Capítulo XI

Domingo.

Si el domingo tienes que hacer algo,

que sea para consentirte y relajarte.

Anónimo.

Al dejarla en su casa decidí ir a otro lugar me sentí con todas las energías cargadas, con una emoción en el corazón que hace rato había olvidado, encendí la estéreo justo sonaba una canción que nunca había escuchado, pero me lleno de buena vibra y fue fácil seguirle el ritmo.

Llegue justo al lugar que deseaba estar, al ciber café. Lo abrí, y me cerré en él, encendí las luces di una mirada escaneando el lugar, solté un poco de aire.

-Manos a la obra-, -me dije así mismo, me quite la franela, estire mis brazos hacia delante juntando mis manos dejando sonar mis dedos.

Camine a hacia un viejo tocadiscos, -quizás no funcione- Para mi sorpresa fue lo contrario si funciono y lo mejor que a la perfección coloque un disco de Queen.

La primera melodía bohemian rhapsody, Leslie y yo fuimos fans de Freddy Mercury por ello siempre quisimos este tocadiscos y sentir la particularidad de la época donde esto era la esencia del momento, la música seguía su sonido yo buscaba el principio del comienzo.

preguntándome que imagen quería darle al nuevo ciber café, estaba claro que era un lugar creado con amor aún así le faltaba algún sentido, había un cuadro vacío esperando, nunca se llevó a cabo, las computadoras estaba claro que necesitaba ser un poco actuales, o quizás no, no lo sé.

Tome la escoba y comencé a barrer el polvo se desciende cubriendo el lugar, me distraje por la canción, la escoba paso hacer una guitarra y en ese solo de Queen me imagine tocándola, ya luego me puse a cantar, y dar algunos pasos sexys de baile tipo Queen, y repetía al son de la música.

-galileo, galileo, galileo, fígaro, ¡magnifico ooh! -muy desafinado.

Ya luego venia ese solo de guitarra una vez más, sentía la adrenalina, subí arriba de una mesa, por un momento me imaginé allí en un escenario y la gente hacia ovaciones por mí.

Por ello dicen que los hombres no maduramos.

Salte de la mesa terminado aquella canción, luego sonó love of my life y esa canción me sumerge en recuerdos con Leslie deseando que no me deje, recordando su sonrisa, queriendo retroceder un poco el tiempo y esa última discusión decirle que la amo y no marcharme.

Desearía haber podido encararla y haberle dicho que lo sabía, y dejar a un lado esa estupidez de dejarle su espacio.

Una pequeña lagrima rodo por mi mejilla, la limpie con mi antebrazo, y continue sacudiendo el lugar, desconecte el tocadiscos, decidí hacerlo en silencio, pero aquel silencio era abrumador, encendí unas de las computadoras conecte unas minis cornetas y coloque unas de mis favoritas.

Los Backstreet Boys - I Want It That Way,

No dejaba de bailar y creer que la escoba era un micrófono de múltiples usos, hacia de guitarra y hacia de escoba, -excelente invento deberían hacerlo para las amas de casa, se venderían amontones. -me dije a mi mismo mirando la escoba de arriba abajo dejando una leve carcajada al aire.

Y así pasaron las horas entre bailes, cantos y decoración improvisada del lugar, va un poco mas reluciente, ya tenia la idea de lo que haría, un ciber café, retro, si suena loco, pero ¿Qué no es loco? e igual funciona, tenía un tocadiscos, que no pensaba cambiar, algunos discos de los grandes de la época, no quería darle un toque de una sola época especifica, todas dejaron su huella.

Así que se me ocurrió que podía ser un ciber café vintage mix, era las 05:00 am, del domingo, y sin importarme nada, contacté algunos proveedores, espere que llegara mi encargo. Continué con la limpieza sonriendo sin nada de cansancio, sentía que algo bueno estaba por venir.

Dos horas después llega mi pedido nada económico he dejado todos mis ahorros allí, sé que valdrá la pena, algunos cuadros, mesas nuevas, cocina necesariamente nueva, sillas, una estantería para decorarlo de libros, en esa parte del lugar habría una máquina de escribir, (solo sería decorativo) el café vendría de la cocina recién hecho, presentaríamos desayunos, algunos dulces. Y en la noche un espacio libre para pasarla bien, algo romántico allí es donde entra el tocadiscos.

El lugar estaba justo como lo quería ver, yo en cambio estaba justo como nadie querría verme, sudado, repleto de polvo, pero con una sonrisa imborrable.

Del lado de los libros allí traería algunos de los que Leslie, solía leer, era perfecto el lugar, para algún escritor novato que desee relajarse y venir a desahogar su vida en páginas, o algún lector que, desee sumergirse en el mundo de la lectura, ese lugar es exclusivo para ello, todo estaba en su punto.

Me encanta lo retro y se que a todos les va a gustar, a todos siempre nos ha gustado, siempre que preguntas a alguien ¿Qué época quisiera viajar? siempre dirán alguna de estas épocas, por ello lo retro siempre vende, todos quieren ir al pasado.

Nadie sueña con ir al futuro, eso del futuro da un poco de miedo te acerca a lo que sabe que pasara, pero no quieres que pase aun, (la muerte) así que muchos prefieren dejar el futuro allí tranquilo en simple expectativa.

Emocionado de ver todo tan perfecto, doy los últimos toques, unas cuatro computadoras libres, para el que desees venir he investigar algo, me dejo caer al suelo y voy dejándome ir de inmediato.

Caí en un profundo sueño, logre ver a Leslie estaba en una pradera contemplando el horizonte, un rayo de sol adornaba el lugar hacia que sus ojos se vieran relucientes, me regalo una hermosa sonrisa, aún lado estaba Fabiola, esta no pintaba un rostro amigable, una lagrima corría por su mejilla, mire una vez más a Leslie y ella seguí con su sonrisa reluciente, Fabiola era todo lo contrario, intente ir hacia ella pero un vidrio transparente no me dejaba pasar a ellas, la llame, pero ella solo se acurruco en los brazos de un chico, que en mi vida había visto.

De pronto sentí que la luz del sol apuntaba justo a mi rostro, perdí visón con las dos.

-Hombre, que tenemos rato buscándote. -indico, juan.

Intenté volver en sí, tenía la luz del sol junto en mi rostro, abrí y cerré los ojos para conseguir así un mejor enfoque. Me levante, estaba juan a mi lado, lucia tenia en el coche al pequeño Sebastián jr. y Janeth miraba con asombro el lugar, tapando su boca con las palmas de su mano.

-Lo siento, no avise, solo que ...

-Te ha quedado de puta madre -enfatiza, Janeth corriendo a mi regalándome un abrazo.

-Joder, también hueles de puta madre. -suelta enseguida alejándose.

-Bueno es que he pasado toda la noche aquí.

Todos se encontraban pasmados lucia fascinada.

-Te la has comido, eres un cobrón hermano.

Mire a mi pequeño campeón que no dejaba de mover su piernas y esbozo una pequeña sonrisa dejando un sonido al aire, que todos al final reímos aceptando que al pequeño le ha gustado.

-Lo vamos a inaugurar, el lunes, o sea mañana -exprese.

-Mañana es la audiencia¸-me informa juan.

-Lo se y estoy seguro que todo saldrá bien, y estaremos aquí celebrando. -indique acercándome a ellos y dándonos un abrazo grupal.

Al instantese alejaron de mi

- Si que necesitas un baño. - expresaron ambos.

Di una última mirada cerrando el lugar con satisfacción.

De camino a casa, recordé una vez más ese sueño, decidí no pensar en ello solo quería llegar a casa y leer una de las notas de Leslie.

Subí corriendo asearme.

Al bajar ñ todos estaban comiendo me uní a ellos moría de hambre, un rico pollo de kfc de vez en cuando no podía faltar.

Tomé en mis brazos a mi bebé, le di el biberón, lo veía mas grande ya casi sus cuatro meses, creo que no podría pedir ir al pasado y no haberlo tenido, ya que lo tengo no vería mi vida sin él. No vino de la mejor manera, pero si ha venido a darme un mejor sentido a mi vida.

Lo ha llevado a dormir, al dejarlo sentí nostalgia.

Me acerque a los muchachos Juan y Janeth se besaban.

-Sin trasnocharse haciendo cochinadas.

Me pare frente a la mesa, nota correspondiente, Domingo.

A mi lado mis inseparables amigos suspire, siempre me da un poco de nervios estas notas y procedí a leer.

Domingo:

Dale un giro a tu vida y eso indica que le des amor al ciber café, ese será tu legado, tu podrás lograrlo mi seba...

Quiero que seas fuerte, no te niegues a la idea de vivir, pero nada es color de rosa, hay momentos duros y pasaras por ello, promete que no te dejaras vencer.

Promételo, joder que ¡LO PROMETAS!

Hice una pausa mirando a todos.

-Que, si lo prometo, mujer. -sin dejar de mirar la nota.

Lo que te espera no será nada fácil, pero tu eres un duro, sé que podrás con todo ya lo has prometido.

Nunca dejes de luchar, aunque sientas que el mundo te esta tomando por el culo, recuerda que tú también puedes hacer lo mismo y tomar por el culo al mundo.

Eres fuerte, y debes ser fuerte por Sebastián Jr. esto va por ti, si vos estáis bien él lo estará.

Pd: una carta de amor (un nuevo comienzo)

Todos nos quedamos un poco pensativos.

Nadie dijo nada, ambos estamos seguros que algo vendría y que esa nota estuvo un poco intensa es como si ella la fuese escrito hoy en vez de unos meses atrás.

Cada quien subió a dormir, antes de entrar en mi habitación, entre como de costumbre a mirar al pequeño, este estaba despierto, mirando a la nada jugando con sus manitas, lucia se iba a levantar, le he dado una señal con mi mano que ya me ocupaba yo, ella se ha dado la vuelta y se ha vuelto a dormir.

Lo lleve a mi habitación lo deje aun lado de mi y como arte de magia a cerrado los ojitos, es como si necesitara de mi calor, de su verdadera cama le di un beso en la frente.

-Vale, duerme campeón, mañana será un gran día. -susurre

Dejé caer mi cabeza a la almohada y dormí, pero no con la tranquilidad que pretendía hacerlo.

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