[Desde que... nací... recuerdo que... al salir del huevo... mi... mi familia... creo que me esperaba con muchas ansias.

Dos Lycanroc nocturnos esperaban que saliera del huevo muy ansiosos, pero... por algún motivo, su emoción desapareció al escucharme hablar.

Decían algo sobre tener una cría macho... pero en su lugar... salí yo.

No sé muy bien que fue lo que les hizo no quererme tan rápido, pero de lo que estoy segura es que al menos yo no me encariñé mucho con ellos.

Siempre hablaban de una manada a la que tenían que volver y que traerían consigo un macho fuerte que sería un gran aporte para todos.

Supongo que eso no pasó...]

En medio del bosque, en una fresca y soleada mañana, Rockruff había sido encargada de ir en su primera expedición por comida. Sus padres le habían encargado adentrarse en el bosque para que buscara algún pokemon muerto o algún animal que pudiera suplirlos de alimento, poniéndole como mínimo requerimiento no volver con las patas vacías.

Y así fue, la pequeña Rockruff con apenas un mes de nacida estaba comenzando su aventura en medio de la densa vegetación del bosque que la rodeaba, sin ayuda de nadie y nada más que su propio ser como guardia.

A pesar de no ser una experta en lo absoluto o tener conocimiento alguno sobre discreción, Rockruff no dudaba en ninguno de sus pasitos firmes para buscar el encargo de sus padres y demostrarles que ella si tenía un valor para ofrecer con esa oportunidad de oro que le habían otorgado.

Las horas pasaron y pasaron, pero lo que parecía ser una linda expedición de aprendizaje para la canina se volvió una lucha por sobrevivir. Múltiples pokemones intentaron arremeter contra ella al entrar en territorios que desconocía, en zonas de alta hostilidad o simplemente encontrándose con pokemones problemáticos que se centraban en hacer regir la ley del más apto.

Una pobre tipo Roca, lesionada y muy adolorida logra volver cojeando hasta donde se asentaban ella y sus figuras paternales, implorando a la presencia más alta que la ramita de bayas que había logrado obtener fuese suficiente para no recibir el completo desprecio y decepción de los Lycanroc.

Tras llegar al lugar, Rockruff deja las bayas Aranaja y Meloc que había conseguido para seguidamente mover un poco su colita y tratar de mirar por los alrededores.

Rockruff: M-Mamá!! Papá!! L-Logré traer algo!!

La pequeña canina comienza a caminar aún cojeando por los alrededores mientras sacaba su lengua para jadear por la alegría de estar en la zona segura donde sus padres la protegerían de cualquier amenaza.

Rockruff: Traje bayas!! Mami!! Papi!!

La pokemon se queda quieta por algunos segundos para usar su audición con la esperanza de obtener una pista de dónde se encontraran sus padres, pero no había ruido alguno en los alrededores.

Bastante cansada, la tipo Roca vuelve a tomar la rama de bayas y se mueve hasta el tronco de un árbol, dónde se deja caer para poder descansar un poco a la sombra que el mismo brindaba.

Rockruff: Ellos también fueron por comida? Supongo que descansaré mientras vuelven.

El día continuó avanzando y el sol abrazador seguía brillando en lo más alto de cielo. La pokemon, con el tiempo se quedó dormida debido al dolor y cansancio generado por la encomienda que recién había tenido, sumiéndola en un profundo sueño.

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Sorpresivamente, Rockruff despierta y abre de par en par su ojos, dándose cuenta que se encontraba en un pequeño lecho del bosque cercano a la casa de Charlie. Aparentemente, la pokemon se había quedado dormida, por lo que a los pocos segundos ella empieza a recordar cómo fue que llegó ahí y al mismo tiempo se da cuenta que el día ya empezaba a llegar a su fin debido a la poca claridad que daba el sol con el ocaso que acontecía en ese momento.

Rockruff: Uhh... ese sueño... hace mucho no los recordaba...

La pokemon se levanta un poco desorientada y se da cuenta que había pasado gran parte del día durmiendo en ese lugar, por lo que trata de regresar a casa antes de que se haga aún más tarde.

Por otro lado, Gardevoir, Raboot y Umbreon se habían dispersado por el prado para buscar a la canina, siendo que llevaban rato ya en la tarea, pero sin éxito alguno.

En dado momento, Raboot logra avistar a la tipo Roca, quien venía caminando con el semblante un poco pensativo y la mirada perdida, como si su atención estuviera completamente sumida en el interior de su cabeza.

Raboot: La encontré!!!

La pokemon da un pequeño grito hacia donde estaban los otros pokemones, los cuales escuchan a la coneja y se dirigen hasta donde ella.

A los pocos segundos, los tres pokemones se acercan a Rockruff y esta se da cuenta de la presencia de los demás.

Gardevoir: Rockruff!! En dónde carajo estuviste? -decía enojada

Raboot: Estuvimos buscándote por más de una hora! -decía preocupada.

Rockruff: Uh... yo...

Gardevoir: Casi me vuelvo loca!! Por poco se me sale el corazón cuando Raboot volvió después de casi dos horas diciendo que había entrenado sola!!

Rockruff: E-Es que yo... -es interrumpida.

Gardevoir: Por qué te fuiste así?! Mínimo avisa que te vas a ir o algo!! Nos frenaste un montón de entrenamiento!

Rockruff: G-Gardevoir... P-Por qué me gritas así? -decía con los ojos llorosos.

Gardevoir: Como que por qué?! Yo tengo que estar velando siempre por ti!! Hasta cuándo vas a dejar de ser tan inconsciente?!

Rockruff solo mira con tristeza hacia la tipo Psíquico-Hada mientras su boca se arruga con tal de aguantar las ganas de llorar, mientras que esta solo le miraba hacia abajo con un semblante bastante enojado.

Umbreon: B-Bueno... al menos está bien... jeje -decía nervioso.

Gardevoir: Imagínate si algo te hubiera pasado!! Charlie y Lucario me arrancarían la cresta!!

La pokemon comienza a respirar pesadamente por la misma histeria, hasta que siente la pata de Raboot en su pierna, notando que esta tenía un semblante preocupado. Gardevoir se pone la mano en la cara y esta se da cuenta que estaba exaltándose demasiado, por lo que da un gran suspiro para alivianar un poco su frustración.

Gardevoir: Ugh... escuchen... olvídenlo, solo volvamos a casa, quieren?

Un poco harta de la situación, Gardevoir solo se da media vuelta y emprende flote hacía la casa de Charlie, ya que se encontraba cansada físicamente, por lo que decide usar su fuerza psíquica para levitarse de forma perezosa hasta la casa, esperando a que los demás pokemones la sigan.

Umbreon la sigue a paso lento, mientras que Raboot se queda con Rockruff y la acompaña todo el trayecto hasta la casa. Llegando al lugar, todos entran y Rockruff se dirige directamente al cuarto para dormir sin decir nada, aunque fuesen apenas las 6:00 p.m.

En la cocina, Gardevoir se pone a hacer algunas cosas aún con el semblante molesto, mientras que por la espalda se acerca Raboot para hablarle.

Raboot: E-Estas bien? -decía temerosa.

Gardevoir: Claro que si.

Raboot: No crees que le hablaste muy feo?

Gardevoir se da la vuelta rápidamente y se agacha un poco para ver directamente a la coneja a los ojos.

Gardevoir: Escucha, no es mi culpa que se ponga a hacer berrinches. Siempre ha sido así desde que nos conocemos y ya viene siendo hora de que crezca un poco, o acaso se la va a pasar toda la vida siendo una niña?

Raboot: S-Si, pero... -es interrumpida.

Gardevoir: Si sientes lástima por ella, en realidad solo le haces un mal. He pasado la mitad de mi vida cuidándola y créeme que tengo suficiente autoridad como para ser quien se lo haga saber.

Raboot: P-Pero... -es interrumpida.

Gardevoir: Además, no es justo que por sus juegos los demás se vean afectados -decía viéndola a ella y de reojo al Umbreon en el sofá.

Raboot: Solo era un entrenamiento, sabes? -decía tímidamente.

Gardevoir: No estás escuchándome?! Ella siempre es así! No importa si es algo serio o no, siempre todo es un juego para ella.

Finalmente, Gardevoir se da la vuelta y continúa con lo que estaba haciendo, deja a la Raboot algo apenada y sin saber qué decir.

Gardevoir: ~Así Charlie nunca querrá atraparnos...~ -decía en voz baja con un tono amargo.

Sin más que decir, Raboot se va de la cocina y se dirige a la sala para encender la TV y esperar a Charlie junto a Umbreon, aún apenada por la situación.

En la ciudad, Charlie y Lucario daban la última caminata por un boulevard en busca de algo de comida para llevar a los pokemones en casa justo como había prometido. Ambos entran a una pastelería y pacientemente se disponen a ver de lo que disponía el establecimiento mientras hablaban.

Charlie: A Gardevoir le gustan las cosas dulces o saladas?

Lucario: Ella va un poco más por lo dulce.

Charlie: Bien, le llevaré una flauta dulce. Raboot sé que es más de cosas saladas, así que le llevaré un pastelito de pollo... y Rockruff?

Lucario: Uhm... creo que ella le gusta las cosas ácidas... casi dulces.

Charlie: Hmm... una rebanada de pie de limón?

Lucario: Suenan rico.

Charlie: Eso será... de hecho... le llevaré dos... quiero alegrar a mi niña chiquita.

Lucario: Alegrarla?

Charlie: Si... la he notado un poco triste o decaída estos días... sé que no he dispuesto de mucho tiempo para ella, pero planeo compensárselo de alguna manera.

Lucario: Si... yo también la he notado algo así.

Charlie: Si... ojalá pudiera...

El chico se detiene un momento con su bandeja de repostería y se queda algo pensativo, llamando la atención de la Lucario.

Lucario: Pasa algo?

Charlie: Lucario... puedo contarte un secretito?

Lucario: Uh? Claro que sí, puedes contarme lo que sea! -decía feliz.

Charlie: Pues... por favor promete no enojarte o... algo así.

Lucario: De acuerdo.

Charlie: Bueno... pues... sucede que he estado pensando en como animar a Rockruff y eso... estuve pensando en atraparla en una pokeball, sabes? Creo que se sentiría lindo para ella.

Lucario: Hablas enserio? Eso sería genial!

Charlie: Jeje... bueno... la cosa es que... yo tenía una caja con unas pokeball especiales y... creo que la recuerdas, no?

Lucario: Oh... si, la recuerdo.

Charlie: Bueno... creo que esas pokeball's se habían perdido en mis días de alcoholismo... creo que fue el día que Joan y Salazzle me llevaron a casa y limpiaron mi cuarto. Supongo que las botaron por accidente.

Lucario: Oh... lamento oír eso.

Charlie: Y bueno... e-el punto de esto es que... crees que ella se desilusione si no le digo que no es la segunda pokemon que atraparía?

Lucario: Eh? Claro que no! Por qué le molestaría eso? Planeas atraparme a mi o a Gardevoir primero? -decía con ilusión.

Charlie: Uhm... no... no es eso... es que... ya atrape a alguien.

Lucario: Qe.

Charlie: Ugh... por favor no me detestes, créeme que yo tampoco quería esto -decía apartando la cara con algo de pena.

Lucario: Yo... ugh... tranquilo, prometí no enojarme.

Charlie: Bueno... resulta que al volver de Kalos... Ugh! Si tan solo ese Umbreon baboso no se hubiera escabullido en mi equipaje!! Uhm... pues... tuve que atraparlo en una pokeball para poder traerlo de vuelta acá.

Lucario: Y por qué no le dijiste que se escondiera de nuevo en tu equipaje como lo hizo en primer instancia?

Charlie:

El chico se queda analizando la idea por algunos segundos, hasta que sacude la cabeza para salir del trance.

Charlie: No, eso no habría funcionado, revisaban el equipaje... aunque no sé cómo le hizo en primer lugar -decía rascándose la cabeza.

Lucario: Por eso.

Charlie: Bueno... la cuestión es que le dije que lo liberaría, pero obviamente él no quiere eso... además me sentiría mal un poco mal si lo hago... supongo... Agh! Tonto Umbreon! Sabes que? Le voy a llevar una enchilada a ese tonto! Le voy a llevar la enchilada más picante que exista. Panadero!

Panadero: A sus órdenes, mi rey.

Charlie: Deme la enchilada más endemoniada que tenga!

Panadero: De pollo o papa?

Charlie: Mixta -decía con determinación.

Panadero: Sale una enchilada endiablada mixta!!

El tipo se va por una puerta para ir a traer el encargo del muchacho, dejando a este con una mirada maldosa en su semblante mientras dejaba la bandeja en una mesita para frotarse las manos, como todo un villano.

Lucario: Charlie! Entiendo que no te agrade del todo ese Umbreon, pero tampoco te pases -decía entre risas.

Charlie: Tranquila, es para mí. A él no le llevaré nada.

Lucario: Charlie! Dijiste que le llevarías algo a todos!

Charlie: Jajaja es broma, le llevaré una rebanada de pie de maracuyá y baya Ango, seguro que le gusta.

Lucario: Eso está mejor.

Ambos llegan hasta la caja registradora, dónde un chico comienza a empacarles la repostería para finalmente pagar.

Lucario: Y bueno... respecto a lo de Rockruff... creo que... no es necesario que compres unas pokeball diferentes como aquellas otras, al fin y al cabo lo que importa es el gesto, no crees? Estoy segura que ella se pondrá feliz.

Charlie: Bueno... si tienes razón.

Lucario: Ya ves?

Charlie: Pero aún así quisiera que fuese muy especial, sabes?

Lucario: Bueno...

Charlie: Mira, haré algo. Voy a trabajar horas extra esta semana para que comprar esa pokeball personalizada y pagaré para que la tengan lista lo más antes posible!

Lucario: B-Bueno... si eso es lo que quieres, adelante.

Charlie: Si! Así ella tendrá una pokeball linda y acorde a sus colores.

Lucario: Pero y si evoluciona?

Charlie: Eso es lo mejor! Los Lycanroc forma diurna tienen los mismo colores que Rockruff.

Lucario: Vaya... un plan a prueba de tontos, no?

Charlie: Jeje algo así.

Desde una puerta anteriormente mencionada sale el panadero con una bandeja que contenía la repostería que el chico había encargado recién hecha.

Panadero: Aquí está su pedido, caballero!

Charlie: Muchas gracias, buen hombre

Panadero: Que tengan una linda noche, jóvenes enamorados!

Charlie: Uh... b-bueno... igualmente!

Lucario: Jiji g-gracias señor!

Ambos salen de la panadería con sus bolsas de pedidos y un semblante muy colorado por la pena que les dió lo asumido por el panadero, aunque ciertamente fue algo gracioso que ninguno dijera nada para evitar echar a perder los buenos deseos del sujeto.

Charlie: Jeje b-bueno... ese tipo fue extraño.

Lucario: Enserio, nos vio como una pareja? -decía ilusionada.

Charlie: S-Supongo jeje.

Lucario y Charlie ríen un poco, hasta que la pokemon da un leve suspiro sin decir nada. Charlie la mira de reojo y en su semblante logra ver una leve desilusión, ya que obviamente, para este punto, él sabía muy bien lo que ella sentía por él, dándole índices que ahora la pokemon veía esa posibilidad como algo distante y muy difícil.

Charlie, con tal de animar a la Lucario, saca rápidamente su enchilada y, a pesar de no tener ninguna bebida a mano, este le da un mordisco que acaba con la mitad del bocadillo, haciendo que su boca se consuma en un mar de llamas.

Charlie: AHH!! E-Está demasiado picante!!! -decía poniéndose rojo.

Lucario: Jajaja! Hey! Por qué la comiste ahora, gran tonto? -decía entre risas.

Charlie: N-No te quería ver t-triste!

La pokemon sonríe y se ruboriza un poco, mientras que Charlie también trata de sonreír, pero el humo saliéndole de la boca y las lágrimas que comenzaban a brotar lo hacen salir corriendo a toda velocidad al ver una tienda a la distancia, por lo que este se dirige casi llorando al lugar en busca de algo para beber.

Lucario se queda detrás y esta sigue riendo un poco al ver a su amigo humano hacer tal tontería, pero su ánimo se ve recompuesto al ver cómo logró su cometido de forma tan rápida y eficaz, por lo que ella también comienza a correr detrás de él para seguirlo hasta la tienda.

Más o menos luego de una hora y poco más, se escucha el motor de la motocicleta a las afueras de la casa, índice de la llegada de Charlie y Lucario. Estos entran y se puede apreciar que Charlie traía consigo las  bolsas con repostería que había prometido para los otros pokemones.

Charlie: Hola chicos! Llegamos!

Raboot: Volviste!

La pequeña coneja salta del sofá y corre hasta los brazos del chico, quien ya se había agachado con los brazos extendidos para atrapar a la pokemon como de costumbre.

Charlie: Jeje como les fue en el entrenamiento?

Umbreon: Nos fue genial! -decía subiéndose a su hombro.

Charlie: Oye! A ti quien te dio permiso de subir ahí?!

Umbreon: Raboot es cargada cuando te saluda! Por qué yo no?

Charlie: Por qué ella si es adorable -decía entre dientes.

Lucario: Charlie!

Charlie: Ugh...

Raboot: Uh... C-Charlie?

La pokemon mira con ojos un tanto angustiados al muchacho y luego apunta hacia la cocina, dónde se podía ver a Gardevoir de espaldas haciendo algo, pero parecía que ni se inmutó en voltear a verlos llegar.

Charlie y Lucario entienden un poco lo que la coneja quiere indicar, por lo que el chico la baja gentilmente hasta el suelo al igual que al Umbreon y ambos se dirigen hasta la cocina para aprovechar y dejar la comida en la mesa.

Charlie: Hola Gardevoir.

Lucario: Volvimos!

Gardevoir: Oh... hola -decía volteándose levemente para verlos.

Charlie: Luces algo cansada, estuvo pesado el día?

Gardevoir: Si... me hacía un café para esperarlos, pero bueno... -decía dejando la taza de lado.

Charlie: Aww que linda! No debiste, hubieras ido a dormir.

Lucario: Como les fue en el entrenamiento?

Gardevoir: Meh... bastante regular.

Charlie: Que bien! Todos entrenaron bien?

Gardevoir: Algo así.

Charlie: Y mi pequeña Rockruff? Está afuera?

Gardevoir: Creo que se fue a dormir temprano.

Charlie: Enserio? Iré a ver si de casualidad está despierta! Traje algo para ella.

El chico toma una de las dos rebanadas de pie de limón y sale de la cocina en dirección al cuarto para buscar a la canina, mientras que las otras dos pokemones se quedan ahí.

Lucario: A ver... ahora que?

Gardevoir: Que de que?

Lucario: Te conozco, te ves estúpidamente molesta.

Gardevoir: Ugh...

Lucario: Y bien? Pasó algo mientras no estábamos?

Gardevoir: Agh... solo es Rockruff.

Lucario: Ahora que hizo?

Gardevoir: No tengo idea! Se fue toda la puta tarde a quien sabe dónde y atrasó el entrenamiento de Raboot! No dijo nada! Solo se fue y apareció luego de horas cuando la estábamos buscando.

Lucario: Y por qué se fue?

Gardevoir: Bah! Yo que sé! Ya sabes cómo es ella! Siempre en la luna y su mundo de fantasía -decía cruzando los brazos.

Lucario: Eso fue todo lo que hizo?

Gardevoir: ...

Lucario: Tienes que estar bromeando.

Gardevoir: No se trata de eso! Es molesto que ella siempre haga este tipo de cosas! No madura! No concientiza! Puede que sea con cosas pequeñas pero significa que puede llegar a hacerlo en algún momento realmente importante!

Lucario: Y hablas deee...?

Gardevoir: Su actitud!

Lucario: Pero no es mala, o si?

Gardevoir: Pero afecta a los demás! Estoy harta de haber pasado toda una vida siendo blanda con ella y que, a pesar de que se lo he dicho miles de veces de formas suaves, ella aún no aprenda!

Lucario: E-Escucha... sé que puedas estar un poco enojada, pero es Rockruff! La... boba, enana y peluda pokemon que conocemos! No creo que debas... pues... ser tan dura de un momento para otro con ella, no crees?

Gardevoir: Claro... tu que vas a saber? Acaso tu la cuidaste la mitad de tu vida? -decía molesta.

Lucario: No, pero... -es interrumpida.

Gardevoir: Tu que vas a saber si nunca tuviste una responsabilidad como ella?!

Lucario: Oye creo que te estas... -es interrumpida.

Gardevoir: Claro que no! Tu no sabes nada porque toda tu vida no tuviste que soportar ser la hermana mayor de una familia!!

Lucario se sorprende un poco por el nivel de enojo con el que le hablaba su amiga, por lo que decide alejarse un poco. En ese momento, llega Charlie a la cocina viendo su teléfono, con la rebanada de pastel en su mano y sin enterarse de la situación.

Charlie: Bueno, creo que Rockruff está dormida... y la verdad nosotros deberíamos ir a eso también. No lo crees Lucario?

El chico se le queda mirando a las pokemones un poco extrañado y este siente un ambiente extraño, más al ver la cara de Gardevoir que se veía un poco molesta.

Charlie: Pasa algo?

Gardevoir solo da un quejido y esta decide tomar bruscamente la maceta con los retoños de las flores de Charlie para abrir violentamente la puerta trasera con sus poderes psíquicos y quedarse afuera para tratar de calmarse un poco.

Charlie: Uh... d-dije algo malo?

Lucario: Ugh... tranquilo, solo ha tenido un día duro.

Charlie: Debería ir con ella?

Lucario: Déjala, las flores harán el trabajo por ti -decía riendo un poco.

Charlie: Oh sí, mis flores terapéuticas -decía con orgullo.

Lucario: Jejej si, esas flores son muy buenas.

Charlie: Te escuchan y te hacen sentir mejor.

Lucario: Tiene sentido cómo fue que viviste aquí tanto tiempo solo con ellas.

Charlie: Así es jeje.

El chico bosteza y aprovecha para estirarse un poco, contagiando a la pokemon del bostezo también.

Charlie: Estás cansada?

Lucario: Un poco.

Charlie: Que tal si vas a preparar el colchón? Yo voy a guardar lo que trajimos y enseguida voy.

Lucario: De acuerdo.

Algo perezosa, Lucario sale de la cocina en dirección al cuarto para cumplir el encargo. Mientras tanto, Charlie toma las bolsas con repostería que había traído y comienza a guardarlas en la nevera.

Al hacerlo, este nota que había uno que faltaba, justamente el pie de maracuyá que había comprado para Umbreon.

Charlie: Eh? Y el de... el de Umbreon?

El chico comienza a revisar bien los que había guardado y confirma que el del tipo Siniestro no estaba. Charlie saca de su bolsillo la factura que le habían dado y confirma que el bocadillo si fue cobrado, por lo que muy seguramente olvidaron empacarlo.

Charlie: Maldición... bueno, luego le traeré otra cosa.

Sin darle más vueltas al asunto, Charlie termina de guardar todo lo que había comprado e inmediatamente se dirige a la habitación. Charlie termina de alistar todo con Lucario y procede a llamar a los otros pokemones en la sala, aunque Umbreon se queda en el sofá como de costumbre, por lo que todos se van a la habitación para poder dormir.

Antes de hacerlo él también, Charlie se va al patio trasero, en dónde Gardevoir se encontraba sentada en la banca mirando al suelo aún algo molesta. Sin decir nada, Charlie solo se acerca para darle un rápido abrazo, un beso en la cabeza y le desea las buenas noches, así como también le sugiere no quedarse mucho tiempo ahí afuera, para luego volver al interior de la casa.

Aún sin moverse, pero un poco intrigada, Gardevoir ve al chico irse y está suspira un poco más calmada, siendo que le resultó agradable el acto del muchacho.

Al llegar de nuevo a la habitación, Charlie se acerca a Raboot y le da un besito en la frente de buenas noches, haciendo que esta se acurruque más y muy feliz.

Charlie llega hasta Lucario y esta parecía ya estar esperándolo, por lo que Charlie le mira con un semblante algo dudoso.

Lucario: ...

Charlie: ...

Lucario: (•⁠ᴗ⁠•)

Charlie: Hm...

Lucario: Yo también quiero!

Charlie: Claro que si -decía sarcástico.

El chico se acerca a Lucario y le da un beso rápido en la mejilla, quedando así muy satisfecha, haciendo que Charlie ría en silencio un poco por la reacción de la pokemon.

Finalmente, Charlie se acerca hasta donde estaba Rockruff, sin moverse y hecha una bolita de pelos, de cara a la pared y ocultando su rostro en su suave y esponjosa cola, por lo que este le da un besito rápido en su lomo por tener la cara cubierta, sin saber que ella estaba profundamente dormida.

Charlie: Buenas noches mi niñita... mañana me esforzaré por... hacerte feliz -decía en voz baja.

Finalmente, Charlie se acomoda en el colchón al lado de Lucario y Raboot, dejando la cama solo para Rockruff y Gardevoir, quedando dormido a los pocos minutos.

La cola esponjosa que cubría el rostro de Rockruff cae por inercia y se descubre su rostro profundamente sumido en un sueño. Sueño que le traía recuerdos que nunca había indagado.

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[Feliz...]

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[Yo... fui muy feliz...]

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[... Cuando ella y yo... nos conocimos...]

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En medio del bosque, hurgando entre los arbustos buscando algo para alimentarse, una hambrienta Rockruff merodeaba por los alrededores de un territorio algo desolado, territorio que había sido abandonado por muchos pokemones debido a la poca fertilidad del lugar para hacer crecer arbustos con bayas para alimentarse.

Habían pasado dos meses desde que los Lycanroc había desaparecido sin dejar rastro. Dos meses que habían sido los más difícil que ella alguna vez pudo imaginar. Dos meses en los que la pokemon de apenas 3 meses de nacida tenía que sobrevivir, defenderse y cuidarse por su propia cuenta, sin lecciones, sin consejos, sin nadie que la protegiera.

Fue increíble el cómo la tipo Roca pudo hacerle frente a algunos pokemones hostiles lo suficiente como para poder huir, pokemones que llegaban a multiplicar hasta 10 veces su tamaño.

Rockruff seguía caminando con su lengüita afuera, jadeando del cansancio y de no poder encontrar algo que le brinde energías a su cuerpo para continuar con la ardua tarea de seguir sobreviviendo.

En dado momento, la pequeña canina cae al suelo rendida y esta comienza a ver todo de forma borrosa. Sin saber por qué vino al mundo, sin saber de lo que se trataba la vida en realidad, sin saber qué hizo para ser abandonada a su suerte... Rockruff empezaba a perecer.

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Desde el otro extremo del bosque, un par de Ralts iban jugueteando entre ellos, teletransportándose y experimentando un poco con sus poderes psíquicos.

Mientras seguían jugando, uno de ellos desde una rama de árbol a la que se había teletransportado se percata de un cuerpo que yacía inmóvil en el suelo, por lo que se acerca cuidadosamente hasta el lugar siendo guiado por su curiosidad.

Ralts mira a una canina que no se movía en lo absoluto, por lo que decide llamar al otro Ralts para ver al pokemon en el suelo.

Ralts #1: Ves eso hermana?

Ralts #2: Qué le habrá pasado?

Se podía intuir que ambos Ralts eran hembras por su tono de voz. Las dos se quedan conversando entre ellas y una encuentra una rama, por lo que la toma y comienza a tocar a la Rockruff tendida en el suelo con la rama para ver si había alguna reacción.

Las dos Ralts comienzan a reírse al pensar que podrían jugar alrededor de la pokemon y hacer travesuras, pero sus planes se ven interrumpidos por un ruido que venía desde donde habían llegado.

Kirlia: Oigan tontas!! A dónde se fueron?! Recuerden lo que dijo mamá! Nada de alejarse de mi!

Flotando, una Kirlia venía llamando a lo que parecían ser sus hermanas menores, por lo que estas llaman a la mayor para mostrarle su gran hallazgo.

Algo intrigada y desde la distancia, Kirlia divisa a sus hermanas, así como un bulto extraño al lado de ellas.

Kirlia: Uh? Que es eso?

La Kirlia se transporta hasta el lugar donde estaban sus hermanas para poder ver un poco mejor el panorama.

Ralts #1: Mira esto Kirlia!

Ralts #2: Nos lo encontramos así!

Ralts #1: Y no se mueve!

Kirlia: Están tontas o que?! Cómo se les ocurre jugar cerca de este pokemon! Podría ser peligroso!

Ralts #2: A mí no me parece.

Ralts #1: Si! Mira!

La Ralts procede a tomar de nuevo la rama y comienza a picar un poco el cuerpo y cabeza de la Rockruff, por lo que Kirlia usa sus poderes psíquicos y le quita la rama a su hermana.

Kirlia: No hagas eso!

Ralts #1: Es divertido!

Ralts #2: Y nos gusta lo divertido!

Ralts #1: Jijiji.

Kirlia: Váyanse ya de vuelta a casa!!

La furia de la Kirlia asusta un poco a las dos Ralts, por lo que estas salen despavoridas por dónde vinieron mientras reían un poco de camino.

Por otro lado, Kirlia estaba a punto de irse, pero en el último instante esta escucha a la pokemon desmayada dar un leve quejido, casi como un lamento debido a su estado.

Kirlia se acerca a escasos centímetros de la tipo Roca y mira con algo de confusión su semblante fatigado, dándose cuenta al mismo tiempo que ella seguía respirando levemente.

Kirlia: Que diablos... fue lo que te pasó?

La tipo Psíquico-Hada se queda algunos segundos pensando qué hacer, por lo que luego de un buen rato de indecisión finalmente acomoda un poco sus ideas y mira nuevamente a Rockruff.

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[Nunca pensé que existieran pokemones que no atacaran a otros... todos siempre se preocupaban por los demás, todos se defendían, protegiéndose mutuamente con quienes vivían... es así como se suponía que mis padres debían comportarse?

Bueno... con el tiempo asumí que si... nunca supe a dónde fueron... pero siempre pensé que fue por mi... sigo sin saber que hice mal... hacía lo que ellos me decían, me portaba como ellos querían... pero aún así creo que no era lo que ellos querían.]

Tiempo después, en otro sector del bosque, una Kirlia se encontraba nuevamente regañando a sus hermanas Ralts, está vez seguidas por un tercer Ralts, con la diferencia a de este ser macho, por lo que la tarea de niñera se le había complicado un poco más a la pokemon.

Kirlia: Ya dejen de correr por todas partes!

Ralts #1: Pero ella fue la que dijo que teníamos que correr! -decía apuntando a su hermana.

Ralts #2: No es cierto! Fue Ralts el de la idea! -decía apuntando al hermano menor.

Ralts #3: Pero todos queríamos correr!!

Kirlia: No me importa!! Vuelvan a casa o los llevaré a todos jalados de la cresta!

Los tres Ralts salen corriendo del lugar riendo un poco, como siempre lo hacen luego de sus travesuras.

Mientras que la Kirlia veía a sus hermanos irse del lugar, un sonido capta su atención a un costado de donde estaba, siendo que una canina sale rodando desde unos arbustos con una piña de pino en su hocico.

Kirlia: Oh, ahí estás! Me ahorraste la tarea de ir por ti.

Rockruff: Jeje solo fui por esto! -decía lanzándole la piña.

Kirlia: Ya veo, es muy bonita.

Rockruff: Lo sé!

La tipo Roca se acerca hacía la Kirlia para volver a tomar su juguete, pero mientras lo hace ella comienza a cojear, cosa que Kirlia nota. Mirándola de forma más detenida, Kirlia nota unas marcas en sus patas que parecían ser rasguños, lo que podía estar generando su forma de caminar.

Kirlia: Rockruff.

Rockruff: Si?

Kirlia: Como te hiciste... ese rasguño?

El semblante de la tipo Roca decae un poco y esta mira hacia el suelo con algo de pena por la respuesta.

Kirlia: Rockruff... te atacaron?

Rockruff: Uhm... p-puede ser.

Kirlia: Agh... Rockruff... cuántas veces te he dicho que me llames cuando te metas en problemas -decía con tono suave.

Rockruff: E-Es que... yo tengo que defenderme... no quiero que te lastimen a ti -decía con tristeza.

Kirlia: Ay por favor! No digas tonterías Rockruff! Jejeje sabes que soy la más fuerte aquí, no?

Rockruff: Uhm... si.

Kirlia: Entonces?! Escucha, eres parte de nuestra familia ahora, así que no debes temer a pedir ayuda -decía con ternura.

La pequeña canina recompone un poco su semblante por las palabras y una caricia recibida por la Kirlia, haciendo que su colita se mueva un poco también.

Kirlia: Sabes? Si tanto quieres defenderte, que te parece si te enseño cómo pelear? Así también puedes velar por ti misma.

Rockruff: Enserio?!

Kirlia: Claro... no seré la mejor del mundo, pero... sé lo suficiente para patearle el trasero a cualquiera jeje -decía con orgullo.

Rockruff: Si! Si quiero! Gracias! Gracias! Gracias! -decía dando saltitos.

La tipo Roca se lanza para dar su primer ataque de lamidas en la cara de la Kirlia, quien reía por las cosquillas que le generaba y también se ruborizaba un poco por el afecto recibido.

Kirlia: Y-Ya basta!! Jajaja me haces cosquillas!! -decía quitándosela de encima con delicadeza.

Rockruff: Es que te quiero agradecer! Jejeje.

Kirlia: Jeje ya me podrás agradecer luego, por ahora volvamos con mamá y papá antes de que nos busquen a nosotras también.

La Kirlia comienza a flotar y toma rumbo por dónde vino, esperando que Rockruff también la siga, sin saber que esta quedó estática pensando en algo en específico.

Rockruff: Kirlia... que es una familia?

Kirlia: Eh?

Rockruff: Que es eso que somos? "Familia"

Kirlia: Uhm... pues... justamente eso, es lo que somos.

Rockruff: N-No... no entiendo.

Kirlia: Uhm... cómo te lo explico? Es más o menos pues... es como... ya sabes! Mamá, papá, los Ralts, yo y... tú.

Rockruff: Yo?

Kirlia: Claro que si!

Rockruff: Pero... yo no soy igual a ustedes... yo tenía papás, pero... desaparecieron.

Kirlia: No creo que ellos fueran tu familia.

Rockruff: Ah no?

Kirlia: Claro que no! Que clase de familia se aleja de los suyos? Ni siquiera se preocupaban por defenderte o alimentarte! Eso no es una familia. La familia es con quién tienes lazos, a quienes amas y con quiénes puedes confiar que te respaldarán... sin importar nada.

Rockruff: Yo...

Kirlia: Escucha... no sé muy bien lo que es una familia, pero si de hay algo que estoy segura es que ahora eres una de nosotros... y nosotros te trataremos como una de nosotros, de acuerdo? Tu serás parte de mi familia!

Los ojos de la canina se iluminan con la respuesta de la Kirlia, dejándola asombrada.

Kirlia ríe un poco en silencio por la expresión de la canina, pero esta sacude un poco la cabeza para salir de pequeño trance y vuelve a sonreírle a la tipo Psíquico-Hada de forma grata.

Ambas se comparten un poco la sonrisa dibujada en sus rostros y terminan yéndose en dirección a casa, dónde las esperaban una Gardevoir, un Gallade, tres Ralts y un huevo más, asegurando un futuro integrante más para esa familia que con mucho cariño y calidez habían acogido a una desamparada canina que fue dejada a su suerte, sin saber que el destino le tenía deparado algo mejor de lo que podría haber imaginado.

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[Me cuesta un poco pensar lo extraño que fue haber sido encontrada por una única familia tan linda como la de Kirlia, creo que nunca llegué a ver algún otro grupo de pokemones como ellos.

Bueno... Charlie fue esa excepción, pero él es un humano... aunque aún así... siento que todo cambió... siento como si viviera en un lugar distinto... comienzo a sentirme como... cómo cuando mis padres se fueron...

No sé que he hecho mal... ya no me dan el mismo cariño de antes... ellos creen que yo no me doy cuenta de las cosas... bueno, no todas, pero aún así... sé cuándo algo está pasando a mi alrededor, es solo que... no sé exactamente qué...

Y eso es justo lo que siento ahora... Lucario ha estado distante de mi... Charlie ahora solo da su atención a Umbreon y Raboot... y Gardevoir... ahora me odia.

Yo solo quisiera que... todo fuese como antes... cuando éramos solo los cuatro... antes de que todas las cosas malas pasaran... quiero seguir siendo feliz.]

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Muy temprano ese día, Charlie se levanta para preparar un desayuno especial para él mismo y poder dejarle comida a las demás pokemones. Charlie se prepara unos cuantos panqueques con banana, arándanos y bayas Ango, así como un café fuerte y unas fresas restantes de la nevera para poder tener la energía necesaria para el día que estaba a punto de afrontar.

El chico se apresura y se dirige al cuarto para tratar de despertar gentilmente a la Lucario. La pokemon despierta y Charlie le indica que lo acompañe hasta la cocina para contarle de su plan.

Charlie: Lucario, perdón que te levanté tan temprano.

Lucario: Mmmhh... tranquilo, me hace bien no dormir tanto -decía estirándose.

Charlie: Jejej genial! Escucha, necesito pedirte un favor muy grande.

Lucario: Huh? Enserio?

Charlie: Si! Mira, como te dije, voy a trabajar horas extra hoy y el resto de la semana, pero haciendo cálculos, creo que no me va a alcanzar para la pokeball de Rockruff.

Lucario: Oh... que planeas hacer entonces?

Charlie: Lucario... de verdad me da pena esto, pero... crees poder ayudarme con esto?

Lucario: Enserio? Cómo puedo ayudarte?! -decía impresionada.

Charlie: Mira, al medio día, cuando sea mi hora de almorzar, vendré por ti! He notado que algunos vecinos tienen algunos problemas menores en sus hogares, como malezas en sus patios, algunos problemas con pokemones salvajes, algunos necesitan ayuda con sus flores de jardín y demás cosas...

Lucario: Oh... y eso que tiene que ver?

Charlie: Escucha, si trabajara yo en una sola casa para ganar dinero extra, creo que no sería mucho, pero si pudiera ayudar en todas las casas posibles, creo que sí ganaría una buena cantidad.

Lucario: Espera! Creo que ya entiendo.

Charlie: Así es! Crees que puedas ir conmigo a ofrecer tu ayuda en las casas? Cómo dije, creo que son cosas que tú puedes hacer! La mayoría de vecinos que tengo aquí son señoras sin mucha fuerza. Y tú tienes de sobra jejeje.

Lucario: Claro que si! Cuenta conmigo!

Charlie: Gracias Lucario!! En verdad te lo agradezco!!

El chico abraza a la pokemon por la emoción, por lo que ella también corresponde de la misma manera.

Charlie: Cuando venga te explicaré un poco más a detalle, de acuerdo?

Lucario: Suena bien!

Charlie: Excelente! Tenemos un plan entonces!

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Rockruff despierta de forma repentina y algo agitada, por lo que decide levantarse y calmarse mientras trata de asimilar que solo estaba soñando.

Al calmarse, Rockruff se da cuenta que había dormido mucho tiempo, parecía que era más o menos medio día, por lo que la canina baja de la cama algo adormilada para dirigirse a la sala e intentar buscar un poco de agua.

Al llegar a la sala, esta nota que no había nadie en la casa. Rockruff sale al patio trasero y a la distancia logra ver a Gardevoir entrenando a Raboot y Umbreon en el llano que ya conocían.

Rockruff: Gardevoir!! Puedes venir??!!

La pokemon grita con algo de esfuerzo con intenciones de llamar la atención de la tipo Psíquico-Hada, pero esta no logra escucharle por estar ceñida en el entrenamiento, además de la distancia.

Rockruff: G-Gardevoir!! Tengo sed!! Me ayudas??!!

Sin éxito, Rockruff se da cuenta que la pokemon no da señales de ponerle atención, por lo que decide volver al interior de la casa. Cerca de la cocina, Charlie solía poner un tazón de agua en caso de que ella lo necesitara, pero al llegar, como el agua del tazón no había sido cambiado en un largo tiempo, Rockruff se da cuenta que el agua ahí estaba muy sucia, con partículas de polvo muy visibles y hasta con insectos muertos.

La canina decide tratar de llegar al lavabo, pero la altura de este dificultaba bastante las cosas para ella. Con algo de preparación, Rockruff se concentra un poco antes de dar un gran salto que la haga llegar hasta ahí.

Tras algunos segundos, Rockruff salta y logra llegar al borde del lavabo, pero la superficie se encontraba húmeda, por lo que resbala y cae al piso, golpeándose fuertemente parte de su cuerpo contra un gabinete semi abierto.

La pokemon se resiente por el golpe recibido y al levantarse se da cuenta que una de sus patas traseras fue lastimada. Valientemente y sin perder el tiempo, Rockruff se prepara para volver a saltar hasta el lavabo, pero el pequeño esguince la hace dar un mal impulso, chocando con el borde del lavabo y cayendo una vez más al suelo.

Tras varios intentos fallidos y un sobreesfuerzo que la lleva a agravar la herida en su pata, Rockruff logra dar un salto con el que logra aferrarse lo suficiente al lavabo. Con mucho esfuerzo y jadeando por la energía usada, Rockruff logra subirse a la sobremesa de la cocina y abrir el grifo con su hocico para finalmente poder tomar agua.

Al terminar, Rockruff salta del lavabo y al llegar al piso se da cuenta de lo muy lastimada que quedó su patita trasera, haciéndola cojear y provocándole un dolor muy agudo en esa extremidad.

Triste y adolorida, Rockruff se dirige hasta el sofá de la sala para poder descansar un poco de su ardua tarea por saciar su sed, quedando dormida al cabo de una media hora de no hacer nada.

Gardevoir y los otros dos pokemones vuelven al cabo de una hora y media a la casa para poder tomar un descanso y merendar algo. Al abrir la nevera, Gardevoir recuerda que Charlie antes de irse indicó que había traído algo de repostería la noche anterior.

Gardevoir: Oigan todos! Charlie trajo pastelitos anoche!

La Gardevoir mira bien y nota una flauta dulce, un pastel de pollo y dos rebanadas de pie de limón.

Gardevoir: Uh? Creo que el mío es la flauta -decía dudosa.

Al lugar llegan Raboot y Umbreon bastante emocionados para poder tomar algo de lo que mencionaba la Gardevoir.

Raboot: Yo quiero este pastel! -decía saltando para tomarlo.

Umbreon: Eh? Por qué hay dos iguales?

Gardevoir: Uhh... no lo sé, Charlie los trajo.

Umbreon: Será que me trajeron dos a mi?!

Gardevoir: Uhm... no lo sé, si fuera tú dejaría uno. Además entrenar con el estómago lleno te puede hacer mal.

Umbreon: Hmm... bueno! Solo uno.

La Gardevoir ayuda al pokemon pasándole el bocadillo mediante sus poderes psíquicos y este lo toma de un salto.

Finalmente, Gardevoir se aleja para ir a la sala y preguntarle a Raboot si le gustaría calentar su bocadillo, sin darse cuenta de que el Umbreon detiene la puerta del refrigerador y este logra trepar rápidamente hasta donde estaba el segundo pie de limón, comiéndose de un bocado el que ya tenía en su boca para tomar el otro.

Umbreon: Tal vez nadie lo note -decía entre risas.

El pokemon toma de un mordisco la repostería y baja de la nevera, empujando la puerta para cerrarla y continúa como si nada hubiese pasado.

En la tarde, a eso de las 2:34 p.m Rockruff vuelve a despertar, por lo que se dispone a estirarse un poco, pero al hacerlo siente el intenso dolor punzante, contrayendo un poco el cuerpo y provocándole un leve quejido.

Con algo de dificultad, Rockruff baja del sofá y trata de caminar hasta la cocina para buscar algo para comer, siendo que su estómago comenzaba a hacer ruido.

Al llegar a la cocina, esta se encuentra con Gardevoir en el lavabo encargándose de limpiar algunos platos que se habían dejado allí desde la mañana.

Rockruff: G-Gardevoir?

La pokemon continuaba en su labor sin voltear a la canina, haciendo que está se sienta un poco ignorada.

Rockruff: G-Gardevoir... tengo hambre... s-sabes si Charlie me dejó algo? Me lastimé mi pata... me duele mucho... no puedo moverme mucho...

Cómo si no le importara en lo absoluto, Gardevoir no hacía ni el más mínimo movimiento por notar a la tipo Roca.

Rockruff: G-Gardevoir... aún somos familia?

Gardevoir: ...

Rockruff: Gardevoir... p-perdóname... no quise hacer nada con intención ayer... yo quiero hablarte de nuevo.

Gardevoir: ...

Rockruff: Aún me quieres?

La tipo Roca deposita toda su fe en la pregunta, rogando porque la tipo Psíquico-Hada volteaste a verla al menos un momento.

Los segundos pasaban y el ánimo de Rockruff comenzaba a caer en picada. Ver cómo la pokemon a la que más apreciaba en todo el mundo ignorarla le rompía el corazón, pero le daba a entender que le trataría igual.

Rockruff: Y-Ya no me siento igual que antes... siento que Charlie y Lucario se han distanciado...

En su mente, Rockruff veía las siluetas de Charlie y Lucario alejándose lentamente, como si de una ilustración de sus emociones se tratase.

Rockruff: P-Pero... yo aún te quiero a ti... y a todos... solo quiero disculparme por lo de ayer si es lo que te molestó... quiero que volvamos a ser las hermanas de antes... quiero volver a cómo éramos antes... quiero dejar de sentirme... así.

Gardevoir: ...

Rockruff:  G-Gardevoir?

Con sus ojitos muy humedecidos por las lágrimas, Rockruff desiste en su diálogo. Con su cola y orejas bajas, esta se retira muy entristecida hasta la habitación, en dónde mete debajo de la cama para acurrucarse en la esquina más oscura para sollozar desconsoladamente.

Mientras, en la cocina, Gardevoir termina de lavar los platos y trastes con los que estaba atareada, para luego sacar de dónde se encontraban sus oídos unos aparatos pequeños con los cuales se podía percibir una melodía que venía de ellos.

Gardevoir: Vaya... Charlie tenía razón, esto ayuda a concentrarse y relajarse.

La pokemon toma un pequeño reproductor de música  que tenía en la sobremesa de la cocina, siendo que estaba usando los audífonos inalámbricos que el chico utilizaba y le había dejado en la mañana para usarlos, además de mostrarle también cómo se usaban antes de irse.

Gardevoir: Eh?

Gardevoir se voltea y tiene la sensación de que había alguien detrás de ella, pero al mirar todo el panorama no logra determinar nada fuera de lo normal.

Sin darle mucha importancia, Gardevoir mira por la ventana de la cocina a Raboot y Umbreon entrenando a la lejanía en el llano, por lo que se apresura para dejar todo ordenado y salir nuevamente para ayudarlos en su entrenamiento.

Por otra parte, Charlie estaba a tan solo una hora de terminar su turno laboral, mientras ordenaba algo de papeleo semanal junto a su amigo del trabajo.

Charlie: Jeje.

Joan: Cuenta el chiste.

Charlie: El hecho de que sepas más sobre anime que de tu papá.

Joan: Al menos yo lo puedo llamar.

Charlie: HEY!

Joan: Jajaja ya ya perdón.

Charlie: Pff.

Joan: Y bueno? Que te tiene tan contento?

Charlie: Nah... es algo tonto.

Joan: Cuentaaaa.

Charlie: Hmm... bueno... solo no te rías.

Joan: Bueno.

Charlie: La cosa es que le dije a Lucario que me ayude a hacer algunos encargos con los vecinos cercanos.

Joan: Okay.

Charlie: Y le dije la excusa de que era para una pokeball para una sola de las pokemones en casa, pero lo que no le dije es que realmente compraré de nuevo pokeball's personalizadas para todas!

Joan: Planeas atraparlas a todas?!

Charlie: Así es... creo que lo merecen y pues... es lo menos que puedo hacer por ellas luego de estar siempre para mí.

Joan: Suena a una mentira muy linda.

Charlie: Jeje lo sé. Inteligente, no?

Joan: Bastante.

El chico continúa trabajando arduamente, pero sin borrar la gran sonrisa que le provocaba saber de su plan para atrapar a todas las pokemones amigas que vivían con él, tal y como ellas siempre anhelaron.

Al finalizar su turno, Charlie se retira del edificio en su motocicleta y este pasa por las casas de los vecinos con los que había acordado prestar la ayuda de Lucario, cobrando el pequeño monto acordado y recaudando una buena cantidad por la variada cantidad de casa que ayudaron.

El muchacho llega hasta la última casa, en la cual Lucario terminaba su último trabajo de arrancar la maleza del patio, justamente la casa de Linoone y su viejo entrenador Ronald.

Charlie llega y habla con Linoone para que este vaya hasta el interior de la casa e intentar evadir alguna discusión con su dueño, el cual aún repudiaba la presencia del chico.

El pokemon trae el dinero consigo para que así Charlie y Lucario puedan despedirse y retirarse por un merecido descanso en casa.

Ambos llegan a casa nuevamente y al bajar de la motocicleta sienten de golpe el cansancio que ambos cargaban debido al esfuerzo realizado durante el día.

Lucario: Cielos... estoy exhausta.

Charlie: Yo también, pero tranquila, solo será por hoy y los próximos tres días, al menos hasta el jueves.

Lucario: No hay problema, solo debemos descansar bien.

Charlie: Y como te fue?

Lucario: Todo muy fácil, pero muchas tareas si requerían bastante esfuerzo. Cómo es que los ancianos tienen tareas tan pesadas?

Charlie: Jeje lo sé, es extraño.

Lucario: Aunque... hubo un momento algo extraño en la tarde.

Charlie: Ah sí? Que pasó?

Lucario: Bueno... sonará extraño, pero en dos ocasiones tuve la sensación de que alguien me observaba.

Charlie: De que hablas?

Lucario: Cuando lo sentí por segunda vez, hice un escaneo de auras en el área y se sentía algo de distorsión, pero no pude ver exactamente de dónde venía.

Charlie: Huh... extraño.

Lucario: No pasa nada si me intentan atacar y yo me defiendo, verdad?

Charlie: Siempre y cuando no mates a nadie.

Lucario: Bien!

Charlie: Bwaaah~... cómo sea, entremos ya, que me estoy cayendo de sueño.

Las ojeras que ambos cargaban comenzaban a hacerse más presentes, por lo que se dirigen a la puerta para entrar y cerrarla posteriormente.

Lucario: Iré a preparar el colchón.

Para su sorpresa, no había nadie en la sala más que Umbreon dormido en el sofá, al parecer todos habían ido a la cama temprano igualmente. Aunque Charlie había llegado más tarde de lo habitual por sus horas de trabajo extra, haciendo comprensible la hora de dormir de todos en la casa.

El chico deja algunas cosas listas para el día de mañana y luego se va rápidamente hasta su habitación para cambiarse y tirarse rendido en el colchón, siendo que está vez él quedaría al borde del mismo, mientras que a su derecha yacía Lucario ya babeando la almohada por el cansancio, incluso llegando a roncar.

Charlie se acuesta y este comienza a quedarse profundamente dormido. Desde debajo de la cama, una lastimada Rockruff sale lentamente con su semblante entristecido y esta cojea hasta donde se encontraba el muchacho para poder hablarle de cerca.

Rockruff : C-Charlie.

Charlie: Ag... pequeña... -decía semi dormido.

Rockruff: Charlie... Gardevoir no me habla... no he podido comer tampoco -decía en voz baja.

Charlie: Ah... yo te... había traído algo...

Rockruff: N-No... no hay nada.

Charlie: Si... el... de limón...

Rockruff: C-Charlie... me duele mi patita -decía entristecida.

Charlie: Ah... si... entrenaste uro? -decía aún más adormilado

Rockruff: C-Charlie... me siento triste... tu aún me quieres?

Charlie: Eshe... bue... jueve...

El cansancio hacía que Charlie ni siquiera pudiera vocalizar palabras coherente a la canina. Rockruff trata de acercar su rostro a la mano estirada de Charlie para que él le acariciara, pero este había quedado completamente dormido, dejándola sumamente entristecida.

Con pasos lentos y desanimados, Rockruff vuelve a debajo de la cama para llevar ahí su sueño el resto de la noche, permaneciendo lejos de todos para evitar sentirse como el estorbo que se sentía en ese momento.

Los demás días fueron muy complicados, largos y repetitivos, casi toda la semana se trataba de Gardevoir entrenando casi todo el día en el llano, Charlie y Lucario todo el día fuera de casa y nadie más que ella velando por su salud.

Rockruff sentía la eternidad del día al ver cómo su casi hermana Gardevoir ahora parecía evitarla a toda costa, así como Charlie y Lucario ya ni parecían prestarle atención el poco tiempo que pasaban en la casa, sin saber que todo era causa del cansancio con el que llegaban. El sin fin de pensamientos que pasaban por su cabecita la entristecía más, y no había nadie con quien pudiese liberarse o poder conseguir ayuda.

Finalmente, el gran día había llegado. Era jueves y justamente Charlie había recibido un mensaje en su teléfono, indicando que las pokeball's habían sido terminadas y alistadas para recoger, emocionando mucho al joven por el gran momento que se avecinaba.

A la hora de su almuerzo, Charlie va al lugar y el señor dueño de la tienda ya lo esperaba con las pokeball's guardadas en una caja especial de cada una, todas dentro de una bolsa para llevar.

El chico paga la cantidad solicitada por el encargo apresurado y este vuelve a su motocicleta para abrir la bolsa nuevamente y contemplar los regalos.

Charlie: Jeje! Esto es genial, Rockruff y las demás se pondrán muy contentas al ver que volví a conseguir las Friend ball's con sus colores impresas en ellas!

Más tarde ese mismo día, Lucario terminaba el último encargo de la semana en la casa de una vecina anciana del muchacho, siendo aproximadamente las 5:21 p.m.

Anciana: Solo termina de regar el césped, querida.

Lucario: Claro!

Anciana: Eres una pokemon muy linda y amable.

Lucario: Jeje se lo agradezco mucho.

Anciana: Por tu servicio, te pagaré un poco más por ser tan amable. Espera aquí para poder ir por el dinero.

Lucario: H-Hey! C-Charlie es quien se encarga de eso!

Para el momento en que la pokemon había terminado su frase, la anciana ya se había ido al interior de la casa. Lucario suspira, pero continúa con su último tarea regando el césped de la señora. Mientras lo hacía, una sensación extraña recorre su espalda, haciéndola voltear hacia la calle y ver si había algo fuera de lo normal en las cercanías.

Lucario trataba de buscar con la vista por todas partes alguna pista que le pudiese ayudar a entender de dónde venía esa sensación de ser observada nuevamente, pero no había nada que le indicara eso. Muy intrigada, Lucario deja la regadera que usaba para las flores en el suelo y comienza a concentrarse en usar sus sensores de aura.

Anciana: Aquí está, linda!

Lucario es sacada de su trance e inmediatamente voltea hacia la señora para aceptar el dinero, dejándole un mal presagio al no poder investigar un poco más el origen de esa sensación que tuvo.

Posteriormente, a eso de las 6:07 p.m, Charlie llega a casa finalmente con Lucario en la motocicleta, felices de poder haber completado su misión de la semana y poder regresar temprano a casa.

El sol comenzaba a ocultarse, Charlie y Lucario dejan sus cosas y el chico comienza a buscar a las pokemones por toda la casa para reunirlas para la sorpresa.

Charlie: Aquí no hay nadie! Dónde está Umbreon? Más le vale comerse este sándwich que le traje.

Lucario: Charlie! Están en el llano!

Charlie: Oh! Ahí voy!

El chico sale emocionado al patio trasero junto a la pokemon azulada, sin saber que Rockruff permanecía debajo de la cama sumida en sus pensamientos.

[Acaso hice algo mal? No logro entender por qué dejaron de amarme! Quiero volver a sentir el afecto de mis amigas! Quiero volver a ser cargada por Charlie! Dormir todos juntos en el colchón hasta tarde! Desayunar todos juntos como... cómo solíamos hacerlo...

Acaso... ya no me quieren... aquí?]

La pokemon sale de su escondite cojeando por su pata lastimada y esta trata de caminar rápido en busca del muchacho a quien acababa de escuchar.

Rockruff: C-Charlie! Charlie!

La tipo Roca llega hasta la sala y estando allí logra escuchar algunas voces en la lejanía del patio trasero, por lo que se dirige allí de forma desesperada.

La escena que la pequeña Rockruff presencia le hace sentir un vacío inmenso en su interior, colapsando todos los sentimientos acumulados los últimos días. La tenue luz del sol iluminaban la sombra de un chico alzando sobre su cabeza a lo que parecía ser Umbreon por su silueta. En su pierna, se podía ver cómo Raboot se le acercaba para abrazarlo, al igual que Gardevoir y Lucario parecían disfrutar del momento con Charlie y el variocolor.

Una escena desgarradora le hacía entender a Rockruff que todos allí eran felices, su presencia no afectaba la felicidad y la unión que aparentaban tener los seres que más había amado en su vida, dejándole en claro que ella... ya no era necesaria.

[Yo... debí suponerlo... debí... verlo... toda su atención ahora es para Umbreon... Raboot... Lucario... Gardevoir... ya no me necesitan... Rockruff no está incluida más en... ese círculo...]

Rockruff retrocede lentamente y esta corre a través de la puerta que había quedado semi abierta hacia el patio delantero, corriendo por la calle lejos de la casa mientras derramaba algunas lágrimas.

Mientras tanto, en el llano, lo que en realidad sucedía era que Charlie había alzado al Umbreon para tratar de ahorcarlo, mientras que las otras pokemones trataban de quitárselo de encima.

Charlie: Eres tonto?! Solo un pie de limón era para ti!!

Umbreon: Ahh!! L-Lo siento!! Tenía hambre!!!

Raboot: Déjalo Charlie!

Lucario: Charlie!! E-Espera!!

Charlie: Enano baboso!! Uno era de Rockruff!!

Gardevoir: Suéltalo Charlie!! Fue mi culpa!!

Una escena algo caricaturesca continúa por algunos minutos más, hasta que finalmente logran alejar al chico del variocolor.

Ya más tranquilizados, todos vuelven al interior de la casa y Charlie se asegura de que todos se sienten en el sofá de la sala para que, a su lado, Lucario lo acompañe en su pequeño anuncio.

Charlie: Bien, chico y chicas... tal vez se preguntarán... por qué Lucario y yo hemos estado tan ausentes estos días, no es así?

Todos asienten con la cabeza, mientras que una gran sonrisa se dibuja en el rostro de Charlie.

Charlie: Jeje bueno... la cuestión es que... he estado preparando una sorpresa... pero no solo para quien en un principio había mencionado, sino para todas! -decía mirando a Lucario.

Lucario: Uh? De que hablas?

Charlie: Jeje! La verdad te mentí Lucario, ese dinero adicional que estuvimos ahorrando no era solo para Rockruff!

Gardevoir: Rockruff?

Umbreon: No estoy entendiendo.

Raboot: Yo menos

Charlie: Dejen les muestro.

El chico se va rápidamente hasta la mesa, en dónde había dejado la bolsa con las pokeball's personalizadas, por lo que la toma y lleva nuevamente a la sala.

Charlie: Listo! Pero... uh... antes de hacer el anuncio, dónde está Rockruff?

Los pokemones se miran entre ellos y notan la ausencia de la tipo Roca.

Gardevoir: No la he visto.

Raboot: Yo tampoco.

Umbreon: Seguirá afuera?

Gardevoir: Ella no entrenó con nosotros hoy.

Umbreon: Oh... cierto.

Charlie: Vamos a ver, no quiero hacer el anuncio sin ella.

Todos se dirigen al patio trasero y comienzan a llamarla con la esperanza de que aparezca por alguna parte, sin embargo, esta no aparece.

Luego de revisar bien el patio trasero y el llano, Charlie y los demás comienzan a preocuparse por la ausencia de Rockruff, haciendo que todos vuelvan al interior de la casa.

Gardevoir: Ugh! No puede ser que lo volvió a hacer!! Ven de lo que hablo?

Charlie: A dónde pudo haber ido?

Gardevoir: No tengo idea!

Raboot: Ya buscaron en toda la casa?!

Umbreon: Revisaré el cuarto y el baño! -decía yéndose.

Raboot: Miren! La puerta está semi abierta!

Todos observan la pequeña fisura de la puerta delantera, por lo que deciden salir al patio y buscar a Rockruff.

Charlie: Alguien la ve?

Gardevoir: No.

Lucario: Me parece.... creo que siento su olor!

Charlie: Que?

Lucario: Si! Veo un rastro de aura por dónde viene el olor! Puede que sepa por dónde fue!

Charlie: Y que estamos esperando?!

Lucario: Vamos en la moto!

Charlie: Vamos!

El joven y la tipo Lucha-Acero corren hasta el vehículo y en cuestión de segundos estos lo encienden para comenzar la búsqueda.

Gardevoir: Voy detrás ustedes, esta vez si que le va a ir feo -decía con seriedad.

Charlie: Es mejor que nos esperen aquí.

Raboot: Yo también quiero ir.

Charlie: Ugh... solo... quédense aquí!

El chico arranca la motocicleta repentinamente y salen a toda velocidad, dejando atrás a las demás pokemones y a Umbreon, quien venía saliendo de la casa.

Gardevoir: Vamos.

Raboot: P-Pero Charlie dijo... -es interrumpida.

Gardevoir: Dije que vayamos!

La pokemon comienza a flotar y trata de irse por dónde se fueron Charlie y Lucario, dejando sin otra opción a Raboot y al Umbreon.

Umbreon: Eh?! A quien seguimos?

Raboot: Solo vamos! No te quedes atrás!

Mientras tanto, Charlie iba manejando en lo que Lucario se concentraba en las auras cercanas, así como también trataba de detectar un aroma que le diera una pista.

Lucario: Creo que lo encontré!

Charlie: Por dónde?!

Lucario: Aquellos árboles de por allá!

El chico mira una arboleda algo densa que conectaba con el bosque pokemon que Charlie y sus amigas pokemones conocían, por lo que este se acerca a un costado de la calle para dejar su moto ahí y tratar de que ambos continúen el trayecto a pie, sin percatarse de un vehículo que se estaciona cerca de donde el joven había dejado su motocicleta.

A los pocos minutos de ingresar a la arboleda, Charlie y Lucario logran escuchar las hojas secas y ramas quebrarse a una distancia cerca, siendo que Rockruff los había escuchado y trataba de huir de ellos.

Charlie: Rockruff!! Chiquita!! Dónde estás?!

Lucario: Rockruff!! No corras!!

A una distancia de al menos 30 metros, Charlie y Lucario podían ver los arbustos moverse, sin mencionar que el aroma y la esencia del aura eran exactamente los de Rockruff, lo que hace que ellos comiencen a perseguirla lo más rápido posible.

Charlie: Rockruff!! Vuelve!!

Lucario: Enana!! Deja de huir!!

Charlie: Por qué corres, Rockruff?!

Rockruff: Váyanse!! Déjenme sola! -decía con voz entrecortada.

Charlie: Por favor vuelve Rockruff!!

Lucario: Ven Rockruff!

Los tres individuos continúan su persecución por varios minutos, hasta que logran alcanzar a la canina, debido a que esta cae a causa de su pata lastimada.

Charlie: Rockruff!

Rockruff: V-Váyanse!

Lucario: Que te sucede Rockruff?!

Rockruff: No quiero hablar con ustedes! Váyanse! -decía al borde del llanto.

Charlie y Lucario se miran con confusión por la actitud de Rockruff, siendo algo bastante impropio de ella la forma en que les hablaba.

Charlie: Que te pasa, pequeñita?

Lucario: Hay algo que te moleste?

Rockruff: T-Todo!! Quiero irme!! Quiero dejar de ser un estorbo!! Ustedes... ya no les importo!

Charlie: N-No... no te entiendo, Rockruff... por qué dices esto?

Rockruff: Ustedes... ya no se preocupan por mi! Gardevoir ahora me odia... y... ya nadie me quiere...

Charlie: D-De que estás hablando nena?! Cómo que nadie te quiere?

Lucario: Por qué lo dices, Rockruff?! Nosotros si te queremos!

Rockruff: Creen que soy una tonta! Pero no lo soy!! Yo también me doy cuenta de que algo pasa... no sé bien lo que es pero... yo también sé que cosas pasan cuando ustedes intentan ocultármelo!

Charlie: Rockruff... nosotros no te ocultamos nada... te queremos como siempre lo hemos hecho.

Rockruff: Siempre me tratan como una tonta!! Están tan ocupados en su relación que ni se acuerdan de mi!

Lucario: R-Relación?

Rockruff: Sé que Lucario está enamorada de ti Charlie! Y aún así piensan que yo no sé... sé que ahora Umbreon es todo lo que te importa y que Gardevoir ya no me quiere... ella ya no quiere cuidar de mi por... cuidar a otros...

La pokemon comienza a dejar salir lágrimas de sus ojitos, dejando bastante impactados a Charlie y Lucario por todo lo mencionado.

Rockruff: Yo... yo siento que... ya no pertenezco aquí... que ese ya no es mi hogar.

Lucario: Rockruff...

Charlie: Rockruff... cielos... pequeñita... escúchame por favor...

Charlie trata de ponerse de cuclillas para hablar mejor con la pokemon, al mismo tiempo que intenta acercarse, por lo que Rockruff trata de retroceder de igual forma.

Charlie: Rockruff... lamento que te hayas sentido así todo este tiempo... e-en verdad no sabía que... e-escucha... es verdad... tal vez te hemos estado descuidando un poco este tiempo... pero Rockruff... te amamos con todo el corazón, pequeña.

Rockruff mira con atención el semblante arrepentido de Charlie. En su expresión ella podía notar la sinceridad de sus palabras, así como la expresión de pena en Lucario, quien la veía fijamente también.

Charlie: Rockruff... pueda que te hayas sentido sola... y créeme que lo siento muchísimo... pero ninguno de nosotros tiene nada contra ti, todos te seguimos amando por ser la bolita de pelos que ilumina nuestras vidas... que me alegra el corazón a mi...

Lucario: Rockruff... hay un motivo por el cual Charlie y yo hemos estado ausentes estos días.

Poco a poco, Charlie saca de su bolsillo trasero una pokeball. Dicha pokeball, presentaba los colores café oscuro, claro y algunos puntitos blancos alrededor de toda la superficie, siendo específicamente los colores que representaban a Rockruff.

La canina, al ver la pokeball, sus ojos se iluminan por los tenues rayos de luz lunar que se filtraban entre las hojas de los densos árboles que recubrían el lugar. Charlie extiende su brazo para Rockruff vea la pokeball más de cerca y así pueda confiar en sus palabras.

Charlie: Rockruff... mi pequeña bola de ternura... estuvimos trabajando... para que pueda darte este obsequio y pedirte algo que siempre estuviste queriendo... pero que nunca accedí por ser un cobarde.

Rockruff: C-Charlie...

Charlie: Rockruff... por ti y todos los demás me he dado cuenta que ustedes son la compañía que quiero tener a mi lado... la familia que quiero tener. Me han demostrado que... yo soy el que debe cambiar y... aunque aún trato de hacerlo... es innegable el hecho de que... ustedes han hecho de mi vida algo mejor de lo que era... me han apoyado cuando más lo necesité... y ahora... yo quiero que ustedes... que tú, Rockruff... seas mi pokemon.

Las lágrimas dejan de salir y correr por el rostro de Rockruff, mientras que una punzada se empieza a hacer presente en su pecho.

Poco a poco, Rockruff comienza a avanzar hasta la mano de Charlie, mientras que su semblante ligeramente se recomponía por las palabras de su amigo, al mismo tiempo que su colita comenzaba a moverse leve y progresivamente, haciendo que sus corazones comiencen a latir con rapidez.

Sin embargo...

Antes de que Rockruff logré tocar el botón con su hocico para ser absorbida, Lucario vuelve a sentir esa  alarmante sensación de ser observada y que había sentido en días pasados , pero esta vez combinado con una sensación de peligro inminente que la hace espabilar en un instante, haciendo que voltee hacia atrás.

Cómo en cámara lenta, una pokeball es lanzada e impacta fuertemente en el pecho de la pokemon, absorbiéndola y desapareciendo.

Charlie voltea completamente anonadado y junto a Rockruff quedan paralizados al ver cómo la figura de Lucario se introducía en el objeto.

En menos de un segundo, Charlie es golpeado fuertemente en el rostro, haciendo que este caiga al suelo adolorido y aturdido. Con mucho temor y confusión, Rockruff logra distinguir dos figuras que se postraban detrás de Charlie, una de ellas parecía tener una especie de rifle en sus manos, con el que había golpeado a Charlie en la cara.

Chico: Jejej eso fue fácil.

Chica: Oh... pero creo que aún no ha tenido suficiente -decía mirando a Charlie.

La pokeball en la que había sido encerrada Lucario continuaba moviéndose de un lado a otro, al mismo tiempo que Charlie trataba de reincorporarse. Al intentar voltear, este recibe otro fuerte golpe en el rostro, seguido de una patada por ambos sujetos.

Charlie: Agh!! Q-Quien demonios son?!

Charlie trata de volver a reincorporarse y darle un derechazo a la tipa sin arma, pero los dos se coordinan para evadir y contraatacar al muchacho, dándole una patada en el estómago nuevamente, así como un culatazo en la espalda que lo deja completamente sin aire en el suelo, retorciéndose por el dolor.

Chico: Ahora... ella -decía apuntando a Rockruff de forma amenazante.

Antes de que la chica pueda hacer algo, un destello rojo estalla detrás de ella, desvelando que Lucario había logrado escapar de la pokeball.

Lucario: ARGH!! Charlie!! Ustedes...!!!

Chica: Escapó!

Chico: Lo tengo!

Lucario sale preparada para darles una paliza a los tipos, pero el chico acciona su arma rápidamente y comienza a disparar en todas direcciones hacia la Lucario, quien logra reaccionar a tiempo y salir del rango de disparo del chico, pero haciendo que deba alejarse del área.

Rockruff: D-Dejen a Lucario!!

La tipo Roca salta en dirección al chico para poder atacarlo con un Placaje, pero este se gira a tiempo, logrando accionar su arma.

Tres detonaciones son escuchadas y un grito de dolor eriza la piel de Charlie y Lucario, quienes no pueden actuar ni hacer nada en el momento.

Rockruff: AHHHH!!!!

La pobre pokemon cae al piso con dos perforaciones en su cuerpo, una en su abdomen y una en su pata derecha delantera.

Charlie: NO!!! ROCKRUFF!!!

El muchacho trata de impulsarse para golpear al chico con el arma en su pie, pero este redirige su arma a él y le detona dos disparos que ambos dan en su pierna izquierda.

Charlie: ARRGHHH!!!

Chico: Llévate a la perra!! Yo me encargo de la otra!!

El chico se voltea antes de que Lucario salte al ataque y este comienza a repelerla con disparos en todas direcciones, mientras que la chica saca otra pokeball y le apunta a la herida Rockruff en el suelo.

Rockruff: AHH!! Charlie!!! Ayuda!!! -decía sollozando.

Charlie: Malditos!! Déjenla!!! Dejen a mi Rockruff!!!

Sin tiempo de nada, Charlie mira como en cámara lenta la pokeball arrojada a su pequeña Rockruff, absorbiéndola por completo y desapareciendo su figura del campo.

Chica: La tengo!! Que hay de la otra?!

Chico: Con esta basta!! Esta otra nos dará problemas!! Larguémonos de aquí.

El chico y la chica misteriosos se alejan de dónde yacía Charlie retorciéndose del dolor y disparando al mismo tiempo a la Lucario, quien no podía hacer nada más que alejarse y cubrirse con los troncos de los árboles de los disparos del chico con arma.

Charlie: ARGHHH!! Lucario!! Estás bien?!

Lucario: Estoy bien!! Pero se la llevan!! No puedo acercarme!!

Charlie: Ayúdame!!

Lucario baja de un árbol al cual había trepado y se dirige corriendo hasta donde estaba Charlie, al mismo tiempo que los otros individuos salían de la arboleda a toda prisa, mientras que la pokeball en la que fue encerrada Rockruff seguía agitándose, índice de que aún no era atrapada.

Al llegar a la calle, cercano a la moto de Charlie, un auto viejo de color negro con los vidrios oscuros enciende su motor y este se acerca a los individuos para sacarlos de ahí. Mientras estos subían al vehículo, la chica misteriosa logra ver a la distancia a un grupo de pokemones que venían acercándose a toda prisa, siendo Gardevoir, Raboot y Umbreon, quienes notan la presencia de los rufianes.

Chofer: Que demonios miran?! Súbanse rápido!! -decía otro chico que manejaba el vehículo.

Chica: Creo que vienen los...

Antes de terminar su frase, un destello rojo aparece cerca del abdomen de la chica y la figura de Rockruff comienza a definirse en el suelo, índice de que lograba escapar.

Chica: Ah no! No lo harás!!

La chica agarra fuertemente la figura de Rockruff y la avienta dentro del vehículo a su compañero, quien la ataja y aprisiona con sus brazos fuertemente y lastimando le las heridas que tenía.

Rockruff: AHHH!! AUXILIO!!

Chico: VAMONOS!

Chica: LARGUEMONOS! -decía cerrando la puerta del vehículo.

Gardevoir y compañía, quienes venía a la distancia, notan el escándalo y la tipo Psíquico-Hada reconoce brevemente la figura y gritos de Rockruff, alertándola completamente al ver cómo el auto se alejaba rápidamente.

Gardevoir: Eh?! ROCKRUFF?!

Raboot: Era ella?!

Umbreon: Dónde están Charlie y Lucario?!

Una palpitación retumba dentro de la cabeza de Gardevoir, mientras veía atónita como el vehículo se comenzaba a alejar con rapidez.

Gardevoir: Búsquenlos!! Yo iré tras ellos!!

Sin tiempo de réplicas, Gardevoir sale levitando a toda velocidad detrás del vehículo, dejando atrás a Raboot y Umbreon.

Mientras tanto, Lucario llegaba a dónde estaba Charlie y esta nota el estado en el que lo habían dejado, con un hilo de sangre saliéndole de la cabeza y su pierna seriamente lastimada por los dos disparos recibidos.

Lucario: Cielos, Charlie!!

Charlie: Argh!! L-Lucario!! Tienen a Rockruff!! T-Tienen a mi niña! -decía comenzando a llorar.

Lucario: Lo sé!! Yo iré por ellos!! Quédate aquí!

Charlie: No! Llévame a la moto!! Aún podemos alcanzarlos Lucario!!

Lucario: Charlie!! P-Pero tu pierna!!

Charlie: No hay tiempo Lucario! P-Puedo soportarlo!!

Lucario: De ninguna manera!! Yo pued... -es interrumpida.

Charlie: SE ESTAN LLEVANDO A MI PEQUEÑA, LUCARIO!! LLEVAME A LA PUTA MOTO AHORA!!!!

Los gritos desesperados y la expresión de furia del chico estremecen completamente a la pokemon, por lo que no tarda en decidirse y tomarlo del torso firmemente para poder correr y llevarlo hasta la moto. Estando allí, ambos se encuentran con Raboot y Umbreon, pero esto solo se asustan por el estado de Charlie.

Raboot: C-Charlie!!

Umbreon: Que sucedió?!

Charlie: Quédense aquí!! Debo ir por Rockruff!!

Raboot: Pero que pasa?!

Charlie: NO HAY TIEMPO!!

Con todo el dolor que podía experimentar, Charlie logra encender la moto aún con su pierna herida, y sin previo aviso Lucario se sube al asiento trasero para acompañarlo.

Lucario: Vuelvan a casa!! Es peligroso!! -decía a los pokemones.

Con las llantas rechinantes, Charlie logra salir disparado del lugar haciendo uso de toda la potencia de su motocicleta y comienza la caza del vehículo que raptó a la canina.

Mientras tanto, Gardevoir seguía muy de cerca el vehículo, lanzando Psicorrayos que pudieran impactar y detener el vehículo, pero este manejaba en zig zag para evitar todos los ataques de la pokemon.

Gardevoir enfurece aún más por los intentos fallidos y procede a tomarse un instante para concentrarse y teletransportarse al techo del vehículo al cual se aferra lo mejor que puede. Estando allí, la pokemon es recibida por una lluvia de balas, pero esta responde rápido con un campo psíquico en forma de esfera a su alrededor que la protege de las balas.

Gardevoir: Quien rayos son?! Devuélvanme a mi hermana!!

Gardevoir lanza otro Psicorrayo que logra abrir una brecha en el techo del vehículo, pero desde el interior un pokemon es comandado para lanzar un Shuriken de Agua que pasa justo por la brecha, abriéndose paso en la grieta del techo y conectando directamente a Gardevoir, lanzándola hacia atrás y casi arrojándola fuera del auto.

Antes de caer, Gardevoir logra aferrarse con sus brazos a los extremos del maletero y comienza a forcejear para no caer, pero su atención se ve acaparada por la figura de Rockruff desde el interior del auto, siendo que uno de los tipos comienza a golpearla para que deje de tratar de escapar.

Gardevoir: R-Rockruff... Déjenla!!

Los ojos de Gardevoir se iluminan de un color rosado claro y esta se preparaba para usar todo su poder psíquico con tal de detener el vehículo entero, pero para su mala fortuna, un pokemon se asoma por la ventana del vehículo y este carga un ataque que Gardevoir no logra percibir bien, pero lo recibe de lleno en su rostro.

Una onda que azotaba a la pokemon hace que esta no logre aguantar más, lo último que sus ojos logran ver son las siluetas forcejeando con la pokemon del vehículo antes de ser arrojada por la carretera y cayendo abruptamente.

Rockruff: GARDEVOIR!! NO!!! DEJENME IR!!

El chico misterioso tapa la boca de la canina para evitar que grité y la hace tocar otra pokeball, haciendo que esta la absorba e intentando atraparla en el proceso.

Chica: No se relajen! Aún tenemos compañía! -decía guardando al pokemon comandado para atacar sorpresivamente a Gardevoir.

A toda velocidad, Charlie y Lucario logran ver cómo Gardevoir es lanzada a un lado de la carretera, por lo que este solo decide hacer una maniobra para que con el dolor en su corazón  evite a Gardevoir y continúe acelerando aún mas para estar lo suficientemente cerca del carro.

Charlie: Ahora!!!

Detrás del chico se descubre a la Lucario cargando un Aura Esfera que es disparada a toda velocidad hacia el vehículo, dándole en el maletero y creando que este comience a perder el control.

Chófer: Quítenmelos de encima!!

Chico: Estoy en eso!!

El tipo misterioso saca la mitad de su cuerpo por la ventana y este comienza a disparar a discreción, por lo que Charlie frena un poco y trata de esquivar a como puede las balas. En el interior del vehículo, Rockruff logra volver a escapar de la pokeball, completamente adolorida, cansada y con mucha per5dida de sangre. La chica a su lado trata de retenerla en sus brazos mientras trata de buscar otra pokeball, pero Rockruff grita y se retuerce lo más que puede, logrando llegar hasta el borde de la ventana semi abierta del lado de la chica.

Rockruff: CHARLIE!!! LUCARIO!!! AYUDA!!!

Charlie: YA VOY ROCKRUFF!!! TE SALVAREMOS!!

Lucario: RESISTE!!!

Lucario comienza a materializar un hueso de energía en su pata y se prepara para lanzar un Ataque Óseo, por lo que Charlie presiona el acelerador aún más para llegar hasta los 80 km/h a los que perseguían al vehículo.

Justo cuando Lucario se prepara para lanzar su ataque y Charlie se acercaba lo suficiente, el chico logra acertar dos disparos en la llanta delantera, ponchándola y haciendo que Charlie comience a perder el control completamente.

Charlie: NO!! NO!! ROCKRUFF!!

Charlie comienza a perder velocidad debido al neumático agujerado y la motocicleta comienza a vibrar bruscamente por la velocidad a la que iba. Rockruff es jalada nuevamente por la chica hacia dentro del vehículo, pero esta logra patearla y zafarse de ella. Desde afuera, se lograr ver como el chico agarra la pokemon del cuello y la estampa contra el parabrisas trasero, listo para utilizar una Ultra Ball.

Rockruff: CHARLIE!!! AYUDAME!!! -decía llorando.

Charlie: ROCKRUFF!!! NOOO!!!

En un último intento desesperado, Charlie acelera su motocicleta al máximo, pero esto solo ocasiona que el rueda delantera colapse completamente, por lo que no logra mantener el equilibrio por más tiempo y esto hace que la motocicleta se descontrole, volcándose y lanzando a Charlie y Lucario por los aires. Lucario logra tomar a Charlie en el aire y está lo abraza con sus brazos y piernas, utilizando su cuerpo como amortiguador del impacto que sufren ambos contra el pavimento.

Desafortunadamente, la moto cae estrepitosamente sobre las piernas de Charlie y la Lucario mientras aún se deslizaban por la calle, cosa que hace gritar al chico por el intenso dolor que ya llevaba soportando por las balas en su extremidad. Lucario trata de quitarse la moto de encima con desesperación, pero esta se encuentra muy lastimada y aturdida como para hacerlo. 

Lucario: Ahh! C-Charlie!! N-No puedo levantarla!

Charlie también trata de escapar, pero lo único que puede hacer es ver cómo el auto se aleja a toda velocidad, con la silueta de Rockruff implorando por ayuda en el parabrisas trasero, todo hasta desaparecer en la lejanía.

Charlie: No!!! NO!!! NO!!! MALDITA SEA...

¡¡¡¡¡¡¡ROCKRUFF!!!!!!!

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