Rayito de luz
Durante el resto de la mañana, Lucario había permanecido muy pensativa por la pequeña conversación que tuvo con Linoone algunas horas atrás.
*Flashback*
Lucario: Cumpleaños?
Linoone: Enserio no sabes lo que es?!
Lucario: Ya te dije que no.
Linoone: Escucha, los cumpleaños son una tradición que los humanos celebran cuando se llega a la fecha en la que nacieron.
Lucario: Creo que había escuchado eso antes.
Linoone: Bien! Entonces sabrás que esto los puede emocionar bastante.
Lucario: Imagino que si.
Linoone: Y Charlie no es la excepción! Justamente yo estaba emocionado por saber que este año él podría pasar un cumpleaños muy especial en compañía de ustedes!
Lucario: Y tu por qué no vas a estar?
Linoone: Augh... Ronald tiene que ir a Alola a ver a su hermana y pues necesita ayuda para no perderse, por eso debo ir -decía entristecido.
Lucario: Huh... así que depende de nosotras?
Linoone: Si!! Ya que este año no podré estar, quiero pedirte un favor.
La pokemon veía con curiosidad como Linoone empujaba la carretilla con su cabeza para acercar el pastel hasta ella.
Linoone: Por favor! Quiero que le hagas pasar un cumpleaños especial a Charlie este año!
Aunque aún seguía confundida por el concepto de la celebración, Lucario sabía que esto sería algo complicado debido al reciente ánimo decaído del muchacho, el cual mejoraba, pero no al punto de volver a la normalidad.
Linoone: Sería genial que se lo expliques también a tus amigas! Es vital que se unan para darle un regalo especial a Charlie!
Lucario: Y qué podría ser?
Linoone: Mira... no estoy seguro de lo que tengan a disposición, pero si hay algo de lo que estoy seguro es de que a Charlie le gustan mucho las sorpresas! Le gusta mucho las cosas que pueda recordar con nostalgia y le gusta mucho las emociones fuertes!
Lucario: Que? Cómo esperas que consiga un regalo que lo haga sentir todo eso?
Linoone: No digo que debas cumplir todos los requisitos, pero te pueden ayudar a elegir su regalo! Además, no hay regalo malo si viene del corazón.
La sonrisa del pokemon era muy notable cuando se trataba de saber las preferencias de su amigo y lo que lo podría contentar, por lo que Lucario siente una ligera confianza al tener en cuenta esas recomendaciones del pokemon.
Lucario: Yo... está bien, les diré a las otras y planearemos su regalo lo mejor que se pueda.
Linoone: Así se habla! Ah! Casi lo olvido, los humanos suelen cantar la canción de cumpleaños al cumpleañero con candelas sobre un pastel al finalizar el día para "conmemorar" el cierre de la celebración, por decirlo de una manera técnica y rápida, así que por eso traje este pastel!
Lucario: Pastel? Candelas? Cantar?
Linoone: Solo busca un vídeo de como hacerlo cuando Charlie no te vea, es algo simple!
Lucario: Ok, ok, ya entendí!
Linoone: Perfecto! Cuento con ustedes para que Charlie tenga un día muy lindo jejeje... bueno, por ahora me tengo que ir, así que lo dejo en tus patas!
Linoone: De acuerdo! Nos vemos luego, Lucario!
*Fin del flashback*
Durante varios minutos, Lucario se había perdido en su mente recordando la conversación con Linoone y pensando en como podría elaborar un regalo o tan siquiera una sorpresa para Charlie.
Al cabo de un rato, esta escucha como el chico avisa que entraría al baño a bañarse, por lo que aprovecha la oportunidad para reunir a sus amigas en la sala y comentarles del cumpleaños de Charlie.
Lucario: ... Entendieron?
Rockruff: Uhmm... más o menos, aunque no del todo.
Gardevoir: Creo que también estoy confundida. Por qué celebran eso?
Lucario: Escuchen, el porqué lo hacen tampoco es muy lógico para mí, pero parece que es importante para ellos. Además, creo que es una buena oportunidad para que podamos alegrar a Charlie!
Rockruff: Y cómo lo haremos?
Lucario: Pues... lo primero que debemos hacer es esconder el pastel de Linoone en algún lugar donde no lo encuentre.
Gardevoir: Yo me puedo encargar de eso.
Lucario: Bien! Ahora, lo siguiente es planear lo que podemos conseguir para él! Alguna idea? -decía viéndolas a ambas.
Gardevoir: Ahmm... no.
Rockruff: Yo tampoco.
Lucario: Oh vamos! No puede ser tan difícil!
Gardevoir: Tu tienes algo?
Lucario: B-Bueno... no en realidad.
Gardevoir: Ja... tonta.
Lucario: Pero... bueno, Linoone dijo que a Charlie le gustan las sorpresas, así que estaríamos cumpliendo esa con este plan.
Gardevoir: Bien, eso ya es algo. Que más te dijo?
Lucario: Dijo que le gustan las cosas que pueda recordar con nostalgia y las emociones fuertes.
Gardevoir: Uhm... ok, no se me ocurre nada, pero creo que podemos arreglarnoslas con eso.
Rockruff: Y si...?
La pokemon no logra terminar su pregunta, cuando de repente se escucha al chico salir del baño, por lo que, con pánico, las tres pokemones se dispersan por la sala y fingen estar en lo suyo.
Al salir del cuarto ya vestido, Charlie se extraña un poco al ver a Gardevoir viendo al televisor apagado, Rockruff sentada en una esquina de la sala viendo a la pared y Lucario sentada en la mesa con un plato vacío y un cubierto al lado
Charlie: Ahm... tienes hambre?
Lucario: S-Si! Es que iba a c-comer cereal!
Charlie: Y... desde cuándo comes cereal? -preguntaba incrédulo.
Lucario: Desde hoy! Q-Quiero probarlo -decía nerviosa.
Charlie: Con tenedor? -decía mirando el cubierto.
Lucario: S-Si! E-Es para ahorrar leche!
Charlie: Ahm... okaaay? Lo que digas.
Confundido, el muchacho solo trata de ignorar a la pokemon y se dirige a la alacena para sacar un plato ondo y dos cucharas para ponerla en la mesa, mientras iba a la refri para sacar leche y bajar el cereal que por ley se guarda arriba de la misma nevera.
La pokemon acepta el ofrecimiento del chico y este procede a servir el cereal primero y después la leche, siguiendo el orden natural de las cosas y por último este le muestra la cuchara para que la use.
Lucario: Gracias!
Charlie: De nada.
Lucario: Uhm... oyeeee, estaba pensando... hay algo que tengas que hacer hoy?
Charlie: Tengo cara de querer hacer algo? -decía con una pequeña sonrisa.
Lucario: Ehm... bueno es que pensaba que... -es interrumpida.
Charlie: De hecho si tengo algo que hacer... hablé con Beverly y pues... no lo sé, quería que fuera a verla a la ciudad -decía con aburrimiento.
Lucario: D-De veras? Beverly? Eso es genial! -decía impresionada.
Charlie: Seeeh, pero... en realidad no quiero ir -decía jugando con el cereal por aburrimiento.
Lucario: Y por qué no?
Charlie: Es que... no quiero salir.
Lucario: Eh?! Pero... es Beverly! Ella es genial y tú apenas y le hablas.
Charlie: Lo seee, lo seee, pero... quiero quedarme bajo las cobijas... no me siento con muchos ánimos, sabes?
Ante su mirada algo apenada, Lucario no puede evitar sentirse un poco mal, pero en un santiamén una idea llega a su cabeza y a esta se le iluminan sus ojos.
Lucario: Oh vamos! Ve y disfruta un poco!! Te quedan unos días antes de empezar a trabajar! Lo mejor es que los disfrutes, no?
Charlie: Uh... pues... -es interrumpido.
Gardevoir: Oye, es cierto! Es bueno que te distraigas un poco! Por qué no vas y respiras algo de aire fresco?
Al voltear, Gardevoir mira discretamente a la Lucario y le guiña el ojo en señal de que había leído su mente.
Gardevoir: Por qué no aprovechas y dan un paseo en la moto?
Lucario: Si! Eso! No crees que sería divertido?
Charlie: Hmm...
Ambas pokemones tenían sus miradas fijas en el chico, con la esperanza de que este acceda, sin contar con el factor sorpresa.
Rockruff: Oh! Yo quiero ir!
Gardevoir: Eh?!
Lucario: N-No!! Déjalo a él enana! Tu no t-tienes que meter tus narices en su s-salida! -decía nerviosa.
Charlie: Huh... hey, creo que sí... que tal si vamos tu yo, Rockruff? Hace mucho que no salimos.
Rockruff: Siii!
Charlie: Jejeje bien... iremos luego de comer, si?
Rockruff: Si!
Con un poco más de gusto, el joven continúa comiendo su desayuno para poder irse con la canina a la ciudad, dejando en confusión a las otras dos pokemones.
Al cabo de un rato, Charlie y Lucario terminan de desayunar y el chico se dispone a tomar sus cosas para finalmente poder salir junto con la tipo Roca no sin antes decirle a las otras dos que volvería al atardecer o antes.
Una vez dicho esto, Charlie y Rockruff salen y cierran la puerta para posteriormente subirse a la moto con Rockruff en su espalda, con la mitad de su cuerpo en una mochila para que no caiga en el camino.
Gardevoir: Que rayos fue eso?!
Lucario: No lo sé!
Lucario: Se suponía que debíamos planear esto entre las tres!
Gardevoir: Augh! Cómo sea.
Lucario: Todo iba bien! Sacar a Charlie de aquí era el plan perfecto para que pudiéramos planear su sorpresa!
Gardevoir: Lo sé, leí tu mente.
Lucario: En que estaba pensando Rockruff?
Gardevoir: No tengo idea! Cuando ha pensado algo por sí misma?! Lo hizo en el peor momento!
Lucario: No lo sé, pero es lo más estúpido que pudo hacer.
Las pokemones se siguen quejando por algunos minutos más, pero dejan esto de lado para poder concentrarse en algún plan.
*En sus pensamientos*
Rockruff: Jeje soy muy lista! Esto les dará tiempo a Gardevoir y Lucario para pensar en algo para Charlie! Mientras tanto, yo también observaré las cosas que le gustan mientras Beverly lo distrae! Eso es muy inteligente, ya verán como las ayudaré con esto!
La pokemon ciertamente iba maravillada en la espalda del chico, sacando la lengua que revoloteaba por la fuerza del viento en su cara, en lo que el joven mantenía su vista en el camino.
Al cabo de unos minutos, los dos amigos llegan a la entrada de la ciudad y una vez allí se dirigen por las calles hacia el sector noroeste para encontrarse en un pequeño parque con la rubia enfermera.
Charlie y Rockruff llegan al susodicho parque y estando allí buscan con la vista a la chica, pero al no verla por ningún lado, deciden parquear la motocicleta ahí y se disponen a caminar un poco.
Al cabo de un rato, estos se topan con una chica rubia que estaba sentada en una banca, por lo que se aproximan a ella, quien los nota y no duda en levantarse para toparlos.
Beverly: Charlieee!!
Charlie: Holaaa.
Beverly: Charlieee que bueno verte!! Y viniste con una cosita muy linda! -decía mirando a la canina.
Rockruff: Hola Beverly!!
Beverly: Como has estado, pequeña? -decía alzandola.
Rockruff: Yo muy bien! Y tú?
Beverly: Me encuentro genial! Muy feliz de verlos de nuevo! Y a ti Charlie...
La rubia deja de acariciar a la canina y esta mira al muchacho, quien llevaba su gorra puesta y se le veía algo decaído y con un semblante avergonzado. Sabía que, a pesar de estar alimentándose adecuadamente, su físico aún no se veía del todo recompuesto.
La chica lo veía de pies a cabeza y se daba cuenta de lo distinto que lucía, pero no era algo que le importase mucho, ella estaba feliz de por fin pasar un rato con quién consideraba un amigo.
Beverly: Huh... veo que este chico no se ha estado cuidando mucho, eh?
Charlie: Uh... y-yo... -es interrumpido.
Rockruff: E-Es que ha tenido problemas de salud, pero se está recuperando!
Beverly: Ya veeeo... así que no te has tomado los medicamentos que te recetamos, eh? -decía sarcástica y con tono juguetón.
Charlie: Y-Yo no es que q-quisiera... -es interrumpido.
Beverly: Jajaja tranquiiilo tonto, solo bromeo.
Charlie: Ahm... jeje s-si.
Beverly: Ven acá, dame un abrazo.
La joven coloca a la pokemon en el suelo y abre sus brazos para terminar de saludar a Charlie, quien corresponde algo torpe.
Beverly: Y díganme, a dónde les gustaría ir?
Charlie: Uhm... en realidad planeaba que tú nos dijeras lo que tenías planeado.
Beverly: Yo no tenía planeado nada.
Rockruff: Y si caminamos un ratito?
Beverly: Suena bien, así nos ponemos un poco al corriente de la vida de este muchacho jeje.
Con una sonrisa en el rostro de los tres, estos se disponen a comenzar a caminar en el soleado día que hacía en Galar en esa ocasión.
Mientras tanto, en la casa de Charlie, Gardevoir y Lucario se encontraban sentadas en la mesa de la cocina, con un semblante algo serio y pensativo.
Gardevoir: Diablos... cómo es que no se nos ha ocurrido nada?!
Lucario: Escucha, debemos tranquilizarnos... esto será un desastre si no nos concentramos!
Gardevoir: Pero llevamos aquí un buen rato y aun no se nos ocurre nada.
Lucario: Agh! Esto no puede ser tan complicado!!
Gardevoir: Vamos! Dime algo que le guste a Charlie.
Ambas pokemones se miran fijamente por algunos segundos, pero al cabo de un rato apartan sus miradas mientras se rascan la cabeza con confusión.
Lucario: Uhm... y si le damos una Monster?
Gardevoir: Eso le gusta... pero será suficiente?
Lucario: C-Creo que suena bien, no?
Gardevoir: Claro que no! Él puede conseguir una cualquier día de la semana!
Lucario: Okay, okay... Hmmmm... que tal un helado?
Gardevoir: Eso también!!
Lucario: Un helado de Monster?
Gardevoir: ...
Lucario: ...
Gardevoir: Estamos jodidísimas.
Mientras las pokemones seguían quebrándose la cabeza, luego de un par de horas Charlie, Beverly y Rockruff ya habían recorrido todo el parque, por lo que tuvieron la idea de ir a alguna cafetería a almorzar algo.
Beverly: No sabía que tienes una moto.
Charlie: Oh... si, aunque creo que tengo el permiso temporal vencido.
Beverly: Eso no es peligroso?
Charlie: Solo si la policía se da cuenta.
Rockruff: Tu tranquilo, solo diles que no lo está!
Beverly: Uhm... chiquita, ellos no... -es interrumpida.
Charlie: Tranquila Beverly, déjalo así. Y bien? No vamos?
Los tres llegan hasta donde el muchacho había parqueado su moto y una vez subidos, estos se acomodan para que la enfermera se siente tras Charlie y Rockruff se acomode en la mochila que aún cargaba para transportar a la pokemon.
Luego de unos 20 minutos de viaje, estos llegan a una cafetería que se encontraba cerca de un boulevard en el centro de la ciudad, boulevard que traía recuerdos a Charlie, ya que ahí es donde había librado una batalla junto a Riolu contra aquel Rhyperior poseído meses atrás.
Los muchachos aparcan el vehículo en una zona respectiva y se bajan con cuidado para colocar a la canina en el suelo y comenzar a caminar hasta la cafetería. Una vez allí, los dos jóvenes se sientan con tranquilidad junto con la pokemon en una mesa que había fuera de la cafetería y a los pocos segundos llega un empleado del local para tomar sus ordenes.
Beverly pide un sándwich de pavo con un té frío de melocotón, Charlie pide un pan pizza junto a un café helado y para Rockruff piden una orden de pokelitos con agua gasificada. Mientras esperaban su comida, los tres se disponen a conversar un poco más en lo que esperaban por su comida.
Beverly: Huh... ya veo... así que eso paso con tu madre.
Charlie: Si... es... algo que aún trato de asimilar.
Beverly: Lo lamento muchísimo.
Charlie: No te preocupes.
Beverly: Que miserables son esos familiares tuyos.
Charlie: ...
Beverly: Ugh... me gustaría seguir hablando de cómo yo les sacaría las tripas, pero creo que mejor dejar el tema de lado.
Charlie: Tranquila, no me molesta... mucho.
Rockruff: Uhm... Charlie?
Charlie: Dime, pequeña.
Rockruff: Quiero evolucionar!
Charlie: Eh?
Rockruff: Recuerdas que dijiste que me ayudarías a evolucionar en mi forma crepuscular?
Charlie: Oh, es cierto... eso fue antes de que me fuera... lo siento, lo había olvidado.
Rockruff: No te preocupes! Que dices si me entrenas?
Charlie: Claro, aunque si no mal recuerdo debes aprender algo llamado Ritmo Propio.
Beverly: Que no es eso una habilidad?
Charlie: Lo es?
Beverly: No estoy segura.
Charlie: Bueno... solo dame un tiempo para investigar eso y pronto nos pondremos en ello, de acuerdo?
Rockruff: De acuerdo!
En ese momento, la conversación se ve interrumpida por el mesero, quien llegaba con una bandeja con las ordenes de los dos amigos y la pokemon, por lo que pausan un poco la plática para tomar los platos que el empleado traía.
El mesero entrega las ordenes y se retira, por lo que los presentes comienzan a comer gustosamente de su comida.
Beverly: Está bueno, no?
Charlie: El café helado está genial.
Rockruff: Como se llaman estas cosas?
Charlie: Pokelitos.
Rockruff: Saben muy bien! -decía comiendolos.
Charlie: Jeje que bueno que te gusten.
Beverly: Oh, Charlie casi lo olvidó. Podrían acompañarme al terminar esto? Tengo que ir a recoger a mi pokemon a un lugar.
Charlie: Claro.
Beverly: Bien!
Rockruff: Uhm... Charlie, puedo ir a ver algunas tiendas? Ya me acabe lo mío!
Charlie: Eh?! Pues como comiste tan rápido?!
Rockruff: Solo me dieron 3 pokelitos.
Charlie: What? Que puta estafa.
Beverly: Creo que deberían haber sido al menos 5.
Charlie: Dejen voy a reclamar.
Rockruff: No! Está bien! De todos modos no traía mucha hambre jeje.
Charlie: Segura?
Rockruff: Si! No hay problema.
Charlie: Huh... bueno, solo no te vayas muy lejos.
Rockruff: No lo haré!
Mientras la pokemon se baja de su silla para retirarse, Charlie y Beverly continúan dialogando un poco más en lo que terminan de comer.
Beverly: Jeje ella es una ternurita.
Charlie: Si, lo es.
Beverly: Y cómo han estado Lucario y Gardevoir?
Charlie: Oh, muy bien. Ellas están en casa.
Beverly: Saludalas de mi parte.
Charlie: Claro.
Beverly: Y cuéntame, como te ha ido con las chicas? Escuché un par de rumores por ahí -decía en tono coqueto.
El chico se sonroja un poco ante la incógnita, pero las risas de la rubia no tardan en hacerse presentes por su reacción.
Mientras tanto, caminando por el boulevard, Rockruff se encontraba mirando hacia las tiendas con algo de curiosidad en busca de algo que le llamara la atención como regalo para Charlie.
Rockruff: Hmm... que puedo buscar para Charlie?
La canina se detiene al frente de una tienda que parecía vender suplementos y nutrientes para personas y pokemones.
Rockruff: Vitaminas y nutrientes? Si! Tal vez eso le ayude a estar como antes! Jejeje si, le daré eso.
La pokemon entra a la tienda y detrás del mostrador, el cajero de la tienda nota la presencia de Rockruff.
Cajero: Puedo ayudarte?
Rockruff: Hola! Me puede dar vitaminas?
Cajero: Ehh... claro que sí, de cuáles buscas?
Rockruff: Las que sirvan para que un humano vuelva a estar bien!
Cajero: Hablas de suplementos?
Rockruff: Uhhhh... si! De esos!
Cajero: Okay, tengo de varios tipos, tengo suplementos pre-entrenos, también algunos de aminoácidos para la masa muscular. Oh! También tenemos suplementos quemadores de grasas, que sirven para la estimulación de la eliminación de calorías y los que son creatina, muy buenos para ayudar a los riñones, páncreas e hígado. Cuál buscabas?
Rockruff: Si.
Cajero: Si... que?
Rockruff: Quiero de esos!
Cajero: Todos?
Rockruff: Si, por favor!
Cajero: Okay, lo que diga la damita.
El cajero, con algo de duda se dirige a unos gabinetes que estaban detrás suyo y en un par de bolsas guarda los muchos frascos que le había ofrecido a la pokemon. Al volver al mostrador, este coloca la bolsa ahí y se dispone a usar una calculadora para determinar el total.
Cajero: Serían unos ₽400.
Rockruff: Eh... y-yo no tengo dinero.
Cajero: Hablas enserio?
Rockruff: E-Es un regalo para mi amigo! Él cumple años mañana y quería darle un regalo lindo.
Cajero: Si claro, y la tierra es plana.
Rockruff: Lo es?
El hombre mira con estupefacción la mirada perdida de la pokemon, por lo que asume que se trata de una broma.
Cajero: Escucha niña, no puedo darte esto si no me das dinero a cambio.
Rockruff: Eso no sería robarme?
Cajero: Que estas diciendo?!
Rockruff: Me estarías robando.
Cajero: Niña, se llama intercambio! Yo te doy esto y tu me... -es interrumpido.
Rockruff: Enserio me lo puedo llevar?! -decía feliz.
Cajero: Q-QUE?! NO!! Me estas tomando el pelo?! -decía con enojo.
Rockruff: Pero usted no tiene cabello -decía confundida.
Cajero: Niña!! Ese no es el... ARGH!! FUERA DE MI TIENDA!!
El hombre le hace una seña a la pokemon y esta sale corriendo por el susto que se lleva al escuchar al hombre gritarle. Una vez que había tomado una distancia segura de la tienda, Rockruff se detiene un momento para tomar aire.
Rockruff: Que grosero! Por que me dijo que me fuera? Ese señor pelón me quería robar... huh, no importa, conseguiré otro regalo para Charlie. Lucario y Gardevoir se impresionaran de ver lo que puedo hacer yo solita!
En ese momento, la pokemon mira una tienda que tenía en exposición gorras en un ventanal, por lo que a la pokemon se le viene una idea más a la cabeza.
Rockruff: Oh! Puede que a él le guste tener otra gorra!
Y sin más por decir, la pokemon se dirige a la tienda avistada para ingresar y tratar de conseguir el presente perfecto para su amigo. Por otro lado, Charlie y Beverly continuaban hablando a las afueras de la cafetería.
Beverly: Que asco de chica! Tuvo relaciones con su pokemon, sabiendo que salía contigo?!
Charlie: Si... eso pasó.
Beverly: Awww Charlie eso debió ser horrible. Si yo fuera tú, buscaría la forma de reprocharla por infiel!
Charlie: Yo... en realidad no quiero nada de eso -decía decaído.
Beverly: Eh?! Por que no?
Charlie: Pues... ella y yo nunca fuimos nada oficial, por lo que no me duele tanto.
Beverly: Tu cara refleja otra opinión.
Charlie: Es que... me afectó más el hecho de que... me hayan visto como un tonto... casi todos en esa casa.
Beverly: Oh vamos Charlie, no pienses así.
Charlie: Incluso Tox... no sé por qué pensé que era un buen tipo.
Beverly: Charlie...
Charlie: Siempre pienso en como me mira la gente... si en realidad están cerca mío solo por interés... Pff... lo irónico es que ni tengo tanto dinero como para que sea así...
Beverly: Charlie... no digas eso. Tu eres una gran persona, estoy segura que hay más personas que darían todo por ser amigos de alguien como tu!
Charlie: Huh... pues... son pocos en realidad... yo... solo quisiera encontrar a alguien que esté ahí siempre para cuando lo necesito, sabes? Alguien que me ayude a... enfrentar al mundo.
Beverly: Pero Charlie... creo que tu si tienes alguien que quiere estar ahí para ti.
La mirada del muchacho se levanta con algo de confusión y mira la radiante sonrisa de la chica. Una pequeña punzada se siente en el pecho del muchacho al escuchar esa palabras, por lo que no duda animarse un poco.
Beverly: Ella siempre estuvo ahí... desde que te conocí en el hospital... ella siempre estuvo a la espera de tu atención, no lo crees?
Charlie se queda un poco impresionado por la que decía la chica. En retrospectiva, Beverly siempre había tratado de ser cercana al chico, pero este nunca la había tomado muy en cuenta por todas las situaciones que vivía, además del hecho de haber estado más interesado en Lisa.
Los pensamientos del chico se iban arremolinando y este miraba aquella cara radiante al sol, aquel cabello dorado y ondulado que bajaba hasta su pecho voluminoso, esos ojos verde esmeralda y esa sonrisa brillante como el amanecer de un nuevo día.
Era ella, Charlie concluyo que Beverly encajaba perfectamente con lo que él buscaba, alguien que se interesara en él sin compromisos y con disposición, recordando también la vez que ella le ofreció su ayuda monetaria cuando tuvo su operación en el hospital, cuando no contaba con mucho dinero.
Poco a poco, Charlie desliza sus manos hasta las de la chica, las cuales reposaban naturalmente en la mesa y esta se impresiona un poco al ver como Charlie las tomaba con suavidad.
Beverly: Uh... Charlie?
Charlie: Beverly... acaso...?
Pero inesperadamente, la rubia aleja sus manos de las del chico, lo cual borra la sonrisa que este tenía en su rostro.
Beverly: Uhm... l-lo siento Charlie, creo que malinterpretaste lo que dije.
Charlie: Q-Que? P-Pero pensé que...
Beverly: Aw Charlie... eres muy lindo... pero yo me refería a tu Lucario.
El semblante del muchacho vuelve a ser uno un poco más decaído y avergonzado por el malentendido, lo que lo hace volver a juntar sus manos con algo de tristeza.
Beverly: Sabes... no soy ciega Charlie, desde el primer día que ella llegó al hospital para que te ayudáramos... pude ver ese brillo en sus ojos por ti.
Charlie: ...
Beverly: Ella se ve que te quiere muchísimo... se nota que siempre ha estado al pendiente de ti, que te cuida y que en el fondo quiere que estar contigo... no lo crees?
Charlie: Uhm...
Beverly: Lamento lo que dije pero... y-yo no quería que lo tomaras de ese modo.
Charlie: Lo siento, Beverly... es solo que... he estado muy afectado últimamente...
Beverly: T-Tranquilo! Eso no cambia nuestra amistad.
Charlie: Uhm... si... lo siento.
Beverly: Seguro que estas bien?
Charlie: Si, tranquila, no pasa nada.
Beverly: Jejeje que bueno, por que me agradas mucho!
La chica le da un pequeño golpe en el brazo al joven para alivianar un poco el momento, por lo que este reacciona riendo con un poco de pena aún y rubor en sus mejillas.
Beverly: Pero lo que te dije es enserio... trata de considerar un poco a esa pokemon, quieres? No sé muy bien como sea la relación entre ustedes dos, pero... a veces lo que queremos o buscamos siempre está frente a nosotros... aunque no lo veamos...
Charlie escucha a la rubia atentamente mientras este seguía mirando su plato, por lo que le da una afirmación con su cabeza al mismo tiempo que reflexionaba ese pensamiento y consideraba todas sus experiencias pasadas.
Beverly: Pero bueno... dejemos esto de lado y busquemos a la bolita de pelos para ir a recoger a mi pokemon!
Charlie: Ahm... s-si! Claro, vamos por Rockruff.
Sin perder el tiempo, ambos muchachos se levantan de la mesa con sus pertenencias y se disponen a buscar a un mesero que pueda recibir el pago de lo que pidieron para poder ir a buscar a la pokemon.
Mientras tanto, la pequeña tipo Roca se encontraba saliendo de otra tienda de la cuál le gritaban igual que la primera a la que fue. Siendo ya su séptima tienda a la que iba y terminaba de la misma manera, esta se aleja un poco de allí con tristeza y continúa caminando con su cabeza caída.
Rockruff: Por qué todos tienen que ser tan malos? Solo buscan ese tonto dinero... no me dejan conseguir el regalo para Charlie!
Mientras la pokemon seguía caminando algo pensativa, unas siluetas la observan a la distancia sin que ella se dé cuenta de ello.
Rockruff: Que voy a hacer? No puedo volver a casa sin nada! Lucario y Gardevoir me verán como una inútil... si tan solo pudiera conseguir algo...
En ese momento, antes que la pokemon pudiera seguir divagando, unas figuras se interponen frente a ella y esta se detiene un poco impresionada por lo sorpresivo del momento.
???: Ajá!! Con que tu eres la pokemon de la que nos han llegado los reportes, eh?
Rockruff: Eh?
??? #2: Así es! No puede ser otra!
??? #3: Definitivamente es la pokemon problemática!
Rockruff: Q-Quienes son ustedes?
En ese momento, los tres individuos se junta en frente de la tipo Roca para hacer algún tipo de preparación extraña.
??? #1: Todos tranquilos! Que los problemas venimos a resolver!
??? #2: Para proteger al mundo de la devastación!
??? #3: Y unir a las regiones dentro de nuestra nación!
??? #2: Para denunciar los males de la verdad y el amor!
??? #1: Y extender nuestra ayuda hasta las estrellas!
Los tres individuos comienzan a hacer una especie de movimientos para conformar una pose de equipo al finalizar sus frases sin sentido.
??? #1: Brad!
??? #2: Max!
??? #3: Mía!
Los tres al unísono: El equipo Super Omega viajando a la velocidad de la luz!
Rockruff:
Los tres chicos terminan de hacer sus poses ridículas y se disponen a acercarse a la pokemon con una sonrisa confiada y burlesca.
Brad: Tu vendrás con nosotros!
Rockruff: Q-Que?! Por que?!
Mía: Hemos recibido reportes de una pokemon molesta que ha estado hostigando los comercios cercanos!
Rockruff: P-Pero yo...! -es interrumpida.
Max: No debes hacer eso! Es un crimen perturbar el orden público!
Rockruff: E-Es que y-yo estoy buscando un... -es interrumpida.
Mía: Un momento... Brad, esta pokemon se me hace conocida.
Brad: Es cierto... pero donde hemos visto ya a esta malhechora?
Max: Ya la recuerdo!! Es aquella ladrona que había robado una guitarra del centro comercial!
Brad: Eh?! Es cierto!
Mía: Lo recuerdo!! Fue luego del ataque del Dragapult!! Que no tenía una compañera de fechorías?
Max: De hecho si!! Era una Gardevoir!
Brad: Ohhh si... recuerdo a esa Gardevoir despampanante, como podría olvidar esos ojos hermosos?
El aparente líder del pequeño grupo se toma la barbilla con soberanía y los otros dos solo enfocan su mirada en la canina, quien empezaba a retroceder.
Mía: A donde crees que vas?!
Rockruff: Eh?! S-Solo quería conseguir algo lindo!
Brad: Ja! Di lo que quieras, pequeña ladronzuela! Nos llevaras con tu entrenador para que enfrente las consecuencias de tus acciones!!
Rockruff: Eh?! Por favor déjenme ir! Yo no robe nada ni hice nada malo!
Brad: Jajaja lo que digas, pero deberás llevarnos con tu entrenador para que él sea reprendido por ti!
La pokemon se ve acorralada por los tres individuos y estos la toman para que se enteren de donde puedan enterar de donde encontrar al muchacho. Mientras tanto, al cabo de un rato, Charlie y Beverly terminan de pagar la cuenta, por lo que comenzaban a irse de allí para buscar a Rockruff.
Beverly: Bueno, creo que ya podríamos ir a recoger a mi pokemon, no crees?
Charlie: Claro, solo busquemos a Rockruff.
Beverly: Donde crees que pueda estar?
Charlie: Creo que puede estar cerca del boulevard.
Justo cuando ambos se levantaban para ir en busca de la pokemon, un grupo de tres chicos se venían acercando a la pareja de jóvenes en la cafetería.
Charlie: Eh?
Brad: Ustedes dos!
Beverly: Nosotros?
Mía: Ustedes son los entrenadores de esta malhechora?
El que parecía ser el líder muestra en su mano a la pokemon que llevaba agarrada del aro de rocas y pelaje que rodea el cuello de la canina, quien traía una expresión algo adolorida por el trato.
Charlie: HEY!! Que diablos están haciendo?! -decía enojado.
Al ver cómo traían a la pobre Rockruff, Charlie no tarda en alterarse, al igual que Beverly, ambos mirando como los tres individuos traían lo que parecía ser un uniforme de equipo de rescate pokemon.
Brad: Estamos a punto de llevar a esta rufiana ante los ojos de la ley!!
Max: Su fechorías fueron avistadas a tiempo!
Mía: La justicia vendrá hoy por parte del equipo Súper Omega!!
Charlie: Que putas dicen?! Dejen a Rockruff!!
Brad: Jajaja! Lo haremos en cuanto admitas que eres el entrenador de esta pokemon! Asi podremos llevarte a ti a la comisaría! -decía confiado.
Charlie: Como me van a llevar a la policía si ni siquiera han dicho lo que hizo?!
Max: Recibimos varios reportes de esta pokemon hostigando el orden público en varias tiendas del boulevard!
Charlie: Q-Que?!
Mía: Además de tener intenciones de robar!
La confianza y soberbia con la que hablaban los tres era demasiado para Charlie, quien sentía como poco a poco le hervía la sangre al ver cómo aún tenían a la canina tomada del aro en su cuello.
Charlie: Hablan enserio?! Cómo van a tratarla así solo por eso?!
Brad: No es solo por eso, entrenador de rufianes! Habíamos descubierto a esta pokemon junto a otra más robando una guitarra de un centro comercial hace un tiempo! A lo cuál, nunca respondiste a esa acusación.
Charlie: De que mierda hablan??!!
Brad: Jajaja! No sirve de nada que te hagas el tonto!
Beverly: Ustedes solo dicen estupideces! Dejen a la pobre Rockruff!
Mía: El mal nunca sale impune bajo nuestra custodia!
Max: El martillo de la justicia siempre triunfa!
Rockruff: Aayy!! Me d-duele -decía con una expresión angustiada mientras la sujetaban.
Charlie: Dejen de hablar como un Power Ranger y denme a mi pokemon!!
Brad: Jeje de acuerdo... saca su pokeball y te la devolveremos.
Ante lo dicho, los ojos de Charlie se abren un poco por la impresión, sin cambiar su semblante enojado, pero sin saber tampoco que hacer en ese caso.
Brad: Que pasa?
Charlie: ...
Brad: Oh... ya entendí, no es tu pokemon!
Charlie: S-Si lo es.
Brad: Entonces... pokeball, ahora -decía con una sonrisa triunfal.
Charlie: Grrr...
Brad: Contaré hasta 3... si no sacas su pokeball, asumiré que es una pokemon salvaje y nos la llevaremos con nosotros.
Charlie: ...
Brad: Uno...
La presión comienza a acumularse en la cabeza del chico, por lo que trata de pensar en una salida rápida que lo ayude en esa situación.
Charlie: ~Maldita sea, que hago?~
El joven mira con impotencia la forma en la que el tipo en frente suyo sonreía, mientras que Rockruff permanecía con un semblante adolorido.
Brad: Dos...
La desesperación consume a Charlie en el último segundo, por lo que, sin opciones, este trata de confesar.
Charlie: Agh! Esp... -es interrumpido.
Beverly: Esperen un momento, puedo saber dónde está su orden de reprensión?
Brad: Eh?
Beverly: Orden de reprensión, cada vez que un equipo de rescate pokemon atiende un llamado no rutinario, se les debe dar una orden legal específica para la acción que tengan que realizar. Dónde está la suya?
Mía: O-Orden?
Max: E-Eso no es cierto!
Brad: No necesitamos un papel para esto! Tu que vas a saber sobre nuestra labor? -decía confiado.
Beverly: Chico listo, eh? Entonces imagino que mi amigo, el comisionado de equipos de rescate pokemon, me habrá mentido cuando me contó sobre el proceso.
Brad: E-El comisionado?!
Max: Miente! Brad, ella no es más que una mentirosa.
Mía: S-Si! No hagas caso Brad! El mal siempre usará sus trucos más sucios para interponerse en el camino de la justicia!
Brad: Jejeje me asustaste, rubia burlona. Pero no lograrás...!
El chico no termina su frase, ya que en ese momento la rubia había sacado su teléfono y marcado a un número para posteriormente activar al altavoz.
Comisionado: Hola?
Beverly: Hola papá, cómo estás?
Brad: P-Papá?!
Comisionado: Hola cariño, cómo estás?
Beverly: Ugh... algo incómoda, papá.
Comisionado: Que sucede, querida?
Beverly: Fíjate que tenemos a unos tontos aquí, arruinando mi salida con mi amigo, quieren llevarse a su pokemon sin una orden de reprensión.
Papá: Hablas enserio?
Beverly: Claro, por qué no lo oyes por ti mismo?
La chica extiende el teléfono hacia el frente y los tres zopencos se atemorizan al escuchar la inconfundible voz masculina en el teléfono.
Comisionado: Quien sea que esté haciendo esa estupidez... identifíquese!
Brad: Ish! Maldición! C-Comisionado!
Max: S-Señor que gusto oírlo!
Mía: Si s-señor!! Cómo le va?
Comisionado: Ya cállense e identifiquense! Si lo que me dice mi hijita es cierto me encargaré de destituirlos por meses y hacer que cumplan servicio comunitario!
Al escuchar la imponente voz del hombre en el teléfono, los tres chicos se asustan y se empiezan a mirar entre ellos con mucho nerviosismo, por lo que el líder de ellos se acerca rápidamente a Charlie y le entrega a la canina, a lo cuál, él la toma y la envuelve en sus brazos para abrazarla con ternura.
Brad: No es necesario señor! Disculpe las molestias! Solo hacíamos inspección del área!
Mía: Si! Ya nos íbamos!
Max: F-Fue un gusto saber de usted, comisionado!!
Haciendo una reverencia muy apresurada, los tres sujetos salen despavoridos del lugar, levantando una cortina de polvo por irse tan rápido del lugar.
Charlie: Rockruff... mi niña, estás bien?! Te lastimaron esos estúpidos? -decía preocupado.
Rockruff: Auch... s-si, estoy bien. Solo me duele mi cuello por como me tomaron -decía avergonzada.
Charlie: Por qué no los atacaste? Debiste defenderte y huir!
Rockruff: E-Es que no quería meterte en más problemas -decía triste.
Charlie: Oh Rockruff, no vuelvas a asustarme así!
El joven toma a la pokemon que sostenía cómo a un bebé y la abraza contra su rostro con preocupación para poder tranquilizarse. Mientras la escena perdura, Beverly solo los mira con satisfacción y conmovida por el momento, aún con el teléfono pegado a su oreja.
Beverly: Si... ya se fueron, papá. Te hablaré cuando vuelva a casa... si... yo también, papá.
Luego de colgar la llamada, la enfermera se acerca hasta el muchacho y esta pone su mano en su hombro.
Beverly: Todo bien, campeón?
Charlie: Uh? Si! Beverly... N-No sé que decir... o sea... cómo?!
Beverly: Jeje supongo que tuviste suerte de salir con la hija del comisionado de equipos de rescate pokemon -decía con orgullo.
Charlie: Beverly... cómo puedo paga... -es interrumpido.
Beverly: Shh! No hay de qué! No iba a dejar que le hagan algo a esa bolita de azúcar, sabes?
Rockruff: Gracias Beverly!
Beverly: Jejeje... bueno, les parece si vamos por mi pokemon ya? Seguro está ansiosa por querer volver a casa.
Charlie: Claro.
Sin más que decir, Beverly y Charlie comienzan a caminar en direccion a donde habían dejado la motocicleta con la canina aun en brazos. Estos se acomodan en el vehículo y Charlie le pregunta a la rubia a donde dirigirse, por lo que esta no tarda en darle direcciones al muchacho.
Charlie continúa conduciendo y por algún motivo, mientras pasaba por las calles que le indicaban, este se le venían vagos recuerdos de esos lugares por las que pasaban. Finalmente, al cabo de unos cuantos minutos, los tres llegan hasta las afueras de un lugar que a Charlie solo se le observa un semblante indispuesto y un tanto nervioso al enterarse de lo que se trataba.
Beverly: Listo! Jejej manejas bastante bien, eh?
Charlie: Beverly... por que no me dijiste que vendríamos a esta guardería? -decía mirando fijamente el lugar.
Beverly: Aquí es donde está mi pokemon, algún problema?
Charlie: Y-Yo... no.
Beverly: Jejeje entonces vamos!
Rockruff: Jeje si! Vamos Charlie!
La canina se baja de la mochila del chico que llevaba en su espalda y este se queda algo pensativo al ver como las dos féminas se dirigían a la entrada de aquel establecimiento, aquella guardería pokemon en la que había conseguido su primer trabajo al llegar a Galar.
Al entrar al lugar, los dos muchachos y la pokemon se encuentran con la recepcionista que atendía el frente de la guardería.
Recepcionista: Hola! Bienvenidos a la guardería pokemon Sunny Side! En qué les puedo ayudar?
Beverly: Hola! Veníamos a recoger a mi pokemon.
Recepcionista: Perfecto! Puedes darme tu nombre?
Beverly: Beverly Holystone.
Recepcionista: Perfecto... y el tuyo? -decía mirando a Charlie.
Charlie: Oh... y-yo solo la acompañaba a ella.
Recepcionista: Ah, ya veo jeje disculpa... espera un momento, acaso tu no eras el muchacho que vino hace un par de meses?
Charlie: E-Eh... yo...
Recepcionista: Si! Eres tú! El adolescente que había trabajado aquí hace unos años! Incluso habías venido a visitar la guardería con esta pequeña Rockruff, si no mal recuerdo!
Rockruff: Si! Yo había venido con él!
Recepcionista: Jeje si te recuerdo chiquita! De hecho, que bueno que viniste... ehmm... Charles?
Charlie: QUE?! D-Digo... Charlie... es Charlie mi nombre.
Recepcionista: Oh, disculpa jeje. Pero bueno, no me creerías si te digo que desde la última vez que viniste hay algunos chiquitines que han preguntado mucho por ti!
Ante esta aclaración, Charlie siente algo de impresión, a lo que la rubia voltea a mirarlo con una sonrisa algo indignada.
Beverly: Ahm... jaja... o sea... que carajos?! Como es que no me dijiste que trabajaste aquí? -decía alegre.
Charlie: Uhm... jeje no lo consideré necesario.
Recepcionista: Que les parece si me acompañan? Estoy segura que los pokemones estarán felices de verte! Y de paso, vamos por su pokemon, señorita.
Los tres asienten a la recepcionista y proceden a seguirla, pasando por una puerta que guiaba hacia el gran jardín en la parte trasera de la guardería.
Una vez allí, la chica se acerca a una de las paredes, en la cuál, había una campana no muy grande y procede a agitarla para que suene y los pokemones que se encontraban esparcidos por todo el jardín corran al llamado de la chica.
Recepcionista: Vengan niños! Alguien vino a visitarlos!
Varios Bounsweet, un Hippopotas, 2 Sandshrew, algunos Growlithe, 2 Scorbunny, 2 grookey, un pequeño Bulbasaur y un notable Boltund se acercan con prisa hacia donde estaban Charlie y los demás, por lo que la chica rubia da unos pasos al frente para recibir a su pokemon que venía corriendo muy feliz.
Beverly: Boltund! Ya vine!
Boltund: Beverly!
Beverly: Te divertiste hoy?
Boltund: Mucho! Corrí por todas partes y gane muchas carreras!
La joven enfermera se agacha para acariciar a su pokemon, quien por su tono de voz se podía determinar que era hembra. Mientras tanto, algunos de los otros pokemones que se acercaban miraban a Charlie con mucha felicidad .
Bulbasaur: Eres tu!
Scorbunny #1: Ha vuelto!
Hippopotas: Queríamos verte de nuevo!
Scorbunny #2: Viste hermano? Te dije que lo veríamos de nuevo!
Charlie: Jeje... hola pequeñines, como han estado?
Bulbasaur: Muy bien!
Scorbunny #2: Estábamos jugando!
El chico también se agacha para hablar mas de cerca a los pokemones, mientras Beverly conversaba con la recepcionista y su pokemon, al mismo tiempo que Rockruff se relacionaba con algunos otros pokemones y exploraba un poco más el jardín.
Charlie: Enserio? Y a que jugaban? -decía acariciando al Bulbasaur.
Growlithe #1: Jugábamos a ponernos nombres!
Growlithe #2: Así nos podríamos diferenciar mejor!
Growlithe #3: Si! Somos varios de la misma especie!
Scorbunny #2: A mi hermano le pusimos Bobby!
Scorbunny #1: Y a él Bob!
Hippopotas: A mi me pusieron el Hijueppotas -decía feliz.
Charlie mira algo extrañado al pokemon y queda un poco estupefacto, por lo que decide ignorar el dato y continua acariciando a los demás pokemones que se le acercaban y aprovechaba para sentarse en el césped para jugar un poco con ellos.
Recepcionista: Jeje se ve que aún conserva su especialidad -decía a la rubia junto a ella.
Beverly: Jeje si! Vaya que parecen emocionados de verlo. Siempre fue así de querido.
Recepcionista: No estoy muy segura, yo aún no estaba cuando él trabajó aquí, pero mi jefe me contaba que era un gran empleado.
Beverly: Jeje... parece que su encanto con los pokemones viniera de sangre.
Mientras el joven se mantenía ocupado, Rockruff recorría unos matorrales que limitaban con las paredes que cercaban el área de la guardería. Al estar olfateando las plantas y matorrales, esta se encuentra con un olor algo peculiar, por lo que se detiene a olfatear con más cuidado y se sorprende al encontrar un pokemon oculto en las hiervas.
Rockruff: Eh?
???: ...
Rockruff: No te había visto.
???: ...
Rockruff: Oye, estas bien?
???: Uhm... p-puedes ir a jugar a o-otro lado? -decía con timidez.
La canina se intriga un poco por la petición, por lo que decide tratar de apartar un poco las hojas de matorral que cubrían al pokemon escondido.
Rockruff: O-Oye tranquilo! Yo soy amigable!
???: ...
Rockruff: No quieres ir a jugar conmigo?
???: No...
Rockruff: Por qué no? -preguntaba con inocencia.
???: No... no me gusta mucho.
Rockruff: Oh... y si vamos a jugar con mi amigo?
???: No gracias... no me agradan mucho las visitas...
Rockruff: Oh vamos! Él es muy agradable! Seguro que sí te divertirás con él.
???: ...
Rockruff: Lo traeré!
En ese momento, la canina se da media vuelta para ver a su amigo humano, quien se encontraba jugando con los demás pokemones, mientras que ellos se les veía muy feliz al interactuar con él.
Rockruff: CHARLIE!!! PUEDES VENIR?! -decía moviendo la colita.
???: E-Espera... que d-dijiste?
Ante el llamado, Charlie mira a la distancia a la pokemon cerca de unos matorrales, por lo que coloca a algunos pokemones en el suelo, los cuales tenia en sus piernas, y les sugiere que sigan jugando mientras vuelve. El joven avanza y este llega hasta donde se encontraba la canina.
Charlie: Que pasa?
Rockruff: Mira! Aquí hay un pokemon!
Al escuchar a la canina, Charlie mira vagamente por medio de las hojas del matorral y logra hacer contacto visual con un par de ojos grisáceos que lo miraban directamente, a lo que el joven tiene un un fuerte recuerdo de cuando trabajaba ahí y se da cuenta de quien se ocultaba entre los matorrales, quedando petrificado.
Charlie: E-Eevee?
Eevee: E-Eres... tu?
Charlie: ...
Rockruff: Eh? Esperen... se conocen?
Mientras tanto, en la casa de Charlie, al haber pasado ya algunas horas, Lucario y Gardevoir se encontraban tiradas en el sillón, mirando televisión con dos botes vacíos de helado en el piso, cambiando con pereza los canales.
Gardevoir: Somos terribles.
Lucario: Ya sé.
Gardevoir: Ese helado era el regalo de Charlie. Y robarlo fue riesgoso.
Lucario: Ya sé.
Gardevoir. Y nos lo comimos.
Lucario: Ya sé.
Gardevoir: Era helado de Monster.
Lucario: Ya sé.
Gardevoir: No debimos hacerlo.
Lucario: ...
Gardevoir: ...
Lucario: Pero estaba buenísimo.
Gardevoir: Ya sé.
Sin mas que decir, las pokemones dan un par de eructos y continúan cambiando la programación para poder "pensar" en algo más que puedan conseguir para el chico.
Por otro lado, Charlie se encontraba temblando ligeramente al ver al pokemon oculto en los matorrales, mientras que Rockruff seguían mirando con confusión a ambos lados.
Charlie: S-Sigues... aquí...
Eevee: Y tu... volviste...
Charlie: ...
Eevee: ...
Charlie: No... volvieron... verdad?
Eevee: Ellos... no -decía desanimado.
Charlie: Pero... ni siquiera te dijeron el... por qué?
Eevee: Y-Yo... me llevo preguntando lo mismo.
Aquella voz joven, casi infantil, que salía desde la vegetación se podía escuchar algo decaída, a lo que Charlie comprende totalmente, por lo que decide acercarse muy lentamente y se inclina sobre su rodilla para verlo mejor.
Charlie: Y... que haces aquí?
Eevee: Siempre... prefiero estar aquí.
Charlie: N-No deberías... salir a jugar?
Eevee: No...
Charlie: Ni siquiera un poco?
Eevee: Para que?
Charlie: Te distraes... incluso podrían verte en caso de que alguien quiera... -es interrumpido.
Eevee: Siempre pasa lo mismo... vienen a llevarse a los demás y me dejan aqui... al igual que tú.
Charlie: Eevee... yo tuve que irme...
Eevee: P-Pero... yo no quería eso...
Charlie: P-Pues... yo...
Las palabras comienza a hacerse cada vez mas y mas difíciles de sacar para el muchacho. Rockruff, quien no entendía la situación aún, decide alejarse algunos pasos para dejar que los dos varones sigan conversando, por lo que se sienta en el césped y continúa observando pacientemente.
Charlie: Enserio lo siento.
Eevee: Y... por qué volviste?
Charlie: V-Vine con una amiga a recoger a su pokemon.
Eevee: Oh... entiendo...
Charlie: ...
Eevee: ...
Charlie: Hey... n-no está de más venir a ver como estas.
Eevee: Bueno... aquí sigo... esperando a que alguien me lleve.
Charlie: No lograrás eso si te escondes aquí siempre.
Eevee: Es mi lugar seguro.
Charlie: Yo... lo sé.
Eevee: Uhm... ella es tu pokemon?
Charlie: Eh? Rockruff? Oh... no... jeje es algo extraño, pero no.
Eevee: Has atrapado algún pokemon?
Charlie: Yo... no, aún no.
Ante esta respuesta, el pequeño Eevee se asoma un poco más y sol consigue alcanzar a iluminar más su pelaje. Charlie se impresiona más al ver ese pelaje algo descolorido del pokemon, por lo que se miran fijamente por algunos segundos.
Eevee: Aún no tienes pokemones?
Charlie: No...
Eevee: Enserio?
La emoción del pokemon se hace notar y este se da cuenta de su pequeño brote de emoción, por lo que retrocede un poco para volver a ocultarse bajo las hojas del matorral.
Charlie: Uh... si.
Eevee: Uhm... y... digo... aunque sea... t-tu no... querrías...?
Antes de que el pokemon logre terminar su frase, el joven humano es llamado por la chica rubia, indicándole que si podían retirarse para llevar a su pokemon a casa.
Beverly: Charlieeee!! Podemos irnos?! Boltund quiere ir a casa!!
El joven mira hacia atrás y este voltea nuevamente hacia donde estaba el pokemon oculto.
Charlie: Yo... debo irme.
Eevee: E-Espera...
Charlie: Huh?
Eevee: Es que...
Charlie: ...
Eevee: N-No... nada.
Charlie: Uhm... bueno... no vemos luego.
Eevee: Volverás?
Charlie: Pues... trataré.
Sin mas que decir, Charlie se da media vuelta y se retira, no sin antes hacerle un gesto a la pokemon, quien aún se encontraba pensativa por el asunto, pero esta se levanta y procede a seguir al joven.
El Eevee, desde el matorral, solo mira con algo de impotencia como el chico se va junto a la pokemon, al mismo tiempo que se reunía con su amiga humana y su pokemon.
Antes de irse, Charlie se despide nuevamente de los pokemones de la guardería y estos muestran un semblante entristecido, pero Charlie se agacha y se despide de los que se acercaban a sus pies, prometiéndoles volver cuando menos se lo esperen, lo cuál recompone el semblante de la mayoría.
Los jóvenes y sus pokemones son guiados por la recepcionista hasta la salida del recinto, en donde se despiden de ella y se dirigen una vez más a donde el muchacho había parqueado su motocicleta.
Beverly: Bueno... fue una salida muy agradable! De no ser por... bueno, esos idiotas.
Charlie: Eh? No quieres que te vaya a dejar a casa?
Beverly: Crees que todos cabemos en tu limosina? -decía sarcástica.
Charlie: Oh... cierto.
Beverly: Tranquilo, le había enviado un mensaje a mi papá para que venga por nosotras, llegará en cualquier momento.
Charlie: Entiendo.
Beverly: Por cierto! Ella es Boltund! Boltund, él es Charlie y su linda amiguita Rockruff.
Boltund: Hola! Mucho gusto!
Charlie: Lo mismo digo!
Rockruff: Hola! Lindo conocerte!
En ese momento, un vehículo grande con vidrios polarizados llega hasta donde estaban ellos y se puede apreciar a un hombre en el interior que baja la ventanilla del acompañante para poder hablar con los jóvenes.
Comisionado: Hola Bev!
Beverly: Hola papá.
Comisionado: Ven, sube.
Beverly: Papá, él es Charlie. Es con quién había salido hoy.
Comisionado: Gusto conocerte, hijo.
Charlie: El gusto es mío, señor!
Comisionado: Oh vamos! No me digas así, me haces sentir anciano.
Beverly: Pues muy mocoso no estás.
Con sarcasmos, la rubia responde y le da un abrazo al chico antes de abrir una de las puertas traseras del vehículo para que su pokemon suba, al igual que ella pero en el asiento del copiloto.
Beverly: Tenemos que salir de nuevo!
Charlie: Ni lo dudes.
Beverly: Adiós bolita de pelos!
Rockruff: Adiós Beverly!
Con una sonrisa, la chica se retira en el vehículo y se pierden en la distancia, por lo que a Charlie y su amiga pokemon no les queda más que subirse a la moto para ya irse a casa, siendo las 5:10 p.m.
Rockruff: Beverly es muy linda!
Charlie: Jeje lo sé, fue increíble como nos ayudó antes, no es así?
Rockruff: Uh... si, aún lo siento.
Charlie: Puedo saber que fue lo que hiciste exactamente?
Rockruff: Y-Yo solo entraba a tiendas y me corrían! Algunos me decían ladrona... sin razón.
Charlie: No vuelvas a hacer algo así, me asustaste mucho.
Rockruff: Lo sé...
Justo cuando la canina es subida hasta la mochila en la espalda del chico, una incógnita ronda su cabeza.
Rockruff: Y... que fue eso con el Eevee.
Los ojos de Charlie se abren un poco por la impresión y este se queda callado por algunos segundos antes de responder.
Charlie: Solo... es un pokemon que conocí al llegar aquí.
Rockruff: Parecían llevarse bien.
Charlie: Uhm... si... solíamos llevarnos bien.
Rockruff: Y... que pasó?
Charlie: Solo... tuve irme por mi otro trabajo de oficina.
Rockruff: Él parecía... querer decirte algo.
El joven mira hacia su espalda de reojo con algo de nerviosismo para mirar a la pokemon, pero este se libra de sus pensamientos y solo voltea su mirada al frente para poder encender la motocicleta.
Charlie: Creo que... aún tiene aquella idea de... venir conmigo.
Sin más que decir, el chico y la pokemon empiezan a encaminarse hacia la casa del muchacho con tal de regresar de su salida extraña pero agradable con la rubia enfermera.
Al cabo de una media hora, Charlie llega a las afueras de su casa y este se encarga de parquear su vehículo en el patio para luego bajar junto a la tipo Roca, que viajaba en su mochila.
Al entrar a la casa, Charlie y Rockruff se encuentran a las otras dos pokemones sentadas en la mesa jugando a hacer una pirámide con un mazo de cartas, ambas con un semblante muy concentrado.
Charlie: Uhm... volvimos.
Lucario: Mhm.
Rockruff: Que hacen?
Gardevoir: Cállate... estamos... decidiendo -decía poniendo una carta más en la pirámide.
Charlie: Decidir... que?
Lucario: Hagan silencio!!
El chico y la canina se quedan mirando con confusión, por lo que deciden cerrar la puerta.
Lucario: No la cierren fuerte!!
Gardevoir: Y caminen lento!!
Lucario: Todo eso genera viento!!
Con los ojos muy abiertos, los recién llegados comienza a moverse a una velocidad muy lenta para desplazarse por la casa.
El chico se siente sediento y trata de dirigirse al lavabo de la cocina, el cual está junto a la mesa donde estaban las pokemones. Habiendo llegado, este se estira con lentitud para abrir un gabinete superior.
Lucario: Charlie!! No abras el gabinete!! Genera viento!! -decía poniendo otra carta con nerviosismo.
Sin decir nada, Charlie trata de agacharse hasta el lavabo para tomar agua directamente de la llave.
Gardevoir: Charlie!! Ya deja de moverte!!
La torre de cartas se tambalea peligrosamente y Gardevoir siente como el temor se apodera de ella.
Lucario: Si!! Pierde!!
Charlie: Y-Ya puedo tomar?
Gardevoir: No!! Todos dejen de moverse y hablar!!
Absolutamente todos quedan paralizados en la posición que estaban. La torre de sigue tambaleando y Charlie nota que queda en una posición muy comprometedora, con su trasero en dirección a la torre.
Por los nervios, Charlie siente como las tripas le juegan una mala pasada y un pedote comienza a recorrerle sus entrañas.
Charlie: D-Déjenme moverme.
Gardevoir: Cállate!!
Lucario: Si!! Se va a caer!
Charlie: P-Por favor!
Gardevoir: Nooo!! Se caerá!
Lucario: Sii!!
Rockruff: Huele a gas.
El chico no aguanta más las ganas y se tira un gas que por poco se le puede considerar como explosión intestinal, mandando a volar toda la pirámide de cartas. Gardevoir se aparta del lugar sumamente asqueada y Lucario salta de manera triunfal por la suerte a su favor.
Lucario: SI! Jaja! Perdiste!!
Gardevoir: Maldita sea!! Charlie!!
Charlie: L-Lo siento!!
Gardevoir: Por que carajos hiciste eso?! -decía enojada.
Charlie: Ahm... mejor afuera que adentro.
Gardevoir: Eh?! Quien dijo tremenda pendejada?
Charlie: Un gran sabio.
Gardevoir: Ugh! Cómo sea! Quédate tu estúpida victoria, Lucario.
Sin más que decir, la tipo Psíquico-Hada se retira de la sala en dirección al patio trasero con algo de enojo, dejando confundido a Charlie y a la Lucario riendo un poco por su actitud.
Charlie: Me puedes decir que fue eso?
Lucario: Jejeje nada, solo nos decidimos en hacer algo.
Charlie: Puedo saber?
Lucario: Nah... mejor mañana.
Charlie: Uhm... bueno, si tú lo dices.
Lucario: Y a ti como te fue con Beverly?
Charlie: Quieres que te cuente?
Lucario: Si!
Ambos amigos se dirigen al patio trasero para continuar en compañía de la tipo Psíquico-Hada y molestarla, mientras que la canina queda sola en la sala.
Rockruff: Jiji... creo que tengo una idea. Ya sé qué conseguirle a Charlie!
Con mucha energía, la canina se va corriendo hasta la habitación del chico para pasar un rato a solas y elaborar un plan para ejecutar.
Al día siguiente, el día comienza como uno completamente normalmente, Charlie y las pokemones tenían un día muy tranquilo mirando televisión, hablando en algún patio de la casa o simplemente descansando en las distintas pero no muchas habitaciones de la casa.
A eso de las 3:00 p.m, Lucario se acerca a Charlie, quien estaba sentado en el sillón con Rockruff en sus piernas mientras veían televisión.
Lucario: Charlie!
Charlie: Eh?
Lucario: Quiero que hagamos algo -decía tratando de sonar aburrida
En ese momento, el chico voltea la cabeza y mira a la pokemon, mientras que Gardevoir se acercaba discretamente al lugar.
Charlie: Ah sí? Cómo qué?
Lucario: Pff... no sé... tal vez... caminamos al bosque?
Charlie: Uhm... tsss... me da pereza.
Lucario: Oh, vamos Charlie! Me estoy muriendo de aburrimiento!
Charlie: Hmm... Agh... que hueva, pero bueno. Alguna otra quiere ir?
Gardevoir: Yo no!
Rockruff: Yo tampoco! Tengo cosas que hacer.
Charlie: Que clase de cosas?
Rockruff: Uhhh... cosas de pokemon!
Charlie: Ahhh ya... bueno, vamos Lucario, no quiero volver muy tarde.
Con algo de lentitud, el chico coloca a la tipo Roca en el sillón y se va por unos tenis a su cuarto y luego salir nuevamente a la sala e irse junto con Lucario por la puerta trasera. No sin antes darle un guiño a Gardevoir cuando Charlie no las miraba.
Al verlos irse, Rockruff sonríe con mucha emoción y se levanta del sillón en lo que Gardevoir miraba por la ventana de la cocina para cerciorarse de que los dos amigos se hayan ido.
Gardevoir: Ok, escucha bien enana. Tenemos poco tiempo, Lucario y yo estuvimos decidiendo sobre qué darle a Charlie de cumpleaños, pero no logramos nada. Afortunadamente ayer mientras ustedes no estaban, los amigos de Charlie llamaron a ese teléfono de casa y dijeron que vendrían hoy para sorprenderlo. Es una fortuna que Charlie no haya estado cuando pasó eso... ~luego de que consiguieramos el helado~
La pokemon se apoya sobre el lavabo de la cocina y esta mira con una sonrisa como Lucario y Charlie se alejan a la distancia.
Gardevoir: Jeje... solo se nos ocurrió ese juego con cartas para ver quién lo distraería mientras que sus amigos vienen aquí, como la vez anterior... así que... creo que ya puedes deducir el resto, Rockruff. En cualquier momento ellos...
La pokemon voltea un poco emocionada, pero al hacerlo se da cuenta que no había quedado nadie en la casa, por lo que solo mira con confusión a todos lados.
Gardevoir: Ro... Rockruff?
En otra parte, empezando a ingresar al bosque, ambos amigos compartían un momento de tranquilidad, mientras seguían caminando.
Lucario: Ahhh~... es agradable la tranquilidad aquí, no?
Charlie: Si... la verdad es genial -decía metiendo sus manos en sus bolsillos del pantalón.
Lucario: Y... que tal te has sentido últimamente?
Charlie: Pues... un poco mejor.
Lucario: Eso es bueno!
Charlie: Si...
A pesar de que las cosas parecían mejor un poco para Charlie, la situación aún era un poco delicada, por lo que Lucario solo le veía con algo de nerviosismo para hablarle.
Lucario: ...
Charlie: ...
Lucario: ...
Charlie: Oh, casi lo olvido. Beverly te mandó saludos a ti y Gardevoir... se lo diré al volver.
Lucario: De veras?
Charlie: Jeje si.
Lucario: Guaaau... Beverly enserio es muy genial, me grada mucho!
Charlie: Jeje puedo saber por qué?
Lucario: Huh? Por qué que?
Charlie: Es que... sabes... Beverly es rubia... ojos claros... coqueta... linda, tiene buen cuerpo y pues... no te da una impresión como la de... Lisa?
Lucario: Claro que no, no digas tonterías! Lisa no se acerca ni a los tobillos de Beverly!
Charlie: Lo dices enserio?
Lucario: Lisa solo era una estúpida engreída que cree que puede tener a cualquier imbécil a sus pies!
Charlie: Oh...
El semblante de la pokemon se había tornado molesto, pero rápidamente desapareció al ver el semblante decaído del chico.
Lucario: Ahm... lo siento... no me refería a ti -decía avergonzada.
Charlie: T-Tranquila, no pasa nada.
Lucario: Es solo que... desde que conocimos a Beverly... me pareció una gran persona, sabes?
Charlie: Que ves en ella diferente a Lisa?
Lucario: Ella nunca se interesó en lo que pudieras hacer tu por ella... ella... sin dudarlo se ofreció a ayudarte cuando lo necesitabas... recuerdas? Eso es algo que guardo muy bien en mi memoria.
Charlie: Cuando... no pude pagar mi... operación.
Lucario: Si... además, su aura es muy pura.
Charlie: Vaya...
Lucario: Si...
Charlie: ...
Lucario: P- Puedo preguntarte algo?
Charlie: Claro.
El semblante de la pokemon se torna algo nervioso e indeciso, por lo que decide apartar un poco la vista del chico.
Lucario: Que es lo que viste tu en Lisa?
Charlie: Oh... eso...
Lucario: Si...
Charlie: No... no lo sé... creo que... solo me atraía su físico y... el hecho de pensar que yo le atraía.
Lucario: Pero... por qué buscabas eso?
Charlie: Pues... los humanos somos un misterios, sabes? Nuestras emociones siempre nos manejan y aunque queramos controlarlas... ellas terminan ganando.
Lucario: Enserio se oye complicado... jeje.
Charlie: Lo sé jeje... pero... supongo que buscaba alguien que me acompañara en mi vida... alguien con quién compartir mis logros y... el resto.
Lucario: Entiendo...
Charlie: ...
Lucario: Y... aún te duele? -preguntaba con timidez
Charlie: En realidad... no me sentí triste por eso... solo sentí... humillación... creo.
Lucario: Oh...
Charlie: ...
Lucario: Al menos no puede dolerte más que la paliza que le dí -decía entre risas
Charlie: Tu... que?!
Lucario: Si! Jajaja... ella y ese Toxtricity.
Charlie: Tu... golpeaste a ambos?! -decía atónito.
Lucario: Golpearon es una palabra muy suave para lo que recibieron.
Al voltear a verlo, Lucario nota una cara de susto en el muchacho, por lo que deja sus risas al saber que no lo tomó muy bien.
Charlie: Y... no llamaron a la policía?
Lucario: Uhm... no, no soy pokemon de nadie y creo que solo pueden llevarse a pokemones que hagan alborotos a menudo.
Charlie: Oh... es cierto.
Lucario: Lamento si no te gustó saber eso.
Charlie: ...
Lucario: ...
Charlie: Pff.
Lucario: Je...
Charlie: Jijiji....
Lucario: E-Eh?
Charlie: Jajajaja!
Lucario: Te estas...?
Charlie: JAJAJAJAJA!
La pokemon se impresiona por la reacción del muchacho, pero si semblante cambia a uno más relajado al ver cómo se reía a carcajadas.
Charlie: Jajaja! Está mal que me ría?
Lucario: Uhm... no creo jejeje.
Charlie: Jajajaja! Dime que les rompiste algo encima!
Lucario: Una silla.
Charlie: JAJAJAJA!
Lucario: Jajaja!
Ambos continúan caminando agarrándose el estómago de la risa provocada por recordar e imaginar cómo fue la golpiza que Lucario le propinó a Lisa y Toxtricity.
Por otra parte, a eso de las 4:50 p.m, una pequeña canina se le veía ir corriendo por medio de la calle, cuando de repente, está se detiene en seco al ver cómo de una limosina parqueada se bajaba una coneja que ella conocía y con una pequeña mochila en su espalda.
Rockruff: Uh?
Raboot: Rockruff?
Rockruff: Raboot?
Raboot: Esa soy yo.
Rockruff: Que haces aquí?
Raboot: Y-Yo... que haces tú aquí?
Rockruff: E-Ehmm... estoy en una misión!
Raboot: Una misión?
Rockruff: Si! Una misión ultra secreta.
Raboot: Oh... bueno, si tú lo dices. Cambiando un poco el tema... s-sabe si Charlie está en casa? -preguntaba tímida.
Rockruff: Por ahora no, él salió. Por lo que es el momento perfecto para ir por su regalo!
Raboot: Regalo?
Rockruff: Si! El regalo de cumpleaños para Charlie!
Raboot: Charlie está cumpliendo años?!
Rockruff: Si!!
Ante la noticia, la tipo Fuego se impresiona y Rockruff nota su semblante, por lo que una idea más cruza su cabeza.
Raboot: Wow... Charlie cumpleaños... y-y dijiste que estás en una misión?!
Rockruff: Si!! Quieres participar? -preguntaba muy audaz.
Raboot: Yo... si es para hacer feliz a Charlie... estoy dentro!
Ambas pokemones se comparte una emocionada sonrisa, pero el momento se ve interrumpido.
Richard: Señoritas, por si no lo notaron, aún sigo aquí -decía bajando la ventanilla del copiloto.
Raboot: Oh... esperen un momento... Rockruff, exactamente a dónde ibas?
Rockruff: Que bueno que preguntas! Por que no se a donde voy ni sé cómo iba a llegar.
La sonrisa plana de la tipo Roca deja estupefacta a la coneja, así como al chófer que escuchaba todo por la ventana.
Raboot: Uhm... entonces... que planeabas?
Rockruff: Quería llegar a la ciudad y buscar una guardería pokemon.
Raboot: Huh... no conozco ninguna.
Richard: Están de suerte, señoritas. Da la casualidad que yo si conozco una, podría ser está de la que habla la joven encantadora?
Rockruff: Puede ser!
Raboot: Solo hay una forma de averiguarlo!
Rockruff: Puede llevarnos señor?
Richard: Planeaba decirles la dirección, no llevarlas. No creo que a madame Vanessa le guste saber que ando por ahí.
Raboot: Pero nadie le va a decir!
Rockruff: Awww vamoooos!
La pokemon pone unos ojos muy conmovedores y agrandados que se podían ver desde el interior del vehículo, por lo que Richard solo se mantiene con una expresión neutra.
Richard: ...
Rockruff: Por favor!
Richard: ...
Rockruff: ...
Richard: Usted es una joven muy adorable... solo por eso haré una excepción y los ayudaré.
Rockruff: Hurraaa!!!
Richard: No perdamos el tiempo, jovencitas. Suban.
El hombre mayor abre la puerta y ambas pokemones suben de un solo salto al interior del vehículo para posteriormente arrancar e irse en dirección a la ciudad.
Mientras tanto, ya el sol se empezaba a esconder por la hora. En una laguna algo adentrada entre la espesura del bosque, Charlie y Lucario se encontraban compartiendo un pequeño rato a solas cerca de la orilla.
Lucario: Jeje! Te lo juro! Cuando abrimos la nevera nos encontramos esa leche caducada y Rockruff se la tomó.
Charlie: Que asco Lucario!! Jajajaja.
Lucario: Jajaj! Y así dejas que ella te lama la cara!
El chico se da cuenta de este detalle y se asquea aún más, pero las risas no cesaban hasta no haber pasado algunos minutos.
Charlie había pasado un rato muy agradable con la pokemon durante todo ese paseo "improvisado" que había sugerido, se notaba como la pokemon había cambiado su actitud para hacer reír todo lo posible al humano, alejándolo de su tristeza.
Conforme pasaban los minutos y continuaban disfrutando del momento, Charlie recuerda aquellas palabras que Beverly le había dicho el día anterior.
"... Ella siempre estuvo ahí... ella siempre estuvo a la espera de tu atención, no lo crees?..."
"... a veces lo que queremos o buscamos siempre está frente a nosotros... aunque no lo veamos..."
Viéndola reír, Charlie deja de escuchar todo a su alrededor y solo mira con una ligera sonrisa como la pokemon seguía distraída en sus carcajadas.
Sin previo aviso, la Lucario deja de reír en seco al sentir como unos brazos la rodean, por lo que enfoca su vista al frente y nota al muchacho apegándose a ella en un cálido abrazo.
Lucario: E-Eh? Charlie... q-que pasa?
Charlie: Es solo que... quería agradecerte por... estar conmigo.
Lucario: O-Oh... eso jejeje... claro que sí! No hay nada qué agradecer.
Aprovechando que tenía cerca de su pecho al joven, está decide pasar su pata gentilmente por su cabeza, mientras que esté permanecía oyendo los tranquilizadores latidos del corazón de esa Lucario, latidos que se sincronizaban con los suyos a un ritmo calmado.
Lucario: O-Oye deberíamos volver, pronto será muy oscuro para andar por aquí.
Charlie: Jeje de acuerdo.
Lucario: Bien, andando.
Charlie es el primero en levantarse y este ayuda a la pokemon a hacer lo mismo, pero inesperadamente para el joven, esta aprovecha la oportunidad y decide no soltar la mano del muchacho en lo que vuelven a casa.
Lucario: Jiji! Solo es para que no te alejes mucho!
El chico encuentra algo de gracia en la tonta y a la vez ingeniosa excusa de la pokemon, por lo que decide darle algo de crédito y dejar que esta lo guíe de nuevo a casa.
Una vez allí, Charlie y Lucario notan todas las luces de la casa apagadas, con una pequeña fuente de luz amarillenta proveniente de la cocina.
El chico mira extrañado y confundido a la pokemon, por lo que esta solo responde encogiéndose de hombros. Charlie se preocupa por ello y Lucario suelta su mano para que este se aproxime trotando a la puerta trasera con preocupación, dejándola a ella atrás por algunos metros.
El chico entra rápido a la casa y este se confunde mucho al ver un pastel con candelas de cumpleaños en medio de la mesa en la cocina, cuando de repente una suave tonada de cumpleaños comienza a ser cantada alrededor de él.
Charlie se impresiona al máximo al notar algunas siluetas conocidas alrededor de la mesa mientras él seguía acercándose con curiosidad, por lo que unas lágrimas no tardan acumularse para querer salir de sus ojos al darse cuenta de lo que se trataba.
Al finalizar la tonada, todos aplauden y animan a Charlie para soplar las candelas y que pida un deseo. Tras algunos segundos, Charlie cierra sus ojos y se inclina para dar el soplido de su deseo.
Las ovaciones no tardan en hacerse presente en medio de la oscuridad y las luces se encienden en poco tiempo para revelar que quienes cantaban su cumpleaños no eran más que Gardevoir, Salazzle y los amigos del trabajo anterior de Charlie: Joan, Jess y Adrián.
Salazzle: Felicidades Charlie!!
Joan: Feliz cumpleaños Charlie!!
Adrian: Si que soplaste la vela, eh? Jajaja!
Jess: Ay, que lindo! Cada día más viejo jajajaja.
Charlie: C-Chicos?! Cómo...? E-Es que... cómo... olvidé por completo mi cumpleaños! -decía confundido.
Gardevoir: Lo suponía.
Los tres humanos proceden a acercarse al cumpleañero para palmear su espalda y felicitarlo con mucho cariño, así también como la Salazzle y Gardevoir.
Lucario se acerca a la cocina y esta se recuesta a la estufa para mirar con una mirada relajada como celebraban a Charlie. En su mirada humedecida se podia apreciar la genuina sorpresa y alegría por ver a sus amigos nuevamente y en una ocasión tan repentina cómo su cumpleaños número 22.
Luego de que los invitados abrazaran y saludaran al chico, estos comienzan a sacar comida rápida, vasos, refrescos, platos, cubiertos y demás cosas que los invitados trajeron para la fiesta.
Joan: A Charlie no le den refresco! Yo le traje algo especial!
Desde una mochila que pertenecía al joven, este saca una lata de un color brillante y se lo extiende al cumpleañero.
Charlie: Que es eso, Joan?
Joan: Esto... es un regalo muy especial para ti! Lo tuve que pedir desde otra región, Paldea para ser específicos, así que disfrutala... ¡¡Es la Monster dorada de edición limitada Gholdengo!!
Charlie: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡HOSTIA PUTA!!!!!!!!!!!!
Los ojos del joven toman forma de estrella y este lleva las manos a las mejillas por la impresión de tal regalo, haciendo que los demás le miren agraciados por su reacción.
Mientras tanto, el reloj daba las 7:12 p.m, hora en la que una limosina permanecía parqueada a las afueras de un establecimiento a la espera de una señal. Por otro lado, unas siluetas se pueden observar desde donde estaba la limosina, las cuales acceden al lugar trepando cómo un equipo y saltando desde la cima de un muro de unos 5 metros de altura que limitaba ese asentamiento al que querían acceder. Rockruff y Raboot caen en un jardín que la canina había visitado anteriormente.
La tipo Roca se dedica a olfatear el área, mientras que la tipo Fuego la sigue con una mochila un poco más grande que la que cargaba anteriormente.
En dado momento, la canina llega hasta los matorrales que había en una de las esquinas de esa paredes que limitaban esa guardería pokemon a la que se habían infiltrado, siempre al cuidado de no alertar a los demás pokemones que pasaban ahí la noche o cualquier forma de seguridad del lugar.
Rockruff: Uhmm... oye! Sigues ahí?
Eevee: Uh... eh?
Rockruff: Hola!! Soy yo!! Vine ayer, recuerdas?
Eevee: Q-Que haces aqui?
Rockruff: Venimos a hacerte una propuesta!
Eevee: Eh? P-Pero... por qué?
Rockruff: Mi amigo quiere tenerte!! Y por eso estoy aquí.
El pequeño Eevee se sorprende al escuchar lo que decía la canina, por lo que sale algo lento de los matorrales para verla a los ojos.
Eevee: E-Espera... que dijiste?!
Los minutos pasan y mientras Richard miraba a su reloj de muñeca con algo de desesperación, este nota una mochila que es lanzada por encima del muro de la guardería. A los pocos segundos, se puede observar a las otras dos pokemones saliendo a toda prisa mientras arrastraban esa mochila hasta la limosina y posteriormente suben rápidamente.
Raboot: Listo Richard!
Rockruff: Podemos irnos!
Richard: Debemos apurarnos! La dama Vanessa me requiere en la mansión y puede sospechar de tu... -es interrumpido.
Raboot: No digas más! Arranca!
Con algo algo de nerviosismo, el hombre mayor arranca el vehículo mientras las llantas rechinan y salen a toda velocidad del lugar.
Por otra parte, en la casa de Charlie todos rodeaban al chico sentado en el sillón abriendo algunos de los regalos que le daban.
Charlie: Vayaaa... un par de medias.
Adrián: Me costo mucho encontrarlas.
Charlie: Se nota.
Jess: Ahora el mío! Ahora el mío!
La chica le pasa una pequeña cajita de envuelta en un papel de regalo de color purpura, por lo que el joven lo toma con entusiasmo y lo destapa para ver su contenido. Al hacerlo, este se impresiona al ver el regalo.
Charlie: Una figura de anime del Chapulín Colorado!!
Jess: Si!!
Charlie: Muchas gracias Jess!! Eres la mejor!!
El chico se levanta para poder abrazar a la chica y esta corresponde de la misma manera muy alegremente.
Jess: Ay no hay de qué, estúpida! Jiji.
Joan: Mi regalo ya lo tuviste!
Salazzle: Yo te daré el mío mañana! Jeje Joan y yo tuvimos la misma idea de mandar a traerlo del extranjero, pero el mío se retrasó.
Charlie: Tranquilos chicos, su regalo fue haber venido a verme. Los aprecio mucho!
Joan: No nos des todo el crédito! Salazzle y yo llamamos a tu número de casa y por fortuna Gardevoir contestó!
Charlie: Enserio?!
En otra parte, una limosina venía a toda prisa mientras el conductor trataba de esquivar todos los autos que podía, dando bruscas maniobras.
???: Enserio me llevarán con él?!
Rockruff: Lo decimos enserio!
Raboot: Pronto llegaremos.
???: Santo cielo! No puedo creerlo! No puedo esperar! Siento que voy a explotar de la felicidad!
Rockruff: Muchas gracias por venir de visita y ayudarme con esto Raboot!
Raboot: Uh... jejej si... y-yo solo... - es interrumpida.
Richard: Señoritas! Prepárense para bajar! Debo dejarlas aquí! Corran hasta la casa del chico! Así me dará tiempo de volver con la dama Vanessa.
Raboot: No digas más Richard! Aquí nos bajamos Rockruff!
El auto se detiene y derrapa un poco al estar a tan solo unos 200 metros antes de la casa del chico, por lo que Rockruff y Raboot saltan del vehículo, la última cargando una mochila mediana en sus patas y una pequeña en su espalda.
Ambas comienzan a correr a toda prisa mientras la limosina se retira a toda velocidad. Raboot corre al frente arrastrando la mochila y haciéndola chocar y golpear con todo el camino, mientras que Rockruff iba corriendo detrás de ella.
???: Auch!! Ay!! Que pasa?!
Raboot: Lo sentimos! Debemos apresurarnos!
Rockruff: Resiste!
???: Y por qué voy en una bolsa?!
Dentro de la casa de Charlie, este se levantaba para poder abrazara con ambos brazos a las pokemones que vivían con él.
Charlie: Enserio ustedes planearon esto?!
Gardevoir: Jeje por eso nos estábamos decidiendo ayer jugando con esa pirámide de cartas!
Lucario: Es todo lo que pudimos pensar jeje -decía apenada.
Charlie: No importa! Es el mejor regalo que me pudieron dar!
El chico no tarde en darle un beso en la mejilla a cada una, con la diferencia que la azulada se sonrojaría un poco al sentir los labios del chico hacer contacto con su pelaje.
Charlie: Jejej... oigan... y Rockruff?
Gardevoir: No tengo ni puta idea.
Lucario: Que?!
Charlie: Como que no sabes?!
Gardevoir: Estaba aquí cuando ustedes se fueron al bosque y de la nada desapareció!
En el patio delantero, ya las dos pokemones venían corriendo tan de prisa que se podía distinguir el camino de polvo.
Rockruff: Ya llegamos!!
???: L-Lo puedo escuchar!
Rockruff: Solo espero que no le desagrade su color gris.
Raboot: Rockruff no digas eso!
Un bullicio se puede escuchar del otro lado de la puerta y a los pocos segundos esta se abre, dejando pasar algo de la luz interior de la casa hacia el exterior.
Salazzle: Yo la buscaré en el llano!
Adrián: Joan! Vamos al este!
Jess: Charlie dame una linterna!
Charlie: Escuchen!! Todos...
El chico y los demás se quedan confundidos y paralizados al ver a Rockruff y Raboot paradas al frente de la puerta por la que iban a salir.
Charlie: Rockruff!! Raboot? Q-Que...?
Lucario: Ahí estas enana!
Gardevoir: Donde mierda estuviste?!
Rockruff: Escuchen! Aquí traje el regalo de Charlie!!
Todos se impresionan al escuchar el disparate de la pokemon, por lo que Raboot procede a poner la mochila delante suyo y la abre bruscamente para tirar lo que traían dentro.
Rockruff: Sorpresa Charlieeeee!!! Feliz cumple.... AH?!
Una figura sale rodando por algunos metros hasta los pies de todos los invitados. Un silencio fúnebre se percibe en el aire y todos miran con los ojos abiertos como platos eso que las pokemones se traían en la mochila.
Charlie: R-Rock... R-Rockruff... -decía atónito.
Lucario: Q-Que carajos?!
???: Agh! Deberían ser más cuida.... eh?
Raboot: Eh?! Que no era un Eeeve?!
???: Eh? P-Por qué me miran tanto?
(Imagen editada por mi n.n)
+11900 palabras
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top