El día de volver a Hogwarts llegó, 1 de septiembre, muy cerca de las once varios padres se despedían de sus hijos. Algunos niños subían por primera vez al expreso y otros regresaban.

Entre toda esa gente se podía ver a una familia de pelirrojos caminando muy rápido junto a ellos iban otros dos niños, una azabache y un castaño.

Peter: ¿Se dieron cuenta que siempre llegamos tarde al expreso? –preguntó entre la multitud.

Ron: Es una especie de tradición familiar también ocurría antes de que vaya a Hogwarts.

El expreso partió de la estación, los chicos se habían encontrado con Hermione.

Ron: Sigo creyendo que fue genial inflar a tu tía.

Hermione: Pudieron expulsarla.

Hadley: O arrestarme.

Peter: Eso ya pasó, no tiene importancia recordar ese evento.

Hadley: Parece que todo está ocupado.

Gwen: No todo –dijo para llamar la atención de los chicos.

Peter: ¡Gwen! ¿Cuándo llegaste? –dijo saludándola con un beso en la mejilla.

Gwen: Más temprano que ustedes por lo visto. ¿Quién es la ternurita? –dijo acariciando al gato de Hermione.

Hermione: Su nombre es Crookshanks, está ansioso de ir a Hogwarts –dijo abrazando al gato, pero el último no hacia ningún gesto.

Gwen: Vengan separé un compartimiento, pero ya estaba ocupado por una persona –dijo dándole paso a tres de ellos.

Peter: Me alegro de verte.

Gwen: Peter... -dijo para darle un abrazo muy fuerte-. Mi padre me dijo sobre tu tío. Quería estar contigo, pero May me dijo que viniste antes de lo pensado.

Peter: Gracias Gwen.

Gwen: Los demás también están apoyando a May.

Peter: ¿Los demás?

Gwen: Flash, Harry y los demás chicos van a ver a May todos los días para que no se sienta sola.

Peter: Flash tal vez no sea un mal tipo después de todo.

Gwen: Todos pueden cambiar para mejor.

Peter: Gwen hay algo que debería decirte.

Gwen: ¿Qué cosa?

Peter: Sobre mis pode...

Hermione: ¿Vienen o no? Hadley nos quiere decir algo –dijo la castaña desde la puerta del compartimiento.

Peter: Ya vamos Herms, luego te cuento –dijo lo último en un susurro.

...

Minutos después.

Hadley les contó lo que el sr. Weasley le dijo sobre Sirius Black. Esa fue la conversación menos divertida que tuvieron incluido cuando fueron por el basilisco.

Hermione: Van a atraparlo, incluso los muggles están tras él.

Ron: Es cierto, pero ya engañó a los dementores una vez y nadie sabe cómo lo hizo.

Hadley: Gracias Ron –dijo de manera sarcástica.

Gwen: No asustes a Hadley más.

Peter: Tómalo con calma, sabes que si ocurre algo yo mismo te protegeré igual que los años anteriores –dijo tomándola de la mano.

Hadley: Gracias Pete –dijo muy sonrojada.

Y las luces se apagaron y con ello el tren se detuvo. Varios estudiantes salieron de sus compartimientos para ver si alguien sabía algo.

El tren se sacudió con violencia, todos regresaron a las cabinas.

Hadley: Tal vez se descompuso.

Ron: Hay algo afuera no veo que es.

Peter: Se acerca algo peligroso, Hadley atrás mío –dijo para romper su varita y ponerla en sus muñecas, luego de que su sentido arácnido reconociera la firma de magia de cualquier cosa que haya subido.

Las ventanas se empezaron a congelar, el ambiente se puso pesado.

Una criatura, alta de color negro con una capa que tapaba su rostro, se asomó en la cabina de Peter.

Peter no alcanzó a reaccionar a tiempo y luego pudo ver a esa cosa acercarse para después sentir como si le quitaran algo. Hadley también estaba siendo víctima de ese monstruo y al girar un poco la cabeza vio a Hadley caer desmayada.

Al siguiente instante vio al profesor Lupin moverse para levantar su varita y de ella saliera una luz.

Pasaron varios minutos, minutos en los que Hadley estuvo desmayada y Peter todavía estaba aturdido abriendo y cerrando los ojos a cada rato.

La joven azabache estaba despertando muy débil y desorientada.

Lupin: Tengan... es chocolate, les ayudará –dijo al ver el rostro de no saber nada de los chicos.

Hadley: ¿Qué era esa cosa?

Lupin: Era un dementor, un guardia de Azkaban, buscaba en el tren a Sirius Black. Debo hablar con el conductor –dijo para levantarse ir a abrir la puerta.

Peter: Come el chocolate Hadley, si te ayuda –dijo probando el chocolate que le dio el profesor.

Como dijo Peter el chocolate calmó a la azabache, pero todavía se veía un poco afectada igual que Peter.

Hadley: ¿Qué me pasó?

Ron: Te desmayaste... era como si toda la felicidad se fuera de este mundo.

Hadley: Y... ¿nadie se desmayó?

Gwen: Peter también estuvo cerca de hacerlo, pero el profesor Lupin dijo un hechizo y el dementor se fue.

Hadley: Pero alguien gritaba, una mujer.

Hermione: Nadie gritaba Hadley.

Hadley: Peter ¿Tú la escuchaste?

Peter: No. Yo recordé una escena, la escena de mi tío Ben junto al disparo del arma.

Dos chicas sabían perfectamente a que se refería el castaño, pero los otros dos del grupo quedaron confundidos.

Hermione: ¿A qué te refieres Pete?

Peter: Mi tío... -su oración fue cortada al sentir detenerse el tren-. Será después debemos ir al castillo.

...

El grupo decidió salir del tren y subir a las carrozas con dirección a Hogwarts. Ya estando en las puertas del castillo.

McGonagall: Srta. Potter, sr. Parker vayan con Madame Pomfrey para ver si no les afecto mucho el dementor. Srta. Granger venga conmigo le hablaré sobre su horario.

Los tres jóvenes se dirigían al gran comedor. Al llegar al gran comedor empezó la bienvenida a Hogwarts, los estudiantes de primer año eran seleccionados y las casas celebraban sus nuevos compañeros.

La selección acabó y el discurso de Dumbledore empezó.

Dumbledore: Bienvenidos a otro año en Hogwarts. Quiero presentarles al profesor R. J. Lupin que acepto a ser el profesor de DCAO.

Mientras las mesas aplaudían por la noticia había una persona que miraba al Prof. Lupin con unos ojos no muy amables.

Hadley: Snape quería ese puesto, pero esa forma de ver al nuevo profesor es casi como si lo odiara.

Ron: ¿Conoces a alguien que le agrade a Snape?

Desde la mesa de las serpientes una rubia llamaba la atención de la azabache.

Darcey: Potter, Potter... ¿Enserio te desmayaste?

Ron: Cállate Malfoy.

Hadley: ¿Cómo lo supo?

Gwen: Déjalo.

Dumbledore: La otra noticia es que el nuevo profesor de cuidado de criaturas mágicas será nuestro guardabosque, Rubeus Hagrid.

Más aplausos se escucharon en el gran comedor, especialmente desde la mesa de los leones.

Peter: Esa sí es una sorpresa.

Hermione: Tiene sentido, el libro es sin duda uno que elegiría Hagrid.

Dumbledore: Por último, por orden del ministerio los dementores se ubicarán a las afueras del colegio. Se les pide que ninguno busqué a alguno de ellos, no está en su naturaleza la compasión.

El banquete continuo luego de todos los anuncios, alguno peor que otro, antes de retirarse a los dormitorios el grupo de leones fueron a felicitar a Hagrid personalmente.

Los alumnos salieron del comedor muy animados, pero había una escena que llamó la atención de una joven leona rubia.

Peter Parker estaba hablando de manera amena a un grupo de Slytherin y no cualquier grupo, era el grupo de Darcey Malfoy.

Camino a los dormitorios, se veía a una rubia y un castaño caminando juntos.

Gwen: Sabes muy bien que al grupo de Darcey les caemos muy mal.

Peter: Si sé, tienen varias diferencias.

Gwen: Entonces, ¿Por qué parece que te diviertes con ellas?

Peter: La actitud se Darcey a primera impresión es la de una chica un poco arrogante por su ideología purista, pero yo veo en ella una chica que no conoce la felicidad.

Gwen: ¿Qué hay de las demás?

Peter: Tengo la sensación que en el fondo son buenas personas, es la educación purista de sus padres la razón por la que son así.

Gwen: Pero los Weasley dicen que todos los magos oscuros estuvieron en Slytherin.

Peter: Prejuicios, si te dijera que el sombrero vio en mí cualidades de Slytherin ¿seguirías siendo mi amiga?

Gwen: Tú eres distinto no eres igual a algún Slytherin.

Peter: Entonces confía en mí.

Gwen: ¿Cómo sabes todo eso?

Peter sabía que esta conversación tomaba un rumbo un poco peligroso juntando todo su valor empezó a hablar.

Peter: ¿Ranas de chocolate? Son tus favoritas.

Gwen: Claro –dijo para con una gran sonrisa subir por las escaleras.

Peter: Muy cerca.

...

En la sala común varios alumnos se juntaban a hablar con sus amigos. Había dos leones en un rincón alejado de la muchedumbre.

Ginny: Eres Peter Parker ¿verdad?

Peter: ¿Eh? S... sí.

Ginny: Soy la hermana de Ron, no sé si te habló de mí.

Peter: Escuché un poco de ti.

Ginny: Soy tu fan ¿es verdad que mataste a un basilisco? –dijo acercándose a Peter.

Peter: En realidad fue Hadley, yo solo lo distraje –dijo apartándose un poco.

Ginny: Pero es igual de increíble.

Peter: Otras personas son mejores magos.

Ginny: Pero tú además de valiente eres muy guapo –dijo volviendo a acercarse.

Peter: Creo que exageras –dijo alejándose un poco, pero chocando con la pared.

Ginny: Peter...

Antes de seguir con la conversación la voz de una azabache se escuchó.

Hadley: ¿Pete estás por aquí?

La pelirroja se alejó inmediatamente al escuchar la voz de la leona mayor.

Hadley: ¡Peter estás aquí! McGonagall dice que vayamos a las habitaciones. Hola Ginny.

Ginny: Hola Hadley. Bueno, nos vemos Peter.

Peter: Claro...

Hadley: No te basta con Gwen y Hermione incluso vas por la hermana de Ron –dijo entrecerrando los ojos.

Peter: No es eso. Te lo aseguro, es solo... -dijo sin saber explicar la razón- nada. Vamos a dormir.

Hadley: Sabes que lo averiguaré lo que ocultas.

Peter: Te conozco dos años, no creo que exista mejor detective que tú.

Hadley: Es bueno que lo sepas –dijo mientras inflaba su pecho con orgullo.

Peter: Que no se te suba a la cabeza.

Hadley: Nunca.

.....

Gracias por leer.

Jouner927.