Capitulo 4: La mejor forma de llevarse bien
Ya habían pasado tres días desde la mudanza y todos llevaban sus vidas normales... o eso es lo que trataban de hacer, ya que ciertas personas, desde el día en que tuvieron que compartir habitación no han dejado de estarse peleando a cada hora, por cualquier cosa; ya sea por que uno dejó su ropa tirada, por que no respetaban su espacio o simpmente por que veían su desagradable cara según ellos.
Iguro, Sanemi y Tomioka; desde el momento en que se mudaron, no han dejado de pelear, día y noche peleaban en estos tres días, claramente a muchos les empezaba a cansar esta situación hasta el punto de tener la idea de provocar un triple homicidio, pero Himejima ya dijo que eso no era una opción, por lo que optaron a tener una reunión todos los presentes a excepción de los tres mencionados, a quienes se les vio obligado a ir por las compras para así aprovechar el momento y decidir lo que tenían que hacer para este problema.
Uzui: ¡Muy bien! ¡así que damos inicio a nuestra reunión de hoy! Y el problema que tratamos es... ... ¡¿qué demonios vamos a hacer con estos tres?! ¡no hemos estado tranquilos desde que nos mudamos!
Shinobu: No han dejado dormir y Kanroji ya se queda dormida en donde sea... ¿Kanroji?
Mitsuri: *Dormida*
Shinobu: ¡¡Despierta!!
Mitsuri: ¡Estoy despierta!... ¿de qué me perdí?
Uzui: Eso es lo que me refiero, tenemos que hacer algo.
Muichirou: ¿Y si los mandamos a vivir a otro lugar?
Uzui: Lamentablemente otra casa está muy lejos de nuestro presupuesto.
Shinobu: ¿Si los obligamos a que limpien la casa si vuelven a pelear?
Uzui: ¿Y que la destruyan con otra de sus peleas? ¡ni loco!
Mitsuri: ¡Ya sé! ¿y sí armamos una cena romántica para que se conozcan y se hagan amigos? así ya no pelearan.
Uzui: Kanroji.
Mitsuri: ¿Si?
Uzui: Ya madura.
Rengoku: Lo que acaba de decir Kanroji me ha dado una idea... sólo que no es tan cursi.
*Mientras tanto*
Los tres chicos que anteriormente habían sido mandados a la tienda, ahora se encontraban de camino a casa, pero con cierto disgusto en sus rostros pues la idea de que los manden a los tres juntos no les parecía bien y peor aun si venían peleando en todo el camino.
Tomioka: Todavía no puedo creer que nos hayan prohibido volver a la tienda.
Iguro: ¡¿Y cómo no lo iban a hacer si a Sanemi se le ocurre pelearse con el vendedor?!
Sanemi: ¡Fue culpa de él por decir que parecía anciana! ¡además, no me echen sólo a mí la culpa! ¡también fue tu culpa al dejar que tu tonta serpiente mordiera a un niño!
Iguro: En primera; fue culpa de ese niño al burlarse de él, segundo; ¡al menos es más listo que tú! Y tercero; ¡también fue culpa de Tomioka al tirar todo un estante de comida!
Giyuu: ¡Pero también...! No tengo nada que decir.
... ...
Al poco tiempo volvieron a agarrarse, cuando llegaron se sorprendieron al ver que todos los estaban afuera y al mismo tiempo que ellos se sorprendieron al ver a los tres todos golpeados y desgarrados.
Shinobu: ¿Y las compras?
Iguro: Las teníamos, pero ahora ya no...
Giyuu: Las tiramos...
Sanemi: Y ahora están en alguna parte de la calle...
Todos:... ...
Uzui: Mejor entren, queremos hablar con ustedes.
Iguro: ¿De qué?
Uzui: Sólo entren.
Todos los presentes entraron al hogar para luego ser llevado hasta la entrada del sótano.
Sanemi: ¿De qué querían hablar?
Uzui: Sólo queríamos decirles que... ... esto no es nada personal y es por su propio bien.
Los tres: ¿Qué?
Y sin más que decir, entre todos empujaron a los chicos dejándolos tirados en el sótano, para luego cerrar la puerta y poner algunas tablas para asegurarse que no se les haga fácil destruir la puerta.
Sanemi: ¡¿Pero qué es todo esto?!
Mitsuri: ¡Lo sentimos mucho!
Rengoku: ¡Pero queremos que vuelva la paz en esta casa!
Uzui: ¡Por eso los encerramos aquí hasta que aprendan a llevarse bien!
Al escuchar eso los tres se miraron de mala forma.
Los tres: ¡Ni locos!
Uzui: ¡Bien! ¡entonces se quedaran en la oscura y fría soledad!
Giyuu: Eso ya no es problema para mí.
Uzui: ¡Y les advierto que hay ratas ahí!
Iguro: ¡Eso no es problema! ¡tengo a Kaburamaru! ¡¿verdad?!... ¿kaburamaru?
Uzui: Ah si... ¡se me olvidó decirte que mientras estabas distraído lo secuestramos!
Iguro: ¡¿Que hicieron qué?!
Uzui: ¡Por eso les recomendamos que se empiecen a llevar bien! ¡o sino nunca verán la luz del sol y tú no volverás a ver a tu preciada mascota!
Iguro: ¡Eres un monstruo!
Sanemi: ¡No se atrevan a dejarme aquí en especial con estos dos!
Uzui: ¡Pero si ya lo hicimos!- se van.
Sanemi: ¡¡Malditos!!... ¡¿y ustedes qué?!- dirigiéndose a los otros dos que estaban tirados en el suelo deprimidos.
Iguro y Giyuu: Nada.
Sanemi: ¡Genial! Ahora en vez de lidiar con un Tomioka ahora tengo que lidiar con dos.
Iguro: Me vale.
2 horas después.
Los chicos todavía seguían encerrados en el sótano y claramente se notaban demasiado desesperados, Sanemi no dejaba de caminar de un lado a otro, Iguro estaba en un rincón hecho bola repitiendo una y otra vez el nombre de Kaburamaru, y Tomioka... pues... era Tomioka.
Sanemi: ¡Maldición! ¡2 horas aquí y no nos han sacado!
Giyuu: Como dijeron, no nos van a sacar de aquí hasta que dejemos de pelear... lo que resulta difícil.
Sanemi: ¡Gracias por el dato Tapioka! *sarcasmo*
Giyuu: Es Tomioka.
Sanemi: ¡Ya lo sé imbécil!... ¿y tú qué haces hecho bola? Al menos ayuda a planear algo para salir de aquí.
Iguro: Kaburamaru... Kaburamaru... Kaburamaru.
Sanemi y Giyuu:. . .
Giyuu: Admitelo... lo perdimos.
Sanemi: ¡¡Argh!! ¡es imposible trabajar con ustedes!... ¡y aun así quieren que nos llevemos bien!
*Ruido de tripas rugiendo*
Sanemi: ¡¡Y para rematar tenemos hambre!! ¡¿qué se supone que hagamos ahora?!
Giyuu: Muy fácil... lo que ha estas alturas muchos harían.
Sanemi:... ¿A qué te refieres?... ¿y por qué me miras así?
Giyuu:... ...
Sanemi: ¿Tomioka?
Giyuu:... ... Encuera te.
Se escuchó en toda la casa como Sanemi lanzó un gritó de terror.
Mitsuri: ¿Qué fue eso?
Rengoku: Se escuchó como si alguien lo estuvieran matando.
Todos:... ...
Uzui: Ñeeee.
Mientras con los otros.
Tomioka perseguía por todos lados a Sanemi intentar atraparlo.
Sanemi: ¡Aléjate desquiciado! ¡no me toques!
Giyuu: ¡Esto será algo indoloro sino te resistes!
Sanemi: ¡Me niego!
Giyuu: ¡¿Es por qué no soy amable?! ¡bien seré amable!... ¡¡acerca te bebé!!
Sanemi: ¡¡Eso es todavía peor!!
Iguro: ¡¿Se pueden callar?!
*dejaron de perseguirse*
Iguro: ¡¿No ven que trato de pensar e Kaburamaru?!
Sanemi: ¡Uuuy! ¡discúlpanos! ¡¡no sabíamos que pensabas!!
Iguro: ¡¿A qué te refieres con eso?!
Sanemi: ¡Que has usado tu cerebro para todo, menos en buscar la solución de salir de aquí!
Iguro: ¡Pues lo haría sí Tomioka no tratara de comerte!
Sanemi: ¡No hacía eso!
Giyuu: ¿Ah no?
Iguro y Sanemi:. . .
Giyuu: Que diga... ... no.
En poco tiempo empezaron otra discusión hasta que los paró un ruido extraño.
Sanemi: ¡Sshh! ¿escucharon eso?
*ruidos de pequeño rasguños*
Giyuu: Suena como a...
Iguro: Un pequeño animal.
Sanemi: Ahora que lo dices ¿Uzui no dijo que había ratas aquí?
Giyuu: Creo que...
Los interrumpió una pequeña rata que apareció enfrente de ellos.
Rata:...
Giyuu:... ... ¡¡Un ratón!!- se subió a los brazos de Sanemi.
Sanemi: ¡¡Oye!! ¡¿por qué hiciste eso?!
Iguro: ¿Te dan miedo los ratones?
Giyuu: ¡¡Son pequeños y peludos, y no me hagas hablar de sus colas largas!! ¡¡son horribles!!
Rata: (¿Y a este qué le pasa?)
Tomioka: ¡¡Saquen a esa cosa horrorosa de aquí!!
Iguro: Que llorón... ven pequeña rata horrible, te voy a sacar de aquí.
*la rata muerde a Iguro*
Iguro: ¡Auch! ¡me mordió!- se esconde detrás de Sanemi.
Sanemi: ¿Es enserio?
Rata:... *los mira fijamente*
Los tres: ●__● ...
Rata: *se acerca*
Los tres: *Retroceden*
Al poco tiempo, la rata al darse cuenta de su poder empezó a perseguirlos por todo el sótano.
Sanemi: ¡¿Por qué nos persigue?¡
Giyuu: ¡Es demasiado poderosa! ¡debió darse cuenta de ello!
Sanemi: ¡¿Y por qué corro sí es a ustedes a quien quiere?!
Iguro: ¡Por que de igual forma te va a morder a ti y es posible que esté llena de rabia!
*Se detienen*
Los tres: ¡¡CORRAMOS!!
Y así fue como se hizo una carrera entre rata vs tres gallinas.
Sanemi: ¡¿Saben lo que tenemos que hacer?!
Iguro: ¡¿Darle a Tomioka como sacrificio?!
Giyuu: ¡No!
Sanemi: Aunque no es mala idea... pero ya hablando en serio me refiero a que quizás es mejor dejar a un lado las diferencias y trabajar en equipo.
Iguro: Prefiero dar a Tomioka como sacrificio.
Giyuu: Estoy de acuerdo con Sanemi.
Iguro:... Bien, ya qué.
Giyuu: ¿Y exactamente cuál es el plan?
Sanemi: Bien, tengo una idea.
Mientras con los otros quienes se encontraban jugando cartas tranquilamente.
Himejima: Se escucha el ruido desde
aquí.
Shinobu: Han estado así desde que los dejamos.
Rengoku: ¿Creen que estén bien?
Muichirou: ¿Quién sabe?
Mitsuri: Espero que no se maten entre sí.
Uzui: Si lo hacen... ¿qué tiene?
... ...
Mitsuri: Oye Uzui... ¿qué no Sanemi tenía tu billetera?
Uzui:... ... ¡Eso es suficiente!- se levanta de su lugar.- ¡voy por ellos!
Mitsuri: ¡Pero dijiste que...!
Uzui: ¡¡Sé lo que dije!! ¡pero si se matan entre sí ya no me devolverá mi billetera!!
Todos se fueron atrás de Uzui hasta el sótano.
Sanemi: ¡Bien! ¡mientras está distraída hay que aprovechar para destruir la puerta!
Giyuu: ¿Pero qué no tenía tablas la puerta?
Sanemi: Si, ¡pero podremos destruirla con esto!- saca un gran y gordo tubo de metal.
Iguro: ¿De dónde sacaste eso?
Sanemi: Las tuberías de esta casa no están bien, fue más fácil de lo que creí... ¡ahora ayúdenme a agarrar vuelo!
Los dos se pusieron de tras de él.
Sanemi: ¡1!... ¡2!...
Iguro: El ratón.
Giyuu: ¡¡Aaaaaaahh!!
Tomioka corrió antes de que Sanemi terminara dirigiéndose a la puerta.
Shinobu: ¿Seguro que es bueno esto?
Uzui: ¡Muy seguro!
Muichirou: ¿Escuchan eso?
Rengoku: Suena como a...
Y enfrente de ellos, la puerta fue destruida por los que estaban atrapados adentro logrando así salir del sótano.
Sanemi: ¡¡Lo logramos!!
Iguro y Giyuu: ¡¡Siiii!!
Entre los tres se abrazaron como si hubieran salido del manicomio, mientras que los otros los miraban como bichos raros.
Muichirou: Al parecer funcionó el plan.
Rengoku: Muy bien diría yo.- mirando la puerta toda destruida.
*Kaburamaru salta hacía Iguro*
Iguro: ¡¡Kaburamaru!!- agarra a su serpiente.- ¡te extrañe tanto! ¿quién es una buena serpiente, quién es una buena serpiente?
Giyuu: Creo que es el más afectado.
Uzui: ¡¡Noooo!! ¡la puerta! ¡¿ahora cómo vamos a arreglarla?!
Giyuu: ¿Cómo que con qué? ¡pues obvio que con tu dinero!
Uzui: ¡¿Por qué a yo?! ¡si ustedes la destruyeron y además Sanemi se robó mi billetera!
Sanemi: ¡¡Eso te pasa por zorra!!
Uzui: ¡¡Yo les enseñare a respetar mocosos!!
Uzui empezó a perseguir a los tres por toda la casa.
Shinobu: Bueno, al menos se llevan bien.
Muichirou: ¿De qué le estaban huyendo esos tres?
Se quedaron mirando hacía el sótano hasta que apareció la rata entre los escombros.
Todos/Muichirou: ¡¡Un ratón!!- salieron corriendo menos Muichirou quien se quedo mirando a la rata.
Muichirou:. . .
Rata:. . .
Muichirou: ¿Tregua?
Rata: (Tregua).
Los dos se fueron por sus caminos.
*En la noche*
Sanemi: Quién diría lo que pudimos hacer trabajando juntos.
Giyuu: Creo que hasta yo me sorprendí.
Iguro: Neeee... tengo que admitir que fue divertido... omitiendo la parte de que una rata me mordió.
Sanemi: Hablando de eso, ¿es seguro dejar así como sí nada esa mordida?
Iguro: No creo que sea tan grave... como sea a dormir.
*A la mañana siguiente*
Sanemi: ¡Se los juramos! ¡lo encontramos así esta mañana!
Iguro se encontraba en el suelo con los ojos rojos y espuma saliendo de su boca.
Giyuu: Al final sí tenía rabia esa rata.
Sanemi: Sabía que no era buena idea dejar esa mordida para después.
Continuara...
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