Cuando la casa quedó vacía finalmente Leo volteo a mirarme, suspiré pesado y le dediqué una sonrisa.

Llevo mucho tiempo trabajando en ésto y mi deber es estar informada, me ayuda a mantener mi perfil bajo y a no tener problemas. Mi abogado me ha asesorado muy bien Dante es uno de los mejores.

Leo no dijo nada simplemente permaneció en silencio un tiempo, pero cuando estuve a punto de irme me tomo la mano, al sentir sus dedos sobre mi piel una especie de electricidad recorrió todo mi cuerpo, trague saliva.

—Sé bien que ésto no es una relación, que esto se trata simplemente de trabajo, pero también sé que ya no puedo Alexis, es algo estúpido seguir fingiendo.

Te quiero. No sé desde cuándo y no sé cómo pasó, pero has llegado a modificar mi vida completamente. Llevamos conociéndonos aproximadamente 5 meses, pero siento que te conozco de toda la vida, quizá esto no sea muy profesional de mi parte, pero ya no podía seguir con la farsa de que aquí no pasa. —me quedé en shock no sabía que responder, mi corazón se comenzó acelerar y mi respiración me estaba fallando.

—Yo. —dije pero no salió nada más. Leo se acercóa mi y me tomo de la mano.

—Te juro Alexis que si me dices que no sientes nada por mi mirándome a los ojos, si me dices que tú corazón no se acelera cuando estamos así de cerca. Dejaré de insistir. Cumpliré con el contrato y me marcharé para siempre.

Pero si de lo contrario, me dices que tú corazón al menos se acelera un poco haré lo posible por conquistarte.

Tengo tres meses para demostrar que puedo ser lo mejor de tu vida. —los ojos sé me llenaron de lágrimas, quería decirle que también lo quería que era lo mejor que me había pasado, pero la puerta se abrió de golpe y entro su madre a toda prisa.

Sin decir nada más se  dirigió al lugar donde él se encontraba y le soltó una bofetada. Después le lanzo el celular lo tomo y volteo  a verme.

Narra Alexis.

Leo se quedó callado mientras observaba el teléfono.

—Puedo explicarlo. —dijo y su madre negó con la cabeza.

—No puedo creer lo estúpidos que fuimos, pero ahora todo tiene sentido, el hecho en eque ella supiera que decir en cada momento, parecía una esposa perfecta y lo era ya que todo estaba fríamente calculado. —trague saliva y no supe que decir, las manos me templaban y sentía que mi corazón se iba a salir de mi pecho, sólo una vez me había sentido así y había jurada jamás pasar con lo mismo.

Di la vuelta y saqué la carpeta que  Dante me había dado. Leo estaba en silencio; caminé y se la entregué a su mamá.

—Es la demanda del divorció. —al decir eso Leo negó con la cabeza y le quitó el papel a su mamá.

—No puedes, tenemos un contrato. —iba a responder, pero su mamá se adelantó.

—¡Claro que puede! No seas estúpido Leo, ¿Crees que le importas tú? —Leo seguía sosteniendo el acta en las manos.

—Dile. —trague saliva y asentí. No quería que Leo se enterará de está manera ya que sabía que le iba a doler. Pero todo se había salido de nuestras manos.

—Tú padre me pagó la multa de la demanda. Además me dio un poco más de dinero para podñer firmar el divorcio. —Leo estaba sin habla baje la mirada y di la ll, él me tomo de la mano.

—Dime que es una estúpida broma Alexis. —su madre soltó una carcajada.

—Nada de ella es real Leonardo, ni su nombre. — era cierto, Alexis no era mi verdadero nombre, es más ni yo recordaba cuál era, desde aquél día que habían dejado plantada en el altar decidí que lo cambiaría.

Leo se me quedó viendo esperando una respuesta, pero no podía está vez darle una.

Nota:

Hola queridos lectores espero no me maten por esté capítulo, pero 😱 ¿Se lo esperaban?

Las cosas se ponen cada vez mas buenas y yo cada vez amo más a Leo jeje.