Han pasado dos días del acontecimiento con Ruki-san, quién últimamente pasa más tiempo a mi lado,  disfruto mucho de su compañía a pesar que sé que no debería estar haciendo lazos tan fuertes con ellos.

—Kurai.. ¿Me estás escuchando?–pregunta Ruki.

Salgo de mis pensamientos, y lo miro.

|Perdón, Ruki-san, ¿que decías?–pregunto.

Lo veo suspirar, bastante paciencia ha tenido en estos días conmigo.
Claro que al principio cuando supo que soy una humana "magica" enjaulada en un cuerpo animal quedó con más lagunas mentales y queriendo mas información, pero no le podía decir todo,  sino cuando me fuera, todo el equilibrio espacial quedaría roto.

—Bien,  Reitero, Azusa se quedará contigo, o bien te lleva con nosotros pero es turno de él cuidarte. ¿Estás lista para salir o aun temes que los Sakamaki te digan algo? –pregunta con cierto desprecio al hablar de ellos.

Suspiro, me levanto de la cama y me acerco a él,  quien se encuentra parado cerca de la cama, observándome firme y elegante.

|No es que los tema, es mas bien crear conflicto, en que los he traicionado, lo cual no es el caso, onii-san. –alego.

Veo como se acuclilla a mi estatura y me besa la cabeza, con gesto suave y de confianza.

—Tranquila, si realmente saben como eres, y no será inmaduros, creo que comprenderan si se los explicas –dice Ruki.

Asiento. Y justo después la puerta se abre.

—Buenas...noches –saluda Azusa.

—¿Irán con nosotros y se quedarán? –pregunta Ruki.

—Nos quedaremos... Aun no creo... Que ella esté...bien... –dice Azusa.

Justo antes que diga algo al respecto. Ruki asiente y se marcha.

—Hasta mas tarde M~Pet-chan –se despide Kou.
—Adiós, pulga –se despide Yuma.

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Minutos después.

Azusa: ¿Quieres.. Conocer a... Justin? –pregunta.

|¿Uh? –inclino mi cabeza a un lado extrañada.

Para luego ver que se destapa sus vendas, mostrando sus heridas.

Azusa: El es...Justin, me... ayuda a sentirme....vivo –me lo presenta.

Me acerco, y suspiro.

|¿Porque quieres sentirte vivo, de esa manera? Sabes que hay otras formas ¿no?

Azusa: ¿Que...otras... formas?–pregunta.

Sin mucho pensar, me acerco y le lamo suavemente la herida cerrándola, con mis dones curativos. El jadea estremeciendose por esa sensación.

Azusa: ¿Que... Fue eso... ?¿Porque... Lo hiciste?–pregunta lentamente.

|Por que una herida nunca te hará sentir mejor, pero es un efecto que pasa instantáneamente y te hace adicto. Esa es la muestra más directa que puedo de enseñarte una manera de sentirte vivo. Esta el amor, las acciones cariñosas, el compartir tiempo de amistad con seres que quieres...–explico.

El se me queda mirando.

Azusa: Con...eva... Siento... ese ¿deseo? –dice pensativo.

Lo miro, con la humana, entonces le tiene cierto cariño. Debo ser cuidadosa cuando termine con Cordelia.

|¿Quieres sentir mas como eso? –pienso preguntando.

Azusa asiente, y sin dudar,  nos teletrasportamos a la patio de Hortalizas de Yuma.

Azusa: ¿Que... Hacemos... Aquí? –pregunta extrañado.

|Te mostraré porque Yuma-san adora estar aquí, esta es su manera de sentirse vivo –explico.

Agarro con mi hocico, un sobre con semillas, se la llevo a Azusa y el lo abre. Escavo un pequeño hueco y lo miro. Con un poco de levitación le pasó una regadera.

Azusa: ¿Y... ahora que?–pregunta.

|Riega donde esta la la semilla, y espera un poco... Te haré ver el milagro de disfrutar la vida –explico.

Pongo la semilla y luego con delicadeza con mi pata la cubro. Él enseguida la riega, y el momento empieza a comenzar.

|Luz de mi querer, flor de mi amor,  otorga una vida nueva, a este pequeño ser... ~ –recito cantando una frase.

Y de repente la tierra es iluminada suavemente por un manto celeste, mas una pequeña raíz empieza a brotar, de esta lentamente va brotando otra, y así sucesivamente hasta empezar a salir hojas, que luego son inundadas de frutos amarillo y pequeños, mas luego se torna verdes. Observando un pequeño árbol de peras.

Los ojos de Azusa están perdidos aun en la planta que vio nacer, sin temer acaricia las hojas. Y sin más arranca una de esas frutas.

—¿Pue..do?–pregunta curioso.

Asiento con una mirada especial.
Sin más se lo lleva a la boca y lo prueba, ocasionando que se pueda escuchar aquel crujir fresco al morder una fruta sana y rica.

Veo un brillo de luz en sus ojos, y justo cuando voy a comentar algo...

—Pero que rayos has hecho, pulga endemoniada –comenta asombrado Yuma.

Kou esta sin poder creerse pero de sus ojos salía el mismo brillo de luz de vida que en los de Azusa.

—¿Se puede saber que es lo que estáis haciendo? –pregunta Ruki incrédulo.

|Uhm... Yo... Eh... Le di una muestra de estar viviendo a.. Azusa ¿he hecho mal? –pregunto confundida por su reacción.

Creía que los vampiros no podían sentirse así, pero de algo sirve tener en tus manos el milagro de hacerlos vivir de nuevo

O quizás... Fue mi error y nunca tuve que mostrarles este don.

—Esto es... –empieza a decir Kou.

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To be Continue...