19. Conspiraciones
hola a todos!!! owo al in capi nuevo!! que lo disfruten~
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19. Conspiraciones
- tks, ese cabrón...- maldecía el pelirrojo entre dientes mientras se escondía de los guardias en uno de los ductos de ventilación. Mientras esperaba a que el lugar se calmara un poco, recordó el cómo había terminado en aquella situación... un grupo yakuza le había prometido una jugosa cantidad por obtener cierta información secreta de la policía; se presumía que el gobierno tenía en su poder una mortífera arma, y por una razón que desconocía, la policía guardaba la poca información que quedaba de ella.
El adelanto que le habían dado aquellos hombres era suficiente para hacer babear a cualquiera, y él no fue la excepción, por lo que quiso terminar su trabajo lo antes posible. Infiltrarse y robar información era un juego de niños para él, pero ese día su amigo le traicionó. Ahora se encontraba escondiéndose cual rata entre los ductos de aire, deslizándose ágilmente para escapar de ese sitio, no dejaría que su reputación se fuera por el drenaje a causa de ese traidor. El pelirrojo pegó la oreja al frío metal por el que se deslizaba, agudizando su oído para captar cualquier sonido, pero no había nada, todo estaba en calma... demasiado sospechoso. Justo estaba por avanzar cuando una bala atravesó el ducto a unos cuantos centímetros de donde se encontraba; pronto, varias municiones comenzaron a pegar contra el metal, atravesándolo y rebotando por todas partes, pero sin llegar a lastimarlo. Al final, el pelirrojo había acabado encerrado entre un círculo de orificios hechos con las balas del arma, cuarteando el metal de tal forma que cedió ante su peso, y en menos de un segundo, se encontraba a los pies de quien lo había acorralado.
- así que tú eres Akagami Shanks- pronunció aquel hombre, apuntándole con su arma de fuego con una mano mientras que en la otra sostenía una afilada espada, la cual no tardó en posicionar en el cuello del pelirrojo
- [este hombre...]- pensaba sorprendido el pelirrojo, pues parecía no conocerlo- [quizá se olvidó de mí]- se dijo con pesadez mientras trataba de aparentar tranquilidad- y tú eres el Ex Coronel Dracule Mihawk, ¿me equivoco?- el pelinegro levantó una ceja- en mi negocio, no hay nada más importante que la información, Coronel- dijo con sorna, apartando la espada de su cuerpo y poniéndose de pie- lo que no entiendo es qué hace usted ayudando a la policía a atrapar a un solo hombre
- estaba buscándote- aquellas palabras le causaron un escalofrío al pelirrojo- el que haya dimitido del ejército fue una coartaba de un plan mucho más grande, y tú formas parte de él
- ¿yo? ¿Por qué el ejército buscaría la ayuda de un criminal?
- porque lo que busca se encuentra en una prisión, y no hay forma más segura de infiltrarse que con un verdadero criminal
- ¿y yo qué ganaría con esto?
- la policía dejará de buscarte y podrás hacer de tu vida lo que te venga en gana
- gracias por la oferta, pero me niego. Yo no hago tratos con la policía, además, soy Akagami Shanks- dijo burlón- puedo escapar de cualquier situación y lugar, incluso mejor que el mismo Houdini, no necesito la ayuda de nadie
- en ese caso, tengo una segunda oferta que proponerte- sin aviso previo, el ojimiel empujó al otro contra la pared, acorralándole entre ésta y su cuerpo, y lo besó. Shanks se quedó pasmado unos instantes, tratando de asimilar lo que estaba sucediendo, y cuando al fin pudo reaccionar, hizo todo lo posible por quitarse a Mihawk de encima, pero éste soltó sus armas y se concentró en inmovilizarle y hacerle ceder, y lo estaba logrando.
Al cabo de un rato, el pelirrojo había dejado de forcejear y resistirse, al contrario, estaba entregándose deseoso al beso, fundiéndose en los labios de ese hombre. Las manos del pelinegro iban y venían por todo su cuerpo, sabiendo exactamente en qué puntos debía ser más brusco y donde debía tratarle con delicadeza, haciéndole enloquecer. Shanks comenzaba a temblar por la excitación, por suerte para él, los fuertes brazos del ex coronel se encargaban de sostenerle. Se hubiesen quedado en esa posición de no ser por la falta de oxígeno, así que, lentamente, se separaron, dejando un caminito de saliva uniendo sus lenguas. El pelirrojo se quedó perdido entre la mirada del otro, nublándole el juicio
- como segunda propuesta, estoy yo...- le murmuró Mihawk al oído a la vez que colocaba su rodilla entre las del contrario, presionando la entrepierna del pelirrojo
- ahh- no pudo reprimir los jadeos ante la deliciosa caricia. El sonrojo de su cara era cada vez más notable y el corazón le bombeaba a mil por hora
- ¿qué me dices ahora? ¿Aceptarás?
—End Flash Back—
- ¡Se terminó la siesta, cerdos!- gritó uno de los guardias frente a su celda mientras chocaba su macana contra los barrotes, haciéndole despertar de golpe. Shanks se incorporó rápidamente, con el corazón golpeándole el pecho y una notable erección que debía de ocultar del pequeño Luffy, quien aún se encontraba dormido. El pelirrojo se levantó de la cama y fue directo al pequeño lavabo para mojarse la cara y golpearla ligeramente, esperando que su libido bajara con ello. Aguardó unos minutos a que su método surtiera efecto, y en cuanto el problema entre sus piernas desapareció, regresó a la cama donde descansaba el pelinegro- Luffy, despierta- movió al pequeño suavemente- los guardias están a punto de volver
- Ace...- con los ojos aun cerrados, Luffy se sentó sobre el colchón y extendió los brazos, como esperando a que su hermano le cargase
- tu hermano te consciente mucho, ¿cierto?- el pelirrojo lo levantó entre sus brazos y le sacó de la cama, tratando de despabilarlo antes de que los guardias regresaran
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En otra celda...
Como todas las mañanas, el guardia le despertó con sus fuertes gritos. Law abrió lentamente los ojos, y al encontrarse de frente contra la pared, estiró los brazos y se giró para bajar de la cama. Al al querer dar el primer paso, sintió el vacío bajo sus pies, y en menos de un instante se encontraba tirado en el suelo.
- argh, como duele- se quejó mientras se sentaba y sobaba su cuerpo; había olvidado que dormía en la cama superior de la litera. Se giró hacia la cama para buscar el por qué su compañero aún no comenzaba a reírse, pero se llevó una gran sorpresa al ver que, en vez de Shanks, estaba Ace- ¿qué diablos...?- miró más atentamente a su alrededor, notando pequeñas diferencias en aquel lugar, esa no era su celda
- mmnn...- el pecoso se levantó con los ojos entrecerrados, bostezando antes de salir de la cama y colocarse frente a la litera, y por inercia, extendió los brazos hacia la cama de arriba- vamos Luffy- llamó a su hermanito, mas al darse cuenta de que su hermano no le abrazaba como siempre, despertó... Luffy no estaba. Y fue en ese momento que recordó que, en vez de su hermanito, había otra persona consigo. El pelinegro se giró buscando al moreno, encontrándole sentado en el suelo, mirándole...
- ...- algo en la mirada de Ace le intimidaba; aun cuando no se consideraba cobarde, la sola presencia del otro lo estaba asfixiando, como si fuera una pequeña presa a punto de ser devorada- ¿por... por qué estoy aquí?- se atrevió a preguntar mientras usaba los barrotes de la celda para levantarse
- no me interesa, pero será mejor que no te acostumbres, porque yo, personalmente, haré que te largues- amenazó Ace, caminando hacia donde estaba Law; por suerte para él, el guardia apareció y las rejas se abrieron, era hora del desayuno.
Todos los presos fueron llevados al comedor, tomaron una charola y la comida empezó a servirse; pero había algo extraño con el desayuno de esa mañana, el guisado estaba quemado y la sopa no tenía sabor, no parecía algo preparado por Sanji, pero tampoco era lo que Luffy solía hacer pasar por comida. Muchos de los internos tuvieron que pasar por alto el estado de sus alimentos y lo comieron así, en esa prisión incluso comer era considerado un lujo. Law miró extrañado el curioso platillo, se alzó de hombros y comenzó a comer mientras, discretamente, miraba alrededor. Lo primero que notó fue que Kid no estaba, seguramente por lo del día anterior; el sólo recordarlo le causó un escalofrío, por lo que ignoró ese recuerdo y siguió observando, encontrando a otro pelirrojo en una de las mesas
- quizá él sepa- habló para sí el moreno, tomó su charola de comida y, con un poco de duda, fue hasta donde estaba Shanks- ¿puedo sentarme un momento?
- ¿Law?- el mayor le miró desconcertado un momento antes de sonreírle- ¡claro, claro!- haló de la ropa a un tipo que estaba sentado junto a él y le tiró al piso, invitando al moreno a tomar su lugar. Law miró al sujeto que Akagami recién había tirado y luego se acomodó junto al pelirrojo- ¿qué te trae por aquí?- preguntó paseando su mano sobre la mesa, tratando de atrapar la del menor
- ni siquiera lo pienses- el pelinegro clavó su tenedor entre su mano y la de Akagami, impidiéndole avanzar más- sólo quería preguntarte si sabías por qué desperté esta mañana en la celda de Portgas
- oh, eso... supongo que en parte es mi culpa, jeje. Luffy quería cambiar de celda y yo le ofrecí quedarse conmigo, así que tenían que ponerte en alguna otra parte
- ¿qué diablos quieres tú con el hermano de ese hombre?
- bueno, aquí entre nos...- abrazó al más joven por los hombros y se acercó a su oído- creo que él es el indicado para convertirse en mi trofeo...-murmuró
- ¿hablas de...?- el pelirrojo sólo asintió- ¿perdiste un tornillo o qué? ¡Portgas va a matarte! Justo ahora pareciera que quiere hacerlo- miró por el rabillo del ojo hacia donde estaba Ace; sus ojos estaban en llamas y una especie de halo de ira parecía rodearle, por lo que los demás reos se habían alejado por instinto al sentir la sed de sangre que emanaba de él
- un mocoso como él no me asusta- dijo con prepotencia, a pesar de que, por dentro, aquella gélida mirada le causara un poco de incomodidad, pues él más que nadie sabía de lo que era capaz aquel muchacho- su hermanito será mío
- como quieras jodido suicida- tras decir aquello, Law se levantó junto con su charola y se dispuso a marcharse, pero el pelirrojo lo sujetó del brazo no sólo para detener su escape, sino para volverlo a sentar a su lado- suéltame
- ¿vas a ir a buscar a Eustass?- su expresión seria y la falta de palabras le dio la afirmativa al mayor- no estoy seguro de los detalles, sólo sé que está en la enfermería
- no hacía falta que me lo dijeras- el moreno hizo un movimiento para levantarse, mas el mayor le sujeto fuertemente el brazo- ¿qué quieres ahora?
- sabes que no están permitidas las visitas, ¿verdad?
- por supuesto que lo sé. Es por eso que...
- yo puedo ayudarte a entrar- le interrumpió Akagami- si a cambio me ayudas con algo- hizo un gesto para indicarle al menor que se acercara un poco más, y éste, guiado por la curiosidad, así lo hizo- necesito una distracción para algo importante que haré esta noche...- le susurró suavemente al oído- prometo que Eustass y tú no se verán involucrados de ninguna forma, si a cambio, entretienes a unos cuantos guardias por mí
- ¿de qué estás hablando?- preguntó Law al no entender nada de lo que pretendía ese hombre. Con una media sonrisa, Shanks se acercó más a los oídos del otro mientras sus manos se encargaban de ocultar sus labios. El moreno escuchó atentamente hasta que, después de un rato, algo de lo que dijo el pelirrojo perturbó su semblante. Se separó bruscamente del mayor y abrió la boca para protestar, mas Shanks fue más rápido y le cubrió la boca antes de que una sola sílaba saliera de su garganta
- sé que tuviste algo que ver con un apagón hace un tiempo, seguramente esto es sencillo para ti. Sólo tienes que hacerme este pequeño favor y te dejaré vía libre para que puedas ver a Eustass
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Después de comer su inusual desayuno, los presos fueron liberados por la prisión. Sanji y Luffy caminaban juntos en el patio, cada uno abstraído en sus pensamientos desde hace ya un rato, sin decirse nada.
- ¡Luffy!- aquel alegre llamado emocionó al pequeño, quien enseguida buscó con su mirada a quien lo había nombrado. No muy lejos de ellos estaba el autonombrado quinto rey de Impel Down, agitando su mano al aire para captar su atención
- ¡Shanks!- el pelinegro le saludó de la misma forma y corrió hacia donde estaba el mayor, dejando solo al cocinero.
- ya veo por qué Ace estaba tan molesto- se dijo a sí mismo el rubio, mirando cómo el pequeño Luffy se colgaba del cuello del pelirrojo. Restándole importancia al asunto, Sanji siguió caminando por la prisión, mirando de vez en cuando a los reclusos que había en el lugar. Al poner un poco más de atención, notó algo extraño en el ambiente... de alguna forma, todo se sentía un poco más alegre; a excepción de un punto en donde se percibía un aura pesada e incluso aterradora. Dirigió su azulada mirada hacia aquel punto tan denso, encontrando al mayor de los hermanos D. sentado en lo más alto de una de las gradas del patio, mirando recelosamente a Luffy desde su posición. Con un poco de duda, el rubio fue hasta donde Ace y se sentó un par de gradas debajo de donde estaba el otro- hola...- dijo en voz tan baja, por lo que creyó que el pelinegro no le había escuchado- hola...- repitió esta vez más alto. El pecoso lo miró unos momentos, se puso de pie y seguidamente bajó de los escalones, sentándose al lado de Sanji
- hola- respondió sin ánimos, siguiendo los movimientos de su hermanito y de Shanks con la mirada
- ¿es mi imaginación o este sitio se siente menos lúgubre que de costumbre?
- ¿eh?- el pelinegro parpadeó varias veces, como procesando lo que acababa de escuchar, y fue en ese momento que apartó su mirada de Luffy y se concentró en lo que ocurría a su alrededor, notando enseguida a qué se refería el rubio- ah, eso... debe ser porque es día de visitas
- ¿visitas?
- sí, las personas de afuera vienen a visitar a sus seres queridos que están reclusos en Impel Down. Hace un tiempo, las visitas se hacían dos veces a la semana, pero, ya que muchos de los de aquí nunca reciben visitas, los tiempos se fueron acortando hasta quedar reducidas a un par de veces al año
- es un poco triste- el rubio apoyó sus pies sobre las gradas y abrazó sus piernas, dejando que éstas ocultaran parcialmente su expresión
- supongo que sí, desde que Zoro está aquí, nadie ha venido a visitarle; es como si su familia se hubiera olvidado que existe
- no me refería sólo a él, también Luffy y tú- el pelinegro le miró ligeramente sorprendido- son buenas personas, no deberían estar en este sitio
- tampoco tú- dijo el pecoso y colocó una de sus manos sobre los hombros del rubio, intentando animarle un poco
Sin que ninguno de ellos se percatase, un par de ojos azabache los miraban a lo lejos mientras su dueño hacía un tierno puchero y cruzaba los brazos; ¿por qué su hermano se había vuelto de pronto tan cercano a Sanji?
- ¿qué sabes de... de Zoro?- preguntó dudoso el rubio, manteniendo su vista en algún punto del patio
- ah, así que has estado pensando en eso esta mañana... eso explica por qué el desayuno era un asco- Sanji se sonrojó violentamente y hundió más su cabeza entre sus piernas- bien, ¿recuerdas a aquel guardia que obligó a Zoro a cargar piedras de un lado a otro?
- ¿el de los ojos dorados?
- ese mismo. Su nombre es Dracule Mihawk, era mi superior en el ejército, y aunque no quisiese admitirlo, Zoro le admiraba mucho... lo que siempre me ha inquietado es que, los hombres que asesinó Zoro en el ejército eran subordinados directos de Mihawk, pero el coronel jamás se mostró perturbado con ello. Quizá porque el coronel jamás fue muy expresivo, o quizá... estaba planeando algo contra Zoro
- ¿crees que tenga algo que ver?
- no estoy muy seguro, tengo que averiguar un poco más
- "¡Atención!"- se escuchó por uno de los altavoces de la prisión, resonando por todo el patio- "Los siguientes reclusos tienen visita: Satou, Reads, Atsushi, Maki, Iwata, Kuroashi, Tsuboi..."- siguió enlistando aquella voz, pero el rubio había dejado de escuchar en cuanto mencionaron su apellido. Tras recibir un asentimiento por parte de Ace, el cocinero caminó hacia uno de los edificios, siguiendo al pequeño grupo que se dirigía también a recibir sus visitas.
Entraron a uno de los edificios y caminaron por los pasillos hasta llegar a un pasillo que llevaba a dos sitios diferentes. Uno para las visitas de los reos más violentos y otro hacia la habitación para las visitas que no corrían riesgo de ser agredidos por los reclusos. Sanji junto con otros presos se dirigieron a la segunda; era un espacioso cuarto con varias mesas y sillas donde varias personas esperaban impacientes mientras, junto a las paredes, había varios guardias vigilándoles. Los presos comenzaron a dispersarse, buscando a sus seres queridos; Sanji miraba hacia todos los sitios, no sabía ni siquiera dónde ir... hasta que, en una de las mesas, reconoció a un viejo amigo
- ¡Patty!- el rubio caminó ansioso hasta donde estaba el fornido hombre con quien había compartido su infancia. Al llegar junto a él, estrechó fuertemente su mano y ambos tomaron asiento, uno enfrente del otro- ¿qué estás haciendo aquí?
- ¿qué estoy haciendo dices?- preguntó incrédulo el hombre- ¡he venido a darte buenas noticias!
- ¿buenas noticias?
- así es- tras cruzar sus manos sobre la mesa, Patty se puso serio- y también a disculparme. Por mi culpa es que terminaste en la cárcel
- no digas eso; aun cuando te hubieras presentado al juicio, esa mujer se las habría ingeniado para meterme aquí de todas maneras
- no Sanji, en verdad es culpa mía que estés aquí
- no entiendo
- esa noche, cuando fuimos a beber- rememoró el hombre- yo... te traicioné- el rubio permaneció en silencio, dándole la oportunidad a su amigo de explicarse- esa mujer me ofreció una fuerte cantidad de dinero para ayudarla. Mi esposa estaba muy enferma, necesitaba el dinero, así que...
- ¡habla claro de una vez!- dijo exaltado el rubio, golpeando sus puños contra la mesa. Los guardias se pusieron en alerta, pero al ver que Sanji se tranquilizaba, regresaron a su anterior posición
- Sanji, ¿qué es lo que recuerdas de esa noche?
- salimos del restaurante y fuimos a un bar, estuvimos bebiendo hasta muy tarde, y cuando comencé a sentirme mareado, me llevaste a casa
- ¿qué más?
- a decir verdad, no recuerdo otra cosa. Desperté en mi cama al día siguiente con un fuerte dolor de cabeza
- la razón por la que no recuerdas nada... es porque yo puse droga en tu bebida- confesó Patty con un profundo dolor en el pecho- no comenzaste a sentirte mareado por el alcohol, sino por la droga. Pasaste la noche con aquella jovencita, es por eso que los médicos que la examinaron encontraron tu semen en las pruebas- el corazón de Sanji pareció detenerse, ¿su amigo realmente lo había entregado a ese par de chicas?
- ¿por qué no apareciste en el juicio entonces? ¿Por qué no evitaste que me encerraran aquí?
- esa mujer me amenazó, no podía ayudarte- Patty lloró silenciosamente unos minutos antes de limpiarse las lágrimas y sonreír- ¡pero he encontrado cómo remediar mi error!- habló exaltado- he conseguido a la mejor abogada del país, además de las pruebas que logré reunir sobre esa mujer... ¡tu caso puede retomarse! ¡Podemos sacarte de este espantoso lugar!- Sanji se quedó de piedra unos momentos, ¿había dicho sacarle?- ¿qué sucede? No pareces entusiasmado con la idea
- no es eso... estoy... sorprendido, realmente no sé qué decir...
- ¡alégrate Sanji! ¡Al fin podrás ser libre!, ¿acaso no te mueres por ver a una linda dama? A decir verdad, la abogada que he conseguido es preciosa, aunque es algo posesiva con su dinero. La próxima semana podrás verla, ¡seguramente te enamoras de ella al instante! ¡Es una verdadera belleza!- Patty siguió hablando sobre la linda abogada y sobre lo que se había perdido Sanji mientras estaba en ese lugar, y aunque el rubio estaba escuchándole, realmente no le prestaba atención.
Después de un rato que para muchos fue muy corto, se escuchó la alarma que anunciaba el fin de la hora de visitas. Los civiles comenzaron a despedirse, incluido Patty, quien abrazó al rubio para darle ánimos y le prometió que pronto podría salir de Impel Down. En cuanto se marchó, Sanji caminó a paso lúgubre hacia su celda. Al fin podría salir de la cárcel, podía realizar su sueño de encontrar una bella señorita y formar la familia que hace tiempo venía deseando... entonces... ¿por qué se sentía tan triste?
Continued...
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todo se pone más tenso??? creen que Sanji realmente salga de prisión?? qué hará Zoro al enterarse? qué planea Akagami???
owo gracias por leer, y hasta el siguiente capítulo!!
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