Día 2.

Al abrir los ojos no reconocí el lugar donde me encontraba, además la cabeza me dolia y todo me daba de vueltas, maldije en voz baja, pero cuando una mano se poso sobre mi cadera, me levante de un brinco. 

Miré abajo y me di cuenta de que estaba desnuda. Me intente tapar con la sábana, pero no la  podía jalar ya que la otra persona se encontraba sobre ella.

Suspire pesado y comencé a buscar mi ropa, pero al mirar a todos lados no estaba. 

Al no encontrar algo con que cubrirme me acerque nuevamente a la cama y jale la sábana, pero al estar bajo el chico no tuve suerte, suspire hondo y quise intentarlo una vez más, pero en lugar de que está saliera termine encima del chico.

Sé levantó de un salto cosa que hizo que rodará con él y ahora él estaba sobre mi completamente desnudo. 

Al ver que se trataba de Leo suspire y me tranquilice un poco.

—¿Qué haces en mi cama? —preguntó sin quitarse de encima a lo que suspire y empuje, al darse cuenta rápidamente se levantó.

—No estamos en la casa. —al decir ello Leo recorrió con sus ojos la habitación y asintió. Enrede la saba en mi cintura y me levante de la cama, por una parte agradecía que Leo fuera la persona que estaba en mi habitación ya que me hubiera sentido culpable si le hubiera sido infiel. 

—¿Recuerdas algo de anoche?—dijo mientras buscaba su ropa a lo que yo negue con la cabeza. 

—Lo último que recuerdo es a mi sentada en el bar con mis amigas. Leo asintió mientras se ponía su ropa a lo que hice una mueca. 

—Porque carajo está tú ropa y no la mía. —nego con a cabeza y comenzó a inspeccionar la habitación. Esta era muy bonita y amplia.

—No hay nada Alex. —dijo a lo que trague saliva. 

—¿Y como me voy a ir? —Leo saco su celular y comenzó a mandar mensajes.

—Listo en un rato nos traen tus cosas.— después de eso se dio la vuelta y camino al otro lado, yo me aventé a la cama al caer, choque con algo duro, así que me levante y se trataba de mi celular. Suspire aliviada ya que al menos el celular no lo había prendido.

Abrí las notificaciones y  al hacerlo me arrepentí y por inercia lo lancé al piso. 

Al ver mi cara Leo se acerco a mi.

—¿Que ocurre? —preguntó y le señale al celular. Él lo levantó y al ver las fotos maldijo y saco su celular nuevamente.

—¿Cómo mierda ocurrieron esas fotos? —dijo bastante alterado. 

Yo aproveche para sentarme en la cama. Necesitaba digerir la información, en las fotos salimos Leo y yo sentados en la mesa del bar basándonos, había otra en donde estábamos en un estacionamiento, yo me encontraba pegada al auto mientras que él acariciaba mi cuerpo.

Las fotos me las había mandado Rebeca así como la captura de la publicación que decía que el rostro de la señora Coleman al fin había sido revelado. 

Sabíamos que esto ocasionaría muchos problemas por ello es que no habíamos querido hacer pública nuestra relación. Pero ahora no solo había fotos mías si no que estaba en tendencia con el hashtag La Señora Coleman.


Todo estaba mal, no recordaba lo que había pasado la noche anterior, encima éramos tendencia a nivel nacional en redes sociales, era algo que me inquietaba bastante, no por mi, sino por Alexis.

Desde un inició quisimos mantener todo en secreto debido a que así era su trabajo y no queríamos que ningún loco acosador saliera a revelar quién era realmente o a que se dedicaba. 

Pero las cosas se habían salido de control y aún no sabíamos cómo había pasado. 

Según Mario la prensa andaba tras de mí desde que dije que me iba a casar, pero nunca había notado algo en particular, además siempre fuimos muy cuidadosos a la hora de estar en público.

Gire para ver a Alexis mientras seguía en llamada con Mario y odiaba ver la cara de frustración que tenía.  Colgué la llamada cuando Mario me dijo que iba a investigar cómo se habían filtrado esas fotos.

Me acerqué a ella aunque realmente no sabía qué hacer o decir, la mayor parte del tiempo era muy malo para hablar.

—Tranquila, el equipo legal lo arreglara. —dije y ella asintió después de un rato tocaron la puerta y entró Vanessa. Alexis estaba sentado al otra lado de la habitación viendo a la nada, me acerque a Vane y le dije que le diera las cosas y hablara con ella. 

Estaba muy preocupado por su comportamiento. Asintió con la cabeza y se acercó a ella. 

Minutos después sonó mi celular y respondí de inmediato.

—¿Y bien? —dije y Mario suspiró.

—Creo que ya tienes una idea de quién fue la que hizo eso. — Colgué el celular y salí de la habitación sin decir una palabra al menos sabía que Alexis estaba segura con Vane.

Al llegar al estacionamiento Andrea se encontraba recargada en mi auto.

—¿Qué haces aquí?—dije y ella sonrió. 

—Viene a verte y traerte esto. —al decir eso me dio un sobre blanco saque el contenido y sentí como la adrenalina recorría todo mi cuerpo. 

—¿Qué planeas hacer con eso?—dije y comencé a romper las fotos ella soltó una carcajada. 

—Por el momento nada. —dijo cuando terminó de reír. 

—Sé porqué te casaste con ella y no fue por amor, fue para que pudieras cobrar la herencia de tu abuelo, además se de ese estúpido contrato que te impuso al deber estar casado durante medio año al menos. 

Así que respetaré esa parte del trato, después de que termine tú contrato serás mío nuevamente.

—Estas loca. —dije y ella asintió. 

—Puede que tengas razón, pero también tengo esas fotos que pueden salir publicadas en todos lados mostrando quién es verdaderamente la tipa con la que te casaste. 

—No lo harán. —se dio la vuelta y encogió de hombros.

—Pruébame. —al decir eso se alejó del auto al voltear vi que Alexis y Vanessa caminaban a mi lado. Así que suspiré y levanté el desastre.

—¿Estás bien?—dijo Alexis y asentí con la cabeza.

—Era ella verdad. —no le respondí a Vane simplemente camine al lado del conductor.

Necesitaba un plan para deshacerme de ella. Mientras tanto seguiría su juego esperando que no le causará daño Alexis ella no merecía esa mierda. 

Hola Readers.

Antes que nada muchas gracias por leer ❤️

Cómo se habrán dado cuenta la historia es relativamente nueva. Pero prometo traerles dos capítulos por semana a parte ahora 🤭

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