

Cualquier duda pregunten ;)

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