Capítulo 32
Evie sintió un ligero roce en la mejilla y se removió un poco; entonces escuchó una risilla y abrió los ojos encontrándose con los ojos de Jacob.
- Buenos días, dormilona.
- Buenos días - dijo y rió al escuchar las tripas de Jacob rugir - Anda baja, yo aún tardaré.
Jacob salió de la cama y Evie fue a ducharse. Cuando salió, bajó al salón encontrándose a Jacob engullendo el desayuno y a su madre preparando uno para ella.
- Buenos días, mamá - le dio un beso en la mejilla.
- Buenos días, mi niña - sonrió Esme dejando el plato de tortitas frente a Evie.
Al terminar de desayunar, salió a la entrada y se sentó en el escalón viendo a su hermana Rosalie sentada, apoyada en un árbol mientras hacía carantoñas a la bebé. Sonrió, habría sido una excelente madre, un sueño incumplido para la rubia. Le causaba tanta ternura verla así...Le parecía divertido las constantes negativas de dejar que Seth cogiera a Renesmee y las caras de éste cuando Rose la apartaba de él. A penas la familia había cogido cinco minutos al bebé ya que esos dos la acaparaban todo el tiempo.
- Una situación muy interesante - dijo Carlisle sentándose al lado de su hija - y yo que pensaba que lo había visto todo.
Evie soltó una risilla.
- Me pregunto que pensará Bella, después de todo es su bebé y ya tiene una pareja destinada.
- Estoy seguro de que entre todos podemos evitar que esto desemboque en un derramamiento de sangre - dijo pasando un brazo por los hombros de su hija atrayéndola en un cariñoso abrazo - ¿y tú como estás?
- Bien, sin hacer magia, como te prometí. ¿Cuanto tiempo queda?
- No debe ser mucho ya - contestó Alice apareciendo - su piel se está aclarando. Parece que va a recuperarse.
- No eras tan optimista hace dos días - contestó Jacob sentándose al otro lado de Evie.
- No podía ver bien hace dos días - se defendió Alice - pero ahora que ella está libre de todos los puntos ciegos, se distingue muy bien.
- Es mi turno - oyeron a Seth.
Rosalie siseó.
- Oye, tú - advirtió Jacob.
- Carlisle - se escuchó a Edward desde la parte de arriba.
Carlisle, Alice, Evie y Jacob subieron y entraron a la habitación.
- Escuchad - les indicó Edward.
Escucharon el latido desenfrenado de Bella.
- Ah, ya casi ha terminado - dijo Carlisle.
- Muy pronto - siguió Alice - traeré a los otros. ¿Debo hacer que Rosalie...?
- Sí - contestó ahora Evie - es preferible que mantenga al bebé alejado.
Todos menos Rosalie y Seth estaban en la habitación oyendo como el corazón de Bella galopaba hasta dar su último latido.
Entonces vieron como abría los ojos.
Bella escuchó latidos y dirigió la mirada hacia Jacob y Evie. Los demás se tensaron y el primero se puso delante de ella como signo de protección mientras los demás no dejaban de observar minuciosamente a la neófita.
Alice miró por detrás del codo de Jasper con una gran sonrisa en el rostro hacia Bella y ésta miró a Edward irguiendose.
Edward dio la vuelta a la mesa lentamente y extendió la mano.
- ¿Bella? ¿Bella, amor? Lo siento, sé que se siente uno desorientado, pero vas a estar bien.
Bella se arrojó a los brazos en torno a su cuerpo.
- Con cuidado, Bella. Es tu turno de no hacerme pedazos.
- Ahora eres más fuerte que él - se burló Emmett.
La neófita se apartó.
Jasper frunció el ceño.
- No lo sé - murmuró Edward.
- ¿Qué pregunta es la que me e perdido?
- Jasper se pregunta como lo haces - dijo Evie.
- ¿Como hago qué?
- Controlar tus emociones, Bella - respondió Jasper - Nunca había visto a un neonato hacer esto, frenar una emoción en seco.
- ¿Y eso está mal?
- No.
Edward pasó su mano a lo largo del brazo de Bella y suspiró.
- ¿Qué pasa?
- Esperaba ser capaz de leerte la mente, ahora que se parece más a la mía - murmuró Edward - y aquí estoy, frustrado como siempre, preguntándome qué será lo que anda fraguándose dentro de tu cabeza.
- Ah, bueno - respondió Bella - supongo que mi cerebro nunca funcionará bien, pero al menos soy bonita.
- Tú nunca has sido solo bonita - le gruñó Edward en el oído.
- Edward, ¿porqué no llevas a Bella a cazar? - interrumpió Carlisle viendo como Jasper se ponía cada vez más nervioso al ver la actitud relajada de la neófita.
Edward asintió y los dos salieron.
//////
Evie estaba junto a Rosalie y Renesmee cuando vieron aparecer a Edward y Bella.
- Pero, ¿no tiene solo dos días? - preguntó Bella incrédula al verla más grande de lo que creía.
El bebé tocó la garganta de Rosalie; ésta palmeó la manita que tenía contra su cuello.
- Sí, es ella - murmuró.
Renesmee extendió los brazos en dirección a Bella mientras todos se tensaban al verla acercarse.
- Vamos, dadle una oportunidad.
- Edward, el riesgo...
- Es mínimo. Escuchad, cuando estábamos de caza, captó el olor de unos excursionistas que se encontraban en el lugar equivocado y la hora inoportuna...
Evie se llevó la mano a la frente mientras Jacob hizo una mueca de disgusto.
- ¡Edward! - le recriminó Carlisle - ¿como has podido ser tan irresponsable?
- Lo sé, Carlisle, lo sé. Me comporté como un estúpido.
Rosalie y Evie se miraron como diciendo : Siempre lo fuiste.
- Debería haberme tomado mi tiempo para comprobar que estábamos en una zona segura. Como decía, le estaba explicando a Jasper por qué sé que Bella puede apañárselas bien con eso. No es culpa mía que todos os hayáis precipitado en vuestras conclusiones.
- Espera - jadeó Jasper - ¿Es que ella no cazó a los humanos?
- Empezó a seguirlos - siguió Edward - estaba por completo concentrada en la caza.
- ¿Y qué ocurrió? - intervino Carlisle.
Todos estaban muy atentos a lo que decía Edward.
- Me escuchó ir detrás de ella y reaccionó a la defensiva. Tan pronto como mi persecución interrumpió su concentración, la abandonó bruscamente; nunca había visto nada igual. Se dio cuenta de lo que estaba pasando...y entonces, contuvo el aliento y huyó.
- Estoy impresionada - dijo Evie asintiendo.
- No lo está contando bien - refunfuñó Bella - se ha dejado la parte en la que le gruñí.
- ¿Y no le golpeaste? - preguntó Emmett alegre.
- ¡No! Claro que no.
- ¿No? ¿Nada? Tenías una excusa perfecta.
- Ni se me ocurriría.
- ¿Te das cuenta de lo que quiero decir? - Edward miró a Jasper que estaba frunciendo el ceño.
- Esto no es natural.
- Podría haberse vuelto contra tí, solo tiene horas - le regañó Esme.
Al final dejaron que cogiera a Renesmee a pesar de que Seth se mostraba demasiado inquieto. La bebé tocó la cara de Bella.
- ¿Qué...ha sido...eso?
- ¿Qué es lo que has visto? - preguntó Seth - ¿Qué es lo que te ha mostrado?
- Mmm. A mí, creo. Pero tenía un aspecto horrible.
- Es el único recuerdo que tiene de tí - explicó Edward - quiere que sepas que ya ha hecho la conexión y sabe quién eres.
- ¿Pero como hace eso?
- ¿Como puedo escuchar los pensamientos de otros? ¿Como ve Alice el futuro? - Edward se encogió de hombros - ella tiene un don.
Evie salió afuera ya que había notado a Leah acercarse.
- ¿Todo bien, Leah?
- De momento, Sam sigue en la Push.
Estuvieron un rato más hablando hasta que oyeron a Bella gritar y a Seth saliendo de la casa junto a Jacob delante de él para protegerle.
- Yo la he tenido en mis brazos una sola vez y, ¿ya te crees con derecho a no sé que estúpida reclamación lobuna? ¡Es mía!
Leah gruñó y se puso delante de Bella.
- No te acerques a mi hermano.
- Calmate, Bella - siguió Jacob - Ha sido involuntario. Escuchame.
- Bella, no lo he hecho aposta - quiso tranquilizarla Seth - Todo lo que quiero es que ella esté a salvo y sea feliz.
- Te vas a mantener apartado de ella - siseó Bella.
- ¡No puedo hacer eso! Yo también le gusto a Nessie.
- ¿Como...la has llamado? ¿Le has puesto a mi hija el nombre del monstruo del Lago Ness?
Evie al ver que Bella iba a hacer daño a Seth, se adelantó y rompiendo la promesa de no usar los poderes, la lanzó hacia los árboles rompiéndolos a su paso.
- ¡IDIOTA, CONTROLA A TU MUJER! - gritó furiosa - ¡NO VES QUE TU HIJA SUFRE SI LE HACE DAÑO A SETH!
Edward sabiendo que tenía razón, la agarró mientras Jacob agarraba a Leah para que no matara a Bella.
- ¡No vuelvas hacer eso!
- ¡Pues te calmas! - gruñó Evie - o lo haré yo y no será bonito.
- Calma chicos - intervino Carlisle - Edward, llevate a Bella adentro.
Edward entró con Bella seguidos por Emmett, Jasper y Esme.
- ¡COMO INTENTES HACERLE DAÑO A MI HERMANO, ACABARÉ CONTIGO! - gritó Leah.
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