-Que vamos a hacer?, -Preguntaba observando hacia el balcón

-No lo se, pero por ahora, tendremos que interrogarla, -decia el hombre comenzando a caminar hacia ella

-No!, espera!, mejor yo hablo con ella! –decía dulcemente

-Porque? –preguntaba serio

-Porque estoy segura de que quizás la asustara..., -Pensó la chica- Porque entre mujeres nos entendemos, así que déjamelo amo, -Decía para darle un rápido beso en los labios

-Eres una tonta, -susurro el chico sonriendo

-Y tu un gato tonto, -sonrió

-Pero soy tu gato, Mi querida Bridgette.

Oh lo siento, que maleducada soy, esta historia que les narrare hoy es de nuestra vida. De Adrien y Marinette?, no no!, la mía y de Felix.

Debo admitir que cuando me entere de que paso no deje de llorar, pero Felix tiene razón, no tiene caso que llore, así que me asegurare de contarles que paso, y de cómo Emma entro a nuestras vidas.

Volpino y Kitty noir se encontraban ayudando a los parisinos, los cuales pasaban por un pequeño desastre natural.

Las últimas personas estaban siendo llevadas a los alberges cuando un remolino apareció en el cielo.

"Se que me lo agradecerás"

Dijo un voz llamando la atención de Volpino.

Al voltear, noto como la chica de cabellera azabache y traje negro era arrastrada hacia ese extraño remolino.

-Nath!!, -Grito asustada desapareciendo junto con el portal.

Volpino se quedó sin habla, intentando procesar todo lo que había pasado en menos de 1 minuto.

Emma despertó, su cabeza dolía horriblemente, volteo a los alrededores encontrándose con lo que parecía un jardín, la chica se levantó, apoyándose contra una banca intentando contener los mareos que se hacían presentes.

De pronto, la voz de un hombre llamo su atención, haciéndole voltear asombrada.

--Que haces aquí?, -La voz el hombre era tosca y profunda, algo en ella le atraía notoriamente

La chica comenzó a ponerse nerviosa al ver sus rasgos físicos de aquel hombre, el cual era tan parecido a los recuerdos de su difunto padre, pero todo empeoro cuando vio a una chica acercándose por detrás

-Felix?, -Decía la mujer de cabello negro azulado largo, causando que las lágrimas comenzaran a brotar de los ojos de la menos

La mujer observo preocupada hacia la chica, para después fruncir el ceño hacia Felix

-Que le hiciste insensible! –Dijo alarmada la chica abrazando a la chica

Felix observo algo alterado a ambas chicas, para después suspirar algo cansado

-Mujeres, -musito en voz baja

Después de un momento, el chico dirigió la mirada a la menos la cual comenzaba a tranquilizarse, y su mujer, cuando una corazonada llamo su atención

-cuál es tu nombre? –Dijo amablemente hacia la menor

La chica subió su mirada, encontrándose con los ojos del hombre, los cuales hicieron que su corazón latiera rápidamente

-Emma, Emma Agreste.

Y aquí estamos nuevamente en el principio

Emma se encontraba sentada en el balcón, observando hacia la ciudad tranquilamente, mientras que Felix y Bridgette dialogaban acerca de qué hacer con Emma.

De pronto, una explosión se escuchó en la ciudad, causando que Felix y Bridgette corrieran hacia el balcón junto con Emma.

Los gritos comenzaban a inundar la ciudad, causando que la chica se levantara de su lugar, estirando su puño hacia el frente

-Plagg! –nombro a la creatura negra, llamando la atención de Felix y Bridgette

-Transfórmame! –Dijo terminando el cantico mientras que una luz negra aparecía alrededor de ella

Un traje negro apareció sobre ella, un antifaz del mismo color, orejas y cola, mientras que su cabello se vio envuelto en una coleta.

La chica sonrió confiada, para dirimir su mirada a los adultos, los cuales observaban asombrados lo ocurrido.

-No tardare, -susurro la chica saliendo brincando entre los tejados

Felix sonrió confiado, mientras observaba a la chica irse.

-En verdad es su hija, -Decía sonriendo, -Plagg!, transfórmame! , -Decía el hombre adoptando pose y saliendo del lugar.

Bridgette suspiro mientras observaba como se retiraban, cuando una voz llamo su atención.

-Sera mejor que me retire, -Dijo la dulce voz

-Con cuidado cariño, -musito la mujer.

Una luz roja aprecio frente a ella, la cual después de unos segundos desapareció entre los tejados de parís.

Kitty Noir observo asombrada a la creatura frente a ella.

-entonces esto es un akuma, -musito emocionada

La chica comenzó a correr a su alrededor, captando su atención, este ataco de manera violenta, haciendo que la chica brincara con gran agilidad esquivándolo.

Chat noir logro ver desde la lejanía la acción de la chica, la cual luchaba con gran entusiasmo.

Una alegría pero también enojo cruzo la mente del hombre, al ver cuánto disfrutaba su libertad, pero viendo que la chica se lo tomaba a la ligera, o eso es lo que creyó ver.

La chica ágilmente uso su bastón para impulsarse hacia el cielo.

El hombre observo sorprendido a la chica, cuando la siguiente acción de la chica le causo un mal presentimiento.

La chica activo en el cielo el cataclismo, dirigiéndose al akuma de manera rápida.

El hombre intentaba ver como intervenir, quizás la chica usaba ese método pero si usaba el cataclismo en un akuma, el humano poseído moriría.

El hombre estaba por brincar cuando una mano lo detuvo delicadamente.

-Deberías ver lo que ara. –menciono sin dejar de ver a aquella chica.

Al akuma noto la presencia de Kitty Noir, pero esta no se detuvo, siguió su objetivo sin parar.

Al ver que el akuma estaba por atacarle, dio una vuelta en el cielo cambiando la dirección.

La chica paso su mano delicadamente a un costado del akuma, para después caer a un lado de el.

Un crujido se escuchó, dejando inconsciente al akumatizado, mientras una mariposa de tonos obscuros salía.

La chica observo asombrada a esa pequeña mariposa que solo había escuchado en relatos.

De pronto, un yo-yo atravesó el cielo capturándola.

La chica volteo hacia donde provenía el yo-yo

-Yo te libero del mal, -Pronuncio Kitty Noir sonriendo

-No suelo decirlo, pero mama lo hacía cuando era Ladybug. –unos fríos ojos azules, y cabellera rubia corta, una mirada seria la cual era digna de pocos amigos, la cual portaba un traje rojo con puntos negros, la chica abrió el yo-yo dejando libre a esa mariposa al cual ahora tenía un color blanco

La chica volteo hacia donde estaba el hombre en traje negro, haciendo que Kitty dirigiera su mirada hacia el.

Un escalofrió recorrió su espalda, dejando ver una amplia sonrisa

-Chat Noir.. –grito con notoria emoción.

-Ven vamos, -dijo el hombre sonriendo para comenzar a brincar entre los tejados

La chia de traje rojo volteo hacia la peliazul, para después seguir a aquel hombre.

No paso mucho para llegar al destino, era el mismo lugar donde había estado hace un rato.

La chica miro confundida a su alrededor, para encontrarse con la sonrisa de la mujer que la había consolado.

-Emma, Ella es Charlotte, nuestra hija. –sonrio dulcemente para dirigir su mirada a la actual Ladybug.

Su transformación se fue desvaneciendo, dejando ver las ropas y el rostro de esa chica. Sin embargo algo no cambio, su fría mirada y su seriedad.

-Cariño, necesito que me digas como llegaste aquí, -dijo tímidamente Bridgette

Emma se quedó en silencio un rato, para después deshacer su transformación, dejando salir a Plagg.

-Felix?, Bridgette?, -decía la creatura negra dudosamente

-los conoces Plagg? –pronuncio la chica

-Si, no recuerdas ese relato que te conto Nath?, cuando dos Chat Noir y una Ladybug lucharon para liberar a la otra Ladybug.

Emma sonrió emocionada ante tal anécdota, debido a que después de eso, venia la historia de la boda de sus padres y su nacimiento

-como olvidarlo!, -decia sonriente

-Bien, ellos son el otro Chat y la otra Lady los cuales lucharon con tus padres –Decía serio.

Félix y Bridgette se miraron entre si, confirmando su sospecha.

Era hija de Adrien y Marinette.

Finalmente Bridgette sonrió con confianza, solo faltaba saber cómo la chica llego ahí, pero antes de eso, no pudo evitar hacer una pregunta.

-Y como están Adrien y Marinette?

Plagg volteo de golpe con la chica, mostrando unos ojos llenos de piedad "Oh por favor no", susurro el pequeño captando la atención del hombre.

-Ellos murieron.

Esa frase petrifico a Félix y a Bridgette, mientras que Emma dirigió su mirada hacia ellos.

Puedo contarles lo que paso, pero a cambio, quisiera que ustedes me contaran algo.

Bridgette y Felix no entendían lo que quería decir la chica, causando una mueca de confusión en ellos.

-Emma recuerda a sus padres mayormente por las historias que le cuenta Nathaniel, su cuidador y actual Volpino, debido a que Emma perdió a sus padres cuando tenía alrededor de cinco años. Sin embargo, el no sabe todos los relatos, lo que quiere decir Emma es que les contara lo que ocurrió, si ustedes le relatan algo de sus padres, algo que le permita conocerlos un poco más –interrumpió Plagg

Charlotte escuchaba en silencio todo lo ocurrido, sintió como su corazón se estrujo levemente al escuchar esa historia, sin embargo, lo que más le impresiono, fue la sonrisa que estaba en su rostro, esa sonrisa que no desaparecía después de contar algo tan triste.

Bridgette bajo la mirada levemente, dejando salir un leve suspiro.

-Como sabes, yo estuve prisionera de un akuma, mientras que tus padres y Felix me buscaban, sin embargo, estoy segura de que Felix podrá contarte muchas cosas, es algo frio y serio, pero en el fondo es amable y divertido –pronuncio Bridgette

El rostro de Emma mostro una increíble alegría, para después dirigir su mirada hacia aquel hombre

-sigo sin creer que ustedes son Felix y Bridgette, en verdad es como un sueño, -sonrió dejando caer una lagrima, la cual recorrió su mejilla hasta caer al vacío. –como eran mama y papa? –Pronuncio con un ligero temblor, sin dejar de sonreír

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Las horas pasaron. Mientras que Felix y Emma conversaban de tantas aventuras, a un lado se encontraba Charlotte leyendo un libro tan seria como siempre.

Aun lado, pudo visualizar a su madre, la cual se había asomado al cuarto para indicar que era la hora de la comida.

La chica se levantó primero dejando a su padre y a Emma en el lugar, para después dirigirse con su madre.

-Porque a mi jamás me contaron esas historias? –dijo sin dudar

Bridgette dirigió su mirada hacia la chica con algo de rareza

Charlotte siempre fue como su padre, fría, seria, y sin temor de decir lo que pensaba, sin embargo, su alter ego el cual pensaban que sería extrovertido como el de chat noir o de Bridgette, jamás salió. Era una misma personalidad en dos mundos.

-Lo hacíamos, pero un día dijiste que no querías escucharlos mas –decía Bridgette sorprendida

Charlotte digirió su mirada a su madre, intentando pensar en el momento en que sucedió sin éxito.

-Sabes porque te pedí que no lo hicieras? –preguntaba curiosa

-No lo se, solo dijiste que no te importaba, -Decía su madre dejando salir un leve suspiro

Charlotte intentaba procesar lo ocurrido cual máquina, para después rendirse y ayudar a su madre a servir la cena.

Las pláticas no cesaron durante la cena. Charlotte volteaba de reojo con la chica, la cual en algunos momentos se quedaba sin expresión ante las pláticas de su padre.

Era como si todas las expresiones se le acabaran para tantas aventuras que vivieron juntos

Desde que Oculous le obligaba a secuestrar a Marinette, hasta su última batalla, quien diría que tardarían alrededor de 6 horas en contar tantas cosas, y quien diría que Felix se vería tan feliz al recordar.

Charlotte no tenía celos, ella no creía en esas cosas, tenía confianza en los sentimientos de su padre, sin embargo, lo que más le hacía pensar el por qué se negó a escuchar tales historias.

Al terminar su cena se levantó y se retiró del lugar.

Regreso al estudio de su padre, para sumergirse nuevamente en un libro, cuando su pequeña compañera apareció.

-Charlotte? –decía curiosa Tikki

-Si?, -decía sin separar la vista de sus libros,

-Es raro en ti el que tengas tantas emociones, -Decía riendo la rojiza

Charlotte dirigió su mirada hacia la pequeña, para después dejar escapar una leve sonrisa

-Es interesante solamente, no había conoció a alguien así,

-Te refieres a Emma?, yo conviví un tiempo con su madre, si tan solo el miraculous de la otra Ladybug estuviera activo, estaría segura de que ella le podría contar aún más cosas de la vida de su madre, incluso desde que estaba en secundaria –sonrió la pequeña

La chica se sorprendió al escucharla le dedico una dulce sonrisa, para después sumergirse nuevamente en su libro.

-Emma se encontraba dormida, al saber que Felix había acabado de relatarle todo, un cansancio inundo su cuerpo, haciéndola caer.

Plagg se encontraba sobre su cabeza acariciándola suavemente

-Plagg?

-Si Felix?

-Ella es Feliz?

-Si, a pesar de todo ella jamás estuvo sola, estuve yo, estuvo Nath, y siempre la apoyamos. Ella comenzó a usar el miraculous a esa edad para ser entrenada, El protector del miraculous de Volpino la a entrenado desde entonces.

-Tan joven?

-ella no es tan Débil, es más fuerte de lo que crees, y creo que te lo demostró un poco

Felix sonrió ante la arrogancia del pequeño y de su instinto sobreprotector

-Bien, entonces mañana comenzaremos a averiguar el cómo regresarlos a casa.

-Gracias Felix.

-Descansa Plagg.

La pequeña creatura se quedó a lado de su portadora toda la noche, esperando a que la mañana llegara.

La mañana siguiente, Bridgette llamo a su hija, pidiéndole que cuidara de Emma por ese día, debido a un viaje que debían hacer.

Charlotte acepto despidiendo a sus padres.

La chica subió hacia la habitación donde se encontraba Emma, para encontrarse a la chica cepillando su cabello en interiores.

Charlotte se sonrojo al instante, para después cerrar la puerta de golpe.

-Lo siento!, lo siento! –Grito alterada caminando de un lado al otro fuera de la habitación.

Una pequeña risita se escuchó el interior de la habitación. Segundos después, la puerta se abrió nuevamente, dejando ver a una chica con jeans y una blusa blanca de rallas negras.

-lo siento, también fue mi culpa, no le puse seguro, sin contar que siempre tardo en cepillarlo.

Decía refiriéndose a su larga cabellera.

Charlotte le observo con un ligero sonrojo, para después pasar su mano por los mechones que sobresalían de su cabeza.

Por su preferencia, sus rubios cabellos jamás pasaron de sus hombros, haciéndolo más cómodo y manejable para ella.

Emma sonrió para jalarla dentro de la habitación. La chica se quedó parada mientras que Emma tomaba asiento para seguir cepillando su cabello.

-Anda anda no seas tímida, -decía con alegría para señalarle la silla continua.

Charlotte con timidez se sentó, observando como la peliazul cepillaba su cabello pacientemente.

Después de un rato, la chica termino, para después dirigir su mirada hacia la rubia.

-Y bien?, que aremos hoy? –pregunto entusiasmada

La rubia la miro con sorpresa, mientras intentaba pensar en algo.

Los alrededores?, que tanto puede cambiar parís de una dimensión a otra, una película, serán las mismas películas?, no creo que ella quiera leer libros como ella todo el dia.

-una película?, -susurro nerviosa

-Bien!, vamos!, -Decía tomándola de la mano para salir del lugar.

Charlotte intentaba caminar a su par lo más que podía, mientras que Emma volteaba a los alrededores curiosa.

-En verdad todo es idéntico

Las chicas caminaron hasta el cine, para después comprar las entradas y dirigirse a la película

Risas y escándalos pasaban dentro de aquel lugar.

En cierta ocasión, Emma se acercó a la oreja Charlotte, con una sonrisa algo picada.

-Y yo que pensaba que eras seria, -susurro

Emma volteo de golpe, quedando frente a esos ojos color verdes, los cuales causaron que se estremeciera.

La azabache dejo salir una leve risita para después voltear hacia la película nuevamente.

Al salir, Emma sostuvo nuevamente la mano de Charlotte, esta ves dirigiéndose a un lugar que no reconocía Charlotte.

-Emma?, a dónde vamos? , -preguntaba nerviosa

-nunca has venido por aquí? ,-decía emocionada, -Te enseñare algo genial!, solo esta una temporada, pero si ambos lugares son iguales debe estar!

Finalmente después de pasar algunas calles, unas luces llamaron la atención de Charlotte,

-Una feria!, -decía asombrada

-Si!, Nath siempre me trae desde pequeña!, anda ven!, -decía jalando a la rubia dentro del lugar

Montañas rusas, tasas giratorias, refresco y algodones de azúcar, para al final, finalizar con la hermosa rueda de la fortuna que se encontraba en ese lugar.

Ambas chicas observaban el atardecer que se presentaba frente a sus ojos.

Una sonrisa se dibujaba en los labios de Charlotte ante la tranquilidad de ese dia.

-Insisto, pensaba que eras una persona realmente seria, -Decía Emma sin separar su vista de los ojos de Charlotte.

A chica se sonrojo levemente, dirigiendo su mirada hacia otro lugar, sus dedos comenzaron a jugar un poco ante el nerviosismo, cuando sintió que la rueda paro.

-Bien, es hora de bajar.

Emma salió primero, brindándole la mano a Charlotte para ayudarle, la cual acepto con gusto.

La noche comenzaba a hacerse presente, las chics regresaban a su hogar, hablando del gran dia que habían pasado.

Al llegar, pudieron encontrar a Bridgette y Felix sorprendidos.

-Que ocurre?, -pregunto Emma curiosa

La rubia bajo un poco la mirada, ocultando el notorio sonrojo que apareció en sus mejillas.

Bridgette sonrió, para acariciar suavemente la cabellera de ambas, acto seguido tomo a Felix y se lo llevo del lugar.

Charlotte dejo salir una suave risita, para después sonreírle a la peliazul.

-Bien, nos vemos en la cena, tengo algunas cosas que hacer

Y así fue como Emma termino sola en ese lugar, observando como la rubia subía las escaleras desapareciendo en un pasillo.

Bridgette se encontraba en la cocina, cuando escucho unos pasos, sonrió para si misma, pero al voltear no se encontró al que pensaba.

-Oculous... -susurro

-Crees que esto fue suficiente para reparar todo?, -el chico creo una burbuja, con la imagen de Emma sonriendo, -Procure venir al futuro antes de dejar de ser un akuma, intentando arreglar lo sucedido, claro, para mi solo han pasado unos minutos, pero para ti, 15? O 16 años quizás? – decía dejando salir una leve risita

Bridgette bajo la mirada levemente, intentando ocultar su expresión. –Cuando regresara?

-Esta noche, no puedo depender mucho de mis poderes por ahora, no es seguro.

Bridgette suspiro, cuando quiso dirigir su mirada al chico, el ya no estaba.

La chica sonrió, comenzando a hacer la cena, a pesar de que fue muy poco tiempo, se encariño con la chica, y quería que sus últimos momentos fueran los mejores.

Charlotte se encontraba saliendo del baño, una toalla cubría su cuerpo, la chica tomo una hoja mientras comenzaba a escribir lo que parecía una carta.

Al terminar la cerró y la metió en un sobre.

-Para Emma Agreste, -musito mientras lo escribir

La chica se cambió, y bajo a ayudar a su madre a preparar la cena.

Curiosamente, una sonrisa se mantenía en sus labios. Al llegar con su madre, esta se sorprendió al notar su expresión.

-Mama?, pasa algo?, -decía borrando esa sonrisa de su rostro.

Era obvio que Bridgette no sabía mentir.

La mujer solo se limitó a sonreír, -yo terminare, ve por Emma por favor.

Charlotte sonrió, dejado ver un leve sonrojo en sus mejillas. Claro mama!, -Dijo para después salir de ahí.

La preocupación de Bridgette era aún mayor, como lo afrontaría su hija?

La cena cruzaba con tranquilidad, Emma y Charlotte platicaban y sonreían debido a su gran día juntas, causando en Felix y Bridgette una sonrisa.

Su hija no era infeliz, pero jamás sonreía de esa manera.

La cena termino,

Bridgette propuso que los 4 pasaran un rato en el jardín.

La vista era hermosa, y la noche sacaba a relucir sus mas hermosas y brillantes estrellas.

En eso, una pantalla apareció como por arte de magia, poniendo a Felix en guardia, pero este se tranquilizó, al sentir la mano de Bridgette.

Escenas de las aventuras de ChatNoir y Ladybug, mejor conocidos como Adrien y Marinette, sus peleas juntas, su primera cita, los logros de su madre y padre, El primer día alado de su hija Emma. Y todos los momentos que vivieron Adrien Marinette y Emma desde que ella nació.

Todas esas imágenes quedaban plasmadas en la mente de Emma, causando que las lágrimas comenzaran a salir sin control

Finalmente la imagen termino, Dejando ver en el cielo a un hombre con un raro traje.

Felix lo reconoció.

-Oculous... –susurro para si mismo.

Felix dirijo su mirada a Bridgette, la cual bajo la mirada algo triste.

Felix abrazo a su mujer entre sus brazos, observando todo lo que ocurria, cuando ese enorme remolino apareció en el cielo.

Emma lo reconoció, era el mismo que la atrajo a ese mundo.

Volteo hacia Felix y Bridgette, dedicándoles una dulce sonrisa y un susurro el cual pudieron apreciar perfectamente "Gracias"

Cuando la chica comenzaba a sentir que sus pies se separaban de la tierra.

Volteo con Charlotte, la cual tenía lágrimas en los ojos, al comprender que su tiempo ahí se terminaba.

Emma paso su mano por su mejilla, secando parte de las lágrimas que seguían ahí, mientras que con mano libre entrelazo sus dedos con lo de la rubia.

-Siempre estaré a tu lady my lady, -susurro Emma depositando un beso en su mejilla

Charlotte seguía llorando, al sentir como algo la jalaba lejos de ella.

Rápidamente de su bolsillo tomo una carta, la cual había escrito minutos atrás, entregándosela a la peliazul.

La chica la tomo con alegría, soltando el agarre que tenia con la rubia.

-Emma!, Gracias!, -Grito con todas su fuerzas Charlotte

Lo último que pudo ver fue una sonrisa por su parte. Mientras abrazaba con cariño la carta que había recibido.

-Entonces me dices que viste a Bridgette y Félix?, -Decía Nathaniel asombrado

-Vamos, ya te lo relate 3 veces! , -decía algo cansada la peliazul

Nath soltó una leve sonrisa, - Es que cada vez que me lo cuentas, me dices algo más de Charlotte.

Las mejillas de la chica se tornaron rojas de inmediato, mientras se levantaba de aquel sillón para darle

-Nath, podridas llevarme con el maestro?

Esas palabras sacaron una sonrisa por parte del pelirrojo, -Iremos mañana si te parece bien

Emma sonrió para dirigirse a su habitación.

Al entrar, la chica se tiro sobre su cama, tomando esa carta que le había dado Charlotte, una sonrisa apareció en sus labios la ver su caligrafía.

Emma

No se cuanto tiempo estés aquí, pero estoy realmente feliz de conocerte, no pensé llegarme a encariñar tanto con alguien en tan poco tiempo.

Tikki me dijo que paso un poco de tiempo con tu madre, y que seguramente La Tikki de tu tiempo podría contarte muchas más cosas que cualquier otro, ya que ella estuvo con tu madre desde que comenzó a ser Ladybug. Antes de salir con tu padre, antes de ser la mujer segura que fue,
cuando solo era una chica de secundaria.

Egoístamente espero que falte mucho para que te te alejes de mi, pero cuando vuelvas deberías
decirle a Nath que te llevara con el maestro, quizás podría dejarte hablar con Tikki

Bueno Emma, escribí esto la misma noche que me despedí de ti después de llegar de ese maravilloso día juntas, no se si falte mucho o poco para que te vallas, pero quiero que sepas que jamás me había sentido así con nadie.

Gracias por todo Emma.

Te quiere, Charlotte.

Emma suspiro al terminar de leer nuevamente esa carta, observo hacia la ventana pudiendo apreciar la noche llena de estrellas, muy parecida asa noche que pudo apreciar a su lado.

La chica comenzó a cerrar los ojos, dejándose llevar por los brazos de Morfeo.

El siguiente Epilogo es el ultimo

Epilogo 3. Yo soy Kitty Noir

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