Nos volveremos a ver. Porque eres

Mi hijo

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Los demonios no envejecen. No necesitamos dinero para comer. No nos enfermamos. No morimos. No perdemos nada. ¡Y los demonios fuertes y hermosos pueden hacer cualquier cosa!.

En más de cien años hice lo que se me diera en gana; nunca tuve miedo de envejecer y perder mi belleza, porque los demonios no envejecen, nunca necesite gastar dinero y vivir de lujos, porque los demonios no necesitan lujos, nunca le tuve miedo en contraer una enfermedad, porque los demonios no nos enfermamos, nunca tuve miedo en ser asesinada, envenenada, apuñalada o torturada, porque los demonios somos fuertes e invencibles.

Junto a mi hermano tuve una vida perfecta, sin preocupaciones, sin problemas, todo lo tomaba sin remordimiento, sin piedad. Mi vida fue fácil en el distrito rojo, la belleza, lo que es todo para una mujer nunca fue un problema para mí.

Devore a incontables personas, en su mayoría mujeres bellas y hermosas, debo nutrirme bien para ser más hermosa. Es asi como elimine a mis rivales como cucarachas y los deje sin nada como las viles ¡ratas! Que son ¡todos!.

Pero quería más, quería ser más fuerte, más bella, más deseable, mucho más. Cuando llegaron los cazadores de demonios, me divertía ver como ponían resistencia a su misera existencia; ver su agonía, su desesperación, era tan divertido, pero despues aparecieron los pilares, siete pilares muertos por mi mano y donde llegue a ser una luna superior junto a mi hermano compartiendo el mismo puesto.

Mi querido hermano es el ser más genial que conozco, lo quiero mucho, mi única familia, mi única sangre, no tuve a nadie más y mucho menos si recuerdo teniendo una madre o un padre, pero que importa, mi querido hermano lo es todo para mí, estuvimos juntos por mucho, mucho tiempo. Lo tenía todo, fuerza, belleza y poder, sin embargo, todo cambio cuando llegamos a la era taisho.

Ya no era la misma, ya no tenía ganas de comer personas, ya no tenía ganas de matar sea por diversión o por aburrimiento, no sabia que estaba pasando conmigo, no lo entendía; cada vez era más impulsiva y violenta con todos, incluido mi hermano, me sentía sola, sentía tristeza, sentía dolor, no sé porque soy asi, no lo sé, me sentía, incompleta.

Mi hermano intento hablar conmigo, ayudarme, pero, ¡no necesitaba su ayuda!, necesitaba algo más, sin importar lo que sea, lo necesitaba, algo que, que me ayudara de verdad, esta vida inmortal es, ¡aburrida!.

Aburrida, ¡soy aburrida!, cada vez que escucho esa palabra pierdo el control y no me contengo para nada, esa palabra me molesta mucho. Tengo una vida perfecta, una vida fácil junto a mi hermano, pero aun asi ¿qué me falta?. Esto es absurdo, esto es molesto, es insoportable, es ridículo, ¿qué me falta? ¿QUE ME FALTA?, ¡¿QUE ME FALTA?!. Sea lo que sea, lo necesito, lo necesito ¡AHORA!. Por favor, lo necesito.

"Mi pequeña sorpresa"

Media noche, me encuentro en un pueblo aledaño en el tejado de una vivienda sentada de piernas cruzadas observando todo a mi alrededor, muzan-sama me ordenó a mí y a mi hermano buscar ¡otra vez! el lirio de la araña azul, pero esta vez en un pueblo totalmente cubierto de nieve, asi es nieve ¿Cómo se supone que encuentre al menos una misera flor por aquí?. A veces pienso que mi jefe está enamorado de esa flor.

Aun asi sinceramente salir de vez en cuando lejos del distrito me ayuda a olvidarme de todo, de mi hermano, de mis problemas internos y del mismo muzan-sama, pero si tan solo este momento fuera para siempre; me puse de pie, seré mis ojos y solo sentí por un corto tiempo el fuerte viento chocando con mi piel descubierta debido a mi vestimenta, el viento era tan fuerte que levantaba mí cabellera por detrás como si estuviera preparada para volar, me sentía libre, si fuera humana otra vez, estaría temblando de frio y suplicando por algo de calor, pero soy un demonio y esto para mi es refrescante y sobre todo cálido, esto para mí es, paz, pero por desgracia la paz no dura para siempre.

- ¡maldición que frio hace aquí!, recuérdame porque estamos aquí -

Voltee mi mirada a mi lado izquierdo y ahí estaba mi hermano gyuutaro, que, a diferencia de mí, él estaba temblando por el frio, tanto que juraría a verle visto un bigote de nieve en su labio superior.

- muzan-sama nos pidió buscar el lirio de la araña azul en este pueblo nevado – le dije sin rodeos

- sí, si, lose, pero porque estoy afuera – hablo a regañadientes

- porque necesito tú ayuda para buscar más rápido y porque yo lo digo – con frustración - te quedo claro -

– como sea -

Mi hermano puede ser fastidioso e insoportable algunas veces, pero igual lo quiero mucho, aun si peleamos, nos atacamos o nos insultamos nos queremos mucho, es algo de hermanos que no puedo explicar, pero a pesar de todo eso lo quiero mucho.

- Dime ¿encontraste algo por los barrios de este pueblo? – le pregunte

- no, solo nieve, nieve y más nieve – dijo asi sin más

– solo eso – le respondí algo decepcionada

- espera creo que vi algo por ahí –

– ¡enserio! Que es –

- más nieve – lo dijo con un tono de burla

- Si serás un... - me estaba conteniéndome un poco – pu-puedes tomarte esto en serio

- no, solo hay que irnos de aquí y le decimos al viejo que no encontramos nada –

- a veces me pregunto porque muzan-sama no te aniquila por decirle viejo – tenía cierta impresión de lo verdaderamente valiente que era mi hermano o lo verdaderamente estúpido que es

- ¿entonces nos vamos? –

- no –

Seguimos buscando en cada parte del pueblo a pesar de ser un lugar nevado, donde básicamente nada crece ahí y ¿cómo muzan-sama sabe que aquí puede haber un lirio azul o quien se lo dijo?, no tengo idea, pero desobedecerlo sería la muerte inmediata. Me detuve en medio de un camino de tierra que tenía como salida a una montaña repleta de árboles igualmente cubiertos de nieve.

- Esto es imposible – pensaba – oye hermano -

- ¡Que! ¡Qué quieres! -

- ¡no me hables así!, ¡Que es lo que sucede contigo! –

Mire a mi hermano fulminándolo con la mirada mientras que él me miraba con total odio.

- estamos caminando para nada daki, tienes idea de lo divertido que puede ser divertirnos con estas personas refugiadas en sus casas, podemos disfrutar de este momento de hermanos como en los viejos tiempos, pero tú... –

Deje de escuchar a mi hermano y solo lo que de mirando con total desprecio, el solo piensa en jugar, matar y comer, pero una cosa me quedo en la cabeza, "disfrutar de este momento de hermanos como en los viejos tiempos", ¿cuánto a pasado desde la última vez que nos divertimos?, yo, no lo se.

- pero tú quieres terminar esta misión que nos mandó el viejo, te has vuelto una "aburrida" –

Aburrida, me dijo aburrida, como, ¡cómo se atreve!, esto viniendo de mi hermano, solo, solo me ponía, triste.

- ¡U-una, aburrida – algo izo click en mi cabeza y termine con la mirada baja - tú, tú, ¡eres de lo peor hermano! ¡Te odio! -

Levante mi mirada gritando lo último y solo corrí hasta el bosque en la montaña, escuché a mi hermano gritar mi nombre varias veces cuando comencé a correr y termino siguiéndome.

- ¡porque me sigues piérdete de una vez! –

- ¡daki!, ¡lo siento está bien!, ¡solo deja de correr! –

- oblígame – comencé a incrementar mi velocidad adentrándome más hasta pasar por una colina de subido, pero mi hermano todavía está detrás mío

Cada vez me adentraba más por el bosque y mi hermano me seguía por detrás, no sé por cuanto tiempo estuvimos corriendo, pero por mi velocidad y la de mi hermano terminamos chocando el uno del otro, rodando y formando una bola de nieve de ambos, para luego terminar chocando a un árbol que logro resistir el impacto.

Termine media vuelta con mi cabeza recostada en el suelo y mis piernas elevadas por encima mío teniendo una postura que a cualquier hombre le gustaría ver, me levante, pero con una jaqueca molesta y comenzaba a recuperarme poco a poco. Mire por todos lados buscando a mi hermano y cuando lo vi, lo encontré clavado en el suelo como si un animal grande lo hubiese aplastado, tenía el sentimiento de preocupación y placer, por parte que se lo merecía y por otra parte que me importaba de todas maneras él.

- Esta noche no puede ser peor – hable abiertamente en todo el lugar, mientras veía a mi hermano levantarse con un poco de nieve en la parte delantera de su cuerpo

- joder, ¡te dije que te detuvieras! –

- sigue con lo mismo – pensé

- me tienes hasta los ******, ¡tienes idea de todo el maldito tiempo que tenemos aquí sin tener ninguna pista de esa florecita esa, tener que soportar este frio de ****** y ahora seguirte hasta esta montaña de ****** para terminar cayendo y terminar perdidos como unos perros!

¿Qué es esto?, solo escuchaba a mi hermano quejándose por todo, desde nuestra llegada a este pueblo, nuestra discusión de hace poco y ahora esto, ¿esta será mi vida inmortal?, quejarme, pelearme, reconciliarme y actuar como si nada paso, así todos los días, semanas, meses, años. ¡Esto será para siempre!, puse mi mano en mi frente como si estuviera preparada para un dolor de cabeza intenso, no tengo propósito propio, no tengo amigos, no tengo anhelos, no tengo ni siquiera pareja, no tengo... no tengo, me quede en corto, cuando de la nada escuche, el llanto de un bebé, un bebé cerca.

- ¿Un bebé? ¿Un bebe aquí?, será mi imaginación, no, no creo que haiga un bebe cerca, digo este lugar no, no, no, eso es imposible, creo que ya estoy perdiendo la cabeza - pensaba mientras medí media vuelta y solo mire para ambos lados, pero no vi nada asi que voltee otra vez mi mirada hacia mi hermano, pero, de pronto escuche otra vez ese llanto, y otra vez, mire a mi hermano para ver si él también lo escuchaba, pero solo se quejaba de nuestra situación aquí, solo yo lo escuchaba. Por un momento dejé de prestar atención a mi hermano y comencé a ver en todos lados. No sé por qué le tomaba mucha importancia a eso, pero por una extraña razón sentía algo, como si fuera un llamado

Sentía mi respiración agitada, mi pecho sentía un peso extraño y de la nada comencé a correr, dejé a mi hermano atrás otra vez y me adentraba al bosque.

Cada vez escuchaba ese llanto de bebé más cerca, me acercaba cada vez más y solo iba en dirección recta, como si ya supiera como llegar, esto es extraño. Esquivaba árboles y saltabas por rocas grandes como si no dejara que nadie me detuviera, ese llanto me llamaba, pero de la nada se detuvo. Cuando deje de escucharlo me percate que había llegado a una pequeña casa, una casa en muy mal estado, pero me preguntaba una cosa, ¿Qué hace una casa en medio del bosque?.

Creí escuchar algo, pero solo fue mi imaginación, me di media vuelta y di marcha atrás. Cuando me iba a retirar escuche otra vez ese llanto, pero esta vez, en dirección a esa casa pequeña, me quede perpleja, esto es real, la duda me carcome, me di unos pardes golpecitos en la cabeza, pensado que me estaba volviendo loca, pero todavía escuchaba ese llanto, ese llanto proveniente de la casa.

- ¡ya fue suficiente! – grite – ¡no estoy loca, quien sea que este haciendo esto que se detenga de una vez! – mire para todos lados, pero no vi nada, solo seguía escuchando ese llanto, esto era estresante.

Quería irme, pero ese llanto, por alguna razón me llamaba y despues se me vino la mente algo, esa casa, cuando la vi, inconscientemente comenzaba a dar marcha hacia esa casa, para luego entrar por la puerta y despues... se detuvo.

Gyuutaro's Pov

Desde que llegamos a este pueblo de ****** no ha pasado nada más que problemas, era lo de siempre; el viejo nos llama, nos da una misión que es encontrar ¡otra vez! esa flor de ****** y como siempre no encontramos nada. Cuando llegue a este pueblo lo único que me enfado más fue el frio insoportable, estaba afuera junto a mi hermana porque ella me saco a la fuerza para buscar más rápido esa flor de ******, hablando de ella por otro lado parecía disfrutar esto, no se quejaba, desde que llegamos acá no la vi molesta, frustrada o irritada, la veía tranquila.

En mi caso era todo lo contrario y solo quería una cosa irme de aquí lo más rápido posible, asi que le dije a mi hermana.

- solo hay que irnos de aquí y le decimos al viejo que no encontramos nada –

Era una buena idea, pero mi hermana dijo que no y yo me arte. Tuvimos una pequeña discusión como siempre la tenemos en cada momento que estamos haciendo algo los dos, pero esta vez nuestra discusión fue más allá, sé que dije varias cosas que no debí decir, pero el frio no me dejaba pensar bien, y como consecuencia mi hermana me dijo que me odia.

Despues de eso, salió corriendo en dirección a la montaña en el bosque, fui detrás de ella, trate de llamarla, pero no funciono, le seguí el paso y terminamos tropezando y cayendo juntos como todo unos ********* para despues terminar perdidas en medio del bosque.

Me levante con algo de nieve en todo el cuerpo y solo me encabrone mucho más que antes, le reclame a mi hermana por salir corriendo y le dije muchas cosas más, pero esta vez había algo diferente, mi hermana se dio media vuelta como si nada y de la nada comenzó a correr pensé que otra vez ella correría en dirección hacia ningún lugar en específico, asi que le seguí el paso para evitar que se perdiera, al parecer será otra persecución.

Cuando le seguí el paso pudo notar que mi hermana actuaba diferente, esquivaba los árboles y rocas como si supiera en donde ir, como si la estuvieran guiando, pero para mí, tantos los árboles de ****** que me estorbaban terminaron retrasándome, haciendo que perdiera la vista a mi hermana por un breve momento hasta que la perdí.

Cuando paso eso yo solo me encabrone y trate de llamarla gritando, pero no obtuve respuestas, esto es una ******, ella actúa diferente actúa como si rogara por atención o eso creo, pero esto es demasiado, comencé a usar mi técnica de sangre destrozando todo a mi alrededor hasta dejar añicos a todos los árboles en mi alrededor.

Grite a todo pulmón el nombre de mi hermana para que me escuchara, pero no paso, estaba hablando solo, me sentía mal, todo esto es por mi culpa, debe ser por mi culpa que mi hermana es asi.

- ¡Daki!, ¡yo losiento de cuerdo, perdón por quejarme y eso, solo quiero que volvamos a casa de una vez, por favor perdóname y vuelve! – grite y espere a que ella al menos volviera o me hablara, pero no obtuve respuesta

Hiba para gritar otra vez, pero esta vez escuche a mi hermana gritar, la escuche gritar y por reacción seguí sus gritos, tal vez estaba en peligro o se encontró con algún pilar, todo puede pasar, no sé por cuánto tiempo corrí, pero fui rápido, hasta que al final deje de escuchar los gritos de mi hermana y eso me preocupo, seguí adelante y lo que encontré fue algo inusual. Llegue a una casa pequeña y descuidada, pero esta casa estaba en medio del bosque, "en medio del bosque", eso es lo raro, pero no era tiempo de pensar en eso, necesitaba encontrar a mi hermana.

Rodee la casa y había notado que tenía un pequeño suelo de madera al otro extremo de la entrada, donde era otro lugar para ingresar y estaba apoyado por unas barandas de madera que también sujetaban la casa, cuando me acerque para ver mejor vi a otra persona, pensaba que era algún humano que vivía acá, pero no, cuando me acerque me sorprendí mucho, era mi hermana.

- Gracias a la carne humana, daki me tenías preo-cu... - me acerque a mi hermana mientras hablaba y de la nada mi hermana me callo poniendo su mano en mi mandíbula

- no digas nada – mostro una seña de guardar silencio, soltó mi mandíbula y volvió a sentarse en ese suelo de madera al exterior de la casa

¿Que? No entiendo, acaso sigue enfadada conmigo, en casos como esto terminaríamos peleando, pero no quería pelear otra vez, asi que le hice caso y comencé a susurrar

- daki, yo, lo siento de acuerdo, no quería decirte todas esas cosas es solo que yo, yo – mire a mi hermana, pero ella no volteo a verme me daba la espalda o algo asi – yo, no se que hacer para ganar tu perdón, pero yo solo quiero decir que por favor me perdonas, por favor hermana –

Seguía igual no me miraba, por lo que me moví en dirección hacia enfrente de ella para que al menos me mire a la cara. Pase por su lado a verle la cara, pero cuando estuve de lado de ella, note que ella no me miraba, sus ojos estaban mirando otra cosa, vi en la dirección en que miraban sus ojos y eran ¿canastas?.

Mis ojos se enfocaron en esas canastas, no podía ver su contenido porque, porque había mantas encima de las mismas, intente saber que había en su interior, acerque mi mano lentamente, pero de la nada mi hermana la agarro con fuerza, mi miraba se enfoco rápidamente en ella y me miro un tanto molesta.

- no te atrevas a hacerles daño – dijo ella y yo solo la mire confundido

Mi hermana estaba actuando extraño ¿hacerles daño? A quien se refiere, iba a hablar, pero ella se puso de pie y se acerco a las dos canastas y comenzó a mover un poco las mantas. Cuando mi hermana me soltó me dio curiosidad en saber que había en esas canastas, cuando mi hermana se hiso aun lado yo me acerqué y cuando por fin pude ver si interior me dejo sorprendido.

- ¿bebes? –

No me engañaban mis ojos, estoy viendo a dos bebes, ¡a dos bebes!, un niño de cabello carmín oscuro y una niña de cabello oscuro.

- son adorables – hablo mi hermana con un tono de voz baja

Miré a mi hermana y la vi feliz, ella estaba sonriendo, ¡sonriendo!, no lo entiendo desde cuando ella sonríe que no sea matar personas o comérselas, a espera eso es.

- ¿son comida? – hable y de la nada mi hermana me da un golpe en la cabeza

- ¡no hables estupideces! – ella me golpeo por que les dije comida, pero el golpe fue fuerte haciendo que ambos bebes comenzaran a llorar

- no, no lloren – hablo mi hermana, cuando me recompuse mire a mi hermana como Mesía las canastas de ambos infantes con su técnica de sangre que eran sus fajas - cállalos, me rompen los oídos – hable estresado, mientras mi hermana se vía realmente preocupada por esos dos

Pasado un tiempo mi hermana logro callarlos, como lo hice, no lose, solo movió las canastas y canto, para al final despues se durmieran de milagro.

- ¿Dónde los encontraste? –

- en esta casa, no sé si tendrán... –

- escucha tengo muchas preguntas que hacerte y eso, pero ya hay que irnos el amanecer llegara pronto y no quiero morir calcinado en este pueblo de ***** - seguía hablando en susurros, solo quería irme de una vez

- está bien –

Mire a mi hermana como tomaba las dos canastas – que haces – ella volteo a verme – llevármelos - dijo

- estas loca son bebes humanos daki que vas a hacer con ellos –

- eso ya losé, es solo que yo, yo –

No entendía porque mi hermana actuaba asi, pero no había tiempo para eso, grite el nombre de nakime y detrás de nosotros a unos cuantos metros, apareció una puerta corrediza fuera de la casa.

- vámonos el sol ya empezará a salir pronto –

Ambos tomamos rumbo hacia la puerta corrediza, no entendía porque daki traía a esos dos bebes consigo sosteniendo a ambos de sus fajas, pero era un capricho de ella y no quería pelear de nuevo. Ya solo estando cerca íbamos a dejar este pueblo de ****** por fin.

Estábamos tan cerca de no ser que sin previo aviso algo de atrás de nosotros aparece posicionándose detrás de mi hermana, cortando una faja donde sostenía a uno de los bebes.

Su reacción fue rápida que no pude ni sacar mis guadañas, solo observé como en cámara lenta; la faja de mi hermana es cortada, la canasta siendo atrapada por ese sujeto y a mi hermana que voltea sorprendida por esa reacción. Volteamos nuestras miradas a la casa donde ese sujeto se posiciono sosteniendo una de la canasta como si lo estuviera abrazando con mucho cuidado y su otra mano sosteniendo una katana.

- pero que ****** tenemos ahora – grite y mientras mi hermana no argumentada ninguna palabra yo solo veía a ese sujeto que apareció de la nada

Mire a ese tipo, no argumenta ni una palabra, ni una sola palabra solo nos miraba con un semblante frio. Mi hermana que se recompuso fue en dirección hacia ese sujeto.

- Oye devuélveme a mi... - detuve a mi hermana cuando noté como la casa comenzaba a reflejar luz

- daki hay que irnos –

- suéltame, debo –

- no seas tonta el sol ya salió. Nos vamos – jale a mi hermana obligándola a entrar, ella solo suplicaba que la dejara ir hacia ese tipo, era eso o dejarla morir calcinada

Una vez que entramos la puerta se cerró, encontrándonos ahora en la fortaleza infinita hecho con la técnica de sangre de nakime, una vez que estuvimos seguros mi hermana se puso de rodillas mientras sus fajas sostenían la canasta, pero solo una de ellas.

- porque, porque no me dejaste ir –

Mire a mi hermana aun arrodillada, pero no le respondí, en cambio grite en toda la fortaleza que abrieran una puerta hacia el distrito rojo, cosa que paso rápido en frente de nosotros, le pedí a daki que nos fuéramos, pero ella se levanto y se fue adelantando sin decir nada.

Cuando por fin cruzamos la puerta llegamos al distrito rojo, donde estábamos en la habitación de mi hermana quien se hace pasar por warabihime oirán, mire a mi hermana, me estaba dando la espalda y no decía nada haciendo que el ambiente fuera incomodo, no lo entiendo, que le pasa.

- Daki yo -

- ¡NO! No, no, no –

- ¡cálmate daki! –

- porque no me dejaste ir, yo, yo – se estaba alterando

- no te entiendo, desde que encontraste a esos bebes actúas como una loca –

- no me digas loca, acabo de perder uno de ellos porque me estorbaste –

- si, te estorbe para que no mueras calcinada, asi que de nada –

Mi hermana mostraba una expresión facial combinada con algunas venas salidas y sus dientes afilados como si estuviera a punto de gritar. Pasado un tiempo corto de que nos miramos y comenzó a calmarse de golpe, para luego respirar hondo y sostener la canasta que aún conserva ignorándome completamente.

- bien, ahora que estamos en casa, dime daki ¿Qué harás ahora?

- A que te refieres? –

- es enserio, ¡tienes idea en el lio en que nos has envuelto a ambos! –

- ¡no me grites! Se muy bien que traer a un bebe humano es una locura, pero... -

- pero que –

- que este problema es solo mio y este bebé es solo mio de acuerdo, yo sola cuidare a este bebé, si quieres ayudarme lo aceptare, pero, si solo bienes a quejarte entonces solo lárgate -

Mire a mi hermana como se ponía a la defensiva, esto es raro primero se le ve relajada y terca, luego malhumorada e inquieta y ahora terca y sobreprotectora con ese bebé.

- ¿Qué pasa contigo? Daki has cambiado, tu... –

- ¡no eh cambiado!, te lo repetiré otra vez, yo sola cuidare a este bebé, más te vale no hacerle nada mientras yo no este y, sobre todo, aunque tu no lo aceptes, este bebé es ahora parte de la familia –

Escuche bien, acaba de decir que ese bebe es ahora parte de nosotros, pero si ni siquiera es un demonio, co-como, es-esto es una ******, este es demasiado para procesar. No quería hablar más, di media vuelta y salí de la habitación en lo profundo de un pasillo oscuro sin rumbo alguno, necesito procesar esto, esto realmente es una ******.

Daki's Pov

Vi a mi hermano dejar la habitación caminando por un pasillo oscuro cerrando la puerta y dejándome sola. Sinceramente le iba a pedir que se retirara si seguía asi de malhumorado, pero me ahorra el aliento, me senté en el suelo de madera de piernas cruzadas mientras dejaba la canasta en el suelo, veo en su interior a mi pequeño angelito durmiendo a pesar de todo lo que acababa de pasar, eso es increíble. No contuve las ganas de cargarlo asi que lo hice, lo sostuve de su cabeza y despues de su cintura y lo hacer que a mi pecho para despues abrazarlo con mucho cuidado, también midiendo mi fuerza.

Cuando lo tuve en mis brazos, me quede en mar de lágrimas, era una cosita tan pequeña, tan cálida, tan suave, tan frágil, tan lindo, diablos esto me pone sensible, pero me pregunto si tendrá nombre. Usé mi faja para tomar la canasta ya que tenia al bebe en brazos y con las demás fajas comencé a revisar en el interior, pero solo encontré una manta, un arete hanafuba y un papel doblado, eso ultimo me intereso, lo abro y tenía algo escrito, decía.

"Mi pequeño niño Kamado Tanjiro tu mama te quiere mucho"

Parecía algo improvisado, pero no estaba ahí para saber eso, pero al menos se su nombre

- kamado tanjiro, es un bonito nombre, no es asi tanjiro –

Mire a mi bebé llamándolo como es, esto era una sensación rara, esto me dejaba una sensación extraña, una sensación agradable. Me quede mirando a tanjiro sonriéndole.

- bienvenido a la familia pequeño tanjiro – acerqué mi frente con la de el y solo le dije – este será un nuevo comienzo para ti mi niño –

Solté una lagrima más para terminar abrazando a quién es mi bebe ahora. Esto para mi es una nueva historia, un nuevo comienzo, un nuevo camino y sobre todo una vida al lado suyo.

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Hasta aquí el capítulo amigos, en el próximo capitulo

"una familia inusual"

ლ(╹◡╹ლ) Sin más me despido, hasta el próximo capitulo👋