Desde que te Conozco 03
Seguimos con esta historia estudiantil de amor, traición y, a lo mejor, sexo.
****************
Desde que te Conozco
- Una Amiga de por Vida -
****************
-¡Bien, Lori! ¡Bien!, si he metido chicas a mi habitación; tú ganas allí, ¡metiche! Cuando mamá y papá se enteren no me la voy a acabar, ¡gracias, por eso! Pero, de allí a que sea Sid la que estuvo aquí, eso ya es locura tuya y de Ronnie. Creí que ella ya te había dicho que todo fue un maldito error, pero ya veo que no te ha dicho nada, ¡pues al carajo! ¡Simplemente voy a cortar su amistad por teléfono y se acabó!-
Lori lo miraba con los brazos cruzados y una expresión neutra.
-No te creo. No te creo nada de lo que dices ni ese show que me acabas de hacer; te conozco demasiado. Pero eres bueno, lo admito, y te vas a comer a cualquier persona de tu edad sin sal ni pimienta.
Es verdad, no puedo probar que este cabello es de Sid Chang, pero es obvio que lo es. Mi consejo es que hables con Ronnie y le digas la verdad; sea lo que sea que me ocultes. No, no le voy a decir a mamá ni a papá que ya traes noviecitas ni que ya eres sexualmente activo, pero realmente espero que este usando protección.
-Oye, tampoco, yo...no...- El chico se sonrojó.- Yo...no...-
Lori suspiró profundamente, luego dio dos pasos y abrazó a su hermano.
-No importa ya. Perdóname por haberme metido a tu cuarto así y por metiche y...ya sé que me pasé; es solo que vi a Ronnie, Lincoln y estaba devastada como nunca la vi. La conozco desde que ambos eran niños y realmente me dejó incómoda todo esto.- Ella se separó y le acarició el rostro.
-Yo solo quiero que seas un buen hombre, Lincoln, habla con ella y dile la verdad, sea cual sea, pero solo la verdad. ¿Me lo prometes? ¿Prometes que lo harás?-
Lincoln sonrió con fastidio sin mirar a los ojos a Lori. -De hecho, había quedado con ella de salir la próxima semana para aclarar las cosas. Ya no lo iba a hacer por todo esto que pasó, pero, si, Lori, te prometo que hablaré con ella.-
-Ese es mi niño. Te debo una por esta invasión a tu cuarto, ¿quieres algo en especial?-
-Solo que realmente no le digas a nuestros padres que he traído niñas a la casa cuando no están. Por otro lado no han sido mas que 3 veces y no he hecho nada de lo que imaginas, de verdad.- Le dijo con firmeza.
Lori suspiró -Bueno, haré como que te creo. Ahora lo único que queda es que Ronnie realmente hable con su amiga, por que ella estaba segura, pero segura de que ustedes son novios o tienen algo.
-Si, la verdad espero que aclaren las cosas y dejemos este tema por la paz. Ya me ha causado muchos problemas.-
Lori volvió a ver a su hermano al rostro. No le creía una palabra, pero admiraba lo bueno que era para mentir. Luego se preocupaba por el mismo motivo.
-Pórtate bien.- le dijo y le besó la frente. Luego bajaron. Irían por algo para comer.
*******
-Ronnie, buenas noches, tengo varias llamadas perdidas tuyas y mensajes borrados. ¿Pasó algo?-
-Hola, Sid. No...nada, solo te llamaba para ver si salíamos a algún lado. Hace ya rato que no nos vemos.-
-Si, de todas formas, no podía. Vine a Royal Wood para hacer una tarea en equipo, de hecho, vengo en el carro de los papás de una amiga.
-Fuiste a Royal Wood, que bien. ¿No pasaste a ver a Lincoln?
-Ah...no, no hubo tiempo. Estuvimos trabajando todo el día, de hecho, por eso no vi las llamadas.
-Si...me imaginé algo así.
-Y es que lo pongo en silencio cuando trabajamos, para no perder concentración. De verdad lo siento.
-Si, ya no importa. Oye, será que mañana podemos vernos a la hora del almuerzo, hay un tema que quiero platicar.
-Cl-claro, ¿de qué se trata, Ronnie?
Ronnie no contestó. El ruido del carro en la carretera pareció incrementarse, así como algunos lejanos sonidos de los cláxones.
-¿Ronnie?
-Algo sin importancia. Es un proyecto para la tienda familiar. Mañana te cuento, ¿va?
-Ok, está bien. Mañana lo platicamos.
-Si. Oye...
-Dime...
-Nada. Ya mañana. Sale, buen viaje.
-Gracias.
Y la llamada terminó. Sid se llevó una mano al estómago. Estaba muy nerviosa. Se preguntaba con sinceridad como se había permitido llegar allí. Todo había sucedido muy, pero muy rápido.
Pensó en Lincoln, y en lo bien que la había pasado en todas y cada una de sus salidas. Él parecía compartir todos sus gustos y no decía no a ninguna de sus ocurrencias. Se ruborizaba al recordar como la agarró antes de caer al estanque de una manera muy sensual y le había dicho con exactitud el número de pecas que tenía en el rostro.
Tomó su celular.
S: Lincoln...hola...
L: Hola, linda, qué pasó?
S: te gustó lo de hoy en la tarde? ☹
L: Es una de las mejores cosas que he vivido, por qué esa cara?
S: Sucede que...mañana hablaré con Ronnie en la escuela y tengo miedo. No se cómo se pudo enterar. T.T
L: Ella no sabe nada ni de nosotros, ni de lo que pasó hoy; solo fue un supuesto al saber que has venido a Royal Wood seguido. Es cuestión de que te mantengas firme.
S: Pues sí, pero no sé...
L: Sid, yo quise decirle la verdad a Ronnie y no me dejaste. Ahora, si ella lo descubre si se va a enojar y mucho. Mantente firme, ella no sabe nada y yo voy a hablar con ella en la semana para dejarle claro que ella y yo no somos nada.
S: Si, tienes razón. No te preocupes mi amor, solo necesitaba leerte un poco.
L: amor? Soy tu amor?
S:...si...si quieres...
L: Claro que sí, mi pecosa. Hablamos en la noche?
S: SII :3
********
Sid tenía la frente pegada a una de las mesas más alejadas del comedor de la escuela, junto a un plato de almuerzo que no había tocado. No tenía hambre en los más mínimo, el estómago le dolía de los nervios.
¿Por qué dejé que esto pasará?-Pensaba mientras sentía que le faltaba el aire.
Estaba esperando a Ronnie Ann.
Debí dejar que le dijera la verdad. Total, solo tendría que cambiarme de escuela y de ciudad para que no me mate.-
No llevaba mucho en aquella posición, el almuerzo ya estaba por terminar y casi no había chicos ya en esa zona. De pronto, se escuchó que arrastraban una silla y alguien se sentaba en ella. Sid levantó la vista.
Enfrente estaba Ronnie, con su típica sudadera color violeta mirándole de una manera que nunca le había visto.
No era odio o rencor, por lo menos aún. Eran de suspicacia. Sid se incorporó y suspiró. -Ho-hola Ronnie.-
-No te ves muy bien, ¿paso algo?- Contestó la morena y Sid sintió un susto que hizo el intento de disimular.
-Si, yo...he estado afiebrada y tengo el cuerpo cortado.-
-A mira, tienes calentura, si, eso debe ser, seguro. Se te nota lo caliente.-
Sid se le quedó viendo a su amiga. -Aun no he ido al médico, pero si, es... posible. Y...¿Cómo has estado?
-¿Y en estos meses en que no nos hemos visto? Pues más o menos. La tienda va más o menos, las clases igual, tengo algunos amigos que valen la pena. Casi todo va bien.- Luego se llevó un dedo a la barbilla, pensativa.- Bueno, me surgió un problema de plaga, pero estoy segura que va a ser erradicada pronto.
La castaña cortó la respiración.
-¿Pla-plaga? ¿Cómo de plaga? ¿Se metieron a la tienda? ¿Quizá termita?
-No, Sid. Una plaga del peor tipo que existe. - Ronnie apoyó los brazos en la mesa y juntó las manos entrelazando los dedos.- Una plaga que traiciona...que roba....que miente...
A la joven asiática le comenzaron a castañear los dientes.
-N-n-no entiendo, Ronnie...-
Ronnie se acercó al rostro de su amiga, dominante, y dijo con la voz arrastrada. -Sé que te estás metiendo con Lincoln.
-¿Q-qué?
-Lo que oíste, lo fuiste a ver ayer.- Ronnie frunció el ceño con rabia.- ¿Me vas a decir que no?-
-Ro-Ro-Ronnie...n-no...no...no te entiendo...¿P-por qué dices eso?-
-¡¿Entonces por qué tiemblas, mentirosa?!
-¡Porque tú me estás gritando!- Exclamó Sid cubriéndose la cara con las manos y los ojos cerrados.
Ronnie volteó a ver a ambos lados y vio que había algunos chicos aún. Regresó a su asiento.
-Solo acéptalo y acabemos con esto.
-Es que no sé de que me hablas.- Respondió aun cubriéndose la cara con los ojos cerrados.
-Me dejaste de hablar hace casi 4 meses, justo después de que fuiste a ver no sé qué al Zoológico con Lincoln. Luego que fueron al parque de diversiones y allí fue donde Lincoln igual me dejó de buscar.
Sid abrió los ojos. -Ronnie, ¿Me-me estas culpando porque salimos un par de veces de forma pública?
-No, te culpo porque antes de que tú fueras y comenzaras a ir cada semana; no creas que no lo sé, él y yo hablábamos por lo menos cada tercer día. Apenas te metiste me dejó de hablar en lo absoluto; perdió el interés en mí.
-Eso es una coincidencia.
-Tienen semanas que los dos están conectados en la red a la maldita misma hora, ¡Semanas, Sid! Y le escribo a Lincoln y me da evasivas, y te escribo a ti y estás ocupada-
-Eso no prueba nada, Ronnie, yo... he tenido tarea, de verdad.
-¡No finjas! Es demasiado obvio.-
-Es que no...-
Ronnie azotó la mesa y se fue sobre Sid tomándola del cuello de la blusa obligándola a pararse de la silla. -¡¡Acéptalo!! ¡¡Eres una mala amiga!! ¡Mínimo ten la decencia de aceptarlo!!
Sid intentaba responder algo, pero nada salía, un susto nacido del vientre la había paralizado, las piernas le temblaban y los dientes ya no se detenían en su castañeo.
-Y-y-y-yo...y-yo...te-te-te juro...
-Me juras qué, traidora infeliz...-Le dijo pegando su frente con la de ella, haciendo presión y mirándola fijamente.
-Ronnie...yo...
En eso, sonó un mensaje en el celular de Sid, que estaba en la mesa.
Ronnie lo escuchó y sin soltar el cuello de la blusa, tomó el celular de la joven asiática.
-¡No! ¡Devuélvemelo! - Exclamó Sid forcejeando por primera vez intentando recuperar el celular que tenía Ronnie en la mano izquierda; sin embargo, esta la mantenía con facilidad a la distancia.
-Si estas tan segura, vamos a ver de quien es el mensaje.- Dijo amenazante y en un movimiento ágil, soltó la blusa de Sid y le tomó la muñeca derecha, apretándole la mano con mucha fuerza y doblando su dedo índice.
-¡AAAY! ¡Mi dedo, Ronnie!-
-Y si te mueves te lo rompo.- Dijo la chica y con velocidad colocó la yema en el detector dactilar del celular.
El teléfono se desbloqueó y Ronnie cedió en el agarré. Sid se fue al suelo sollozando mientras sostenía su mano con mucho dolor.
-Mi...dedo...-
Ronnie revisaba con prisa. A pesar de ser un área solitaria ya algunos chicos se habían comenzado a asomar por los gritos.
El mensaje había sido de la madre de Sid; Ronnie comenzó a checar las aplicaciones.
-Borraste llamadas...borraste mensajes...en ninguna aplicación tienes chat con él... si como no.-
-De-vuélvemelo...- Exclamó sollozando la chica sin soltar su mano.
-¿Qué te parece si le marco? ¿Crees que me diga "mi amor" a mí?
-¡NO! ¡DÁMELO!- Fue el grito de Sid que retumbo con fuerza, la chica se colgó de la cintura de la Santiago tratando de alcanzar su teléfono.
Ronnie se percató que, a lo lejos, un prefecto rondaba y no tardaría en darse cuenta de la situación; así que le lanzó el celular a la cara despectivamente.
El celular golpeó la frente de la joven quien se llevó una mano al rostro debido al impacto.
-No necesito más pruebas, Sid. Me las vas a pagar, te lo juro.-
La separó de una patada y luego tiró de la mesa el plato con comida que cayó sobre la cabeza de Sid, quien ya no hacía más que cubrirse.
-Si me acusas, te va peor, maldita.- Sentenció.
Ronnie se colocó la capucha y salió de la escuela huyendo por una reja rota que solo algunos alumnos conocían.
******
En algún lugar de la preparatoria de Royal Woods.
-¿Stella, linda, me pasas mi celular?
******************
Aquí el capítulo.
El que sigue será un poco de la divertida vida escolar de Lincoln
Ronnie ratita no se anda con cuentos y se viene su charla con el peliblanco.
Pobre Sid...
Bonita mitad de semana a todos.
Gendo- School Days -Uribe
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top