Pedido por Notengo_
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Uzui: Rengoku... Una pregunta.

Rengoku: No Uzui, los pingüinos no vuelan.

Uzui: ¡No me refería a eso!

Rengoku: ¿Entonces qué?

Uzui: Si siempre te niegas a que yo conduzca, ¿por qué ahora yo estoy conduciendo y tú no?

Rengoku: Es por que decidí darte otra oportunidad y-

Uzui: ¿Te multaron, verdad?

Rengoku: ... ... No vi a una viejita en silla de ruedas.

Uzui: ¡¿Es en serio?!

Rengoku: ¡Fue culpa de ella! ¡ella se metió mientras yo manejaba! ¡ni siquiera le hice tanto daño sólo se hizo las desmayada para que a mi me llevaran preso!

Uzui: Y luego dicen que Himejima es el ciego.

Siguieron con su viaje en silencio, pero a lo largo pudieron ver a alguien que se les hacía conocido.

Uzui: Rengoku, ¿por qué más adelante hay alguien que se parece a ti, pero en pequeño?

Rengoku: ¿Alguien igual a mí?

Uzui: Olvídalo, lo voy atropellar. - centrando se en el pobre chico.

Rengoku: Espera un momento, ¡detén el auto! - tomó el volante.

Uzui: ¡¿Qué?!

Frenaron de golpe y Rengoku se bajó del auto para ver quién era y su sorpresa fue que era...

Rengoku: ¡¿Senjuro?!

Senjuro: ¡¿Hermano?! - corrió hacia su hermano para abrazarlo.

Rengoku: Senjuro ¡¿pero qué haces aquí?! ¿No estabas con papá?

Senjuro: Si, pero luego de que te fuiste me quedé preocupado por que ya no supe más de ti y papá no deja de beber entonces me escapé de casa.

Rengoku: ¡¿Que hiciste qué?!

Senjuro: Sé que estuvo mal, pero ya no podía esperar más y vine.

Uzui: Oye, oye, es lindo que vuelvan a estar juntos, pero ¿cómo diste con nuestra ubicación?

Senjuro: Pues no fue tan difícil sólo bastó con ver las noticias y ver cuáles lugares ha habido una serie de desastres, en donde hay destrucción significa que ahí están.

Uzui y Rengoku: . . .

Uzui: Eso es cierto.

Rengoku: En fin, ¿qué piensas hacer ahora?

Senjuro: Pensaba en quedarme contigo.

Rengoku: Hermanito, sabes que yo te quiero... Pero no te puedes quedarte conmigo, en donde vivimos ya somos 9, uno más y ya estaremos muy apretados... Y ni mencionar los gastos que tenemos.

Senjuro: ¿En serio?

Rengoku: Oye, ¿y por qué no vuelves a casa?

Senjuro: No quiero, papá cada vez está peor.

Uzui: Con que tu padre sigue bebiendo.

Senjuro: Si...

Rengoku: Te entiendo, pero igual no te puedes quedar lo que tienes que hacer es enfrentar a papá.

Senjuro: Lo hice una vez, pero no salió bien.

Flashback...

Senjuro: Este... ¿Papá? - se acercaba tímidamente a su padre. - yo quiero.

Shinjuro: Cállese y traeme más. - dándole el vaso de vino.

Senjuro: . . .

Fin del flashback...

Uzui: El hecho de que te atrevieras a hablarle a tu padre no significa que te enfrentas te a él.

Senjuro: ¿En serio crees eso?

Rengoku: Mira Senjuro, ¿qué tal si sólo por hoy te quedas? Pero al final del día te tienes que ir, papá debe de estar preocupado por ti.

Senjuro: ¿Tú crees?

Rengoku: ¡Claro! No creo que papá sea tan irresponsable como para no darse cuenta de que no estás.

Uzui: Pero si una vez me dijiste que cuando naciste te confundió con un mango que hasta incluso lo tenía en tu cuna y con tu ropa puesta.

Rengoku: Bueno si, pero-

Uzui: Y te quedaste en el hospital por una semana.

Rengoku: Si, pero-

Uzui: Y que cuando eras niño te perdió en el centro comercial sólo para darse cuenta que te dejó en una perrera.

Rengoku: ... Está bien, entiendo tu punto, pero igual tiene que volver a casa.

Uzui: Bien, entonces súbelo al auto y hay que llevarlo a casa.

Rengoku: ¿Qué? ¡No! Claro que no.

Uzui: ¿Por qué?

Rengoku: Por qué allá están los demás y mi hermano es muy puro para que lo corrompan.

Uzui: ¡Ah! ¿Estás diciendo que somos unos animales que corrompen niños?

Rengoku: Pues tú una vez les enseñaste a unos niños cómo se hacían los bebés así que tú dirás.

Uzui: ... ... Está bien, entiendo tu punto, ¿pero a dónde lo llevamos?

Rengoku: Pues hay que entretenerlo mientras se acaba el día.

Uzui: Uh lo entiendo, Kyojuro junior súbete al auto.

Senjuro: E-está bien.- se subió al auto y los otros también lo hicieron.

Uzui: Pero antes quisiera saber qué fue de tu vida.

Senjuro: . . .

Uzui: ... ... *se acerca al oído de Rengoku* ¿tu hermano es joto!?

Rengoku: Claro que no... ... ¿Eres joto o no?

Senjuro: ¡Claro que no!

Uzui: No importa, mejor sigamos.

Rengoku: ¿A dónde vamos?

Uzui: Tú tranquilo, los tres tendremos una salida de chicos, le mostraremos a tu hermanito los mejores lugares de aquí.

Senjuro: ¿Es buena idea?

Uzui: Niño, cosas viniendo de nosotros nunca es buena idea.

Rengoku: ¿Qué tienes planeado?

Uzui: Si queremos que tu hermano se enfrente a su papá, hay que prepararlo para eso... *risa malvada*

Rengoku y Senjuro: . . .

Rengoku: Esto no suena para nada bien.

Uzui arrancó el auto y se fue sin rumbo hasta llegar a un callejón sin salida y sin dejar de reírse como loco.

Rengoku: Uzui.

Uzui: *Sigue riéndose*

Rengoku: ¡Uzui! - le dio un golpe en la cabeza.

Uzui: ¡¿Qué quieres?!

Rengoku: ¡¿Qué demonios hacemos aquí?! ¡No has dejado de reírte desde que nos fuimos!

Uzui: Ah si, Senjuro, bájate del auto.- los tres se bajaron del auto.

Rengoku: ¿Por qué estamos aquí?

Uzui: Ya lo verás... ¡Glotón!- gritó hacia el callejón y al poco tiempo empezaron a llegar varios gatos.

Rengoku: Un momento, ¿esos gatos no son los que le roban el dinero a Tokito y lo meten a la basura?

Uzui: Exacto, Rengoku junior tú te vas a pelear con uno de esos gatos.

Senjuro: ¡¿Qué?! ¿T-te refieres a ese de ahí? - apuntó a un gatito muy peludo y lindo.

Uzui: ¿Qué? ¡No!... Sino con ese. - apuntó a un gato muy grande y gordo que salía de la oscuridad.

Rengoku: Wow... Ese si es un gran gato.

Uzui: Saluda a Glotón.

Senjuro: ¿H-hola?

Uzui: Bien... - metió un pescado en los pantalones de Senjuro y lo aventó hacia los demás gatos. - buena suerte.

Sólo se escuchaban varios gruñidos de gatos enojados, golpes, arañazos y algunos gritos de Senjuro pidiendo ayuda.

Rengoku: ¡¿Estás loco?!

Uzui: Si... Lo estoy.

Rengoku: ¡¿Por qué se te ocurre hacer esto si lo están haciendo pedazo?! ¡Mira!

Senjuro: ¡Ayuda! - se trataba de arrastrar hacia ellos, pero los gatos lo agarraban y lo arrastraban hacia ellos nuevamente.

Uzui: Déjalo, luego de un rato se aburren y lo dejarán en paz.

Poco después los gatos se cansaron de Senjuro y lo tiraron por ahí para luego irse.

Senjuro: A-ayu-den... me. - estaba todo golpeado y arañando, su ropa quedó completamente destrozada por los gatos.

Uzui: ¿Lo ves?

Rengoku: *Lo mira enojado*

Uzui: Ven, hay que llevarlo al siguiente.

Senjuro: ¿Todavía hay más?

Uzui: Si.- lo subió al auto y se fueron a otro lugar.

Rengoku: ¿Ahora a dónde vamos?

Senjuro: Espero que sea a un hospital.

Uzui: Es una sorpresa.

. . .

En un jardín de niños...

Rengoku: ¿Por qué aquí?

Uzui: Normalmente todos los fines de semana nos reunimos unas cuantas personas en los almacenes para hacer apuestas clandestinas sobre peleas de bebés.

Rengoku: ... ¡¿Que tú qué?!

Uzui: ¡N-nada! Olviden lo que dije y vengan.- se los llevó a unos almacenes que estaban detrás del jardín de niños y en ellos habían unos bebés encerrados en unos corrales para bebé.

Rengoku: Uzui, ¿qué es todo esto?

Uzui: Un momento, Rengoku junior ¿entra aquí? - abriéndole la puerta del corral.

Senjuro: Es Senjuro.

Uzui: Me vale cómo te llames, entra. - lo pateó hacia el corral.- bien, ahora pelea con eses bebés.

Senjuro: ¡¿Qué?! ¡¿Cómo que peleé con ellos?! ¡Si son solo bebés!

Uzui: Niños, ¡no te dejes engañar por las apariencias, ya sea niño o niña en el fondo son bestias con ganas de sangre!... ... Aparte de que metí unos dulces a tus bolsas así que irán por ellos.

Senjuro vio cómo los bebés se acercaban a él por los dulces que traían, parecían pequeñas bestias queriendo ir por su presa.

Senjuro: ¡No! ¡Alejense!

Rengoku: Uzui esto es malo.

Uzui: Claro que no, ¡niño! ¡Defiendete!

Senjuro: ¡¿Y cómo lo hago?!

Uzui: ¡No lo sé! ¡Patéalos o golpealos! ¡Yo qué sé!

Senjuro: ¡Pero no puedo golpear bebés!

Los bebés se lanzaron contra Senjuro para derribarlo y subirse arriba de él.

Uzui: Valla, enserio que ese niño no sabe defenderse.

Rengoku: ¡Uzui!

Senjuro: ¡Esto no es muy amable niños!

Rengoku: ¡Lo están agarrando de las greñas!

Poco después los bebés empezaron a irse pues lograron agarrar los dulces que tenía Senjuro dejándolo todavía peor.

Rengoku: ¡Senjuro! - corrió hacia él.

Senjuro: Son peores que los matones de la escuela.

Uzui: ¡No seas llorón! ¡Sólo fueron unas cuantas pataditas y tirones de cabello! No fue para tanto.

Senjuro: ¡Como a ti no te pellizcaron una nalga!

Uzui y Rengoku: ¿Qué?

Senjuro: ¡Nada!

Uzui: Pero oye, ya estás aprendiendo, me acabas de alzar la voz y significa que vamos por un buen camino, ¡al siguiente nivel!

Senjuro: ¿Todavía más?

Uzui: Cállese y no llore.

En el zoológico...

Rengoku: ¿Y ahora qué más?

Uzui: Fácil, ¿cuál es el animal que más te da miedo?

Senjuro: Eran los cocodrilos... Pero ahora con lo que acaba de pasar quizás ahora sean los gatos.

Uzui: ¡Tengo un plan!

Llegaron a un hábitat de cocodrilos.

Senjuro: ¿Qué hacemos aquí?

Uzui: Ya lo verás.- agarró al pobre se Senjuro y lo lanzó hacia los cocodrilos.- ¡Ahí te ves!

Senjuro: ¡Ayuda!- los cocodrilos empezaron a atacarlo y el pobre sólo trataba de escapar.

Rengoku: ¡¿En serio Uzui?!

Uzui: ¿Qué? Se tiene que independizar.

Rengoku: ¡Pero no así!

Uno de los cocodrilos lanzó a Senjuro y calló sobre los brazos de Rengoku.

Senjuro: Por favor... Has que pare.

Uzui: ¡Nunca! - lo tomó nuevamente y se lo llevó.

Rengoku: ¡Uzui!

Senjuro: ¡¿No podemos parar a un baño?!

Uzui: ¿Es urgente?

Senjuro: ¡Si!

Uzui: ... ... Está bien, pararemos en un baño.

Senjuro entró a un baño público mientras que Rengoku se quedó afuera y Uzui también entró para retocarse el maquillaje.

Uzui: Cielos... ... Si que soy guapo.- se miraba al espejo hasta que por accidente se ensució un poco. - m**da. -pero pronto sintió que alguien lo estaba mirando y era Senjuro.

Senjuro: . . .

Uzui: ... ... Tú no escuchaste nada... ¿De acuerdo?

Cuando salieron volvieron al auto y siguieron con su camino.

Senjuro: ¿Ahora a dónde vamos?

Uzui: Pronto lo sabrás, esta vez será el más extremo y peligroso que hallan visto...

En el parque...

Rengoku: ¿El parque?

Senjuro: Bueno... Al menos este es tranquilo.- vio cómo un pato se le acercaba.- hola amigo.

Pero esa tranquilidad fue interrumpida por el pato quien empezó a picotear a Senjuro y pronto más patos se unieron a la acción.

Sejuro: ¡¿Qué le pasa a esta ciudad?! ¡Ayúdenme!

Rengoku: ¡No lo puedo creer! ¡Esto ya fue demasiado! - agarró un palo y empezó a golpear a los patos para que se fueran, pero sin querer golpeó a Senjuro.- ¡Ah! ¡Perdóname hermanito!

Senjuro: Descuida... Al menos ya se fueron.

Uzui: Muy bien, gracias a ti se echó a perder el plan... Tendremos que esperar al siguiente.

Rengoku: ¡No Uzui! ¡Ya no más!

Uzui: ¡¿Quieres que se independice o qué?!

Rengoku: ¡Quiero que mi hermano sea capaz de lidiar con los problemas por su propia cuenta! ¡Pero no se logrará nada si sólo lo pones a pelear con cualquier cosa, en lugar de eso le estás provocando más traumas! ¡Míralo! Ya ni siquiera le encuentro forma... Mira, al principio pensé que si lo llevaba a casa los demás serían un mala influencia... Pero tú eres peor.

Uzui: ¡¿Y hasta ahorita te das cuenta?!

Rengoku: Al principio tenía la idea de seguirte el juego por que pensé quizás sería algo bueno, pero ya vi que no, así que ya no haremos más esto.

Uzui: ¡Pues yo digo que sigamos con mi plan! - toma a Senjuro y lo pone de su lado.

Rengoku: ¡Y yo digo que no lo hagamos! - toma a Senjuro y lo jala bruscamente.

Uzui: ¡Yo digo que si!

Rengoku: ¡Y yo digo que no!

Sin darse cuenta los dos empezaron a golpear a Senjuro durante su discusión hasta el punto de tirarlo al suelo y pisarlo sin querer.

Uzui: Oye, ¿no sentiste algún crujido?

Senjuro: ¡Suficiente! - se levantó del suelo enojado

Uzui: Niño, ¿te puedes callar? Estamos peleando por cuál lado seguir.

Senjuro: Miren, les agradezco lo que trataron de hacer por mí, pero esto sólo va para peor, el ponerme a pelear con animales y bebés no resuelve nada, posiblemente eso no sea lo mismo, pero de igual forma encontraré la manera de enfrentarme a papá sin la necesidad de la violencia.

Uzui y Rengoku: . . .

Uzui: Rengoku junior... Ya no necesitas de mis enseñanzas ¡tú ya puedes defenderte solito!

Senjuro: ¿Qué?

Rengoku: A lo que nos referirnos es que pudiste decir lo que pensabas... Y yo siendo tu hermano sé que no podías ni hacer eso.

Senjuro: ¿Eso significa que-?

Uzui: Ya no necesitas más de nosotros, ya te puedes ir.

Rengoku: Ven, te acompañamos a la estación del tren.

Los dos se llevaron a Senjuro a la estación del tren.

Senjuro: Supongo que ya me tengo que ir, aunque me alegró haberte vuelto a ver.

Rengoku: A mi igual...-le dio un abrazo. - A mi igual.

Senjuro: Pero también hubiera querido conocer a los demás.

Rengoku: JAJA... Créeme no querrás conocer a los demás, uno tiene una serpiente de mascota, una es muy cursi con el amor, otro es un depresivo, uno es un niño que no recuerda ni su nombre, otra es una loca con ganas de envenenar todo, otro un loco pirómano y el único que es más normal es ciego, así que no te lo recomiendo suficiente tienes con Uzui.

Senjuro: ... ... Está bien.

Rengoku: Será mejor que te vallas ya, tu tre ya llegó.

Senjuro: Está bien, ¡hasta pronto! - se subió al tren.

Rengoku: ¡Salúdame a papá!

Senjuro: Claro.- fue lo último que dijo luego de que el tren partiera.

Uzui: Valla, es lindo ver cómo crecen siguiendo tus enseñanzas.

Rengoku: Tú mejor Cállate.

Luego de un rato nos encontramos con Senjuro quien pudo volver a casa sin ningún problema y estaba listo para enfrentar a su padre

Senjuro: Papá... Luego de haber salido de casa pensé mejor las cosas y quiero hablar contigo.

Shinjuro: ... ¿Senjuro?... ¿No estabas en casa? Pensé que estabas en el baño y que no salías por que estabas estreñido.

Senjuro: ¿Qué? ¡No! No estaba en el baño... Yo-

Shinjuro: Cómo sea, ve y traeme más. - le dio el vaso de vino y se fue.

Senjuro: ... ... M**da.

Mientras con Rengoku...

Rengoku: . . . - volteó a mirar fijamente a Uzui.

Uzui: ¿Qué miras tan-?

No pudo terminar por qué Rengoku se abalanzó contra este y empezó a golpearlo.

Uzui: ¡¿Qué te pasa?! ¡En la cara no! ¡En la cara no!

Sanemi: ¡Chicos! ¡Vengan! ¡Uzui y Rengoku se están peleando! ¡Traigan la cámara!

Iguro: ¡Apuesto 500 a que gana Rengoku!

Muichiro: *Saliendo y rodando desde el armario* ¡Dale Rengoku!... ¡Dale!

Continuará...